FAO/SMIA - Perspectivas alimentarias No.4 - octubre 2002 p.6

Paginë anteriorIndicePaginë siguiente


Comercio1/

Perspectivas variadas para el comercio de cereales durante la presente campaña

El pronóstico para el comercio mundial de cereales en 2002/03 se ha rebajado a 236 millones de toneladas, volumen ligeramente superior al del pronóstico anterior de julio. De confirmarse este pronóstico, el comercio mundial de cereales en 2002/03 sería inferior en alrededor de 4 millones de toneladas al de la campaña anterior, que había alcanzado un nivel sin precedentes. Pero en cuanto a los cereales tomados individualmente, se prevé que el comercio mundial de trigo se contraerá de forma pronunciada durante la presente campaña mientras que debería de aumentar el de cereales secundarios (principalmente maíz y sorgo). También se prevé un aumento del comercio de arroz en 2003 con respecto a 2002.

Fuerte contracción del comercio de trigo en 2002/03

El pronóstico relativo al comercio mundial de trigo2/ en 2002/03 se ha rebajado en 3 millones de toneladas desde el informe anterior, a 101,5 millones de toneladas, lo que representa una fuerte contracción de aproximadamente 6 millones de toneladas del comercio mundial con respecto a la campaña anterior. La disminución del pronóstico obedece principalmente a una merma de la demanda de importaciones en algunos países de Asia y de la UE.

Las importaciones totales de trigo de Asia en 2002/03 se pronostican en 46 millones de toneladas, 1,5 millones de toneladas menos que en la campaña anterior. El pronóstico relativo a las importaciones de China (Continental) se ha rebajado en 2,3 millones de toneladas con respecto al informe anterior. Pese a una merma de la producción por tercer año consecutivo, los suministros internos de China siguen siendo abundantes y es improbable que las importaciones superen el nivel de alrededor de 1,2 millones de toneladas de la campaña anterior, lo que sería muy inferior al arancel contingentario establecido por la OMC en 8 470 000 toneladas. El pronóstico relativo a las importaciones de trigo de la República Islámica del Irán se ha reducido en 1 millón de toneladas a 4,5 millones de toneladas. Tomando como base los informes oficiales recientes, para 2002 se prevé una cosecha interna abundante que podría reducir mucho la dependencia del país respecto a las importaciones de trigo, que en los últimos años alcanzó niveles superiores a lo normal a causa de varias sequías consecutivas. Las importaciones de Indonesia, otro de los grandes importadores de trigo del Asia, se cifran en 4 millones de toneladas, 200 000 toneladas menos que el año anterior en vista de la reciente imposición oficial de un derecho de importación del 5 por ciento para reducir las importaciones de harina de trigo. Mientras las buenas cosechas obtenidas en Bangladesh y Siria podrían redundar en una disminución de las importaciones de esos países, se pronostica que este año las compras de Filipinas aumentarán en 200 000 toneladas, debido principalmente al incremento de las importaciones de trigo forrajero.

Las importaciones de trigo de los países de África deberían de mantenerse en el nivel de alrededor del 24,5 millones de toneladas del año pasado. En la mayoría de los países, las importaciones alcanzarían los mismos niveles de la campaña anterior. En África del Norte, es probable que disminuyan algo en Marruecos y Egipto en vista del aumento de las cosechas internas, mientras que las compras de trigo por parte de Argelia y Túnez aumentarán, según se pronostica, a causa de la pronunciada merma de la producción de este año. Es probable que aumenten las importaciones de Libia a causa de una demanda fuerte y cada vez mayor de productos elaborados. En la región subsahariana, las importaciones totales se mantendrían en el nivel de 8 millones de toneladas del año pasado, ya que es probable que los incrementos de las importaciones principalmente de Kenya, Etiopía y Eritrea compensen la disminución de las importaciones de Mauritania, Tanzanía y Zimbabwe. Según se prevé, las importaciones de trigo de la mayoría de los países de América Latina y el Caribe se mantendrán sin modificaciones con respecto a la campaña anterior. Se prevé que Brasil reducirá ligeramente sus importaciones de trigo durante la presente campaña ya que la producción debería de situarse en un nivel superior a la media, pese a las condiciones atmosféricas negativas que afectaron recientemente a los cultivos del estado de Paraná, el principal estado productor de trigo. Las importaciones de México y Perú podrían aumentar ligeramente atendiendo a la creciente demanda de trigo elaborado.

En Europa, tras el aumento imprevisto de las importaciones de trigo de la UE en 2001/02, es probable que en 2002/03 disminuyan en vista del fuerte repunte de la producción. En la campaña anterior, el aumento de las importaciones procedentes del Mar Negro (principalmente de la Federación de Rusia y Ucrania) trasformó a la UE en el mayor importador mundial de trigo, pero dada la fuerte recuperación de la producción obtenida en 2002, los suministros internos son más abundantes y es probable que las importaciones disminuyan en la presente campaña a 6 millones de toneladas. Sin embargo, a causa de la abolición de los aranceles de las importaciones de trigo forrajero, las importaciones de la región del Mar Negro siguen siendo una alternativa atrayente.

Pasando a las exportaciones, es probable que este año la participación en el mercado mundial de los cinco principales exportadores de trigo descienda a 70 por ciento, frente al 85 por ciento aproximadamente de años anteriores. La disminución está relacionada principalmente con la fuerte reducción prevista en las exportaciones de Canadá y Australia (en 5 millones de toneladas y 6 millones de toneladas, respectivamente) a causa de la disminución de la producción interna (véase también la sección de los precios). También se prevén ventas ligeramente menores de los Estados Unidos y Argentina. Sin embargo, un probable aumento de los envíos de la UE (en alrededor de 5 millones de toneladas) haría de la UE un exportador más importante en la presente campaña. La disminución prevista en las exportaciones totales de trigo de los principales exportadores deja este año una parte excepcionalmente grande de la participación en el mercado mundial a los exportadores no tradicionales: muy principalmente la India (5,5 millones de toneladas), Ucrania (5 millones de toneladas), Kazajstán (4,9 millones de toneladas), la Federación de Rusia (4,6 millones de toneladas), así como algunos exportadores más pequeños como China, Bulgaria, Hungría, Pakistán, Siria y Turquía.

Aumento marginal del comercio de cereales secundarios en 2002/03

Desde el último informe, el pronóstico relativo al comercio mundial de cereales secundarios en 2002/03 se ha elevado en 1,5 millones de toneladas a 108 millones de toneladas. El ajuste al alza de este mes se debe principalmente al aumento de las importaciones previstas de Canadá y de los envíos de ayuda alimentaria a algunos países del África austral. Este incremento compensaría con creces las revisiones a la baja de los pronósticos de las importaciones del Brasil, así como de algunos países importadores de Asia y Europa. Según los pronósticos actuales, el comercio mundial de cereales secundarios superaría en 1,5 millones de toneladas aproximadamente al reducido volumen del año anterior. La pequeña expansión prevista se debería principalmente al aumento de los envíos de maíz (3 millones de toneladas más). Según se prevé, el comercio de sorgo aumentará ligeramente, pero las compras de cebada deberían de disminuir debido a los grandes déficit de producción registrados en Australia y Canadá. El comercio de otros cereales secundarios también sería muy inferior a los niveles de la campaña anterior.

Las importaciones totales de cereales secundarios de los países de África se cifran ahora en un nivel récord de 17,3 millones de toneladas, 2,7 millones de toneladas más que en 2001/02 y 1 millón de toneladas más de lo que se había informado en julio. El incremento respecto al año pasado se debería principalmente a las necesidades mucho mayores registradas en el África subsahariana, mientras que las importaciones de la mayoría de los países de África del norte probablemente se mantendrán sin variaciones respecto al año anterior. En el África austral, tras dos malas cosechas consecutivas, persisten graves déficit alimentarios en algunos países, especialmente Malawi, Lesotho, Swazilandia, Zambia y Zimbabwe. Por lo que respecta a las importaciones, los aumentos más significativos deberían producirse en Zambia y Zimbabwe, donde una gran parte de las importaciones previstas para la presente campaña deberían de ser en forma de ayuda alimentaria. También se prevén importaciones mucho mayores en el África oriental, principalmente en los países que se encuentran con graves dificultades alimentarias como consecuencia de la sequía, como Kenya, Etiopía y Eritrea.

Las importaciones totales de cereales secundarios por parte de los países de Asia se cifran en 56 millones de toneladas, 1,0 millones de toneladas menos que el año anterior y 2 millones de toneladas menos de lo que se había previsto anteriormente. La disminución respecto del último informe se debe a los ajustes a la baja efectuados a los pronósticos relativos a las importaciones de maíz de la República de Corea, Malasia y Siria. Si se exceptúa Arabia Saudita, que probablemente incrementará sus compras de cebada en la presente campaña, la mayoría de los otros países de Asia deberían de reducir ligeramente sus importaciones de cereales secundarios en la presente campaña, a causa de la abundancia de los suministros mundiales de trigo forrajero y del mejoramiento de las perspectivas para las cosechas internas de algunos países.

En Europa, es probable que las importaciones totales alcancen los 6,5 millones de toneladas, una disminución relativamente pronunciada debida principalmente a una menor necesidad de importaciones en la UE. Se pronostica que las importaciones totales de la UE regresarán a un nivel casi normal de alrededor de 3 millones de toneladas en la presente campaña, pese a la merma prevista en la producción total de cereales secundarios, principalmente centeno. Al mismo tiempo, la abundancia de existencias remanentes de cereales secundarios de la campaña anterior, unida a la gran cantidad de suministros de trigo forrajero, podría limitar la demanda de importaciones de cereales secundarios procedentes de fuera de la UE.

Con respecto a las novedades importantes registradas en otras regiones, en Canadá una grave sequía devastó los cultivos de cebada en las partes occidentales del país, dando lugar a un aumento imprevisto de la demanda de importaciones de cereales forrajeros. En consecuencia, en la presente campaña Canadá debería de importar un volumen sin precedentes de maíz de los Estados Unidos. Se pronostican mayores importaciones de maíz y sorgo para México, ya que es probable que la producción decrezca ligeramente a la vez que continúa aumentando la demanda interna de piensos. También es probable que aumenten este año las importaciones de maíz del Brasil, ya que las perspectivas para la producción siguen siendo desfavorables. Sin embargo, Brasil lograría seguir siendo un importante exportador neto de maíz por tercer año consecutivo.

Situación general de las importaciones mundiales de cereales

  Trigo Cereales secundarios Arroz (elaborado) Total
2001/02 2002/03
pronóst.
2001/02 2002/03
pronóst.
2002 2003 2001/02 2002/03
pronóst.
  (..................................................millones de toneladas..................................................)
Asia 47,9 46,4 57,2 56,2 13,7 13,9 118,8 116,5
Africa 24,3 24,5 14,6 17,3 6,7 6,8 45,6 48,6
América Central 6,7 6,8 13,5 14,0 1,7 1,7 21,9 22,5
América del Sur 11,2 11,1 6,3 6,6 1,0 1,1 18,4 18,7
América del Norte 2,9 2,9 6,2 7,3 0,7 0,7 9,8 10,9
Europa 12,7 9,3 7,8 6,5 1,6 1,6 22,1 17,4
Oceanía 0,5 0,5 0,1 0,1 0,4 0,4 1,0 1,0
MUNDO 106,2 101,5 105,6 108,0 25,7 26,1 1/ 237,6 235,6
Países en desarrollo 79,8 78,7 69,5 72,4 21,8 22,3 171,1 173,4
Países desa rrollados 26,5 22,8 36,1 35,6 3,9 3,9 66,5 62,3

Fuente: FAO

1/ Muy provisional.

Dado el incremento previsto de la demanda mundial de importaciones de este año, unido a la disminución de los suministros de los Estados Unidos, el mayor exportador mundial de maíz, el equilibrio entre la oferta y la demanda mundiales de cereales secundarios empieza a presentarse mucho más difícil que en la campaña anterior. Sin embargo, dado que la mayor parte de la demanda total de cereales secundarios viene del sector forrajero, la abundancia de los suministros de trigo para piensos de los exportadores no tradicionales continuará debilitando la demanda de cereales secundarios en algunos mercados, especialmente de Asia. Al mismo tiempo, la abundancia de suministros exportables de maíz en China, Brasil y Hungría, unida al aumento de los suministros de cebada en la UE, la Federación de Rusia y Ucrania, compensaría la disminución de las disponibilidades exportables de cereales secundarios en Argentina, Australia y Canadá.

Comercio del arroz en 2002

Desde el último informe, el mercado internacional del arroz en 2002 ha cobrado impulso al intensificarse los temores de un déficit de producción, particularmente en Asia. El pronóstico más reciente de la FAO relativo al comercio ha aumentado en casi 1 millón de toneladas a 25,7 millones de toneladas (año civil, en equivalente en arroz elaborado), 1,7 millones de toneladas más que en 2001. Si se confirma dicho pronóstico, sería la segunda vez que el comercio mundial de arroz superará los 25 millones de toneladas.

A medida que la evaluación de la magnitud y calidad de las cosechas principales de arroz recogidas en la presente campaña se han ido haciendo más concretas y se ha obtenido información sobre los envíos de arroz realizados efectivamente, se han ido efectuando algunas revisiones del volumen del comercio de arroz previsto para este año en algunos países. Comenzando con Asia, las importaciones pronosticadas para Filipinas han aumentado en 500 000 toneladas a 1,2 millones de toneladas, 20 por ciento más que en 2001, debido a un empeoramiento de las perspectivas para la producción arrocera del país. Análogamente, el pronóstico relativo a Indonesia han aumentado en 200 000 toneladas a 3,2 millones de toneladas, más del doble del nivel importado en 2001. Los precios internos están aumentando en el país y ejercen una presión sobre el órgano de importaciones del país (BULOG) para que efectúe más compras en el mercado internacional. Últimamente, algunos funcionarios del sector agrícola han presentado otra propuesta para elevar el arancel del arroz importado, esta vez de 430 a 750 rupias por kilogramo (de 48 a 84 dólares EE.UU. por tonelada). En el curso del año, se habían realizado propuestas semejantes con pocos resultados satisfactorios, debido a que el gobierno sigue preocupado por el efecto inflacionario que el aumento de los aranceles podría tener en el mercado interno.

La República de Corea ha decidido reanudar sus envíos de ayuda alimentaria en forma de arroz a la República Popular Democrática de Corea, que había suspendido después del conflicto naval desatado entre los dos países en julio. En consecuencia, las importaciones de arroz del último país mencionado aumentaron a 700 000 toneladas, casi 100 000 más que el año anterior. Atendiendo al empeoramiento de las perspectivas para la cosecha actual del país, el pronóstico relativo a las importaciones arroceras de Sri Lanka en 2002 son muy superiores a las del año pasado, situándose en 140 000 toneladas.

En cambio, ahora se prevé que China (Continental) importará 270 000 toneladas, frente a las 500 000 toneladas pronosticadas en el último informe, y prácticamente la misma cantidad importada en 2001. Este nivel representaría el 7,5 por ciento de sus aranceles contingentarios estipulados en el marco del acuerdo de la OMC. Hasta la fecha, el ritmo de las importaciones arroceras del país ha sido semejante al del año pasado. Es probable que la mayor parte consista en arroz fragante de alta calidad, dado que los precios internos de otros tipos de arroz son demasiado bajos para justificar importaciones. Además, una serie de licitaciones arroceras realizadas últimamente por el gobierno han hecho bajar los precios ulteriormente, impidiendo la realización de grandes compras internacionales.

Igual que en otros importantes países importadores de arroz de la región, todavía se prevé que Japón importará 650 000 toneladas de arroz en 2002, necesarias para cumplir con el compromiso del contingente de acceso preferencial y se prevé que las entregas a Malasia alcanzarán a más de 600 000 toneladas, volumen semejante al importado en 2001. Con respecto a los países del Cercano Oriente, que absorben aproximadamente una quinta parte del comercio mundial de arroz, las importaciones de la República Islámica del Irán se pronostican en 1,2 millones de toneladas, un 20 por ciento más que en 2001, mientras que las entregas al Iraq y a Arabia Saudita deberían de mantenerse sin variaciones con respecto al año anterior en 1,2 millones de toneladas y 825 000 toneladas, respectivamente.

Las previsiones sobre las entregas de arroz a África, la segunda región mundial importadora de arroz después de Asia, han aumentado en 300 000 toneladas desde el último informe. Ahora se prevé que la región importará 6,7 millones de toneladas en 2002, un 6 por ciento menos que el volumen sin precedentes del año anterior. El incremento se debería principalmente a las compras adicionales de arroz sancochado por parte de Nigeria. Pese a los conflictos desatados en Côte d'Ivoire, el segundo importador de arroz de la región, todavía se pronostica que las entregas a ese país serán del orden de las 900 000 toneladas.

Con respecto a otras regiones, se prevén pocos cambios o ninguno respecto a las previsiones anteriores. En América Latina y el Caribe, el déficit de producción de algunos países no debería dar lugar a un aumento de las importaciones de arroz hasta el próximo año, mientras que las importaciones de arroz estimadas para Europa y América del Norte se mantienen prácticamente sin modificaciones respecto a 2001.

Con respecto a las exportaciones de arroz en 2002, se ha intensificado la competencia por la participación en el mercado internacional, pronosticándose para la India ulteriores progresos a expensas de los grandes exportadores tradicionales. La enérgica política de Tailandia encaminada a sostener los precios internos está impidiendo la estipulación de nuevos contratos de venta y se estima que los envíos de arroz para los primeros siete meses del año civil estarán en torno a los 3,9 millones de toneladas, frente a los 3,7 millones de toneladas del año anterior. En consecuencia, el pronóstico relativo a las exportaciones del país en 2002 se ha rebajado en 500 000 toneladas a 7,1 millones de toneladas. Los bajos precios internacionales del arroz siguen siendo una preocupación para el gobierno, que recién últimamente ha pedido a los grandes países exportadores de arroz de la región que adoptaran una estrategia común para sostener los precios de exportación.

Las ventas de China (continental) efectuadas hasta julio apuntan a un fuerte descenso de las exportaciones, habiendo disminuido los envíos durante ese período en un 28 por ciento en comparación con el mismo período de 2001. Dicha contracción obedece a la competencia mucho mayor de exportadores que venden a precios más baratos a los mercados de China en África. Según los pronósticos, las exportaciones del país alcanzarán los 1,3 millones de toneladas, 500 000 toneladas menos que el año anterior.

En cambio, las entregas de arroz de la India deberían de aumentar de forma pronunciada en 2002. El pronóstico se cifra ahora en 5 millones de toneladas, lo que representa un incremento de 800 000 toneladas con respecto al último informe y 3,1 millones de toneladas más que en 2001. El reciente deterioro de las perspectivas para la producción de la campaña actual no debería producir cambios importantes en la política exportadora del país, ya que todavía son muy abundantes las reservas de la Corporación de Alimentos de la India (CAI). Sin embargo, se han anunciado algunos cambios que podrían minar en algo las ventajas de los precios del arroz de calidad superior en los mercados internacionales. Esto se refiere a la obligación que tienen los comerciantes de exportar un volumen equivalente a por lo menos el 98 por ciento de la cantidad que compraron a precios particularmente bajos de las reservas de la CAI. Este requisito obligaría a los comerciantes que elaboraron el arroz con la finalidad de reducir el porcentaje de granos quebrados a compensar los granos eliminados comprando la diferencia en el mercado libre a precios más altos. Con respecto a las exportaciones de basmati, que comprende un 15 por ciento de los envíos totales de arroz del país, el Gobierno ha aumentado los precios mínimos aconsejados en 25-30 dólares EE.UU. por tonelada, atendiendo a las quejas relativas a que algo del basmati comercializado anteriormente no cumplía con los requisitos de calidad. El basmati que se contrate a precios inferiores a los anunciados estará sujeto a la inspección obligatoria de las autoridades.

Al parecer, Myanmar se ha restablecido firmemente como un importante abastecedor internacional de arroz, con exportaciones que alcanzarán, según los pronósticos, un nivel récord de 1 millón de toneladas, 200 000 toneladas más que el último informe. La recuperación de la actividad exportadora es notable ya que en 2000 el país exportó oficialmente sólo 140 000 toneladas.

En los Estados Unidos, el USDA ha aumentado su pronóstico relativo a los envíos de arroz de 2002 en 300 000 toneladas a 3,1 millones de toneladas, 22 por ciento más que el volumen exportado el año pasado, ya que los precios históricamente bajos de las exportaciones están sosteniendo las ventas del país. Camboya podría exportar 100 000 toneladas en 2002, 40 000 toneladas más que el año anterior, pero el pronóstico depende de que las condiciones atmosféricas sean favorables durante el resto de la actual cosecha de arroz. Según fuentes oficiales, las entregas de arroz por parte del Uruguay en 2002 alcanzarían las 570 000 toneladas, un 25 por ciento más que la estimación anterior, pero aún así inferior a las 700 000 toneladas exportadas el año pasado

En cuanto a los otros grandes exportadores, el pronóstico relativo a los envíos no han cambiado desde el último informe, previéndose que el Pakistán y Australia registrarán una fuerte contracción, mientras que Argentina debería de mantener las exportaciones y Egipto aumentarlas considerablemente en comparación con el año pasado.

El comercio de arroz en 2003

El pronóstico relativo al comercio en 2003 es sumamente provisional dado que el volumen de las transacciones internacionales del año próximo dependerán principalmente de los resultados que se obtengan de las cosechas principales de arroz de 2002 en Asia, la principal región comercial del mundo, muchas de las cuales tienen que recogerse todavía y están sujetas a las incertidumbres relacionadas actualmente con las condiciones atmosféricas. Sin embargo, teniendo en cuenta las primeras informaciones sobre las disponibilidades exportables y la demanda de importaciones, el comercio mundial de arroz podría aumentar en 400 000 toneladas respecto al nivel de 2002 a 26,1 toneladas en 2003.

Por lo que se refiere a las importaciones, China (Continental) podría importar 600 000 toneladas en 2003, el doble del año anterior. Sobre la base de las previsiones actuales, es probable que el consumo interno vuelva a rebasar la producción en 2003 y, dado que las existencias han disminuido en los últimos tres años en alrededor de 30 millones de toneladas, la presión para reducir su magnitud será menor. Ello podría facilitar el cumplimiento al menos parcial de los contingentes preferenciales de importación del país. Por consiguiente, las perspectivas para el comercio en la próxima campaña dependerán principalmente de la decisión política que adopte el gobierno de continuar liberando existencias o permitir la importación de arroz de ultramar en condiciones preferenciales.

Se pronostican incrementos moderados en la demanda de importaciones para algunos de los países que obtuvieron, o que se prevé que obtendrán, cosechas relativamente malas durante la campaña actual, entre ellos algunos países de América Latina (particularmente Colombia y Venezuela) y de África (principalmente el Senegal y Malí). En cambio, debido a que las perspectivas para las cosechas son más brillantes, se pronostica un descenso de las importaciones arroceras del Afganistán en 2003, a 60 000 toneladas, que se compara con el nivel de 270 000 toneladas previsto en 2002.

Por lo que se refiere a las exportaciones, la India podría expedir 4,5 millones de toneladas de arroz en 2003, es decir un volumen menor del previsto para 2002, pero aún así grande en comparación con sus actividades exportadoras pasadas. Pero este pronóstico depende mucho del resultado final de la cosecha actual, que se ha visto afectada por unas condiciones atmosféricas adversas, y de la continuación de las políticas de apoyo a las exportaciones aplicadas por la CAI.

También se prevén grandes incrementos en las exportaciones arroceras de Myanmar, Viet Nam, Tailandia y, en menor medida, Uruguay. En cambio, descenderán los envíos de China (Continental) y Australia, mientras que las de Pakistán y Egipto se mantendrán cercanas al nivel de 2002.


1.  Para el comercio mundial (exportaciones) de trigo y cereales secundarios se toma como base la campaña comercial, que va de julio a junio, mientras que para el comercio del arroz se toma como base el año civil, que va de enero a diciembre.

2.  Incluida la harina de trigo en equivalente en grano.


Paginë anteriorIndicePaginë siguiente