CANADA (20 de febrero)
Las últimas estimaciones cifran la cosecha de trigo de 1997 en 24,3 millones de toneladas, alrededor de un 20 por ciento menos que el año anterior y un volumen inferior a la media de los últimos cinco años. La disminución se debe principalmente a una rotación de trigo a semillas oleaginosas, pero también los rendimientos medios son inferiores. Ya se ha sembrado una superficie pequeña con trigo duro de invierno, pero la mayor parte del trigo que se recogerá en 1998 se sembrará recién en mayo-junio. Según los primeros indicios, es probable que la superficie sembrada con trigo en 1998 disminuya ulteriormente ya que los escasos ingresos previstos para el trigo probablemente alienten a los agricultores a cambiarlo por semillas oleaginosas cuyos precios son más altos. Además, puede que los agricultores se vean forzados a dejar más tierras sin cultivar ya que las precipitaciones inferiores a lo normal recibidas durante este invierno deberían dar lugar a una situación desfavorable para la siembra en algunas partes. La producción total de cereales secundarios de 1997 se estima en alrededor de 25 millones de toneladas, casi un 11 por ciento menos que el año anterior, pero aún así un volumen superior a la media de los últimos cinco años.
ESTADOS UNIDOS (20 de febrero)
En los Estados Unidos, la estimación oficial definitiva de la cosecha de trigo de 1997 es de 68,8 mi-llones de toneladas, alrededor de un 10 por ciento más que en 1996 y un volumen superior a la me-dia de los últimos cinco años. Las perspectivas para la cosecha de trigo de 1998 son satisfactorias. Las condiciones del tiempo han sido en general favorables para los cultivos de invierno en fase de dormición y se señala que los suministros de humedad son suficientes en la mayoría de las zonas. Contrariamente a lo que se había previsto anteriormente, en el sentido de que no habría cambios o de que habría un incremento moderado en la superficie sembrada con trigo de invierno para 1998, el USDA de enero estimó la superficie plantada en 18,9 millones de hectáreas, 4 por ciento menos que el año anterior y el nivel más bajo desde 1973. Esta disminución indica muy probablemente que los agricultores este año no sembrarán trigo porque prevén precios menos interesantes en compa-ración con los de algunos otros cultivos. Según los primeros indicios, también disminuirá la superfi-cie sembrada con trigo de primavera.
La estimación oficial definitiva de la cosecha de cereales secundarios de 1997es de 265,6 millones de toneladas, cifra casi inalterada con respecto a la cosecha del año pasado y un volumen superior a la media de los últimos cinco años. De este total, se estima que corresponden al maíz 238 millones de toneladas. Por lo que se refiere a la cosecha de maíz de 1998, que se sembrará en la primavera, se prevé provisionalmente que la superficie plantada aumentará debido a que las señales del mercado son más favorables para los cereales forrajeros que para el trigo.