• En Perú, el día 16 de octubre es doblemente importante, pues se celebra el Día Mundial de la Alimentación y también de la Agrodiversidad.
• Este espacio fue organizado por la Oficina Regional de América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). 

El III Congreso de Áreas Protegidas de Latinoamérica y el Caribe celebra hoy, 16 de octubre, el Día Mundial de la Alimentación con el conversatorio “Los Sabores y Saberes de las Áreas Protegidas” que este año busca fortalecer acciones en distintos sectores para hacer frente a una  alimentación saludable y sostenible que sea accesible para todos. 

El conversatorio “Los Sabores y Saberes de las Áreas Protegidas” contó con la participación de Hivy Ortiz Chour y Ricardo Rapallo; oficial Forestal y Oficial Principal de Políticas en Seguridad Alimentaria y Nutricional de la Oficina Regional de América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); Magda Choque Vilca, experta en cocinas regionales de la Universidad Nacional de Jujuy (Argentina) y Alfredo Oropeza, chef y conferencista gastronómico (México). 

Este espacio de diálogo permitió evidenciar la estrecha relación entre las áreas protegidas, la biodiversidad y la alimentación en el contexto de soluciones para el bienestar y el desarrollo sostenible. Asimismo se puso de manifiesto el enfoque integrado entre biodiversidad y seguridad alimentaria y nutricional (SAN), que a propósito del Día Mundial de la Alimentación, motivó la conversación sobre la demanda de acciones en distintos sectores de la región para hacer que las dietas saludables y sostenibles sean accesibles para todos. 

Durante el conversatorio, Ricardo Rapallo, oficial de Seguridad Alimentaria y Nutrición de FAO Chile, señaló que “ahora hay un conciencia en la sociedad, sobre la forma de producir los alimentos y que se debe cambiar los hábitos alimentarios para no hipotecar el futuro del planeta.” Además, resaltó la importancia del Perú como un país de la región que ha logrado posicionar su patrimonio de la biodiversidad como una solución a los problemas de nutrición. 

Por su parte, Magda Choque Vilca, experta en cocinas regionales de la Universidad Nacional de Jujuy, Argentina, y conocida también como “la reina de las papas andinas”, agregó que la comida no es solo lo que se pone en la mesa, sino es la representación de toda una  comunidad: “Relacionar la alimentación con áreas protegidas es autoprotegernos. El primer eslabón para ser soberanos es mediante la alimentación. Elijamos qué ponemos en nuestros platos. Valoremos nuestra América, está en nosotros hacerlo”. 

A su turno, el chef mexicano, Alfredo Oropeza, manifestó la importancia de actualizar el pensamiento frente a la gastronomía y la producción alimentaria a través de la generación de espacios, no solo para las cocineras tradicionales sino a todos los equipos que conforman la industria: “Es importante mostrar a todas las poblaciones originarias, que sientan orgullosas de sus actividades y de sus formas de recolección de alimentos, esto nos permitirá entregar buenos ejemplos a todos”. 

Como reflexión sobre el Día Mundial de la Alimentación, los participantes recalcaron la importancia de recuperar y fortalecer los sistemas y patrimonios alimentarios locales, pese a que hoy en día se han perdido muchas prácticas alimentarias tradicionales. Para esto, hacen un llamado de transformar dichos sistemas con todos los actores involucrados: agricultores, cocineros, chefs, sociedad civil, instituciones del estado, empresas privadas, entre otros. 

Finalmente, el conversatorio “Los Sabores y Saberes de las Áreas Protegidas”,  destacó la contribución de los saberes locales y la biodiversidad a nuevas tendencias de consumo en pro del bienestar de las comunidades y las áreas protegidas. 

Datos clave: 

* De las 6.000 especies de plantas que se cultivan para obtener alimentos, menos de 200 contribuyen de manera sustancial a la producción alimentaria mundial, y tan sólo nueve representan el 66% del total de la producción agrícola. 

* La FAO asegura que la pérdida creciente de biodiversidad está siendo causada por los cambios en el uso y la gestión de la tierra y el agua, la contaminación, la sobrepesca y la sobreexplotación, el cambio climático, el crecimiento demográfico y la urbanización.