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Segunda parte
(Second part - Deuxième partie)

RESUMENES POR PAIS

(COUNTRY BRIEFS - RESUMES PAR PAYS) (continuar)

COSTA RICA (continuar)

2. Tendencias actuales

2.1 Vegetación leñosa natural

2.1.1 Deforestación

La reducción del área boscosa empezó lentamente. En el siglo 19 la población creció poco a poco, y la deforestación se volvió importante, debido a los métodos importados de la agricultura europea, primero alrededor de los asentamientos, más tarde en una escala más grande. A fines del siglo 19, el Valle Central no tenía más terrenos forestados aptos para la agricultura y una onda espectacular de colonización hacia las montañas empezó junto con la disminución de la tierra pública. Según (6), entre 1963 y 1973, el área de pastizales aumentó en 570 000 ha. y el área en charrales en 41 000 ha. Cada año se ha perdido una cantidad de madera “potencialmente aprovechable” de 6.7 millones de m3 (6).

La tasa de deforestación se estima ahora alrededor de unas 60 000 ha. por año (entre 1950 y 1963: 45 000/año), en su mayoría para la ganadería extensiva. La tasa puede aumentar algo hasta 1985, pero disminuirá después cuando toda la tierra apta para la agricultura sea desmontada.

Deforestación promedia anual
(en miles de ha.)

Períodos:

1976–80  1981–85
(proyecciones)
NHCf1uvNHCf1ucNHCf1NHCf2NHCf NHCf1uvNHCf1ucNHCf1NHCf2NHCf
1530451560 1632481765

Del volúmen total tumbado en las áreas deforestadas en 1979, se puede estimar que se aprovecharon solamente para leña: 1 950 000 m3, y para trozas: 900 000 m3, o sea un total de 2 850 000 m3, es decir un 30% solamente del volumen total tumbado.

Es muy probable que en un próximo futuro las industrias madereras se verán obligadas a aprovechar una parte mayor de los bosques tumbados para la agricultura y la ganadería, debido a las dificultades de abastecimiento a partir de otras fuentes y al aumento de la demanda.

Areas de vegetación leñosa natural estimadas para fines de 1985
(en miles de ha.)

NHCf1uvNHCf1ucNHCf1(u)NHCf2NHCfNHCaNHc/NHOnH
1007608604531313150160150

La deforestación se debe, sobre todo, a la ganadería extensiva que necesita grandes superficies de pastizales. Sistemáticamente se desmonta los bosques en suelos considerados aptos para pastizales. Dentro de los pastizales se quedan relictos de los bosques originales, los cuales son aprovechados para leña, postes etc.

Volúmenes en pié estimados para fines de 1985
(en millones de m3)

NHCf1uvNHCf1ucNHCf1(u)NHCf2NHCf
VOBVACVOBVOBVOBVOB
182.59511323136

2.1.2 Degradación

Existen en Costa Rica alrededor de 100 000 ha. de sabanas arbóreas y arbustivas y 100 000 ha. de charrales, de las cuales la mayoría es el resultado de las actividades humanas y del fuego, este último muchas veces causado también por el hombre (2). Es muy probable que en muchas partes, donde no ocurrió erosión severa, creciera un tipo de bosque seco, si existiera una protección adecuada.

2.1.3 Tendencias en el aprovechamiento

El número de especies aprovechadas probablemente se establecerá en 120 a 130, comparado con 45 en 1964 y 120 en 1974. El número de los aserraderos pequeños (“aserraderos de finca”), los cuales trabajan solamente una parte del año seguirá reduciéndose.

Es probable que se haga un aprovechamiento más intensivo de las áreas destinadas a desmontarse. La producción total ha sido proyectada a unos 2 870 000 m3 de trozas para aserrío en 1985 en el documento (11), una estimación bastante elevada.

2.2 Plantaciones

Areas de plantaciones industriales estimadas para fines de 1985
(en miles de ha.)

CategoríaEspeciesaños81–8576–8071–7566–7056–6546–55antes 45Tot.
Clases de edad0–56–1011–1516–2021–3031–40>40
PHL 1Subtotal1.20.20.1    1.5
PHH 1Subtotal0.20.40.30.150.150.200.11.5
PH.1Total plantaciones Latifoliadas1.40.60.40.200.200.200.13.0
PS.1Total plantaciones coníferas0.50.35  0.250.200.100.050.11.6
P..1Total plantaciones ind.1.90.95  0.650.400.300.250.24.6

No se prevé un cambio significativo en las especies utilizadas y su importancia relativa.

Bibliografía

(1) US. Dept. of Agriculture 1943 “The Forests of Costa Rica” - by the Forest Service, in cooperation with the Office of the Coordinator of Inter-American Affairs - Washington

(2) FAO 1969 “Estudio y Desarrollo de Zonas Forestales Selectas - Informe de Terminación”-FAO:SF:73/COS 3 - Roma

(3) Sawyer, J.O. and Lindsay, A.A. 1971 “Vegetation on the Life Zones in Costa Rica” - Indiana Academy of Science - Indianapolis

(4) CATIE 1974 “Inventario forestal y análisis estructural - Finca La Milena de la Compañía”-Turrialba

(5) FAO 1974 “Desarrollo integral de los recursos forestales de Costa Rica: situación de las industrias forestales” - PNUD/FAO/COS/72/013 - Documento de trabajo No. 3 - basado en la labor de M. Schaartan - San José

(6) Tosi J.A. Jr. 1974 “Los recursos forestales de Costa Rica” - Centro Científico Tropical, Turrialba

(7) FAO 1975 “Situación de la economía forestal en el país” - PNUD/FAO/COS/72/013 - Documento de trabajo No.2 - basado en la labor de J. Petriceks - San José

(8) Swedforest Consulting AB 1977 “Talamanca Forest Proyect, Costa Rica - Introduction, Development Forest Resource, Market Forest Industries Products, Utilization Plan” - Vol.II - Final Report - Estocolmo

(9) Swedforest Consulting AB 1977 “Talamanca Forest Proyect, Costa Rica, Appendices Forest Inventory” - Vol. IIA - Final Report - Estocolmo

(10) FAO 1978 “Desarrollo integral de los recursos forestales - Costa Rica - Los bosques del país y su distribución por provincias” - PNUD/FAO/COS/73/013 - Documento de trabajo basado en la labor de Robert B. Sylvander - San José

(11) Oficina de Planificación Sectorial Agropecuaria 1978 “Comportamiento del sector forestal durante el período 1950 – 1977” - basado en la labor de Samuel Pérez y Fernando Protti - San José

(12) Oficina de Planificación Nacional 1979 “Plan nacional de desarrollo forestal 1979–1982”-San José.

CUBA

Cuba, la isla más grande del Caribe (114 500 km2), se encuentra entre los paralelos 20° y 23° de latitud norte y presenta una configuración alargada, de manera que la distancia del este al oeste alcanza los 1 200 km, mientras que la distancia promedia del norte al sur no sobrepasa los 100 km (1).

Aproximadamente las dos terceras partes de Cuba consisten en planicies o terrenos suavemente ondulados, con elevaciones bajas. El resto del territorio está formado por tres grupos de macizos montañosos, donde se encuentra la mayoría de los bosques naturales restantes (7):

La pluviosidad promedio, se sitúa alrededor de 1 300 mm por año. Variaciones locales se deben a la topografía (exposiciones al norte en la Sierra Maestra, por ejemplo, reciben más de 3 m. de lluvia), puesto que los vientos alisios soplan del norte o del este.

Hay una época relativamente seca de sólo dos meses. Unicamente el extremo sureste se puede considerar (1) como una región seca.

Tiene una población de alrededor de 9.5 millones de habitantes en 1975, con una tasa anual de incremento del 2.1% en los últimos años.

1. Situación actual

1.1 Vegetación leñosa natural

1.1.1 Descripción de los tipos de vegetación

Formaciones arboladas latifoliadas densas (NHC)

• En la Sierra Maestra, en la Provincia de Oriente, hay que distinguir los bosques en terrenos calizos, llamados “dientes de perro”, los cuales se encuentran en el oeste de la provincia, y que tienen especies como caoba (Swietenia mahogany), cedro (Cedrela mexicana), yaba (Andira inermis), baría (Cordia gerascanthoides), sabicú (Lysiloma latisiliqua) con una influencia antropógena bastante importante debida a la explotación para leña y carbón y deforestación para la agricultura; por otra parte, existen los bosques en terrenos eruptivos entre los cuales se puede distinguir varios tipos, según elevación y exposición:

• hasta 150 metros de altitud: boaques caducifolios o xerofíticos, con caoba, cedro, guasima (Guazuma ulmifolia), almacigo (Bursera simaruba), sabicú (Guaiacum officinale). A lo largo de los ríos existen bosques de galería. Los “montes frescos” son relativamente densos y altos, mientras que el término “montes bravos” se refiere a un tipo de bosque bajo, confinado a elevaciones mayores. En este bosque ya hubo aprovechamiento forestal;

• de 150 a 900 metros de altitud: en los valles existen montes frescos con yaba, dayamé (Calycophyllum candidissimum), cedro, baría, sabicú, en las cuestas del monte bravo;

• de 50 a 900 metros, en las exposiciones norte, existe una zona muy húmeda (más de 3 000 mm por año) que ha sido profundamente influída por la agricultura migratoria, con matorrales secundarios y algunas manchas del bosque original.

En la otra zona oriental, al norte y al noreste de la línea Santiago de Cuba-Guantánamo, siempre dentro de la provincia de Oriente, donde existen todavía algunos bosques, gracias al carácter montañoso, también hay que distinguir terrenos calizos y eruptivos.

En el sur, en terrenos calizos, entre Guantánamo y Punto de Maise, existe un bosque xerofítico (1 000 mm por año de pluviometría con una época lluviosa muy corta), que es muy pobre y que únicamente rinde leña.

• En el oeste de la provincia de Pinar del Río, entre Cabo Francés y Punto de Guanahacabibes, un bosque con cedro y baría cubre una zona caliza extensa con “dientes de perro”. En el norte y noroeste de Pinar del Río, un bosque latifoliado muy degradado se halla en terrenos accidentados (“mogotes”) que surgen bruscamente en los llanos.

• En la Sierra del Escambray (al sur de la Provincia de las Villas) (hasta 1 000 m.s. n.m.) se quedaron algunas “islas”, generalmente de bosque secundario. El caoba existe, pero con mala forma, y los árboles sirven solamente para dar sombra al ganado.

• Los manglares se encuentran en las lagunas cerca del mar, con las cuatro especies que existen en el Caribe: mangle rojo (Rhizophora mangle), mangle prieto (Avicennia germinan patabán (Laguncularia racemosa) y yana (Conocarpus erecta)

Formaciones arboladas de coníferas (NS)

En la Sierra Maestra, en terrenos calizos de 900 a 1 500 metros en las exposiciones al norte y al sur, se encuentran bosques de Pinus occidentalis en manchas dentro del “monte fresco” con Protium cubense y yaguma (Cecropia pelpata). Encima de los 1 500 m.s.n.m. solamente existen matorrales bajos, adaptados a la humedad.

Los bosques en terrenos eruptivos en la Sierra de Nipe y la Sierra de Cristal consisten en macizos (degradados) de Pinus cubensis. También existen en esta zona bosques de latifoliadas, con influencia por parte de la agricultura migratoria, y constituído de “montes frescos” y montes bravos”. Se encuentran especies tales como yaba, pícaro, ocuje (Calophyllum brasiliense), majagua (Hibiscus tileaceus), sabicú y najesí (Carapa guianensis).

En la provincia de Pinar del Río en suelos lateríticos de los terrenos eruptivos existen bosques de Pinus caribaea, distribuídos por manchas. En suelos esquistos arenosos de esos mismos terrenos existen bosques muy degradados de Pinus tropicalis en las partes más pobres y erosionadas, y de P. caribaea en suelos un poco más profundos. También en los valles, se encuentran algunas manchas de latifoliados con Quercus virginiana.

Vegetación arbustiva (nH)

El marabú (Cailliea glomerata) es una leguminosa arbustiva, posiblemente introducida de Africa, la cual invade los terrenos relativamente fértiles pero abandonados. Además, existen formaciones especiales de tipo arbustivo, pero con una distribución limitada por ejemplo: el “uveral” y la “manigua costera” a lo largo de las costas: el “encinar”, que oc los mismos suelos que los pinares; el “cuabal” y el “charrascal” (11).

1.1.2 Situación actual de la vegetación leñosa

Areas actuales

Areas de vegetación leñosa natural estimadas a fines de 1980
(en miles de ha.)

LatifoliadasNHCf1uvNHCf1ucNHCf1mNHCf1NHCf2NHCfNHCaNHc/NHOnH
 795 7954601 255700 305
ConíferasNSf1uvNSf1ucNSf1mNSf1NSf2NSfNSa  
  200200 200   
TotalesN.f1uvN.f1ucN.f1mN.f1N.f2N.fN.a  
-7952009954601 455700  

Las cifras de áreas son muy aproximadas, por falta de información reciente. Están basadas en (2), (6) y (11).

La categoría de bosques NHCf2 (improductivos) consiste en 400 000 ha. de manglares, y 60 000 ha. de “bosques semicaducifolios sobre suelos ácidos” (11). La misma fuente menciona las áreas siguientes para los bosques que hemos considerado de pertenecer a NHCf1 (productivos): “semicaducifolia sobre suelos de mal drenaje” (74 000 ha.), “semicaducifolia sobr suelos calizos” (582 000 ha.), “xerófilo típico” (50 000 ha.), “pluviselva” (9 000 ha.) y “pluviselva de montaña” (95 000 ha.), totalizando 810 000 ha. en 1975.

En (2) se estima que existen unas 700 000 ha. de maniguas y de montes degradados (NHCa) y, además, 500 000 ha. de malezas y de marabú (nH), incluyendo posiblemente el "encinar “uveral”, “manigua costera”, “charrascal” y “xerófilo de mogores”, mencionados en (11). El “cuabal”, consistiendo de palmas, está incluído en NHCf2.

Para los bosques de coníferas, (5) menciona para P. cubensis un área de 21 000 ha., para P. tropicalis 34 000 ha. y para P. caribaea 5 000 ha., en total 60 000 ha. El área ocupada por P. occidentalis (Sierra Maestra) es limitada, pero no se había inventariado (196 Tentativamente se estimó esta área en unas 10 000 ha. de manera que NSf1 llegó a 70 000 ha. Sin embargo, se hicieron plantaciones importantes de enriquecimiento en los bosques degradados y hoy en día se puede estimar el área de NSf1 en 200 000 ha. La mayoría de estos bosques sor jóvenes y tienen por eso un volúmen por ha. bajo.

Propiedad

Antes de 1959 las tierras estaban distribuidas como sigue (1):

Areas de las explotaciones% del total
de 0 a 50 hectáreas20
de 50 a 100 hectáreas  9
de 100 a 500 hectáreas24
de 500 a 1 000 hectáreas11
de 1 000 hasta 5 000 hectáreas16
de 5 000 en adelante20

Después de la Reforma Agraria de 1959, el área máxima que una persona puede tener se redujo entre 400 y 1340 ha. Las tierras con bosques mayores de esta área fueron expropiadas y pasaron al Estado.

(1) estima que de los bosques densos, aproximadamente 750 000 ha. pertenecen al Estado y el resto (más o menos 505 000 ha.) a particulares.

Estatuto legal y manejo

Existen 167 000 ha de parques nacionales en terrenos forestales, 109 000 de zonas para el habitat de la fauna silvestre y las especies que estén en vías de extinción y 24 000 ha reservadas para efectuar investigaciones científicas (12). No se conoce precisamente la proporción de esas áreas bajo bosque ni tampoco su distribución entre bosques de pino y bosques de latifoliados.

Casi toda el área de los bosques de pino (con excepción de los bosques de la Sierra Maestra) están bajo planes de manejo intensivo, en total unas 200 000 ha. Se han hecho aproximadamente 130 000 ha de plantaciones de enriquecimiento en bosques, anteriormente muy degradados, con control de incendios.

Los bosques de latifoliadas se dividen en: bosques productores, bosques productor-protectores y bosques protectores (11). No se puede hablar de un manejo intensivo de los bosques de latifoliadas a diferencia de los bosques de pinos.

Aprovechamiento forestal

Aunque la mayoría de los bosques cubanos ya han sido explotados severamente, el desarrollo económico exige continuar extrayendo del monte productos forestales (11). Sin embargo, en este momento no son capaces de suplir productos de grandes dimensiones (para aserrío) con un rendimiento sostenido. El aprovechamiento forestal se hace por medio de grandes sociedades del Estado, responsables sobre unidades de 100 000 hasta 200 000 ha, y donde se hacen inventarios para el manejo.

El cuadro siguiente, tomado de (11) indica el porcentaje promedio del volúmen de productos extraídos anualmente en Cuba, en el período 1959–1974:

Producto% del volúmen total extraído
Leña y carbón  89
Madera rolliza (uso directo)    6
Madera en rollo (para aserrío)    3
Otros (postes, traviesas, etc)    2
Total100

(10) menciona que, durante los primeros años de la Revolución, el aprovechamiento forestal alcanzó una producción de casi 150 000 metros cúbicos anuales, cubriendo el 50 por ciento de las necesidades del país. Sin embargo, no fue posible mantener esa producción y en 1966 se estableció en 45 000 metros cúbicos, satisfaciendo así el 25 % de las necesidades planificadas.

Del Anuario de Productos Forestales de la FAO se desprende que Cuba produce ahora 35 000 m3 de madera en rollo para aserrío y chapas por año (período 71–76), y que anualmente unos 1.5 millones de m3 son aprovechados para combustible. (1) menciona para 1956–1957, dos millones de m3 de leña y 21 000 toneladas.

La producción de trozas de coníferas es probablemente muy baja; según el Anuario de Productos Forestales de la FAO sería de 1 000 m3 solamente.

Las especies aprovechadas se dividen en las siguientes categorías (11):

CategoríaEjemplos
Coníferastodos los Pinus de Cuba
“Preciosas”Swietenia mahogany (caoba)
Usos especialesGuaiacum officinale (guyacán)
DurasBucida buceras (pícaro negro)
SemidurasClusia rosea (copey)
Blandas 1a.Brosimum alicastrum (guaimaro)
Blandas 2a.Swietenia macrophylla (caoba de Honduras)

El aprovechamiento por ha.es bajo a pesar del gran número de especies aprovechadas debido a que los bosques han sido ya sobreexplotados. Se estima el rendimiento por ha. en unos 5 m3 en los bosques de latifoliadas, de manera que aproximadamente unas 7 000 ha. están siendo aprovechadas anualmente.

En los manglares se usa la corteza de los árboles para la extracción de tanino.

1.1.3 Situación actual de los volumenes en pie

Volúmenes en pie estimados a fines de 1980
(totales en millones de m3)

LatifoliadasNHCf1uvNHCf1ucNHCf1mNHCf2
VOBVACVOBAACVOBVOB
m3/hatotalm3/hatotalm3/hatotalm3/hatotaltotalm3/hatotal
    6048   4018
ConiferasNSf1uvNSf1ucNSf1mNSf2
VOBVACVOBAACVOBVOB
m3/hatotalm3/hatotalm3/hatotalm3/hatotaltotalm3/hatotal
      1.250.254  
Latifoliadas y ConiferasN.f1uvN.f1ucN.f1mN.f2
VOBVACVOBAACVOBVOB
m3/hatotalm3/hatotalm3/hatotalm3/hatotaltotalm3/hatotal
    -48-0.254-18

Para los bosques de latifoliadas se tomaron los mismos volúmenes por ha. que para Jamaica por falta de datos para Cuba.

En (8) se dan los volúmenes por ha. (d.a.p.≥ 6 cm, probablemente con corteza) para los bosques de pino. El cuadro siguiente da un resumen de estos volúmenes.

Especies principalesVol./ha (m3/ha)
Pinus cubensis31.3
P. tropicalis18.5
P. caribaea29.9
Promedio ponderado24.0

(8) da las siguientes estimaciones de incremento para los diferentes pinos: P. cubensis: 1.59 m3/ha/año; P. tropicalis: 1.13 m3/ha/año; P. caribaea: 0.83 m3/ha/año. O sea, un promedio ponderado de 1.25 m3/ha/año.

Se desconoce el incremento en el bosque de latifoliadas aprovechado.

1.2 Plantaciones

1.2.1 Introducción

Las plantaciones hechas antes de 1959 tienen una superficie muy limitada. Existían algunas 200 hectáreas con P. caribaea y con especies latifoliadas (Swietenia mahogany, Calophyllum brasiliense) pero no tienen importancia económica.

En 1959, el nuevo Gobierno creó el Departamento de Repoblación Forestal del Ejército Rebelde, con la misión principal de crear viveros y organizar un vasto plan de forestación. En 1967 fue creado el INDAF (Instituto Nacional de Desarrollo y Aprovechamiento Forestales), el cual fortaleció los programas de forestación (11). El grueso de las plantaciones de coníferas se ha realizado a partir de 1965.

1.2.2 Areas de plantaciones establecidas a fines de 1980

El cuadro siguiente indica de manera muy tentativa, las áreas de plantaciones establecidas a fines de 1980.

Areas de plantaciones industriales establecidas a fines de 1980
(en miles de ha.)

CategoríaEspeciesAños76–8071–7566–7061–6551–6041–50antes 41Total
clases de edad0–56–1011–1516–2021–3031–40> 40
PHL 1(véase abajo)  2.5  2.5  2.5  2.5ε  10.0
PHH 1Eucalyptus spp.12.512.512.512.5ε  50.0
Casuarina equisetifolia  5.0  5.0  5.0  5.0ε  20.0
Subtotal PHH17.517.517.517.5ε  70.0
PH.1 Total de plantaciones de latifoliadas20.020.020.020.0ε  80.0
PS.1Pinus caribaea35.025.015.0  2.0ε  77.0
Pinus cubensis
Pinus tropicalis
P..1Total plantaciones ind.55.045.035.022.0ε  157.0

Una lista de las principales especies latifoliadas utilizadas en Cuba se encuentra en (4):PHL: cedro (Cedrela mexicana), Colubrina ferruginosa, baría (Cordia gerascanthus), mahagua (Ibiscus elatus), caoba africana (Khaya sp.), sabicú (Lysiloma latisiligna), paraiso (Melia azadirachta), caoba antillana (Swietenia mahogany), caoba de Honduras (S. macrophylla), teca (Tectona grandis); PHH: casuarina (Casuarina equisetifolia), eucalipto (Eucalyptus saligna y E. citriodora).

La principal fuente tomada en cuenta fue el documento (6) de 1968, donde aparece el número de plantas plantadas y las que existían en 1966, por especies y región. Estas cifras fueron convertidas en áreas, suponiendo que:

Sin embargo, estas tasas anuales se refieren tanto a plantaciones de enriquecimiento como a plantaciones en campo abierto.

La finalidad de las plantaciones parece doble. Por un lado, están consideradas como productores de materia prima, por otro, se declara que el motivo de su existencia es protectivo. Debido a las elevadas importaciones de madera a que el país se ve obligado, se opina que se pueden considerar practicamente todas las plantaciones como industriales.

Otras plantaciones

Según (11), se han establecido, hasta 1975, un total de 8 600 km de cortinas rompevientos (o sea 18 000 ha. aproximadamente si se toma 2 ha. para 1 km). Están compuestas principalmente por Eucalyptus saligna y Casuarina equisetifolia. Otras especies usadas para este fin son: Tectona grandis, Swietenia mahogany, S. macrophylla, Hibiscus elatus, Tamarinda índica, piñón florido (Gliricidia sepium), ocuje (Calophyllum antillanum (7).

1.2.3 Características de las plantaciones

EspeciesRotación
(años)
I.A.P.
m3/ha/año
Producción final
(m3/ha)
Fuente
Tectona grandis30–40  5 (1)
 1   13.3  
  (a 14 años) 2
Eucalyptus saligna2015 (1)
Pinus caribaea2510 (1)
Pinus sp.
(zona norte)
153–8(s.c.)375(6)

1 Rotación desconocida; se trata de parcelas experimentales.
2 “Compilation of Indicative Growth and Yield Data of Fast-growing Exotic Tree Species Planted in Tropical and Subtropical Regions” por A. Sommer y T. Dow.
3 Dependiendo de si los terrenos están mecanizados o no.

2. Tendencias actuales

2.1 Vegetación leñosa natural

2.1.1 Deforestación

Cuando los Españoles llegaron a Cuba (11), casi la totalidad estaba cubierto por bosques densos. La explotación de los bosques empezó con una corta selectiva en búsqueda de caoba (Swietenia mahogany) fuertemente apreciado para la construcción de naves y muebles lujosos.

Sin embargo, la destrucción de esos bosques comenzó el siglo pasado, y fue causada en una primera instancia por el desarrollo del cultivo de la caña de azúcar. Se estima que a finales de siglo, Cuba tenía todavía 50% de bosques. En 1903 los Estados Unidos, otorgaron a Cuba un privilegio de explotación del azúcar a los mercados americanos, lo que causó una expansión más intensa, y que se aceleró aún más con el aumento del valor del azúcar, después de la primera guerra mundial. Además, comenzó la ganadería extensiva a ejercer presión en los bosques, y con una población siempre en aumento se creó la situación conocida al momento de la Revolución. El área boscosa disminuyó así de 9 938 000 ha. en 1812 a 5 958 000 ha. en 1900, llegando a sólo 1 287 000 ha. en 1946 (9).

La deforestación no desapareció totalmente en los primeros años de la Revolución, como se puede apreciar a partir del ejemplo siguiente citado en (6). Según esa información, existieron en la zona del norte de la Provincia de Oriente unas 27 000 ha cubiertas de Pinus cubensis, inventariadas en 1961–62. En un inventario (no completamente comparable) en 1969 de la misma área, se encontraron solamente 9 200 ha. Las razones principales que explican est reducción son la sobre-explotación y las operaciones mineras.

Las tasas estimadas de deforestación se encuentran en los cuadros a continuación:

Deforestación promedia anual
(en miles de ha.)

Períodos:

1976–80y 1981–85
(proyecciones)
NHCf1uvNHCf1ucNHCf1NHCf2NHCf
 1112
NSf1uvNSf1ucNSf1NSf2NSf
     
N.f1uvN.f1ucN.f1N.f2N.f
 1112

Como se puede apreciar la deforestación actual es mínima en los bosques llamados densos, y ello se debe principalmente a la ejecución de obras de infraestructura (carreteras, urbanización etc.)

Existe una “deforestación” mucho más importante en las categorías de bosque degradado (NHCa, NSa) y en nH, debido a la realización de plantaciones forestales. Tomando en cuenta las tasas de plantación se ha estimado esta deforestación en unas 13 000 ha. para el período 76–80 y 14 000 ha. para los cinco años siguientes. No se sabe con exactitud si todavía los “precaristas” de las zonas más pobres continúan la práctica de la agricultura migratoria.

El cuadro siguiente indica las estimaciones de las áreas de vegetación leñosa, a fines de 1985.

Areas de vegetación leñosa natural estimadas para fines de 1985
(en miles de ha.)

LatifoliadasNHCf1uvNHCf1ucNHCf1mNHCf1NHCf2NHCfNHCaNHc/NHOnH
 790 7904551245665 270
ConíferasNSf1uvNSf1ucNSf1mNSCf1NSf2NSfNSa  
  200200 200   
TotalN.f1uvN.f1ucN.f1mN.f1N.f2N.fN.a  
 7902009904551445665  

Volúmenes en pie estimados para fines de 1985
(en millones de m3)

NHCf1uvNHCf1ucNHCf1mNHCf1NHCf2NHCf
VOBVACVOBVOBVOBVOBVOB
  47 471865
NSf1uvNSf1ucNSf1mNSf1NSf2NSf
VOBVACVOBVOBVOBVOBVOB
   44 4
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2.1.2 Degradación

Aunque en los terrenos de más difícil acceso en la Sierra Maestra todavía parecen existir bosques más o menos intactos, se puede decir que casi todos los bosques de Cuba están en mayor o menor grado influídos por el hombre; esta influencia varía de una corta muy selectiva (cedro y caoba principalmente) hasta la degradación completa, en algunos casos irreversible.

(1) indica que el consumo per cápita de leña y carbón es muy alta: alrededor de 2 m3 (en 1959). Además, existe un rango completo de otros productos forestales solicitados por la población rural como por ejemplo: madera para construcción de hangares para secar el tabaco y postes para cercas.

Además existía (no se sabe si esta práctica sigue existiendo) el pastoreo en los bosques de pino, implicando una quema anual para renovar los pastos (1).

Cuando el bosque alto en los suelos calizos está destruído, se desarrolla un bosque secundario con especies de rápido crecimiento, como almácigo (Bursera simaruba), yaguma (Cecropia peltata) y cabo de hacha (Trichilia hirta).

2.1.3 Tendencias en el aprovechamiento

No se esperan cambios fundamentales en el aprovechamiento forestal en los próximos años, con la excepción de una propoción más elevada de madera proveniente de las plantaciones.

2.2 Plantaciones

El cuadro que aparece a continuación indica tentativamente las tasas anuales estimadas de reforestación en el país (en miles de ha.) para el período (1981–85):

CategoríaArea
(en miles ha.)
PHL1  0,5
PHH13  
PS.18  
Total11.5

Areas de plantaciones industriales estimadas para fines de 1985
(en miles de ha.)

CategoríaEspeciesaños81–8576–8071–7566–7056–6546–55antes 41Total
clases de edad0–56–1011–1516–2021–3031–40>40
PHL1Subtotal PHL 1  2.5  2.5  2.5  2.5  2.5  12.5
PHH 1Eucalyptus spp.y Casuarina equisetifolia1517.517.517.517.5ε 85
PH.1Total plantaciones de latifoliadas17.520202020ε 97.5
PS.1Pinus spp.403525152ε 117
P..1Total plantaciones57.555453522ε 214.5

Debido a dificultades de sobrevivencia, parece indicado considerar una disminución en la plantación de Eucalyptus spp..

Bibliografía

(1) Huguet, L. 1961 “Forêts et Economie Forestière de Cuba”- Extrait des Annales de l'Ecole Nationale des Eaux et Forêts et de la Station de Recherches et Expériences. Nancy (Francia)

(2) López Camiño, J. 1964 “Informe sobre el Progreso Forestal Nacional. Período 1960–1964” - Presentado a la Comisión Forestal Latinoamericana - La Habana

(3) Huguet, L. 1966 “Nuevas observaciones y recomendaciones acerca de la política forestal del gobierno revolucionario y de su ejecución” - La Habana

(4) INDAF 1967 “Informe de Cuba al Simposio mundial sobre bosques artificiales y su importancia industrial”-celebrado en Canberra, Australia - La Habana

(5) FAO 1968 “Some aspects of Silviculture and Tree Improvement in Cuba” - FO/RU:CF/CUB/1 - basado en la labor de A.F.A. Lamb - Roma

(6) FAO/CEPAL 1968 “Informe de la misión de papel y celulosa a Cuba por FAO y Comisión económica para américa latina - Naciones Unidas” - Santiago

(7) Morellet, J. 1968/69 “Problèmes forestiers à Cuba”- Bois er Forêts des Tropiques- Nos. 122, 123 et 124 - Nogent-sur-Marne (Francia)

(8) FAO 1969 “The Fibrous Resources of Cuba” - (mimeógrafo) - Roma

(9) INDAF 1969 “Report of the Delegation of the Revolutionary Government of Cuba to the Second Session of the FAO Committee on Forestry Development in the Tropics”- Roma

(10) FAO 1974 “Centro de investigaciones y capacitación forestal - Cuba: resultados y recomendaciones del proyecto” - FO:DP/CUB/69/503 - Informe terminal - Roma

(11) INDAF 1976 “Panorama de la Silvicultura en Cuba” - Editorial ORBE- La Habana

(12) INDAF 1977 “Baracoa: Cuba - Revista Forestal”-año 6 No. 3–4 y año 7, No. 1–2-La Habana


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