no. 5 - Roma, noviembre
1998
Las perspectivas de los suministros de cereales en 1998/99 han empeorado
ligeramente, debido a una producción inferior a lo previsto
obtenida en la CEI y en Asia. Según las previsiones actuales, la
producción mundial de cereales de 1998 disminuirá del 2
por ciento a 1 872 millones de toneladas, un poco menos de las necesidades
de consumo previstas en 1998/99. Por consiguiente, tendrá que recurrirse
a las reservas mundiales, que se mantendrán, con todo, dentro del
margen mínimo de seguridad. Las perspectivas para los suministros de alimentos siguen siendo desfavorables
para muchos países en desarrollo, debido a las condiciones
atmosféricas desfavora-bles y/o los disturbios civiles registrados
en el Africa subsahariana, al mal tiempo y las dificultades económicas
experimentados en Asia, y a las devastaciones producidas por los huracanes
en América Central. El comercio mundial de cereales en 1998/99 se pronostica en 201 millones
de toneladas, volumen inferior en un 3 por ciento al del año
anterior pese a una revisión al alza efectuada últimamente.
La disminución de las importaciones de trigo y arroz compensarán
sobradamente el aumento del comercio de cereales secundarios. La utilización mundial de cereales en 1998/99 se pronostica
en 1 878 millones de toneladas, volumen ligeramente
superior al del año anterior, pero marginalmente inferior a la
tendencia a largo plazo. La contracción prevista en el crecimiento
de la utilización se debe principalmente a una débil demanda
de piensos, mientras que el consumo humano debería seguir aumentando
al ritmo del crecimiento demográfico. La FAO pronostica los envíos de ayuda alimentaria en cereales
de 1997/98 en 9 millones de toneladas, frente al nivel reducido de
1997/98 calculado actualmente en 5,3 millones de toneladas. Este cambio
brusco tras la disminución registrada en los últimos cuatro
años se debe principalmente al aumento de las existencias de cereales
de los principales donantes, unido al incremento de las necesidades de
ayuda alimentaria. Los precios internacionales del trigo y los cereales secundarios han
repuntado desde finales de agosto en respuesta al aumento de los contratos,
aunque éstos han disminuido mucho respecto a los de hace un año.
En cambio, los precios de exportación del arroz estuvieron sometidos
a una presión a la baja por la disminución de la demanda
de importaciones de las calidades superiores, y la llegada al mercado
de los productos de la nueva cosecha. Se pronostica una disminución de la producción de la
yuca en 1998. La demanda de gránulos de yuca sigue estando
deprimida en la CE debido a la gran cantidad de cereales forrajeros internos.
El precio de importación ha vuelto a bajar, continuando la tendencia
descendente iniciada al final de 1996. Los precios internacionales de los productos lácteos han bajado
en 1998 debido a una disminución de la demanda, particularmente
de algunas partes de Asia y de la Federación de Rusia, cuyas economías
están en crisis, y al aumento de las existencias en algunos países
exportadores. En 1998/99 seguirá habiendo excedentes mundiales de azúcar por cuarto año consecutivo, debido a que el crecimiento de la producción debería superar nuevamente el ritmo del consumo. En consecuencia, se prevé que los precios del azúcar seguirán sometidos a una presión a la baja. |