MUCHOS países están haciendo un serio esfuerzo en reunir y mantener al día estadísticas de consumo de las principales materias primas por uso final. De esta labor se ocupan departamentos gubernamentales, asociaciones de comercio o de fomento combinando con frecuencia sus actividades. Actualmente se reconoce que este tipo de información es fundamental para determinar las políticas nacionales en cuanto a materias primas, así como para formular los planes públicos y privados de fomento industrial.
Sin embargo, las estadísticas de consumo de productos forestales por su uso final se hallan todavía relativamente sin desarrollar, no obstante las vastas encuestas emprendidas en algunos países como, por ejemplo, Finlandia y los Estados Unidos. No obstante, en la mayoría de los países se dispone de datos dispersos, por ejemplo, en las secciones sobre uso de materiales de las encuestas periódicas sobre las industrias nacionales básicas. Varios países llevan a cabo asimismo estudios periódicos sobre el movimiento de diversas especies y categorías de madera en rollo hacia las diferentes industrias usuarias. Por lo que se refiere a los productos forestales se pueden combinar las estadísticas por transformación ¹ y por uso final 2, ya que ambas se complementan mutuamente siendo posible establecer lo que constituye, en realidad, un esquema del movimiento de los productos forestales desde el momento de la corta hasta el consumo en su forma final. Las estadísticas esbozadas en dicho esquema permiten una más fácil evaluación de la repercusión en la oferta de productos forestales, sobre todo a plazo medio y largo, de los cambios que se están produciendo en la fase del consumo, ya sea que estos cambios obedezcan a variaciones en el consumo maderero por unidad de producción (por ejemplo, madera aserrada consumida por unidad de vivienda) o a cambios en la importancia relativa de los diferentes sectores del consumo de madera (por ejemplo, la creciente importancia del sector de la «fabricación de productos papeleros», en relación con otros sectores). En las categorías de maderas en rollo se reflejan variaciones seculares que están verificándose en la fase del consumo, y por tanto se pueden traducir en variaciones a largo plazo en las exigencias impuestas al bosque por la industria. Por consiguiente, las estadísticas por uso final y por transformación no sólo son
(¹ Las estadísticas por transformación son aquellas que se refieren a los volúmenes absorbidos por los procesos manufactureros para una conversión ulterior del producto. Estas estadísticas pueden referirse a la madera en rollo los productos de madera semielaborada y/o a los residuos madereros. Representan los volúmenes recibidos el consumo aparente o el aprovechamiento aparente por las industrias elaboradoras de la madera.)
(² Las estadísticas por uso final se refieren a la última fase de la utilización de los productos forestales en que es útil y factible recopilar estadísticas. importantes para los que se ocupan de seguir la evolución de los mercados de productos forestales, sino también para los responsables de formular y aplicar políticas forestales.)
Hasta ahora la labor se ha concentrado en la recogida de estadísticas de transformación que nos dan la medida del volumen de la actividad económica en las industrias forestales. En el caso de productos tales como traviesas de ferrocarril (aserradas y desbastadas) y papel para periódico, las estadísticas de transformación pueden ser suficientes, ya que ambos productos tienen un limitado número de usos finales importantes. Pero las estadísticas por uso final adquieren hoy día una importancia particular, debido a que el aumento del precio de la madera, en relación con el de algunos de los materiales competidores, está llevando a restriciones en el empleo de la madera y a su desplazamiento por los otros materiales.
Esquema del movimiento de productos forestales
En el esquema se muestran gráficamente los usos finales más importantes de los principales grupos de maderas en rollo. Se distinguen cinco fases en el movimiento de los productos desde el monte al consumidor, a saber:
1. Cortas y extracciones (cortas menos pérdidas de apeo y transporte) de montes y de árboles situados fuera del monte (a la izquierda del esquema);2. Transformación de las extracciones en las diversas categorías de maderas en rollo, es decir, trozas de aserrío, trozas para chapas y trozas para traviesas de ferrocarril; rollizos para pasta (mecánica o química); puntales para minas; postes; otras maderas industriales, y leña;
3. Utilización aparente de clases específicas de madera en rollo por las industrias primarias de elaboración o, en otras palabras, transformación por las industrias de productos forestales (aserraderos, fábricas de chapas y madera contrachapada, pasta y papel, tableros de fibra y tableros de partículas);
4. Fabricación de productos intermedios (chapas, pasta, etc.) y/o productos finales (madera contra chapeada, papel y cartón, tableros de fibra, tableros de partículas, etc.);
5. Consumo en los diversos usos finales (construcción; embalaje, minas de carbón, etc.).
Hay que observar que el consumo aparente (producción + importaciones-exportaciones) se puede determinar por las estadísticas esbozadas en el esquema debido a que entre cada fase queda un margen para e comercio en las diversas categorías de maderas. E esquema incluye también los residuos madereros cuya importancia ha venido creciendo en los últimos diez años, y distingue en todas las categorías entre madera de coníferas y de no coníferas. Es evidente, por las definiciones, que las estadísticas por uso final no se refieren necesariamente a la auténtica fase final del consumo (por ejemplo, el volumen de madera contrachapada utilizada por las empresas de embalaje es una estadística por uso final, pese a que en muchos casos el material sirve para fabricar ulteriormente paletas, cajas, jaulas, etc.). Además, el esquema indica (por medio de la leyenda) cuáles tipos de estadística hay que recoger en cada fase por grupos de productos o sectores de consumo, como, por ejemplo, estadísticas completas, estadísticas de muestreo o estimaciones y estimaciones parciales, y si deben recogerse las estadísticas de las industrias productoras o de las usuarias. A fin de que el cuadro estadístico sea completo, el esquema admite que las fábricas de pasta y papel pueden utilizar fibras diversas de la madera, como, por ejemplo, el papel usado, bagazo, algodón, etc.
CLASIFICACIÓN PARA LAS ESTADÍSTICAS DE PRODUCTOS FORESTALES POR USO FINAL
ESQUEMA DEL MOVIMIENTO DE LOS PRODUCTOS FORESTALES
Cuadro de clasificación
Para complementar la información del esquema de movimiento de productos forestales, un grupo especial de expertos en estadística convocado conjuntamente por la FAO y la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (CEE) ha aprobado un cuadro de clasificación para las estadísticas de productos forestales por su uso final. En el cuadro de clasificación se disponen en forma conveniente los principales grupos de sectores consumidores (usos finales) y los principales productos forestales utilizados para cada uno. Las industrias usuarias se clasifican de acuerdo con la Clasificación Industrial Internacional Uniforme de todas las Actividades Económicas (CIIU)³. Los principales productos de madera (madera en rollo, madera manufacturada y pasta y papel) se enumeran junto con su utilización por los sectores consumidores. El cuadro indica también los tipos de estadísticas que se pueden emplear para recoger los datos (consumo aparente, entregas, entradas, consumo efectivo derivado de la producción de la industria, y otras fuentes, inclusive encuestas especiales). Al igual que en el esquema de movimiento, es evidente que las estadísticas por uso final esbozadas en el cuadro de clasificación no representan necesariamente la fase final del consumo. Ello se comprende tomando como ejemplo el papel de imprenta y de escribir, que se incluye en la lista únicamente en la forma en que es utilizado por los sectores de consumo: G. Imprentas, editoriales e industrias conexas; M. Otras industrias; N. Familias. Estos sectores de consumo se han dividido en clases generales dentro de los cuales el uso final del papel puede asumir la forma de libros, revistas, artículos de escritorio, etc.
(³ Clasificación Industrial Internacional Uniforme de todas las Actividades Económicas. Oficina de Estadística de las Naciones Unidas. Informes Estadísticos Serie M N° 4, Rev. 1, Nueva York, 1958.)
Recogida de las estadísticas
Por lo que se refiere a las técnicas y problemas relativos a la recolección de las estadísticas de productos forestales por su uso final, tanto en la agricultura como en la industria, hay entre los países una gran variación tanto por lo que se refiere a las necesidades como a las posibilidades de recoger dichos datos. Se considera que debería otorgarse preferencia a la recogida de estadísticas por uso final con respecto a lo siguiente:
1. Productos utilizados:Madera aserrada, leña, madera contrachapada y chapas, tableros enlistonados y tableros de partículas.
2. Sectores consumidores:
Agricultura, secciones de ebanistería y fabricación de envases en el sector manufacturero de productos de madera, muebles, equipo de transporte y otras manufacturas, así como la construcción y enseres domésticos.
Los productos utilizados y los sectores consumidores aquí aludidos son precisamente aquellos cuyas estadísticas por uso final no se han perfeccionado lo suficiente, pero que en términos de volumen de productos forestales o de desarrollo industrial tienen una importancia primordial
El problema de las estadísticas por uso final se puede abordar de dos maneras principales:
a) concentrándose en los varios productos forestales que se consumen en un determinado uso final, o
b) concentrándose en los usos finales específicos (sectores consumidores) a que se destina un determinado producto forestal.
Sin embargo, el enfoque adoptado en cualquier caso concreto dependerá en buena parte del tipo de datos de que ya se disponga y de las técnicas que puedan elaborarse para recoger datos suplementarios. Desde un punto de vista práctico, acaso sea preferible utilizar el sistema b) o una variación de él, concentrándose en el uso final particular a que se destina un determinado producto forestal. Este método se prefiere porque en general las estadísticas sobre transformación y comercio de los productos forestales están bien desarrollados y es posible determinar el consumo aparente de casi todos los productos. Cuando se dispone de estadísticas sobre existencias de los diversos productos forestales, el consumo se puede determinar con mayor precisión. Si se cuenta con datos sobre el consumo de un determinado producto forestal, es posible emprender investigaciones acerca de su principal uso final, después de lo cual el cuadro podrá completarse investigando sus otros usos finales.
La FAO recomienda que los futuros programas para recoger estadísticas por transformación y por uso final en los países miembros se sujeten a la nomenclatura y la clasificación que aparecen en el cuadro de clasificación y el esquema de movimiento de productos forestales que acompañan a este artículo. La adopción de esta recomendación conduciría a una uniformidad universal basada en clasificaciones internacionales aceptadas, y a la comparabilidad de las estadísticas con la posibilidad de conglobarlas por regiones y subregiones.
En el campo de las técnicas de recogida de estadísticos, el grupo de expertos antes mencionado recibió información de Finlandia y la U.R.S.S., acerca de la recogida de estadísticas sobre los usos de la madera en el sector agrícola. Ambos países han tenido considerable experiencia en este difícil sector. En el sector manufacturero se recibió información de 15 países4.
(4 Austria, Bélgica, Bulgaria, Canadá, Checoeslovaquia, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Noruega Países Bajos, Portugal, Reino Unido, Suceia y Suiza.)
Análisis de las estadísticas
Para la mayoría de las finalidades analíticas, es quizás suficiente recoger estadísticas por uso final siguiendo los sectores consumidores que figuran en el cuadro de clasificación y el esquema de movimiento, aunque estas estadísticas no correspondan necesariamente a la fase final del consumo. Sin embargo, para ciertos estudios (por ejemplo, el estudio FAO/CEE titulado Trends in the Utilization of Wood and its Products in Housing 5 y el estudio del Stanford Research Institute America's Demand for Wood, 1929-1975) 6 podría ser conveniente y factible un ulterior desglose hasta incluir la fase final de consumo. Por lo general, tal información no se recoge regularmente, pero se puede obtener por medio de encuestas especiales complementarias. Por ejemplo, en los dos estudios precitados se dan datos sobre la cantidad de madera utilizada en la construcción de nuevas viviendas, pero además se dan datos de volumen sobre la cantidad de madera consumida finalmente en:
(5 Trends in the Utilization of Wood and its Products in Housinq. Estudio preparado conjuntamente por la Seeretaría de la FAO y la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa, 49 págs., Ginebra, 1957.)
(6 America's Demand for Wood, 1929-7975. informe por el Stanford Research Institute a la Weyerhaeuser Timber Company, 404 págs. Sunnyvale, California, junio de 1954.)
1. Muros, lo que determina si la estructura es o no una unidad de madera;
2. Elementos estructurales, inclusive información sobre cubiertas, pisos, cabios de techos, etc.;
3. Elementos de carpintería de taller, inclusive información sobre ventanas y marcos de ventanas, puertas y marcos de puertas, entarimados, etc., y
4. Madera auxiliar, inclusive andamiajes y encofrados para hormigón.
El objeto del estudio Stanford era estimar para un año de base el consumo en los principales sectores consumidores de cada uno de los principales productos forestales en los Estados Unidos, y proyectar estas estimaciones para determinados años meta y, al mismo tiempo, estimar las futuras necesidades de madera en rollo y explicar las variaciones históricas en la producción y el consumo de estos productos forestales. El estudio FAO/CEE tenía el objetivo más concreto de reunir y examinar los materiales disponibles sobre tendencias en la utilización de un determinado producto forestal únicamente, la madera aserrada, en una sección particular del consumo, la construcción de nuevas viviendas, si bien haciendo referencia a otros productos forestales utilizados en esta industria. Además, ambos estudios tratan de los materiales competidores diversos de la madera.
Para analizar a conciencia el consumo de la madera en cualquiera de los sectores de consumo o en todos ellos, como se hizo en los dos estudios mencionados, es necesario tomar en consideración todos los factores sociales, tecnológicos y económicos que repercuten en el consumo del producto. Por ejemplo, el volumen total de madera consumida en la construcción de nuevas viviendas depende del número de unidades de vivienda construidas y la cantidad de madera utilizada por unidad. Pero en este respecto, existen factores sociales, tales como las variaciones en la estructura y distribución de la población, que influyen en el número de unidades de viviendas que se construyen. Además, en un período determinado, la nueva unidad representativa de vivienda puede cambiar de tamaño (espacio de suelo y altura de techo), al igual que el número de pisos, el estilo (arquitectura) y el tipo (casa unifamiliar, bifamiliar o multifamiliar) de las estructuras que contienen las unidades de vivienda. Uno de los factores económicos es el precio de la madera, debido a que ésta debe mantenerse en grado de competir en precio con otros materiales de construcción para evitar que se la reemplace o sustituya. También los factores tecnológicos pueden afectar a la sustitución, o, para ser más exactos, al descenso en la cantidad de madera utilizada por unidad de consumo. Las economías en madera pueden aumentar debido a un uso más racional de este material (es decir, una forma de sustitución), al reemplazo de la madera aserrada por otros productos madereros, y, por último, al desplazamiento de la madera por un material diferente.
A fin de evaluar como es debido y oportunamente los cambios que se verifican, conviene estudiar las variaciones en los cuatro principales componentes de la construcción de casas en que entra la madera, es decir, las paredes, los elementos estructurales, los elementos de carpintería de taller y la madera auxiliar. Los estudios de la FAO/CEE y del Stanford Institute estimaron las variaciones temporales en el consumo de madera aserrada para la construcción de casas e indicaron los cambios debidos a factores sociales, tecnológicos y económicos; asimismo estimaron los cambios en los usos definitivos en la construcción de casas.
Lista revisada de categorías
En un campo bastante similar al de las estadísticas por uso final, se ha compilado una lista sobre la clasificación de las estadísticas de utilización de la madera por grupos de industrias y categorías de productos, con el objeto de que fuera útil a los países en sus preparativos para el programa mundial para 1963 de encuestas sobre las industrias nacionales básicas. Este programa mundial se llevará a cabo conforme a una resolución del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, donde se recomienda a los Gobiernos de los Estados Miembros que compilen datos básicos sobre industria (minería, manufactura, construcción y producción de gas, electricidad y vapor) para 1963 o un año próximo a 1963, teniendo en cuenta, en la medida de lo posible, las recomendaciones internacionales formuladas con el propósito de mejorar la comparabilidad internacional de los datos reunidos.
