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Capítulo 25. Asia Oriental


Figura 25-1. Asia Oriental: mapa de la cubierta forestal

1. China

2. República Popular Democrática de Corea

3. Japón

4. República de Corea

La subregión de Asia oriental incluye China, la República Popular Democrática de Corea, el Japón y la República de Corea[41] (Figura 25-1). China es el país de mayor extensión, con 932 millones de hectáreas, y representa casi el 94 por ciento de la entera subregión.

Asia oriental se caracteriza por una gran variedad de ecosistemas terrestres, que están ubicados en su mayor parte exclusivamente en China. Según el Departamento de Conservación de la Naturaleza, China posee 599 tipos de ecosistemas terrestres, incluidos una amplia gama de bosques, tierras arbustivas, estepas, praderas, sabanas, desiertos y tundras alpinas. Según las estadísticas preliminares, existen 212 tipos de bosques, 36 tipos de bosques de bambú, 113 tipos de tierras arbustivas, 77 tipos de praderas (27 clásicas, 20 salinizadas, nueve pantanosas y 21 frías), 19 tipos de pantanales (14 herbáceos, cuatro leñosos y uno turboso), 18 tipos de manglares, 55 tipos de estepas, 52 tipos de desiertos, 17 tundras alpinas, vegetación alpina que funge como zona de amortiguación y vegetación alpina de pendiente. Asimismo, el país posee más de 30 000 especies de plantas mayores y 6 347 especies de vertebrados, que constituyen, respectivamente, el 10 por ciento y el 14 por ciento del número total de especies del mundo. Aún no se ha evaluado el número de ecosistemas marinos y de agua dulce (China Department of Nature Conservation, 1999).

A pesar de sus dimensiones relativamente pequeñas, el Japón se caracteriza por regiones climáticas y topográficas muy diversas, que propician una vegetación forestal variada. En las zonas boreal o alpina se encuentran bosques de coníferas y mixtos de coníferas y latifoliadas; en la zona templada se hallan bosques caducifolios; y en las zonas templada-caliente o subtropical crecen bosques de latifoliadas de hojas perennes. Los grandes bosques naturales se encuentran únicamente en la región de Hokkaido, que posee el 59.5 por ciento de todos los bosques naturales del Japón. Éstos, además, se extienden en los flancos de las montañas de la región central y nororiental de Honshu y en las Islas del Sureste y, en otros lugares, como en las zonas alpinas o las islas desoladas, están con frecuencia fragmentados. Los humedales representan un porcentaje muy reducido de la vegetación japonesa, pero brindan importantes hábitat para la vida silvestre. Existen dos tipos de humedales: el primero es un páramo que se mantiene gracias a las lluvias y se compone principalmente de musgos acuáticos; el otro es igualmente un páramo, pero se mantiene por los ríos y se compone de cañetes (Biodiverity Center of Japan 1999).

La Península de Corea, que se extiende a través del archipiélago japonés, posee una vegetación asociada con los climas caliente-templado, templado y frío-templado. En el norte, la vegetación forestal está constituida principalmente por coníferas, que se convierten en bosques mixtos de coníferas y latifoliadas en el centro de la península. Éstos últimos, a su vez, están presentes también en las costas meridionales, orientales y occidentales. La vegetación de la zona templada-caliente se encuentra asimismo en la costa meridional y en las islas. Bosques de Carpinus laxiflora se extienden en los valles situados en suelos minerales expuestos que se componen de granito y granito-gneis (República de Corea Ministry of the Environment, 2001).

RECURSOS FORESTALES

El período de referencia, la exactitud y el alcance de los datos acerca de los recursos forestales varían considerablemente de un país a otro. El Estudio Forestal Nacional de China es muy ambicioso pues sus encuestas abarcan todo el país en ciclos quinquenales mediante reconocimientos sobre el terreno y teledetección. Los datos relativos a la República Popular Democrática de Corea no estaban disponibles directamente y se han obtenido de estudios basados en la teledetección de satélites publicados en la República de Corea. En esta última, las cifras se basan en una serie continua de informes realizados por las unidades subnacionales y revisados anualmente. Los datos acerca de la evaluación de los bosques y otras tierras boscosas del Japón se derivan de un conjunto de estadísticas procedentes de diversos inventarios, que se remontan a distintos períodos y usan definiciones diferentes (CEPE/FAO 2000).

En los años noventa, la subregión experimentó un incremento anual de 1.8 millones de hectáreas de bosques, que obedeció en gran medida a la ejecución de programas de plantación en China. Además, se registraron pequeños aumentos anuales de la cubierta forestal en el Japón, y disminuciones de leve entidad en la República de Corea. En cuanto a la República Popular Democrática de Corea no se realizaron estimaciones del cambio a causa de la falta de información, si bien se considera que la situación en ese país se halla relativamente estancada. La cubierta forestal abarca alrededor del 60 por ciento de la superficie de todos los países de la subregión, con excepción de China que posee una cubierta boscosa del 18 por ciento, aproximadamente. Las plantaciones representan una parte significativa del patrimonio forestal en China (27 por ciento), el Japón (44 por ciento) y la República de Corea (21 por ciento) (Tabla 25-1 y Figura 25-2). No se dispuso de suficiente información sobre la extensión de las plantaciones en la República Popular Democrática de Corea para poder calcular su porcentaje.

Figura 25-2. Asia Oriental: área de bosque natural y plantaciones forestales en 2000 y variaciones netas del área entre 1990 y 2000

El volumen y la biomasa forestales por hectárea es mucho mayor en el Japón que en otros países, lo cual se puede explicar por sus bajos niveles de cosecha y extracción. En cambio, el bajo promedio de volumen y biomasa forestales de China se debe al escaso nivel de existencias de madera en pie que caracteriza gran parte de sus bosques y a las grandes extensiones de plantaciones jóvenes.

MANEJO Y USOS DE LOS BOSQUES

En Asia oriental se adoptaron dos definiciones de superficie forestal bajo manejo. El Japón proporcionó información acerca de los bosques incluidos en un plan de manejo forestal oficial o no estructurado con la recomendación de contemplar también las zonas en relación con las cuales se había decidido expresamente no emprender ninguna actividad de manejo. A los países restantes de la subregión se les solicitó presentar informes sobre la zona de bosques ordenados de conformidad con un plan oficial de manejo, aprobado en el ámbito nacional. El Japón notificó que el 100 por ciento de sus bosques se manejaba conforme a la primera definición, mientras la República de Corea declaró que el 66 por ciento de toda su superficie forestal estaba incluida en un plan oficial de manejo (Tabla 25-1). China y la República Popular Democrática de Corea no presentaron información a nivel del país para el FRA 2000 acerca de las zonas incluidas en planes de manejo.

En China, el Japón y la República de Corea existen varias formas de propiedad. Así, en el Japón la mayoría de los bosques son de propiedad privada. En cambio, en China y la República de Corea los bosques pertenecen a cooperativas, si bien en la República de Corea éstas son más bien una organización de conveniencia para los propietarios forestales privados. En la República Popular Democrática de Corea todos los bosques pertenecen al Estado. En China, la Administración Forestal Estatal es responsable de la coordinación de las zonas protegidas, de la investigación y educación y del control de los recursos hídricos y la erosión del suelo.

Tabla 25-1. Asia Oriental: recursos forestales y manejo

País/área

Área de la tierra

Área de bosque en 2000

Cambio del área 1990-2000 (total de bosque)

Volumen y biomasa por encima del suelo (total de bosque)

Bosques bajo plan de manejo

Bosques naturales

Plantaciones forestales

Área total de bosques

000 ha

000 ha

000 ha

000 ha

%

ha/cápita

000 ha/año

%

m3/ha

t/ha

000 ha

%

China

932 743

118 397

45 083

163 480

17.5

0.1

1 806

1.2

52

61

-

-

Rep. Popular













Democrática de Corea

12 041

8 210

-

8 210

68.2

0.3

n.s.

n.s.

41

25

-

-

Japón

37 652

13 399

10 682

24 081

64.0

0.2

3

n.s.

145

88

24 081

100

República de Corea

9 873

6 248

-

6 248

63.3

0.1

-5

-0.1

58

36

4 096

66

Total de Asia Oriental

992309

146254

55765

202019

20.4

0.1

1 805

0.9

62

62

-

-

Total de Asia

3084746

431946

115847

547793

17.8

0.2

-364

-0.1

63

82

-

-

TOTAL MUNDIAL

13063900

3682722

186733

3869455

29.6

0.6

-9 391

-0.2

100

109

-

-

Fuente: Apéndice 3, Tablas 3, 4, 6, 7 y 9.

Actualmente, en China se está configurando un sistema para proteger la vida silvestre del país. Según estadísticas oficiales, a finales de 1997 en China existían 630 reservas naturales, que abarcaban una superficie de 61.5 millones de hectáreas, es decir, el 6.4 por ciento del país. Este sistema protege aproximadamente 14 zonas ecológicas incluidas en la red de las Naciones Unidas "El Hombre y la Biosfera" y siete zonas presentes en la lista de humedales de importancia internacional. China, además, ha establecido 873 parques forestales que cubren 7.5 millones hectáreas (Department of Nature Conservation, 1999).

Las actividades silvícolas en China se concentran en el establecimiento y el manejo de plantaciones. Se han realizado investigaciones y progresos importantes en el manejo de especies arbóreas de plantaciones de alto rendimiento. Los géneros más frecuentes en las plantaciones son Pinus, Larix, Eucalyptus y Populus. En cambio, la especie más común es Cunninghamia lanceolata, que generalmente se cultiva en rotaciones de 25 a 30 años y cuyo cultivo puede intercalarse con, por ejemplo, el de maíz u hortalizas. Actualmente están adquiriendo importancia las especies de propósitos múltiples, como Paulownia spp. También se usan normalmente las plantaciones abrigo. En cuanto a los bosques naturales, la orientación prioritaria se centra en la rehabilitación e incluye prácticas silviculturales que intensifican el crecimiento forestal secundario, si bien queda mucho por hacer para rehabilitar los zonas degradadas. Es un hecho usual la corta a mata rasa de pequeñas zonas, aunque se observa un cambio hacia la aplicación de sistemas selectivos. En la subregión los incendios destruyen anualmente casi 1 millón de hectáreas, y en algunos países se han realizado esfuerzos a fin de prevenirlos y controlarlos, como es el caso del establecimiento de cortafuegos en los bosques de China (Su Lifu, 2001).

En la República Popular Democrática de Corea toda la tierra forestal es de propiedad del Estado y, frecuentemente, se promueve a través de cooperativas. En los años sesenta y setenta se llevaron a cabo grandes campañas de forestación, que hoy se han suspendido. Muchas de las plantaciones del país tienen como objetivo la producción de leña, y casi 1.2 millones de hectáreas de las actuales plantaciones se han establecido utilizando especies exóticas. Todos los bosques necesitan planes de manejo y, con ese fin, el Gobierno ha desarrollado un conjunto exhaustivo de reglamentos operacionales. A fin de regenerar los bosques naturales se recurre a menudo al rebrote de las cepas. Generalmente, la corta a tala rasa se utiliza cuando se cosechan las plantaciones, mientras que los sistemas selectivos se emplean más frecuentemente en los bosques naturales. No se sabe con seguridad cuál es la extensión de las áreas protegidas en el país, pero se cree que ascienden a 50 000 ha.

Aproximadamente el 40 por ciento de los bosques del Japón es de propiedad pública, y el 60 por ciento restante pertenece a privados. Se considera que alrededor de 2.5 millones de hectáreas se hallan bajo protección oficial. Los productos forestales no madereros desempeñan un papel importante en el aprovechamiento forestal, e incluyen la recolección y uso de hongos, vástagos de bambú, castañas, cera y laca. El actual aprovechamiento maderero se sitúa muy por debajo de los niveles sostenibles, y esto se debe en parte a los altos costos de la extracción en los terrenos escarpados. Las plantaciones, en las que predominan las coníferas, cubren más de 10.5 millones de hectáreas y presentan más comúnmente especies de cedro, ciprés y pino. El cedro japonés (Cryptomeria japonica) y el ciprés de Hinoki (Chamaecyparis obtusa) son dos especies locales populares y valiosas. Muchas plantaciones del Japón son jóvenes.

La legislación forestal actual de la República de Corea, se aprobó en1961 y se enmendó en 1994. La Administración Forestal es responsable de el manejo de los bosques nacionales y de la prestación servicios de extensión a las cooperativas forestales. Estas están organizadas en cooperativas provinciales que pertenecen a una de las cuatro cooperativas federales y, en realidad, se trata de agrupamientos de conveniencia para los propietarios forestales privados. En 1999 el 72 por ciento del patrimonio forestal total era de propiedad privada, lo que corresponde a: 57 por ciento de dominio individual, 8 por ciento de propiedad familiar, 5 por ciento en régimen de cooperación, 1 por ciento en régimen de no cooperación y 1 por ciento de propiedad de templos. El 28 por ciento del patrimonio forestal total es de propiedad pública (Korea Forest Service 2000).

En la República de Corea hasta el decenio de 1970 la reforestación se efectuó principalmente en los bosques nacionales. Como resultado, la cantidad de bosques de propiedad del Gobierno era casi tres veces superior a la de los bosques privados. La mayor parte de los propietarios forestales eran minifundistas y no disponían de recursos financieros suficientes para adquirir y mantener plantas de semillero. Sin embargo, durante el Movimiento de Saemaul, gracias a un ambicioso programa de desarrollo rural emprendido en 1971 por el ex Presidente Park Chung-Hee, el desempeño de las asociaciones forestales de las aldeas mejoró considerablemente. En el período comprendido entre 1972 y 1979, los agentes forestales y las asociaciones de aldeas plantaron 1.4 millones de hectáreas con 3.4 millones plántulas (Korea Forest Service 2000).

Las prácticas silvícolas están en gran parte limitadas a las plantaciones, donde el sistema de corta a tala rasa es común. Actualmente existen grandes extensiones de plantaciones jóvenes. Sin embargo, la actividades forestales comercial resulta problemática debido a los altos costos de la mano de obra y a los grandes volúmenes de madera dañada, aunque hoy se están concediendo subsidios públicos a fin de ayudar las empresas forestales. Existen muchas zonas protegidas que proporcionan un cierto tipo de salvaguarda contra la erosión del suelo y los derrumbes. Éstas incluyen 20 parques nacionales. Los incendios representan un problema importante.

CONCLUSIONES Y TEMAS

A pesar del gran esfuerzo que significa realizar un inventario nacional en un país tan grande, China se comprometió a realizar estudios rutinarios en su territorio. Si bien los inventarios nacionales periódicos todavía no son completamente compatibles entre sí, evidencian un gran incremento anual en la cubierta forestal china debido al establecimiento de plantaciones. Por el contrario, la extensión y las variaciones de la cubierta forestal natural resultan poco claras, como también la degradación de los bosques.

La información disponible relativa a la República Popular Democrática de Corea es poco convincente. De hecho, el FRA 2000 recurrió a un estudio secundario de teledetección realizado por el Instituto de Investigación Forestal de Corea para obtener los resultados de la evaluación. Si bien se opina que la sequía y la carestía pueden haber inducido la degradación de los bosques en la República Popular Democrática de Corea, no se dispone de documentación sustantiva para sostener dicha suposición.

La información aportada por el Japón resultó de muy elevada calidad en relación con todos los parámetros evaluados.

Aunque la información de la República de Corea se consideró exacta, se observó cierta ambigüedad en lo concerniente a la extensión de los bosques naturales. Según los documentos examinados, los desafíos más apremiantes parecían estar relacionados con la mejora de la baja calidad de los productos procedentes de las plantaciones y las condiciones desfavorables, lo que era necesario para respaldar la silvicultura comercial.

Con excepción de China, todos los países de la subregión son muy boscosos. Aun así, la mayoría de las actividades forestales se centran en la satisfacción de las necesidades locales en lugar que en las exportaciones. La degradación de los bosques representaba un problema prioritario en todos los países, excepto el Japón. Sin embargo, es preciso perfeccionar las técnicas estándar para medir este parámetro a fin de evaluar el estado de la degradación.

BIBLIOGRAFÍA

Biodiverity Center of Japan. 1999. Convention on Biological Diversity. The first national report. Japón. www.biodic.go.jp/english/biolaw/kunie/kunie_hon.html

CEPE/FAO. 2000. Forest resources of Europe, CIS, North America, Australia, Japan and New Zealand: contribution to the global Forest Resources Assessment 2000. Geneva Timber and Forest Study Papers 17. Nueva York y Ginebra, Naciones Unidas.

China. Department of Nature Conservation. 1999. A country study: the richness and uniqueness of China’s biodiversity. China Environmental Sciences Press, State Environmental Protection Administration. www.zhb.gov.cn/english/biodiv/

Korea Forest Service. 2000. Statistical yearbook of forestry 2000. República de Corea.

Korea Forest Research Institute. 1999. Preliminary report on the state of plantation. República de Corea, Forest Inventory Division.

República de Corea. Ministry of the Environment. 2001. Korean biodiversity clearing-house mechanism. Convention on Biological Diversity. www.moenv.go.kr/

Su Lifu. 2001. The Study and planning of firebreaks in China. Global Fire Monitoring Centre. www.unifreiburg.de/


[41] Para más detalles sobre cada país, véase www.fao.org/forestry

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