San Antonio de Lomerío y la FAO sellan alianzas para continuar apoyando la producción de frutos del bosque
A través de los proyectos Mecanismo de Bosques y Fincas (FFF, por su sigla en inglés) y Agrobiodiversidad, FAO Bolivia firmó convenios con el Gobierno Municipal de San Antonio de Lomerío y con el Gobierno Indígena representado por la Central Indígena de Lomerío (CICOL), para dar continuidad a una intervención integral que contribuya a la gestión territorial y de los recursos naturales del bosque, inicialmente a través de la producción y transformación de la almendra chiquitana, la chirimoya crespa y la miel.
A partir de estos convenios, organizaciones de productores indígenas de la cultura chiquitana Mankox, entre ellas ADAPICRUZ y APMIL fortalecerán sus actividades productivas y emprendimientos de transformación y otorgación de valor agregado a los productos del bosque chiquitano, informó Boris Fernández, coordinador de los proyectos en la FAO.
Esto significa, aprovechamiento de chirimoya crespa; incremento de la producción y transformación de la miel de abejas nativas en al menos ocho derivados; y también la diversificación de la producción y transformación de la almendra chiquitana.
El municipio de San Antonio de Lomerío está ubicado al oeste del departamento de Santa Cruz. Tiene más de 20 comunidades indígena originario de la cultura Monkox, cada una de entre 50 y 60 familias que se dedican al aprovechamiento de recursos forestales maderables y no maderables. En este momento, estas comunidades decidieron priorizar las cadenas alimentarias vinculadas a la almendra, la chirimoya, la miel y otros frutos tropicales.
La alianza con los dos gobiernos reconocidos en la región, el Gobierno Autónomo Municipal (GAM) y la CICOL, permite una importante contribución de contraparte para la ejecución de iniciativas. Una de ellas fue inaugurada este día, la planta de procesamiento de miel, refaccionada con recurso del GAM y equipada por la FAO. La CICOL comprometió un monto que será destinado al fortalecimiento de capacidades.
Esta jornada también fue entregado equipamiento esencial para la transformación de la pulpa de chirimoya crespa, una inyección de recursos que incidirá en la sostenibilidad de emprendimientos de mujeres indígenas.