5 EL TABACO EN MALAWI

5.1 INTRODUCCIÓN

Malawi tiene una economía predominantemente agrícola. De su población total de casi 10,5 millones de personas, más del 75 por ciento vive en zonas rurales. Hay unos 3,5 millones de trabajadores rurales, que constituyen el 78 por ciento del total de la fuerza de trabajo. Así pues, la agricultura destaca como el sector principal de la economía nacional en los últimos decenios. En 1999 el PIB fue de 80 000 millones de kwachas (MK) (1830 millones $EE.UU.), si bien el total de la producción agrícola ascendió a 30 000 millones de MK, o sea el 38 por ciento del PIB. El tabaco, el principal cultivo comercial, generó en 1999 unos 12 000 millones de MK de ingresos de exportación y representó más de un tercio del total de ingresos de la agricultura y casi el 15 por ciento del PIB de ese mismo año.

La preocupación sobre los riesgos para la salud que conlleva fumar ha impulsado acciones a nivel mundial para reducir este hábito. Se han propuesto varias medidas, como por ejemplo el incremento de los impuestos sobre los cigarrillos, prohibiciones de publicidad y promoción de cigarrillos, y restricciones de lugares en los que se permite fumar. Sin embargo, al mismo tiempo existe la preocupación de si la reducción efectiva de la demanda de tabaco debilitaría la economía y provocaría desempleo en países que dependen del tabaco, sobre todo en Malawi, donde el tabaco es un elemento principal de la economía del país. Este estudio se realizó para establecer la relación entre la producción de tabaco y la economía, así como para examinar los probables procesos de ajuste y las medidas posibles para reducir al mínimo los efectos negativos si la demanda mundial de tabaco disminuye.

5.2 LA PRODUCCIÓN DE TABACO

Malawi tiene una larga historia de producción de tabaco, que se remonta a inicios de los años veinte. Sin embargo, no se presenció una expansión rápida y constante de la producción hasta finales de los setenta (Cuadro 5.1). La producción media anual en 1961-1963 fue de 15 000 toneladas, pero a comienzos de los setenta aumentó casi un 90 por ciento hasta alcanzar las 29 000 toneladas, y en los noventa superó las 110 000 toneladas. La producción ascendió a unas 160 000 toneladas en el año 2000, lo que convirtió a Malawi en uno de los diez principales productores de tabaco del mundo. La hoja de tabaco Burley ascendió a 142 000 toneladas en el año 2000, casi un 89 por ciento del total de la producción.

Cuadro 5.1 - Superficie, rendimiento y producción

Fuentes: 1960-1990 de FAOSTAT, y 1990-2000 de la Comisión para el Control del Tabaco de Malawi.

Aunque la producción ha registrado una tendencia al alza desde 1960, ésta ha sido inestable de un año a otro, fluctuando ante los cambios de precios y las condiciones climatológicas. Los aumentos de la producción de tabaco durante los últimos decenios han estado impulsados por la expansión de la superficie y el incremento de los rendimientos, los cuales se triplicaron entre 1960 y 2000. No obstante, desde 1995 se ha producido un cierto debilitamiento, que responde posiblemente a la rápida expansión en manos de agricultores de tabaco sin experiencia.

5.3 LA POLÍTICA DE PRODUCCIÓN

Antes de 1989 la producción de tabaco estaba rigurosamente controlada por el gobierno. Todos los productores de tabaco debían conseguir una licencia del órgano regulador gubernamental, la Comisión para el Control del Tabaco, y sólo haciendas y propietarios de tierras eran aptos para solicitar una licencia de producción. Además, un agricultor debía alcanzar una determinada escala de producción para tener derecho a vender hoja de tabaco directamente en la sala de subastas. Así pues, se excluía fundamentalmente de la producción de tabaco a muchos agricultores de pequeña escala y agricultores con tierras arrendadas. A comienzos de 1995, con ayuda del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), Malawi inició un programa de ajuste estructural diseñado para restablecer la estabilidad financiera y fijar las bases de un crecimiento económico sostenible. Las reformas estructurales estaban dirigidas a liberalizar la economía y facilitar el desarrollo del sector privado. En el sector agrícola, entre las reformas en virtud del programa de ajuste figuraba el permitir que los pequeños agricultores produjesen cultivos comerciales y la liberalización de la comercialización de productos e insumos agrícolas. Estas medidas contribuyeron sobremanera al rápido aumento de la producción de tabaco desde 1995.

Cuadro 5.2 - Precios del tabaco ($ EE.UU./kg) en determinados mercados

Cuadro 5.3 - Cantidad en subasta, valor, precio y vendedores de tabaco en 2000

Nota: El número de productores incluye sólo a los que tuvieron ventas en el año 2000.
Fuente: Recopilados a partir de datos facilitados por Auction Holding Limited.

En virtud de las reformas de 1995, cientos de miles de pequeños agricultores pudieron producir tabaco. Aunque seguía habiendo un requisito de cantidad mínima para vender la producción en el mercado de subasta, la introducción de “compradores intermedios” de tabaco hizo posible que todos los agricultores produjesen tabaco, independientemente de la cantidad que quisieran producir. Los compradores intermedios actuaban como intermediarios entre los pequeños productores de tabaco y el mercado de subasta, comprando hoja de tabaco a muchos agricultores en pequeña escala a un precio negociado y vendiéndola luego en la sala de subastas al precio del mercado. De esta forma, todos los agricultores podían producir tabaco sin ningún tipo de restricción de cantidad. En el año 2000, había casi 700 compradores intermedios inscritos en los mercados de subasta, con unas ventas correspondientes a 3 500 toneladas. Todas las ventas fueron de tabaco burley.

El establecimiento de asociaciones de producción de tabaco en todo el país a partir de 1989, año en que se retiró la Ley de Cultivos Especiales, y sobre todo en 1995, cuando se pusieron en marcha las reformas estructurales, ofreció también a muchos pequeños agricultores la oportunidad de producir tabaco. Con arreglo al sistema de asociaciones, varios pequeños agricultores trabajan de forma colectiva para producir y vender tabaco. En torno al 93 por ciento de las ventas de las asociaciones ha sido de tabaco burley.

La evolución de los compradores intermedios y de las asociaciones de producción de tabaco atrajo a muchos pequeños agricultores a la producción de tabaco durante el último decenio. En consecuencia, el número de productores de tabaco aumentó de forma rápida a partir de 1990, sobre todo después de 1994. El número de productores registrados de tabaco burley y tabaco curado al humo se multiplicó por seis, de 9 500 en 1990 a 68 150 en el año 2000. La superficie plantada se incrementó de unas 100 000 hectáreas en 1993 a 170 000 hectáreas en el año 2000.

5.4 LA ESTRUCTURA DE PRODUCCIÓN

A pesar de incrementarse la participación de pequeños agricultores en la producción de tabaco, siguen predominando las haciendas, que en el año 2000 vendieron casi 84 000 toneladas en los mercados de subasta, lo que representa el 68 por ciento del total de ventas. Unas 35 000 haciendas vendieron tabaco en el año 2000, casi el mismo número que a comienzos de los noventa. La mayoría de haciendas eran pequeñas. Según los cálculos del Estudio de utilización de la tierra de las haciendas, más del 67 por ciento de éstas tenían menos de 20 hectáreas y sólo en torno al 10 por ciento de las haciendas tenían más de 40 hectáreas. Muchas haciendas pequeñas contrataban mano de obra, pero las grandes adoptaban el sistema de arrendamiento.

Hay muy pocos productores, incluso en las grandes haciendas, especializados de forma intensiva en el tabaco. El modelo de rotación empleado por muchos productores da lugar a que cada unidad de tierra se utilice para la producción de tabaco cada tres años. Casi todos los productores de tabaco producían también maíz para su propio consumo. Aunque el tamaño medio de las haciendas fuese de más de 20 hectáreas, la superficie media dedicada a la producción de tabaco en cada hacienda sólo habría sido de entre 2 y 3 hectáreas en el año 2000. La producción media por hogar en las asociaciones de cultivo de tabaco fue inferior a 200 kg. de hoja de tabaco en el año 2000. Así pues, la producción de tabaco se realiza en general a pequeña escala y no es especializada.

La producción de tabaco depende en gran medida del trabajo manual. Casi no se emplea maquinaria en el cultivo y la recolección de tabaco. Incluso las grandes haciendas dependen casi totalmente de la mano de obra, incluida una de más de 600 hectáreas. Los salarios de la mano de obra agrícola son muy bajos y el salario mínimo es de sólo unos 80 dólares EE.UU. al año, lo que fomenta la utilización de mano de obra.

5.4.1 Los precios

Cuadro 5.4 - Estimaciones del costo medio de la producción de tabaco en Malawi para 2000/01

Fuente: Asociación Tabalera de Malawi (TAMA)

Los precios de subasta han disminuido desde 1996, cuando eran de unos 2,27 $EE.UU./kg para el tabaco curado al humo y 1,61 $EE.UU./kg para el tabaco burley. En el año 2000, los precios medios de subasta eran de 1,35 $EE.UU./kg para el tabaco curado al humo y de 1,01 $EE.UU./kg para el tabaco burley, reduciéndose un 40 y un 37 por ciento, respectivamente. En consecuencia, el total de producción de tabaco burley en el año 2000 fue un 20 por ciento mayor que en 1996, pero el total de ingresos fue un 24 por ciento menor que en 1996. Junto con el descenso de la producción, los ingresos totales del tabaco curado al humo en el año 2000 fueron un 58 por ciento menores que los de 1996. Por ello, aunque en la producción de tabaco del año 2000 se utilizaron más insumos, como por ejemplo tierra, mano de obra, fertilizantes y demás, y se produjo más hoja de tabaco, los ingresos fueron muy inferiores a los de 1996, cuando se empleaba casi un 25 por ciento menos de tierra para el cultivo de tabaco.

Dos factores principales parecen ser el motivo del importante descenso de los precios en los últimos años. En primer lugar, el crecimiento de la producción superó al crecimiento de la demanda de exportación, lo que se tradujo en un descenso de los precios de exportación del tabaco de Malawi y, en segundo lugar, el aumento de la participación de productores nuevos y marginales tendía a producir hoja de tabaco de baja calidad debido a su falta de experiencia y de insumos. La Corporación para el Desarrollo y la Comercialización Agrícolas (ADMARC), el órgano gubernamental para la comercialización del tabaco, que compraba hoja de tabaco directamente a los agricultores a pequeña escala, recibió sólo la mitad del precio medio de la hoja de tabaco en el mercado de subasta en 2000.

Según las estimaciones de la Asociación Tabacalera de Malawi (TAMA), el costo de la producción en el año 2000 fue de casi 72 136 MK/ha. Si todos los gastos de producción estuviesen financiados por préstamos bancarios, el costo total de la producción, incluido el pago de intereses, habría sido cercano a 108 000 MK/ha, de manera que algunos productores de tabaco no obtendrían beneficios del tabaco si tuviesen que hacer uso de mano de obra contratada y transporte. En el Cuadro 5.4 se resume el presupuesto estimado de producción. La mano de obra, los fertilizantes y el transporte representaron más del 60 por ciento del costo total.

5.4.2 El sistema de arrendamiento

Muchas haciendas de gran tamaño utilizan el sistema de arrendamiento, según el cual la hacienda proporciona a los arrendatarios insumos básicos, alimento y vivienda. Los arrendatarios venden el tabaco a las haciendas para devolverles el pago de los costos de sus fertilizantes, alimentos, etc. En virtud de este sistema, las haciendas se benefician del suministro de tierra y de la comercialización del tabaco cultivado por los arrendatarios.

Muchas haciendas pequeñas, e incluso asociaciones de agricultores, contrataban trabajadores. Sin embargo, incluso con la tasa de salario mínimo, que en el año 2000 era de 37,5 MK/día (unos 0,5 dólares EE.UU.), sus beneficios de producción de tabaco serían muy escasos si tuviesen que depender totalmente de mano de obra contratada.

5.5 LA COMERCIALIZACIÓN DE LA HOJA DE TABACO

La hoja de tabaco se vende normalmente en mercados de subasta, situados en Lilongwe y Limbe y administrados por la Auction Holding Limited, en la que el gobierno tiene casi el 51 por ciento de participación. Se impone sobre las ventas una comisión del 3,95 por ciento del valor de venta. Todas las tasas y pagos, incluido el crédito a insumos, la tasa de la Asociación Tabacalera, las aportaciones a la investigación del tabaco y otros pagos, se deducen directamente a golpe de maza. Aunque los compradores de subasta (exportadores de tabaco) pagan el tabaco en dólares EE.UU. en la subasta, la mayoría de los vendedores reciben el pago en la divisa local calculada al tipo de cambio existente en el momento de la venta.

Se supone que la fijación de precios en la subasta es el resultado de la acción recíproca entre compradores y vendedores. Sin embargo, dado el pequeño número de compradores y las necesidades urgentes de dinero en efectivo de los pequeños agricultores, los compradores tienen mayor poder de mercado que los vendedores. En algunas ocasiones, ha sido un mercado de compradores. Aunque la Asociación Tabacalera de Malawi (TAMA) estaba en el mercado para representar a los pequeños agricultores, tenía escasa influencia en el precio de subasta.

Siete empresas importantes de exportación de tabaco operan en Malawi. La mayoría son agentes o divisiones de multinacionales con sede en los Estados Unidos de América o en Europa. Las tres principales empresas exportadoras representaban cerca del 90 por ciento del total de las exportaciones de tabaco. Estas empresas exportadoras compran hoja de tabaco en los mercados de subasta y la exportan después de su elaboración. Muchas de ellas han establecido instalaciones de elaboración y cuentan con personal especializado técnico y de mercado para la exportación de tabaco. En virtud de las normativas gubernamentales, una empresa tiene derecho a comprar hoja de tabaco en la sala de subastas si tiene crédito bancario y personal calificado suficiente y si ha pagado la tasa de licencia. No obstante, en los últimos decenios no han aparecido nuevos exportadores, debido posiblemente a que la importante inversión necesaria para establecer fábricas de elaboración actúa como barrera para nuevos participantes.

Además de comprar para satisfacer los pedidos, los exportadores también compran hoja y la guardan para especular. La compra para la especulación garantiza que toda la hoja de tabaco se venda.

Después de la reforma estructural iniciada en 1994/95, el gobierno ha ido abandonando progresivamente su intervención en el comercio del tabaco. En un intento por incrementar los ingresos complementarios, el gobierno impuso un gravamen temporal del 10 por ciento sobre las exportaciones de tabaco en 1995, pero como esto reducía la competitividad de las exportaciones, se redujo al 8 por ciento en 1996, al 4 por ciento en 1997 y finalmente se suprimió en 1998. A partir de 1998, no se ha aplicado ningún gravamen o impuesto a las exportaciones de tabaco. El principal ingreso que el gobierno ha recaudado de las exportaciones de tabaco ha sido procedente de un impuesto sobre los beneficios de los exportadores de tabaco. En los últimos años, los ingresos públicos a raíz del impuesto supusieron más del 20 por ciento del total de la recaudación tributaria del país.

5.6 LA DEMANDA DE EXPORTACIÓN DE TABACO

La demanda de tabaco de Malawi ha estado impulsada en gran medida por las exportaciones. El consumo interno se ha cubierto totalmente con las importaciones, de manera que todo el tabaco producido se ha destinado a la exportación. Tal y como se muestra en el Cuadro 5.5, a comienzos de los sesenta Malawi exportó casi 12 000 toneladas de hoja de tabaco, lo que lo convertía en sólo un exportador secundario en lo que al mercado mundial se refiere. Para 1998, era el quinto exportador de tabaco en importancia del mundo, después de Brasil, los Estados Unidos de América, Zimbabwe y Turquía, y representaba casi el 6 por ciento de las exportaciones mundiales de tabaco.

Las importaciones ascienden a unas 1 000 toneladas anuales.

Las exportaciones de tabaco procedente de Malawi han variado de forma considerable de un año a otro (Cuadro 5.5), debido en gran medida a los cambios registrados en la producción. Así, graves sequías han provocado importantes reducciones en la producción, al igual que en las exportaciones. Desde comienzos de los noventa, las exportaciones han registrado más estabilidad, debido en gran parte al aumento del volumen de producción, que permitió a los exportadores acumular existencias en los años favorables. Por ejemplo, en 1994, la producción disminuyó casi un 24 por ciento en relación con el año anterior, pero las exportaciones fueron sólo ligeramente inferiores en relación con el nivel obtenido el año anterior.

Cuadro 5.5 - Exportaciones de tabaco procedente de Malawi

Fuente: FAOSTAT.

En el Cuadro 5.6 se ofrece una visión general completa de las variaciones de destino de las exportaciones de tabaco procedente de Malawi en 1998 frente a 1988. Si bien el total de socios comerciales de tabaco de Malawi aumentó de 45 en 1988 a 78 en 1998, el total de exportaciones se duplicó con creces. Las exportaciones a países de Europa occidental, como Alemania y los Países Bajos, casi se duplicaron, hasta alcanzar las 65 000 toneladas en 1998, lo que representaba casi la mitad del total de las exportaciones de Malawi. América del Norte, sobre todo los Estados Unidos de América, fue el segundo destino en importancia, con importaciones superiores a 22 000 toneladas en 1998, lo que triplica el volumen de 1988. Mientras que las exportaciones a Asia y el resto del mundo experimentaban un crecimiento lento, las exportaciones a los países de Europa occidental y la ex Unión Soviética se incrementaban de forma considerable, de cero en 1988 a casi 12 000 toneladas en 1998. En realidad, América del Norte y Europa oriental y occidental representaron la mayor parte del crecimiento de las exportaciones de tabaco de Malawi durante este período, lo que estuvo unido a la expansión de los fabricantes multinacionales de cigarrillos en países de Europa oriental y la ex Unión Soviética.

Cuadro 5.6 - Destinos de las exportaciones de tabaco de Malawi en 1988 y 1998

Fuente: Recopilados de FAOSTAT.

Se han producido importantes cambios en los tipos de tabaco exportados durante los últimos decenios (Cuadro 5.7). Entre 1985 y 2000, las exportaciones de tabaco burley aumentaron de 26 000 toneladas a casi 80 000 toneladas, mientras que el tabaco Virginia disminuyó de manera notable, de 24 000 toneladas en 1993 a 9 530 toneladas en 2000. Otros tipos de hoja de tabaco sufrieron también un descenso considerable. El tabaco oscuro curado al fuego se redujo de 16 000 toneladas en 1985 a sólo 7 000 toneladas en el año 2000. Este aumento de la proporción de tabaco burley responde a la incapacidad de los pequeños productores de cumplir los requisitos de capital que supone producir tipos de tabaco curado al humo.

Cuadro 5.7 - Exportaciones de tabaco según el tipo, 1985-2000 (tonelada)

Fuente: Oficina para el Control del Tabaco de Malawi.

5.7 LA IMPORTANCIA ECONÓMICA DEL TABACO PARA MALAWI

El tabaco es importante en la economía de Malawi. Dada su economía predominantemente agrícola, su escasa base de recursos y un crecimiento lento de la economía nacional y los ingresos públicos, la producción de tabaco desempeña un papel principal en el crecimiento económico, el nivel de empleo y los ingresos de las familias rurales y del gobierno.

5.7.1 El tabaco en los ingresos de exportación y la balanza comercial

Las exportaciones de productos agrícolas son prácticamente la única fuente de ingresos de exportación y de divisas de la economía de Malawi. En 1999, el total de ingresos nacionales de exportación estuvo en torno a 18 400 millones de MK y más del 85 por ciento procedía de las exportaciones de tabaco, té, azúcar, algodón, café, legumbres y arroz. El tabaco fue con mucho el principal producto de exportación, correspondiente a 12 100 millones de MK, es decir, el 61 por ciento del total de los ingresos de exportación. El segundo producto de exportación en importancia, el té, supuso cerca de 1 700 millones de MK en divisas en 1999, sólo un 14 por ciento aproximadamente de lo que generó el tabaco.

Se estima que la producción de tabaco representa el 6 por ciento del PIB total y el 17 por ciento del PIB agrícola.

El predominio del tabaco en las exportaciones de Malawi se ha debilitado sólo ligeramente desde 1995. Las exportaciones de tabaco representaron en 1995 cerca del 67 por ciento del total de los ingresos de exportación, pero se redujeron al 61 por ciento en 1999. Las tasas de crecimiento anuales en las exportaciones de té, azúcar, algodón y arroz de 1995 a 1999 superaron a las del tabaco, el cual registró la tasa de crecimiento más lenta de todos los productos exportados, a excepción del café, durante este período.

Los ingresos de exportación procedentes del tabaco desempeñaron una función muy importante en la balanza comercial nacional. El país ha tenido durante mucho tiempo un déficit comercial (exportaciones menos importaciones) que en 1999 ascendía a 3 700 millones de MK, debido sobre todo a que la demanda interna superaba a la producción interna. Los ingresos procedentes de la exportación de tabaco correspondientes a 12 000 millones de MK en 1999 cubrían más de la mitad del costo de las importaciones correspondiente a 22 000 millones de MK. Las importaciones de alimentos y fertilizantes representaban el 10 y el 6 por ciento del total, respectivamente, mientras que los equipos de transporte, combustibles y productos médicos representaban el otro 25 por ciento.

5.7.2 El tabaco y el empleo

Según estimaciones, el número de agricultores y trabajadores involucrados en la producción, la comercialización y la elaboración de tabaco oscila entre 650 000 y casi dos millones. Una estimación aceptable sería la de 1 a 1,2 millones de personas implicadas de forma directa en el negocio del tabaco en el país^[3]. En consecuencia, los puestos de trabajo creados por el tabaco representan en torno al 20 por ciento del total de la fuerza de trabajo de 5 millones de personas. Ya que hay un gran número de productores marginales que dedican sólo una parte de su tiempo a la producción de tabaco, el número de agricultores que participan en la producción de tabaco sería superior al que indican estas estimaciones.

5.7.3 El tabaco y el consumo e ingresos de los hogares rurales

El tabaco es la fuente principal de ingresos monetarios de muchos hogares rurales. Basándose en los datos de la Encuesta sobre Hogares Integrada de 1997-98, en los Cuadros 5.8 y 5.9 se resumen los ingresos monetarios y el consumo de los hogares en determinadas regiones y se subraya la importancia de la producción de tabaco. En las principales regiones productoras de tabaco, las ventas de este producto supusieron una gran parte de los ingresos monetarios de los hogares rurales, que varía entre el 65 por ciento en Lilongwe Rural, el 89 por ciento en Kasungu y el 98 por ciento en Dowa, donde el tabaco es casi la única fuente de ingresos monetarios. El promedio de los ingresos monetarios procedentes del tabaco era de 22 000 MK por hogar, o sea casi el 89 por ciento de los ingresos monetarios familiares. En estas regiones, los ingresos monetarios procedentes de otros cultivos eran inferiores. Por término medio, casi un 1 por ciento de los ingresos monetarios procedía de las ventas de maíz y un 10 por ciento de las ventas de otros cultivos, como por ejemplo el maní, el arroz, la patata y la yuca.

Una gran parte de los ingresos monetarios se utilizaba para la compra de alimentos. En Lilongwe Rural, el 34 por ciento de los ingresos monetarios se empleaba en alimentación, mientras que la proporción destinada a alimentos en Mchinji y Kasunge era del 43 y el 39 por ciento, respectivamente. Las familias en Dowa gastaban casi el 70 por ciento de sus ingresos monetarios en alimentación. La mayor parte del gasto alimentario se destinaba a alimentos básicos como cereales y productos de cereales, hortalizas y carne, que representaban más del 50 por ciento del total del gasto en alimentación en muchas regiones. El gasto en artículos distintos de los alimentos, como ropa y demás, era escaso, pero el gasto en agua, combustible y energía era mayor que muchos otros gastos.

Cuadro 5.8 - Gasto familiar medio (kwachas) por producto

Nota: Todos los precios se han ajustado a los precios de 2000.
Fuente: Encuesta Integrada de Hogares 1997-98, Oficina Nacional de Estadística de Malawi.

Cuadro 5.9 - Ventas, costos e ingresos medios anuales por actividad para determinados distritos

5.8 EL AJUSTE EN LA AGRICULTURA DE MALAWI

Desde un punto de vista agronómico, en Malawi pueden producirse una gran variedad de cultivos. Sin embargo, las oportunidades de mercado para muchos productos son escasas. En realidad, la existencia de pocas oportunidades de mercado explicaría por qué muchos agricultores han seguido produciendo y aumentando la producción de tabaco y el motivo de que Malawi tenga una ventaja comparativa en la producción de tabaco.

Dada la preocupación existente sobre las perspectivas inciertas de las condiciones del comercio y de la seguridad alimentaria para los cultivos alimentarios y comerciales tradicionales, Malawi ha procurado seguir una estrategia de diversificación durante más de 30 años. Desde los años sesenta, se han dedicado muchos estudios a buscar cultivos alternativos con una posible ventaja comparativa y mejores perspectivas de mercado en Malawi, y se han identificado algunos. En la agricultura de pequeños agricultores, las leguminosas forrajeras, los cereales como el mijo y el sorgo, y el cultivo de tubérculos como la batata y la yuca son cultivos alimentarios que podrían sustituir al maíz debido a su resistencia a la sequía. Las hortalizas (sobre todo cebollas, tomates y chiles), los frijoles, el maní y el algodón ofrecen posibilidades como cultivos comerciales para los pequeños agricultores. En el subsector de las haciendas, además del tabaco burley, las rosas, el anacardo, especias como el pimentón dulce y el pimentón picante, la macadamia, el té y el azúcar tienen posibilidades.

Además de otros productos agrícolas, los resultados de la aplicación de modelos señalan aquí que la elaboración de alimentos, los servicios y los textiles tienen posibilidades de una expansión basada en los recursos que podrían desprenderse de la producción de tabaco en caso de una contracción de la demanda. El desarrollo de los sectores secundario y terciario podría ofrecer a Malawi mayor estabilidad basada en la diversidad, pero en una economía que es fundamentalmente agrícola, el desarrollo de estos sectores no será fácil.

Se han hecho varios intentos para impulsar la diversificación de los cultivos tanto alimentarios como comerciales. Con la ayuda de donantes, el gobierno creó autoridades agrícolas para el té, el café, el azúcar y los frutos secos a fin de fomentar la producción de estos cultivos comerciales en los pequeños agricultores. Por conducto de organizaciones paraestatales como la Corporación para el Desarrollo y Comercialización Agrícolas (ADMARC), la Agencia de Malawi para la Promoción de la Inversión (MIPA) y el Consejo de Malawi para la Promoción de la Exportación (MEPC), el gobierno, con la ayuda de donantes, ha realizado varias actividades para fomentar la producción hortícola. Sin embargo, estos esfuerzos no han tenido buenos resultados notables. Existe aún una fuerte dependencia del tabaco y el maíz y más del 80 por ciento de las tierras de los pequeños agricultores se dedica a la producción del maíz.

5.9 OBSERVACIONES FINALES

Cuadro 5.10 - Exportaciones de tabaco (toneladas) de determinados países exportadores

La industria del tabaco en Malawi depende prácticamente en su totalidad del mercado mundial y se vería afectada de forma negativa por cualquier disminución de la demanda de tabaco a nivel mundial. Hay que tener en cuenta dos cuestiones fundamentales a la hora de evaluar las posibles consecuencias para Malawi del debilitamiento de la demanda. En primer lugar, la capacidad de Malawi de competir con otros países exportadores de tabaco por mantener su parte correspondiente en un mercado en contracción y, en segundo lugar, la capacidad de la economía de Malawi para ajustarse al abandono de la producción de tabaco.

En caso de producirse una contracción de la demanda, cabe esperar que Malawi compita favorablemente con otros países exportadores de tabaco, dada su capacidad demostrada para ampliar su industria durante los dos últimos decenios. Tal y como se muestra en el Cuadro 5.10, Malawi presentó unas tasas de crecimiento de las exportaciones mucho mayores en los últimos 20 años que los demás principales exportadores. Así pues, cabría esperar que Malawi mantuviese sus exportaciones en caso de una contracción mundial de la demanda de tabaco, mientras que otros exportadores podrían perder su cuota de mercado.

Las exportaciones de Malawi han sido competitivas en el precio y esto le proporcionaría la capacidad de competir con éxito con los demás exportadores. El valor unitario de exportación de la hoja de tabaco procedente de los Estados Unidos de América duplicaba con creces la media mundial, lo que respondía a su mejor calidad pero también a los costos de producción más elevados del tabaco estadounidense. El salario mínimo en los Estados Unidos de América es de casi 5 dólares EE.UU./día, mientras que en Malawi no llega a 0,5 dólares EE.UU./día. Si los fabricantes de cigarrillos pueden seguir estableciendo nuevas tecnologías de elaboración que les permitan utilizar hoja de calidad inferior, los países como Malawi, Brasil y Zimbabwe podrían competir de forma más efectiva con los Estados Unidos de América.

A su vez, una disminución de los ingresos de la exportación del tabaco requeriría un ajuste de la economía de Malawi. El análisis aquí realizado demuestra que, pese a la importante contribución del sector del tabaco de Malawi a la producción, a las ganancias de exportación y a los ingresos públicos, si hay posibilidad de realizar cambios estructurales dentro de la economía, los efectos que una reducción de la demanda de tabaco pudiesen tener sobre ésta serían escasos. Aunque el sector del tabaco sufriría enormemente en caso de producirse un descenso importante de su precio de exportación, si es posible ajustar otros sectores a la nueva situación mediante la absorción de los trabajadores desplazados del sector del tabaco, el aumento de la producción y el reemplazo de las pérdidas en los ingresos de exportación, el daño de la economía en general estaría contenido.

El reto al que se enfrenta Malawi, sin embargo, es el de identificar y desarrollar alternativas a la producción de tabaco. Si bien existen estas alternativas, la carencia de recursos y de capacidad para competir en los mercados mundiales, unido a los mercados internos subdesarrollados de muchos cultivos agrícolas, dificulta el ajuste. La escasez de capital para inversiones en el desarrollo de otros sectores, la carencia de empresarios y el escaso desarrollo de la infraestructura del transporte, el almacenaje y la información contribuyen a las dificultades del ajuste.

Durante los últimos decenios la comunidad internacional ha ofrecido varias formas de ayuda financiera a Malawi. En caso de producirse una contracción importante de la demanda de tabaco, la necesidad de Malawi de un ajuste estructural se volvería más urgente. Es probable que la economía se resintiese de forma considerable y sería necesaria ayuda internacional, centrada claramente en posibilitar el ajuste tanto dentro de la agricultura como entre la agricultura y otros sectores de la economía.