FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias No.5, noviembre 2000 - Page 12

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EUROPA

CE (10 de noviembre)

El pronóstico más reciente de la FAO cifra la producción total de cereales de 2000 en la CE en casi 216 millones de toneladas, 6 por ciento más que el año pasado y que la media de los últimos cinco años. El incremento se debe al efecto combinado del aumento de la superficie plantada con cereales y de los rendimientos medios de la cosecha de este año. La producción de trigo se estima ahora en alrededor de 105 millones de toneladas, volumen ligeramente inferior al del informe de septiembre pero aun así superior en 7 por ciento al del año pasado. El pronóstico relativo a la producción total de cereales secundarios se ha ajustado ligeramente al alza desde el último informe a alrededor de 108 millones de toneladas, lo que representaría un aumento de 5 por ciento respecto a la producción de 1999. Se prevé un aumento de 6 por ciento de la producción de cebada a casi 52 millones de toneladas, y de 12 por ciento de la de avena a 6,7 millones de toneladas. Se pronostica que la cosecha de maíz alcanzará casi los 38,5 millones de toneladas, 3 por ciento más que en 1999. La recolección de la cosecha de arroz ha terminado en España, donde se estima que la producción ha descendido 10 por ciento con respecto al año pasado. En Italia, los problemas de las inundaciones afectaron a mediados de octubre a las regiones productoras del norte, cuando todavía faltaba recoger alrededor del 15 por ciento de la cosecha. Los pronósticos anteriores para este país habían ya indicado una cosecha de mala calidad, debido al frío anormal imperante en el mes de julio. Según los pronósticos actuales, la producción total de la CE disminuirá de 105 000 toneladas con respecto a los 2,6 millones de toneladas de 1999. Sin embargo, esto no tiene en cuenta las recientes pérdidas sufridas en Italia.

Las perspectivas para las cosechas de cereales de invierno ya sembradas o que se están plantando ahora en la Comunidad son inciertas. Al final de septiembre y en octubre, las operaciones de plantaciones se han visto en general dificultadas por unas precipitaciones generalizadas. En particular, la principal región productora de cereales del norte del país ha sido castigada por lluvias torrenciales e inundaciones, lo cual comprometerá la plantación de los cultivos de invierno de este año. De estas condiciones en general húmedas imperantes en toda la Comunidad se exceptúa la Península Ibérica, donde se necesitan más precipitaciones para favorecer la plantación de las cosechas de trigo y cebada de invierno.

ALBANIA (10 de noviembre)

La producción total de cereales de este año debería situarse en torno a un nivel medio de 550 000-600 000 toneladas. De este total, se prevé una cosecha normal de alrededor de 300 000-350 000 toneladas de trigo. La necesidad de importación de trigo debería descender algo respecto al volumen del año anterior, en el que la producción se vio afectada muy gravemente por el mal tiempo, situándose en alrededor de 300 000 toneladas.

BELARUS (6 de noviembre)

Los informes oficiales indican una cosecha de cereales y legumbres de alrededor de 5,5 millones de toneladas (peso bruto). Las imágenes de satélite confirman los pronósticos oficiales de una co-secha mejor que la obtenida el año pasado (3,6 millones de toneladas). Ahora bien, habida cuenta de las heladas intempestivas caídas en mayo, las condiciones calurosas y secas imperantes en junio, y los problemas económicos y la escasez de insumos generalizados, la FAO pronostica provisionalmente la cosecha de 2000 en 4,7 millones de toneladas (peso limpio), como máximo.

En 2000/01, el país necesitará importar cereales para el consumo humano y ya ha contratado alrededor de 350 000 toneladas de Kazajstán.

BOSNIA Y HERZEGOVINA* (6 de noviembre)

Continúa la tendencia descendente de las plantaciones de cereales de invierno, debido a la escasa rentabilidad del trigo tanto en Bosnia y Herzegovina como en la República Srpska. En cambio, la superficie sembrada con maíz aumentó pero los rendimientos son menores que el año pasado como efecto del tiempo caluroso y seco del verano de este año. También se vieron afectados los forrajes y los pastizales. Para satisfacer la demanda de consumo, las importaciones de trigo han ido creciendo constantemente y en la campaña comercial 2000/01 aumentarán, según las proyecciones, con respecto a las 290 000 toneladas importadas en 1999/2000.

BULGARIA (10 de noviembre)

En Bulgaria, se estima que las cosechas de trigo y cebada de este año estarán cercanas a los niveles del año pasado, situándose en 3,1 millones de toneladas y alrededor de 700 000, respectivamente. Sin embargo, la cosecha de maíz de verano quedó devastada por la sequía y los informes más recientes cifran la producción de maíz en alrededor de 800 000 toneladas, lo que se compara con un nivel medio de alrededor de 1,5 millones de toneladas en los últimos cinco años. Unas precipitaciones recibidas en las partes sudorientales del país a principios de octubre favorecieron la plantación de los cereales de otoño después de un período de condiciones secas. Según los primeros indicios, los agricultores búlgaros podrían tratar de plantar más trigo de invierno este año pero en definitiva ello dependerá de las condiciones atmosféricas de finales de octubre y principios de noviembre.

CROACIA (10 de noviembre)

La cosecha de trigo de 2000, estimada oficialmente en 1 080 000 toneladas, es mejor de lo que se había previsto después del tiempo caluroso y seco experimentado en mayo y junio. Este resultado es casi el doble del de 1999 (558 000 toneladas). Sin embargo, los cultivos de primavera han quedado muy afectados por la sequía y ahora se prevé que la producción de maíz será de sólo 0,8 millones de toneladas, ni siquiera 40 por ciento de la excelente cosecha del año pasado.

Es probable que la producción total de cereales descienda en 2000 cerca del 30 por ciento a 2,1 millones de toneladas. La sequía también ha afectado a la producción de otros cultivos alimentarios. Por consiguiente, la producción de remolacha disminuyó en casi una tercera parte, la de girasol en un 11 por ciento y la de papas en un 30 por ciento. La producción de frutas, uvas, pastizales y forrajes también resultó afectada.

A pesar de la disminución de la producción, el país prevé exportar en 2000/01 alrededor de 200 000 toneladas de trigo.

ESLOVENIA (10 de noviembre)

En Eslovenia se prevé para este año una ulterior disminución de la producción de cereales debido a las malas condiciones del tiempo durante la primavera y el verano. La producción total de cereales se pronostica en 400 000-450 000 toneladas.

ESTONIA (30 de noviembre)

Los informes oficiales indican una buena producción de cereales en 2000 que podría alcanzar un nivel excelente de 650 000 toneladas (peso bruto, equivalente a alrededor de 600 000 toneladas, peso limpio) obtenida de una superficie de 330 000 hectáreas. Los precios de los piensos deberían descender como efecto de la buena cosecha, superior en alrededor de un 25 por ciento a la del año pasado, y menguada producción pecuaria del primer semestre del 2000.

EX REPUBLICA YUGOSLAVA DE MACEDONIA (10 de noviembre)

En la ex República Yugoslava de Macedonia, tras unas condiciones favorables sobrevino una sequía durante la última parte de la primavera y en el verano que redujo los rendimientos de los cereales. La producción total de cereales en 2000 debería totalizar alrededor de 650 000 toneladas, de las cuales corresponderían al trigo alrededor de 320 000 toneladas.

FEDERACION DE RUSIA (6 de noviembre)

La producción de cereales y legumbres de 2000 es significativamente mejor que la del año pasado. La estimación de la producción hecha por la FAO es de 71 millones de toneladas, alrededor de 11 millones de toneladas más que la producción estimada en 1999, y un volumen situado en torno a la media. La estimación de la FAO es un 10 por ciento superior al pronóstico oficial de 65-66 millones de toneladas, debido a una notificación incompleta de la producción ya que la mayor parte de los servicios del sector agrícola se pagan en especie. La producción de trigo es estimada por la FAO en 40 millones de toneladas (alrededor de un 10 por ciento más que el pronóstico oficial), y la proporción del trigo de buena calidad es superior a la del año pasado. La FAO estima la producción de cereales secundarios en 30 millones de toneladas, frente a los 25 millones de toneladas del año pasado.

La plantación de cereales de invierno (principalmente trigo y centeno) que se recogerán el año próximo está prácticamente terminada. Los cultivos de invierno se han plantado en 14,3 millones de hectáreas, que se comparan con el objetivo de 14,6 millones de hectáreas.

Todo parece indicar que la cosecha de 2000 alcanza para cubrir las necesidades nacionales de alimentos y piensos y permite una pequeña reposición de las existencias. Si se concretizaran los pronósticos relativos a la cosecha, las importaciones de cereales en 2000/01 podrían reducirse a la mitad de los 8 millones de toneladas importados en 1999/2000.

La inseguridad alimentaria es más un problema de acceso que de disponibilidad de alimentos, debido a que la distribución de los ingresos es muy desigual. Un 50 por ciento de la población vive por debajo de la línea de pobreza, percibiendo 4,30 dólares EE.UU. por persona y día. Entre las causas específicas de la pobreza figura el retraso en el pago de jubilaciones, sueldos y salarios.

El conflicto en Chechenia en 1999 causó un desplazamiento masivo de la población, que en un número de 160 000 personas fueron a Ingushetia. Además, hay otras 170 000 personas desplazadas en Chechenia mismo. El PMA y las ONG asociadas están proporcionando asistencia alimentaria básica y complementaria a prácticamente todas las personas desplazadas en el interior (PDI) de Ingushetia. Se ha evitado el hambre en gran escala, pero las PDI siguen dependiendo en alto grado de la ayuda humanitaria. Por otra parte, las entregas de alimentos en Chechenia han sido mínimas debido a problemas de seguridad y de recursos. Una misión del PMA realizada en septiembre de 2000 observó que la población de Grozny no satisfacía sus necesidades alimentarias mínimas, ni tenía la posibilidad de constituir reservas para el invierno y estaba sobreviviendo gracias a diversos mecanismos de subsistencia.

En Chechenia, la producción agrícola de 2000 se vio muy comprometida por la situación de seguridad así como por la escasez de maquinaria, combustibles e insumos. También se señala que las perspectivas de la plantación de cereales de invierno para la cosecha del año próximo son sombrías debido a la falta de recursos financieros y de combustible. Los informes más recientes señalan que se han preparado solamente 40 000 hectáreas para la siembra de otoño.

HUNGRIA (10 de noviembre)

Las cosechas de cereales de Hungría se han visto gravemente afectadas por la sequía durante el período vegetativo de 2000, pero las condiciones para el trigo no han sido tan malas como en 1999 cuando el mal tiempo afectó también el período de siembra y, como consecuencia, la superficie descendió de forma pronunciada. La producción de trigo se estima ahora en alrededor de 3,7 millones de toneladas. Esto representa un volumen superior a la cosecha drásticamente menguada del año pasado (2,6 millones de toneladas), pero muy inferior a los niveles de 1997 y 1998, situados en torno a los 5 millones de toneladas. Los rendimientos de los cereales secundarios se han visto muy afectados por el tiempo excepcionalmente caluroso y seco imperante durante la primavera: la producción de cebada se estima en apenas 900 000 toneladas, frente al nivel medio de alrededor de 1,2 millones de toneladas, y la de maíz podría también ser muy inferior situándose en alrededor de 5 millones de toneladas, frente a más de 7 millones de toneladas en 1999, y a un nivel medio de alrededor de 6 millones de toneladas.

Para aliviar la escasez de piensos prevista en la actual campaña comercial, el Gobierno prevé la introducción de contingentes exentos de derechos para la importación de 100 000 toneladas y 20 000 toneladas de avena y cebada respectivamente, y está examinando la posibilidad de eliminar también los derechos de exportación para el maíz. Ya se están fiscalizando las exportaciones de maíz y dentro de poco podrían detenerse completamente .

LETONIA (6 de noviembre)

Las imágenes de satélite indican condiciones de crecimiento significativamente mejores que las del año pasado, a pesar del tiempo caluroso y seco imperante en mayo y junio. Unas buenas lluvias recibidas en julio y agosto proporcionaron una gran cantidad de suministros de humedad. Las superficies sembradas con cultivos de invierno aumentaron y las condiciones de la hibernación fueron buenas. La producción de cereales de 2000 se pronostica provisionalmente en cerca de 0,9 millones de toneladas, en torno al nivel medio y casi 0,1 millones de toneladas más que el año pasado. Como la producción pecuaria sigue siendo baja, las importaciones de cereales en los últimos años se limitan a alrededor de 50 000-70 000 toneladas por año, principalmente trigo panificable.

LITUANIA (6 de noviembre)

Las perspectivas para la cosecha de cereales de 2000 son satisfactorias. Las imágenes de satélite indican que la situación de los cultivos es significativamente mejor que la del año pasado, y que las precipitaciones excesivas recibidas en julio contribuyeron a contrarrestar la escasez de humedad registrada en junio. La superficie total sembrada con cereales, situada en 1 061 000 hectáreas, se mantuvo muy cercana a la del año pasado. Se prevé que la cosecha de cereales de 2000 se recuperará a un nivel cercano a los 2,4 millones de toneladas con respecto al nivel bajo de 2,1 millones de toneladas del año pasado, y que incluirá cerca de 0,9 millones de toneladas de trigo.

MOLDOVA (6 de noviembre)

Unas heladas intempestivas y la persistencia de la sequía desde abril hasta finales de julio han comprometido la cosecha de cereales de 2000 y afectado a la producción de forrajes, frutas y uvas. La producción de trigo, fijada inicialmente en 1 millón de toneladas, se estima oficialmente en 780 000 toneladas, volumen mejor que las estimaciones anteriores y cercano al bajo nivel del año pasado. La producción de cebada se estima en 152 000 toneladas. El resultado de la cosecha de maíz es todavía incierto pero el 40-50 por ciento de los cultivos sufrieron daños en las zonas más afectadas (Cahul, Tighina, Gaugazia y, en menor medida, Taraclia y Lapusna). Se prevé que la producción total de cereales de 2000 será muy inferior a la media e inferior al nivel bajo del año pasado (2,2 millones de toneladas).

La cosecha de trigo de 2000 alcanza para satisfacer las necesidades de consumo de alimentos pero la escasez y el precio elevado de los piensos obligarán a una considerable reducción de la cabaña. El Gobierno ha prohibido este año las exportaciones de trigo y está tratando de conseguir 60 000-80 000 toneladas para las reservas internas.

POLONIA (10 de noviembre)

En Polonia, la producción de cereales ha descendido de forma pronunciada en 2000 a alrededor de 22 millones de toneladas, el nivel más bajo desde 1994, y alrededor de un 15 por ciento por debajo de la media de los últimos cinco años. Las producciones de trigo y de todos los principales cultivos de cereales secundarios pequeños se vieron afectadas por una combinación de sequía en primavera y fuertes lluvias perjudiciales durante el período principal de la recolección. Sin embargo, la cosecha de maíz se benefició de las lluvias fuertes recibidas en el verano estimándose que ha alcanzado un nivel excelente de 900 000 toneladas, más del doble de la media de los últimos cinco años.

REPUBLICA CHECA (10 de noviembre)

En la República Checa, se estima que la producción de cereales de este año ha disminuido alrededor del 7 por ciento respecto a 1999 situándose en torno a los 6,5 millones de toneladas. El trigo y la cebada representan la mayor parte de la producción de cereales del país, que resultaron relativamente menos afectados por la sequía de principios de año que otros cultivos.

REPUBLICA ESLOVACA (10 de noviembre)

Contrariamente a lo que se había previsto muy al principio de la campaña, se estima que la producción total de cereales de la República Eslovaca es inferior a la cosecha ya menguada del año pasado. Tras unas condiciones favorables para la plantación y la hibernación, un tiempo caluroso y seco afectó a los cultivos en la primavera y el verano y los rendimientos han sido inferiores a lo normal. La producción total de cereales no debería superar con mucho los 2 millones de toneladas, que se compara con alrededor de 2,8 millones de toneladas en 1999.

RUMANIA (10 de noviembre)

En Rumania, las estimaciones oficiales más recientes cifran la producción de trigo de 2000 en alrededor de 4,3 millones de toneladas, 9 por ciento menos que en 1999 y alrededor de un 20 por ciento menos que la producción media de los últimos cinco años. Además, se señala que la calidad de los cultivos es considerablemente inferior a lo normal debido a la grave sequía imperante du-rante la primavera y el verano. La cosecha de maíz ha sido la más castigada por la sequía, mucho más de lo previsto, debido a que las condiciones secas continuaron prácticamente durante todo el período de crecimiento. Se señala que en muchas zonas los cultivos han quedado completamente destruidos y a principios de noviembre la cosecha se estimaba en apenas 4 millones de toneladas, frente a la media de los últimos cinco años situada en más de 10 millones de toneladas.

Como consecuencia de esta mala cosecha, se prevé una situación difícil en cuanto al suministro de cereales en los próximos meses y se necesitarán importaciones significativas antes de que termine la actual campaña comercial 2000/01 (julio/junio), en fuerte contraste con los años anteriores en los que Rumania había sido un exportador neto de cereales. En esta primera fase es difícil pronosticar la magnitud de las probables necesidades de importación del país, a causa principalmente de la incertidumbre que reina sobre la cantidad y calidad de las existencias de trigo y maíz que posee el sector agrícola de pequeña escala. Sin embargo, es probable que se necesiten al menos algunas importaciones de trigo de alta calidad para la fabricación de pan y cantidades significativas de maíz para los piensos. Al final de octubre el Gobierno anunció que permitirá importar hasta el 30 de junio de 2001 un total de 500 000 toneladas de maíz, exentas de derechos de aduana, para la preparación de piensos.

A principios de noviembre, se señaló que había terminado la plantación de trigo de invierno en alrededor de 1,7 millones de hectáreas, y la de cebada en alrededor de 250 000 hectáreas, lo que representa cifras cercanas a las de las superficies previstas y poco inferiores a las estimaciones del año pasado. Sin embargo, aunque la mayor parte de la siembra de otoño se realizó en el tiempo previsto, las perspectivas para las cosechas son inciertas porque se señala que la calidad de las semillas utilizadas este año fue en general inferior a lo normal y las condiciones de humedad del suelo siguen siendo desfavorables para la germinación y el arraigo de los cultivos. Si los cultivos no arraigan bien antes del período de latencia, estarán más expuestos a los rigores del invierno.

UCRANIA (6 de noviembre)

Habiéndose casi terminado de recoger todos loa cereales, salvo el maíz, se confirman los pronósticos relativos a una tercera mala cosecha consecutiva. Los rendimientos medios por hectárea señalados por el Gobierno son inferiores en alrededor de un 8 por ciento a los del año pasado. Sólo existen dudas sobre el resultado de la cosecha de maíz. Hasta que termine, la FAO pronostica provisionalmente la producción de cereales de 2000 en 25 millones de toneladas (incluidos unos 3,5 millones de toneladas de maíz). Esta estimación es superior en un 10 por ciento a lo que el actual informe oficial sobre los rendimientos podría indicar, teniendo en cuenta la posibilidad de una notificación incompleta. Este resultado negativo refleja los problemas cada vez mayores en materia de crédito y solvencia crediticia y, por lo tanto, para la movilización de insumos por parte de las fincas. La persistente interferencia del Gobierno en el mercado de cereales durante la presente campaña ha creado mucha incertidumbre, y a lo largo de los años ha resultado desfavorable para los productores y los comerciantes, reduciendo los incentivos para informar acerca de la producción y para comercializar legalmente.

En los primeros meses de la campaña comercial de 2000/01, el país ha sido un importador neto de cereales, debido en parte a que las autoridades aduaneras han interrumpido todas las exportaciones de cereales. En 1999/2000l, el país había sido un exportador neto de 2,4 millones de toneladas de cereales (principalmente trigo y cebada). En 1999/2000, las importaciones de trigo registradas oficialmente alcanzaron casi las 464 000 toneladas, y en la actual campaña comercial podrían superar esa cantidad.

Según los planes oficiales, la superficie sembrada con cultivos de invierno aumentará a 8,4 millones de hectáreas e incluirá 7,1 millones de hectáreas de trigo, así como 0,8 y 0,5 millones de hectáreas de centeno y cebada, respectivamente. Al 30 de septiembre, se habían sembrado alrededor de 6,3 millones de hectáreas con cultivos de invierno, incluidos 5,2 millones de hectáreas de trigo. Las condiciones durante la siembra y la disponibilidad de insumos fueron mejores que el año pasado, pero la última dista mucho de ser óptima.

YUGOSLAVIA, REP. FED. DE (SERBIA Y MONTENEGRO)* (8 de noviembre)

Los informes oficiales confirman el pronóstico de la misión de evaluación de cultivos y suministros alimentarios de la FAO y el PMA relativo a una cosecha de maíz reducida a causa de la sequía de este año. Todavía no se han publicado los datos definitivos, pero se pronostica oficialmente que la producción descenderá 40 por ciento a alrededor de 3,6 millones de toneladas (1999: 6,1 millones de toneladas), algo más que el pronóstico de la misión situado en 3 millones de toneladas. El potencial de rendimiento de los otros cultivos de primavera, como la remolacha y la soja, se ha visto también gravemente comprometido. La misión estimó la cosecha de trigo de 2000 en un volumen situado entre 1,7 millones de toneladas (hipótesis baja) y 1,8 millones de toneladas (hipótesis óptima), comparada con los 2 millones de toneladas de 1999. Desde comienzos de los años noventa, el sector agrícola del país ha acusado una disminución general, pero la campaña agrícola de 1999/2000 fue particularmente difícil. Las catástrofes atribuidas al hombre y las naturales (sanciones, bombardeos, inundaciones, anegamientos y sequías prolongadas), la escasez de insumos y los precios bajos han tenido como efecto la reducción de la superficie plantada y de los rendimientos medios de los cultivos tanto de invierno como de primavera.

Desde octubre, la población ha sufrido una grave escasez de energía y fuertes aumentos de los precios de los alimentos básicos que aumentaron la tasa de inflación a 27 por ciento sólo en el mes de octubre. En julio aumentó 66 por ciento el precio subvencionado del pan. Los precios de algunos productos alimenticios básicos, por ejemplo leche, pan, azúcar, aceite vegetal, están controlados y subvencionados, pero la disponibilidad de los suministros a precios controlados es limitada. El país exporta productos agroalimentarios para contribuir a cubrir sus importaciones de combustible y otros elementos esenciales, pero la disponibilidad exportable en 2000/01 es reducida. En efecto, en respuesta a la escasez de piensos, que obligó a una fuerte reducción del número de cabezas de ganado, se está ejerciendo presión para prohibir todas las exportaciones de maíz.

El PMA está ayudando actualmente a alrededor de 700 000 refugiados y personas socialmente vulnerables. Además, la CICR presta asistencia a 200 000 PDI con raciones alimentarias individuales y a 100 000 beneficiarios (casos sociales) con una comida caliente en el marco de su programa de comedores populares.


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