En el Africa oriental, cerca de 16 millones de personas están atravesando una situación crítica de escasez de alimentos, debida principalmente a las pérdidas agropecuarias provocadas por la sequía. Los ganaderos de la región son los más afectados, tras varias lluvias escasas consecutivas que han causado pérdidas de un gran número de existencias de ganado. En Etiopía, más de 8 millones de personas están en situación de riesgo, particularmente en la región somalí, en la que durante tres años consecutivos ha llovido poco o nada. En Eritrea, la situación alimentaria es muy difícil para cerca de 600 000 personas afectadas por la guerra con Etiopía y por la persistencia de la sequía en las zonas del litoral. En Kenya, las dificultades para el suministro de alimentos son alarmantes en los distritos pastorales septentrionales, orientales y nordoccidentales, afectados por varios períodos consecutivos de sequía, en los que cerca de 2,7 millones de personas están atravesando una situación grave de escasez de alimentos. En Somalia, cerca de 526 000 personas se enfrentan también a una grave situación de escasez de alimentos. En Tanzanía, se necesita ayuda alimentaria para cerca de 800 000 personas aquejadas de inseguridad alimentaria en varias regiones del país en las que la cosecha ha sido escasa por tercer año consecutivo. En el Sudán, pese a una situación de seguridad alimentaria en general estable, se necesita ayuda alimentaria de urgencia para alrededor de 2,4 millones de personas afectadas por la sequía y por un conflicto civil que se viene arrastrando desde hace mucho tiempo. En Uganda, la situación del suministro alimentario ha empeorado en los distritos de Kotido y Moroto, en los que cerca de 215 000 personas necesitan asistencia alimentaria de urgencia, mientras que en el distrito de Bundibugyo hay cerca de 215 000 personas desplazadas por los disturbios civiles. También siguen escaseando los alimentos en Burundi, y en algunas partes de Rwanda. En el Africa occidental, pese a unas perspectivas alimentarias en general favorables, es probable que en algunas zonas se presenten dificultades localizadas para el suministro de alimentos tras las grandes inundaciones registradas en el norte de Ghana, Nigeria, el valle del río Senegal, el Senegal y Mauritania. Siguen escaseando los alimentos en Sierra Leona, donde los disturbios civiles continúan trastornando la producción agrícola en algunas zonas. En Liberia, la producción sigue siendo limitada, debido a las repercusiones de la guerra civil. En el Africa central, la situación alimentaria ha mejorado en la República del Congo tras el reciente acuerdo de paz, pero sigue siendo frágil. En la República Democrática del Congo, los disturbios civiles continúan entorpeciendo las actividades agrícolas, particularmente en el nordeste, donde están aumentando las hostilidades y el desplazamiento de la población. En el Africa austral, se necesita asistencia de socorro y rehabilitación en gran escala en Mozambique y Madagascar, tras las devastaciones causadas por graves inundaciones y ciclones. La situación del suministro de alimentos sigue siendo muy grave en Angola, devastada por la guerra civil, donde se continúa necesitando ayuda alimentaria de urgencia para alrededor de 1,1 millones de personas desplazadas, así como para un gran número de refugiados angoleños en Zambia y Namibia. En otras partes de Africa austral las perspectivas para la producción son satisfactorias, no obstante los graves daños localizados que las inundaciones causaron a los cultivos y a la infraestructura en Botswana, Sudáfrica y Zambia.
En Asia, la emergencia alimentaria más reciente que se produjo en la región fue en Mongolia, donde el peor tiempo invernal registrado en 30 años ha causado la muerte de numerosos animales, que son de suma importancia para la seguridad alimentaria de un gran número de pastores nómadas. En los meses venideros, es probable que una cuarta parte de la población (2,7 millones de habitantes) tenga que hacer frente, en mayor o menor medida, a una situación de escasez de alimentos. La situación del suministro alimentario en Timor oriental continuará mejorando debido a la ayuda alimentaria internacional y a las cosechas internas que se recogerán en las próximas semanas, mientras que en la República Democrática de Corea continúan las dificultades crónicas del suministro de alimentos debidas a la combinación de los desastres sufridos en el pasado y los problemas económicos. En el Cercano Oriente, se prevé un empeoramiento de la situación alimentaria en el Afganistán debido a la sequía que está afectando, en particular, algunas partes meridionales del país. También preocupa seriamente el desplazamiento de miles de personas a causa del conflicto civil que se viene prolongando desde hace mucho tiempo. En el Iraq, una sequía persistente ha exacerbado la ya difícil situación alimentaria. En Jordania, a pesar de algunas lluvias beneficiosas recibidas en la campaña agrícola de invierno, la sequía ha afectado a la producción en algunas partes. En Siria, miles de pastores siguen necesitando asistencia. Entre los países de la CEI, las poblaciones vulnerables de Armenia, Azerbaiyán, Georgia y Tayikistán continúan necesitando socorro humanitario.
En América Latina, se continúa prestando asistencia alimentaria, como consecuencia de los desastres naturales, a Cuba, Honduras y Nicaragua, y, desde diciembre de 1999, a Venezuela. También se está aportando asistencia alimentaria a El Salvador y Guatemala, como parte del programa nacional de reconstrucción ejecutado por el gobierno a raíz del efecto devastador del "Mitch" al final de 1998. En Haití, se sigue prestando asistencia alimentaria debido a los problemas económicos estructurales.
En Europa, alrededor de 2 millones de personas se han empobrecido y necesitan ayuda alimentaria como consecuencia de los disturbios prolongados que han tenido lugar en los Balcanes, especialmente en la República Federal de Yugoslavia. En la Federación de Rusia, la guerra de Chechenia ha provocado el desplazamiento de 185 000 personas a Ingushetia (país vecino de 320 000 habitantes) y creado enormes necesidades humanitarias, de viviendas y de reconstrucción en Chechenia misma. En Ingushetia, se necesita con urgencia una amplia gama de asistencia humanitaria, con inclusión de alimentos y suministros médicos, para alrededor de 255 000 personas desplazadas y miembros de familias anfitrionas.
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1/ En este recuadro se presenta la información de la página
2 del informe Cosechas y Escaseces de la FAO/SMIA, de febrero del 2000. Están
subrayados los países que atraviesan emergencias alimentarias excepcionales.