En el Africa septentrional, se estima que la producción de las cosechas de trigo y cebada de 1997 es muy inferior a la media en Argelia, Marruecos, y Túnez debido al tiempo desfavorable. La producción disminuyó en casi tres cuartas partes a 1 080 000 toneladas en Argelia y en dos terceras partes en Túnez, mientras que en Marruecos la producción es alrededor de 60 por ciento menos de la cosecha del año pasado. En Egipto, la producción de cereales de invierno fue marginalmente inferior a la del año pasado.
En el Africa occidental, la estación de las lluvias ya ha comenzado en la mayoría de los países. En los países costeros del Golfo de Guinea, el mijo y sorgo plantados recientemente en el norte están creciendo satisfactoriamente, mientras que en el sur y el centro se está recogiendo la primera cosecha de maíz plantada en abril-mayo. En Liberia y Sierra Leona se ha plantado la cosecha de arroz, pero los recientes disturbios políticos registrados en Freetown han perjudicado las actividades agrícolas y limitarán la superficie plantada. En el oeste del Sahel, las cosechas se han visto perjudicadas por la sequía. Tras un comienzo temprano de la estación de las lluvias en mayo y junio en los países occidentales del Sahel, las condiciones de crecimiento han empeorado significativamente en julio, especialmente durante la segunda década del mes, en la que llovió muy poco o hubo tiempo seco en la mayor parte del Senegal, Gambia y Mauritania. También disminuyeron las precipitaciones en Guinea-Bissau. En cambio, en la parte oriental del Sahel las condiciones atmosféricas han sido mucho más favorables, con lluvias muy superiores a lo normal en el Chad, especialmente en su zona saheliana. En la parte central de la región, las precipitaciones fueron en general normales y generalizadas. En Malí, las lluvias fueron generalizadas y bastante regulares. Asimismo, las precipitaciones aumentaron significativamente en Burkina Faso a mediados y finales de julio, tras las escasas lluvias caídas al principio del mes. En el Níger, hubo precipitaciones generalizadas durante julio. En Cabo Verde, ha comenzado a llover en las islas principales. La siembra ha terminado en la mayoría de los países sahelianos pero es posible que sea necesaria una resiembra considerable en Gambia, Mauritania y el Senegal. En julio, la disminución de las lluvias en el oeste del Sahel ha afectado gravemente el desarrollo de los cultivos y reducirá el potencial de rendimiento. En general, los cultivos están creciendo satisfactoriamente en el centro y el este del Sahel.
En el Africa central, en general el período vegetativo está marchando satisfactoriamente. En el Camerún, se está recogiendo la primera cosecha de maíz en el sur, mientras que en el norte está terminando la siembra de cereales secundarios. En el norte y sur de la República Democrática del Congo se está recogiendo la segunda cosecha de maíz, mientras que en el centro ha comenzado la siembra principal de dicho producto. Según los informes, se han obtenido malas cosechas de sorgo, maíz y café en Rutshuru, cerca de Goma, debido a la irregularidad de las precipitaciones y la falta de insumos básicos, así como al retraso de la siembra a raíz de los disturbios civiles y el desplazamiento de la población.
En el Africa oriental, el resultado de las cosechas de la temporada principal, que todavía no se han recogido en algunos países, es incierto. Las perspectivas de las cosechas en Etiopía, Eritrea y el Sudán dependerán de las alternativas del tiempo en los próximos meses. En Etiopía, se ha obtenido una mala cosecha "belg" y es probable que la superficie plantada con las cosechas de la temporada principal sea inferior al objetivo. En Somalia, la cosecha principal "Gu" recogida recientemente ha sido reducida. En otras partes del Africa oriental, se estima que la producción de 1997 es mayor que la del año pasado en Burundi y Rwanda, y menor en Tanzanía y Uganda.
En el Africa austral, la recolección de la mayoría de los cereales está prácticamente terminada. La producción total, estimada en 21,8 millones de toneladas, es 15 por ciento más que la media pero inferior a la excelente cosecha de 24,4 millones de toneladas del año pasado. En Angola, como consecuencia de unas precipitaciones inferiores a lo normal la producción de cereales disminuyó en un 14 por ciento a 431 000 toneladas. Debido al tiempo desfavorable, en Botswana, Lesotho, Sudáfrica, Swazilandia, Zambia y Zimbabwe la producción debería ser inferior a la del año pasado. En Madagascar, es probable que en 1997 la producción de cereales se vea afectada por los daños causados por las langostas. En cambio, en Mozambique la producción se calcula en 1,5 millones de toneladas, 11 por ciento más que el año pasado, debido al aumento de la superficie plantada y al tiempo favorable. Según las estimaciones, Namibia obtendrá una cosecha récord de cereales secundarios gracias al aumento de la superficie sembrada y a la abundancia de precipitaciones.
En Asia, las condiciones de crecimiento son en general satisfactorias, pero en algunas zonas persiste una grave sequía. En la República Popular Democrática de Corea se señala que el tiempo seco imperante en junio y julio unido a las temperaturas superiores a lo normal han provocado cuantiosos daños especialmente a los cultivos de maíz en el norte y posiblemente también a los de arroz en el sur. Se señala asimismo que en el norte de China los cultivos se han visto afectados por una grave sequía en una superficie de alrededor de 20 millones de hectáreas, particularmente en la parte oriental de las principales provincias productoras de Shandong y Hebei. Las condiciones secas afectaron también a los cultivos en la parte central de Tailandia en junio, aunque las lluvias recibidas en julio alviaron la situación. En cambio, unas lluvias intensas caídas en las dos primeras décadas de julio en la parte oriental de la India, y a principios de agosto en Bangladesh y el Pakistán inundaron y causaron daños a los cultivos. Las lluvias torrenciales que siguieron al tifón Víctor provocaron inundaciones en el este de Camboya y en algunas partes de Laos, que causaron daños a los cultivos. Unos chaparrones generalizados al final de julio aumentaron los suministros de humedad para el arroz en todo el territorio de Viet Nam y Filipinas. En el Afganistán, se pronostica una cosecha mayor de cereales en 1997 gracias a un tiempo favorable y a la mejora de la situación de seguridad en el sur y en la mayor parte del este. En el Iraq, a raíz de la escasez de maquinaria, piezas de repuesto e insumos agrícolas la producción de cereales de 1997 fue muy inferior a la del año pasado.
En América Central y el Caribe, las cosechas de cereales de la primera temporada se han recogido en la mayoría de los países. Se prevé una producción récord de maíz en México, mientras que en El Salvador, Nicaragua, Guatemala y Honduras, los cultivos se han visto afectados por "El Niño". En el Caribe, una racha de tiempo seco imperante en la República Dominicana está afectando la cosecha secundaria de arroz de regadío y otros cultivos de secano. En Haití,se pronostica una producción considerablemente menor debido a los daños a los cultivos causados por la sequía. En Cuba, se espera una producción normal de maíz, mientras que la de arroz debería ser escasa debido a una disminución de la superficie plantada como consecuencia de la falta de insumos agrícolas.
En América del Sur, la siembra de la cosecha de trigo de 1997/98 está prácticamente terminada en las regiones del sur. En la Argentina, sin embargo, la siembra se ha retrasado, a causa principalmente del exceso de humedad en algunas partes. En el Brasil, el pronóstico inicial de la producción señala una disminución respecto del año pasado pero aun así será superior a la media. En el Uruguay, las plantaciones previstas se calculan en un nivel casi récord, mientras que en Chile la superficie plantada debería recuperarse significativamente respecto a la cosecha afectada por la sequía del año pasado. En los países andinos, la recolección de las cosechas de cereales de la primera temporada de 1997 está muy avanzada y se espera una producción sin precedentes en Bolivia, el Ecuador y el Perú. En Colombia, se pronostica que la producción de maíz será ligeramente inferior a la media, mientras que en Venezuela la producción debería ser entre media y superior a la media para todos los cereales excepto para el sorgo, cuya producción debería disminuir como consecuencia de los bajos precios de las importaciones.
En Europa, unas lluvias fuertes seguidas de inundaciones en julio y principios de agosto en muchas partes de la región, pero particularmente en el este, han causado daños a los cultivos de cereales y obstruido las operaciones de recolección. En los países orientales, todavía no se conoce el alcance total de los daños causados por el mal tiempo, pero en la República Checa, Polonia, Rumania y la República Eslovaca los últimos pronósticos oficiales se han revisado algo a la baja teniendo en cuenta las probables pérdidas sufridas. En la CE, se prevé otra producción de cereales superior a la media de 202 millones de toneladas en 1997, pero inferior a la producción récord del año pasado. En Croacia, la República Federal de Yugoslavia (Serbia y Montenegro) se han obtenido buenas cosechas de trigo. En Bosnia y Herzegovina, se pronostica que la producción total de trigo será mayor que la del año pasado, no obstante lo cual queda un gran déficit estructural de trigo.
En la Comunidad de Estados Independientes (CEI), ha comenzado la recolección de cereales de invierno y los informes iniciales señalan una cosecha significativamente mejor que la del año pasado. Sin embargo, las persistentes lluvias caídas en julio en algunas partes de Europa y la escasez de combustible están retrasando las actividades de recolección y podrían provocar una cierta reducción de los rendimientos medios, la disminución de la calidad de los cereales y un aumento de las pérdidas de cosechas. En Georgia, Moldova y Ucrania la producción podría recuperarse de forma pronunciada respecto a las cosechas afectadas por la sequía del año pasado. También se prevén cosechas mayores en Belarús y la Federación de Rusia. En el Cáucaso, unas lluvias y granizadas fuertes caídas en junio han causado daños, especialmente en Azerbaiyán pero también en Armenia. En la República de Kazajstán, la superficie sembrada con cereales ha descendido debido a la escasez de crédito para combustible, y las perspectivas para la cosecha siguen siendo una incógnita. En otras partes, se señalan cosechas mejores que el año pasado en Uzbekistán, Tayikistán y Turkmenistán.
En América del Norte, la mayor parte de la cosecha de trigo de invierno se ha recogido en los Estados Unidos, y ha comenzado la recolección de la cosecha de trigo de primavera. Las últimas estimaciones oficiales cifran la producción de trigo de 1997 en 68,9 millones de toneladas, 11 por ciento más que la cosecha del año pasado. Sin embargo, las perspectivas para los cereales secundarios han empeorado debido al tiempo cálido y seco imperante en los principales estados productores, y la producción se pronostica ahora en unos 263 millones de toneladas, volumen marginalmente menor que el año pasado. En el Canadá, las perspectivas han empeorado para la mayor parte de las cosechas de trigo y cereales secundarios debido a las condiciones calurosas y secas registradas en los dos últimos meses. La producción de trigo se pronostica ahora en alrededor de 26 millones de toneladas, 15 por ciento menos que en 1996, mientras que la de cereales secundarios se pronostica en 27,5 millones de toneladas, 4 por ciento menos.
En Oceanía, las perspectivas para las cosechas de cereales de invierno de 1997 en Australia han empeorado en los dos últimos meses debido a la persistencia de condiciones secas. El último pronóstico oficial relativo a la cosecha de trigo de 1997, situado en alrededor de 16 millones de toneladas, sería inferior en un 30 por ciento al volumen récord del año pasado.