FAO/SMIA - Perspectivas alimentarias No.3 - julio 2002 p.5

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Perspectivas actuales de la producción y las cosechas

Situación por regiones

Asia

Lejano Oriente: En el Asia meridional, la campaña del monzón sudoccidental que va de junio a septiembre ha comenzado con un ligero retraso, pero las perspectivas apuntan a un desarrollo normal. En otras partes, las lluvias torrenciales caídas en el centro y oeste de China seguidas de unas inundaciones excepcionalmente violentas han causado desprendimientos de tierras, pérdidas de vidas y daños a la infraestructura y los cultivos. En algunos países asiáticos cunde el temor de un retorno en 2002 del fenómeno meteorológico de El Niño, causa de sequías, pero aunque las condiciones atmosféricas parecieran favorecerlo, lo más probable es que se trate de un fenómeno débil.

La recolección del trigo de invierno ha terminado o está muy avanzada en la subregión, mientras que el trigo de primavera se está desarrollando en condiciones en general favorables. La estimación más reciente de la producción triguera de China en 2002 es de 87,8 millones de toneladas, frente a los 92,4 millones de toneladas indicados en el informe anterior, y el nivel más bajo desde 1989. Esta revisión se debe principalmente al tiempo seco registrado durante la primavera en los llanos de China septentrional y a las precipitaciones excesivas caídas en las partes centrales del país. En otras partes del Lejano Oriente, unas condiciones de crecimiento favorables impulsaron la producción de trigo. Así, por ejemplo, en la India las estimaciones oficiales más recientes apuntan a una cosecha de 73,5 millones de toneladas, superior tanto a la producción de 2001 (68,8 millones de toneladas) como a la media de 1997-01 (70,3 millones de toneladas), mientras que en el Pakistán la producción de trigo se estima en 19,2 millones de toneladas, lo que representa un incremento del 1 por ciento respecto al año pasado.

En algunos países se han terminado de sembrar los cultivos de cereales secundarios de 2002, mientras que en otros se están sembrando ahora con el comienzo del monzón sudoccidental. En China, pese a las condiciones secas imperantes durante el período de siembra en las zonas nordorientales, la producción de maíz debería aumentar a 120,2 millones de toneladas, frente a los 114,3 millones de toneladas en 2001, mientras es probable que la producción de otros cereales secundarios se mantenga bastante invariada respecto al año anterior. Suponiendo lluvias monzó-nicas normales, la producción de cereales secundarios de la India se pronostica en 33 millones de toneladas, alrededor de un 3 por ciento más que en 2001.

En los países situados en el hemisferio sur y en la zona ecuatorial está terminando la temporada principal del arroz de 2002. En Indonesia, los pronósticos oficiales relativos a la producción arrocera del país en 2002 son contradictorios; en espera de una información más segura sobre la magnitud de la cosecha principal recogida recientemente y sobre la probabilidad de que El Niño afecte a la cosecha secundaria del país, en el presente informe se ha utilizado una estimación de 48,7 millones de toneladas. De confirmarse esta cifra, ello implicaría una reducción de cerca de un millón de toneladas con respecto a la última campaña, debida principalmente a los problemas de las inundaciones experimentados en los primeros meses de este año.

Con la llegada de las lluvias monzónicas se han comenzado a sembrar los cultivos de arroz de la temporada principal en el hemisferio norte. En Bangladesh, se pronostica que la producción arrocera aumentará a un nivel récord de 39 millones de toneladas, 1,2 millones de toneladas más que en 2001, debido principalmente a una mayor utilización de semillas híbridas y a los incentivos dados al sector de regadío. Los meteorólogos de la India han pronosticado un decimocuarto año consecutivo de lluvias monzónicas ‘normales’. En consecuencia, la producción arrocera del país en 2002 se pronostica en 136 millones de toneladas, 3 millones de toneladas más que el pronóstico anterior, y una cifra cercana al récord alcanzado en 2001. En el Pakistán, sigue escaseando el agua para riego. En consecuencia, las perspectivas para la campaña arrocera de 2002 siguen siendo poco halagüeñas. La producción se pronostica oficialmente en 5,2 millones de toneladas, 400 000 toneladas menos que la cosecha de 2001 y el nivel más bajo desde 1994.

Tras la publicación de las cifras oficiales de la Oficina Estatal de Estadísticas sobre la producción, la estimación de la producción arrocera de 2001 de China (Continental) se ha elevado en 600 000 toneladas a 177,6 millones de toneladas. En cuanto a la temporada de 2002, se pronostica una producción ligeramente superior (177,8 millones de toneladas). Lo que señala una inversión de tendencia respecto a la contracción experimentada en las dos últimas campañas. El incremento se debería a un aumento del 6 por ciento de la cosecha intermedia, que compensaría la disminución del 8 por ciento prevista tanto en la cosecha temprana como en la cosecha tardía. Dadas las posibilidades de resiembra, no se prevé que los recientes problemas de las inundaciones registradas en el país malogren las perspectivas para la campaña actual.

En Tailandia, las copiosas precipitaciones recibidas últimamente en las zonas arroceras han favorecido la producción de la temporada principal de 2002 y disipado en gran parte los temores respecto a los posibles efectos de El Niño. El gobierno ha extendido hasta finales de julio de este año su programa, iniciado en 2001, de compras de la segunda cosecha de arroz, habiendo fijado los precios de intervención a niveles muy superiores a los precios de mercado. En Filipinas, está casi terminando la siembra de los cultivos de la temporada principal. Según los pronósticos, los efectos negativos que el fenómeno meteorológico de El Niño podría causar en la presente cosecha serían exiguos. La producción arrocera de 2002 se pronostica en 12,9 millones de toneladas, cifra marginalmente inferior al nivel récord alcanzado en la última temporada.

En Viet Nam, el cultivo de la cosecha de arroz de verano y otoño se ha beneficiado de una vuelta a la normalidad de los niveles de humedad del suelo en las principales zonas productoras del delta. Las estimaciones oficiales continúan apuntando a una producción arrocera de 32,3 millones de toneladas para la campaña actual, 300 000 toneladas más que el año anterior, pese a que no se han cultivado las tierras marginales.

La ayuda constante del Gobierno de Myanmar destinada a aumentar la producción, junto con unas previsiones más optimistas sobre las condiciones de crecimiento, sugieren una cosecha del orden de los 21 millones de toneladas de arroz en 2002, volumen ligeramente inferior al de las excelentes cosechas de las últimas dos campañas. En Laos, las fuentes oficiales pronostican una producción arrocera de 2,4 millones de toneladas en 2002, 200 000 toneladas más que el nivel récord de la última campaña. Un incremento acorde con la fuerte tendencia alcista observada en los últimos años, basada principalmente en las inversiones en gran escala dedicadas a la construcción de infraestructuras, incluida la de riego. De forma análoga, en Camboya un aumento de la superficie arrocera y unas mejoras en los rendimientos han llevado a pronósticos oficiales de una cosecha récord de arroz de 4,7 millones de toneladas, un 15 por ciento más que en 2001.

En la República Popular Democrática de Corea, gracias a unas condiciones de crecimiento iniciales favorables se ha podido comenzar la temporada principal del arroz, cuya producción se pronostica en 2 millones de toneladas, sin modificaciones respecto al año anterior. Con el afán de limitar las excesivas existencias arroceras, el Gobierno de la República de Corea ha establecido el objetivo de producción de arroz elaborado para la presente campaña en 5,2 millones de toneladas, alrededor de 0,3 millones de toneladas menos que el volumen obtenido en 2001. Sin embargo, todo pareciera indicar que el objetivo será superado en 200 000 toneladas.

Cercano Oriente: Las condiciones atmosféricas favorables imperantes en la mayoría de los países han dado un gran impulso a la producción interna de alimentos. En el Afganistán, sin embargo, los efectos de la inseguridad que reina en el país se han visto agravados en algunas partes por una plaga de langostas, la peor en 30 años, y en otras por unas inundaciones que han afectado a las perspectivas de las cosechas. Una misión conjunta FAO/PMA de evaluación de los cultivos y el suministro de alimentos acaba de terminar sus trabajos de campo y dentro de poco publicará un informe. Según las proyecciones, la producción de cereales en 2002 en Turquía, Siria y Jordania será de un nivel entre medio y superior a la media, debido a unas precipitaciones suficientes recibidas durante el período vegetativo. Gracias a la mejora de las condiciones atmosféricas, el Irán espera una producción de trigo de 9,5 millones de toneladas, volumen superior a la media, lo que representa una considerable recuperación con respecto a la cosecha afectada por la sequía de 2001 (7,5 millones de toneladas).

La CEI en Asia: La cosecha de trigo de los ocho países de la CEI situados en Asia se pronostica este año en 19 millones de toneladas, alrededor de 2,3 millones de toneladas menos que la cosecha mejorada de 2001. Se prevé que la mayor parte de la contracción (alrededor de 3 millones de toneladas) tendrá lugar en Kazajstán, que produce más de la mitad de la producción total de trigo de la región. Azerbaiyán y Kirguistán han aumentado la superficie sembrada con trigo, mientras que en Tayikistán, Georgia y Uzbekistán se prevé que los suministros de trigo seguirán escaseando. Si predominan condiciones atmosféricas favorables, se pronostica para este año una cosecha de cereales secundarios del orden de los 4,4 millones de toneladas, inferior en más de 500 000 toneladas a la de 2001. Los cereales secundarios comprenden principalmente la cebada, pronosticada en 2,8 millones de toneladas, y el maíz, pronosticado en 1,2 millones de toneladas.

En Uzbekistán, la abundancia de agua ha permitido una expansión significativa de la superficie sembrada con arroz, cuya producción alcanzará en 2002, según pronósticos oficiales, casi las 200 000 toneladas, el doble de la cosecha afectada por la sequía del año anterior.

África

África septentrional: Se ha comenzado a recoger la cosecha de trigo de 2002 en toda la subregión. Las informaciones más recientes apuntan a una producción total de 12,7 millones de toneladas, semejante a la cosecha del año pasado y superior a la media de los últimos cinco años. En la última parte de la campaña las condiciones de crecimiento mejoraron en Argelia y Marruecos con la llegada de las precipitaciones, tan necesarias después de un período prolongado de sequía. En ambos países se pronostican producciones superiores a la media de 3,4 millones de toneladas y 2 millones de toneladas, respectivamente. También en Egipto, donde la mayor parte de los cultivos son de regadío, se pronostica una producción superior a la media y superior en un 6 por ciento a la del año pasado (6,6 millones de toneladas).

También se han empezado a recoger las cosechas de cereales secundarios, principalmente cebada y maíz, este último sólo en dos países. En cuanto al trigo, las perspectivas son mejores de lo previsto, debido principalmente a la llegada de unas lluvias tardías en Marruecos que beneficiaron a los cultivos de cebada. La producción total de cereales secundarios en la subregión se cifra ahora en 10,1 millones de toneladas.

Aunque sujeta todavía a un límite máximo, la superficie dedicada al arroz debería aumentar de forma pronunciada en la presente campaña, lo cual, junto con una constante mejora de los rendimientos, impulsaría la producción a un nivel sin precedente de 6,1 millones de toneladas, alrededor de 800 000 toneladas más que en la última campaña.

África Occidental: En el África occidental, las primeras lluvias se recibieron a principios de marzo en las partes meridionales de los países costeros del Golfo de Guinea, en los que permitieron la siembra de la primera cosecha de maíz. En las partes septentrionales las lluvias llegaron a principios de abril, y se pudieron sembrar el mijo y sorgo. En Sierra Leona, el sector agrícola está mejorando gracias a la ejecución de programas de rehabilitación, pero en Liberia los disturbios civiles continúan impidiendo la mayor parte de las actividades. En el Sahel, con la llegada de la estación de las lluvias a finales de abril o en mayo se pudieron comenzar los preparativos de la tierra y la siembra de los cereales secundarios en el sur del Níger, Malí, Burkina Faso y el Chad. Las siembras irán avanzando hacia el norte a medida que vayan comenzando las lluvias. La disponibilidad de semillas es por lo general suficiente, pero es probable que haya escaseces localizadas en Mauritania y Cabo Verde, debido a la cosecha reducida de 2001 y a unas fuertes lluvias no estacionales recibidas a principios de enero, y en Guinea-Bissau, como consecuencia del retraso de las lluvias.

La campaña arrocera de 2002 ha comenzado en algunos países de África Occidental con condiciones atmosféricas en general favorables. En Nigeria, las perspectivas iniciales para la cosecha de 2002 se hicieron particularmente prometedoras tras el aumento de los derechos de importación aplicado a principios de este año que hizo subir los precios internos, y debido también a la introducción de la semilla híbrida NERICA que gozó de amplia publicidad y que debería aumentar los rendimientos. Sin embargo, el retraso de las lluvias en la mayor parte del norte de Nigeria ha alimentado los temores de una pérdida de cosechas en esa parte. En Sierra Leona, la producción arrocera debería continuar aumentando como consecuencia del incremento de las siembras efectuadas por los refugiados y agricultores desplazados que han vuelto a sus hogares, así como de las condiciones mejoradas para la distribución de los insumos agrícolas. En Liberia, los conflictos civiles continúan trastornando el cultivo del arroz.

África Central: En el África Central, hasta ahora las condiciones de crecimiento son favorables en el Camerún y la República Centroafricana. Tanto en la República del Congo como en la República Democrática del Congo las actividades agrícolas se ven obstaculizadas por los disturbios civiles.

África Oriental: En el Sudán se ha terminado de recoger la cosecha de trigo de 2002, cuya producción se estima provisionalmente en 315 000 toneladas, alrededor de un 5 por ciento más que la cosecha del año pasado y un volumen semejante a la media de los últimos cinco años. En Etiopía y Kenya, las perspectivas iniciales son en general favorables no obstante la sequía no estacional reinante en algunas partes de Kenya.

En algunos países de la subregión se han comenzado a sembrar los cereales secundarios de la temporada principal de 2002, mientras que en otros los cultivos están madurando y acercándose al período de recolección. Las perspectivas iniciales son contradictorias. En Etiopía, las perspectivas para la cosecha de cereales secundarios de 2002/03 han mejorado gracias a unas lluvias benéficas recibidas en la temporada secundaria (“belg”) que también favorecieron la preparación de la tierra para los cultivos de la temporada principal (“meher”). En Kenya, las perspectivas son más bien variadas, ya que en algunas partes las lluvias intensas y las inundaciones han destruido los cultivos mientras que en otras la sequía los ha marchitado. En Uganda y Tanzanía, las perspectivas para los cereales secundarios de la temporada principal de 2002 son en general favorables pese a unas condiciones secas localizadas. En. Somalia, las lluvias buenas recibidas en abril y mayo en las principales zonas agrícolas han mejorado las perspectivas de las cosechas. Sin embargo, una reciente escalada de los conflictos ha desplazado a un gran número de personas y puede que afecte negativamente el desarrollo de los cultivos. En el Sudán y Eritrea, está a punto de comenzar la siembra de los cultivos de la temporada principal de 2002.

Producción mundial de cereales

  Trigo Cereales secundarios Arroz (cáscara) Total
2001 2002
pronóst.
2001 2002
pronóst.
2001 2002
pronóst.
2001 2002
pronóst.
  (...................................................millones de toneladas...............................................)
Asia 239,6 240,6 205,0 212,1 539,4 538,7 983,9 991,4
África 17,9 17,3 81,1 78,9 17,2 18,1 116,2 114,3
América Central 3,3 3,2 30,0 29,8 2,4 2,3 35,6 35,3
América del Sur 21,0 21,7 71,6 64,9 19,8 19,9 112,4 106,5
América del Norte 74,6 72,6 285,3 295,6 9,7 9,4 369,5 377,7
Europa 200,9 202,0 221,2 211,3 3,2 3,3 425,2 416,6
Oceanía 24,2 20,7 12,4 10,8 1,8 1,3 38,4 32,9
TOTAL MUNDIAL 581,4 578,2 906,5 903,5 593,3 593,0 2 081,3 2 074,6
          (397)1/ (397)1/ (1 885)2/ (1 878)2/
Países en desarrollo 256,9 260,4 374,7 371,7 567,0 567,5 1 198,7 1 199,7
Países desarrollados 324,5 317,7 531,8 531,8 26,3 25,5 882,6 875,0

Fuente: FAO

1/ Arroz elaborado. 2/ Incluye el arroz elaborado.

África Austral: La recolección de los cereales secundarios de la temporada principal de 2002 está muy avanzada. El pronóstico más reciente de la FAO cifra la producción total de la subregión en 14,7 millones de toneladas, prácticamente invariada respecto a la cosecha menguada del año pasado. La producción de maíz se estima en 13,6 millones de toneladas, solo ligeramente superior al nivel de 2001Los cultivos se vieron perjudicados por una racha seca registrada entre enero y marzo en zonas extensas de la subregión o, en algunas partes, por las lluvias excesivas. La producción disminuyó por segundo año consecutivo en la mayoría de los países, salvo en Sudáfrica y Mozambique. En Sudáfrica, las condiciones secas de la presente campaña fueron menos graves y se pronostica una producción de maíz superior en un 5 por ciento a la cosecha menguada del año pasado, situándose en 8,9 millones de toneladas. Ello se debe principalmente al aumento del 19 por ciento de la superficie plantada y a unas condiciones atmosféricas en general satisfactorias. En cambio, en Zimbabwe los efectos combinados de una sequía generalizada, y una ulterior disminución de la superficie sembrada en el sector comercial debida a las actividades de adquisición de tierras, se tradujeron en una producción de maíz que alcanzó sólo una cuarta parte del buen nivel de hace dos años. En Zambia, los rendimientos de los cultivos acusaron una merma pronunciada en 5 de las 9 provincias debida un tiempo seco prolongado. La producción del maíz se estima en 606 000 toneladas, un 24 por ciento menos que el nivel reducido de 2001 y un 42 por ciento menos que el nivel normal de 2000. En Malawi, la producción de maíz disminuyó en un 10 por ciento con respecto a la mala cosecha del año pasado, situándose en alrededor de 1,5 millones de toneladas. Ello se debe principalmente al tiempo seco imperante durante los meses de febrero y marzo y al cese temprano de las lluvias en el mes de abril. El consumo de maíz verde antes de la cosecha, debido a la grave escasez de alimentos registrada al principio del año, disminuyó ulteriormente la producción. También hubo una grave sequía y merma de la producción de cereales secundarios en Swazilandia, Botswana y Namibia. En Lesotho, las lluvias excesivas caídas durante el período de siembra, seguidas de granizos y heladas, redujeron en una tercera parte la producción de maíz con respecto al nivel ya bajo del año anterior. En cambio, en Mozambique la producción de maíz de este año aumentó en un 8 por ciento con respecto al año anterior, a 1,2 millones de toneladas, pero en las provincias meridionales la producción fue muy escasa. En Angola, la cosecha de cereales secundarios disminuyó en un 6 por ciento debido a las lluvias tardías y a las actividades militares, pero la producción de la cosecha principal de maíz se mantuvo invariada.

Ha terminado la siembra de los cultivos de trigo de 2002, que se cosecharán a partir de octubre. Los primeros indicios apuntan a una probable disminución de la producción con respecto al año anterior. En Sudáfrica, el mayor productor de la subregión, las intenciones de siembra orientaron hacia una contracción del 7 por ciento con respecto a la última campaña, debido al aumento de la superficie sembrada con cultivos de verano y a los problemas relacionados con el sistema de clasificación del trigo. En Zimbabwe, las perspectivas son desfavorables debido a las actividades de adquisición de tierras en las explotaciones comerciales, siendo probable una acentuada reducción de la superficie plantada y de los rendimientos. Las informaciones más recientes confirman para la subregión una cosecha total de trigo de 2001 estimada en cerca de 2,9 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento más que el nivel del año anterior y superior a la media.

En Madagascar, las excesivas precipitaciones caídas durante el ciclón registrado recientemente han trastornado la cosecha de arroz de 2002, cuya cantidad y calidad son motivo de preocupación. La producción arrocera de este año se pronostica en 2,4 millones de toneladas, 200 000 toneladas menos que la de 2001.

América Central y el Caribe

Ha terminado últimamente en las principales zonas productoras del noroeste de México la recolección de la cosecha de trigo de regadío de 2002, cuya producción se estima provisionalmente en un nivel situado en torno a la media de alrededor de 3,2 millones de toneladas, ligeramente inferior al de la cosecha de 2001.

Con la llegada de las lluvias estacionales se han comenzado a sembrar en todos los países centroamericanos los cultivos de cereales secundarios y frijoles de la primera temporada de 2002/03. Las lluvias han sido particularmente intensas en Costa Rica, El Salvador, Honduras y Nicaragua, con inundaciones en algunas partes. Se han señalado daños considerables a las viviendas e infraestructuras rurales, pero hasta ahora los nuevos cultivos no han sufrido daños de consideración. En Guatemala y Panamá se han recibido precipitaciones estacionales normales, y se espera una recuperación global de la producción con respecto al año pasado, cuando los cultivos de la primera temporada (cosecha principal) se vieron gravemente afectados por la sequía y otros fenómenos meteorológicos adversos. En el Caribe, se han comenzado a sembrar los cultivos de maíz de este año en Cuba y Haití, donde hasta mediados de mayo habían predominado condiciones atmosféricas secas. En cambio, las intensas lluvias e inundaciones registradas a principios de junio en las partes meridionales de Haití han causado daños a las viviendas y a la infraestructura y, posiblemente, también a los cultivos, aunque todavía no se dispone de una evaluación pormenorizada de los daños sufridos. También se registraron lluvias intensas a mediados de junio en la República Dominicana, donde en mayo se había comenzado a sembrar el maíz y sorgo de secano así como otros cultivos alimentarios menores.

En América Central, el mal tiempo ha causado algunos trastornos a la siembra de los cultivos de arroz de la nueva campaña. Muchos países de la región habían postergado la siembra más de un mes en previsión de las precipitaciones, y las recibidas últimamente han disipado los temores de una disminución significativa de la cosecha de arroz de 2002.

América del Sur

La siembra de la cosecha de trigo de 2002 está muy avanzada en el Brasil, donde unas lluvias entre normales y abundantes han aumentado la humedad del suelo y beneficiado a los cultivos. Se estima que la superficie sembrada ha aumentado considerablemente en comparación con 2001, y los pronósticos oficiales apuntan inicialmente a una producción muy superior a la media. En la Argentina, recién se había empezado a sembrar a mediados de junio y, según los pronósticos oficiales, la superficie debería ser ligeramente menor que la de 2001, debido principalmente a la incertidumbre que reina en los sectores comerciales ante la difícil situación económica y financiera por la que atraviesa el país. En Chile y el Uruguay, recién se han empezado a sembrar los cultivos de trigo; en el último de los países indicados se prevé un aumento considerable de la superficie plantada. En los países andinos, se ha empezado a recoger la cosecha de trigo de 2002 en el Perú, cuya producción se pronostica inicialmente en una producción superior a la media de alrededor de 190 000 toneladas, mientras que en Bolivia se están realizando los preparativos de la tierra para la siembra de los cultivos de trigo de la segunda temporada (de invierno).

En las zonas australes de la subregión está muy avanzada la recolección de las cosechas de cereales secundarios de 2002, principalmente maíz. En la Argentina, las informaciones más recientes apuntan a una producción de maíz del orden de los 13,5 millones de toneladas, superior a los pronósticos anteriores, pero muy inferior a la media de los últimos cinco años. La escasa producción se debe a las intensas lluvias recibidas durante el período de siembra, que contribuyeron a reducir la superficie sembrada, y a unas semanas de tiempo seco durante el período vegetativo, que afectaron a los rendimientos. En el Brasil, unas lluvias benéficas recibidas en mayo mejoraron las condiciones de crecimiento de los cultivos de maíz de la segunda temporada (“zafrinha”). Se prevé una cosecha excelente, y la producción total de maíz para 2002 se estima provisionalmente en un volumen superior a la media de 36 millones de toneladas. En Chile, la producción de maíz ha sido inferior a la media, mientras que en el Uruguay se ha obtenido una producción satisfactoria. En los países andinos, en Bolivia se está preparando la tierra para la siembra de los cultivos de cereales secundarios de la segunda temporada; mientras que en el Perú prácticamente se ha terminado de recoger la cosecha de maíz blanco de 2002 y la del maíz amarillo está en su apogeo, previéndose cosechas excelentes en ambos casos. En el Ecuador, se ha comenzado a re-coger la cosecha de maíz, y se prevé una contracción respecto al nivel superior a la media de 2001 debida a las lluvias fuertes que durante varias semanas afec-taron negativamente a los cultivos. No obstante, se pronostica provisionalmente una producción cercana a la media. En Colombia, se han comenzado a sembrar los cultivos de maíz de la primera temporada de 2002/03, y la superficie sembrada debería aumentar con respecto al nivel ya superior a la media del año pasado. En Venezuela, el mejoramiento de las condiciones atmosféricas en las últimas semanas ha beneficiado la siembra de los cultivos de maíz de 2002 y de otros cultivos alimentarios.

En el Brasil está casi terminada la recolección de la cosecha de arroz de 2002, cuya producción ha sido estimada por fuentes oficiales en 11 millones de to-neladas, nivel muy inferior a lo previsto, pero superior en 600 000 toneladas a la de 2001. La cosecha de Argentina se cifra ahora oficialmente en 680 000 toneladas, un 20 por ciento menos que en 2001 y casi un 50 por ciento menos que el nivel récord de 1997. Los factores principales que explican esta contracción son las siguientes: la reducción de los cultivos de arroz determinada por los precios, las recientes limitaciones de la superficie sembrada acordadas por el MERCOSUR, y la inestabilidad económica.

América del Norte

Según se prevé, la producción de trigo de los Estados Unidos descenderá ulteriormente este año hasta posiblemente menos de 50 millones de toneladas, por primera vez desde 1993. La superficie sembrada con trigo de invierno que se cosechará en 2002 se pronostica ahora en 12,2 millones de toneladas, alrededor de un 4 por ciento menos que en 2001 y una de las superficies más reducidas que se haya registrado hasta ahora. Además, las perspectivas para los rendimientos han empeorado con la persistencia de la sequía en algunos de los principales estados productores. El pronóstico oficial más reciente relativo a la producción de trigo de invierno de 2002 es de 33,7 millones de toneladas, un 9 por ciento menos que el nivel del año anterior. Con respecto al trigo de primavera, la siembra estaba prácticamente terminada al final de mayo y, de concretizarse las indicaciones del informe del USDA, la superficie disminuirá en alrededor de un 3 por ciento con respecto a 2001, situándose en 7,3 millones de hectáreas. Por consiguiente, como las actuales previsiones relativas a la superficie sembrada y a los rendimientos apuntan, en el mejor de los casos, a niveles normales, también se prevé una disminución de la producción de trigo de primavera con respecto al año anterior. A principios de junio la producción total de trigo de 2002 se pronosticaba en 49,6 millones de toneladas, un 7 por ciento menos que el nivel del año anterior. En el Canadá, las informaciones más recientes confirman las previsiones anteriores de una disminución de la superficie total de trigo que se cosechará en 2002. El pronóstico oficial más reciente cifra la superficie de trigo que se recogerá dentro de unos meses en 10,5 millones de hectáreas, alrededor de un 4 por ciento menos que el año anterior. El rendimiento medio previsto se cifra actualmente en cerca de 2,2 toneladas por hectárea, algo menos que el pronóstico anterior debido a unas condiciones extremadamente secas imperantes en Saskatchewan en el oeste del Canadá, pero aún así muy superior al nivel reducido del año anterior. La producción total de trigo del país se pronostica ahora en poco más de 23 millones de toneladas, alrededor de 2,7 millones de toneladas más que en 2001.

Con respecto a los cereales secundarios, en los Estados Unidos la siembra de los cultivos principales estaba prácticamente terminada a mediados de junio. Según el informe del USDA, se prevé un aumento del 4 por ciento de la superficie sembrada con maíz, tras las reducciones del año pasado debidas al tiempo húmedo, mientras que, por el contrario, se pronostica para el sorgo una fuerte disminución del 12 por ciento. En base a las superficies sembradas que se acaban de indicar, a la situación en general buena de los nuevos cultivos a mediados de junio, y suponiendo condiciones atmosféricas normales durante el resto de la temporada, se pronostica para los Estados Unidos una producción total de cereales secundarios de 2002 del orden de los 267 millones de toneladas, lo que representaría un aumento de alrededor del 2 por ciento con respecto al año anterior. De este total, corresponderían al maíz 245 millones de toneladas. En el Canadá, los informes más recientes continúan apuntando a un aumento de la superficie sembrada con cereales secundarios en esta primavera. La superficie de cebada debería aumentar en un 11 por ciento a aproximadamente 4,8 millones de hectáreas; la de centeno, en casi un 30 por ciento, a alrededor de 1,6 millones de hectáreas; y la de maíz en un 8 por ciento, a 1,3 millones de toneladas. Las proyecciones relativas a los rendimientos de los cereales secundarios también son más favorables que el año anterior, pronosticándose la producción total de cereales secundarios en 28,2 millones de toneladas, un 23 por ciento más que el año pasado.

La siembra de los cultivos de arroz de 2002 está llegando a su término en los Estados Unidos. La primera estimación oficial de la nueva cosecha de arroz se cifra en 9,4 millones de toneladas, que sería la segunda cosecha más grande que se recuerde en el país. Según se prevé, la vuelta a rendimientos normales es lo que explicará la contracción de 200 000 toneladas con respecto al nivel sin precedentes del año pasado.

Europa

En la CE, se pronostica que en 2002 la producción de trigo aumentará de forma pronunciada tras una importante expansión de la superficie sembrada con trigo de invierno, a expensas principalmente de los cereales secundarios. Se señala también que se han sembrado con trigo algunas tierras dedicadas anteriormente a cultivos no cerealeros o detraídas. Además, unas condiciones invernales en general benignas han favorecido el desarrollo de los cultivos durante el invierno y la primavera en la mayor parte de la Comunidad y las perspectivas para los rendimientos son buenas. Ya se ha comenzado a cosechar en algunos países del sur, como España e Italia. Se prevé que donde más aumentará la producción será en Francia y el Reino Unido, pero también se señalan incrementos importantes en Italia y España. La producción de Alemania se mantendrá cercana al nivel del año pasado. La producción total de trigo de la Comunidad se pronostica en poco menos de 106 millones de toneladas, frente a los 91,7 millones de toneladas del año pasado. Las perspectivas para las cosechas de cereales secundarios son menos seguras. Aunque se supone una reducción de la superficie total sembrada, debido principalmente a la siembra de trigo en vez de cebada de invierno, las condiciones favorables de este año podrían dar lugar a rendimientos mejores. La FAO pronostica actualmente la producción total de cereales secundarios de la Comunidad en 106,7 millones de toneladas, 2 millones de toneladas menos que el año pasado, pero este pronóstico podría revisarse significativamente en los meses venideros al ir madurando los cultivos.

Ya se han sembrado los cultivos de arroz de 2002 en la CE, y la superficie total debería estar cercana a la de la campaña anterior. La CE todavía no ha aprobado un nuevo régimen de mercado común para el arroz desde que se aplazó la propuesta de reforma de 2000, pero actualmente se está examinando otro texto. Las propuestas presentadas actualmente por España e Italia prevén reducciones considerables en los precios de intervención pero un aumento de los pagos a título compensatorio de los productores.

En Europa central y oriental, las perspectivas para las cosechas de cereales de 2002 son variadas. En la República Checa, se pronostica una merma de la producción tras los rendimientos particularmente buenos del año pasado, pero de un nivel en torno a la media. En Hungría, las intensas lluvias generalizadas recibidas en la primera quincena de junio fueron muy benéficas para los cultivos de trigo y maíz de primavera, aunque llegaron demasiado tarde para beneficiar al trigo de invierno, que se recogerá a partir de finales de junio. La producción de trigo se pronostica en 4-4,5 millones de toneladas, menos que la buena cosecha del año pasado pero en torno a la media de los últimos cinco años. En vista de las buenas lluvias recibidas recientemente, las perspectivas para los rendimientos del maíz han mejorado y la producción se pronostica en alrededor de 6,5 millones de toneladas. En Polonia, en lo que va de la presente campaña las condiciones atmosféricas han sido en general favorables para los cultivos cerealeros. La producción de trigo podría disminuir algo, sin embargo, como consecuencia de la reducción de la superficie plantada y de una utilización menor de fertilizantes, herbicidas y plaguicidas, debida a la disminución de los rendimientos del trigo en la última campaña. Teniendo en cuenta lo anterior, se supone que la producción total de trigo descenderá en 2002 a alrededor de 9 millones de toneladas, frente a casi 9,3 millones de toneladas del año anterior. En la República Eslovaca, los cereales se están desarrollando bien gracias a un invierno benigno. Se pronostica una producción de trigo semejante a la del año anterior y al nivel medio de alrededor de 1,6 millones de toneladas.

En los países balcánicos, la producción de cereales podría aumentar este año en Bulgaria como consecuencia principalmente de unos rendimientos mejores. Se pronostica que la producción de trigo alcanzará por lo menos los 4 millones de toneladas. En la República Federativa de Yugoslavia (Serbia y Montenegro), se prevé un descenso de la producción de cereales de este año. La cosecha de trigo de invierno se ha visto afectada por el tiempo desfavorable imperante durante la primavera, y las perspectivas para la cosecha de maíz de verano son todavía inciertas. En la ex República Yugoslava de Macedonia, la sequía está afectando nuevamente a la producción de cereales. Aunque la producción de trigo podría recuperarse algo tras la grave sequía del año pasado, es probable que los rendimientos sean inferiores al potencial. En Rumania, la sequía está afectando a las importantes zonas productoras del oeste, sur y este del país. La cosecha de trigo de invierno se pronostica ahora en 4,9 millones de toneladas, frente a los 7,8 millones de toneladas del año pasado. También podría disminuir la producción de los importantes cultivos de cereales secundarios.

En los países bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) la cosecha de cereales de 2001 podría mantenerse cercana al buen nivel del año pasado, estimándose la producción total de trigo y cereales secundarios en un nivel estable de 1,5 millones de toneladas y 2,6 millones de toneladas, respectivamente.

La CEI en Europa: Las perspectivas para las cose-chas de cereales de 2002 han empeorado después del informe de mayo, debido principalmente a unas condi-ciones atmosféricas desfavorables tanto para los cul-tivos de invierno como de primavera en la Federación de Rusia. La producción total de trigo en la región se pronostica ahora en alrededor de 62 millones de tone-ladas, volumen inferior en más de 8 millones de tone-ladas al de la cosecha muy mejorada del año pasado pero aún así superior a la media de los últimos cinco años. La cosecha de trigo de 2002 de la Federación de Rusia se pronostica ahora en 40,5 millones de tone-ladas, alrededor de 6 millones de toneladas menos que el año pasado, pese a un aumento significativo de la superficie sembrada. El decrecimiento se debería a los efectos del tiempo excesivamente seco de esta primavera en los rendimientos de los cultivos. También se prevé un descenso de la producción de trigo de Ucrania con respecto al año pasado, a alrededor de 19 millones de toneladas, pese al incremento estimado en la superficie sembrada.

Con respecto a los cereales secundarios, el tiempo seco imperante en primavera ha atenuado de forma análoga las perspectivas para la producción de este año. La producción total de cereales secundarios de la región en 2002 se pronostica ahora en alrededor de 51 millones de toneladas, alrededor de 6 millones de toneladas menos que en 2001. La mayor parte de la contracción se prevé en la producción de cebada de Rusia (3,4 millones de toneladas) y Ucrania (cerca de 2 millones de toneladas).

En la Federación de Rusia se prevé una producción arrocera favorable en 2002 de más de 500 000 toneladas, volumen ligeramente superior al del año pasado, debido al apoyo mayor recibido del gobierno local y al aumento de los precios internos del arroz.

Oceanía

En Australia, las perspectivas para las cosechas de cereales de invierno de 2002 han empeorado en los últimos dos meses debido a la falta de precipitaciones durante el período de siembra. Se señala que a principios de junio la siembra estaba muy retrasada con respecto a lo normal, habiéndose sembrado menos de la mitad de los cultivos de invierno previstos para 2002. Aún suponiendo que lloviera suficientemente en la última parte de junio y en julio, es probable que la superficie sembrada con cereales de invierno sea inferior a lo previsto. Según los pronósticos actuales, la superficie sembrada con trigo descenderá en un 6 por ciento con respecto al año anterior a alrededor de 11,8 millones de hectáreas. Además, como una gran parte de los cultivos se plantaron después del período ideal, también es probable que los rendimientos sean menores que el año anterior e inferiores a la media. El pronóstico oficial más reciente relativo a la producción de trigo de 2002, que se publicó a principios de junio y da por supuesto la llegada en junio de precipitaciones suficientes para que se pueda aumentar la superficie sembrada, cifra la producción de trigo en 20,5 millones de toneladas, 15 por ciento menos que el año pasado y el nivel más bajo desde 1997. También se pronostica un descenso de la producción de cebada, a alrededor de 6,1 millones de toneladas, frente a casi 7,5 millones de toneladas del año anterior, debido también a una disminución de la superficie sembrada y de los rendimientos.

La cosecha de cereales secundarios de verano está prácticamente terminada y se estima que la produc-ción ha disminuido en 2002. La producción de sorgo se calcula en alrededor de 1,8 millones de toneladas, frente a 2,1 millones de toneladas del año anterior.

En Australia, la estimación oficial de la cosecha de arroz de 2002 se ha aumentado en 100 000 toneladas a 1,3 millones de toneladas. Sin embargo, sigue siendo considerablemente inferior a la cosecha récord de la temporada anterior, debido a un descenso de la superficie sembrada a causa de la escasez de agua y a una vuelta a los rendimientos normales.


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