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9 - TRANSFERENCIA DE LOS DISTRITOS DE RIEGO A LOS USUARIOS - UN DESAFIO DE COMUNICACIÓN

La estructura institucional de México es compleja, pero para nuestros propósitos sólo se requiere saber que PRODERITH -que trabaja en áreas de lluvias excesivas- y el sector de riego -que trabaja en zonas áridas- estaban ligados institucionalmente por el agua, su común denominador. Por esta razón, la Comisión Nacional del Agua ( CNA ) estaba encargada de ambos: PRODERITH y el sector de riego.

A finales de los años ochenta , el Gobierno, como parte de sus programas de ajuste estructural y de modernización del sector agrícola, decidió pasar la administración y el mantenimiento de los distritos de riego a sus usuarios. El riego es enormemente importante en México, y sin él, las áreas desérticas, especialmente en el norte, casi no pueden producir cultivos.

El total de hectáreas bajo riego , alrededor de seis millones, constituyen el 30 por ciento del área cultivada en el país, y contribuyen con cerca del 50 por ciento del valor total de la producción agrícola. De ellas, más de 3 millones corresponden a 80 distritos de riego, mientras que el área restante, otros 3 millones de hectáreas, están comprendidas en cerca de 25 000 pequeñas unidades de riego. Estas unidades más pequeñas generalmente han sido más productivas que los grandes distritos.

Al momento de la decisión de transferir el manejo de los distritos a sus usuarios, su producción había estado en descenso por varios años. Muchos de ellos adolecían de un mantenimiento pobre y de falta de inversión, ocasionados por el clima económico. Además, casi no había participación alguna de los agricultores en la financiación de los costos de operación y mantenimiento. Ellos estaban pagando por el agua de acuerdo con el número de hectáreas bajo riego y no por la cantidad de agua utilizada. Puesto que los agricultores no tenían incentivos financieros para usar el agua eficientemente, estaban desperdiciándola en grandes cantidades. La CNA estimó que, en promedio, de cada 100 litros de agua utilizada solamente 40 llegaban a las parcelas.

La estrategia del Gobierno era mantener su responsabilidad solamente sobre las represas y los canales principales. Los sistemas secundarios de distribución de agua iban a ser transferidos a sus usuarios. El Gobierno mantendría solamente algunas funciones de supervisión y apoyo técnico, a través de la CNA. La transferencia del manejo de los distritos de riego a un gran número de agricultores, estimado entre 250 000 y 300 000, acarrearía cambios monumentales en las actitudes, capacidades y organización de los mismos. La comunicación sería fundamental para propiciar esos cambios.

Como un primer paso , se necesitaba una gran cantidad de información para explicar a los agricultores la política del Gobierno y sus implicaciones. Luego, los agricultores tenían que formar asociaciones y desarrollarlas para recibir la infraestructura, manejarla y mantenerla. Ellos necesitaban capacitación en todos los aspectos de la organización y operación de asociaciones civiles, en cómo lograr participación y procesos democráticos dentro de las asociaciones, así como también en los aspectos técnicos y financieros de la administración de los sistemas de riego.

Adicionalmente, el personal de la CNA asignado a los distritos de riego también necesitaba capacitación sobre sus funciones. Estas eran, en primer lugar, conducir estudios socioeconómicos en cada distrito de riego, como base para las propuestas sobre la mejor forma de transferirlos a sus usuarios. También necesitaban capacitación en muchos aspectos técnicos de su trabajo con las asociaciones de productores. Por ejemplo , todos los asuntos de la identidad jurídica de las asociaciones, así como los procedimientos para establecer las tarifas que los miembros pagarían por el agua, eran de vital importancia.

En la práctica , la transferencia de los distritos de riego implicaba trabajar con cerca de 330 asociaciones de usuarios, la gran mayoría creadas especialmente con este propósito. En 1995 , unas 50 de estas asociaciones estaban trabajando muy bien, otras 50 en forma deficiente, y las restantes de manera satisfactoria. Este proceso de transferencia masiva despertó interés mundial, y fue visitado por gente de otros países con sistemas de riego operados por el estado, para ver cómo los mexicanos habían logrado lo que efectivamente lograron.

El papel de la comunicación en el proceso de transferencia

Con el apoyo técnico de la FAO , se estableció un proyecto de comunicación, específicamente para trabajar en los distritos de riego. Este se denominó: Establecimiento de un Sistema de Comunicación Rural para el uso eficiente de la Infraestructura Hidroagrícola de México. La Unidad Central de Comunicación en Cuernavaca manejó el proyecto, como lo hizo con los dos anteriores de PRODERITH.

Los esfuerzos de comunicación comenzaron con una campaña para informar a los agricultores sobre la política del Gobierno. Se produjo una serie de vídeos, comenzando por uno realizado en 1989, el cual hacía énfasis en que la transferencia de los distritos a sus usuarios era la clave de la modernización. Al mismo tiempo , el vídeo fue diseñado con la intención de provocar una discusión profunda con los agricultores y entre ellos mismos. El objetivo era iniciar un proceso de consulta que, en últimas, estimulara la organización y la capacidad necesarias en los agricultores. El personal de comunicación se fue al campo con los promotores de la CNA, quienes tenían la misión de preparar el terreno con los agricultores para el proceso de transferencia.

Los vídeos posteriores comenzaron por mostrar cómo estaban prosperando los distritos que estaban más avanzados en el proceso de transferencia, para así estimular a otros. Y todavía más tarde, se produjeron vídeos de naturaleza educativa sobre aspectos tales como mantenimiento, problemas de salinidad, microriego, y otros más.

Se estableció una unidad regional de comunicación en Ciudad Obregón, al Norte del estado de Sonora , para producir materiales que se utilizarían ahí mismo y en los estados vecinos de Sinaloa y Baja California . En agosto de 1990, se realizó un curso sobre presentación de material audiovisual, seguido por otro intensivo de tres meses, para el personal de comunicación, sobre producción de materiales. Este incluyó radio, vídeo y fotografía.

En cuatro distritos de riego se establecieron unidades locales de comunicación, provistas de módulos de reproducción de vídeos y, a su debido tiempo, se realizaron planes de expansión a otros distritos. En 1995, había unidades de comunicación en 15 distritos de riego. Sus funciones eran similares a las de los comités de comunicación en las áreas de PRODERITH.

La Unidad de Comunicación de Ciudad Obregón fue ubicada físicamente en las oficinas de la CNA de la localidad, y casi desde los primeros días hubo problemas en las relaciones con la Unidad Central de Cuernavaca. Los problemas comenzaron después de que la Unidad Central tomó la iniciativa de utilizar el vídeo para realizar algunos análisis de situación del estado de los sistemas de riego y del proceso de transferencia a los usuarios. El propósito era mostrar al personal de la CNA un panorama de los progresos y también de los problemas. Como resultado, muchos de los vídeos mostraron que indudablemente había problemas. La idea era grabar también en vídeo los comentarios y reacciones del personal de la CNA a esos problemas y presentar esta grabación a los agricultores.

Sin embargo, la dirección local de la CNA acusó al personal de comunicación de la Unidad Central de manipular la información para dar una impresión negativa. De allí en adelante, el personal de comunicación de la Unidad Central fue mantenido bajo las riendas templadas del personal local de la CNA, y no se les permitía ir al campo sin autorización previa.

Principalmente a causa de estas tensiones , la unidad de comunicación de Ciudad Obregón, que también rechazó utilizar algunos vídeos producidos por la Unidad Central sobre la nueva Ley de Aguas en 1992, comenzó a ser cada vez más independiente. Además, quizás por su ubicación en las oficinas de la CNA, ésta se convirtió en un instrumento de relaciones públicas para la CNA, en lugar de ser una herramienta para una verdadera comunicación para el desarrollo.

Al menos ésta es la forma como la percibe la Unidad Central. De cualquier manera, se dice que la unidad de Ciudad Obregón está produciendo materiales informativos de muy alta calidad, incluyendo un programa semanal de televisión para agricultores que se transmite en esa área.

En la transferencia de los distritos de riego a los agricultores , la comunicación interpersonal ha jugado un papel aún mayor que el de los medios audiovisuales. El enfoque de redes ha sido utilizado sistemáticamente. Por ejemplo, se encontró que un actor extremadamente importante en muchas redes de comunicación en las áreas de riego es el controlador del agua, es decir, la persona responsable de abrir y cerrar físicamente las diferentes compuertas para cada parcela. Estos controladores del agua , que hoy en día en México muchas veces son agrónomos, son quienes tienen los mayores contactos con los agricultores. La estrategia clave en muchas áreas fue utilizarlos a ellos como canales de comunicación, hacia y desde los agricultores.

Una necesidad apremiante en muchos distritos de riego era crear el espacio en tiempo y en ubicación, que les diera a los agricultores la oportunidad de comunicarse entre ellos mismos. Ellos necesitaban discutir sus problemas organizativos y técnicos, y también comunicarse con la CNA y con otros funcionarios. La única forma de lograrlo era a través de cientos y cientos de reuniones. Y esas reuniones tenían que ser bien preparadas y conducidas, si iban a servir para ayudar a crear los procesos participativos y democráticos requeridos.

En 1994 , hubo una reunión con todos los jefes de las 330 organizaciones de agricultores que hasta esa fecha habían estado implicados en el recibimiento de la infraestructura de riego. En esa reunión, el entonces director general de la CNA dijo que la transferencia de los sistemas de riego había "requerido el más grande proceso de diálogo jamás organizado en este país".

Comunicación despues de la transferencia

Desde luego , la transferencia formal de los distritos de riego a sus usuarios era solamente parte del proceso de modernización que el Gobierno de México quería lograr. A menos que se pueda mejorar significativamente la productividad de las áreas bajo riego, y a menos que la producción sea competitiva en los mercados internacionales, especialmente en el marco del Tratado de Libre Comercio , la agricultura de riego en México estará amenazada.

Una limitación para mejorar la productividad consiste en que las asociaciones de productores promovidas por la CNA están relacionadas solamente con el manejo de los sistemas de riego; se ha hecho poco con respecto a otros problemas que enfrentan los agricultores en los distritos de riego, tales como crédito, comercialización o asistencia técnica. Se necesitan asociaciones de productores con intereses más amplios que el riego, para que la agricultura en esas áreas se vuelva más competitiva, y el Sistema de Comunicación está trabajando ahora en esa dirección.

Muchos de los aspectos conceptuales del trabajo de comunicación para PRODERITH eran también válidos para las zonas de riego, comenzando por algunos principios acerca de las acciones de desarrollo.

Por ejemplo ,

Un primer paso fue expandir las actividades de las unidades locales de comunicación en los distritos de riego, mediante la capacitación de agentes de desarrollo dentro de cada una de las asociaciones de agricultores. Estas personas fueron capacitadas para identificar y analizar problemas y proyectos en términos de sus necesidades de comunicación, información y capacitación. Esta fue la base para la formulación de estrategias integradas de comunicación, información y capacitación, las cuales provinieron de los mismos agricultores y no de las instituciones.

La creación de un espacio en tiempo y ubicación para que los agricultores se comuniquen e intercambien ideas continuó siendo un importante elemento, y un complemento al uso de los medios.

En 1995 , este trabajo de comunicación estaba bien avanzado en un distrito de riego llamado Río Colorado , en el Valle de Mexicali, en Baja California. Para dar una idea de la complejidad organizativa, el distrito abarca 214 000 hectáreas y 14 000 agricultores. Ellos están divididos en 23 asociaciones civiles, las que fueron establecidas debido a la transferencia de los sistemas de riego. En 1995 se habían creado dos compañías de responsabilidad limitada para manejar la distribución del agua.

El trabajo de comunicación comenzó con un largo período de organización, que incluyó 27 reuniones con diferentes niveles de participación, desde presidentes de módulos de riego hasta su personal técnico. En muchas de las reuniones , los técnicos y los agricultores pasaron juntos por un proceso de aprendizaje sobre identificación y análisis de problemas, y sobre formulación de planes concretos de acción para solucionarlos.

Se realizó un taller sobre comunicación y redes de comunicación, con 19 participantes. Se prestó particular atención a la formulación de una campaña para tratar de resolver el problema de los agricultores, quienes no entendían el asunto de pagar las tarifas por los costos reales de su agua para riego, o que no las pagaban en absoluto.

Mexicali es sólo un ejemplo de un área donde la comunicación para el sector de riego estaba operando en 1995. Aunque el noroccidente del país, el cual incluye Mexicali, es el más importante para la agricultura de riego, hay muchas otras áreas bajo riego en las cuales el Sistema de Comunicación estaba ayudando activamente a los agricultores a mejorar su productividad. A finales de 1995 , se habían transferido 2 millones 300 mil hectáreas a sus usuarios y quedaban todavía cerca de 700 mil por transferir.

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