Página precedente Indice Página siguiente


CAPITULO II: LOS ORUJOS DE ACEITUNA

2.1 Características físicas

Los orujos brutos contienen la cáscara del hueso en trozos, la piel y la pulpa molida de la aceituna, alrededor del 25 por ciento de agua y aún una pequeña cantidad de aceite que favorecen su rápida alteración.

Los orujos agotados se diferencian sobre todo por su menos contenido de aceite y un bajo contenido de agua, ya que han sido deshidratados durante el proceso de extracción.

Los orujos agotados parcialmente deshuesados están formados fundamentalmente por la pulpa (mesocarpio) y todavía contienen una pequeña proporción de cáscaras que no pueden ser separadas completamente utilizando los procedimientos del tamizado y la corriente de aire.

En la Figura 4 se señalan los rendimientos en distintos tipos de orujos a partir de aceitunas tratadas, así como su composición física respectiva.

2.2 Condiciones de conservación de los orujos

El principal problema que plantea la conservación de los orujos es su contenido de agua relativamente alto y la presencia de una cantidad aún importante de sustancias grasas. Expuestos al aire, estos orujos se rancian rapidamente y resultan pronto no aptos para el consumo animal.

Se estima que los orujos brutos obtenidos por centrifugación, que son más húmedos, se deterioran después de 4 a 5 días, mientras que los orujos obtenidos por presión lo hacen después de unos 15 días y cuando están deshidratados nos se conservarían más allá de 45 días. Por el contrario, los orujos agotados que además han sido deshidratados en el proceso de extracción podrían conservarse más de un año.

La deshidratación es hoy un proceso caro habida cuenta de los elevados costos de la energía que para ello se requiere. Además, su eficacia como forma de conservación de los orujos brutos aún ricos en sustancias grasas parece muy limitada.

Los pocos ensayos efectuados en pequeña escala de conservación por ensilado indican una posibilidad de conservación más sencilla, económica y eficaz utilizando el método de ensilado por amontonamiento, que permite almacenar cantidades muy variables que oscilan desde algunas toneladas a varios centenares.

Dado que el orujo bruto fresco se conserva muy poco tiempo, debe distribuirse muy rápidamente a los animales o ensilarse lo antes posible para que no se altere.

Sin embargo, debe observarse que económicamente suele ser más rentable extraer antes el aceite de orujo, pero cuando por razones concretas no se realiza esta extracción, el orujo bruto puede conservarse para ser distribuido posteriormente a los animales.

2.3 Características químicas

2.3.1 Composición química de la aceituna

Para comprender mejor la diversa composición química de los distintos tipos de orujo, tal vez sea útil recordar (Cuadro 4) la composición química de los distintos componentes de la aceituna.

Cuadro 4: Composición química de los componentes de la aceituna madura

ParteSustancias nitrogenadas totalesSustancias
grasas
Celulosa
bruta
Materias mineralesExtracto no nitrogenado
Epicarpio9,83,42,41,682,8
Mesocarpio9,651,812,02,324,2
Endocarpio
(hueso y almendra)
1,20,874,11,222,7

Fuente: Maymone y otros, 1961.

Es evidente que la parte más rica en aceite es el mesocarpio (o pulpa) y la más rica en celulosa bruta el endocarpio (o hueso).

2.3.2 Composición química de los orujos

A diferencia de las otras tortas oleaginosas, los orujos brutos son pobres en sustancias nitrogenadas y ricos en celulosa bruta. Son relativamente ricos en sustancias grasas. Su agotamiento con disolventes disminuye el contenido de sustancias grasas y aumenta relativamente el de otros componentes. El deshuesado parcial por tamizado o por corriente de aire reduce el contenido de celulosa bruta (Cuadro 5).

Las pulpas, al haber sido totalmente separadas del hueso antes de la presión, son las que contienen menos celulosa bruta.

Cuadro 5: Composición química indicativa de los distintos tipos de orujos

  % de materia seca
TipoMateria
seca
Materias mineralesSustancias nitrogenadas totalesCelulosa
bruta
Materias
grasas
Orujo bruto75–803–55–1035–508–15
Orujo graso parcialmente deshuesado80–956–79–1220–3015–30
Orujo agotado85–907–108–1035–404–6
Orujo agotado parcialmente deshuesado85–906–89–1415–354–6
Pulpa grasa35–405–89–1316–2526–33

Fuente: Diversos autores.

Los valores que acaban de indicarse varían mucho sobre todo en el caso de los orujos brutos y los orujos grasos parcialmente deshuesados, y son sólo indicativos.

Debe tenerse en cuenta que estos distintos orujos provienen de aceitunas de diverso origen y han sido sometidos a tratamientos diferentes, lo que explica la heterogeneidad de algunos resultados.

a) La celulosa bruta

Como se ha indicado anteriormente, la proporción de celulosa bruta en los orujos no deshuesados es alta. El deshuesado parcial reduce considerablemente este contenido, pero incluso la pulpa pura contiene alrededor del 20 por ciento de celulosa bruta.

Del análisis de las fibras con el método de Van Soest y otros (1975) se desprende que los orujos tienen un contenido muy elevado de componentes de pared celular (NDF), lignocelulosa (ADF) y lignina (ADL) (Cuadro 6).

Cuadro 6: Características de los componentes de pared celular de los orujos

 Orujo agotado (Túnez)1Orujo agotado parcialmente deshuesado
  Túnez 1España 2Grecia 3
NDF72557083
ADF6045-64
ADL31293124

Fuente: 1 Nefzaoui, 1979.
          2 Alibes y Berge, 1983, resultados no publicados.
          3 Ohlde y Becker, 1982.

En consecuencia, resulta paradójico que el tamizado reduzca sobre todo el contenido de celulosa y muy poco el de lignina. El contenido de los orujos de aceituna de componentes de pared celular es comparable al de la paja de cereal, pero con un grado de lignificación aparentemente más alto.

b) Las sustancias nitrogenadas totales

Su contenido varía según el tipo de orujo (véase el Cuadro 5), pero sigue siendo relativamente reducido. El nitrógeno proteico constituye más del 95 por ciento del nitrógeno total y su solubilidad es muy pequeña (1,5 por ciento del nitrógeno total según Zelter, 1968, citado por Theriez y Boule, 1970, y Gomez Cabrera, 1983, comunicación personal; 3 por ciento según Nefzaoui, 1983). Además, gran parte de las proteínas (80 a 90 por ciento) está vinculada a la parte de lignocelulosa (ADF - N) (Nefzaoui, 1983).

c) Los lípidos

Las sustancias grasas de los orujos son muy ricas en ácidos grasos C16 y C18 saturados, que constituyen el 96 por ciento del total de los ácidos grasos. Los orujos son muy vulnerables al oxígeno de la atmósfera, que en gran parte es el causante de la alteración de las propiedades organolépticas. Sin embargo, Theriez y Boule (1970) han observado que el aceite rancio de los orujos parece no ser la causa de la disminución de la digestibilidad observada in vitro, ya que los resultados obtenidos con orujos almacenados durante más de un año son iguales a los de los orujos frescos.

Las sustancias grasas del orujo bruto pueden constituir una aportación importante de energía, pero en el caso de los orujos agotados dicha aportación es limitada.

2.4 Factores que pueden afectar la digestibilidad de los orujos

Muchos experimentos han indicado una “mala digestibilidad” de los orujos de aceituna, lo que podría deberse a una disminución de la actividad de la flora del rumen, que (si se mide por los gases desprendidos) puede reducirse en un 40 por ciento tras la ingestión del orujo bruto (Theriez y Boule, 1970). La amoniogénesis del líquido del rumen de los ovinos al recibir los orujos confirma también la disminución de la actividad de la flora del rumen (Balti, 1974; Nefzaoui y Abdouli, 1979; Nefzaoui y otros, 1982).

Pueden formularse tres hipótesis:

2.4.1 Influencia de las sustancias grasas (sobre todo en lo que respecta a los crujos no agotados)

La fuerte concentración de ácidos grasos libres en el rumen puede producir alteraciones en la digestión y el apetito. Las sustancias grasas pueden actuar por uno o varios de los factores siguientes:

2.4.2 Factores inhibidores

Podrían ser compuestos simples, del tipo de los fenoles, que inhibirían la fermentación, o más complejos, del tipo de los taninos, que harían insolubles las proteínas de la ración o del propio orujo (Theriez y Boule, 1970).

Sin embargo, los resultados generalmente mencionados en la bibliografía se refieren al fruto antes de la extracción del aceite, cuando precisamente mediante esta operación se elimina gran cantidad de polifenoles y de taninos en los alpechines.

Los análisis de orujos realizados por Nefzaoui (1978, 1980) han indicado niveles de tanino inferiores al 1 por ciento, que son insuficientes para ejercer una influencia negativa en la actividad de los microorganismos del rumen y la digestibilidad de las proteínas, y niveles de polifenoles entre el 0,15 y el 0, 75 por ciento de la materia seca, lo que es insuficiente para ejercer una acción inhibidora en la fermentación.

2.4.3 Influencia de la lignina

Los orujos de aceituna son particularmente ricos en lignina y pobres en contenido celular. Parece que, como con la paja, se produce un fenómeno de “protección” de los hidratos de carbono vinculados a la lignina. En efecto, cuando se han tratado los orujos con álcalis, su digestibilidad in vitro casi se ha cuadruplicado (Nefzaoui, 1983).

2.5 Valor nutritivo de los orujos de aceituna

2.5.1 Digestibilidad

En primer lugar, conviene recordar que al estudiar determinados subproductos del tipo de los orujos, varios investigadores (Michalet-Doreau, 1981; Orskov, 1977; Preston, 1981) han destacado la importancia del nivel de participación del alimento en la ración total, el tipo de alimentos (forrajes, concentrados) con que se combinan, el nivel de alimentación del animal y finalmente el método de cálculo o estimación de la digestibilidad.

Son limitados los estudios realizados sobre la digestibilidad de los orujos y sus resultados son muy heterogéneos. En el Cuadro 7 se reseñan los principales resultados de digestibilidad in vivo obtenidos con distintos tipos de orujo.

Cuadro 7: Principales resultados de digestibilidad in-vivo de los distintos tipos de orujo de aceituna

Tipo de orujoMétodo de determinaciónMateria
seca
Materia orgánicaSustancias nitrogenadas totalesSustancias
grasas
Celulosa
bruta
Fuente
Pulpa grasaPor diferencia, ovinos
Por diferencia, ovino
(24% de la ración)
Por diferencia, ovinos
(15% de la ración)
--

43,7

57,4
21,6

13,4

66,8
85,6

-

90,0
0

-

-
Maymone et al, 1961

Theriez, Boule, 1970

     "           "
Pulpa agotadaPor diferencia, ovinos
(21% de la ración)
-69,428,0--Theriez, Boule, 1970
Orujo brutoIn vivo, en ovinos
In vivo, en ovinos
In vivo, por diferencia en ovinos
-
-
In vivo, por diferencia en ovinos
-
-
32,9
-
-
-
30,8
-
35,4
26,2
31,0
45,7
6,6
-
24,5
10,0
9,0
23,6
65,5
86
57,7
89,6
89,2
75,2
28,4
0
29,6
-
29,6
-
Kellner, 1924
Meade, Guilbert, 1927
Boza, Varela, 1960
Boza et al, 1970
    "    "   "      "
Theriez, Boule, 1970
Orujo parcialmente deshuesado, grasoPor regresión, ovinos
Directo, ovinos
Por diferencia, ovinos
41,9
-
-
49,9
37,2
21,6
32,5
19,4
15,5
91,5
84,1
85,5
22,2
33,6
12,8
Ben Hamouda, 1975
Maymone, Carusi, 1935
Maymone, et al, 1961
Orujo parcialmente deshuesado, agotadoPor diferencia, ovinos
  "          "            "
  "          "            "
Por regresión, ovinos
Directo, ovinos
     "           "
     "           "
-
-
Por diferencia, ovinos
-
-
-
-
-
43,0
48,1
30,5
36,4
-
-
19,1
36,7
50,5
57,4
-
-
-
54,0
50,0
32,2
39,6
48,0
18,8
-
36,7
51,9
57,6
10,1
14,0
46,0
35,9
32,2
38,8
29,0
52,1
8,0
25,4
15,8
9,9
11,0
67,9
60,9
56,0
-
80,2
81,8
77,4
77,8
27,6
88,9
74,1
88,0
90,5
11,1
17,9
28,0
36,4
47,3
22,5
39,1
47,9
16,6
7,0
-
57,0
66,4
Maymone et al, 1961
        "        "  "      "
Maymone, Carusi, 1935
Nefzaoui, 1978
Nefzaoui, Abdouli, 1979
Nefzaoui, 1980
Nefzaoui et al, 1982
Eraso et al, 1978
    "      "  "      "
Valamotis, 1983
Accardi et al, 1979
Duranti et al, 1978
     "      "   "     "

De la experiencia adquirida se desprende que a veces es difícil clasificar con exactitud de qué orujo se trata, y las condiciones de los ensayos no siempre están claramente definidas y además corresponden a años diferentes, productos de diverso origen etc., lo que con frecuencia crea problemas para la interpretación de los resultados obtenidos.

No obstante, pueden formularse las conclusiones generales siguientes:

2.5.2 Ingestión

Los datos disponibles son escasos y se refieren fundamentalmente a los orujos parcialmente deshuesados, sean agotados o no (Nefzaoui, 1983; Boza y otros, 1970; Eraso y otros, 1978). Los orujos como tales son poco apetitosos y se consumen poco. En la mayor parte de los ensayos descritos, la melaza de remolacha representaba del 8 al 10 por ciento (y a veces hasta el 30 por ciento). En tales condiciones, las raciones que tienen una parte más o menos importante (20 a 83 por ciento) de orujos se ingieren muy bien:

2.5.3 Degradabilidad

Los orujos de aceituna, que tienen un alto contenido de lignocelulosa, se degradan, según Nefzaoui (1983), muy lentamente, y los valores máximos que se alcanzan son muy reducidos (el 32 por ciento de la MS se degrada después de haber permanecido 72 horas en el rumen, en el caso del orujo tamizado agotado). Las proteínas también se degradan poco porque del 75 al 90 por ciento del nitrógeno está unido a la parte de lignocelulosa, lo que hace que la solubilidad del nitrógeno sólo sea del 2,3 por ciento (N soluble como porcentaje del N total) en el caso de orujo bruto y del 0,2 al 0,4 por ciento en el caso de los orujos tamizados.

2.5.4 Características bioquímicas en el rumen

Los pocos datos de que se dispone proceden de trabajos realizados en Túnez por Nefzaoui y otros (1979, 1982) en relación con el orujo agotado tamizado.

2.5.5 Comportamiento alimentario

Las características físicas de los orujos tamizados agotados (partículas de 1 a 4 mm) no los emparenta directamente con los forrajes bastos (paja, heno). Sin embargo, estos orujos permiten una rumia y una ingestión completamente normales e idénticas a las del heno picado (Cuadro 8). Este aspecto favorable de los orujos es consecuencia de su riqueza en elementos estructurales (contenido elevado de componentes de pared celular y sobre todo de lignocelulosa).

Cuadro 8: Comportamiento alimentario de los ovinos de raza Texel a los que se administra orujo agotado y tamizado (Nefzaoui y otros, 1982)

 Heno picado (1)Heno granulado(1)Orujo (2)Orujo granulado (3)Orujo con 4% de soda granulada (4)Orujo con 3% de NH3 (5)
Tiempo de ingestión %20,4014,8019,19,014,116,7
Tiempo de rumia %32,906,1036,430,428,832,1
Número de raciones de rumia nrr½día--709,0494,0436,0574,0
Duración de la ración
(segundos)
--44,053,057,048,0
DUI, minutos½g MSi½p0,75--3,21,1,72,7
DUR, minutos½g MSi½p0,75--6,23,83,45,2
Ración unitaria de rumia (nrr½g MSi½p0,75)--8,514,33,66,5

1) Según Y. Ruckebusch y J.P. Marquet, 1963.
2) Orujo con un 8 por ciento de melaza de remolacha y 100 g de cebada triturada, consumo ad libitum (seis ovinos, duración de registro de 12 días).
3) Orujo con el 8 por ciento de melaza de remolacha y el 1,5 por ciento de urea, posteriormente granulado. Distribuido solo, consumo ad libitum - Idem 2.
4) Orujo tratado previamente con 40 g de NaOH kg - Idem 2
5) Orujo tratado previamente con un 3 por ciento de amoníaco gaseoso - Idem 2
    DUI : duración unitaria de ingestión
    DUR : duración unitaria de rumia.

2.6 Posibilidades de mejoramiento del valor nutritivo de los orujos

Como en el caso de la paja, es sobre todo el tratamiento con álcalis el que ha sido objeto de más investigaciones.

2.6.1 Tratamiento con soda

Las pequeñas cantidades de soda, que son inferiores al 4 por ciento, sólo tienen efectos limitados en la digestibilidad in-vitro de la materia seca. La digestibilidad aumenta gradualmente hasta alcanzar valores del 50 al 70 por ciento cuando se emplean cantidades del 6 al 8 por ciento de soda (Abdouli, 1979; Nefzaoui, 1979). El lavado y la filtración del orujo para eliminar el exceso de soda reduce la digestibilidad.

El tratamiento de los orujos grasos con soda puede entrañar la formación de jabón por saponificación. Este fenómeno también ha sido destacado por Karalazoo (1979). De ahí la necesidad de tratar únicamente los orujos agotados o de utilizar álcalis (Na2CO3, NH4OH), que no provocan reacciones de saponificación.

a) Influencia del tratamiento en la composición química:

Aparte del aumento previsible del contenido de cenizas, el tratamiento modifica sobre todo el contenido de componentes de pared celular (Cuadro 9) y de la fracción nitrogenada vinculada al ADF.

Cuadro 9: Contenido medio de components de pared celular del orujo tamizado agotado se haya tratado o no con el 4 por ciento de soda (6 por ciento de la MS) (Nefzaoui, 1979)

 No tratadoTratado (6% de NaOH½MS)
NDF
ADF
ADL corregido
Hemi celulosa
Celulosa
ADF-N½N total, %
60,1
49,9
26,8
10,2
23,1
94,9
47,2
38,8
17,5
8,3
21,3
74,6

b) Influencia en la utilización digestiva:

La degradabilidad de las proteínas y de la materia seca mejora. La digestibilidad in-vivo de la materia seca y, sobre todo, la de las proteínas y de la celulosa bruta aumentan (Cuadro 10).

Cuadro 10: Influencia del tratamiento con soda (tratamiento industrial) en la digestibilidad “in-vivo” de los orujos tamizados agotados

Método de distribuciónTratamientoCoef. de utilización digestiva aparente
MSMOMADCBNDFADFADLH.C.Cel.
Distribuido solo, carneros negros de Thibar (1)No tratado
Tratado con 4% de NaOH
48
52
50
52
32
 43
47
55
     
Con melaza de remolacha granulada distribuida con 100 de heno y 1,5% de urea, ovinos Texel (2)No tratado
Tratado con 4% de NaOH
31
35
32
36
39
46
23
33
24
33
18
26
14
23
49
62
26
29
Concentrado de 40% de orujo, 49% de cebada, 8% de melaza de remolacha y 3% de minerales, carneros negros de Thibar (1)No tratado
Tratado con 4% de NaOH
Tratado con 4% de NaOH + 1,5% de urea
68
74
71
70
75
74
59
65
70
49
61
58
     

1) Orujo tamizado agotado con el 26 por ciento de CB, Nefzaoui, A. y H. Abdouli, 1979.
2) Orujo tamizado agotado con el 14 por ciento de CB, Nefzaoui, A. et al, 1982

La ingestión, que ya es importante, no aumenta. En cambio, el consumo de agua por el animal se duplica con creces y la excreción de orina se triplica también con creces.

2.6.2 Ensilado con álcalis

Estudios realizados en microsilos (1,51) han demostrado que la digestibilidad “in-situ” mejora de manera importante utilizando grandes dosis de soda (8 por ciento) y es superior a la obtenida con el amoníaco (Cuadro 11).

Cuadro 11: Digestibilidad “in-situ” de ensilados de orujos tamizados agotados y tratados con álcalis (A. Nefzaoui y otros, 1982)

CUD aMSMOADFSNT
Testigo

Amoníaco 2%
       "        4%
       "        6%
       "        8%

51,68
60,25
58,32
63,04
64,28

51,23
61,53
60,36
63,86
65,34

36,73
45,88
38,89
48,18
49,87

59,32
81,34
83,80
86,90
89,54
Soda 4%
    "   6%
    "   8%
62,86
62,46
78,51
62,00
60,55
77,67
46,63
47,17
62,04
72,84
73,93
79,35

2.6.3 Tratamiento con amoníaco gaseoso

Se han almacenado en sacos de plástico, con inyección de NH3 (3%), orujos tamizados tratados previamente con melaza. De ello se deriva un aumento importante de su valor nutritivo (Cuadro 12), en particular por:

Cuadro 12: Digestibilidad, ingestión y proporción de nitrógeno de los orujos tamizados agotados, ensilados con amoníaco gaseoso* (A. Nefzaoui y otros, 1983)

 Orujo no tratadoTratado con 3% de NH3
Digestibilidad (%)
MS
MO
SNT
MG
CB
NDF
ADF
ADL
Hemicelulosa
Celulosa
Ingestión g MS½día½P0,75

36
40
29
77
39
32
25
13
60
43
99

41
43
55
86
49
39
32
19
63
49
98
Proporción de nitrógeno: g N½día½p0,75
Ingerido
Fecal
Urinario
Retenido

1,903 (100%)
1,353 (71%)
0,240 (13%)

3,610 (100%)
1,632 (45%)
1,147 (32%)

* Experiencia factorial cruzada, con corderos de la raza Texel, a los que se distribuyen orujos a voluntad y 100 g de avena por día.

2.6.4 Ensilado de orujos tamizados con excrementos de aves

Los ensayos realizados por Nefzaoui y Deswysen (1982) han demostrado que se conservaban muy bien los productos ensilados con un 70 por ciento de excrementos de aves que se habían acumulado durante menos de 21 días y el 30 por ciento de orujos tamizados agotados (según los criterios de apreciación del FLIEG).

2.6.5 Tratamiento con Na2 CO3

Vaccarino y otros (1982) han comparado tratamientos con distintas dosis de NaOH y Na2CO3 en orujos parcialmente deshuesados durante 150 minutos a una temperatura de 70°C antes de añadir el disolvente. Ambos métodos mejoran considerablemente la digestibilidad in-vitro, aunque la soda resulta más eficaz (Cuadro 13).

Cuadro 13: Efectos del tratamiento de los orujos parcialmente deshuesados con NaOH o Na2CO3 en la digestibilidad in-vitro (Vaccarino y otros, 1982)

 TestigoNa OH, %Na2 CO3 %
2,95,78,63,87,211,4
Digestibilidad de la materia orgánica15,820,732,350,826,940,647,9
Digestibilidad de la materia seca9,78,827,231,95,139,446,5

2.6.6 Tratamiento mecánico

El único tratamiento mecánico práctico consiste en la separación parcial de la cáscara del hueso por tamizado o por corriente de aire. Con este tratamiento se reduce considerablemente la proporción de celulosa bruta (véase Cuadro 5) y de celulosa pura, pero paradójicamente muy poco la de lignina (véase Cuadro 6).

Del Cuadro 7 no se desprende claramente que el deshuesado parcial tenga efectos en la digestibilidad de los orujos no agotados ya que los resultados son tan escasos y heterogéneos que no se pueden sacar conclusiones precisas.

Sin embargo, estudios recientes (Nefzaoui y otros, 1983 - resultados no publicados), en los que se comparan orujos agotados no tamizados, tamizados y tratados con distintos álcalis (Figura 5), demuestran que el tamizado sólo mejoraría:

En consecuencia, parece que el tamizado es un método de tratamiento muy eficaz para mejorar el valor nutritivo de los orujos agotados.

2.6.7 Tratamientos biológicos

Se han realizado pocos experimentos en este campo. Sin embargo, Karapinar (1977) y Worgan (1978) han comunicado que los tejidos contenidos en los orujos de aceituna son resistentes a la degradación microbiana. La realización de cultivos de hongos (funghi) en el residuo no han reducido de manera apreciable el contenido en fibras, incluso después de un tratamiento con álcalis. El cultivo de Sporotriclum pulverulentum en el residuo tamizado ha aumentado el contenido en sustancias nitrogenadas, pero no disminuye apreciablemente el contenido de celulosa bruta (Cuadro 14).

Figura 5: Efecto del tamizado del orujo agotado en comparación con diversos tratamientos con álcalis (Nefzaoui y otros, 1983)

Digestibilidad (en porcentaje) “in sacco” de la MO

Figura 5

Digestibilidad (en porcentaje) “in sacco” de las SNT

Figura 5

OTA = Orujo tamizado agotado
ONTA = Orujo no tamizado agotado

Cuadro 14: Acción de los hongos (S. pulverulentum) en los orujos de aceituna

TratamientoRendimiento g/100 g de subproductoComposición
Materia secaSNTSNTCelulosa bruta
Orujo1007,37,342
Orujo molido, tamizado514,89,421
Cultivo de hongos43,56,314,520,7
Tratamiento con álcalis + hongos348,52515

Fuentes: Karapinar (1977); Worgan (1978),
citados por Zoiopoulos, 1983.

2.7 Utilización de los orujos de aceituna en la alimentación animal

Tradicionalmente, los orujos de aceituna, en sus distintas formas, se utilizan en la mayor parte de los países productores. Es curioso que se hayan realizado pocos estudios a fondo para determinar el efecto que sus distintos grados de incorporación tienen en las raciones de los animales.

2.7.1 Los orujos brutos

Se utilizan en Túnez mezclados con salvado o incluso con cactos como alimento de los dromedarios durante gran parte del año o de los ovinos durante los períodos difíciles. Sin embargo, se han realizado muy pocos ensayos con este tipo de orujo.

2.7.2 Los orujos grasos parcialmente deshuesados

a) Para ovinos Bloemeyer (1977), utilizando un concentrado que contenía de 0 al 40 por ciento de orujo con melaza-urea, ha obtenido aumentos de peso de 125 a 101 g½día en ovinos de pastoreo a los que se distribuyó 500 g de heno y el concentrado en función del peso en vivo (20 a 30 g½kg de peso en vivo).

Sustituyendo de 0 al 30% de la cebada por orujo en las raciones de los ovinos, Ben Ameur y Ben Hamouda (1975) han obtenido aumentos de peso muy similares, pero ligeramente decrecientes (de 274 g½día a 226 g½día), pero con un índice de consumo superior.

Accardi y otros (1979) han sustituido el 30 por ciento de heno de sulla por el 30 por ciento de orujos en raciones para corderos que estaban constituidas por un 38 por ciento de maíz y un 30 por ciento de torta de soja, con lo que obtuvieron un aumento de peso ligeramente inferior (191 g½día frente a 209 g½día) y un índice de consumo superior (4,91 frente a 4,24).

En Cerdeña, Piccarolo y Paschino (1978), Paschino y Piccarolo (1980), Dattilo (1980) y Dattilo y Congiu (1979) introdujeron orujos de aceituna tamizados (alrededor del 20 por ciento) en gránulos que contenían otros subproductos, con lo que obtuvieron una producción de leche de oveja comparable a la obtenida en pastoreo.

Giouzelgiannis y otros (1978) introdujeron el 15 y el 25 por ciento de orujos (procedimiento Kourgi) en la ración de corderos y no registraron diferencias apreciables en lo referente al aumento de peso, la ingestión o la calidad del canal, y sólo el índice de consumo fue superior a nivel del 25 por ciento de orujos.

b) Para bovinos Ensayos realizados en Italia (Piccinnini, 1906; Gugnoni, 1920; Maymone y Giustozzi, 1935) parecen indicar que los orujos tienen un efecto positivo en el contenido de sustancias grasas de la leche de vaca, con una producción de leche (4% de MG) sensiblemente equivalente, cuando las vacas reciben de 1,8 a 4 kg de orujos½día.

En Grecia, Belibasakis (1982) incluyó en el concentrado alimenticio para las vacas lecheras una proporción del 10 al 20 por ciento de orujos y no observó diferencias apreciables en la producción y la composición de la leche.

Maymone y Giustozzi (1935), utilizando vaquillas de 295 kg a las que se alimentó durante 60 días con heno y ensilado de alfalfa más harina de maíz u orujos (con el 8 por ciento de MG), obtuvieron aumentos de peso, respectivamente, de 630 g½día (habiéndose consumido 922 g½día de maíz) y 370 g½día (cuando se consumieron 775 g½día de orujos).

2.7.3 Los orujos parcialmente deshuesados agotados

a) En los ovinos

En Túnez, Nefzaoui y Ksaier (1981) han utilizado estos orujos en raciones de “hambre” constituyendo de 0 al 35 por ciento o el 70 por ciento del concentrado distribuido a ovejas primero gestantes y luego lactantes, además de 300 g de paja por día (Cuadro 15) durante 17 semanas. Los resultados obtenidos en las ovejas que recibieron un 35 por ciento de orujos fueron comparables a los de los testigos. Las que recibieron una proporción del 70 por ciento de orujos perdieron el 20 por ciento del peso, el peso de los corderos al nacer fue menor y el índice de mortalidad de éstos fue muy superior (61 por ciento frente al 29 por ciento). Es importante observar que esa ración permitió no sólo sobrevivir a las madres sino también recuperar un número nada despreciable de corderos durante un período de más de 4 meses.

Cuadro 15: Alimentación de ovejas gestantes, desde la monta hasta el parto, en Túnez central (Ousseltia), con raciones a base de orujos tamizados agotados (A. Nefzaoui y H. Ksaier, 1981)

 Testigo35% de orujo70% de orujo
Composición de las raciones (%)
Orujo
Salvado
Melaza
Urea
Minerales

0,00
70,00
26,00
2,00
2,00

35,00
35,00
26,00
2,00
2,00

70,00
0,00
26,00
2,00
2,00
Resultados
Número de animales
Peso inicial en kg
Peso final en kg
Peso de los corderos al nacer
Ingestión en gramos de MS/día/P0,75

20
52,35
57,30
3,50
76,00

20
52,15
57,33
3,30
105,00

20
52,45
42,77
2,60
85,00

1 Las ovejas son de raza barbarina con una edad media de seis años.
2 Los animales reciben 300 g/día de paja y las raciones a voluntad.

b) En bovinos

La sustitución en la alimentación de bovinos jóvenes de heno de veza - avena de calidad mediocre por 0-20-40-60 por ciento de orujo agotado tamizado supuso una disminución constante de la tasa de aumento de peso, que fue respectivamente de 536-260-190-39 g/día (Bougalech, 1980). En este caso también, la inclusión de una proporción tan elevada como el 60 por ciento de orujo en la ración permitió garantizar la manutención de los animales.

En Libia, O'Donovan (1983) utilizó 32 novillas Hollstein de 284 kg a las que se administró paja a voluntad (5,7 kg/día) y 2,7 kg de un concentrado que contenía 0-15-30-45 por ciento de orujos parcialmente deshuesados agotados, pero no hubo diferencias en el aumento de peso, que fue, respectivamente, de 688, 706, 695 y 698 g/día. En otro experimento con 12 novillas y 12 novillos Hollstein que pesaban 130 kg y a los que se distribuyó un mínimo de paja (0,6 kg/día) y 3,3 kg de un concentrado que contenía 0-15-30 por ciento de orujos se registraron aumentos de peso, respectivamente, de 1.029, 975 y 813 g/día.

2.7.4 Los orujos parcialmente deshuesados agotados tratados con álcalis

El tratamiento con soda de los orujos agotados tamizados permite mejorar la digestibilidad (véase párrafo 2.5.1).

Cuadro 16: Engorde de ovinos de raza barbarina con orujos tamizados tratados o no con soda (A. Nefzaoui y H. Abdouli, 1979)

 Testigo40% de orujo no tratado40% de orujo tratado con 4% de NaOH40% de orujo tratado con 4% de NaOH + urea
Composición de las raciones
Orujo no tratado
Orujo tratado con 4% de NaOH
Cebada
Melaza
Urea
Minerales + vitaminas

-
-
89,00
8,00
-
3,00

40,00
-
49,00
8,00
-
3,00

-
40,00
49,00
8,00
-
3,00

-
40,00
47,40
8,00
1,60
3,00
Resultados
Peso inicial en kg
Peso final en kg
Aumento de peso g/día
Ingestión, g MS/día/P0,75
Indice de consumo, kg MS/aumento en kg

41,94
54,18
175,00
89,00
9,29

37,49
49,31
169,00
109,00
10,94

37,64
52,09
206,00
108,00
9,04

36,78
51,04
203,00
110,00
9,24

1 Cada lote está formado por 10 ovinos machos de edades entre 15 y 16 meses.

2 Los animales reciben 200 g de heno de veza-avena por día y los concentrados a voluntad.

3 El ensayo duró 90 días.

La sustitución del 40 por ciento de cebada por el 40 por ciento de orujo no tratado en el concentrado distribuido ad libitum a ovinos que recibían además 200 g/día de heno no influyó en su proceso de crecimiento, mientras que el tratamiento con el 4 por ciento de soda permitió aumentar el peso y mejorar el índice de consumo. La adición de urea no modificó este resultado (Cuadro 16). Sin embargo, las diferencias no son espectaculares. Ello puede deberse a que la proporción de orujo sigue siendo limitada (40 por ciento de la ración), a que el resto de la ración es bastante rica (alrededor del 50 por ciento de cebada y el 8 por ciento de melaza) y a que la proporción de soda es sin duda demasiado reducida (sólo el 4 por ciento) (véase el párrafo 2.5.2). En las circunstancias económicas actuales es dudoso que este tratamiento con soda resulte rentable por este mejoramiento limitado de los resultados.

2.7.5 Otras perspectivas

Las previsiones de tratamiento de orujos agotados para la producción de furfurol en Túnez y sin duda en otros países debería entrañar un aumento de la proporción de orujos agotados parcialmente deshuesados. Sería posible - y deseable - efectuar el deshuesado en las fábricas de extracción y no en la fábrica de furfurol, ya que de esa manera se podrían reducir los costos de transporte y mantener los orujos más cerca de las zonas de cría y, en consecuencia, hacerlos más facilmente disponibles para los ganaderos.

2.8 Conclusiones

  1. Los orujos son alimentos bastos lignocelulósicos por:

  2. Los orujos probablemente no contienen sustancias tóxicas o inhibidoras. Su mala utilización digestiva y metabólica se debería principalmente a su alto grado de lignificación y a los procesos tecnológicos empleados en la extracción del aceite, en los que son objeto frecuentemente de un fuerte calentamiento.

  3. Administrados solos:

  4. La película y las cáscaras son poco digestibles. El valor nutritivo del orujo mejora con el tamizado, que elimina parcial o totalmente las cáscaras. Un tamizado “a fondo” que no dejara más que un producto muy ligero constituido principalmente por la película tendría un efecto contrario. En la operación del tamizado se deben conservar los trozos de la almendra triturada, que son particularmente ricos en proteínas y son muy digestivos.

  5. Su utilización sin ningún tipo de tratamiento previo puede garantizar:

  6. Algunos tratamientos pueden mejorar el valor nutritivo de los orujos:

    1. El tratamiento industrial con soda, a pesar de que produce un indudable mejoramiento, sigue teniendo un alcance limitado, ya que las inversiones son elevadas;
    2. el tratamiento mediante ensilado, con dosis del 6 al 8 por ciento de soda, sería eficaz, pero también demasiado costoso;
    3. el tratamiento con amoníaco gaseoso (ensilado) sería más prometedor por el hecho de mejorar la digestibilidad y representar un aporte de nitrógeno suplementario.

  7. Indudablemente sería rentable complementar los orujos con una fuente nitrogenada de buena calidad y de bajo costo, y los primeros ensayos con excrementos de aves parecen prometedores.

  8. En el Cuadro 17 se resumen las posibilidades de utilización de los orujos de aceituna en la alimentación de los animales. Dado el estado actual de los conocimientos parece que todos los tipos de orujos pueden utilizarse sin riesgo ad libitum en operaciones de salvaguardia, pero ninguno puede garantizar un tipo de producción intensiva.

Cuadro 17: Posibilidades de utilización de los distintos tipos de orujo en la alimentación animal

Tipo de orujo MantenimientoProducción moderadaProducción intensiva
Tipo de producción    
Orujo agotadoad libitum + forraje + ..---
Orujo brutoad libitum + forraje + ..ad libitum + forraje + ..--
Orujo tamizado grasoad libitum + forraje + ..<30%<30%-
Orujo tamizado agotadoad libitum + forraje + ..ad libitum + forraje + ..<40–50%-
Pulpaidem orujo tamizado graso
  1. No se conoce prácticamente ningún experimento con porcinos, a no ser el de Maymone y Durante (1945), que sustituyeron el 50 por ciento del maíz de una ración concentrada que contenía el 70 por ciento, con lo que obtuvieron aumentos de peso, respectivamente, de 940 g½día con el 70 por ciento de maíz, y 770 g½día con el 50 por ciento de orujos grasos (20 por ciento de MG) parcialmente dehuesados, y el 20 por ciento de maíz durante un período de 64 días con cerdos que pesaban alrededor de 16 kg al principio. Sin embargo, no se han confirmado estos resultados ulteriormente con otros ensayos, y son difíciles de explicar habida cuenta del contenido de lignocelulosa de los orujos.


Página precedente Inicěo de página Página siguiente