por
Y. Roederer y R. Bellefontaine 1
INTRODUCCION
El Neem (Azadirachta indica A. Juss., Meliaceae) se cultiva en muchas regiones tropicales especialmente en Centroamérica, el Caribe, Sudamérica, Asia y Africa. Se regenera naturalmente en muchos países y puede incluso convertirse en invasora.
La recolección de las semillas (drupas) de los árboles y su siembra inmediata no plantea problemas importantes, porque su viabilidad es la adecuada durante las primeras semanas.
A pesar de la importancia del Neem en muchos países, no ha sido posible hasta ahora realizar ensayos completos y satisfactorios de procedencias de esta especie, mediante ensayos de campo, porque la conservación de las semillas plantea serios problemas: las semillas recibidas para tales ensayos han demostrado tener tasas de germinación muy bajas o incluso de cero. Debido al escaso tiempo de viabilidad de las semillas, es probable también que la base genética de las poblaciones cultivadas actualmente en diversos países como especies exóticas, sea muy limitada y que proceda de unas pocas introducciones.
Esta consideración alentó al CTFT a emprender algunas investigaciones sobre la viabilidad de las semillas de Neem de diversos orígenes, disponibles en el CTFT, Nogentsur-Marne (Collet 1988; Roederer 1985, 86, 87).
RESEÑA DE LA BIBLIOGRAFIA Y DE LOS ENSAYOS REALIZADOS
Como antes se indicó el neem tiene fama de perder rápidamente su capacidad germinativa. D. B. Webb et al (1984) consideran que ésta disminuye considerablemente después de 2 a 3 semanas. Según otras referencias, muy escasas, sobre los problemas de almacenaje y viabilidad del neem, el porcentaje de germinación disminuye rápidamente después de 4 semanas (a veces 8) y desciende hasta cerca de cero después de 1 a 2 meses (raramente 4)2.
Se realizaron ensayos con germinativos de neem en 1985 en el Centre National de Semences Forestières (CNSF), de Burkina Faso (Ouedraogo et al 1985). Su finalidad era, especialmente determinar el efecto sobre el almacenaje de las semillas de los distintos estados de madurez del fruto. En uno de los experimentos se ensayaron tres partidas de semilla procedentes de frutos recogidos el mismo día y del mismo árbol padre:
Para las tres partidas de semilla se realizó, en condiciones idénticas, la eliminación inmediata de la pulpa y el secado al sol durante cuatro días.
Después de 30 días de observación de la germinación a la temperatura ambiente, en cajas herméticas con arena húmeda, los resultados de estos primeros ensayos indicaron que los tipos de semilla (a) y (b) daban mejores resultados en comparación con las del fruto muy maduro.
Nagaveni et al (1987) confirmaron que el fruto recogido del suelo tenía un periodo de viabilidad de 8 a 10 días mientras que los frutos cogidos del árbol, de color verde amarillento, eliminada la pulpa y puestos a secar a la sombra durante 2 días, tenían un porcentaje de germinación del 80% durante los primeros cuatro meses. Después de 6 a 7 meses la germinación había descendido al 50% y en los meses siguientes descendía todavía más.
En Nigeria, B. Ezumah (1986) se encontró con tasas de germinación de 81–86% cuando las semillas (de nueve localidades distintas) se sembraban inmediatamente después de la recolección.
Ezumah menciona también otros resultados interesantes sobre tratamiento y germinación:
la eliminación de la pulpa del fruto inmediatamente después de la recolección o el dejar los frutos en montón durante algunos días antes de eliminar la pulpa, no tuvo influencia en el porcentaje de germinación; no obstante, el primer método lleva más tiempo y, en consecuencia, es más costoso;
la germinación se vió influida negativamente por las temperaturas superiores a 30°C y, en el otro extremo, las temperaturas bajas (6–7°C) impidieron la germinación; las tasas de germinación eran más altas a 26° que a 30°;
el porcentaje de germinación de las semillas sembradas inmediatamente después de la recolección no difería notablemente, cualesquiera que fuesen las semillas: (i) frescas; (ii) después de 8 días de secado al aire a la temperatura ambiente (26–28°C); o (iii) después de 8 días de secado al sol (30–34°C). Sin embargo el contenido de humedad de las semillas disminuía de 35–40% en el tratamiento (i); ± 16% en el tratamiento (ii); y ±10% en el tratamiento (iii). Por ello se recomienda por ahora el tercer método, que es también barato;
la germinación fue en general mejor en las condiciones de vivero que en las temperaturas constantes de laboratorio; las fluctuaciones del día y la noche parece que tuvieron un efecto beneficioso en la germinación.
En cuanto al almacenaje, Ezumah afirma que para todas las procedencias, el porcentaje de germinación en las condiciones de laboratorio disminuía rápidamente, cualquiera que sea el método de almacenaje, en la forma siguiente:
después de 4 semanas, la germinación era sólo del 60 y el 45% respectivamente, en semillas mantenidas a la temperatura ambiente (26–28°C) y en un refrigerador (6–7°C);
después de 12 semanas, en ambos casos el porcentaje de germinación era inferior al 5%.
Un equipo de tres científicos de Tailandia determinó la influencia de una variedad de condiciones de secado y almacenaje (Chaisurisri et al. 1986). Tras del transporte inmediato y la eliminación de la pulpa, a continuación de la recolección, se sometieron las semillas a diversos ensayos. El resultado fué el siguiente:
el porcentaje de germinación permanecía entre el 60 y el 85%, en la mayoría de los ensayos, durante las 12 primeras semanas; descendía rápidamente entre las semanas 12a y 16a y era igual a cero después de 24 semanas (6 meses);
el método más eficaz era el secado al sol en invernadero, en comparación con el secado en aire parcialmente deshumificado a 25°, y a la temperatura ambiente.
Del estudio se obtuvieron los siguientes resultados:
se recomienda el secado al sol durante 2 días, en invernadero;
las semillas almacenadas a 15°C en sacos de algodón mantienen una mayor capacidad germinativa que las almacenadas en envases herméticos;
ninguno de los tratamientos ensayados logró mantener una tasa elevada de germinación después de 12 semanas.
En resumen, todas las observaciones y ensayos analizados llevaron a la conclusión de que las semillas de neem pierden su viabilidad pasadas 2 a 6 semanas después de la recolección.
OBSERVACIONES DEL LABORATORIO DE SEMILLAS DEL CTFT
Hay que destacar que los resultados que se dan a continuación no están basados en ensayos sistemáticos sino que proceden de observaciones realizadas de varias partidas de semilla, almacenadas con su endocarpo durante diversos periodos, hasta de varios años, en recipientes herméticos, en cámara frigorífica con temperatura (+ 4°C) y humedad (alrededor del 30%), controladas.
Tras de quitar las cáscaras y eliminar unas pocas semillas estériles, podridas o anormales, se pusieron las semillas a germinar en arena previamente humedecida, en cajas de germinación herméticas de plástico transparente, a una temperatura de 25°C (Collet 1988; Roederer 1985, 86, 87). El periodo de observación de la capacidad germinativa fué de 30 días. El contenido de humedad de las semillas ensayadas variaba del 5 al 8% y el del endocarpo era aproximadamente del 11%.
La germinación de estas semillas, libres de su endocarpo, era satisfactoria después de 64 meses de almacenaje en frío (42% para la partida de semillas 83/4002N procedente de Maroua, Camerún) y muy satisfactoria después de 17 meses (75% para la partida de semillas 86/5904N procedente del norte de Camerún).
Hay que señalar que no siempre se conocían con precisión los detalles de la recolección (fecha, etapa de maduración del fruto, número de árboles padre, recogida del árbol o debajo de él, etc.), ni sobre la manipulación posterior a la recolección (eliminación de la pulpa, secado, almacenaje), ni tampoco sobre las condiciones ambientales en el momento de enviarlas desde Camerún a Francia.
CONCLUSIONES
Las semillas de neem tienen fama de no mantener mucho tiempo una viabilidad adecuada. Se considera en general que después de 2 a 6 meses de almacenaje, el porcentaje de germinación es próximo o igual a cero.
Sin embargo, algunas observaciones realizadas con partidas de semilla que habían estado almacenadas durante varios años en el CTFT indicaron que las semillas sin endocarpo tenían una capacidad de germinación aceptable (42%) después de transcurridos 5 años de almacenaje.
Estos resultados provisionales tendrían que confirmarse mediante experimentos sistemáticos realizados con cantidades adecuadas de semilla. Habría que realizar también ensayos adicionales referentes a los efectos de la maduración de la semilla y del tratamiento del fruto, determinando con mayor precisión la evolución en el tiempo de la capacidad de germinación de las semillas.
Si se contase con información sobre la forma de mantener a medio plazo la capacidad germinativa, resultaría posible organizar ensayos internacionales de procedencias de esta especie, relativamente extendida, como base para una adecuada ampliación de la base genética del material empleado en los programas de plantaciones con exóticas.
REFERENCIAS
Chaisurisri K., Ponoy B. & Wasuwanich P. 1986 Storage of Azadirachta indica A. Juss. seeds. The Embryon, Vol 3, № 1, 19–27, Sept 1986. ASEAN Canada Forest Tree Seed Centre, Muak Lek, Saraburi, Tailandia.
Collet C. 1988 Rapport de stage au Laboratoire de graines CTFT. Julio 1988, 9 pp. Centre 1988 Technique Forestier Tropical, Nogent-sur-Marne, Francia.
CTFT 1989 Fiche monographique: Azadirachta indica. Bois et Forêts des Tropiques, №. 217. Centre Technique Forestier Tropical, Nogent-sur-Marne, Francia.
Ezumah B.S. 1986 Germination of storage of neem (Azadirachta indica A. Juss.). Seed Science and Technology, 14. 593–600.
Nagaveni H.C., Ananthapadmanhaba H. S. & Rai S. N. 1987 Note on the extension of viability of Azadirachta indica. Myforest 23, 4, 245.
Ouedraogo A.S., Some L. M., Bance C. & Bellefontaine R. 1985 Una Institución Técnica Especializada en Semillas Forestales de las zonas Saheliana y Sudaniana: la Dirección de Semillas Forestales de Burkina Faso. FAO, Información №. 14 sobre Recursos Genéticos Forestales, pgs. 11–16.
Roederer Y. 1985, 86, 87 Varios informes internos, del laboratorio de semillas del CTFT, Junio 1985, Agosto 1986, Julio 1987.
Webb D. B., Wood P. J., Smith J. P. & Henman G. S. 1984 A guide of species selection for tropical and subtropical plantations. OFI, Oxford, 256 pp.
1 Manuscrito recibido en 1989.
