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Los primeros pronósticos de la FAO relativos a la producción de cereales en 2002 y a su utilización en 2002/03 indican que la producción será inferior a la utilización prevista, de manera que en 2003 se tendrá que recurrir a las existencias por cuarto año consecutivo. De todas maneras, se prevé una gran cantidad de suministros, particularmente de trigo y cereales secundarios.

Pese a unas perspectivas alimentarias mundiales en general favorables, en unos 34 países de todo el mundo están escaseando los alimentos. La situación del África austral suscita motivos particulares de preocupación (véase el recuadro en la página 7).

La producción mundial de cereales en 2002 se pronostica en 1 905 millones de tonela-das (incluido el arroz en equivalente elaborado), un 1,1 por ciento más que en 2001. La pro-ducción de trigo se pronostica en 603 millones de toneladas, lo que representa un aumento del 3,7 por ciento, mientras que la de cereales secundarios debería de aumentar marginal-mente a 910 millones de toneladas. En cambio, la producción de arroz se pronostica provisio-nalmente en 392 millones de toneladas (elaborado), o sea 1,1 por ciento menos que en 2001.

El primer pronóstico de la FAO sobre el comercio mundial de cereales de 2002/03 es de 236 millones de toneladas, un millón de toneladas menos que el volumen estimado en 2001/02. En la campaña comercial 2002/03 (julio/junio) se prevé una disminución de las importaciones mundiales de trigo, mientras que las de cereales secundarios deberían de aumentar. Para 2003 se pronostica provisionalmente una merma del comercio de arroz.

Los precios internacionales del trigo y los cereales secundarios siguen estando bajo una presión a la baja, debido a la gran cantidad de suministros exportables y a unas perspectivas de producción en general favorables. Los del arroz se han mantenido constantes a pesar de la llegada al mercado de los suministros de la nueva cosecha.

Se prevé una recuperación de los suministros de carne en los mercados internaciona-les en 2002 al levantarse las restricciones impuestas a los países exportadores de carne afectados por epizootias. La normalización de los hábitos de consumo debería favorecer el aumento del comercio, pero la gran cantidad de suministros de todos los tipos de carne probablemente atenuará cualquier movimiento alcista de importancia en los precios.

Los precios internacionales de los productos lácteos han descendido considerablemen-te desde mediados de 2001, con el resultado de que los de la mayoría de los productos lácteos se encuentran actualmente en niveles pocas veces vistos en el último decenio. Daría la impresión de que esta tendencia ha tocado fondo y que los precios de algunos productos lácteos podrían aumentar durante el segundo semestre.

Se pronostica una desaceleración de la producción mundial de aceites y grasas en 2001/02, pero podría aumentar la de las tortas y harinas. Mientras se prevé una ulterior recuperación de los precios internacionales de los aceites y grasas con respecto a la campaña anterior, el sector de las tortas y harinas podría sufrir una presión a la baja ya que la oferta aumenta relativamente más que la demanda.

Se pronostica un fuerte crecimiento de la producción mundial de legumbres en 2002, y también podría incrementarse el comercio, pero es probable que los precios desciendan en vista del volumen grande de los suministros exportables previstos.

Se prevé un nuevo aumento de la producción azucarera en 2002/03, presagio de otra temporada con exceso de suministros y precios potencialmente más débiles.