Apéndice B

(únicamente en versión española)

En Chile, después de un colapso de los recursos algales, producto de una fuerte sobre-explotación de sus praderas naturales, principalmente el género Gracilaria en la década de los 80. Posteriormente de desarrolló una gran actividad acuícola, originándose gran cantidad de centros de cultivo de esta alga. Durante los últimos años se ha sumado el grupo de las lugas (Sarcothalia spp. y Gigartina spp.), cultivo de las cuales está siendo llevado a cabo por instituciones estatales y de educación superior a niveles experimentales. Las principales especies exportadas hacia mercados internacionales extraídas desde praderas naturales corresponden a las algas pardas Lessonia spp. y Macrocystis spp., de las cuales se extraen principalmente ácido algínico, compuesto destinado a la industria alimenticia. Un segundo grupo fuertemente explotado en la actualidad corresponde a las carragenophytas (Sarcothalia spp. y Gigartina spp.), a partir de las cuales se elabora la carragenina, compuesto con una variada gama de utilización (farmacéutica, alimenticia, cosmetología, etc.). Finalmente la Gracilaria representa el único recurso cultivado cuya producción alcanza al 90 por ciento del total desembarcado en el país, sin embargo durante el último tiempo los volúmenes de exportación han disminuido debido a que la mayor producción ha sido destinada a la elaboración nacional de agar-agar, el que posteriormente es exportado. Respecto de la Phorphyra spp., recién se comienzan a investigar sus posibilidades de introducción a algunos mercados asiáticos, presentando esta alga una disponibilidad de volúmenes explotables interesantes al no haber sido nunca antes explotada comercialmente.