La producción local ha de estar enfocada a la nutrición
Cuba presenta su innovador plan de autoabastecimiento municipal para apoyar dietas más variadas y saludables para todos y todas, durante evento paralelo del Programa FIRST “Impacto, Resiliencia, Sostenibilidad y Transformación para la Seguridad Alimentaria y Nutricional”
Buenos Aires.—El “innovador” Plan de Autoabastecimiento Municipal de Cuba (PAM), además de un plan de desarrollo, incluye explícitamente un objetivo de nutrición. Y enfocar distintos programas y esfuerzos del Gobierno con un prisma de seguridad alimentaria y nutricional es esencial para acelerar la erradicación de todas las formas de malnutrición, según se señaló este miércoles en un evento paralelo durante la Semana de la Agricultura y la Alimentación, que se celebra estos días en Buenos Aires (Argentina).
El ejemplo de Cuba fue presentado por Gloria Almandoz, especialista del Ministerio de la Industria Alimentaria, en la conferencia que reúne a gobiernos, agencias especializadas, sector privado y sociedad civil de toda América Latina y el Caribe. “Este plan tendrá un gran significado para la canasta básica de alimentos del pueblo cubano, y va a llevar al mercado local productos de alto valor nutricional”, señaló Almandoz. Ese enfoque específico, según la especialista, garantizará que las inversiones en el programa reviertan positivamente en la situación nutricional de los cubanos. Y puntualizó que el PAM se vincula con el Plan de Desarrollo para el 2030.
“La realidad es que para retomar el progreso en la reducción del hambre y la malnutrición por la que América Latina se ha distinguido en las últimas décadas serán necesarias más inversiones”, dijo este miércoles Carmelo Gallardo, Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en República Dominicana. “Pero las inversiones no serán efectivas si antes no creamos las condiciones para que realmente tengan impacto”, advirtió Gallardo en Buenos Aires (Argentina).
El Programa FIRST, una alianza de la Unión Europea y la propia FAO, trabaja mano a mano con los gobiernos de más de 30 países para generar ese ambiente propicio en el que las inversiones puedan realmente contribuir a alcanzar la seguridad alimentaria. Junto al caso de Cuba, se han destacado los avances conseguidos en Colombia, Guatemala y Honduras para establecer esas condiciones adecuadas.
En Colombia, FIRST ha venido acompañando el proceso de reincorporación social y económica de excombatientes; así como la planeación agropecuaria para los próximos 20 años. Asimismo, el diálogo de políticas públicas en materia de seguridad alimentaria ha representado un apoyo importante en el nuevo ciclo de gobierno como parte de la construcción del Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022.
Guatemala, por su parte, ha abordado la necesidad de que las mujeres rurales no queden fuera de programas clave como el de apoyo a la agricultura familiar (PAFFEC). Ahora, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación guatemalteco cuenta con una Unidad de Género que está presente en la toma de cualquier decisión, como destacó Felipe Orellana, viceministro de desarrollo rural del país centroamericano.
En Honduras, donde el Corredor Seco, su particular problemática, y las inversiones que se anuncian (de la Unión Europea, entre otros socios) servirán como prueba piloto para comprobar la efectividad y coordinación de las políticas, el Gobierno ha revisado sus estrategias y reforzado la capacidad de sus instituciones, como destacó Jorge Quiñonez, de la Unidad Técnica de Seguridad Alimentaria y Nutricional de Honduras.
El mismo día en que se presentaba en La Semana el informe de FAO sobre la pobreza rural en América Latina y el Caribe, los ponentes han reafirmado el compromiso de los países de asegurar la efectividad de las políticas e inversiones para erradicar el hambre y la pobreza sin dejar a nadie atrás.
El Programa de Autoabastecimiento Municipal y el acompañamiento de la FAO
En la opinión de Pierpaolo Piras, Oficial de Políticas de la FAO en Cuba y coordinador de FIRST en esa Representación, este programa partenariado Unión Europea-FAO posee una conexión directa con el Plan de Autoabastecimiento Municipal. Específicamente, el PAM deviene uno de los temas estratégicos en la vida del programa.
Esa sinergia —comentó Piras— está alineada tanto con la prioridad del país de incrementar la producción nacional de alimentos y disminuir las importaciones, como con la idea de FIRST de apoyar a los gobiernos en la definición e implementación de políticas públicas que sean de interés para la seguridad alimentaria y nutricional, y para la agricultura sostenible.
La meta entonces es articular esfuerzos en aras de potenciar los sistemas locales de producción de alimentos y lograr que, a nivel territorial, se puedan integrar la producción y la comercialización, de manera que permitan satisfacer las necesidades propias de abastecimiento y lo hagan —sobre todo— con productos de calidad.