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De la ordenación territorial a la seguridad alimentaria

L.E. Guillén Dordelly y J. Van Wambeke
Luisa Elena Guillén Dordelly es Médico veterinario, y Consultora nacional e internacional en sistemas agrarios, desarrollo rural y seguridad alimentaria. Jan Van Wambeke es Ingeniero agrónomo, y Oficial de tierras y aguas, Oficina regional de la FAO para América Latina y el Caribe (RLC), Santiago, Chile.

En este artículo se propone un análisis participativo integral y sistémico de la seguridad alimentaria en un territorio determinado con vistas al diseño de un instrumento práctico, rápido y sencillo para la toma de decisiones sobre programas y políticas. Los programas y políticas deberán tomar en consideración la especificidad de las condiciones humanas y territoriales, y garantizar la equidad y la sostenibilidad en una zona de microcuenca en la cual el agua es el recurso esencial para la preservación de la vida. La situación alimentaria imperante en el territorio constituye el primer elemento de un estudio que procede por aproximaciones sucesivas. Se examinan las características geográficas del territorio; las relaciones del ser humano con su entorno, y el acceso a los recursos hídricos y la tierra entendidos como indicadores iniciales de la vulnerabilidad alimentaria. Seguidamente, la seguridad alimentaria y el acceso y uso de los recursos agrícolas se estudian desde el punto de vista ambiental, social y económico. Se analizan posteriormente los parámetros que miden la seguridad alimentaria: acceso, disponibilidad, regularidad de suministro e inocuidad de los alimentos. Según estos parámetros se evalúa finalmente el grado de vulnerabilidad alimentaria en función de las zonas, grupos/comunidades y familias.

INTRODUCCIÓN

La planificación de los proyectos de seguridad alimentaria en beneficio de las comunidades rurales se orienta generalmente hacia acciones específicas, limitadas al área productiva, y pone énfasis en el mejoramiento de la producción y productividad, y por lo tanto en la generación de ingresos. Poca atención reciben en estos proyectos las consideraciones ambientales, y el ser humano suele ser considerado como objeto y no como sujeto de la seguridad alimentaria.

Los efectos de los proyectos que se llevan a cabo bajo estos criterios son limitados en el tiempo, y criticables debido a su excesiva orientación al aprovechamiento de los recursos naturales como fuente generadora de ingresos. La mayoría de los proyectos de seguridad alimentaria que se ejecutan en la actualidad responden a este patrón.

La inseguridad alimentaria[24] se considera mayormente un asunto de orden económico que resulta de la falta o de la escasez de ingresos de las familias para adquirir los alimentos; en consecuencia, se analiza de preferencia el parámetro «acceso a los alimentos» al estudiar los ingresos agrícolas. Este planteamiento toma en cuenta uno de los factores de producción - la tierra-entendido solamente como generador de capital y trabajo, pero no atiende al equilibrio que debería existir en el espacio rural entre el hombre y el medio ambiente.

Tres autores (L.E. Guillén Dordelly, C. Mijares y J. Van Wambeke, 2004) han elaborado una propuesta metodológica denominada «visión sistémica de la seguridad alimentaria», que se basa en una experiencia de campo llevada a cabo en el asentamiento campesino «Agua Viva» del municipio Peña, estado de Yaracuy (Venezuela). El análisis se concentró en la capacidad de acumulación de los productores en función de sus ingresos, y en la seguridad alimentaria de las familias. Se tomaron en cuenta los parámetros relacionados con la seguridad alimentaria en general, pero la medición de ésta se efectuó principalmente con arreglo a la capacidad de acceso a los alimentos en función del ingreso; se propuso también un método para caracterizar la disponibilidad de alimentos según la cuantificación del aporte nutricional por sistema de producción (adecuación del sistema de producción a las necesidades de la familia).

Las reflexiones y discusiones sobre este método llevaron a conceptuar el acceso y gestión/uso de los recursos naturales como elementos determinantes de la consecución de la seguridad alimentaria sostenible. La presente propuesta incorpora por ende el ordenamiento territorial, y considera la microcuenca hidrográfica como la unidad de planificación.

La Reunión de Ministros de medio ambiente de América Latina y el Caribe de 2003 formuló las Iniciativas latinoamericanas y caribeñas para el desarrollo sostenible; éstas identificaron una serie de metas orientadoras y propósitos indicativos entre los que figuran la diversidad biológica (aumento de los terrenos boscosos y áreas protegidas); la gestión de los recursos hídricos (eficiencia del uso del agua en la agricultura y para el consumo humano, fortalecimiento del marco institucional para el manejo integrado de las cuencas, mejoramiento de la calidad del agua); y la implementación de planes y políticas de ordenación territorial a partir de un enfoque de desarrollo sostenible. Los propósitos indicativos ambientales sirven de orientación para la seguridad alimentaria, tal como se propone en este estudio.

El enfoque que conduce de la ordenación territorial al logro de la seguridad alimentaria constituye un instrumento de trabajo rápido y sencillo que contribuye a mejorar las intervenciones territoriales[25] de los programas de seguridad alimentaria partiendo, a fines prácticos, de una unidad territorial, que en el caso de este estudio es la microcuenca. El «enfoque de microcuenca» es de tipo integral y pone de manifiesto la interacción entre los aspectos ambientales, sociales y económicos del sistema agrario. Estos aspectos garantizan la reproducción de la fuerza de trabajo en una situación de seguridad alimentaria sostenible. Los componentes del sistema objeto del estudio influyen tanto de forma aislada como en conjunto en el estado nutricional de la población, y pueden por consiguiente causar inseguridad alimentaria y vulnerabilidad.

La ordenación territorial facilita una gestión armónica de los componentes del sistema mediante acciones planificadas, coordinadas y ejecutadas por agentes que entran en relación recíproca en el espacio rural. Por ordenación territorial se entiende también la regulación de los asentamientos y de las actividades económicas y sociales, y el desarrollo general del territorio. Los objetivos fundamentales de un desarrollo integral son el bienestar de la población, el uso óptimo y conservación de los recursos naturales y la protección y valorización del ambiente. La seguridad alimentaria es el producto de la conservación del ambiente y de la sostenibilidad territorial.

PLANTEAMIENTO SOCIAL DE LOS RECURSOS NATURALES

La familia y las comunidades juegan un papel importante en la transformación del territorio, pero al mismo tiempo aseguran la preservación y permanencia de los recursos naturales, y por consiguiente de la seguridad alimentaria. La familia es el sujeto (y no el objeto) de la seguridad alimentaria.

Existe una relación directa entre el acceso a los recursos (la tierra y el agua), la seguridad alimentaria y la explotación de los sistemas de producción. Estos últimos afectan a los patrones de uso del suelo, las prácticas agrícolas y la preservación del medio ambiente[26].

El estudio de la microcuenca puso de manifiesto las estrechas relaciones entre uso y manejo de los recursos naturales; las repercusiones ambientales del uso de los recursos naturales y la posibilidad de medirlas fácilmente; la integración de los objetivos de producción con la protección de los recursos naturales; la posibilidad de establecer un proceso productivo organizado; y las interacciones entre diversas instituciones que prestan servicios en las comunidades.

El enfoque territorial identifica además cuatro aspectos de la seguridad alimentaria que permiten conocer la vulnerabilidad de la población:

Objetivo del enfoque

El objetivo del enfoque del estudio es la caracterización de la situación de seguridad alimentaria en la microcuenca a través de la detección de a) los parámetros de vulnerabilidad; b) las zonas vulnerables; c) los grupos (comunidades) vulnerables, y d) las familias vulnerables. Este desglose permitirá la formulación de propuestas de consolidación fundadas en un reordenamiento coherente del territorio con la finalidad de preservar los recursos y conseguir la seguridad alimentaria sostenible.

Aplicación

Se deben utilizar todos los recursos disponibles y garantizar la participación de los interesados, tanto cuando se recopila como cuando se elabora la información.

El ámbito de aplicación del estudio está determinado generalmente por las políticas y programas de cada país, pero para la selección de la microcuenca se deben considerar criterios como la preservación de las fuentes de agua, la presión sobre los recursos naturales, el grado de deterioro de los recursos naturales, la facilidad para implementar y ampliar el trabajo, la «visibilidad» y representatividad de los agentes y la facilidad de acceso a la tierra y el agua.

El tiempo estimado de las intervenciones dependerá de las dimensiones de la microcuenca. El equipo de trabajo encargado de las intervenciones debe ser interdisciplinario, ya que se requiere del aporte de técnicos agrícolas y forestales, geógrafos, especialistas en comunicación, sociólogos y nutricionistas.

El acceso de la población a los recursos sigue patrones de uso y de idoneidad cultural; la influencia de dichos patrones también se observa en la explotación de los sistemas de producción y en las interrelaciones sociales. Las interrelaciones sociales de explotación generan resultados que se miden según los parámetros de la seguridad alimentaria, y permiten agrupar a las familias de acuerdo con su nivel de vulnerabilidad (Figura 1).

Un estudio en dos etapas - analítico y sintético - lleva gradualmente al examen de la situación de seguridad alimentaria en el territorio. La etapa de análisis es una primera aproximación; la de síntesis, una caracterización más detallada.

FIGURA 1
Diagrama de las relaciones entre familia, ambiente, medio social y económico y vulnerabilidad

DE LA DETECCIÓN DE LOS NIVELES DE VULNERABILIDAD A LA SEGURIDAD ALIMENTARIA

La seguridad alimentaria en el territorio

En esta etapa se parte del análisis del territorio de la microcuenca, y de las relaciones que se establecen al acceder a los recursos naturales, para llegar finalmente a una visión general de la seguridad alimentaria.

Inicialmente se lleva a cabo la recolección y análisis de información mediante material secundario (mapas, censos, etc.) para obtener una referencia acerca de la superficie, geología y clima de la zona. Estas informaciones se complementan con datos específicos sobre vegetación (cobertura y deforestación, etc.), suelos (tipos, erosión, topografía, prácticas de conservación, uso de plaguicidas, etc.), hidrología (aguas superficiales y aguas profundas, pozos, sistemas y formas de riego, contaminación, deforestación en cabeceras/nacientes, etc.), empleo (zonas principales de desarrollo, vialidad, infraestructura, servicios, asentamientos, actividades agrícolas y no agrícolas, etc.). Estos conocimientos permitirán definir el ámbito de las acciones que se pondrán en práctica.

En el estudio se identifican los agentes (productores, instituciones, intermediarios, trabajadores agrícolas y no agrícolas, etc.) y se revisan las relaciones internas y externas entre los agentes; los conflictos y competencias; los tipos de programas y proyectos que desarrollan las instituciones en la zona; y se propone un enfoque histórico[27] que permitirá conocer las transformaciones que ha sufrido el territorio por la intervención del hombre en su búsqueda de la seguridad alimentaria.

Seguidamente, se procede a una zonificación de la microcuenca con la finalidad de obtener una visión homogénea del paisaje y conocer con más detalle y más rápidamente la realidad de cada agente. La zonificación puede efectuarse «por pisos» (por estratos), por comunidades, por uso potencial del suelo o por elementos fisiográficos (divisores de aguas, áreas de recogida o captación y drenaje)[28].

Luego, se construye la matriz de acceso a los recursos de tierras y aguas para cada una de las zonas identificadas, partiendo del desglose demográfico de la población de la microcuenca. Esta matriz proporcionará un panorama general de la inseguridad alimentaria[29].

Evaluación de la seguridad alimentaria en el territorio

Basándose en la información recogida, se procede a la evaluación de la seguridad alimentaria en la microcuenca (se estima que, dependiendo de la edad y sexo y del nivel de actividad física, las necesidades energéticas de la población son de 2 000 a 2 350 kcal/día/persona)[30]. En cada zona y comunidad, se seleccionan familias con y sin acceso a los recursos naturales con el fin de conformar una muestra. Indudablemente, las familias sin agua y sin tierra son consideradas vulnerables desde un principio, pero estas familias son igualmente encuestadas para determinar sus ingresos extraagrícolas y su nivel de vulnerabilidad. En cuanto a las familias con acceso a los recursos, se seleccionan aquéllas cuyos sistemas de producción son los más representativos.

Tras la determinación del ingreso familiar, se investigan los parámetros de seguridad alimentaria, a saber, acceso, disponibilidad, estabilidad e inocuidad; estos parámetros permitirán establecer el nivel de vulnerabilidad[31] de la población.

Determinación del ingreso familiar

Es importante considerar todos los ingresos del núcleo familiar, ya que los no agrícolas juegan también un papel importante en la seguridad alimentaria. En muchos casos, el ingreso no agrícola solapa los resultados de un sistema productivo y permite que las familias logren cubrir sus necesidades mínimas.

Para conocer el ingreso agrícola, se parte del uso de la tierra y el agua y de un análisis técnico-económico de los sistemas de producción referido a la identificación de los diferentes sistemas predominantes y representativos de la zona. Se recoge información sobre producción de la parcela, volúmenes de producción, mercados, tiempos de utilización y tipos de mano de obra.

Medición de la vulnerabilidad

Los ingresos familiares agrícolas aportan cierta información sobre la situación de seguridad alimentaria en la microcuenca referida solo al parámetro de acceso, pero no constituyen una referencia absoluta; el análisis (L.E. Guillén, C. Mijares y J. Van Wambeke, 2004) se ha realizado utilizando como referencia el umbral de reproducción simple (URS) y la canasta alimentaria (CA) (Recuadro 1).

RECUADRO 1
Medición del acceso a los alimentos según el ingreso agrícola

La comparación de los ingresos obtenidos en los distintos sistemas de producción, referidos al umbral de reproducción simple (URS) y a la canasta alimentaria, permite distinguir tres tipos de familias con arreglo a su acceso a los alimentos y su situación de seguridad alimentaria.

Tipo I. Familias con acceso bajo a los recursos naturales: sus ingresos están por debajo del URS y del acceso a los alimentos de la canasta alimentaria; estas familias realizan sistemas de producción que no remuneran adecuadamente el trabajo y se encuentran por lo tanto en una situación alimentaria crítica.

Tipo II. Familias con acceso medio a los recursos naturales: sus ingresos están en un punto intermedio entre el URS y el acceso a los alimentos de la canasta alimentaria; estas familias realizan sistemas de producción que generan ingresos que les permiten acceder a los alimentos de la canasta pero que no llegan a cubrir la totalidad de sus necesidades elementales ni garantizan la reproducción de la familia.

Tipo III. Familias con acceso alto a los recursos naturales: sus ingresos están sobre el URS y garantizan tanto la reproducción simple como el acceso a los alimentos de la canasta; estas familias se encuentran en una situación de mayor seguridad alimentaria.

Las familias que componen la muestra fueron entrevistadas para asignar un puntaje a los indicadores de cada uno de los parámetros. La suma de los puntos es igual a 100 (Recuadros 2 a 6).


RECUADRO 2
Indicadores de medición del parámetro Acceso

Tierra
(10 puntos)
Derechos de uso (con/sin)
Título de propiedad (con/sin)
¿Existen conflictos por el acceso a la tierra?
¿Son los encuestados agricultores sin tierras?

Agua
(10 puntos)
Calidad (buena/mala)
Regularidad del suministro
¿Existen conflictos por el acceso al agua?
¿Existen fuentes en las cercanías?

RESULTADOS

Los datos y cifras obtenidos permiten conocer:

a) Los niveles de vulnerabilidad (inseguridad) (Figura 2) alimentaria en la microcuenca; estos niveles se calculan sumando los puntajes correspondientes a cada familia:

Los niveles de vulnerabilidad total se pueden representar mediante un triángulo en el que los parámetros de estabilidad e inocuidad se adicionan. Cada parámetro deberá tener un valor comprendido entre 0 y 100 (Figura 3).

b) El parámetro que determina mayormente la situación de vulnerabilidad alimentaria (que resulta de la suma de los puntajes de los indicadores), y orientar las acciones correctivas correspondientes.

CONCLUSIÓN

El enfoque de ordenación territorial facilita la alerta temprana tanto en las situaciones de emergencia alimentaria como en las de emergencia ambiental, y permite conocer rápidamente las necesidades que es preciso satisfacer en ambas.

La metodología para estudiar los sistemas agrarios y el territorio procede de lo general a lo particular, y del análisis a la síntesis, y logra una definición progresiva clara de la situación imperante en la microcuenca, en la comunidad y en la familia, tanto en este orden como en orden inverso.

RECUADRO 3

Indicadores sociales (10 puntos)

Agua potable (sí/no): calidad; regularidad del suministro
Edad y sexo: ¿es nucleada la familia?
Miembros de la familia: número total, número de niños
Servicios (todos/alguno [¿cuál?]/ninguno)
Educación: nivel; educación de los padres; índice de analfabetismo
Vivienda (sí/no): propia; condiciones
Asistencia técnica (sí/no): ¿para el hombre?; ¿para la mujer?
Crédito (sí/no): ¿para el hombre?; ¿para la mujer?

Indicadores económicos

(10 puntos)
Total de ingresos anuales. ¿Son estos ingresos sólo ingresos agrícolas?
¿Acceden los encuestados al URS con los solos ingresos agrícolas?
Total de otros ingresos anuales. ¿En concepto de qué?
¿Sirve el ingreso no agrícola de complemento para acceder al URS?; ¿para acceder a los alimentos de la canasta alimentaria?


RECUADRO 4
Indicadores de medición del parámetro
Disponibilidad de los alimentos (20 puntos)

Disponibilidad de alimentos dentro de la parcela: autoconsumo (sí/no); monocultivo; disponibilidad de alimentos diversificados; huertos Disponibilidad de alimentos fuera de la parcela:
¿es la oferta de alimentos continua y variada?
¿Están los alimentos disponibles en la comunidad misma o en las cercanías?
¿Cuantas calorías proporciona la cosecha?
¿Cuantas calorías proporcionan los alimentos que provenien de las cercanías?

Las propuestas de intervención se pueden basar en la ocupación actual o en comparaciones de usos y manejos potenciales del territorio (mediante zonificación agroecológica y agro-socioecómica). Los planes de desarrollo del territorio se pueden fomentar o reorientar gracias a la participación de los interesados con el objeto de conseguir la seguridad alimentaria.

RECUADRO 5
Indicadores de medición del parámetro
Estabilidad (20 puntos)

¿Son estables los ingresos agrícolas?
¿Son estables los ingresos no agrícolas?
¿Se producen alimentos durante todo el año?
Cuándo existen, ¿son los mercados cercanos y seguros?
¿Se practica la comercialización directa?
¿Son verbales o escritos los contratos que se estipulan?
¿Existen intermediarios comerciales?


RECUADRO 6
Indicadores de medición del parámetro
Inocuidad (20 puntos)

¿Se usan productos agroquímicos? ¿En qué forma? ¿Se proporciona capacitación para este uso?
¿Cuál es la calidad del agua de consumo y del agua de riego?
¿Se adoptan buenas prácticas agrícolas?
¿Se practica la conservación del suelo?
¿Se practica un manejo de cultivos adecuado?
¿Se proporciona capacitación y asistencia para el manejo de cultivos?
¿Existen áreas de reserva forestal? ¿Se practica la conservación y la reforestación de estas áreas?
¿Se conservan y protegen las fuentes de agua?
¿Contamina el usuario el agua? (sí/no/a veces)

Uno de los antecedentes para este estudio ha sido que el desconocimiento del manejo adecuado de los recursos naturales y de las repercusiones negativas que la actividad del hombre puede tener en la naturaleza son factores que comprometen el desarrollo rural y la seguridad alimentaria de las generaciones futuras.

FIGURA 2
Puntuación total de vulnerabilidad de las familias

FIGURA 3
Niveles de vulnerabilidad de la familias

El estudio ha facilitado el proceso de toma de decisiones y ha contribuido a promover un uso racional de los recursos económicos y humanos; ha proporcionado un método para conocer los niveles de vulnerabilidad alimentaria y las tipologías de comunidades y familias; además, ha facilitado el diseño de programas de desarrollo más justos que toman en consideración la situación real de los beneficiarios.

Debido a la vulnerabilidad de las prácticas agrícolas, la consecución de la seguridad alimentaria rural es un asunto complejo que depende de muchos factores que no son controlados por el hombre. El acceso a los recursos naturales - y su uso adecuado - son esenciales aun cuando no signifiquen necesariamente el logro de la seguridad alimentaria.

El parámetro de acceso, que da la medida primordial de la seguridad alimentaria, comprende tanto el acceso a los recursos naturales (tierra y agua) como a los alimentos. El acceso a estos últimos está determinado por los ingresos y es consecuencia del uso de los recursos naturales.

La experiencia en el campo ha permitido a las familias adoptar estrategias de reducción de los riesgos, por ejemplo, el trabajo no agrícola, que proporciona ingresos complementarios para la adquisición de alimentos cuando las cosechas son malas.

Los indicadores sociales como la educación y la capacitación son fundamentales para el estudio de la seguridad alimentaria. Para los grupos-objetivo, la formación que proporciona la escuela básica debe comprender, además de las asignaturas habituales, la educación ambiental y la educación en alimentación y nutrición. Para los técnicos u otros agentes cuya visión del desarrollo rural suele ser meramente productivista, la educación en seguridad alimentaria es igualmente imprescindible.

BIBLIOGRAFÍA

Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA). 2000. Instructivo para el levantamiento biofísico y socioeconómico en micro cuencas. San Salvador, El Salvador.

FAO. 2000. Manual para el diseño e implementación de un sistema de información para la seguridad alimentaria y alerta temprana. Roma.

Groppo, P. 2005. Ordenamiento territorial participativo y negociado. Roma, FAO.

Guillén Dordelly, L.E., Mijares, C. y Van Wambeke, J. 2004. Una visión sistémica de la seguridad alimentaria. Ponencia presentada en el Congreso Internacional de Nutrición, Caracas, Venezuela, octubre de 2004.

From land-use management to food security

This article proposes the integrated and systematic participatory analysis of food security in a given area as a means of designing a practical and rapid programme and policy decision-making tool. Programmes and policies should consider the human and physical conditions and ensure the equity and sustainability of microcatchment areas in which water is the key resource. The study first looks at the prevailing food situation, examining the local geography, the relationship between population and environment, and access to water and land as preliminary indicators of food vulnerability. It then considers food security and access to and use of agricultural resources from an environmental, social and economic perspective. Finally, it assesses food security on the basis of access and availability, regularity of supply and food safety. These parameters then serve to gauge food vulnerability in an area according to zones, population groups or communities and households.

De l'aménagement du territoire à la sécurité alimentaire

Le présent article propose une analyse participative intégrale et systématique de la sécurité alimentaire dans un territoire donné afin de mettre au point un instrument pratique, rapide et simple facilitant la prise de décisions concernant les programmes et les politiques. Les programmes et les politiques devraient tenir compte de la spécificité des ressources humaines et du territoire et garantir l'équité et la durabilité dans une zone de microbassin versant où l'eau est la principale ressource pour la préservation de la vie. La situation alimentaire dans le territoire est le premier élément analysé dans cette étude qui procède par approximations successives. Elle examine ensuite les caractéristiques géographiques du territoire, les relations entre l'être humain et son environnement et l'accès aux ressources en eaux et en terres, pris comme indicateurs initiaux de la vulnérabilité alimentaire. Elle aborde ensuite la sécurité alimentaire et l'accès aux ressources agricoles (et leur utilisation) du point de vue écologique, social et économique, puis se penche sur les paramètres qui mesurent la sécurité alimentaire: accès, disponibilité, régularité des approvisionnements et sécurité sanitaire des aliments. Sur la base de ces paramètres, l'étude évalue enfin le degré de vulnérabilité alimentaire du territoire en fonction des zones, des groupes/communautés et des familles vulnérables.


[24] «Existe seguridad alimentaria cuando todas las personas tienen en todo momento acceso físico y económico a sufi cientes alimentos, inocuos y nutritivos, para satisfacer sus necesidades alimentarias y sus preferencias en cuanto a los alimentos a fi n de llevar una vida activa y sana.» (FAO, 2000).
[25] El territorio se defi ne como el espacio en el cual se desarrollan las relaciones sociales; el territorio -y su geografía- están determinados histórica y socialmente.
[26] El acceso a la tierra es un factor fundamental de la erradicación de la inseguridad alimentaria y de la pobreza rural, y fue reconocido como tal por los jefes de estado y gobierno en la Cumbre Mundial sobre la Alimentación. En el Plan de la Acción de la Cumbre se observó que la mayoría de las poblaciones pobres tiene un acceso inadecuado a la tierra y a otros medios de producción.
[27] El enfoque histórico aplicado al análisis del sistema territorial, defi nido como «modalidad de organización social en función de [la] relación [del grupo social] con el medio ambiente», es fundamental para conocer la visión de los agentes del mundo en que viven y sus estrategias de supervivencia. El objetivo del enfoque histórico es comprender las causas actuales de la problemática territorial, del acceso y uso de la tierra y de los demás recursos naturales, y las tendencias futuras. El estudio histórico permitirá sentar las bases de posibles soluciones e intervenciones que deben discutirse en una mesa de negociación.
[28] La zonifi cación por elementos fi siográfi cos resultó exitosa en un proyecto realizado en El Salvador. Véase Agricultura sostenible en zonas de laderas. Proyecto FAO/CENTA/Países Bajos GCP/ELS/005/NET, 2002, por J. Van Wambeke.
[29] La inseguridad alimentaria tiene múltiples causas. Existe inseguridad alimentaria cuando las personas están desnutridas porque no disponen los productos necesarios para la producción de alimentos, o cuando carecen de acceso social o económico a los alimentos, o cuando el consumo de alimentos es insufi ciente. La malnutrición puede ser tanto por défi cit como por exceso de consumo de alimentos.
[30] Estas cifras equivalen a la ingesta mínima de alimentos determinada por la FAO. Las personas expuestas a la inseguridad alimentaria son aquellas cuya ingesta de alimentos está por debajo de sus necesidades calóricas (energéticas) mínimas. Se encuentran asimismo expuestas a la inseguridad alimentaria las personas que presentan trastornos físicos causados por carencias energéticas o de nutrientes que resultan de una alimentación insufi ciente o desequilibrada o de la incapacidad del organismo de utilizar efi cazmente los alimentos a causa de una infección o enfermedad.
[31] El nivel de vulnerabilidad de una persona, hogar o grupo está determinado por su exposición a los factores de riesgo y su capacidad para afrontar o resistir situaciones problemáticas.

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