| CFS:2001/Inf.9
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COMITÉ DE SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL |
27º período de sesiones |
Roma, 28 de mayo - 1º de junio de 2001 |
INFORME SOBRE EL DESARROLLO DEL SICIAV |
1. Hace ocho meses, la Secretaría del Grupo de Trabajo Interinstitucional (GTI) sobre el SICIAV informó al CSA (documento CFS:2000/6) sobre los primeros dos años y medio de ejecución del programa internacional del SICIAV. Este documento es el segundo de los informes anuales sobre los progresos realizados, que solicitó el Comité en su 25º período de sesiones de 1999. En él, además de describir las medidas adoptadas durante los últimos ocho meses transcurridos desde el pasado informe, centraremos la atención en las limitaciones y dificultades que se han encontrado a nivel nacional e internacional para lograr los objetivos de colaboración de la iniciativa del SICIAV. Se hace esto para formular propuestas concretas con vistas al fortalecimiento del programa, a fin de poder aportar la máxima contribución en el logro del objetivo de reducir en 2015 el número de personas subnutridas.
2. La Secretaría del GTI y de las distintas organizaciones que forman parte de él han patrocinado un gran número de actividades en los países, tanto para diagnosticar la situación actual de los sistemas nacionales de información, como para contribuir al desarrollo de estrategias operativas sobre la forma en que tales sistemas pueden ayudar más eficazmente a los grupos de población vulnerables y con inseguridad alimentaria. Varios países han comenzado por iniciativa propia a promover los principios del SICIAV a nivel nacional y subnacional. Se destacan a continuación las principales novedades registradas desde el último informe:
3. Los miembros del GTI han producido durante los últimos ocho meses varias directrices y manuales que pueden ser útiles para aplicar las iniciativas de los SICIAV nacionales y otras iniciativas. Además, el mismo GTI ha encargado la preparación de varias guías generales con objeto de completar las Directrices para el establecimiento de SICIAV nacionales, que se publicaron originalmente en 1998. Tales son:
- Directrices para incorporar consideraciones nutricionales en los planes y programas de investigación agrícola,
- Incorporación de consideraciones nutricionales en los planes y programas de desarrollo: Resumen para los responsables de las políticas y los planificadores de programas,
- Orientación selectiva del mejoramiento nutricional.
Continúan en 2001 los trabajos normativos y la preparación de nuevos informes, mapas y perfiles, basándose en los últimos avances metodológicos. Los hechos más salientes son:
4. La Secretaría del GTI ha apoyado varias actividades de sensibilización desde septiembre de 2000, principalmente mediante presentaciones y debates sobre la iniciativa del SICIAV en las reuniones regionales convocadas por varios miembros del GTI para finalidades conexas. La FAO, en su papel de catalizadora de la iniciativa del SICIAV, ha apoyado también las actividades de sensibilización a nivel nacional en varios países. Los datos más importantes de estas actividades son:
África: En septiembre de 2000, la SADC organizó con mucho éxito un programa de capacitación sobre evaluación de la vulnerabilidad para personal gubernamental y de organismos de 11 de los 12 miembros de la región SADC, con apoyo, entre otros, de la FAO, USAID FEWS-NET, PMA, y SC del Reino Unido. La FAO y la OMS organizaron conjuntamente dos importantes reuniones sobre la ejecución de planes de acción nacionales para la seguridad alimentaria y la nutrición: la primera en Burkina Faso, en octubre de 2000, para países francófonos de África, y la segunda en Zimbabwe, en marzo de 2001, para países anglófonos de África. La iniciativa del SICIAV se está integrando en el proceso de ejecución de los citados planes de acción nacionales como enfoque general de sistemas de información para la vigilancia y seguimiento de la nutrición.
Asia: La Consulta anual regional de expertos de la Red de Alimentación y Nutrición para Asia y el Pacífico (ANFN) sobre el seguimiento del establecimiento de SICIAV nacionales se celebró en Tailandia en noviembre de 2000. Asistieron a ella 19 participantes de 12 países, cada uno de los cuales informó sobre las medidas adoptadas durante el pasado año para establecer o fortalecer los SICIAV nacionales. Se unieron a los participantes especialistas en composición de alimentos, nutrición de poblaciones indígenas y biodiversidad de las plantas, así como invitados especiales de la OMS y el PMA.
América Central y el Caribe: En respuesta a la petición hecha el año pasado en el CSA de que se prestara más atención a la introducción del SICIAV en la región de América Latina y el Caribe, se ha realizado en América Central y el Caribe un programa de visitas y presentaciones sobre el SICIAV del que se ha encargado un equipo multidisciplinario enviado por la Oficina Regional de la FAO en Santiago. Esto ha contribuido a incrementar la sensibilización sobre los objetivos de la iniciativa del SICIAV y el apoyo que puede aportar a los países en sus esfuerzos por reducir la pobreza y la malnutrición de forma sostenible.
5. Durante 2000, el PNUD prestó apoyo financiero a la Secretaría del SICIAV para la publicación de documentos fundamentales, especialmente para imprimir las Directrices para los SICIAV nacionales: Antecedentes y principios, reimprimir folletos del SICIAV y realizar una importante labor de actualización del sitio en Internet del GTI sobre el SICIAV. La Secretaría del GTI ha distribuido el boletín trimestral del SICIAV y otros materiales por medio de una lista de correo electrónico. En junio se examinará en la Quinta reunión del GTI un borrador de la carpeta de iniciación del SICIAV.
6. En varios países se están realizando actividades para mejorar los actuales sistemas de información en consonancia con los objetivos del SICIAV. Los hechos más salientes de algunas de estas actividades son:
7. Como se informó el año pasado, se acepta unánimemente que una base de datos mundial del SICIAV que contenga una amplia variedad de indicadores resumidos a nivel nacional y enlaces por Internet con datos subnacionales más detallados sea un producto deseable interinstitucional de la iniciativa del SICIAV. Los conceptos implicados en este proyecto de base de datos mundial distribuida fueron examinados por un subgrupo especializado del GTI. Se ha trabajado en dos sectores: (a) el desarrollo del Sistema de base de datos de indicadores básicos (SDIB); y (b) apoyo a un esfuerzo de colaboración entre organismos más limitado, la iniciativa de una Base de datos sobre la nutrición africana (BDNA).
8. El SDIB, que están desarrollando el WAICENT de la FAO y otros asociados del GTI, será el enfoque que se empleará para desarrollar la base de datos mundial. Proporcionará una base de datos internacionalmente comparable de indicadores básicos. Estará basado en Internet, pero su arquitectura se distribuirá también en un CD-ROM (para zonas con mala o ninguna conexión con Internet). Los países u organizaciones regionales podrán establecer sus propias versiones del SDIB, si lo desean. Estos sistemas permitirán alimentar el SDIB mundial o actuar como una subserie dentro de la red del SDIB. El SDIB proporcionará apoyo en distintos idiomas, por lo que cada país podrá adaptar el sistema a los usos locales.
9. Varios miembros del GTI (la FAO, el Banco Mundial, la UNESCO y el UNICEF) han prestado apoyo a la BDNA, que se desarrolló paralelamente al SICIAV, con apoyo financiero inicial del Gobierno de Italia y el Banco Mundial. La BDNA consta de 26 indicadores aproximadamente que se siguen anualmente, solamente para países del África Subsahariana. Desde mediados de 1999 esta base de datos realizada con el esfuerzo de varios organismos está disponible en Internet en la dirección www.africanutrition.net. La FAO financió la actualización de esta base de datos para el 2000; el Banco Mundial va a sufragar los modestos costos de mantenimiento en 2001. El SDIB aprovechará las lecciones aprendidas de la experiencia de la BDNA y ampliará la cobertura para incluir más organismos asociados, más categorías de indicadores y todos los países en desarrollo.
10. En abril de 2001, se celebró en Nairobi, Kenya, un taller de un día para evaluar las lecciones aprendidas a mitad de camino en relación con la BDNA y decidir la forma en que este experimento más especializado de cooperación de base de datos interorganismos para el África Subsahariana se relacionaría con el SDIB mundial. Este último, aunque es semejante a la BDNA, ampliaría su cobertura a todos los países y tendría una gama más amplia de temas de presentación. Se decidió que la BDNA siguiera ofreciendo análisis especializados para el África Subsahariana y recibiera sus datos del SDIB mundial una vez que este empezara a funcionar. Con el fin de ir progresando hacia el pleno funcionamiento del SDIB mundial, se recomendó que se buscara financiación de proyectos para ayudar a resolver los problemas de la colaboración entre los organismos, establecer normas para armonizar las series de datos, y terminar la programación necesaria para la difusión en Internet de una base de datos mundial.
11. Con apoyo financiero del Gobierno del Japón, el proyecto del SICIAV de Asia ha seguido desarrollando el instrumento de gestión, participación y análisis de datos en Internet, denominado el "Sistema de datos de indicadores básicos de Asia (SDIB-Asia)". Este sistema utiliza las series de datos digitales producidas por el Sistema mundial de información y alerta (SMIA-FAO) y la tecnología de cartografía del Sistema de cartografía de indicadores básicos (SCIB) (véase más adelante el párrafo 15). El SDIB-Asia permite a los usuarios acceder rápidamente a la información relacionada con el SICIAV en forma de mapas, imágenes, gráficos, cuadros y texto, que se mantiene en una única base de datos. Permite también a los usuarios explorar y buscar los indicadores fundamentales del SICIAV, que son decisivos para comprender las situaciones de inseguridad alimentaria y vulnerabilidad en Asia.
12. El prototipo del SDIB-Asia se demostró en la "Conferencia Regional de la FAO para Asia y el Pacífico" celebrada en Japón en agosto - septiembre de 2000, así como en una "Consulta regional de expertos de la red de Asia y el Pacífico para la alimentación y la nutrición sobre el seguimiento del establecimiento del SICIAV", organizada por la Oficina Regional de la FAO en Bangkok en noviembre de 2000. La retroinformación obtenida de los participantes en la conferencia y la consulta ayudó al proyecto a perfeccionar ulteriormente el sistema. Las nuevas tecnologías de bases de datos y cartografía desarrolladas por el SDIB-Asia contribuirán al establecimiento de bases de datos del SICIAV en los países y al "SDIB Mundial" arriba expuesto.
13. Como parte de su apoyo al establecimiento de SICIAV nacionales, el proyecto enviará misiones de iniciación del SICIAV a determinados países de Asia durante este año. Las misiones (a) realizarán evaluaciones rápidas de las necesidades de los usuarios, (b) identificarán sistemas existentes y planificados de información pertinentes al SICIAV, (c) definirán los indicadores decisivos y datos necesarios para evaluar la inseguridad alimentaria y la vulnerabilidad, y (d) ayudarán a los países a preparar planes de trabajo de SICIAV nacionales proporcionando recomendaciones y estrategias específicas para el desarrollo y la institucionalización de SICIAV nacionales. El proyecto ensayará y evaluará también la utilidad de las tecnologías del SDIB-Asia para el análisis de la vulnerabilidad a nivel nacional y subnacional en esos países.
14. Con respecto a la inseguridad alimentaria aguda causada por catástrofes naturales, el proyecto colabora con el Centro de Investigaciones sobre la Epidemiología de las Catástrofes (CRED) de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica. El esfuerzo conjunto tiene por objeto georeferenciar más de 12 000 catástrofes naturales y tecnológicas ocurridas en el mundo desde 1900 hasta el presente, lo que se conoce como la "Base de datos de emergencias (EM-DAT)." El proyecto ha georeferenciado hasta ahora en total 992 catástrofes nacionales y 2422 catástrofes provinciales ocurridas en el período de 1990 a 1999. Estos datos georeferenciados se utilizarán para preparar mapas de frecuencia y de casos de catástrofes de distintos tipos en Asia. Podrán utilizarse también para evaluar la vulnerabilidad nacional y subnacional a peligros naturales que pueden provocar inseguridad alimentaria aguda y transitoria. En la Conferencia de Asia-Pacífico sobre alerta, prevención, preparación y gestión de catástrofes en la alimentación y la agricultura, que se celebrará en Chiang Mai, Tailandia, en junio de 2001, se presentará un informe provisional sobre esta labor.
15. Continúan realizándose progresos en el desarrollo del Sistema de cartografía de indicadores básicos (SICB), para responder a la dimensión de cartografía del SICIAV. Se tiene intención de que el SICB sea un "visor de mapas", empleado para compartir los datos y buscar información. Si se han puesto los límites de cualquier nivel de unidad geográfica en el formato estándar del SIG, el SICB puede mostrar los datos como mapas, cuadros y gráficos. Es un complemento fácil de utilizar para los sistemas SIG que son más complicados y costosos. El SICB se distribuirá gratuitamente a los asociados a nivel nacional e internacional. Su finalidad principal es fomentar una utilización mayor de los mapas en todos los niveles en la lucha contra la inseguridad alimentaria. Utilizando la recién publicada versión 1.0 del programa informático, la capacitación en el SICB comenzará en francés y en inglés en los próximos 12 meses como parte de un proyecto de iniciación de los SICIAV nacionales financiado por la CE en, al menos, 5 ó 6 países y se demostrará en talleres regionales.
16 Como nueva iniciativa en este sector, la FAO tiene la intención de celebrar una Conferencia científica internacional del SICIAV sobre la medición y evaluación de la privación de alimentos y la desnutrición, para la que la principal financiación provendrá del componente de seguridad alimentaria del Programa de asociación FAO-Países Bajos (FNPP, mencionado en el párrafo 3). Los objetivos principales serán comparar y contrastar los principales métodos alternativos que se aplican actualmente para estimar la privación de alimentos o la desnutrición, los cuales se basan en:
La conferencia se celebrará en 2002 y servirá para facilitar una orientación detallada a los países acerca de la utilización de estos métodos individualmente o, con mayor probabilidad, en combinación, para diagnosticar mejor los resultados y conseguir orientar más selectivamente los recursos hacia aquellos que los necesitan.
17. El GTI-SICIAV ha subrayado repetidas veces que, como la finalidad principal de un SICIAV nacional es satisfacer las necesidades de información de los usuarios del país, la decisión sobre la selección de indicadores que han de atenderse debería corresponder fundamentalmente a cada país. Para ayudar a los países a hacer esta selección, el GTI ha elaborado un menú de indicadores dentro de los cuales poder elegir. Se han organizado los indicadores en módulos por temas, basados en los distintos factores estructurales que causan inseguridad alimentaria y vulnerabilidad, tal como se presenta en el diagrama de flujo incluido en las Directrices sobre los SICIAV nacionales (CFS:98/5). Esta estructura modular para organizar datos sobre indicadores pertinentes se utilizará también para elaborar el Sistema de datos de indicadores básicos (SDIB).
18. No obstante, se reconoce que es necesario establecer una pequeña serie de indicadores básicos que son comunes a todos los SICIAV nacionales, con el fin de facilitar la comparación entre países al examinar los progresos realizados a nivel mundial. El CSA examinará en su período de sesiones la aprobación de una lista de indicadores que son especialmente pertinentes para el seguimiento anual de las situaciones mundiales de la seguridad alimentaria (véase CFS:2001/2). Más adelante, en junio, el GTI podría añadir unos pocos indicadores adicionales tomados de su menú modular, en consonancia con la serie de indicadores de resultados establecidos en el Marco de Asistencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDAF) y la lista de indicadores para el seguimiento del logro de las Metas para el Desarrollo en el Milenio que se están elaborando actualmente.
19. A pesar del creciente reconocimiento de los objetivos del SICIAV y de la existencia de indicaciones positivas de los progresos en su consecución (señalados en la Sección II, supra), los progresos en la aplicación del SICIAV en los países han sido lentos, salvo pocas excepciones. Hay varias razones de ello, ninguna de las cuales representa un obstáculo insuperable, a condición de que exista la voluntad de afrontar los problemas subyacentes. Se resumen a continuación los principales obstáculos.
20. La demanda de una información intersectorial mejor y más coordinada y de una cartografía sobre la seguridad alimentaria seguirá procediendo principalmente de los países que están estableciendo sus propios programas de políticas de desarrollo. Sin embargo, especialmente en los países más pobres, la demanda parece proceder más bien de los organismos que colaboran en el desarrollo, en los cuales los responsables de las decisiones tienen más recursos para asignar y mayores necesidades de información que las instituciones nacionales.
21. En cuanto a la oferta, como cada organismo de desarrollo tiende a invertir en la compilación y difusión de la información que sirve solamente para satisfacer sus propias necesidades, existe a menudo una superposición y duplicación de esfuerzos. Frecuentemente se observa en los países más pobres una superposición de información, junto con series de datos incompletas o de mala calidad y la incapacidad de los responsables de las decisiones para utilizar la información disponible a fin de mejorar su planificación y sus decisiones sobre la asignación de los recursos.
22. Si los principales organismos de las Naciones Unidas y bilaterales y las ONG dan claras instrucciones a su personal de campo para que colabore entre sí y con las dependencias coordinadoras de los gobiernos nacionales, y para que informe sobre los progresos realizados en su mandato, se podrían resolver la mayoría de los problemas indicados. En algunos países, el personal técnico se halla ya empeñado en esfuerzos de colaboración muy útiles, desplegados la mayoría de las veces entre organismos donantes y técnicos y, a veces, también en conjunción con las dependencias o estructuras de coordinación gubernamentales. No obstante, tales esfuerzos no son a veces sostenibles a la larga porque no incluyen la participación del gobierno anfitrión y no están apoyados o alentados por incentivos institucionales.
23. El logro de la sostenibilidad institucional, tanto en lo que respecta a los sistemas de alerta y al seguimiento de los objetivos internacionales, como en lo relativo a los sistemas más completos que incorporan normas para los SICIAV nacionales, es una tarea especialmente urgente. A lo largo de los últimos 15 a 20 años, se han creado en los países más pobres una variedad de sistemas de información sobre la seguridad alimentaria, que constituyen los predecesores institucionales de los modelos que el GTI está proponiendo para el SICIAV. Sin embargo, muchos de los sistemas predecesores han resultado insostenibles después de que terminara la financiación de los proyectos.
24. El personal fundamental del proyecto (especialistas en bases de datos y SIG, analistas de información, etc.) tiene frecuentemente capacidades técnicas que le ofrecen excelentes oportunidades de empleo en el extremo superior del mercado nacional del trabajo. Los bajos sueldos de los funcionarios nacionales, incluso cuando se pagan regularmente, frecuentemente no son suficientes para retener a este personal especializado que en muchos casos ha recibido sueldos superiores o primas salariales cuando ha trabajado en un proyecto financiado. En el contexto de la reforma gubernamental y de las necesidades que compiten para la financiación de programas sociales de alta prioridad para lograr las metas del Milenio, es posible que no haya perspectivas inmediatas de que los países pobres puedan o elijan financiar los costos de funcionamiento de los sistemas de información que se han establecido con fondos exteriores.
25. Los donantes y los organismos técnicos no siempre tienen expectativas realistas sobre lo que se necesita para mantener sistemas creíbles de información en países más pobres. La expectativa uniforme del donante, de que los países en desarrollo, independientemente de sus ingresos per cápita o de los ingresos del gobierno per cápita, sean capaces de sufragar los costos de funcionamiento de una serie estándar de servicios de información relativamente especializados, no parece tener ningún realismo con respecto a los países más pobres. Es ésta una cuestión que debe estudiarse atentamente en el contexto de los programas de los donantes para apoyar los esfuerzos nacionales encaminados a reducir la pobreza y la subnutrición.
26. El gran potencial del SICIAV es que se trata de un programa de muchos organismos que puede realizarse en colaboración con los países. El proceso de reforma en el ámbito de los sistemas de las Naciones Unidas y Bretton Woods está empezando a dar al personal de los organismos más incentivos para colaborar en la labor de sistemas de información. El atractivo lógico del SICIAV es fuerte, especialmente en una época en que se reducen enormemente los presupuestos de la asistencia para el desarrollo. Sin embargo, aunque la colaboración entre organismos al nivel técnico ha procedido satisfactoriamente, el empeño decisivo de parte de las administraciones superiores no ha sido uniforme en todos los asociados en el GTI.
27. Para alcanzar el nivel de esfuerzo de colaboración necesario para lograr en 2015 el objetivo de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, es necesario que las sedes de los organismos den instrucciones claras y ofrezcan mejores incentivos a su personal de campo para que colabore. También se necesitan esfuerzos de movilización de los recursos de apoyo, si bien en muchos casos la cantidad adicional necesaria será bastante limitada, ya que frecuentemente se dispone de recursos sustanciales en el país, pero se utilizan de forma descoordinada.
28. La celebración de la CMA:cad que tendrá lugar durante la Conferencia bienal de la FAO en noviembre de 2001, ofrece la oportunidad a los estados miembros y a los organismos de reafirmar su compromiso en la iniciativa del SICIAV e incrementar sus esfuerzos para ofrecer los beneficios de una mejor información a los responsables de las decisiones en todos los niveles, lo antes posible.
29. La mayor concentración de oportunidades para realizar trabajos de desarrollo de sistemas de información se halla en el África Subsahariana. Esto se debe a que existe en esta zona un gran número de países con niveles absolutamente bajos de ingresos, una elevada presencia de organismos donantes y técnicos, la realización de numerosos programas conexos por parte de los miembros del GTI, y una escasa capacidad del gobierno nacional (ya que casi han cesado de funcionar incluso los sistemas estadísticos normales de agricultura y salud). Sería conveniente centrar especialmente los esfuerzos renovados del GTI en el desarrollo de la iniciativa del SICIAV en esta región, teniendo en cuenta las proyecciones que indican que va a continuar en ella la elevada incidencia de la subnutrición.
30. Mediante la incorporación de métodos de análisis de los medios de subsistencia, los esfuerzos sobre sistemas de información apoyados por la iniciativa del SICIAV pueden vincularse estrechamente y contribuir con iniciativas conexas encaminadas a establecer dependencias nacionales de seguimiento (especialmente las patrocinadas por el PNUD, los bancos y la OCDE para el seguimiento de los objetivos internacionales de desarrollo, las estrategias para la reducción de la pobreza y la iniciativa del sistema de evaluación común para los países y del Marco de asistencia de las Naciones Unidas para el desarrollo). Esto significa que los esfuerzos que anteriormente eran independientes se pueden al menos armonizar, si no fundir, con el objetivo principal de desarrollar una capacidad nacional sostenible.
31. La Secretaría tiene intención de señalar estos asuntos a la atención del GTI, que celebrará su Quinta reunión anual en Roma del 26 al 28 de junio de este año, y propondrá la convocación de una reunión de representantes de las administraciones superiores de los principales organismos del GTI a fines de este año, con objeto de examinar y resolver los problemas relacionados con los compromisos de personal y presupuesto para el SICIAV y estudiar medidas prácticas para fomentar una colaboración mayor a nivel tanto nacional como internacional. La Secretaría alentará también a los miembros del GTI a que organicen una evaluación conjunta entre los organismos sobre lo que se ha realizado en los cuatro años pasados y sobre lo que podría hacerse para fortalecer el programa.
