Fortalecimiento de capacidades

Fortalecer la capacidad de adaptación al cambio climático individual e institucional en la RDP Lao

14/06/2016

El cambio climático en el mundo es reconocido como una amenaza para la integridad de los sistemas naturales. Los humedales son vulnerables a cambios en la cantidad y calidad del abastecimiento de agua y se espera que el cambio climático tenga un marcado efecto en dichas áreas. Al mismo tiempo, los humedales tienen cualidades que podrían ayudar a mitigar la incidencia del cambio climático sobre los medios de sustento locales. Tener éxito en el restablecimiento y manejo de las zonas de humedales en el largo plazo es por tanto vital, tanto para la protección de los medios de sustento como para la conservación de la naturaleza.

Dos humedales de Laos, protegidos por el Convenio de Ramsar, están sufriendo presiones debido al uso que de él hacen las comunidades locales así como por los efectos del cambio climático. Las comunidades rurales, aproximadamente unos 60.000 habitantes, dependen en gran medida de esos ecosistemas y de sus zonas circundantes para su sustento y participan en su manejo. Los utilizan para cultivos, cría de ganado, pesca, caza, recolección de productos forestales no madereros y servicios turísticos. La intensificación de la agricultura y la extracción de productos no madereros están sometiendo a esos humedales a una enorme presión en el momento en que el cambio climático acentúa su exposición y vulnerabilidad.

A petición del gobierno de la RDP Lao, el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF, por sus siglas en inglés) ha acordado apoyar un proyecto por intermedio de la FAO para facilitar a los usuarios de humedales su adaptación al cambio climático por medio de modificaciones en sus prácticas de manejo de los humedales para hacerlos mas sostenibles. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) se ha asociado a su ejecución

Prioridades en materia de capacidades para un mejor manejo de los humedales

La Unidad de fortalecimiento de capacidades de la FAO ha estado apoyando este proyecto como parte de sus esfuerzos por incorporar buenas prácticas de fortalecimiento de capacidades en los programas del Fondo Mundial para el Medio Ambiente. Mediante una serie de procesos con múltiples partes interesadas y estudios de vulnerabilidad climática, la FAO, junto con la dirección de la UICN, ha asistido a los actores nacionales en la evaluación de sus necesidades en materia de capacidad, en la identificación de oportunidades para responder a esas necesidades y en el diseño de acciones efectivas de fortalecimiento de capacidades.

Los resultados de esas evaluaciones de capacidad han revelado algunos aspectos importantes que requieren atención y que sirvieron de complemento a los estudios de los especialistas sobre cambio climático:

  • Conciencia y conocimientos locales: los miembros de la comunidad disponían de un conocimiento y conciencia limitados de la incidencia del cambio climático en los humedales y sobre sus medios de sustento. Siendo que el restablecimiento y manejo de los humedales depende de las comunidades locales, es fundamental que éstas sean plenamente conscientes de los problemas y de las alternativas de adaptación de que se disponen. Al mismo tiempo, las comunidades locales de esas zonas poseen valiosos conocimientos indígenas que podrían aportar a la adaptación de estrategias. Estas necesidades potenciales deben ser aprovechadas y compartidas entre las comunidades de los humedales.
  • Redes y manejo colectivo: los usuarios de humedales, como los agricultores y pescadores, obraban juntos sólo esporádicamente para manejar su habitat y adaptarse a los cambios en su entorno. Esta falta de colaboración acabó en un uso insostenible de los recursos del ecosistema y en estrategias de adaptación que no atendían las necesidades de todos los usuarios del humedal. Por ejemplo, siendo esas zonas proclives a inundaciones, los agricultores construyeron barreras artificiales dentro de las mismas para controlar esas inundaciones. Las barreras afectaron la capacidad de los peces para moverse libremente afectando su reproducción, algo que redujo la población de peces y acarreó una sobrepesca que afectó los medios de vida de los pescadores. Habida cuenta de la diversidad de usuarios de los humedales es importante que los enfoques adaptativos se manejen de manera concertada y estructurada, por ejemplo por medio de grupos de usuarios formales o informales de modo de garantizar que las diversas necesidades sean tenidas en cuenta en igual medida.
  • Relacionar el cambio climático, la conservación y los medios de sustento: las políticas y estrategias nacionales, regionales y locales en materia de cambio climático no han tenido suficientemente en cuenta la incidencia de las iniciativas de conservación sobre los medios de sustento locales. Para que esas políticas y estrategias sean eficaces deberían complementar las iniciativas de conservación con medios de vida alternativos que representen incentivos viables para las personas. Por ejemplo, la recolección de caracoles de agua es una fuente de sustento de las comunidades de los humedales que si se sobreexplota acaba afectando la sostenibilidad del ecosistema. La recolección sostenible de caracoles de agua requiere opciones de sustento alternativas para las personas que dependen de ellos como medio de vida. La expansión del ecoturismo podría ser una de esas alternativas.

Actuar conjuntamente para mejorar las capacidades

Para responder a esas necesidades se elaborarán localmente planes de acción detallados con actividades específicas que incluyan la concientización de las comunidades locales, la captación y compartición de los conocimientos indígenas, el fortalecimiento de los sistemas de cogestión entre los usuarios de los humedales un refinamiento de las políticas y estrategias ante el cambio climático así como la identificación de medios de sustento alternativo para los miembros de las comunidades locales.

Esas actividades se pondrán en marcha en un proyecto cuatrienal de 5 millones de dólares que será objeto de seguimiento permanente.

El valor añadido de la Unidad de fortalecimiento de capacidades de la FAO está en complementar la labor técnica de los especialistas en cambio climático con buenas prácticas de fortalecimiento de capacidades, como la evaluación de capacidad participativa para tener la certeza de que las capacidades de las comunidades e instituciones nacionales realmente se fortalezcan .

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