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Potencial de A. decurrens. 2. Suplemento para la producción de leche en clima frío de Colombia


L.A. GIRALDO V.; J.D. FERNÁNDEZ, A.F. ZAPATA;

M. LONDOÑO Y R.A. VELÁZQUEZ
Facultad de Ciencias Agropecuarias
Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín, Colombia

Introducción

En las explotaciones de lechería especializada se tiene un alto consumo de concentrados el cual se podría disminuir con la utilización de especies forrajeras, sin embargo la mayoría de las evaluaciones se han realizado con especias provenientes de clima cálido, siendo necesario estudiar y recomendar especies promisorias adaptadas a clima frío.

En estudios preliminares que se han realizado de la A. decurrens, se ha encontrado que esta especie puede tener potencial para el desarrollo y en Sistemas silvopastoriles en clima frío, debido a su buena adaptación. Así por ejemplo, presenta 97 por ciento de supervivencia después de 5 meses de transplante, posee un acelerado crecimiento, además de su alta producción de biomasa comestible de alta calidad (Escobar, 1993). Trabajos realizados por la Universidad Nacional de Colombia sede Medellín, a través del Departamento de Producción Animal y mediante varios proyectos sucesivos, han encontrado que la leguminosa arbórea acacia negra (A. decurrens), podría tener potencial como uso en SSP y como suplemento que reemplace parte del concentrado suministrado a los animales, debido entre otras cosas a los siguientes aspectos:

Basados en estos antecedentes, se fijó como objetivo evaluar la respuesta animal a la suplementación con diferentes niveles de acacia y concentrado comercial en la producción y calidad de la leche de vacas Holstein y en el levante de terneras, así como sus posibilidades económicas.

Materiales y métodos 1

Localización

Los experimentos se realizaron en la Finca Paysandú, propiedad de la Universidad Nacional de Colombia, localizada en el corregimiento de Santa Elena, municipio de Medellín, a 2 350 msnm, con 2 200 mm de precipitación anual y 18ºC de temperatura promedio ubicándose este sitio dentro de la zona de vida Bosque húmedo montano - bajo (Holdridge, 1978).

Medición de ganancia en terneras con suplemento de Acacia

El período de trabajo de campo tuvo una duración de 100 d. Con una fase de adaptación de 16 d y 84 d de medición. Tanto en la fase de adaptación como en la experimental los animales consumieron como alimento principal pasto kikuyo (Pennisetum clandestinum) a voluntad en un sistema de estabulación. Se utilizaron 6 terneras cruzadas BON x Holstein con un peso promedio al inicio del trabajo de 183,8 ± 20,5 kg, sometidas a un diseño experimental cruzado simple con dos tratamientos, cuatro períodos de 21 días de muestreo y cuatro días de adaptación a las dietas. Durante la fase experimental a tres hembras al azar, se les suministro el tratamiento 1 (T1), compuesto de pasto kikuyo a voluntad más 2 kg de concentrado comercial, a las otras tres hembras el tratamiento 2 (T2), consistente en suplementar el pasto kikuyo con 4 kg de forraje verde de Acacia decurrens, suministrada a la misma hora, mitad en la mañana y mitad en las horas de la tarde, lo mismo que el concentrado. El pasto Kikuyo se ofreció fresco, picado y a voluntad, con una edad de 52 días de rebrote, en un sistema de alimentación en estabulación.

La variable de respuesta evaluada fue la ganancia de peso, estimada mediante una ecuación de regresión lineal en donde la variable dependiente es el peso vivo y la independiente los días en que se pesaron. De éste modo, la pendiente de la regresión es la ganancia de peso diario (g/d). Los análisis estadísticos se hicieron en el programa SAS, mediante procedimientos de PROC REG; PROC ANOVA y comparación de medias por pruebas de Tukey.

Medición de producción y calidad de leche con Acacia Negra

Se usaron 6 vacas puras de la raza Holstein, con dos y más lactancias, cuyos pesos vivos oscilaron entre 550 y 650 kg. Las vacas se escogieron de un grupo de animales cuyos partos ocurrieron de 190 a 230 d antes del inicio de los tratamientos. Las mediciones se realizaron después que los animales alcanzaron el pico de producción de leche.

Se evaluaron tres tratamientos:

1. Pastoreo de pasto kikuyo, más suplementación con Acacia fresca a razón del 0,65 por ciento del peso vivo en base seca (4 kg/animal) y concentrado comercial a razón de 0,15 por ciento del peso vivo (1 kg/animal), más 1 kg de melaza.

2. Pastoreo de kikuyo, más suplementación con Acacia a razón de 0,4 por ciento del peso vivo en base seca (2,5 kg/animal) y concentrado comercial a razón del 0,4 por ciento del peso vivo (2,5 kg/animal), más 1 kg de melaza, y

3. Pastoreo de kikuyo, más suplementación con concentrado comercial a razón del 0,8 por ciento del peso vivo (5 kg/animal), más 1 kg de melaza.

Se evaluó el valor nutricional de los alimentos consumidos por las vacas en los distintos tratamientos (forraje de kikuyo, concentrado comercial, forraje de acacia y la melaza), mediante análisis de MS, digestibilidad ruminal in situ, proteína cruda, FDA, FDN y EM. Adicionalmente, se estimo la oferta de forraje de kikuyo en los potreros mediante la técnica del doble muestreo (Giraldo, 1996), la presión de pastoreo y el porcentaje de aprovechamiento del pasto. El follaje de la acacia utilizada en este experimento consistió de una mezcla compuesta por hojas, pecíolos y tallos tiernos los cuales se cosecharon y se suministraron en forma fresca, sin picarlo.

Las variables de respuesta evaluadas fueron la producción de leche por vaca y los contenidos de proteína (por le método de Microkjeldhal), grasa (por el método de Babcock) y sólidos totales (por el método gravimétrico) de la leche, corregidos por el número de lactancias de las vacas experimentales; adicionalmente se realizó una evaluación económica, mediante el procedimiento de los presupuestos parciales.

Las vacas pastaron junto al grupo de ordeño, en potreros en los que predominaba el pasto kikuyo (Pennisetum clandestinum), bajo un sistema de utilización rotacional con 70 d de rebrote. Todas las vacas experimentales, tuvieron libre acceso al agua y a la sal mineralizada. Los animales se ordeñaron mecánicamente dos veces al día, durante el ordeño cada vaca recibió 0,5 kg de melaza (1,0 kg./vaca/día), además de la suplementación con el tratamiento correspondiente.

Se utilizó un diseño experimental de sobrecambio en cuadrado latino repetido sin período extra (Martínez, 1988), con dos cuadros de 3 x 3 en los cuales las vacas constituyen las columnas y los períodos las hileras. Cada período experimental duró 14 d, de los cuales los 7 primeros fueron de adaptación a la dieta y los restantes de medición. Los animales asignados a cada cuadrado fueron lo más homogéneas posible en cuanto a fecha de parto (25 d máximo de diferencia). Durante cada período de medición de 7 d, se registró la producción individual de leche en cada ordeño, para obtener la producción total diaria. En el último día de cada período se tomaron muestras individuales de leche, proporcionales a la producción de cada ordeño.

Los análisis estadísticos de los datos se realizaron con el programa SAS, mediante procedimientos de ANOVA y comparación de medias por pruebas de Tukey.

Resultados

En términos generales, los métodos químicos para la evaluación nutritiva de forrajes están diseñados para evaluar la concentración de fracciones químicas con características nutricionales, antes que para determinar la presencia de entidades químicamente uniformes. La caracterización nutricional de los alimentos usados durante el experimento, se muestra en los Cuadro 1 y 2.

CUADRO 1
Contenido de FDA, FDN y fibra cruda del concentrado comercial, de la Acacia decurrens y del pasto Kikuyo

ALIMENTO

FDA%

FDN%

FC %

Concentrado comercial

---

---

12

Pennisetum clandestinum

30,98

63,87

---

Acacia decurrens

31,4

45,25

---

CUADRO 2
Contenido promedio de Proteína cruda y degradabilidad ruminal in situ para el concentrado comercial, el pasto kikuyo (P. clandestinum) y la Acacia decurrens.

ALIMENTO

PC%

Degrada. Ruminal in situ %

Concentrado comercial

20

89,3

Pennisetum clandestinum

14,27

72,3

Acacia decurrens

14,81

50

CUADRO 3
Comparación de medias mediante la prueba de Tukey, para el tratamiento 1 (Kikuyo + Concentrado) y el tratamiento 2 (Kikuyo + acacia).

PARÁMETRO

Tratamiento 1

Tratamiento 2

Ganancia Media (g)*

594,9a

638,8ª

N

12

12

Promedios dentro de una misma línea con letra igual no difieren según Tukey (P<0,05).

Los animales suplementados con Acacia decurrens tuvieron mayor ganancia en peso que los suplementados con concentrado comercial (Cuadro 3), aunque sin diferencias significativa (P < 0,05).

Los valores encontrados, para la composición bromatológica de los alimentos utilizados durante la evaluación se presentan en el Cuadro 4. Al comparar los diferentes componentes de la dieta se observan diferencias en los contenidos de proteína, en la degradabilidad ruminal o digestibilidad in vivo y en la energía metabolizable de la acacia y el concentrado, el pasto kikuyo, presenta una buena composición química.

CUADRO 4
Composición y degradabilidad ruminal in situ de los alimentos ofrecidos.

Alimento

N

MS (%)

DRIS (%)2

PC

FDA (%)

FDN (%)

EM Mcal3

Pasto

2

22,29

73,05

12,09

28,49

66,32

2,64

Concentrado

1

91

84,52

17,06


124

3,05

Acacia

8

48,72

50,04

14,86

31,40

45,25

1,81

Melaza

-

7,5

961

3,5

-

-

3,47

1. Dig. in vitro MS. NRC (1978); 2. Digestibilidad ruminal in situ a 48 horas de incubación intraruminal; 3. EM = DIVMS x 4,409 x 0,82 /100 (Tobón, 1988); 4. Fibra cruda

Respecto a la disponibilidad de pasto kikuyo fue alta, lo cual favorece la selectividad y el consumo. Por otro lado, el aprovechamiento del forraje estuvo dentro de los rangos normales y la presión de pastoreo fue baja, facilitada por el manejo impuesto a la pastura (Cuadro 5).

CUADRO 5
Disponibilidad de pasto, presión de pastoreo y porcentaje de aprovechamiento del pasto en vacas suplementadas con Acacia y concentrado.

Período

Disp. de pasto (kg MS/ha)

Presión de pastoreo1 (kg MS/vaca/d)

Porcentaje de Aprovechamiento

Antes

Después

1

8 280

5 390

38,33

34,9

2

8 820

4 230

40,83

52

Promedio

8 550

4 810

39,58

43,45

1. En promedio pastorearon 27 vacas durante 8 días.

En el Cuadro 6 se muestran los requerimientos de proteína cruda y energía metabolizable de las vacas para mantenimiento y producción en cada tratamiento y los aportes que hacen la acacia, el concentrado y la melaza en cada uno. De acuerdo a los requerimientos de proteína cruda y energía metabolizable del NRC (1978) según la producción de leche obtenida, peso de los animales y contenido de grasa en la leche, los tratamientos aportaron 47,52; 43,96 y 47,38 por ciento de las necesidades de proteína cruda y 31,34; 33,46 y 41,89 de las necesidades de energía metabolizable para los tratamientos 1, 2 y 3, respectivamente. (La melaza aportó el 10,56; 10,04 y 9,73 por ciento de los requerimientos energéticos para los tratamientos A, B y C respectivamente).

CUADRO 6
Requerimientos de proteína cruda (PC, g/vaca/d) y energía metabolizable (EM, Mcal/vaca/d) de las vacas y aportes de la acacia, el concentrado y la melaza en cada tratamiento (NRC, 1978).


Tratamiento 1

Tratamiento 2

Tratamiento 3

Requerimiento1

EM

PC

EM

PC

EM

PC

Mantenimiento

17,3

428

17,3

428

17,3

428

Producción

15,5

1148

17,3

1291,7

18,4

1336,2

Total

32,8

1576

34,5

1719,7

35,7

1764,2

Aporte







Acacia

7,2

594

4,2

356



Concentrado

3,1

155

7,3

409

14,9

836

Melaza

3,5

35

3,5

35

3,47

35

No hubo diferencia significativa en la producción de leche entre los tratamientos, tanto en la leche corregida, como no corregida por el número de lactancias de las vacas (Cuadro 7).

CUADRO 7
Producción de leche corregida por número de lactancia y sin corregir de vacas en pastoreo suplementadas con Acacia y concentrado.

Tratamiento (% del peso vivo)

Producción de leche (kg/vaca/d)

Acacia

Concentrado

Sin Corregir

Corregida

0,65

0,15

13,27 a

14,00 a

0,40

0,40

14,32 a

15,02 a

0

0,80

14,96 a

15,72 a

Valores con igual letra vertical no difieren según Tukey (P < 0,05).

En cuanto a sólidos totales, proteína y grasa no mostró diferencias significativas a los tratamientos en este estudio (Cuadro 8).

El análisis económico (Cuadro 9), se muestra para el presupuesto parcial en los tres tratamientos evaluados. Se observa que el beneficio neto para el tratamiento 2 (50 por ciento concentrado, 50 por ciento acacia) es de $4.068,68/vaca/d, superior al tratamiento 1 (85 por ciento acacia, 15 por ciento concentrado) en $128,81/vaca/d (3,17 por ciento) y al tratamiento 3 (100 por ciento concentrado) en $165,67/vaca/d (4,07 por ciento).

CUADRO 8
Producción de leche, contenido (%) de proteína, grasa y sólidos totales de leche de vacas suplementadas con Acacia y concentrado.

Tratamiento1 (% de peso vivo)

Producción de leche (kg/vaca/d)

Proteína (%)

Grasa (%)

Sólidos Totales (%)

Acacia

Concentrado

0,65

0,15

14,00a

2,71a

3,28ª

11,55a

0,40

0,40

15,02a

2,90a

3,60ª

12,10a

0

0,80

15,72a

2,81a

3,53ª

11,80a

1 Más 1 kg de melaza. Valores con igual letra vertical no difieren significativamente según la prueba de Tukey (p 0,05).

Al observar este análisis y teniendo en cuenta los resultados productivos obtenidos se puede notar la eficiencia tanto económica como productiva (especialmente en cuanto a calidad de la leche) con la suplementación de la mezcla de acacia y concentrado (50 y 50), la cual puede ser fácilmente adoptada por los productores y con grandes ventajas económicas y productivas (aumento en el nivel de ingresos, mayor disposición de dinero en efectivo por ahorro en la compra de concentrado y mejor calidad de la leche aumentando el precio de venta por las bonificaciones de grasa y proteína).

Discusión

De acuerdo con los porcentajes de FDN, de la acacia, se puede mencionar que este parámetro no influye en la degradabilidad de la MS ya que presenta un valor bajo, lo que indica que la presencia de hemicelulosa no es considerable. Esto lo corroboran los datos de FDA. Sin embargo el problema (aparte del grado de lignificación) está en que la digestibilidad está regulada más por las características intrínsecas de las células vegetales, que de los componentes y las proporciones de FDA y FDN (Van Soest, 1982).

Se pueden apreciar diferencia en los contenidos de FDN entre el Kikuyo y la Acacia, pero no se da para FDA. Esto concuerda con Van Soest (1982), quien afirma que las leguminosas generalmente muestran muchas uniones de lignina con celulosa y pocas de hemicelulosa con celulosa. Es de anotar que el Kikuyo presenta el doble de FDN con respecto al FDA.

CUADRO 9
Presupuesto parcial para la producción de leche de vacas en pastoreo suplementadas con Acacia y con concentrado.

RUBROS

Trat. 1

Trat. 2

Trat. 3

INGRESOS




Leche vendida (Kg)

14.01

15.03

15.73

Precio ($/Kg)2

400

400

400

Ingreso bruto

5604

6012

6292

COSTOS




Melaza (Kg MS)

0.75

0.75

0.75

$/Kg MS2

302.21

302.21

302.21

$/vaca/día

226,66

226,66

226,66

Acacia (Kg MS)

4

2.46

----

$/Kg MS1

258.27

258.27

----

$/vaca/día

1033,08

635,34

---

Concentrado (Kg MS)

0.92

2.46

4.92

$/Kg MS2

439.56

439.56

439.56

$/vaca/día

404,39

1081,32

2162,63

Total costo variable ($)

1664,13

1943,32

2389,29

BENEFICIO NETO ($)

3939,87

4068,68

3902,71

1 Cálculo de los autores 2. Precios comerciales

Mientras que para la Acacia el FDN es superior al FDA en solo el 50 por ciento, es decir, la Acacia presenta un menor contenido de hemicelulosa que el kikuyo. Esto muestra que la Acacia presenta un adecuado nivel energético. Sin embargo dada la moderada degradabilidad que esta presenta puede ser un factor determinante para la digestibilidad de la proteína como tal. Estos moderados niveles de degradabilidad pueden ser debidos posiblemente a altas contenidos de lignina y presencia de taninos.

Estadísticamente no se observaron diferencias significativas (P = 0,76) para el incremento en el peso. Sin embargo, la ganancia de peso fue mayor en el tratamiento dos (Pasto Kikuyo + Acacia) respecto al tratamiento testigo (pasto Kikuyo + concentrado) cuyos resultados fueron de 639 y 595 g./animal/d, respectivamente. Esta diferencia fue de 44 g./animal/d.

La mayor ganancia presentada en el tratamiento 2 (kikuyo + acacia) pudo estar influenciada por los fitoestrógenos y las isoflavinas contenidas en las leguminosas, mejoran la permeabilidad de la mucosa intestinal facilitando una mayor absorción de los metabolitos.

Dado que sólo una parte de la proteína requerida por el rumiante en crecimiento es suplida por la síntesis de proteína microbiana (Chalupa, 1974, citado por González et al., 1990) es necesario que la proteína suplementaria aporte una cantidad de nitrógeno sobrepasante al intestino de aquí, el interés por utilizar fuentes proteicas de baja degradación en rumen para mejorar el incremento de peso vivo. El incremento de la acidez en el contenido ruminal ocurre cuando los terneros rumiantes hacen un sobreconsumo de carbohidratos muy fermentables, debido a la rapidez con que se producen los ácidos orgánicos, esto está asociado a la rápida digestión del concentrado al suministrar por separado del pasto.

Comparando con Osorio (1996), quien encontró para el levante de terneras Holstein en la finca Paysandú una ganancia diaria de peso para el primer año de 523 g, cualquiera de los dos tratamientos de este trabajo (Kikuyo + concentrado y Kikuyo + Acacia) sobrepasa en forma significativa dicha ganancia.

Al observar estas ganancias de peso vivo obtenidas con A. decurrens y comparándolas con las obtenidas con otras especies de árboles, se presentan diferencias importantes, es así como Herrera et al. (1982) reportan, que alimentando animales cebú con Leucaena leucocephala a voluntad se presentaron mayores ganancias de peso que aquellos alimentados con Leucaena restringida más una mezcla de heno de sorgo y melaza a voluntad. Este trabajo muestra como la Leucaena es un excelente suplemento cuando se suministra a voluntad. Con base en lo anterior, sería apropiado determinar cual es el nivel de consumo de la Acacia más eficiente y a partir de allí realizar otro tipo de ensayos para determinar por medio del suministro de diferentes niveles de Acacia como suplemento cual es el óptimo para el levante de terneras.

En cuanto a la calidad nutricional de los alimentos consumidos: los contenidos de MS, degradabilidad ruminal in situ de la materia seca, PC, FDA y FDN son buenos. Los contenidos de MS y PC de la pastura ofrecida, son similares a los reportados por Laredo y Alarcón (1980, citados por Carmona y Martínez, 1988) los cuales encontraron valores de 12,7 por ciento de PC y 20 por ciento de MS para pasto Kikuyo fertilizado con 100 kg de N/ha a los 78 d de rebrote en la sabana de Bogotá. La digestibilidad es mayor a la reportada por Laredo y Alarcón, los cuales encontraron valores de 62,98 a los 78 d. Estos aumentos en la digestibilidad de la MS se pueden deber principalmente al efecto de la madurez, y la aplicación de fertilizantes, mientras que la digestibilidad de la pared celular aumenta, aumentando consigo la digestibilidad de la MS. Comparando los diferentes componentes de la dieta se observan diferencias en el contenido de proteína, en la digestibilidad in vivo y en la energía metabolizable de la acacia y el concentrado, presentando menores valores en todos los parámetros la primera, factor este que puede ejercer un efecto importante en la producción de los animales.

El suplemento concentrado comercial es recomendado según los fabricantes para vacas lecheras con producciones mayores a 18 kg de leche/d con suministros de 1 k por cada 3 kg de leche producida.

La disponibilidad de pasto Kikuyo, en los potreros fue alta, con un promedio de 39,6 kg de MS/vaca, lo cual favorece la selección de forraje y el consumo de MS de pasto. El aprovechamiento del forraje (43,45 por ciento) estuvo en un rango normal para el sistema de pastoreo impuesto (Giraldo, 1996).

La suplementación a razón de 50 por ciento concentrado y 50 acacia, y 85 acacia y 15 por ciento concentrado, disminuyen la producción de leche en 4,27 y 11,29 por ciento respectivamente, comparados con la suplementación con solo concentrado. Estos resultados son similares a los encontrados por Reyes et al. (1993) quienes obtuvieron producciones de 15,5 kg./vaca/d para vacas Holstein alimentadas con concentrado comercial y 14,2 kg/vaca/d para estos mismos animales alimentados con concentrado a base de saccharina (50 por ciento de inclusión).

La tendencia encontrada hacia una mayor producción de leche en el tratamiento 3, podría estar explicada por el mayor consumo que realizaron los animales cuando fueron suplementados con concentrado comercial, lo cual permitió un mayor consumo de proteína y energía y por ende una mayor producción de ácidos grasos volátiles y proteína microbial en el rumen. Además, se conoce que la fermentación de los cereales produce un mayor porcentaje de ácido propiónico que produce ácidos grasos glucoformadores (Holmes y Wilson 1984, citados por Reyes, 1993). Lo que trae como consecuencia, una mayor disponibilidad de glucosa y lactosa que podrían no ser limitantes en la síntesis de la leche

La no diferencia obtenida entre los diferentes tratamientos respecto a la composición química de la leche, podría deberse entre otros factores a que los diferentes niveles de suplementación evaluados para la acacia y el concentrado en los tres tratamientos, no conllevan a cambios importantes en las proporciones y cantidades de ácidos grasos volátiles en el rumen (Orskov 1986, citado por Tobón 1988). Otro factor que pudo jugar un papel importante para una mayor producción de leche en el tratamiento con concentrado, fue la inclusión de melaza como fuente medianamente energética, ya que el nitrógeno del concentrado es muy soluble en el líquido ruminal. Así, la rápida solubilización y fermentación, puede producir un exceso de amonio que podría no ser utilizado por los microorganismos ruminales, a menos que estos tengan una disponibilidad de energía, que coincida con la amplia y rápida disponibilidad del nitrógeno ruminal (Boenker 1985, citado por Tobón 1988).

Otro factor que podría influenciar la menor producción de leche al suplementar con mayores niveles de acacia, son los efectos negativos que presentan los taninos en la alimentación de los rumiantes, los cuales pueden afectar el consumo voluntario y la digestibilidad cuando se presentan niveles altos en la dieta (concentración de fenoles totales = 5,4 por ciento en el follaje de acacia). Carulla (1994), reporta que dietas con niveles bajos de taninos pueden traer efectos benéficos, los cuales pueden estar relacionados a un incremento en la retención de nitrógeno debido a una reducción de la degradación de la proteína en el rumen, y por lo tanto, una mayor absorción de nitrógeno en el intestino delgado.

La composición química de la leche respecto a sólidos totales, proteína y grasa no mostró diferencias significativas, como respuesta a los diferentes tratamientos evaluados en este estudio. Resultados similares han sido reportados por Tobón (1988) suplementando los animales con diferentes niveles de poró y por Mosquera y Lascano (1992) con vacas alimentadas con B. decumbens más C. macrocarpum, B. decumbens más C. acutifolium y B. decumbens solo. Suárez (1987) reporta diferencias significativas de la suplementación con 6 kg de concentrado respecto al pastoreo solo más no con respecto al acceso 2 h diarias a un banco de proteína de Leucaena leucocephala, en Chinchiná, Caldas.

La no diferencia obtenida entre los diferentes tratamientos respecto a la composición química de la leche podría deberse, entre otros factores a que los diferentes niveles de suplementación evaluados para la Acacia y el concentrado en los tres tratamientos, no conllevan a cambios importantes en las proporciones y cantidades de ácidos grasos volátiles en el rumen (Orskov 1986, citado por Tobón 1988).

En el análisis económico se nota que no siempre las mayores producciones de leche representan el mayor beneficio económico. Es así, como suplementando con concentrado se obtuvo un beneficio neto parcial de $3 902, inferior en $37 a la suplementación con 85 por ciento de acacia. Estos resultados evidencian como la suplementación con concentrado aunque presenta las mayores producciones tiene el menor margen de rentabilidad, mientras en la suplementación con acacia en la cual se encontró una producción de 1,7 litros menos, se obtiene una rentabilidad mayor, demostrando ser más económica la producción de leche con asociación de gramíneas y leguminosas. Otros autores han encontrado resultados similares en los que la suplementación con otras fuentes alimenticias diferentes a las tradicionales ha aumentado la rentabilidad en la producción de leche; tal es el caso de Abarca (1988), el cual encontró una mayor rentabilidad del poró sobre la harina de pescado.

Conclusiones

Agradecimientos

Se agradece al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia, programa PRONATTA y al Comité de Investigaciones y Desarrollo Científico de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín (CINDEC), así como a los socios de CONISILVO (Consorcio para la Investigación y Desarrollo de Sistemas Silvopastoriles), el apoyo económico y logístico

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Comentario

M.A. Cobos P.

Felicito al Dr. Giraldo, por su excelente estudio, sobre el potencial de la arbórea A. decurrens. El trabajo resulta muy completo, y concentra, la mayoría de las interrogantes que se tienen respecto a la evaluación de leguminosas y arbustivas tropicales, como son, relación arbustiva-suelo, arbustiva-gramineas, producción de biomasa, efecto en fauna y variables de producción animal. Quisiera saber si en base a la baja digestibilidad de la arbórea, se han planteado alguna solución al problema. Es importante señalar, que no siempre la presencia de taninos es la responsable de la baja digestibilidad de un forraje, nosotros tenemos datos, de que en plantas con alto contenido de taninos, existe una menor digestibilidad que en plantas con alto contenido de taninos. Por ejemplo, el cocoite (Gliricidia sepium) presentó una concentración abundante de taninos, pero una alta digestibilidad, y mientras que el bacaris (Baccharis vaccinioides) y la vervesina (Vervesina perymenioides), presentaron una baja digestibilidad (54,6 y 59,6 por ciento), con todo y que presentaron una baja concentración de taninos. Una posible explicación, es que los taninos no se acumulan específicamente en las hojas, sino más bien en los tallos, y el consumo de estos tallos, lo que afecta la digestión de las hojas. Otra posibilidad es con el uso de la bolsa de nylon, en que la mayoría de las veces se utilizan animales que no están adaptados al consumo de las plantas en estudio, por lo que no tienen la microflora y microfauna ruminal requerida para una adecuada degradación del material en estudio. Por lo que es recomendable que los animales tengan un periodo de adaptación al consumo del forraje en estudio de al menos 15 días.


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