Esta sección describe la experiencia actual en la evaluación de los recursos de PFNM. Comprende el inventario, la medición del rendimiento, los estudios de crecimiento, la determinación del aprovechamiento y el seguimiento. |
Esto se denomina frecuentemente `inventario cuantitativo'.
La cuantificación de los recursos puede significar algo diferente para un ecologista que para un forestal, y así sucesivamente. Pero las definiciones se reducen a lo siguiente: Enumeración biométricamente rigurosa de la abundancia y distribución de las poblaciones de los recursos.
Hay muchos diseños muy distintos debido en parte a que existen muchos tipos muy diferentes de PFNM, vegetales y animales. Aunque los métodos para inventariarlos parecen ser muy diferentes, todos ellos contienen cuatro elementos básicos, como se expresa en la Figura 3. En la Sección 5, se analiza con más detalle cómo seleccionar una entre la extensa variedad de diferentes metodologías que se han empleado en cada etapa del diseño del inventario cuantitativo de PFNM.
Las metodologías empleadas para el inventario de PFNM son adaptación de una extensa variedad de experiencias disponibles en las ciencias biológicas y zoológicas. El inventario de PFNM ha utilizado relativamente pocos de los métodos disponibles debido a que:
Figura 3: Estructura básica de un diseño de inventario cuantitativo
Nivel 1 Definición de la población: área a explorar, especies a estudiar, etc. Nivel 2 Diseño del muestreo: decisión sobre la forma de situar las parcelas, es decir, mediante el uso de diseños aleatorios o sistemáticos. Nivel 3 Configuración de las parcelas: decisión sobre las dimensiones de las parcelas, lo que depende de las características de la especie del recurso Nivel 4 Método de enumeración: esta decisión depende de las características del producto. |
Las metodologías pueden adaptarse de acuerdo con la especie que se esté estudiando y con la disponibilidad de tiempo, dinero y recursos humanos. El nivel de adaptación depende también de la importancia de los PFNM en el inventario. Pueden distinguirse tres contextos claros:
Hay pocos inventarios para una sola especie; es un proceso costoso, por lo que el producto tiene que ser muy valioso (normalmente para exportación) o estar sujeto a una legislación específica. Incluso entonces, pocos estudios pretenden realmente cuantificar la especie in situ, y las metodologías raramente se adaptan específicamente a las características de la especie.
Se han identificado seis razones principales para realizar el inventario de una sola especie:
En el Cuadro 7, se muestran ejemplos de los diseños utilizados en estos estudios. En resumen, aunque los inventarios de un solo recurso constituyen una buena oportunidad para la elaboración de protocolos de inventarios fiables de PFNM, se ha realizado un trabajo insuficiente para conseguir grandes progresos.
Cuadro 7: Diseños de inventarios utilizados para estudios de un solo recurso
Tipo de producto |
Diseño de muestreo |
Configuración de las parcelas |
Enumeración |
Autor |
Corteza de árbol |
Sistemático (1%) |
Cuadrado de 50x50 m |
Diámetro de árboles >10 cm d |
Acworth et al., 1998 |
Exudación de árbol |
Recorrido aéreo, 2 vuelos |
11 posiciones posibles |
Estimaciones visuales |
Zieck, 1968 |
Frutos de árbol |
Fajas subjetivas |
Fajas de 10 m de anchura y hasta 1 Km. de longitud |
Diámetro de los árboles >10 cm d |
Shankar et al., 1996 |
Seis fajas sistemáticas con parcelas alineadas radiales (parcelas cada 100 m en una faja de 3 Km. de longitud) |
Cuadrante con centro en un punto |
Diámetro de los árboles >3 cm y tocones >50 cm |
Schreckenberg, 1996 | |
Fibra de palma |
Estratificado: Oxisoles y podsoles: sin información sobre el diseño de parcelas Suelos gley: parcelas en líneas de 600 m de longitud, situadas a 20 m entre parcelas |
Oxisoles y podsoles: rectangular 100x50 m Gley: método del cuadrante con centro en un punto |
Se mide la altura de todos los pies de la parcela |
Lescure et al., 1992 |
Rotenes |
Selección subjetiva de los sitios |
Parcela única de 3 ha. (300x100 m) dividida en subparcelas de 10x10 m |
Se cuentan las matas y tallos |
Stockdale, 1994 |
Muestreo en múltiples etapas Selección aleatoria de 32 a partir de 123 bloques primarios |
Se seleccionan tres bloques secundarios de 1 ha. de cada bloque primario seleccionado |
Se cuentan las cañas comerciales y no comerciales por parcela |
Sharma & Bhatt, 1982 | |
Fibra herbácea |
Fajas con parcelas alineadas, sin información sobre distribución |
Parcelas circulares de 50 m² cada 10 m. |
Se cuentan y se establece el % de cubierta de plantas en la parcela |
Cevallos (sin fecha) |
Tubérculos |
Cuatro estaciones; sin información sobre la localización de las parcelas de 4 a 9 fajas en cada estación |
Fajas de 4 m de anchura y hasta 2,5 Km. de longitud |
Conteo de los tallos de batata |
Hladik & Dounias, 1993 |
Grandes aves |
Rastros y huellas existentes (de cualquier forma - sesgados) |
180 fajas de anchura variable |
Conteos de individuos |
Silva & Strahl, 1991 |
Tapir |
Fajas lineales situadas de forma aleatoria Fajas fluviales |
Fajas de intercepción lineal |
Indirectos (huellas) |
Fragoso, 1991 |
En los estudios analizados las especies múltiples son una variedad de PFNM, y la única finalidad del inventario suele ser el conseguir información cuantitativa para ayudar a la planificación de la ordenación.
Utilización de métodos censales para áreas pequeñas
Algunos inventarios de PFNM han utilizado métodos desarrollados para el inventario de existencias (el censo de los árboles explotables para madera en un área de aprovechamiento). Estos métodos se pueden utilizar para medir la abundancia relativa de PFNM en diferentes tipos de uso del suelo (p.ej. Gronow & Safo, 1996). Aunque los métodos de censo proporcionan datos realmente exactos, su uso tiene inconvenientes:
Utilización de técnicas de estimación rural participativa (ERP)
(p.ej. Poffenberger et al., 1992).
Los métodos basados en la ERP se emplearon en el manual de Poffenberger para dirigir y seguir el inventario en el proceso de ordenación forestal colectiva (OFC). de la India. Éste recomienda una mezcla de métodos para clasificar la abundancia relativa y el muestreo de cuadros y sin parcelas para observar el cambio de la vegetación. Aunque las recomendaciones que se hacen son valiosas, son más bien amplias y no incluyen protocolos detallados.
Utilización de las técnicas básicas de parcelas de muestreo forestal (p.ej. Cunningham, 1996a).
Este método se diseñó para poder realizar la cuantificación de recursos vegetales fundamentales - árboles y bambú - como apoyo a la planificación de la ordenación de un parque nacional de Uganda. En este estudio en particular sólo se emplearon tres o cuatro parcelas en cada uno de los tres sitios elegidos. La falta de replicaciones significa que los datos pueden ser imprecisos, inexactos y sesgados. Los resultados son más apropiados para una planificación estratégica que para una planificación de ordenación detallada.
Muestreo a través de terrenos forestales y no forestales
(p.ej. Dijk, 1999a).
Los estratos de muestreo en el sur de Camerún se identificaron utilizando fotografías aéreas. Los datos recogidos en las parcelas de cada tipo de hábitat se emplearon para preparar tablas de densidad de masas de PFNM agrupados por tipos de productos y valor comercial y para cartografiar su distribución. El observar los PFNM fuera de los terrenos forestales es importante porque muchos PFNM proceden realmente de áreas desmontadas (terrenos agrícolas en áreas forestales despejadas o en regeneración). Estas áreas se evalúan con más frecuencia utilizando una amplia variedad de métodos participativos como el descrito en la Sección 4.
Al hacer un inventario de existencias para la ordenación maderera:
Inmediatamente antes de las operaciones de explotación, se sitúa cada árbol maderable en un tramo de ordenación forestal, se identifica, se enumera y se mide. Esto normalmente da una enumeración al 100 por ciento en fajas consecutivas del tramo. Los datos del estudio de existencias permiten el cálculo del volumen de madera que se puede aprovechar de forma sostenible y se seleccionan los árboles a cortar de acuerdo con ello para garantizar futuros aprovechamientos.
Inclusión de los PFNM en inventarios para otros fines
El creciente interés por los PFNM está impulsando una tendencia a favor de la inclusión de los PFNM en inventarios para otros fines.
Por ejemplo, los PFNM se pueden incorporar en estudios rutinarios de existencias de áreas de explotación maderera comercial (p.ej. Smith, 1995). Es corriente que el inventario forestal tradicional se esté convirtiendo en un "inventario de recursos de finalidad múltiple" (IRM). Esto permite mejorar la eficacia económica, y reconocer la extensa y creciente variedad de productos y servicios para los que se ordena el bosque. La experiencia en los bosques estatales es importante en este caso, ya que la autoridad forestal generalmente tiene la responsabilidad de mantener información actualizada sobre recursos forestales importantes, que pueden incluir PFNM.
Los PFNM se incluyen comúnmente en el inventario forestal de rutina (normalmente cada 10 a 20 años) en el norte y este de Europa, donde las bayas, las setas, las hierbas medicinales y las resinas son tradicionalmente importantes (Lund et al., 1998). Sin embargo, existe poca bibliografía fuera de estos países. Asimismo, aunque el inventario de existencias proporciona información útil y biométricamente correcta sobre la distribución, abundancia y potencial de los PFNM en las áreas a explotar para madera, no tiene en cuenta las dificultades para encontrar especies como animales, pequeñas herbáceas o epifitas, o su carácter estacional.
Lectura adicional sobre IRM: Lund, 1998
En las áreas tropicales los componentes de PFNM de los IRM se centran en:
Productos tradicionales de exportación, como el bambú y el rotén. La evaluación nacional de los recursos por los organismos forestales gubernamentales se realiza con frecuencia, especialmente en el sudeste de Asia y en la India, donde la explotación es intensa, con interés creciente en África occidental, tal como se muestra en los Estudios de casos 2 y 3.
Estudio de caso 3: Los PFNM en el inventario forestal nacional de Ghana En Ghana, se enumeraron los PFNM a partir de parcelas de 1 ha. (20x500 m) y se incluyeron rotenes, trepadoras y herbáceas. En este caso, a medida que las plantas se parecían menos a los árboles, los métodos de enumeración se iban haciendo cada vez más toscos, debido a la falta de asesoramiento para el estudio botánico. Por ejemplo, los tallos y las matas de rotén se contaron y clasificaron en categorías de juveniles, maduros y cortables mientras que la abundancia de herbáceas se representó con un simple conteo de matas. Los datos de las herbáceas son poco seguros porque es difícil determinar los límites de las matas en masas densas y el tamaño de las matas varía mucho entre especies. Como consecuencia de ello, los datos sobre herbáceas hubo que reducirlos a presencia o ausencia de la especie. Con la simple percepción del tanto por ciento de cubierta e incluso de la abundancia relativa, se habría obtenido una mejor medición de las cantidades. La información resultante de este inventario se pretendía que fuera utilizada por los responsables políticos y para las necesidades de información nacional e internacional quienes requerían interpretaciones orientadas a la ordenación. Esto se presentó en forma de cuadros y gráficos que ilustran sobre la distribución y abundancia de los PFNL por todo el país (véase el Anexo 3). Este tipo de análisis y presentación de los datos del inventario son relativamente raros. (Wong, 1998) |
Superación del mero enfoque maderero
Inventario cuantitativo de la madera.
A nivel general, el inventario consiste en contar los individuos interesantes en las parcelas o fajas. Los totales de las parcelas permiten estimar la densidad media de una cierta zona. Si se mide el diámetro de un árbol, se puede calcular el área basimétrica por árbol y sobre la base de los cuadros de rendimiento, se puede estimar el volumen por área.
Estos métodos son comunes, bien asimilados y general-mente, están incluídos en los cursos de instrucción forestal.
Lo normal es que los inventarios IRM los realice el personal forestal y la principal finalidad continúa siendo la ordenación maderera. Esto limita con frecuencia la variedad de productos e intereses, incluyendo la recreación o la agricultura, que se pueden incluir en los IRM. El centrarse en lo forestal puede limitar también la calidad de la evaluación de los PFNM, porque tiene sus inconvenientes:
Aunque los inventarios independientes para los distintos grupos de PFNM suelen ser imposibles, debido al coste y a las dificultades logísticas, para mejorar el valor de la información recogida debe haber cierto equilibrio y coordinación entre los diferentes elementos del IRM;. Por ejemplo, las líneas de inventario abiertas a través del bosque tropical para el inventario maderero podrían utilizarse también para el inventario de la fauna1. Aprovechando al máximo tales oportunidades se pueden reducir los costes y mejorar la información para la planificación del uso del bosque.
En muchos casos, las especies arbóreas de PFNM están incluidas en el inventario formal para madera. A veces es posible extraer y analizar los datos de PFNM de los registros de anteriores inventarios para madera.
Algunos inventarios madereros de una sola finalidad han sido interpretados de nuevo para obtener información sobre los PFNM, y demuestran que hay algunos datos útiles sobre PFNM en los inventarios forestales más antiguos (véase el Estudio de caso 4). Con una perspectiva de cuáles son los árboles que se encuentran en el área, se pueden hacer predicciones de qué otras plantas y animales estarán probablemente presentes.
De las secciones anteriores resulta evidente que los PFNM caen con frecuencia entre responsabilidades de distintas direcciones y conocimientos profesionales. Esto ha contribuido a lo siguiente:
Se han realizado algunos estudios piloto sobre metodologías para PFNM de origen vegetal, principalmente para algunos de los más importantes económicamente como el rotén, setas y plantas medicinales. El Recuadro 2 y el Estudio de caso 5 que se incluyen a continuación contienen algunos ejemplos. Los estudios han sido con frecuencia muy innovadores, pero hasta ahora hay pocas comparaciones entre distintos métodos. Lo que resulta evidente es que hay diferentes métodos que sirven para distintos tipos de PFNM, lo que complica aún más el desarrollo de metodologías normalizadas.
¿Qué es el rendimiento?
El "rendimiento" se refiere normalmente a la cantidad del producto disponible y útil para su recolección o aprovechamiento en un momento determinado (es decir, que puede utilizarse comercialmente). Sin embargo, puede significar también el potencial biológico total de una especie (es decir, cuánto crece allí realmente). La diferencia puede influir seriamente en las conclusiones de una evaluación, ya que la última definición es normalmente mucho mayor que la primera.
La medición de la disponibilidad de un producto se conoce generalmente como evaluación del rendimiento. Es la cuantificación de la cantidad de un producto que se puede aprovechar a partir de un área de bosque.
¿Cómo se realiza? En primer lugar, se mide la cantidad del producto en una pequeña muestra de población. Ésta se relaciona a continuación con una característica fácilmente medible de los individuos enumerados en el inventario general, utilizando modelos como las ecuaciones de regresión.
Medición de partes del producto. Los PFNM pueden ser casi cualquier parte de un vegetal o animal y cada uno de ellos tiene que medirse utilizando una técnica diferente. En consecuencia, hay en uso un gran número de técnicas distintas de enumeración; el Cuadro 8 da una idea de algunas de ellas.
Métodos de medición. Los métodos específicos son pocos, y hay poca normalización, incluso para el mismo tipo de la parte de la planta; por ejemplo, el Cuadro 8 contiene tres modos diferentes de medición del rendimiento en frutos. Tales diferencias pueden referirse a:
La decisión sobre una técnica de medición incluye, por tanto, la consideración del tipo de producto, sus características y los objetivos de la evaluación junto con el pragmatismo sobre lo que será útil. La Sección 5 da algunas directrices.
Cuadro 8: Ejemplos de técnicas utilizadas para la cuantificación del rendimiento del producto
Variable |
Metodología |
Fuente |
Rendimiento en frutos por estación |
Recipientes-trampa en el terreno. Se eligen cuatro árboles aislados, 15 parcelas de 1m² situadas aleatoriamente bajo la copa. Se registra cada 7 a 10 días el número de frutos intactos, predados, inmaduros y maduros. |
Peters, 1996a |
Rendimiento en frutos por estación |
Se cuentan los frutos in situ en los árboles de la muestra con intervalos frecuentes. Los árboles contados se marcan con pintura para evitar repetir los conteos. |
Peters, 1990 |
Frutos, hojas, etc. |
Muestreo de ramas de carácter aleatorio. Modelo de ramificación definido por segmentos numerados entre nudos de ramas. La trayectoria desde el tronco a la punta de la rama se elige mediante selección aleatoria en cada nudo. Los conteos de frutos, hojas, etc. se realizan en el extremo más distante de la trayectoria. Los resultados conjuntos de varias ramas elegidas aleatoriamente es un método no destructivo, preciso y estadísticamente fiable para estimar el rendimiento en frutos del árbol. Hay varios sistemas más refinados de este método, p.ej. selección de la trayectoria proporcional a la dimensión de los segmentos disponibles en cada nudo, muestreo de importancia. |
Gregoire et al., 1995 Jessen, 1955 Nguvulu, 1997 |
Hojas |
Modelo "tubular". Técnica de regresión no destructiva para estimar la biomasa y la superficie de hojas a partir del área de la sección transversal de la rama. El modelo "tubular" se basa en la observación de que la tasa de transpiración de la cubierta de copas es proporcional a la superficie de las hojas, la superficie de la sección transversal de la albura y la conductividad de los tejidos que transportan el agua. Por ello, el tamaño del tronco es proporcional a la masa y superficie de hojas. En consecuencia, se puede estimar la masa y la superficie de hojas a partir de la medición de la superficie de la sección transversal del tronco (nota: necesidad de ser muy exacto ~mm). Las ramas de la muestra se seleccionan sistemáticamente para representar las diferentes alturas de ramas. Análisis de regresión sin ninguna constante. |
Nygren et al., 1993 |
Hojas de palmera |
Se miden todas las hojas. Se cuentan las hojas parcialmente abiertas como una fracción de la hoja abierta. Se mide mensualmente la longitud de la hoja para seguir su desarrollo. |
Cunningham, 1988 |
Incremento del tronco de las palmeras |
Se cuentan las cicatrices de hojas con intervalos mensuales. Se cuantifica el crecimiento del tronco como incremento de la altura (cm) por cicatriz de hojas. |
Olmstead & Alvarez-Buylla, 1995 |
Edad de las palmeras |
Se cuentan las cicatrices de hojas, se supone un ritmo constante de producción de hojas para obtener estimaciones sobre la edad y el número de años para alcanzar alturas determinadas. |
Pinard, 1993 |
Tamaño del bulbo |
Medición de la anchura máxima de la mayor hoja de cada planta. Los análisis de regresión llevados a cabo con una muestra aleatoria de 50 plantas en cada sitio indican que la anchura máxima de la hoja más grande está estrechamente correlacionada con la superficie total de hojas. Esta superficie total ha demostrado ser un indicador del tamaño del bulbo. |
Rock, 1996 |
Biomasa de bambú |
Medición de las dimensiones de las matas sobre ejes octogonales a nivel del terreno, a 1 m y hasta la extensión plena de la cubierta. Se cartografían como elipses concéntricas. Se determina la biomasa como volumen del cono proyectado hacia arriba desde la base de la mata. Índice del sitio = _ del volumen de la mata/ densidad de la mata en la parcela. Superficie de matas del sitio = _ de las superficies de matas. |
Widmer, 1998 |
Peso de la carne de monte o de caza |
Se utilizan datos oportunistas de pesos de animales capturados en tres aldeas para suplementar el censo de fauna. |
Lahm, 1993 |
Aunque existen muchas formas de medir el rendimiento, la elección del plan de muestreo para elegir los individuos a medir es más reducida. El submuestreo de un pequeño número de individuos dentro de la muestra general del inventario es una forma usual, porque el hacer mediciones detalladas de rendimiento en cada elemento individual del inventario es una tarea dura. Hay dos formas principales de muestreo de los individuos que sirven para la medición del rendimiento.
Doble muestreo: se hace con independencia del inventario principal y no necesita utilizar las parcelas de este inventario. Utilizando una muestra más reducida e independiente, se hacen mediciones detalladas del rendimiento de individuos de la población. Los datos resultantes de estas mediciones se utilizan entonces para establecer modelos de rendimiento que se contrastan con un indicador medido fácilmente del tamaño total. Los rendimientos de cada unidad de superficie pueden extrapolarse a continuación a partir de las mediciones realizadas en el inventario principal. El Estudio de caso 6 es un ejemplo valioso, y otros incluyen: un estudio del espesor de la corteza independiente del inventario principal de los árboles de Prunus; los rendimientos de bayas a partir de las parcelas de investigación aplicadas en el inventario IRM de Finlandia; el inventario para cuantificar la biomasa animal basándose en los pesos de los cuerpos procedentes de los registros de datos del mercado. El doble muestreo tiene algunos inconvenientes:
Muestreo en múltiples etapas: Éste tiene lugar junto con el inventario principal pero utiliza submuestras "integradas" en cada parcela del inventario, creando una jerarquía de parcelas dentro de las propias parcelas. La ventaja de este método es que la muestra está distribuida por igual en todo el área lo que hace posible la estimación de rendimientos en ciertas partes del área. Tal estimación específica del sitio puede ser útil cuando las condiciones que influyen en el rendimiento varían a través del área de evaluación, lo que motiva que no sea representativa una sola submuestra. Los Estudios de caso 7 y 8 contienen algunos ejemplos.
Los inconvenientes y dificultades incluyen:
Las decisiones sobre el muestreo pueden estar influidas por la factibilidad de las mediciones. Por ejemplo, si se necesitan pesos en seco, puede ser preferible muestrear en áreas de gran densidad para recoger suficientes muestras a fin de utilizar de forma eficiente las instalaciones de secado.
¿Factores de conversión? Normalmente cantidad media de producto por individuo. Dependiendo del tipo de producto, ésta puede ser la dimensión media de un individuo (p.ej. para frutos o carne de monte), o la relación entre el peso en seco y el peso en verde (sin secar) (p.ej. para la corteza utilizada en forma seca).
El factor fundamental para la conveniencia de un plan de muestreo es, con frecuencia, el número de replicaciones de las submuestras. Es corriente en las evaluaciones de PFNM utilizar demasiado pocas. Por ejemplo, un caso en que se utilicen únicamente recipientes-trampas para frutos caídos por árbol, y sólo para ocho árboles puede, en el mejor de los casos, dar únicamente una idea aproximada del rendimiento total del producto. Para fines de ordenación en áreas más extensas, las replicaciones tienen que ser mucho mayores, por ejemplo un muestreo de al menos 30, y preferiblemente centenares de árboles en una serie de varias estaciones.
La medición del rendimiento en el área de la submuestra da resultados que pueden ser aplicables a los datos sobre densidades de toda la población, procedentes del inventario principal, para estimar el rendimiento total de un producto en el área de estudio. Hay varios métodos, utilizando otros factores de conversión, para relacionar los rendimientos individuales con la cantidad total de producto. El Cuadro 9 describe a continuación brevemente algunos de ellos.
Cuadro 9: Resumen de métodos alternativos para el cálculo del rendimiento total
Método |
Descripción |
Uso |
Ejemplo |
Factor simple de conversión |
El método más simple es multiplicar el rendimiento medio por individuo por el número total de individuos estimado por el inventario. Los reajustes sólo pueden utilizar los individuos accesibles o de tamaño comercial a partir del inventario. |
Este método es muy apropiado cuando la dimensión de los individuos no varía mucho o no tiene relación con la cantidad de producto. |
Carne de monte. El promedio simple de los pesos de los cuerpos se puede aplicar a toda la población para estimar la biomasa total de carne de monte (Lahm, 1993). |
El rendimiento como función del tamaño |
Los métodos más sencillos incluyen la división de los individuos en clases de tamaño y el cálculo de un factor de conversión para cada clase. Los trabajos más afinados incluyen la relación del rendimiento con otra característica de los individuos, como la longitud o el espesor de la corteza, mediante ecuaciones de regresión. |
Muy apropiado cuando el rendimiento está fuertemente relacionado con el tamaño, esto es, cuanto mayor es el individuo, mayor es el rendimiento total. |
Métodos tradicionales: Uso del diámetro a la altura del pecho (diámetro normal) como factor de predicción de los rendimientos en volumen de los árboles. Rendimiento en corteza de los tejos: Se supone que el árbol es cónico y que la superficie de la corteza es la superficie del cono. Volumen de corteza = superficie x espesor. A continuación se estima el peso de la corteza utilizando un factor de conversión de peso seco a peso verde, como volumen x 0,4 (Jong & Bonner, 1995). |
Los modelos de estimación del rendimiento pueden hacerse más sofisticados con más datos y estudios más prolongados. Por ejemplo, en los modelos del norte y este de Europa para rendimientos de bayas están muy desarrollados, desde estudios a largo plazo utilizando el inventario regular y parcelas permanentes de muestreo. El Estudio de caso 9 describe los sistemas diseñados en Finlandia.
Tales sistemas pueden no ser enteramente adecuados para usarlos en las áreas tropicales pero hay características aplicables. Los rendimientos de bayas varían de un año a otro. Para tenerlo en cuenta, los finlandeses consideraron en sus modelos:
Pocos modelos de rendimiento de PFNM utilizan estos factores en las zonas tropicales. En cambio suelen ser muy simples. La utilización de métodos más complejos tiene potencial para hacer grandes mejoras en la predicción de rendimientos de PFNM, particularmente en el caso de los frutos.
Algunas ideas sobre estudios de crecimiento y productividad.
Los datos de un inventario proporcionan una información instantánea sobre la distribución y abundancia de una especie de recursos. La ejecución de planes de ordenación sostenible requiere también datos fiables sobre la dinámica de la especie, incluyendo información recogida durante largos períodos de tiempo sobre:
Los métodos empleados para determinar el crecimiento y la productividad para la ordenación de PFNM son pocos, variados y en su mayoría son estudios a corto plazo. Muchos de ellos están basados en métodos forestales y son realmente sólo adecuados para árboles y plantas perennes; muy pocos están diseñados específicamente para PFNM. Son excepciones notables los de rendimiento de bayas en Escandinavia (p.ej. Estudio de caso 9). Esta Sección describe brevemente los principales tipos de métodos empleados para los PFNM.
Utilización de las PPMs para madera.
Todos los árboles individuales se marcan, se cartografían, se identifican y se miden con intervalos periódicos (2-5 años) durante un largo período de tiempo (+15 años). La finalidad es cuantificar el crecimiento durante el turno de los árboles. En la práctica el enfoque se centra en el crecimiento de los árboles establecidos y con frecuencia se omiten las observaciones sobre el crecimiento inicial y la fructificación.
Uso de parcelas permanentes de muestreo
Para árboles
Las parcelas permanentes de muestreo (PPM) son la forma más corriente de seguimiento del crecimiento y rendimiento de los árboles. Los datos procedentes de tales parcelas se utilizan para predecir y establecer modelos de rendimientos de madera. Las PPM son esenciales para utilizarlas con árboles de turno largo cuya madera se acumula lentamente. En varios casos se han enumerado PFNM en PPM, y en algunos estudios se han adaptado los protocolos de las PPM para los PFNM mediante:
Para más información sobre PPM: Adlard, 1990; Alder & Synott, 1992
El uso de las PPM ha sido adaptado para árboles neotropicales productores de frutos, palmeras y arbustos. La mayoría tienen protocolos básicamente similares (véase el Recuadro 3). Los protocolos tienden a centrarse en una sola especie, ya sea porque es la única existente en la masa o la única de interés. Esto es diferente de la mayoría de las PPM para madera que incluyen todas las especies para proporcionar una comprensión más amplia sobre la dinámica del bosque como comunidad ecológica y para anticiparse a los cambios de la demanda de la especie.
Para productos no arbóreos
Las PPM se han usado también para especies no arbóreas de PFNM (p.ej. palmeras como en el Recuadro 4), usando normalmente parcelas ya existentes en el lugar. El uso de subparcelas para el muestreo de PFNM dentro de las PPM es común para cuantificar brinzales y chirpiales y también para observar la fructificación y diseminación de los adultos.
Nuevos avances
Hay todavía pocos sistemas de PPM que se hayan desarrollado específicamente para PFNM. Los usuarios de PPM para PFNM deben tener en cuenta la larga experiencia de biólogos botánicos, ecólogos y forestales en el desarrollo de sistemas nuevos y eficaces para los PFNM. Una consideración importante es el empleo de un intervalo apropiado para cada nueva medición; debe estar de acuerdo con la estacionalidad y longevidad de la especie del recurso.
Lectura adicional:
Cunningham,2001.
Este método utiliza observaciones en sitios emparejados, utilizando con frecuencia parcelas del estilo de las PPM. Estos sitios apareados deben ser de condiciones similares (vegetación, topografía, etc.), con un sitio que haya sido aprovechado y el otro, no. Lo ideal sería que el estudio contuviera varios pares de sitios emparejados. Esto permite la comprobación estadística de las diferencias entre los sistemas con aprovechamiento y sin aprovechamiento, pero puede no permitir el análisis de diferentes niveles de aprovechamiento o de diferentes sistemas de ordenación. El Cuadro 10 que viene a continuación contiene algunos ejemplos, pero hay que tener en cuenta que la mayoría de ellos tienen sus debilidades, incluyendo una replicación insuficiente, que son estudios a corto plazo y el que las parcelas estén situadas subjetivamente. Otros diseños emparejan plantas en lugar de parcelas y consideran los impactos de aprovechamiento sobre las poblaciones del recurso.
Cuadro 10: Estudios de productividad realizados en sitios de estudio emparejados
Autor |
Producto, ubicación |
Sitios |
Diseño de muestreo |
Replicaciones |
Duración |
Waters et al., 1997 |
Truffles, California |
Dos sitios que representan un viejo bosque y una plantación adulta |
Sistemático |
Cuatro parcelas en cada sitio |
2 años |
Olmstead & Alvarez-Buylla, 1995 |
Hojas de palmera, México |
Cuatro sitios que representan el bosque secundario aprovechado y sin aprovechar |
Subjetivo |
Sin replicación, una parcela por sitio |
2 años |
Runk, 1998 |
Hojas y semillas de palmera, Ecuador |
Tres regímenes de ordenación o métodos de beneficio estratificados por grado de inundación |
Subjetivo |
Sin replicación, una parcela por sitio |
1 año |
Konstant et al., 1995 & Sullivan et al., 1995 |
Palmera, Namibia |
Dos sitios que representan densidades altas y bajas de seres humanos y ganadería |
Sistemático |
Diez parcelas en cada sitio |
Sin informac. |
Este método permite al investigador probar distintos niveles de aprovechamiento y, de este modo, evaluar el impacto de los diferentes sistemas de ordenación.
Se aplican a las diferentes parcelas distintas tasas de aprovechamiento. Los resultados se comparan entre sí y con un control en el que no se han hecho aprovechamientos. Ésta es la forma más directa de evaluar el impacto del aprovechamiento de PFNM sobre la población y se ha utilizado para una serie de especies fuertemente explotadas. En el Estudio de caso 10 se expone un ejemplo.
Para todas las comparaciones de aprovechamientos deben seguirse procedimientos experimentales normalizados y prestar atención para conseguir una replicación suficiente y el uso de un control. Este control es especialmente importante porque es probable que exista en primer lugar un alto nivel de variación incontrolada entre parcelas. Los protocolos se hacen a propósito para cada especie de recurso.
Este método utiliza mediciones repetidas de individuos que no están dentro de las parcelas permanentes. Los individuos se marcan y se mide regularmente la productividad para determinar el crecimiento en un período dado (p.ej. un mes, una estación o un año, dependiendo de la especie o del producto que se esté midiendo). El Estudio de caso 11 es un ejemplo. Para poder extrapolar el rendimiento total a partir de este método es importante contar con una estimación de la dimensión total de la población.
Esto tiene ventajas respecto al empleo de las PPM actuales:
se puede emplear para la fauna, mediante marcación y nueva captura pero se utiliza muy poco porque la captura suele ser difícil.
Los inconvenientes incluyen:
Este método puede ser útil cuando la especie del recurso está muy esparcida y se observa fácilmente y cuando las influencias mutuas con otra vegetación no son importantes. Se usa frecuentemente en casos de monte bajo, en fincas agrícolas y en situaciones de sabana.
Complejidad de la "sostenibilidad"
La sostenibilidad es un concepto complejo con muchas interpretaciones, que van desde definiciones idealistas hasta directrices prácticas.
Una definición más bien idealista del aprovechamiento sostenible de los PFNM es:
"Si el aprovechamiento no tiene efectos nocivos a largo plazo sobre la reproducción y la regeneración de las poblaciones que se están aprovechando en comparación con poblaciones naturales equivalentes sin aprovechar. Además, el aprovechamiento sostenible no debe tener efectos adversos perceptibles sobre otras especies de la comunidad o sobre la estructura o función del ecosistema". (Hall & Bawa, 1993)
Sin embargo, es prácticamente imposible extraer nada de los bosques naturales sin crear algún cambio perceptible. Un método más pragmático para el aprovechamiento sostenible debe exigir que "no exista pérdida de especies ni cambios irreversibles en los procesos del ecosistema" (Boot & Gullison, 1995), pero incluso esta definición es difícil de demostrar.
Las interpretaciones prácticas de la sostenibilidad para la ordenación maderera incluyen:
Incluso en el caso de la madera, cuyos ritmos de crecimiento son lentos, habiendo una experiencia considerable en cuanto a la ordenación para el rendimiento sostenido, es difícil alcanzar un nivel de producción relativamente constante. La búsqueda de la sostenibilidad en el caso de los PFNM es aún más compleja:
· Lectura adicional: Cunningham, 2001
existe con frecuencia una fuerte variación de la producción de un año a otro (p.ej. buena cosecha de frutos en un año, malas en el siguiente); y
· la ordenación extensiva y regulada es poco común.
El resolver qué es un aprovechamiento "sostenible" para muchos PFNM sigue siendo problemático. El conocimiento a fondo de su productividad debe interpretarse a partir de estudios ecológicos y de aprovechamiento. Éstos incluyen la determinación de los índices y modelos de variación respecto a las incorporaciones, crecimiento, mortalidad y reproducción y cómo estos modelos están relacionados con los cambios ambientales y de ordenación.
Ha habido pocos avances metodológicos para determinar la sostenibilidad, por varias razones:
Los modelos matriciales predicen las poblaciones futuras utilizando probabilidades para calcular la probabilidad de que los individuos sobrevivan, crezcan, mueran o se reproduzcan.
Estudios de población y evaluación de aprovechamientos
Los estudios que se han realizado tratando de calcular los rendimientos sostenibles han utilizado una serie de métodos, incluyendo:
A matrix model is...
La observación de la dinámica de la población: los métodos biológicos utilizan modelos matriciales sencillos o `normas empíricas' basados en la dinámica de la población. Si se dispone de suficientes datos sobre tasas de nacimiento, mortalidad y crecimiento, estos métodos pueden identificar los límites teóricos superiores de extracción sostenible, esto es, la productividad total.
Establecimiento de aprovechamientos apropiados: observación de los impactos del aprovechamiento sobre el ecosistema y los rendimientos económicos procedentes del bosque. La combinación de evaluaciones basadas en el recurso y estudios socioeconómicos no son infrecuentes, centrándose más en el aprovechamiento y los ingresos que en los niveles de aprovechamiento biológicamente sostenibles.
Una metodología `paso a paso' que incorpore todos estos métodos puede ser un valioso comienzo para determinar los aprovechamientos sostenibles. Una propuesta (Gould et al., 1998) es:
Algunos de los mejores ejemplos de determinación del rendimiento sostenible de PFNM se encuentran de nuevo en el norte y este de Europa en cuanto a las bayas, a pesar de que las tasas de aprovechamiento están todavía muy por debajo de los rendimientos disponibles (Rutakauskas, 1998; Saastomoinen et al., 1998).
Lectura adicional sobre ERV: Cunningham 1994, 1996a, 2001
El método de `evaluación rápida de la vulnerabilidad' (ERV) recoge información para identificar especies, recursos o sitios que pueden encontrarse en peligro de explotación excesiva. Se desarrolló como un sistema rápido para cotejar la información científica y la indígena sobre una especie de recurso y se ha utilizado para recomendar si tal especie de recurso es o no adecuada para el aprovechamiento.
La evaluación se realiza en varias etapas:
se evalúa la evaluación de acuerdo con los criterios de sostenibilidad trazados por la ecología, la socioeconomía y la economía. En el Cuadro 11 se muestran algunos ejemplos; y
Cuadro 11: Criterios empleados en la evaluación rápida de la vulnerabilidad
Criterios |
Potencial para el uso sostenible | |
Bajo |
Alto | |
Información: forma de vida, especificidad de hábitos, abundancia y distribución, tasa de crecimiento, respuesta al aprovechamiento, partes utilizadas, modelos de selección y uso, demanda, aprovechamiento estacional, prácticas tradicionales de conservación, comercialización. Ecología |
Abundancia escasa |
Abundancia elevada |
Crecimiento lento |
Crecimiento rápido | |
Reproducción lenta |
Reproducción rápida | |
Reproducción únicamente sexual |
Reproducción vegetativa | |
Hábitat específico |
Hábitat no específico | |
Alta diversidad de hábitats |
Baja diversidad de hábitats | |
Gran diversidad de formas de vida |
Baja diversidad de formas de vida | |
Forma de vida |
P.ej. la utilización de herbáceas es probable que sea más sostenible que las de árboles | |
Partes utilizadas |
P.ej. el uso de hojas, frutos o tallos es más sostenible que el de las raíces (sí se dañan) o la planta completa. | |
Método de aprovecha-miento |
El potencial para el aprovechamiento sostenible es mayor si no se seleccionan clases de tamaño o edad. El aprovechamiento exclusivo de una edad o clase de tamaño determinados puede ejercer presión sobre toda la población. |
Cuadro tomado de Watts et al., 1996
Las exigencias completas de las ERV sirven como una lista de comprobación útil para la recogida de información de una amplia variedad de fuentes y dan información que está disponible para su posterior actualización y modificación, por ejemplo, durante el inventario. Sin embargo, esto:
Aunque puede parecer complicado en un principio, la experiencia indica que los nuevos usuarios del método pueden desarrollar sistemas útiles de puntuación de los criterios y métodos sencillos y transparentes para traducirlos en clases de ordenación. Tales sistemas de evaluación constituyen una primera visión muy informativa sobre el problema y útil para elegir especies candidatas para la comercialización.
Un método sencillo y atractivo ha sido propuesto para corregir periódicamente los niveles de aprovechamiento a fin de conseguir la sostenibilidad, usando unos niveles mínimos de regeneración como base de partida (p.ej. Peters, 1994, 1996a). El Recuadro 5 da más detalles sobre cómo funciona este sistema y la Figura 4 aclara los principios básicos del ciclo.
Hay que tener cuidado con este método por algunos de los supuestos que se hacen en él:
Esta clase de método podría mejorarse introduciendo la escala y el modelo de variabilidad de la productividad. Ello requeriría observaciones durante una serie de años y podrían complementarse con datos climáticos especialmente de lluvia. Esto serviría como base para desarrollar modelos de predicción del rendimiento como los mencionados anteriormente para las bayas en el norte de Europa. Podrían decidirse entonces los niveles de aprovechamiento apropiados relativos a:
Datos de referencia
Figura 4: Diagrama de la estrategia básica para establecer el aprovechamiento sostenible de recursos vegetales de PFNM
La sostenibilidad a largo plazo de una especie explotada depende de los impactos de los aprovechamientos sobre todo su ciclo vital. La utilización de modelos que representan la dinámica del ciclo vital puede contribuir a desarrollar estimaciones fiables de los niveles de aprovechamiento sostenible.
¿Qué son las dinámicas del ciclo?
Cada individuo pasa por varias etapas vitales desde el nacimiento o germinación a la madurez, la edad adulta y la muerte. Los modelos pueden aplicar para cada etapa diferentes tasas de: crecimiento, fecundidad, nuevos nacimientos y mortalidad.
Los modelos utilizan estos datos para pronosticar el estado de las poblaciones futuras en diferentes condiciones.
Utilización de la dinámica del ciclo vital
Los modelos de ciclo vital se utilizan en la ordenación forestal y de la fauna silvestre pero sólo se han utilizado recientemente para calcular los niveles de aprovechamiento sostenible de los PFNM. El modelo de población de PFNM más corrientemente utilizado es el "modelo matricial" (Peters, 1996a). Éste pronostica el número de individuos de diferentes edades o grupos de tamaño ("estructura por clases de tamaño") en las poblaciones futuras bajo diferentes regímenes de aprovechamiento, basándose en la población actual y en las estimaciones de las tasas de nacimiento, mortalidad y crecimiento en cada edad o clase de tamaño.
¿Cómo funciona un modelo matricial?
Funciona mediante saltos adelante con intervalos fijos de tiempo, normalmente de un año. En primer lugar, se divide la población en clases de tamaño (o de edad). La estructura de la población actual viene dada por el número de plantas de cada clase determinada a partir de los datos del estudio de campo. El modelo utiliza la dinámica del ciclo vital para estimar las probabilidades de supervivencia de cada individuo desde una etapa de vida a la próxima durante períodos de tiempo determinados. Esto se realiza para varios años a fin de pronosticar la estructura de la población futura. El Recuadro 6 da un ejemplo para explicar tal modelo. La sostenibilidad de los diferentes regímenes de aprovechamiento se comprueba cambiando las tasas de reproducción y mortalidad (a causa del aprovechamiento) utilizadas por clases específicas de tamaño en el modelo.
Recuadro 6: Ejemplo de un modelo matricial como medio de trabajo Contemplando una planta no anual, las clases de edad pueden ser: 1 = semillas; 2 = plantas pequeñas no reproductivas; 3 = plantas mayores que producen algunas semillas; 4 = planta plenamente reproductiva. | ||||||||||
Bibliografía adicional sobre temas de muestreo para la dinámica de poblaciones: Bowden et al., 2000; Gagnon, 1999. Véase también USGS. |
Programa de seguimiento de la biodiversidad (Biodiversity monitoring programme), sitio web: www.mp1-pwrc.usgs.gov/powcase/index.html
Adecuación biométrica al peligro
Hay varios ámbitos que reducen la utilidad de estos métodos.
Bibliografía adicional sobre RMS: Caughley y Sinclair, 1994
La ordenación para el rendimiento sostenible de la fauna es claramente diferente de la realizada para los árboles, habiéndose desarrollado diferentes métodos por los responsables de la ordenación de la fauna. La dinámica de las poblaciones es diferente porque la supervivencia depende generalmente de la densidad y existe una máxima capacidad de carga en cualquier área de terreno. La capacidad de carga es el número máximo de animales que pueden poblar un área. En este punto, se igualan los nacimientos y las muertes y la población es estable. Por encima de él, aumenta la mortalidad y la población disminuye. Por debajo, la población crece. Si la población desciende demasiado, no habrá reproducción. Hay un nivel óptimo de población que garantiza unas tasas máximas de natalidad y la supervivencia de los nuevos individuos. Esto se conoce como rendimiento máximo sostenido (RMS).
La estimación directa del RMS es difícil, debido también en este caso a la falta de datos detallados sobre la dinámica de la población y cómo responden al cambio de la densidad de animales. Teniéndolo en cuenta, se ha desarrollado un método simplificado que se ha popularizado (Robinson y Redford, 1991, para más detalles, véase el Recuadro 7):
¬ establecimiento del aprovechamiento sostenible en el 20 a 40 por ciento de la producción anual, dependiendo de la longevidad de la especie.
Este método tiene limitaciones:
· ¿Cuál es la teoría del forraje óptimo? |
También pueden ser útiles los modelos que utilizan la teoría del forraje óptimo para simular los impactos de las estrategias de caza sobre las poblaciones de fauna. Un ejemplo (Winterhalder & Lu, 1997) simula la especie de recursos, clasificándolos de acuerdo con las preferencias de los cazadores. Este método tiene en cuenta: las diferencias en las preferencias locales; la disponibilidad de diferentes especies de recursos; y los diferentes tipos de sistemas de caza. De este modo, calibra situaciones reales de múltiples recursos pero puede ser costoso y complicado establecerlo con datos reales.
Motivos del seguimiento
El seguimiento permite evaluar si las intervenciones realizadas han sido acertadas y cómo podrían mejorarse. Debe ser siempre parte del proceso de ordenación. Lo ideal es que el seguimiento comience antes de realizar cualquier cambio con el fin de contar con una base de referencia para contrastar con ella el éxito de las actividades de ordenación.
Medición del cambio con el tiempo
Unas evaluaciones fiables de los cambios debidos a las actividades de ordenación exigen un inventario riguroso cuantitativa y biométricamente. Sin embargo, unos métodos menos directos - por ejemplo los estudios de mercado, los registros de aprovechamiento, los indicadores forestales - son útiles para llamar la atención sobre las áreas de problemas potenciales y servir como información para las decisiones de ordenación.
No hay una metodología específica para el seguimiento de los recursos, pudiendo utilizarse todos los métodos precedentes. La diferencia consiste en que el inventario se repite con intervalos, corrientemente cada año o cada cinco años. Lo que es importante es que el diseño del inventario sea capaz de separar las tendencias reales de los errores aleatorios en las estimaciones. Esto sólo es posible si los errores de muestreo son reducidos cada vez que se mide el recurso. Ello exige gran número de parcelas, lo que podría ser demasiado costoso. El gasto de un seguimiento riguroso significa que con frecuencia no se ha utilizado nunca o casi nunca para PFNM en los trópicos. En cambio, los esfuerzos se han centrado en el desarrollo de indicadores sencillos y baratos.
Bibliografía adicional sobre los indicadores: Lindenmayer et al., 2000
Uso de indicadores
Aunque son interesantes, hay que tener cuidado con la elección y medición de indicadores. En particular, existe el peligro de que pueden no reflejar adecuadamente el estado del recurso. Los problemas más notables incluyen:
Los dos principales métodos para el seguimiento del impacto de la extracción de PFNM son:
Lo ideal es usar ambos. El seguimiento participativo a nivel local es útil también para mejorar la participación en el conocimiento del recurso entre los reguladores y los recolectores.
Bibliografía adicional sobre estudios de impactos de los aprovechamientos:
Cunningham, 2001
En el campo forestal, las PPM se han utilizado comúnmente para el seguimiento de los efectos de los aprovechamientos sobre los rendimientos futuros y sobre otros elementos del ambiente forestal. Pueden establecerse de modo similar planes de seguimiento de PFNM pero es importante que se hagan de acuerdo con principios biométricos estrictos. Esto aumentará la probabilidad de que los datos sean representativos y útiles para su extrapolación a áreas más extensas. Hasta el momento hay pocos protocolos establecidos.
Con el fin de hacer posible el medir adecuadamente el impacto de los aprovechamientos, debe haber una "base de referencia" sin aprovechar para poder comparar con ella los indicadores. Esto se olvida con frecuencia pero debe tener la forma de un inventario previo a la explotación o utilizar comparaciones entre sitios aprovechados y no aprovechados. Hay consideraciones importantes que incluyen:
Los datos recogidos lejos del bosque es poco probable que reflejen lo que está sucediendo en él. La información basada en el recurso es probable por tanto que sea más próxima a la verdad que los registros de Aduanas e Impuestos.
Además, los registros medidos después de que el producto ha salido de la aldea no pueden relacionar el producto con su lugar de aprovechamiento
limitar la enumeración a las especies del recurso o a las especies indicadoras en lugar de intentar medirlo todo. Ésta es la opción preferible para especies aprovechadas fuera del bosque, p.ej. en terrenos agrícolas.
Las PPM para los PFNM se han considerado con frecuencia como alta tecnología, métodos de gran inversión, útiles sólo para áreas relativamente pequeñas, ordenadas intensivamente, como los Parques Nacionales (p.ej. Sheil, 1997).
Los registros de los aprovechamientos constituyen una forma popular, rápida y sencilla de medición de los PPM. Pueden ser mediciones cuantitativas (pesos y medidas absolutas) o cualitativas (medidas relativas: muchas, pocas, etc.) de los productos recolectados. El Estudio de caso 12 sirve de ejemplo del uso de registros de aprovechamientos.
El registro de datos puede tener lugar en diversos puntos de la cadena de suministro:
Los registros de aprovechamientos se pueden utilizar para diversos fines:
La forma más extendida de los datos sobre los recursos de PFNM son los registros de aprovechamientos. No obstante, hay puntos importantes que hay que tener en cuenta con precaución cuando se les utiliza:
Es importante que la población local que está utilizando el recurso del PFNM comprenda el fundamento de los cupos y otras normas de ordenación a fin de conseguir que tengan más confianza en la ordenación. Su participación en el seguimiento del recurso puede ser una estrategia importante para ganar el apoyo de los recolectores en favor de las normas de ordenación.
La población local puede también adaptar y mejorar los métodos a través de su propio conocimiento del recurso. La utilización de indicadores sobre el estado del recurso elegidos por la población local, puede incrementar su compromiso en el seguimiento y en las correcciones consecuentes de la ordenación.
Unos métodos apropiados pueden ser fundamentales para lograr el objetivo de un seguimiento continuado por parte de la población local. Esto responde al interés muy extendido por el desarrollo de técnicas de seguimiento participativo que sean adecuadas para la capacidad local.
Muchos estudios de PFNM se han centrado con frecuencia en la participación local para conseguir un nivel de vida mejor y de carácter sostenible.
Lectura adicional sobre participación: Ingles et al, 1999; Carter, 1996
Muchos expertos sostienen que si un inventario de PFNM debe contribuir a mejorar el sustento de la población local con carácter sostenible, esta población debe participar activamente en todas las etapas de la toma de decisiones, en cuanto a la ejecución del inventario, sus objetivos y diseño, el trabajo de campo y el análisis de los datos. Los argumentos consisten en que la participación puede:
Los niveles de participación varían, como se observa en el Cuadro 12. Establecer quién poseerá y tendrá los "derechos de propiedad intelectual" de la información recogida, es cada vez más importante y debe decidirse cuanto antes.
Cuadro 12: Grados de participación - desde la cooptación a la acción colectiva
Modo de participación de la población local |
Tipo de participación |
Control externo |
Potencial para mantener la acción local y la propiedad |
Papel de la población local en la investigación y la actuación |
Cooptación |
Política "de fachada": Se eligen representantes pero no tienen entrada real en el poder |
*********** |
Materias | |
Cooperación |
Se asignan tareas con incentivos; la decisión del programa y la dirección del proceso lo realizan extraños |
********* |
Empleados/sub-ordinados | |
Consulta |
Se piden opiniones; los de fuera (extraños) analizan la información y deciden sobre la línea a seguir |
******* |
Clientes | |
Colaboración |
La población local trabaja junto con los extraños para determinar las prioridades; estos últimos tienen la responsabilidad de dirigir el proceso |
***** |
*** |
Colaboradores |
Aprendizaje en común |
La población local y los extraños comparten sus conocimientos para crear un nuevo entendimiento y trabajar conjuntamente para elaborar planes de acción; los extraños lo facilitan |
*** |
****** |
Socios |
Acción colectiva |
La población local establece y ejecuta su propio programa; los extraños están ausentes |
********* |
Directores |
(adaptado de Cornwall, 1995, en Carter, 1996) ** indica las fuerzas relativas
Mensaje clave: los conocimientos locales pueden dar información útil sobre el recurso pero suele ser necesaria la verificación de los datos
Los conocimientos locales pueden ser útiles por diversas razones para diseñar y ejecutar un inventario de PFNM, como se destaca en el Estudio de caso 14 y se señala en el Cuadro 13. La participación puede mejorar la eficacia del inventario y optimizar los beneficios locales. El aumento de eficacia puede provenir de:
Cuadro 13: Ejemplos de áreas de conocimiento local y su posible uso en el inventario de PFNM
Conocimiento local |
Utilización en el inventario |
Identificación de especies |
Los conocedores de árboles locales pueden ser útiles en el campo (véase sin embargo la sección siguiente sobre taxonomía) |
Especies económicas Importantes |
Pueden destacar las especies a incluir en el inventario (p.ej. ERV) |
Clasificación y descripción de la vegetación |
Se pueden utilizar para la estratificación |
Tipos y distribución de microclimas |
Se pueden utilizar para la estratificación |
Tipos y distribución de suelos |
Se pueden utilizar para la estratificación |
Técnicas de aprovechamiento y frecuencia |
Pueden mejorar los métodos de enumeración y su frecuencia |
Historial sobre disponibilidad |
Ayuda a priorizar las especies a incluir, según el nivel de amenaza o cambio |
Estimación actual de la disponibilidad |
Ayuda a priorizar las especies a incluir e influye en la decisión sobre la necesidad o no del inventario |
Ecología y distribución de la especie |
Ayuda a decidir sobre el método de muestreo más apropiado |
Interacción humana con el medio ambiente (p.ej. ordenación existente) |
Influye en los objetivos y diseño del inventario |
Valor del bosque y del recurso |
Influye en los objetivos de la ordenación y, por tanto, en los objetivos del inventario |
Factores socioeconómicos que afectan a la ordenación de PFNM |
Influye en la decisión sobre contar o no con un inventario y sus objetivos e influye en la interpretación de los resultados del inventario |
Hay que tener en cuenta que este cuadro no es completo y que los usos anteriores de los conocimientos locales son casos específicos; es decir, los tipos de conocimientos locales enumerados no pueden usarse siempre en los inventarios en la forma descrita.
Para conseguir que los conocimientos locales sirvan de ayuda para el inventario de PFNM hay que tener cuidado de:
Se necesita con frecuencia consultar con expertos en herbarios nacionales o de jardines botánicos destacados para identificar las muestras y aplicar el nombre botánico correcto. Los especímenes deben prepararse adecuadamente y la identificación puede llevar meses e incluso años. Aunque esto puede ser costoso y llevar mucho tiempo, es la forma más fiable de denominación.
El desarrollo de relaciones con herbarios ayuda a garantizar la competencia en la recogida de muestras.
Combinación de los conocimientos locales y los científicos
La laguna existente entre los conocimientos locales y los conocimientos científicos no se puede salvar si no se equiparan los nombres locales y los científicos. Los estudios de PFNM tienden a utilizar los nombres locales en la recogida de datos - en lugar de códigos o nombres latinos - porque es más fácil para el personal local y los colaboradores registrar los nombres que les son familiares. Sin embargo, hay algunos problemas importantes en el uso de este sistema de nombres locales.
Uso incompleto e incongruente de nombres por parte de los informadores locales. Existe una importante variabilidad en los nombres locales. Por ejemplo, en la parte central de Kalimantan (Wilkie, 1998), menos de una cuarta parte de los nombres locales se aplican de modo constante y éstos suelen ser los que son de uso específico para el informador o son especialmente distintivos. Es corriente el cambio entre el nombre del producto y el nombre de la especie concreta.
Equiparación incorrecta de nombres locales y científicos. El análisis de la experiencia en Uganda demuestra que hay nombres locales únicos que se están equiparando con varios nombres botánicos (Cunningham, 1996a). Los nombres locales se refieren, con frecuencia, a géneros científicos en lugar de especies (véase el Cuadro 14).
Lectura adicional:
Cunningham, 2001
Dificultades taxonómicas. La descripción taxonómica y la denominación de las especies de los bosques tropicales son notablemente incompletas, incluso para los árboles. Esto significa que a menudo no es posible asignar una identidad taxonómica a una especie de PFNM denominada localmente, y la identificación de la especie sólo puede, con frecuencia, aceptarse en cuanto al género. Este es el caso, incluso para los rotenes, en la mayoría de los países del sur de Asia, donde los nombres locales describen el género y no la especie (Stockdale, 1995).
No obstante, es fundamental determinar los nombres científicos si hay que comparar la información entre diferentes zonas donde pueden emplearse distintos idiomas y nombres locales. Esto es difícil porque sólo hay disponibles unas pocas guías de campo o claves botánicas para PFNM y se necesitan flores o frutos (con frecuencia inaccesibles y estacionales) para la identificación. La forma más segura de verificar las identificaciones es recoger muestras durante el inventario y hacer que sean identificadas por expertos. Los intentos de equiparar después los nombres con las muestras han demostrado ser poco fiables. Sin embargo, la comprobación de los especímenes en un inventario puede ser costosa, llevar mucho tiempo y exigir conocimientos que no se tienen.
Cuadro 14: Correspondencia entre nombres populares y científicos
Correspondencia |
Explicación |
Correspondencia* |
Correspondencia de uno en uno |
Nombre genérico popular = especie científica |
61% |
Diferenciación insuficiente (I) |
Nombre genérico popular = dos o más especies científicas del mismo género |
21% |
Diferenciación insuficiente( II) |
Especie popular = más de un género científico |
14% |
Diferenciación exagerada |
Más de un nombre genérico popular = especie científica |
4% |
* Correspondencia de los nombres de Tzeltal Maya (n=471) tomados de Berlín (1994) mencionados en Martin, 1994
Una cierta sinergia entre conocimientos locales y científicos se produce de modo informal mediante los métodos participativos o informales. Sin embargo, las metodologías formales (p.ej. Recuadro 8) para tratar los conocimientos locales recogidos de modo informal, son importantes para conseguir un entendimiento más profundo de tales conocimientos y sus relaciones con las investigaciones científicas. Las metodologías formales se prestan también para una verificación más objetiva de la información ecológica cualitativa y para mejorar el almacenamiento y recuperación de conocimientos.
Pocos pondrían en duda el valor de la participación de la población local en la evaluación de recursos. Sin embargo, hay un gran debate sobre la necesidad o no de que el inventario participativo sea biométricamente riguroso.
El riesgo de recoger unos malos datos está en que la población local pueda sentirse desanimada con los resultados y pierda interés en el proceso. Es importante conseguir que la población local y los extraños comprendan claramente todos los riesgos que incluye la fiabilidad de la información. El Recuadro 9 muestra algunos ejemplos de cómo la población local puede aprender y cambiar sus metodologías; el hacerlo por si mismos estimulará el aprendizaje y el conocimiento del proceso.
El desafío consiste en hacer accesibles a las comunidades los métodos biométricos.
Cada vez más, se está demostrando que las comunidades necesitan datos biométricos (por ejemplo, para servir de base de un plan de ordenación a someter al gobierno para aprobación), y a veces puede haber una necesidad urgente de información fiable (por ejemplo, cuando un recurso está gravemente amenazado). En estas circunstancias, a pesar de las oportunidades de aprender a hacerlo por sí mismos, puede ser conveniente recomendar que la población local realice un inventario biométrico.
Siempre es importante conseguir que los datos sean fáciles de recoger y analizar.
Esto no significa que los métodos y diseños deban carecer de complicaciones, sino que deben presentarse de forma sencilla. Existen métodos que permiten realizar un protocolo complicado, incluso cuando hay un bajo nivel de alfabetización (véase el Recuadro 10).
Las experiencias y discusiones sobre la materia han demostrado que los métodos tienen que ser adaptables a las necesidades locales pero proporcionando al propio tiempo datos normalizados replicables. En Nepal los métodos cualitativos que han surgido como consecuencia del fomento de la OFC no han proporcionado la información detallada necesaria, habiendo comenzado actualmente a evolucionar hacia una cuantificación más formal de los recursos.
1 Las líneas permanecerán abiertas sólo un tiempo limitado y es importante la comunicación entre los equipos sobre los períodos de acceso.