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Evaluación de las arbóreas Albizia lebbeck, Bauhinia purpurea y Leucaena leucocephala asociadas con pasto bajo pastoreo


I. HERNÁNDEZ, L. SIMÓN Y P. DUQUESNE
Estación Experimental de Pastos y Forrajes "Indio Hatuey"
Matanzas, Cuba

Resumen

Se evaluaron cuatro sistemas, pasto soloy combinado con Albizia lebbeck, Bauhinia purpurea y Leucaena leucocephala. El trabajo se desarrolló en 7,9 ha y seis cuartones por tratamiento. La densidad arbórea fue de 600-800 árboles/ha, con una altura promedio de 1,8m. El pasto cubrió el 65 por ciento del área. Se evaluaron dos ciclos de pastoreo: seca de 1995 a seca 1996 y seca de 1996 a seca de 1997 con animales Cebú comercial de 220-230 kg de peso vivo inicial en el primer ciclo y 260-270 kg de peso vivo inicial en el segundo ciclo. No se utilizó suplementación y existió agua y sales a voluntad. No se empleó riego ni fertilización. Los tres sistemas con árboles fueron diferentes al del pasto solo. Los árboles de Leucaena proporcionaron el mayor follaje para ramoneo (aproximadamente 660 kg de MS/ha al inicio del experimento y 320 kg de MS/ha al final), seguida de Bauhinia (520 kg de MS/ha al inicio y 410 kg de MS/ha al final). Los rendimientos de pasto más estables fueron alcanzados en el sistema con Leucaena; en los otros dos sistemas con árboles las producciones de la gramínea fueron superiores a las del pasto sembrado solo (al final de los ciclos evaluados sus rendimientos fueron de aproximadamente 3-4 ton de MS/ha); sin embargo, en ambos casos se produjo una disminución en la cantidad de gramínea. Los resultados productivos obtenidos en el componente animal demuestran la potencialidad de los sistemas con árboles sobre los pastizales con un solo estrato de gramíneas.

Introducción

El ramoneo directo de los árboles y arbustos, conjuntamente con el pastoreo de las plantas existentes (generalmente gramíneas), contribuye significativamente a la mejora de los índices productivos y eproductivos de los animales. Se destacan los resultados obtenidos en Cuba con Leucaena leucocephala asociada con pastos, donde se han alcanzando producciones de leche entre 8 y 10 litros/día (2 500-4 500 litros/ha/año) y considerables mejoras en todos los parámetros reproductivos de los animales. En ceba se han alcanzado ganancias de peso entre 500 y 600 g/día, equivalente a 700-800 kg/ha/año (Hernández et al., 1987; Castillo et al., 1989; Lamela, 1989; Milera et al., 1994).

En Cuba se han realizado estudios con Leucaena leucocephala desde 1979 por un grupo multidisciplinario de investigadores (Ruíz y Febles, 1998), pero en los últimos años las investigaciones se han ampliado a otras especies de plantas perennes leñosas (Simón et al., 1990; Febles y Ruíz, 1996; Toral et al., 1998). En todos estos estudios especial énfasis se ha dado a la utilización de los árboles en praderas, tanto en pequeñas parcelas como a gran escala. Sin embargo, la mayoría de los trabajos se han realizado con Leucaena y poco se han estudiado otras plantas arbóreas.

Teniendo en consideración lo anterior, se evaluaron dos ciclos de pastoreo de animales Cebú comercial en plantaciones de Leucaena leucocephala, Albizia lebbeck y Bauhinia purpurea en asociación con pasto.

Materiales y métodos

Clima

Algunos de los indicadores más importantes de las condiciones climatológicas que prevalecieron en el área de estudio se muestran en el Cuadro 1.

CUADRO 1
Condiciones climáticas durante el período experimental. DE en paréntesis.

Año

Precipitación (mm)

Temperatura (ºC)

Humedad relativa (%)

Evaporación mensual (mm)

Mínima media

Máxima media

1995

1 430

18,5 (3,9)

30,4 (4,1)

81,4 (3,6)

146,4 (41,1)

1996

1 095

17,8 (3,6)

27,5 (2,4)

82,3 (3,0)

156,5 (34,6)

1997

1 374

19,3 (2,8)

31,3 (2,3)

81,6 (4,1)

143,7 (44,9)

Suelo

El experimento se llevó a cabo la EEPF Indio Hatuey en un suelo de topografía plana y de tipo Ferralítico Rojo hidratado (Academia de Ciencias de Cuba, 1979). Las características químicas del suelo se presentan en el Cuadro 2. El pH del suelo es ligeramente ácido. El N total es considerado medio; tiene bajo P disponible y las bases intercambiables (K, Ca, Mg) muestran valores de moderados a altos.

CUADRO 2
Valores medios y desviación estándar de las principales propiedades químicas del suelo en las áreas experimentales

Indicadores

Media

DS

Método analítico

pH

6,6

0,22

Potenciómetro

Materia orgánica (%)

4,9

0,16

Walkley-Black

N-total

0,25

0,83

Kjeldahl

Fósforo (mg/100 g)

3,95

0,72

Oriani

Potasio (meq/100 g)

0,48

0,03

Maslova

Calcio (meq/100 g)

14,2

3,57

Complejometría

Magnesio (meq/100 g)

3,0

0,02

Complejometría

Sodio (meq/100 g)

0,15

0,05

Complejometría

Los suelos ganaderos de Cuba (Mesa y Suárez, 1986), son latolizados, generalmente con buen drenaje y fertilidad media, mas sin embargo, son resecantes. Los pastos sufren de escasez de agua durante los períodos poco lluviosos. Son productivos debido a sus favorables propiedades físicas, y sus principales factores limitantes son la fuerte fijación de fósforo y que alcanzan el punto de marchitez muy pronto durante la seca.

Antecedentes del experimento

La siembra se realizó en surcos: seis de pasto (Panicum maximum cv. Likoni) a chorrilo y una de árboles leguminosos (Leucaena leucocephala cv. Cunningham, Albizia lebbeck o Bauhinia purpurea) a 40 cm entre plantas en julio de 1993. El área experimental consistió en 7,9 ha dividida en 24 cuartones, 6 por sistema. Los sistemas fueron pasto solo, y cada una de las tres arbóreas asociadas con pasto.

Manejo del experimento

Los sistemas se homogeneizaron dejando entre 1 200-1 600 árboles por sistema (600-800 árboles/ha) con una altura promedio de 1,8m. El pasto cubría el 65 por ciento. Los sistemas fueron evaluados en dos períodos: seca 1995/período poco lluvioso 1996 y período poco lluvioso 1996/seca 1997. No se empleó riego ni fertilización.

Animales y su manejo

En cada ciclo de pastoreo se utilizaron 24 animales añojos Cebú comercial, con 220-230 kg de peso vivo inicial en el primer ciclo y 260-270 kg en el segundo. La carga fue de 3 animales/ha (6 por sistema). Hubo agua y sales a voluntad, sin suplementación. Los ciclos de pastoreo fueron de 7 d, seguidos por 35 d de reposo.

Análisis de los datos

Se analizaron los cuatro sistemas productivos en dos ciclos. Las variables fueron: área cubierta por pasto, número de árboles, biomasa arbórea comestible, biomasa del pasto, el peso vivo final de los animales y la fibra bruta de la guinea. Con una matriz de los datos (variables en columnas, y sistemas por ciclo en filas), los sistemas fueron agrupados mediante un análisis de clasificación automática (Cluster Analysis). Los datos fueron estandarizados y se utilizó la Distancia Euclidiana. En el análisis de la información se empleó el Programa SPSS, versión 8,0 de Windows.

Una parte de la información (variables dasométricas, número de árboles, altura de la gramínea y producción de biomasa), se analizó con el uso de las regresiones polinomiales. En los análisis de la composición botánica y el contenido de minerales (árboles y pastos) se empleó estadística descriptiva. Se utilizó el modelo lineal siguiente para la composición bromatológica de los pastos y los árboles, en el tiempo.

Yij = µ + Ai + Ej + eij

DondeYij fue la variable de respuesta, µ la media general; Ai, el efecto del i-ésimo año; Ej, el efecto de la j-ésima época y eij el error asociado al modelo

Variables

En el pasto se midió el por ciento de proteína cruda (PC), minerales y composición botánica, y la altura (cm). En los árboles se determinaron la PC (por ciento), los minerales (por ciento), la producción de materia seca (MS) total (ton/ha), la producción de MS comestible al alcance de los animales (kg/ha), ancho de la copa (m), altura de las plantas (m), número de plantas (n/ha), circunferencia del tocón (cm) y la altura de ramoneode los árboles (m). En cada animal se midió: peso vivo (PV) inicial (kg), PV final (kg), ganancias de PV individual (g/d) y ganancia bruta (kg/período evaluado).

Resultados y discusión

Análisis de los sistemas

Los resultados de la agrupación muestran que en el grupo 1 se ubicaron la mayoría de los sistemas que poseían árboles para ambos ciclos, lo que indica la clara a diferenciarse de los sistemas donde el pasto estuvo como monocultivo (Grupo 3). El sistema de pasto asociado con Leucaena en el primer ciclo (Grupo 2), fue el que mejor comportamiento presentó para la mayoría de las variables estudiadas (Cuadro 3), lo que explica su agrupamiento independiente.

Sobre la base de los resultados obtenidos en la agrupación y de la superioridad los sistemas con árboles de los indicadores productivos, con respecto al sistema de pasto solo, es que se continúa su análisis por separado.

CUADRO 3
Grupos1 formados según indicadores y sus estadígrafos

Indicadores

Grupo 1

Grupo 2

Grupo 3

Media

DS

Media

DS

Media

DS

Biomasa comestible arbórea

0,40

0,15

0,68

0,21

-

-

Biomasa del pasto

8,06

0,76

8,01

0,68

6,1

0,71

Proteína cruda del pasto

8,7

1,2

11,3

2,1

6,3

0,4

Proteíana cruda arbórea

19,4

5,3

26,0

5,9

-

-

Fibra bruta del pasto

33,0

1,5

32,0

1,3

36,0

1,4

Area crubierta de pasto

63,2

17,1

72,0

18,8

55,6

15,6

Peso vivo final de los animales

416,2

10,3

424,0

11,1

356,6

9,4

Número de árboles

624,4

122,0

792,2

122,5

0

0

1 Grupo 1 = Albizia y Bauhinia con pasto en el ciclo I y Albizia, Bauhinia y Leucaena con pasto en el ciclo II. Grupo 2 = Leucaena con pasto en el ciclo I. Grupo 3 = pasto solo en ciclos I y II.

Los árboles

Las mayores alturas y ancho de copa fueron de Albizia. La circunferencia del tocón fue bastante similar para todos, aunque la Bauhinia presentó el mayor grosor (Cuadro 4).

Las variables dasométricas (altura, ancho de copa y cincunferencia del tocón) aumentaron con el tiempo, se ajustaron a ecuaciones de primer grado. Todas las ecuaciones tienen altos coeficientes de determinación.

Producción de biomasa comestible con posibilidades de ramoneo

Las mayores cantidades de follaje de árboles fueron con Leucaena y Bauhinia. A pesar de que algunas plantas de Leucaena presentaron, en ocasiones, alturas superiores a los 2 m, los animales fueron capaces de quebrar o doblar el tallo principal y consumir el follaje.

De acuerdo con Hernández et al., (1986), Leucaena aportaró en promedio 0,21 y 0,50 kg de MS/d para el período poco lluvioso y lluvioso, respectivamente. Las ofertas de MS comestible de Leucaena en varios porcentajes en bancos de proteína, variaron entre 160 y 910g de MS/d (Castillo et al., 1992).

CUADRO 4
Ecuaciones con mayor ajuste para las variables dasométricas1 estudiadas

Parámetro

Árbol

Ecuación

R2

ES (b) ±

Altura (m)

Albizia

y = 0,3227x + 1,79

0,97***

0,009

Bauhinia

y = 0,1199x + 2,33

0,99***

0,025

Leucaena

y = 0,25x + 1,59

0,98***

0,050

Ancho de la copa (m)

Albizia

y = 0,4379x + 1,32

0,96***

0,009

Bauhinia

y = 0,2555x + 1,43

0,97***

0,001

Leucaena

y = 0,1164x + 1,32

0,93***

0,043

Perímetro del tocón (cm)

Albizia

y = 1,1082x + 19,49

0,93***

0,043

Bauhinia

y = 1,4334x + 20,6

0,98***

0,008

Leucaena

y = 1,25x + 18,67

0,96***

0,052

1 y = variables dasométricas; x = meses

Bauhinia mantuvo altos niveles de biomasa comestible, a causa de su poca altura. El follaje disponible de Albizia, debido a su mayor porte, fue decreciendo con el tiempo.

La altura máxima de ramoneo fue de aproximadamente 2,10 m en todos los tratamientos. La talla del animal determina su alcance. Los animales adultos vacunos, sólo pueden consumir follaje hasta 190-200 cm del suelo (Ruíz et al., 1988).

La altura de los árboles se debe considerar para lograr una utilización más adecuada del follaje. En este trabajo no se utilizó la poda. En Australia, con el pastoreo/ramoneo, las plantas más altas y los tallos son en ocasiones quebrados por los animales (Jones, 1994). En Vanuatu y Papua Nueva Guinea, los animales pastorean en plantaciones de Leucaena de más de 10 m de altura y consumen las ramas más bajas y las nuevas plantas (Shelton y Brewbaker, 1994). Se hace necesario realizar podas anticipadas para aumentar el acceso al ramoneo (Ruíz et al., 1988).

Contenido de PC y minerales

La PC de Albizia estuvo entre 20-29 por ciento y la de Leucaena entre 22-31 porciento (Cuadro 5), rangos normales en la literatura (Norton, 1994). Bauhinia tuvo menor PC.

El contenido de minerales de Leucaena y Albizia (Cuadro 6) coincide con otros autores (Lowry, 1989; Norton, 1994). Sin embargo, hubo variación entre épocas de lluvia y de seca. Los minerales de las gramíneas en Cuba también varían en el año (Herrera, 1981). Por otro lado, Funes y Díaz (1979) reportaron que Leucaena varió su nitrógeno total entre épocas de lluvia y seca.

CUADRO 5
Porcentaje de proteína cruda de los árboles en los sistemas

Sistema

Año

Época

ES ±

1995

1996

1997

Lluvia

Seca

Albizia

20,3

20,8

22,0

20,3

20,9

3,5

Bauhinia

16,2

11,9

12,5

12,9

14,1

1,3

Leucaena

25,3

20,6

22,0

20,3

24,9

3,5

Para Bauhinia no existe mucha literatura sobre sus minerales sus valores se encuentran dentro del rango de otros árboles leguminosos (Norton, 1994).

Número de árboles en los sistemas evaluados

En el sistema Leucaena la población se incrementó ligeramente en los primeros 18 meses y después tendió a estabilizarse. Este se debió a la emergencia de plantulas a partir de la reserva de semillas en el suelo (Hernández et al., 1987).

El número de árboles de Albizia y Bauhinia disminuyó. Con Bauhinia la drástica reducción pudo estar asociada a su menor altura, que favoreció un ramoneo más frecuente y, por tanto, el consumo de rebrotes. Al respecto se plantea que el rebrote depende de la disponibilidad del tejido meristemático activo (yemas), de la cantidad y de la capacidad fotosintética del área foliar residual, así como de la movilización de los carbohidratos solubles y otras reservas remanentes después de la defoliación (Stür et al., 1994). El efecto de defoliaciones repetidas es acumulativo y la utilización progresiva de las reservas reduce su contenido en las plantas, en general cuanto mayor sea la intensidad y la frecuencia de la defoliación, menor será la cantidad de reserva de las plantas (Weinmann, 1956).

CUADRO 6
Variación porcentual de los minerales de los árboles

Mineral

Árbol

Momento de evaluación

Seca/95

Lluvia /95

Seca/96

Lluvia/96

Seca/97

Media

DS

Media

DS

Media

DS

Media

DS

Media

DS

N (%)

Albizia

4,7

0,04

3,4

0,13

3,4

0,15

3,2

0,20

3,9

0,02

Bauhinia

2,6

0,22

2,6

0,16

2,1

0,21

1,7

0,13

2,1

0,22

Leucaena

4,9

0,33

3,5

0,17

3,8

0,52

3,6

0,33

4,1

0,26

P (%)

Albizia

0,33

0,10

0,18

0,01

0,21

0,01

0,12

0,01

0,13

0,01

Bauhinia

0,37

0,03

0,16

0,003

0,15

0,006

0,14

0,004

0,25

0,004

Leucaena

0,37

0,04

0,18

0,02

0,19

0,004

0,13

0,004

0,13

0,015

Ca (%)

Albizia

0,88

0,04

1,24

0,05

1,29

0,03

1,44

0,05

1,60

0,04

Bauhinia

2,27

0,09

1,28

0,07

1,96

0,05

1,80

0,03

1,80

0,08

Leucaena

0,61

0,10

1,89

0,06

1,37

0,07

1,98

0,05

1,96

0,06

Otro aspecto que pudo influir en esta disminución fue que posiblemente el manejo utilizado (tiempo de reposo y ocupación) no fue el más adecuado. Bauhinia no nodula (Brewbaker, 1986), lo que pudo disminuir su capacidad de recuperación ante las frecuentes defoliaciones.

Con Albizia también hubo disminución del número de plantas. El crecimiento rápido de algunas plantas, aunado a sus copas anchas y su follaje tupido, provoca altos niveles de sombra que afectan a las plantas del estrato inferior, que además son ramoneadas. La defoliación de plantas bajo sombra dismuniye su capacidad fotosintética y su persistencia (Gold y Caldwell, 1989).

Los pastos

Variación de la composición botánica

Los resultados del Cuadro 7 muestran la variación de la composición botánica del estrato herbáceo. En el sistema con pasto solo se observa una disminución del porcentaje de guinea (58 por ciento) y un incremento de la proporción de pasto natural (30 por ciento) para el primer ciclo. En el segundo ciclo continúa la misma tendencia hasta alcanzar un valor de 31 por ciento. Ruiz et al. (1998) obtuvieron 63 por ciento de cobertura en pasto estrella sin árboles. Los pastos sin árboles no se benefician de la fijación y la transferencia de nutrientes, ni de la protección contra el viento (Pezo e Ibrahim, 1999).

Para los dos ciclos evaluados la guinea mantuvo una alta proporción con Leucaena; mientras que can Albizia su porcentaje disminuyó drásticamente en el primer ciclo, debido probablemente a la mayor competencia de estos árboles de mayor copa (Cuadro 4).

CUADRO 7
Composición botánica de las especies herbáceas

Sistema

Guinea

Leucaena/ guinea

Bauhinia/guinea

Albizia/guinea

Planta

Inicio

Final

Inicio

Final

Inicio

Final

Inicio

Final

Período I









Guinea

77

58

74

69

30

28

90

60

Estrella

-

3

10

11

41

52

-

-

Area decubierta

1

3

1

13

-

-

-

30

Malezas1

-

2

1

-

6

-

2

2

Pasto natural2

18

30

-

-

10

8

5

5

Leguminosas rastreras3

4

4

14

7

13

12

3

3

Período II









Guinea

54

31

67

65

29

23

63

66

Estrella

-

-

11

10

44

38

-

-

Area descubierta

3

2

13

9

1

6

25

15

Malezas

5

10

2

2

5

11

2

3

Pasto natural

33

54

1

3

9

18

6

10

Leguminosas rastreras

5

3

6

11

12

4

4

6

1 Malezas más importantes: Paspalum virgatum, Dichrostachys cinerea y malváceas. 2 Pasto natural: Paspalum notatum y Dichanthium caricosum. 3 Leguminosas rastreras: Indigofera mucronata, Macroptilium atropurpureum, Neonotonia wightii y Teramnus labialis.

En el segundo ciclo su porcentaje no tuvo variación (63-66 por ciento). En los árboles de mayores alturas, se facilita la entrada lateral de los rayos solares (Pezo e Ibrahim, 1999).

Con Bahuinia la guinea presentó muy poca variación para los dos ciclos evaluados, mientras que el pasto estrella aumentó ligeramente en el ciclo I.

En general se reconoce que la presencia de los árboles en los pastos produce efectos microclimáticos beneficiosos: regulación del estrés térmico; incremento de la humedad relativa; amortiguamiento del estrés hídrico; protección contra el viento; redistribución de la lluvia; mayor producción de fitomasa; y cambios en la estructura y en la composición de la gramínea (Pezo e Ibrahim, 1999). Los árboles leguminosos son capaces de aportar nitrógeno por fijación simbiótica (Dart, 1994), así como por reciclaje de nutrientes que se produce por caída de hojas, tallos y frutos (Humphreys, 1991).

Producción de materia seca del pasto

El sistema sin árboles presentó los menores rendimientos para todos los períodos evaluados y muestra una tendencia a disminuir su producción con el tiempo (Cuadro 7). Es importante señalar que este sistema no fue fertilizado.

Al inicio del ensayo los mayores rendimientos de la gramínea fueron alcanzados en los sistemas con Bauhinia y Albizia. Sin embargo, posteriormente ocurrió un decrecimiento de estas producciones en ambos sistemas.

El sistema de Leucaena no presentó los más altos rendimientos pero su producción fue estable. Bajo las leñosas, la menor temperatura en el estrato herbáceo provoca una disminución en la pérdida de agua por transpiración (Baruch y Fisher, 1991; Wilson y Wild, 1991).

Contenido de PC y de minerales de la gramínea

Los menores contenidos de PC de la gramínea se alcanzaron en el sistema sin árboles. Al respecto Ruíz et al. (1998) informaron que al evaluar el comportamiento del pasto estrella sin sombra contenía solo 7 por ciento de PC.

Como muestra el Cuadro 8, mayor PC se alcanzó con árboles, especialmente Leucaena. Es aceptado que la sombra moderada estimula la absorción de nitrógeno de las gramíneas (Wong y Wilson, 1980) y el resultado es que el crecimiento de las gramíneas es menos afectado en condiciones de baja radiación solar (Ludlow, 1980).

CUADRO 8
Porcentaje de proteína bruta de la gramínea en los sistemas de pastoreo

Sistema

Años

Época


1995

1996

1997

Lluvia

Seca

ES ±

Pasto

6,2

6,4

6,9

7,3

5,6

2,3

Albizia

9,8

7,3

9,4

9,0

8,5

0,6

Bauhinia

8,8

7,6

8,2

8,8

7,5

3,5

Leucaena

11,3

10,4

12,6

13,5

9,3

2,8

** P<0.01

El contenido de Ca en la gramínea para todos los sistemas disminuyó con el tiempo, mientras que el P mantuvo altos niveles con Leucaena. La información sobre variación en el contenido de minerales de las gramíneas en sistemas silvopastoriles es escasa. El reciclaje de nutrimentos en sistemas silvopastoriles ocurre a través de la senescencia de la biomasa aérea y la muerte de raíces, tanto de las leñosas como del estrato herbáceo. Esto se puede provocar a través del material podado que es dejado en el campo, y por medio de las excretas que los animales depositan durante el pastoreo/ramoneo. En sistemas silvopastoriles de baja productividad y en aquellos sometidos a defoliación directa por los animales, la extracción de nutrimentos es baja, por lo que el reciclaje es un mecanismo eficiente para prevenir la pérdida rápida del potencial productivo del sistema (Pezo e Ibrahim, 1999).

Los animales

Los animales en pasto solo ganaron menos peso vivo, y esto se asocia a la ausencia de una fuente proteica para suplir sus necesidades alimentarias (Norton, 1994).

Las mayores ganancias de peso se alcanzaron con leucaena en el ciclo I (Grupo 2), debido a la mayor cantidad y calidad (hasta 14 por ciento de PC) de pasto y a las más altas disponibilidades de ramoneo. Simón et al. (1990) compararon un sistema con pasto mejorado (P. maximum cv. Likoni) asociado a una mezcla de Leucaena y leguminosas herbáceas con un banco de proteína (25 por ciento del área cubierta con leguminosas) y un sistema con Likoni fertilizada a razón de 80 kg de N/ha/año. Las ganancias diarias fueron de 623, 530 y 538 g/d, respectivamente.

Con Albizia las buenas ganancias iniciales decayeron en el ciclo II al haber menos follaje y pasto. Simón et al. (1995) obtuvieron ganacias de 353 g/d con Albizia y pastos naturales comparado con 308 g/d con solo pastos con añojas (5/8 Holstein x 3/8 Cebú). Con Bauhinia las ganancias fueron de 757 y 604 g/d para los ciclos I y II, este con menos árboles. En todos los sistemas, en el ciclo II los animales presentaron menores ganancias debido a la menos disponibilidad de forraje de pasto y/o arbóreas. Esto indica la necesidad de podar los árboles para garantizar el rebrote.

A pesar de que con Leucaena se obtuvieron los mejores resultados, no se debe descartar el uso de Albizia y de Bauhinia. Sus resultados también fueron buenos y probablemente necesitan de un manejo diferente (tiempo de ocupación y de reposo, inicio del pastoreo) al que se hizo en este trabajo.

Bibliografía

Academia de Ciencias de Cuba. 1979. Clasificación genética de los suelos de Cuba. Inst. de Suelos, La Habana. 265 p.

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Comentarios

Mario A. Cobos P.

Un problema general en la evaluación nutritiva de arbustivas y leguminosas tropicales es la selección de una muestra representativa. Un problema general es que la evaluación se hace sobre las hojas o follaje y no se incluye las ramas o tallos tiernos, que tambien son consumidos por el animal. De manera que los resultados sobre su contenido de proteina cruda son sobreestimados y los de fibras (FDN y FDA) son subestimados.

Al respecto, en la presentación expuesta, no se indica si los análisis como se extrajo la muestra representativa, en el laboratorio, nosotros hemos determinado en Leucaena, que el contenido de proteina cruda es de 23 por ciento de la MS en las hojas y de 15 a 17 por ciento cuando se considera una muestra que incluya tallos tiernos.

¿Es posible que las variaciones que tuvieron en el contenido de proteina cruda de la leucaena (22-31 por ciento) se deban al efecto del tipo de muestra seleccionada?

De lo contrario, ¿Cómo se seleccionó la muestra reprsentativa para los análisis de PC?

Rogério Martins Maurício

Me gustaría añadir algunos puntos en apoyo a los comentarios del Dr. M.A. Cobos. Nos a preocupado el "valor nutritivo"de los forrajes y árboles en sistemas silvopastoriles para la alimentación de bovinos desde el principio de esta conferencia. Los resultados nutricionales, usualmente, están basados en partes separadas de la planta (e.g. hojas, tallo, etc.). Desde luego, siempre las hojas tendrán un mejor valor nutricional que las otras partes como fue claramente mencioando por el Dr. cobos. Sin embargo, las hojas no son el único componente de la dieta en el sistema silvopastoril, y por tanto, la planta entera o si fuera posible, una mezcla de forrajes (árboles leguminosos y pasto) deberían de se analizados debido a los efectos asociativos de la fermentación de la dieta (Rosales?).

La proporción de cada planta o partes de la planta pueden ser identificados por técnicas de microscopio con muestras de fístula esofágica. Esta técnica fue utilizada por Ferreira et al. (1982) analizando las especies de forrajes consumidas por bovinos en el Cerrado de Brasil.

Además, se debe tener cuidado al escoger las técnicas in vitro para el análisis de los piensos, especialmente para forrajes de ramoneo, ricos en factores antinutricionales, comunes en el sistema silvopastoril. Por ejemplo, la técnica de la bolsa de "nylon" u otros métodos basados en determinaciones gravimétricas de residuos promueven la solubilización de los factores antinutricionales sin hacer ninguna contribución a la generación de energía en el sistema pero siendo medidos dentro de la materia seca digestible, lo cual conduce a conclusiones equivocadas. Sin embargo, los efectos de los factores antinutricionales (e.g. taninos) en la fermentación ruminal son detectados por la técnica de la producción de gas (Getachew et al., 1998). Aun estando negativamente correlacionados con la producción de gas, la concentración de fenoles estuvieron significativamente más relacionados con la producción de gas que a la degradabilidad de la materia seca usando la técnica de la bolsa de "nylon" (Khazzaal et al., 1993). Aparte de eso, el potencial de la técnica de producción de gas usando la captación directa de los datos (Mauricio et al., 1999) ha aumentado substancialmente la capacidad del sistema (75 muestras por corrida) lo cual sería muy útil para el análisis de un gran número de forrajes tropicales presentes en el sistema silvopastoril. En los sistemas de "corte y acarreo" el análisis de la planta entera, incluyendo tallos y hojas juntas, puede facilitar la estimación más precisa de la contribución nutricional del forraje en una dieta más cercana a las condiciones del productor.

Ferreira, M.B., Escuder, C.J., e Macedo, G.A. 1982. Dieta dos bovinos pastejando em áreas do Cerrado. I. Composição Botânica. Arquivo Brasileiro de Zootecnia e Veterinária. (Universidade Federal de Minas Gerais. Belo Horizonte, Brazil) 34: 153-165.

Getachew, G., Blummel, M., Makkar, H.P.S. y Becker, K. 1998. In vitro gas measuring techniques for assessment of nutrtional quality of the feeds: a review. Anim. Feed Sci. Technol. 72, 262- 281

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Alberto Navas Camacho

En relación con las variables y metodología para estimar el valor nutritivo de arbóreas forrajeras quisiera hacer énfasis en la necesidad de incluir en los modelos variables que nos permitan estimar el efecto de la combinación de fuentes de forraje sobre el "consumo voluntario" y la cinética digestiva.

Una proporción importante de la respuesta productiva encontrada en animales con dietas que incluyen hojas anchas, o de la suplementación con fuentes de azúcares y/o proteínas, están explicadas por el efecto sobre el consumo voluntario y por ende sobre el flujo de proteína microbial al intestino delgado. Un comentario sobre las variables que nos permitan valorar nutricionalmente follaje y frutos de arbóreas en sistemas silvopastoriles.

Desafortunadamente, con frecuencia los modelos de evaluación de valor nutritivo que utilizamos para los forrajes no incluyen la variable "consumo voluntario", pese a ser esta la primera restricción nutricional para los sistemas ganaderos en el trópico. Los modelos aditivos no parecen ser la mejor alternativa para evaluar esta variable.

Varios de los investigadores participantes en el foro han evaluado el efecto de la combinación de diferentes fuentes de sobre consumo voluntario de materia seca, y muy interesante serían sus comentarios al respecto.


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