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VIII. ESTADO ACTUAL DE LA INFORMACION SOBRE PRODUCTOS FORESTALES NO MADEREROS (Cristina Resico, Consultor FAO)

1. Generalidades

La República Oriental del Uruguay está situada en la parte este del extremo meridional de América del Sur, limita al norte con Brasil; al este con Brasil y el océano Atlántico; al sur con el océano Atlántico y el río de la Plata, y al oeste con Argentina. El río Uruguay traza la frontera occidental del país. Su territorio nacional abarca 177.410 km2.

El país consta principalmente de una amplia llanura ondulada que se eleva hasta una cordillera baja, ubicada en el tercio oriental del país.

La vegetación natural del llano está compuesta principalmente por gramíneas, hierbas y arbustos, destinándose a algún tipo de actividad agrícola casi el 90% de la tierra.

1.1 Bosques Nativos

Actualmente en el país existen aproximadamente 750.000 has de Bosques Nativos que cubren el 3,7% de la totalidad del territorio. Son de tipo templado y su valor principal más que por su madera, es por la protección que brinda a otros recursos naturales renovables. Contribuyen a la biodiversidad en función de la cantidad de especies que lo conforman y que tienen su origen en los ecosistemas chaqueño y paranaense.

Se reconocen cinco tipos diferentes de formaciones:

• Bosque de Parque: en el Departamento Paysandú. Su especie representativa es el Algarrobo (Prosopis nigra)

• Bosque de Quebrada: en el Departamento Treinta y Tres. Su especie representativa es la palmera Pindó (Arecastrum romanzoffianum)

• Bosque Ribereño: en el Departamento Cerro Largo. Su especie representativa es el Sauce criollo (Salix humboldtiana).

• Bosque Serrano: en el Departamento Lavalleja. Su especie representativa es el Espinillo (Acacia sp.)

• Palmares: en el Departamento Rocha. Su especie representativa es la palma Butiá (Butia capitata)

• Montes de arenales platenses y atlánticos: son en general arbustales sin vegetación leñosa de mayor porte

Entre las especies aprovechables se encuentran los quebrachos (Schinopsis balansae, S. quebracho-colorado), el urunday (Astronium balansae), el lapacho negro (Tabebuia ipe), el guaraniná (Bumelia obtusifolia), la jarilla (Larrea divaricata), el palo amarillo (Phyllostylon rhamnoides), el palo santo (Bulnesia sarmientoi), el palo borracho (Chorisia insignis) y el palo blanco (Calycophyllum multiflorum) y algunas palmeras como caranday (Copernicia alba), palma (Trithrinax campestris) y carandillo (Trithrinax biflabellata), todas ellas con posibilidades de aprovechamiento no maderero.

Se debe resaltar que desde 1990, cuando se realizaron las primeras solicitudes de corta, hasta el presente y bajo la Ley Forestal Nro. 15.939, se han cumplido diversas actividades que tienden a una gestión de conservación del bosque nativo.

La mencionada Ley, viene cumpliendo dos objetivos:

• Impulsar la forestación con especies exóticas, disminuyendo la presión de utilización sobre el bosque nativo

• Establecer las bases para una Gestión de Conservación del Bosque Nativo.

Las distintas acciones son planificadas y ejecutadas por la Dirección Forestal, tratando de compatibilizar el interés general de conservación, con el interés particular del aprovechamiento, el ordenamiento de la vegetación y la producción predial.

Debido a que casi toda la tierra del país es de propiedad particular, la mencionada Gestión es un mecanismo vital para la conservación de parte de los ecosistemas naturales del país que abarca además del bosque nativo, las áreas naturales colindantes.

En 1994, la Dirección Forestal elaboró un documento interno de planificación que lo denominó "Gestión de la Conservación del Bosque Nativo - Estrategia Preliminar". La misma enmarca los Objetivos Generales que son:

- A Corto Plazo: equilibrar las necesidades internas de aprovechamiento del establecimiento rural, con la demanda del producto en el mercado, protegiendo el recurso.

- A Mediano Plazo: obtener técnicas de manejo.

- A Largo Plazo: permitir el aprovechamiento sostenido de las especies de los ecosistemas, preservar la diversidad genética y mantener los procesos ecológicos y los sistemas vitales esenciales.

En cuanto a los Objetivos Específicos se los enuncia de la siguiente manera:

- Establecer planes de manejo para el bosque nativo.

- Desarrollar la capacidad institucional.

- Desarrollar los sistemas de protección y control.

- Promover la investigación de técnicas de manejo y de niveles de producción.

- Fomentar el financiamiento de la gestión de conservación del bosque nativo, a través de la asistencia internacional.

Estas premisas dieron sustento a las restricciones de uso que estableció la Ley mencionada, y que dio como resultado la paulatina recuperación del recurso. Esto se comprueba por la existencia de diversas áreas de bosque secundario en expansión, en sitios donde según las fotografías aéreas de 1967 mostraban agricultura o bosque cortado, en particular todo el litoral oeste del país. Asimismo se comprueban aumentos del 30% en el período 1967 -1996 en áreas del bosque serrano en el Este y Noreste del país.

Es decir, que se puede reconocer que en el país no se registran deforestaciones sino una permanente recuperación de las áreas boscosas nativas.

Además del cumplimiento de la legislación, este hecho es atribuible a que el Uruguay es uno de los pocos países del mundo que basa su desarrollo forestal exclusivamente en la producción de las forestaciones realizadas con exóticas de rápido crecimiento, de manera tal que cubre la creciente demanda de madera a partir de esas plantaciones. (Dirección Forestal. Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca; 1995)

1.2 Bosques Gestionados

Los bosques nativos bajo aprovechamiento son los denominados Bosques Gestionados, que actualmente suman 120.000 has.

Las pautas de manejo, se basan en el cumplimiento de la legislación vigente y de los objetivos generales y específicos de la Estrategia de la Gestión de Conservación, permitiendo el desarrollo de proyectos en cualquiera de las cinco formaciones boscosas del país.

Los criterios establecidos, al propender al manejo sostenido de las especies de las masas forestales nativas, preservando su diversidad genética, están protegiendo tanto los productos no madereros del bosque como los servicios ambientales que brindan.

1.3 Bosque Implantado

La superficie forestada con Plan de Manejo ha alcanzado las 221.616 has. de las cuales 196.266 se han realizado en el marco de la Ley de promoción forestal y comprende las forestaciones realizadas en el período 1989 - 1995.

El género mas plantado históricamente ha sido el Eucalyptus sp. (tendencia que se ha incrementado en los últimos años). En los Departamentos de Lavalleja, Florida y Soriano, solo se ha forestado con esta especie, existiendo también una concentración importante en los departamentos de Paysandú y Río Negro,

Le siguen en magnitud las plantaciones realizadas con Pinus sp., las que se ubican especialmente en los departamentos de Rivera, Tacuarembó, Durazno, Paysandú y Río Negro.

La referencia a este tipo de bosques es a los efectos de poder visualizar su potencial en cuanto a los PFNM que de ellos se pueden obtener.

Así, el Eucalyptus sp. es vital para la sustentabilidad y aumento de la producción de miel de abeja.

Si bien se conoce y se han realizado algunas experiencias en años anteriores, la extracción de sus aceites esenciales es una actividad que no se practica actualmente.

De los bosques de Pinus sp. se originan productos como la resina y la colofonia; en su sotobosque la producción espontánea de hongos comestibles. También ofrecen servicios ambientales, en especial en las fajas marítimas costeras, donde colaboran en la fijación de dunas.

2. Los Productos Forestales No Madereros

A los efectos de poder concebir una idea acerca de la importancia que pueden tener los PFNM en el Uruguay, se torna necesario remontarse a la conformación étnica que presentaba en los comienzos de la conquista tanto por los españoles, como por los portugueses.

La etnia predominante era la Charrúa, con características de cazadores, pescadores y guerreros muy apegados a su tierra. Como resultado del mestizaje y de las luchas por sojuzgarlos, todas las consultas efectuadas arrojan como resultado que en la actualidad, no existen en el país descendientes de dicha etnia en estado puro. Se menciona como una posibilidad muy remota que haya algunos grupos muy reducidos en el departamento de Tacuarembó. El mestizaje dio origen al gaucho oriental.

Esta situación cobra relevancia cuando se pone en evidencia que la transmisión de los conocimientos ancestrales acerca de las características y usos de las especies vegetales, fueron efectuadas en forma oral por las poblaciones originarias de generación en generación. En el país estas poblaciones ya no existen, y dichas referencias se han ido perdiendo.

Se puede consignar como conclusión que a excepción de algunas hierbas que se emplean como medicinales y otros usos, es muy escaso el reconocimiento y la utilización de PFNM.

2.1. Definición y alcances

En razón que la denominación PFNM no tiene un uso muy extendido, generalmente no existe una clara y acabada comprensión acerca de sus alcances, surgiendo por lo tanto dudas acerca de la inclusión o no de determinadas especies.

Se mencionan a continuación algunas especies nativas y sus usos no madereros.

Cuadro 28. Especies nativas y su uso no maderero

Especie y nombre vulgar

Uso

Acacia caven (espinillo)

A-E-F-M-O-T

Acacia farnesiana (espinillo)

E-G-M-T

Acanthosyris spinescens (quebracho flojo)

A-M-O

Acreugenia pungens (guabiyú)

A-E-F-M-O

Aloysia gratissima (cedrón del monte)

E-L-M-O

Allophylus edulis (chalchal)

A-E-F-M-O-T

Araugia hortorum (taso)

V

Arecastrum romanzoffianum (pindó)

A-F-M-O

Aspidosperma quebracho blanco (quebracho blanco)

M-T

Bauhinia forficata (pata de vaca; caroba)

M-O

Berberis laurina (espina amarilla)

A-M-O

Blepharocalyx tweediei (arrayán de las islas)

E-M-O

Cedrela brasiliensis (cedro colorado)

E-L-M

Celtis spinosa (tala)

A-F-M-O-T

Cephalanthus glabratus (sarandí colorado)

M-O

Colletia paradoxa (curro)

L-M-O-V

Copernicia alba (palma blanca; caranday)

A-E-F-M

Cupania vernalis (camboatá)

L-O-T

Daphnopsis racemosa (ibirá)

O-X

Enterolobium contortisiliqum (timbó)

F-M-O-T

Erythrina crista galli (ceibo)

F-L-M-O

Fagara hiemalis (tembetarí)

E-M

Fagara rhoifolia (tembetarí-mí)

M-O

Ficus luschnathiana (higuerón)

A-M

Gleditsia amorphode (espina corona)

F-G-M-O-T

Hexaclamis edulis (ubajay)

A-E-F-M-O-T

Inga affinis (inga)

A-T

Inga uraguensis (inga)

A-F-L-M-O-T

Jodinia rhombifolia (quebrachillo)

M-O

Lantana camara (camara)

E-M-O

Lithraea molleoides (molle blanco)

A-E-M-O-T

Lonchocarpus nitidus (lapachillo)

L-O

Luehea divaricata (Francisco Alvarez)

M-O-X

Maytenus ilicifolia (quebrachillo)

A-M-O-T

Myrceugenia glaucescens (murta)

M-O

Myrcianthes cisplatensis (guayabo colorado)

A-F-M-O

Nicotiana glauca (palán palán)

M-O

Ocotea acutifolia (laurel blanco)

M-O

Parkinsonia aculeata (garabato)

L-M-O-V-X

Peltophoorum dubium (caña fístula)

M-O-T

Phytolaca dioica (ombú)

M-O

Piptadenia rigida (angico)

G-M-T

Pouteria gardneriana (aguay-guazú)

A-M-O

Pouteria salicifolia (marcela)

A-M-O

Prosopis alba (algarrobo blanco)

A-F-G-L-M-N-S-T-X

Prosopis algarrobilla (ñandubay)

F-L-M-N-S-T

Prosopis nigra (algarrobo negro)

A-F-G-L-M-N-S-T

Proustia cuneifolia (plumerillo rojo)

M

Rapanea laetevirens (canelón)

A-O-T

Ruprechtia laxiflora (viraró crespo)

E-M-O

Ruprechtia salicifolia (viraró)

M-O

Salix humboldtiana (sauce criollo)

F-L-O-T

Sapium haematospermum (lecherón)

M-T

Scutia buxifolia (coronilla)

F-M-O-T

Schinus areira (aguaribay)

A-E-G-M-O-T

Schinus longifollius (molle)

A-M-O

Sebastiania brasiliensis (lecherón)

M-O

Sebastiania klotzschiana (palo de leche)

M-O-X

Solanum verbascifolium (tabaquillo)

A-F-M-O

Styrax leprosum (ibirá-cuatí)

E-M-O

Syagrus yatay (yatay)

A-F-M-O

Tabebuia ipe (lapacho negro)

M-O-T

Terminalia australis (palo amarillo)

M-O-T

Trithrinax biflabellata (carandillo)

A

Trithrinax campestris (caranda-i)

A-F-T

Vitex megapotamica (taruman sin espinas)

A-M-O

(Fuente: Base de Datos, DRFN; Muñoz et al, 1993)

Referencias del uso:
A = alimenticio E = esencias
F = forraje G = gomas
L = planta melífera M = medicinal
N = fijadora de nitrógeno O = ornamental
S = sombra T = tintes, taninos
V = cercos vivos X = textil

2.2 Alimentos, aditivos, infusiones

Como ya se explicara, no existe en el país una tradición por el consumo de alimentos originados en el bosque. El aprovechamiento de algunos productos, como frutas y hongos, se realiza en forma estacional y con carácter doméstico o de muy bajo nivel de comercialización.

2.2.1 Frutos nativos

Las tres especies nativas que se han identificado como más promisorias por sus frutos son las siguientes:

- Guayabo del país (Feijoa sellowiana)

- Pitanga ( Eugenia uniflora)

- Mburucuyá (Passiflora coerulea)

Las mismas son muy comunes en las huertas de los cascos de estancia. Su domesticación se produjo a partir de haberlas llevado desde los bosques de donde son oriundas hasta esos nuevos ambientes.

El caso de la Guayaba es particularmente destacable, ya que en Brasil dicha fruta es producida agronómicamente, se la comercializa corrientemente, y tiene una demanda sostenida.

En el Uruguay hubo un intento para trabajar en ese sentido. La Facultad de Agronomía elaboró un proyecto a fin de identificar todas las variedades que existen en forma natural, elegir las mas promisorias para elaborar pautas de cultivo y la posterior promoción a los productores agropecuarios del país. Dicho proyecto no se llegó a concretar y los impulsores han abandonado la iniciativa.

2.2.2 Miel

En el Uruguay este producto se relaciona con el bosque de dos maneras diferentes.

Una es por la producción directa de exudados de especies vegetales de las formaciones boscosas nativas y que son utilizadas como edulcorantes. Es el caso de la Miel de Palma de Butia (Butia capitata).

La misma se obtiene por incisiones que se efectúan en los estípites de dicha palma, recogiéndose la sustancia segregada en recipientes que se colocan al pie de la misma, en el extremo final de dichos cortes.

Esta especie se encuentra principalmente en el departamento de Rocha y la utilización que se hace de la miel que produce es solamente doméstico.

Debido a su exiguo uso, las autoridades responsables no exigen ningún permiso previo, razón por la cual no existen registros estadísticos de producción.

El otro caso comprende a la utilización de las plantaciones de eucaliptos como fuente de néctar para la producción de miel de abejas.

En tal sentido, sería pertinente efectuar una relación entre las especies de este género que se están utilizando, el ritmo de forestación y las posibilidades de expansión de la producción de miel de abeja.

Si bien la producción es oscilante, la misma se ubica alrededor de 7.000 a 8.000 toneladas anuales de las cuales se exporta la casi totalidad. Esta cifra representa la producción de 25.000 a 30.000 cajones anuales.

2.2.3 Hongos

La recolección de hongos comestibles se efectúa principalmente en los pinares costeros de protección que se encuentran en el departamento de Rocha.

Es una actividad que realizan de manera artesanal las poblaciones rurales de menores recursos.

La comercialización se realiza en estado fresco en algunos comercios minoristas y en puestos precarios a los costados de los caminos de acceso, principalmente la Ruta Nacional nº 9, del mencionado departamento.

No se ha podido encontrar ningún dato estadístico que permita tener una idea acerca del volumen que se opera y su importancia económica. Podría resultar interesante que se investigara acerca de las posibilidades de su industrialización en pequeña escala, así como el valor económico y dietario que pueden aportar a los pequeños productores. Además, serían una alternativa a considerar para la diversificación de actividades.

Los géneros más comunes son:

- Boletus granatus

- Suillus lúteus

- Lactarius deliciosus.

Desde el punto de visto nutricional, son aportantes de glúcidos y proteínas con un bajo contenido de grasas.

2.2.4 Yerba mate

El Uruguay es un gran consumidor de yerba mate (Ilex paraguariensis), principalmente como infusión en “mate”.

La demanda de aproximadamente 10 kgr/habitante/año, debe ser cubierta mediante la importación desde sus vecinos productores Argentina y Brasil.

2.3. Plantas medicinales

Unos de los aspectos referidos a los PFNM que ha tenido mayor desarrollo tanto en investigación como en utilización y venta es el correspondiente a las hierbas medicinales.

El crecimiento importante de la demanda que ha ocurrido en los últimos diez años, viene acompañando la tendencia de los habitantes urbanos (en particular los occidentales) de vivir mas sanamente. Esta idea implica la realización de actividades físicas, alimentación más natural y empleo de hierbas silvestres como específicos medicinales preventivos y curativos. Otro factor es que son más accesibles por su menor precio.

La utilización de plantas medicinales se remonta miles de años en el tiempo. Las poblaciones aborígenes de toda América como así también su descendencia, la han utilizado ancestralmente y hasta nuestros días. La transmisión de esa tradición por vía oral es la que ha permitido mantener y recrear las posibilidades de su empleo de la actualidad.

Las medicinas sintéticas producidas en laboratorios (y que en muchos casos reproducían a los principios naturales de las plantas), estas fueron ocupando el lugar de las hierbas.

Actualmente existen en el Uruguay varias empresas que se dedican a la adquisición, elaboración de mezclas, fraccionamiento y comercialización de hierbas medicinales. La más antigua, con 90 años de existencia, es el Instituto Botánico La Selva.

El siguiente es un listado de las especies indígenas del Uruguay, relacionadas con los bosques y que tienen propiedades medicinales.

Cuadro 29. Especies con Propiedades Medicinales

Nombre Científico

Nombre Común

Propiedades

Acacia caven

espinillo

 

Acacia farnesiana

espinillo

 

Acanthosyris spinescens

quebracho flojo

 

Acreugenia pungens

guabiyú

 

Aloysia gratissima

cedrón del monte

 

Aspidosperma quebracho blanco

quebracho blanco

 

Allophylus edulis

chalchal

 

Bauhinia forficata – B. candicans

pata de vaca; carobá

Antidiabética

Berberis laurina

espina amarilla

 

Blepharocalyx tweediei

   

– Myrtus communis

arrayán

Antirreumático

Cedrela brasiliensis

cedro colorado

 

Celtis spinosa

tala

 

Cephalanthus glabratus

sarandí colorado

 

Colletia paradoxa

curro

 

Enterolobium contortisiliqum

timbó

 

Erythrina crista galli

ceibo

 

Fagara hiemalis

tembetarí

 

Fagara rhoifolia

tembetarí-mí

 

Ficus luschnathiana

higuerón

 

Gleditsia amorphode

espina corona

 

Gourliea decorticans

chañar

Expectorante

Hexaclamis edulis

ubajay

 

Hyptis vertisillata

lucera – yerba del toro

Digestivo/Diurético

Ilex aquifolium

acebo – congorosa

 

Inga uraguensis

inga

Intestinal/Cicatrizante

Jodinia rhombifolia

quebrachillo

 

Lantana camara

camara

 

Lithraea molleoides

molle blanco

 

Luehea divaricata

   

Maytenus ilicifolia

quebrachillo

 

Myrceugenia glaucescens

murta

 

Myrcianthes cisplatensis

guayabo colorado

 

Nicotiana glauca

palán palán

Cicatrizante

Ocotea acutifolia

laurel blanco

 

Parkinsonia aculeata

garabato

 

Pasiflora coerulea

mbrurucuyá – pasionaria

Sedante

Peltophoorum dubium

caña fístula

 

Phyllantus sellowianus

sarandí blanco

 

Phytolaca dioica

ombú

Antidiabético-Purgante

Piptadenia rigida

angico

 

Pouteria gardneriana

aguay-guazú

 

Pouteria salicifolia – Achyroclyne satureoides

 

Digestivo/Colest.

Prosopis alba

algarrobo blanco

 

Prosopis nigra

algarrobo negro

 

Prosopis algarrobilla

ñandubay

 

Proustia cuneifolia

plumerillo rojo

 

Psidium guayaba

arazá – guayabo

Antidiarreico

Ruprechtia laxiflora

viraró crespo

 

Ruprechtia salicifolia

viraró

 

Rebulnium bigeminum

charrúa

Antiséptico

Sapium haematospermum

lecherón

 

Scutia buxifolia

coronilla

 

Schinus areira

aguaribay

 

Schinus longifollius

molle

 

Sebastiania brasiliensis

lecherón

 

Sebastiania klotzschiana

palo de leche

 

Solanum verbascifolium

tabaquillo

 

Styrax leprosum

ibirá-cuatí

 

Syagrus yatay

yatay

 

Tabebuia ipe

lapacho negro

 

Terminalia australis

palo amarillo

 

Vitex megapotamica

taruman sin espinas

 

(Fuentes: Instituto Botánico La Selva; Base Datos, DRFN; Muñoz, 1993)

Nota: Las especies en las que se consignan las propiedades medicinales son las más utilizadas. Las demás tienen uso restringido o potencial.

No se dispone de datos estadísticos sobre su producción, industrialización y consumo. El origen de la materia prima es la recolección ya que no se realizan cultivos de las especies mencionadas.

2.4. Plantas Ornamentales

En el país existe un mercado interno de plantas ornamentales de relevancia, especialmente en la zona de mayor turismo que es Punta del Este. No se ha podido encontrar datos estadísticos acerca de su magnitud económica, lo cual revela que debería recabarse mayor información.

De la flora nativa del Uruguay, se consignan a continuación aquellas de importancia como ornamentales.

Cuadro 30. Plantas ornamentales del Uruguay

Nombre científico

Nombre vulgar

Azara uruguayensis

azara

Buddleja stachyoides

cambará

Butia capitata

butiá

Calaguala

 

Calliandra parviflora

plumerillo rosado

Calliandra selloi

plumerillo

Citharexylum montevidense

taruman

Collaea stenophylla

 

Combretum fructicosum

 

Dodonaea viscosa

chirca

Duranta repens

tala blanco

Escalonia megapotamica

pititos

Escallonia bífida

pititos

Eugenia uruguayensis

guayabo blanco

Guettarda uruguensis

jazmín del Uruguay

Heterothalamus alienus

romerillo

Lantana fucata

lantana

Lycium cestroides

talilla

Mimosa polycarpa

sensitiva

Mimosa uruguensis

mimosa

Myrrhinium loranthoides

palo de fierro

Poecilanthe parviflora

lapachillo

Psidium cattleianum

arazá

Quillaja brasiliensis

árbol de jabón

Sapium montevidense

curupí

Schinus lentiscifolius

carobá

Sesbania punicea

acacia mansa

2.5 Resinas

En éste caso se hace referencia al exudado de pinos, especialmente P. elliottii.

En el año 1931, se realizaron varias tentativas de resinación en los pinares costeros implantados en las localidades de Atlántida, La Floresta y Maldonado. La compañía que realizó el emprendimiento se denominaba Usinas Resineras del Uruguay. Se obtuvieron rendimientos promedios entre 1,4 - 1,6 kgr. de resina por árbol. Se recolectó en una temporada de 6 meses de trabajo alrededor de 60.500 kgr., lo que da una idea de la importancia de la empresa, ya que comprendió la resinación de 40.000 árboles.

A pesar de este antecedente y de los esfuerzos efectuados para que se sostenga y expanda la actividad, en la actualidad son poco relevantes los trabajos en tal sentido.

Según los datos estadísticos del Banco de la República, el país es un neto importador de resinas y subproductos como trementina y colofonia.

La esencia de trementina, es el producto más importante de la destilación de resinas. Se usa principalmente como solvente de pinturas y barnices porque presenta mejor poder mojante que los otros solventes; también es materia prima para la industria textil y la industria química interviniendo en la fabricación de: perfumes sintéticos, aceites, productos mojantes para la agricultura, insecticidas, bactericidas, productos antisépticos, farmacéuticos, caucho sintético, entre otros.

La colofonia es otro producto de la destilación de la resina que queda después que se ha volatilizado toda la esencia de trementina. Es un producto seco constituido por ácidos resínicos (90-95%), y productos saponificables en un 5 - 10%. Tiene usos diversos ya que entra en la composición de gran cantidad de productos comerciales, tales como adhesivos diversos, linóleum, revestimientos de planchas, jabonería, sustancias aislantes de electricidad, entre otros.

La industria papelera es la que más utiliza la colofonia para el encalado y como regulador de la absorción de tintas.

2.6. Aceites Esenciales

Aunque es poco importante la obtención de aceites esenciales, es una actividad que se realiza en el país. Los mismos se procesan a partir de Eucalyptus glóbulus.

No hay estadísticas recientes; la producción se estimaba para el año 1993 en 60.000 litros de aceites esenciales anuales. Según referencias actualizadas, la actividad se ha reducido hasta casi desaparecer.

2.7 Pesca

La relación entre los bosques y la pesca en aguas interiores, se establece a partir de diferentes aspectos. Aporta alimento para los peces, protege las cuencas y los cauces de los efectos erosivos que aumentan los contenidos y la carga de material en suspenso que enturbian sus aguas, pone el paisaje a disposición del turismo interesado en la pesca deportiva. Estas funciones, dan lugar a actividades humanas que pueden beneficiarse de manera directa, como alimento a poblaciones ribereñas, e indirecta a través de la generación de empleo demandados por el turismo.

Las especies de agua dulce, que existen en el Uruguay son:

Cuadro 31. Algunas especies nativas de peces de agua dulce

Nombre vulgar

Nombre científico

Armado

Pterodoras granulosus

Armado Chancho

Oxydoras kneri

Bagre amarillo

Pimelodus clarias

Bagre blanco

Pimelodus albicans

Boga

Leporinus obtucidens

Dorado

Salminus brasiliensis

Esturión

Ascipenser baeri

Manduví

Agenciosus spp.

Mochuelo

Netuma barbus

Patí

Luciopmelodus pati

Sábalo

Prochilodus lineatus

Surubí

Pseudoplatystoma coruscans

Tararira

Hoplias malabaricus

Vieja del Agua

Hypostomus spp.

Cuadro 32. Especies exóticas aclimatadas

Nombre vulgar

Nombre científico

Trucha Arco Iris

Salmo irideus

Pejerrey

Odontesthes spp.

Bagre negro

Rhamdia sapo

Carpa

Cyprinus carpio

(Fuente: Informe Sectorial Pesquero 1999. INAPE)

La intensa captura en las lagunas como en cursos de aguas interiores ha llevado a la disminución de algunas poblaciones de la fauna íctica, generando preocupación en los grupos conservacionistas y en los funcionarios gubernamentales.

Cuadro 33. Desembarques de la Flota Artesanal en 1999

Especie

Toneladas

Sábalo

1.255

Otros de agua dulce

342

Tararira

275

Bagres

216

Armado

85

Patí

18

Camarones

12

(Fuente: Informe Sectorial Pesquero 1999, INAPE)

Esta inquietud por los recursos acuáticos, dio motivo a que el Instituto Nacional de Pesca desde fines del año 1996 iniciara un Programa de siembra de peces en aguas interiores de dominio público.

De este modo se han liberado durante los últimos dos años en ríos, arroyos, lagunas y embalses 2.869.800 peces con fines de repoblación, permitiendo incrementar la cantidad de peces existentes en los mencionados ambientes.

Estas siembras se realizaron a solicitud de las Intendencias de Colonia, Durazno, Flores, Maldonado, Paysandú, Rivera, Rocha, Salto y Tacuarembó.

Los peces utilizados con este fin son producidos en el Centro de Investigaciones Pesqueras y Piscicultura, ubicado junto al embalse de Salto Grande en Villa Constitución, departamento de Salto y la Estación de Piscicultura de Laguna del Sauce, departamento de Maldonado.

Por otra parte, en el período comprendido entre octubre 1997 y febrero 1998 se han atendido 48 solicitudes para la liberación de peces en aguas de uso privado distribuidas en los 19 departamentos del país, habiéndose cubierto un espejo de agua de 710 ha. y sembrado 1.800.050 peces.

Las especies seleccionadas han sido bagre negro (Rhandia quelen), pejerrey (Odonthestes bonariensis) y en ambientes cerrados carpa común (Cyprinus carpio)).

En los Institutos mencionados, se efectúa entre otras actividades la transferencia de tecnología para la cría de Yacaré.

2.8 Fauna

El Uruguay posee una riqueza baja en fauna vertebrada terrestre, asociada a su topografía y fitogeografía. El cuadro siguiente pone de manifiesto de manera cuantitativa dicha aseveración.

Cuadro 7. Especies de Vertebrados Terrestres

Mamíferos

95

Aves

382

Reptiles

58

Anfibios

34

TOTAL

569

(Fuente: A. Mones (encuesta))

Estas cifras, comparadas con las de Brasil (2963), Colombia (2736), Perú (2561), México (2348), entre otras, ubica al Uruguay en el último lugar en cuanto a cantidad de especies propias en América Latina.

Por esta razón, la legislación general prevé solamente su caza deportiva a excepción de los coipos y lobos marinos que pueden ser utilizados comercialmente con licencia expresa.

En orden de importancia la principal modalidad de cacería es la comercial seguida por la deportiva. Como ya se mencionó que en el país no hay población indígena, que es la más la utiliza domésticamente, la fauna silvestre constituye una fuente alimenticia de muy escasa relevancia para la población.

Las principales especies que se cazan son:

Mamíferos

Lepus europeo liebre europea

Hydrochaeris hydrochaeris carpincho

Pteronura brasiliensis lobo corbata

Aves

Nothura maculosa perdiz

Amazonetta brasiliensis

Columba picazuro paloma picaza

Dendrocygna pato silbón o sirirí

3. Servicios

3.1. Emisiones y absorciones de carbono

La República Oriental del Uruguay es parte en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC, en adelante CCC). La aprobación de la misma se realizó por Ley 16.517, del 22 de julio de 1994, entrando en vigor el 16 de noviembre del mismo año.

La Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), dependiente del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente MVOTMA, fue creada por la ley 16.623, del 1º de octubre de 1990. Dentro de sus competencias se encuentran: la planificación, programación, supervisión e instrumentación de la política ambiental; coordinación con otros organismos públicos (nacionales y departamentales) y privados en la ejecución de sus cometidos; establecimiento de normas y control de calidad ambiental.

La Unidad de Cambio Climático (UCC), dependiente de la DINAMA, fue creada por la Resolución MVOTMA Nº 505/94, del 29 de diciembre de 1994. Sus funciones son: organización, gestión y ejecución de las actividades que emergen de la aplicación de la CCC; desarrollo de las relaciones internacionales con los organismos, instituciones y agencias de la CCC o vinculados a ella; elaboración y actualización de inventarios de GEI (Gases Efecto Invernadero); identificación, elaboración y evaluación de políticas y medidas de respuestas al Cambio Climático (CC); difusión y promoción de tecnologías, prácticas y procesos para la reducción y prevención de emisiones de GEI; promoción y desarrollo de actividades de capacitación, difusión y sensibilización pública en materia de CC.

En el marco de ejecución del proyecto URU/95/G31, relativo al Fortalecimiento Institucional del Ministerio mencionado para aplicar la CCC, la Unidad de Cambio Climático, elaboró, publicó y distribuyó en marzo de 1997, el Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (INGEI) para el año 1990, con actualizaciones en 1994 y 1998 (este último en procesamiento), entre otras publicaciones.

Los mencionados Inventarios, elaborados siguiendo la Metodología del IPCC, revisada en 1996, comprenden los diferentes sectores de la actividad nacional, entre los que se encuentra el sector forestal. La información de base se toma de publicaciones del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca y del Ministerio de Industria, Energía y Minería.

En este sentido, todo esfuerzo que se realice para mejorar la información de base (hectáreas de bosques, actividades de corta y quema, consumos con finalidad energética y no energética, etc.) resultará en una mejor estimación de las emisiones y absorciones de carbono de este sector.

El consumo residencial de leña que se utiliza en el cálculo, es muy incierto dado que se trabaja con una información que data del año 1988, año en que se realizaron los últimos relevamientos en esta materia. Por lo tanto debe encararse la realización de una nueva encuesta o censo que permita obtener valores actualizados.

3.1.1. Panorama General de Emisiones

El cuadro respectivo muestra las cantidades emitidas de los diferentes gases de efecto invernadero directos e indirectos, separados por sector.

La mayor parte de las emisiones de Dióxido de Carbono provienen de las actividades del sector energía, que aporto 3.930 kton. Los procesos industriales contribuyen con una cantidad mucho menor, representando una cifra algo menor al 7% de las emisiones totales de dicho gas.

Las emisiones de Metano se generaron fundamentalmente en el sector Agricultura, representando más del 92% del total. En segundo lugar figura el aporte del sector Desechos, contribuyendo éste con casi el 8% restante.

También el sector Agricultura produjo el mayor aporte de emisiones de óxido nitroso, ya que es más del 99% del total nacional.

En cuanto al Oxido de Nitrógeno, el mayor aporte lo hace el sector Energía con un 94% del total siendo el resto aportado por el sector Agricultura.

Referido al Monóxido de Carbono, el sector Energía aparece en primer lugar con el 94% y el de Agricultura con el 6%.

El 66% de las emisiones de los Compuestos Orgánicos Volátiles distintos del Metano (COVDM) se originaron en el sector energía, mientras que el resto se produjo en las actividades correspondientes al sector de Procesos Industriales.

Las actividades de quema de combustibles originaron el 99% de las emisiones de dióxido de azufre y el resto lo aportó el sector de Procesos Industriales.

Cuadro 35. Total nacional de emisiones y remociones de GEI desagregados por sector

 

Emisiones

de CO en kton.

Remociones

de CO en kton.

Otros gases (CH, NO, NO, CO, SO, COPVDM)

Total Nacional de Emisiones y Remociones

3344,2861

 

1240,6993

1 – Energía

3930,3889

 

433,3284

1.1. Transporte

2176,6654

 

243,4702

1.2. Agricultura, Silvicultura y Pesca

527,8296

 

17,9019

1.3.Residencial y Comercial

580,2566

 

148,9403

1.4. Industria Manufacturera y Construcción

496,7647

 

19,7414

1.5. Industria de Energía

124,9555

 

. 2,4827

2 - Procesos Industriales

279,1118

 

15,6103

3 - Agricultura

   

733.4134

4 - Cambio en el Uso de la Tierra y Silvicultura

 

- 865,2146

 

5 - Desechos

   

58,3477

Bunkers Internacionales y CO generado por la quema de biomasa

2782,0245

 

23,9332

Emisiones y remociones de CO de los suelos

 

- 3807,5278

 

(Fuente: Inventario Nacional de Emisiones Netas de GEI; 1994. DINAMA)

De lo expuesto, surge que el mayor aporte de CO2 lo efectúa el Transporte terrestre con 2.026 kton. Seguido por Otros Sectores (Agricultura, Residencial, Comercial, etc.) con 1.108 kton. La Industria manufacturera aporta 499 kton. Y las Industrias de Energía (Centrales térmicas, Refinerías, Plantas de Gas) 123 kton.

3.1.2 Cambio en el Uso de la Tierra y Silvicultura

Se analiza particularmente este Sector por ser el que contribuye mayoritariamente a compensar las emisiones generadas por los otros sectores.

A los fines del análisis, se consideran tres grandes tipos de actividades que son fuentes o sumideros de dióxido de carbono: a) Los cambios de biomasa en bosques y en otros tipos de vegetación leñosa, b) La conversión de bosques y praderas y c) el abandono de tierras cultivadas.

Los sumideros terrestres no son equivalentes a la reducción de emisiones, siendo la diferencia central la permanencia. El carbono secuestrado se libera en algún momento, mientras que las emisiones no producidas tienen un efecto permanente.

En general, en el país no existe la práctica de talar y quemar bosques para destinar tierra a la producción de pasturas o de cultivos anuales (rozados). Asimismo la conversión de pasturas naturales a sistemas de producción de cultivos se hizo hace mas de 30 años. Tampoco existen las prácticas de quema de bosques in situ, ni el abandono de tierras cultivadas para dar lugar al crecimiento secundario de bosques.

Por lo tanto, la Dirección Nacional de Medio Ambiente hizo el cálculo de emisiones y absorciones de dióxido de carbono teniendo en cuenta los cambios de biomasa de los bosques.

a) Cambios en la Existencia de biomasa boscosa

Desde la puesta en vigencia de la Ley Forestal Nacional, ha comenzado un sostenido e importante desarrollo de las áreas boscosas cultivadas. Ello ha determinado que los resultados de los cálculos de emisiones y absorciones de CO2, muestren al sector CUTS en 1994 con características totalmente diferentes a los restantes, al ser el único sector del inventario nacional de gases de efecto invernadero que muestra absorciones de CO2 y que las mismas dan como resultado una absorción neta de dicho gas:

Emisión de Carbono (en kton.) 1083,2

Absorción de Carbono (en kton.) 1319,2

Absorción Neta de Carbono (en kton.) 236

Absorción Neta de CO2 (en kton.) 865,21

Esto representa una compensación de más de 20% de las emisiones nacionales de dicho gas generadas por los sectores Energía y Procesos Industriales.

b) Cambios del Uso del Suelo

El cambio en el contenido de Carbono de los suelos, ha sido originado por una notoria reducción de la superficie bajo cultivo que trae como consecuencia un aumento de las áreas destinadas a pasturas naturales (o cultivadas) y de las destinadas a forestaciones.

El proceso de cambio de uso del suelo responde a la eliminación de incentivos económicos por parte del Estado y a la baja en los precios internacionales de los productos agrícolas que obligaron a los productores agrarios a buscar otras alternativas.

Como consecuencia de ello el área bajo cultivos anuales se redujo a la mitad, siendo dichos suelos destinados a otros usos, principalmente pasturas.

Las mismas contienen mucho más carbono por unidad de superficie que los cultivos anuales, por lo cual el cálculo arroja un aumento en el período de 25 millones de toneladas de carbono en los suelos. Esto traducido en términos de absorciones anuales de CO2 se obtiene un valor cercano a las 3.808 kton.

Comparando éste resultado con las emisiones de CO2 obtenidas para el año 1994 de las actividades de los sectores Energía y Procesos Industriales (4209 kton de CO2), resulta que las absorciones provenientes del cambio en el Uso del Suelo neutralizarían más del 90 % de las referidas emisiones.

Si a ello se agregan las absorciones originadas por el cambio en las existencias de biomasa (865 kton de CO2), se concluiría que el Uruguay fue un fijador neto de algo más de 460 kton. del referido gas en el año 1994.

Si se considera que el aumento de la masa boscosa cultivada ha pasado en el período 1994 – 1998 de 42.937 a 55.339, es decir a un ritmo de 3.100,5 has., lo que proyectado al año 2001 daría una cifra cercana a las 65.000 has. y tiende a seguir aumentando, es evidente porque resulta relevante el servicio ambiental que prestan los bosques nativos y cultivados.

Conclusiones

Por lo expuesto, resulta primordial la realización de investigaciones que permitan determinar factores o fracciones propios del país y evitar referirse a factores de emisión por defecto, desarrollados por la comunidad científica internacional que se recomiendan en las directrices para realizar los Inventarios. Por ejemplo, podrían obtenerse factores locales de crecimiento anual, contenido de carbono en la materia seca de las diferentes especies y en el suelo.

Por otra parte, la Unidad de Cambio Climático ha identificado la necesidad de recibir capacitación en lo relativo a las actividades del sector forestal que se enmarcan en el Mecanismo para un Desarrollo Limpio del Protocolo de Kioto.

3.2. Turismo ecológico

Esta es una actividad que ha cobrado importancia en los últimos años, a partir de la toma de conciencia de la necesidad de reconocer al ambiente no solamente en su aspecto de suministrador de recursos para la producción, sino también de servicios en especial el esparcimiento y la toma de contacto con la naturaleza en un intento de recomponer lazos que se habían olvidado.

Este tipo de turismo tiene distintas vertientes.

Una es el "Turismo rural", destacándose el "de estancia" donde los cascos y las instalaciones tradicionales agropecuarias son acondicionadas y equipadas como lugar de descanso y distracción, contando el país con una amplia red de establecimientos de este tipo. Constituyen además una fuente de ingresos adicional.

Allí es posible, ir a pasar el día, o también hospedarse compartiendo todas las tareas propias del lugar. En contacto directo con sus propietarios y trabajadores, se puede observar y participar en las tareas rurales, guitarreadas, cabalgatas, caminatas guiadas o pesca.

El departamento de Rocha, es el lugar donde la naturaleza se presenta de manera más natural. Lagunas y bañados, ricos en flora y fauna. Cientos de kilómetros de playas vírgenes y lugares como Punta del Diablo, Cabo Polonio, Valizas, la Barra del Chuy, Parque Nacional Santa Teresa, Laguna Negra y La Laguna Castillo con su Bosque de Ombúes.

En ésta laguna donde los lugareños subsisten durante el invierno produciendo camarones de agua dulce y en el verano llevando a turistas de paseo por dicha laguna y por el bosque de Ombúes, formación monofítica de dicha especie de aproximadamente 30 has.

Otro lugar digno de mencionar dentro del turismo ecológico es San Gregorio de Polanco. Allí se interrelacionan la obra de ingeniería del hombre con la actividad económica de supervivencia y el turismo Es una pequeña población de pescadores, ubicada en la costa Norte de la represa Rincón del Bonete. Sus habitantes viven de la actividad pesquera realizada en forma artesanal en aguas de la represa y de los servicios que prestan a los pescadores deportivos y a los turistas.

También han cobrado vigencia otros lugares que se encuentran vinculados con las formaciones boscosas mencionadas en párrafos anteriores. Ellos son:

• Cerro Pan de Azúcar

• Cerro Arequita

• Salto del Penitente

• Gruta de los Cuervos

• Quebrada de los Cuervos

• Pozos Azules

• Villa Serrana

• Valle del Lunarejo

• Valle Edén

• Balneario Iporá

• Costa del Río Yí

• Reserva de Fauna de Piriápolis.

3.3 Estadística

El Instituto Nacional de Estadística (INE) es un organismo público que tiene por objetivo la elaboración, supervisión y coordinación de las estadísticas nacionales.

El primer antecedente fue la Mesa Estadística anexa al Ministerio de Hacienda, creada por Decreto del 25 de noviembre de 1852. Esta Mesa se transforma en la Dirección de Estadística General todavía en el siglo XIX, mientras que la Ley N° 11.923 del 27 de marzo de 1953 le asigna un nuevo nombre: Dirección General de Estadística y Censos.

El Instituto toma su nombre actual en virtud del Art. 70 de la Ley N° 16.320 a partir del 1° de enero de 1993. Históricamente vinculado al Ministerio de Economía (antes Ministerio de Hacienda), en las dos últimas décadas el INE pasó a depender de la Presidencia de la República a través de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.

La Ley Estadística N° 16.616 promulgada en octubre de 1994, establece que el Sistema Estadístico Nacional (SEN) está formado por el INE como órgano rector, las Unidades Coordinadoras Sectoriales (una por cada área temática relevante) y las restantes oficinas productoras de estadística.

Son cometidos principales del Instituto Nacional de Estadística:

• Elaborar información estadística demográfica, económica y social.

• Difundir la información propia o elaborada por otros organismos.

• Coordinar y supervisar el Sistema Estadístico Nacional.

• Fomentar la investigación estadística, desarrollando los conocimientos en el campo de la estadística y de la economía, por intermedio de la enseñanza.

• Brindar cursos de Capacitación al personal de las Oficinas de Estadística del Sistema.

La incorporación en los últimos años de tecnología informática permitió al INE simplificar los procesos que antes insumían mayor cantidad de tiempo.

El Instituto Nacional de Estadística se organiza de la siguiente manera:

• División Estadísticas-Económicas

• División Estadísticas Socio-Demográficas

• División Servicios Técnicos

• Unidad Censo Población, Viviendas y Hogares

• Departamento de Administración

Operativamente elabora y distribuye la siguiente información, además de Indices hitóricos, los siguientes:

• Ipc - Indice de Precios al Consumo

• Icc - Indice del Costo de la Construcción

• Ippi- Indice de Productos Importados

• Ims - Indice Medio de Salarios

• Ech - Indicadores de Empleo y Desempleo

• Eit - Encuesta Industrial Trimestral

• Eia - Encuesta Industrial Anual

• Ivfc- Indice de volumen físico de la construcción

• Tocaf-Montos límites de las adquisiciones estatales

• Iai - Indice de la actividad inmobiliaria

• MERCOSUR

La Ley en el Capítulo IV, Artículo 13 y 14, dice que toda persona física o jurídica, que se encuentre en forma permanente o transitoria en el territorio nacional y las personas públicas no estatales y los organismos públicos son fuente de información y que están obligados a aportar los datos que les sean requeridos con fines estadísticos, por los integrantes del Sistema Estadístico Nacional y dentro del plazo que se les fije.

De lo expuesto surge que existe el marco legal regulatorio que permita recopilar la información acerca de los Productos Forestales No Madereros, faltando la disposición del área pertinente para que se lleve a cabo.

3.4. Consideraciones y recomendaciones

Como ya se expresara para la República Argentina, es necesario clarificar y detallar el concepto de PFNM y de los servicios de los bosques específicos en este caso del Uruguay, así como efectuar la indispensable concientización y difusión a todos los niveles sobre su importancia y la necesidad de contar con estadísticas específicas.

• Existen incumbencias íntimamente ligadas con los PFNM y servicios en distintas dependencias de la Administración Central.

• Si bien no existe una tradición en el aprovechamiento y consumo de PFNM, presentan un gran potencial.

• Hay algunos PFNM nativos (particularmente las hierbas medicinales) procesados en base a extracción que tienen posibilidades de ser cultivados, así como otros exóticos que actualmente son importados. En ambos casos representan una interesante alternativa productiva y de ingresos, además de sustituir materias primas de origen extranjero.

• Debe mencionarse que no se conoce la realización de manejo de especies nativas sino únicamente que se efectúa su recolección.

• El país posee una gran extensión con bosques implantados de pinos y eucaliptos susceptible de aprovechamiento no maderero pero en la actualidad son escasas las actividades que se realizan en este sentido.

• No se cuenta con un área específica vinculada con los PFNM, por ejemplo en la Dirección Forestal con peronal capacitado en la temática y con cierta infraestructura, facilitaría

• El comercio y el aprovechamiento informal impiden la colecta adecuada de datos en algunos casos, mientras que otros el factor es la competencia comercial. Pero existe buena predisposición por parte del sector privado a colaborar en los remas de su competencia.

Recomendaciones

• Definir e identificar con precisión los PFNM del Uruguay. Puede realizarse partir de su uso o materia prima, identificando las especies origen del producto. Es fundamental la difusión de estos puntos, así como de su importancia.

• Crear un área de Productos Forestales No Madereros por ejemplo en la Dirección Forestal, dotándola de personal capacitado en la temática y de infraestructura que realizaría tareas de coordinación y colecta de información con otras dependencias de la Administración, Universidades y ONGs. De esta forma se detectarían los vacíos en la información, podría sugerir encuestas específicas, e identificaría aquellos productos (o especies) susceptibles de promoción. Lo expuesto permitiría llevar estadísticas integrales y armonizadas, así como su difusión.

• Fortalecer las estructuras regionales para que puedan aportar la información de base que permita focalizar los PFNM con consumo actual o potencial en cada una de ellas.

• Crear una base de datos detallada de los PFNM del país que pudiera interrelacionarse con otras similares, así como una por rubro con los distintos sectores involucrados en la temática, especialmente aquellos que serían los potenciales destinatarios de las encuestas.

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