Capítulo III. Conclusiones y Recomendaciones

A. GENERALES

126. La evaluación confirma que el objetivo estratégico A3 sigue siendo pertinente e importante en general en cuanto prioridad organizativa de la FAO. Las catástrofes naturales y provocadas por el hombre contribuyen cada vez en mayor medida a la inseguridad alimentaria y la pobreza mundiales, especialmente en las zonas rurales. Por lo tanto, resulta plenamente apropiado que el aumento de la capacidad de recuperación y de hacer frente a las catástrofes naturales sea un aspecto importante de la labor de la Organización.

127. Los componentes abarcados por el objetivo estratégico son apropiados por cuanto responden a todos los aspectos de las emergencias, desde la preparación para afrontarlas hasta la planificación de la transición a la rehabilitación y el desarrollo, pasando por la alerta temprana, la evaluación de las necesidades y la provisión de socorro, de modo tal que se refuerce la capacidad de recuperación de la población tras futuras catástrofes. Este planteamiento global coadyuva además a la ventaja comparativa única en su género de la FAO (demostrada y potencial), consistente en que tiene capacidad en relación con todos esos componentes, y hace posible que la FAO aproveche esas ventajas para prestar asistencia a los Estados Miembros que la necesitan.

128. El cuestionario enviado a los países Miembros y los asociados confirmó la utilidad de la función de la FAO a fin de hacer frente a las emergencias y su asistencia se consideraba en general positiva (véase el anexo 1). Si bien el número relativamente reducido de respuestas limita la posibilidad de extraer conclusiones detalladas, los países calificaron la asistencia de la FAO como “satisfactoria” o “excelente “ en las cinco esferas de la labor relativa a las emergencias (la preparación, la alerta, la evaluación de las necesidades, el socorro agrícola y la planificación de la rehabilitación y la recuperación). En comparación con otros donantes, la mayoría de los países opinaron que la FAO era la mejor entidad, o comparable a otras, en lo referente a las evaluaciones de las necesidades y las operaciones de socorro, mientras que la mayoría de los encuestados consideraron que otros donantes eran mejores en lo relativo a la preparación, la alerta y la planificación de la rehabilitación y la recuperación.

129. En abstracto, todos los componentes de la estrategia son importantes. Sin embargo, la atención relativa que la FAO concede a cada uno de los componentes ha variado considerablemente y la ventaja comparativa declarada de la Organización (esto es, experiencia técnica en una amplia variedad de cuestiones y gran experiencia sobre el terreno) no se refleja de forma adecuada en la realidad. La alerta temprana es una esfera en la que la FAO lleva mucho tiempo activa y en relación con la cual su labor es muy apreciada por los Estados Miembros y la comunidad internacional, como confirmó asimismo el cuestionario. No obstante, el notable incremento del número de emergencias en los últimos años, combinado con una financiación estática (en el mejor de los casos), ha hecho que los recursos para este trabajo hayan tenido que estirarse, lo que ha hecho difícil mantener el mismo alto nivel de calidad.

130. La financiación de las operaciones de socorro agrícola se ha incrementado enormemente en los últimos años, paralelamente al incremento del número de emergencias y al aumento de la confianza de los donantes en la capacidad de la FAO en esta esfera. Dentro de la FAO, se ha creado una nueva dirección (la Dirección de Operaciones de Emergencia y Rehabilitación, o TCE) encargada de ejecutar operaciones de socorro agrícola en respuesta a las demandas de asistencia de este tipo. En conjunto los proyectos de socorro agrícola han arrojado resultados satisfactorios, como indican las evaluaciones de 70 operaciones realizadas por misiones de examen y como reflejan asimismo las respuestas de los Estados Miembros y los asociados de la FAO al cuestionario. La FAO ofrece generalmente una solución más apropiada desde el punto de vista técnico a un problema dado (por medio de los coordinadores de servicios de emergencia y de la asistencia técnica, en particular en el marco del PCT. La provisión por la FAO de coordinadores para situaciones de emergencia es un elemento único. Los coordinadores han demostrado su eficacia y son sumamente apreciados por otros asociados, lo que realza la importancia de la FAO en las grandes emergencias.

131. Sin embargo, la capacidad de la FAO para aprovechar su ventaja comparativa se ve limitada por su escasa capacidad para proporcionar insumos agrícolas con rapidez. Este punto débil obedece a varios factores indicados en el informe, entre los que figuran ciertos procedimientos administrativos y financieros internos que la propia FAO puede mejorar.

132. Otros componentes de la estrategia han recibido mucha menos atención en la labor de la FAO. Las actividades encaminadas a promover la preparación para las catástrofes (con la excepción del apoyo prestado a la alerta temprana) han sido más bien escasas y han estado dispersas. No obstante, se ha reconocido este hecho y la Organización está buscando formas de mejorar la situación, especialmente por medio del mecanismo basado en la EPAI sobre rehabilitación (EPAI-REHAB). Las actividades encaminadas a promover la transición efectiva del socorro a la rehabilitación y el desarrollo han sido también más bien escasas. Hasta el momento, no hay ejemplos de situaciones en que la FAO haya desempeñado un papel decisivo en esa transición y existen importantes cuestiones institucionales que es preciso resolver.

133. En conclusión, el objetivo estratégico A3 es pertinente y apropiado, ya que proporciona amplia orientación respecto de las esferas prioritarias para la acción de la FAO. Obviamente su ejecución efectiva exige el desarrollo gradual (por medio del proceso del PPM) de una mayor planificación y programación operacionales a fin de que pueda alcanzarse un conjunto de resultados prioritarios. Hasta la fecha, las cuatro esferas constitutivas del objetivo se han abordado de modo irregular, lo que indica la necesidad de fomentar ese desarrollo y la existencia de un margen considerable para mejorar el aprovechamiento de la experiencia y la capacidad técnica de la Organización en apoyo del objetivo estratégico. Las recomendaciones siguientes reflejan estas consideraciones.

B. INTEGRAR EL TRABAJO RELACIONADO CON LAS EMERGENCIAS EN LA LABOR GENERAL DE LA FAO

134. La evaluación indica la necesidad de integrar en mayor medida el trabajo relacionado con las emergencias en la labor general, especialmente en la de las direcciones técnicas. En el contexto del PPM, la EPAI-REHAB representa el mecanismo lógico para una mayor incorporación e integración del trabajo relacionado con las emergencias por parte de las dependencias técnicas fundamentales y, aunque se ha comenzado con buen pie, es preciso intensificar aún más estos esfuerzos.

135. Recomendación 1: a) las direcciones técnicas competentes deberían programar y presupuestar productos relacionados específicamente con las emergencias, a partir del próximo Programa de Labores y Presupuesto (2004-2005), en particular en las esferas relacionadas con el objetivo estratégico A3 que han recibido hasta ahora una atención insuficiente (por ejemplo, la preparación); b) deberían revisarse las funciones de las dependencias que participan en el GCSU y en la EPAI-REHAB para garantizar la definición clara de su papel en las emergencias. En las direcciones técnicas fundamentales para la labor relativa a las emergencias, debería nombrarse un coordinador con un mandato apropiado para encargarse específicamente de las cuestiones relacionadas con las emergencias.

136. Recomendación 2: la FAO debería ayudar a integrar un enfoque sistemático para ocuparse de los países que están especialmente expuestos a las catástrofes naturales y, por lo tanto, debería asegurarse de que la gestión de las catástrofes sea una consideración básica en todas las actividades de desarrollo agrícola en esos países. En particular, debería reforzarse (mediante la sensibilización y la formación) la capacidad de las oficinas de la FAO en los países, y de las subdirecciones de asistencia para las políticas de las oficinas regionales, para incorporar este aspecto en los programas y proyectos bajo su control.

C. PREPARACIÓN

137. Aunque la FAO tradicionalmente ha estado, y sigue estando, activa en la esfera de la alerta por medio del SMIA y apoyo a sistemas nacionales y regionales, tan sólo se han llevado a cabo unas pocas actividades en relación con otros componentes de la preparación. Por lo que se refiere a la provisión de apoyo para la elaboración de planes globales de preparación en los planos regional y nacional, la FAO ha conseguido resultados mixtos, a juzgar por las experiencias sobre el terreno examinadas. Evidentemente, el PCT no es una fuente apropiada para este tipo de apoyo, que exige componentes importantes de creación de capacidad institucional que no se ajustan fácilmente a las limitaciones presupuestarias y de tiempo del PCT.

138. La FAO dispone de ventajas comparativas en esferas clave relacionadas con la preparación. En particular, tiene una considerable ventaja comparativa en el ámbito de la información sobre la alimentación y la agricultura para la preparación. Sin embargo, es importante centrarse en las esferas prioritarias y refinarlas en el contexto del PPM.

139. Recomendación 3: a) aprovechando los puntos fuertes concretos de la FAO, las actividades prioritarias en el futuro deberían revisarse y exponerse en una Estrategia y actividades prioritarias de la FAO para la preparación. Esta labor podría llevarse a cabo bajo la dirección del GCSU y de los miembros de la EPAI-REHAB, una vez que éstos hayan acordado un plan de trabajo y refinado ulteriormente las actividades prioritarias para la FAO, especialmente en el campo de la información. Un documento de ese tipo ayudaría a aclarar el papel de la FAO en relación con otras organizaciones en este ámbito, facilitaría las actividades de promoción entre los donantes y los Estados Miembros de la FAO en general y promovería la coordinación de las consignaciones de recursos a las distintas dependencias de la FAO; b) respecto de cada producto establecido en relación con las actividades previstas en el PPM, debería asignarse claramente la responsabilidad a una dependencia principal.

140. Recomendación 4: la FAO debería proseguir y reforzar su labor en materia de información para la alerta, evaluación de las consecuencias, evaluación de las necesidades y preparación de respuestas apropiadas en las siguientes esferas:

Alerta temprana

Ø   Sobre la base de las directrices vigentes, elaborar un manual práctico y útil para el personal de campo y los consultores que lleven a cabo las MECSA.

Ø   Tras la conclusión de conflictos o en casos en los que las instituciones públicas se hayan desmoronado, proporcionar capacitación sobre la recopilación periódica y el análisis de información, en una etapa muy temprana, a los funcionarios encargados de las actividades de emergencia sobre el terreno (esto es, la DCSE, la representación de la FAO).

Ø   En los países expuestos a catástrofes, reforzar la elaboración de sistemas de alerta temprana integrando la dimensión relativa a la seguridad alimentaria de los hogares y el análisis de la vulnerabilidad. En este sentido, la labor realizada por la FAO en relación con el SICIAV debería ser de utilidad. El objetivo debería ser la creación de sistemas locales de vigilancia de la seguridad alimentaria con enfoques y metodologías de costo reducido, utilizando en la medida de lo posible estructuras ya existentes. Para ello, la FAO deberá integrar la dimensión relativa a los desastres en la labor que lleva a cabo en el marco del SICIAV.

Evaluación de las consecuencias y las necesidades

Ø   La FAO debería consolidar el rico acervo de información en una base de datos para facilitar la evaluación de las consecuencias y las necesidades en futuras catástrofes. Dicha base de datos consolidada debería incluir información sobre aspectos logísticos, distribución de la población, seguridad alimentaria, recursos naturales, historia y consecuencias de las catástrofes, etc. Asimismo debería tener en cuenta las iniciativas pertinentes en curso, como el sistema llamado GeoNetwork (datos sobre los riesgos para la agricultura y el medio ambiente) de la Organización, encaminadas a mejorar el acceso y la información. La EPAI-REHAB debería proporcionar orientación respecto de los temas que deberían incluirse en la base de datos; es posible que haya que recopilar información adicional (por ejemplo, perfiles de los sectores nacionales de semillas, incluidas las variedades efectivamente cultivadas por los agricultores). En su elaboración, debería darse prioridad a los países y las regiones más expuestos a las catástrofes.

Ø   El trabajo de la FAO en relación con la evaluación de las consecuencias y las necesidades podría mejorarse en mayor grado por medio de: i) la difusión, mediante la capacitación y el ensayo en los países, de las directrices del programa de diagnóstico rápido de catástrofes agrícolas (RADAR) preparadas por el Servicio del Medio Ambiente y los Recursos Naturales (SDRN); y ii) la preparación de directrices para la realización de evaluaciones rápidas sobre el terreno en los países en los que no se dispone por lo general de imágenes obtenidas por satélites y técnicas de información geográfica. Estas directrices se dirigirían a los profesionales del desarrollo (personal de campo de la FAO, consultores nacionales), y el personal y los consultores podrían recibir capacitación en la materia en las oficinas regionales y subregionales.

Información para diseñar las intervenciones

Ø   En relación con el programa del SICIAV, debería prestarse mayor atención a los aspectos de los desastres y las crisis relacionados con la inseguridad alimentaria y la vulnerabilidad. A este respecto, debería seguirse de cerca la interesante experiencia de la Dependencia de Evaluación de la Seguridad Alimentaria (FSAU) en Somalia con objeto de extraer enseñanzas esenciales para situaciones similares. Además, es preciso establecer una mayor sinergia entre las actividades que actualmente se llevan a cabo en relación con el proyecto financiado por la Comunidad Europea relativo a los SAIA en urgencias complejas y el SICIAV.

D. SOCORRO AGRÍCOLA

141. La evaluación reveló que, si bien algunas intervenciones se realizaron de forma tempestiva, en muchos casos los insumos no se distribuyeron a tiempo para la campaña agrícola prevista. En algunas ocasiones los retrasos escapaban al control de la FAO (por ejemplo, peticiones de asistencia tardías, o respuesta tardía de los donantes). Sin embargo, los largos procedimientos de la FAO eran también un factor que contribuía a ello. Ésta fue una crítica común, confirmada por el cuestionario que se envió a los Estados Miembros y los asociados encuestados durante la evaluación. La norma de la FAO que limita las adquisiciones por parte de las representaciones de la FAO a un máximo de 25 000 dólares EE.UU. significa que la mayor parte de las compras para las actividades de socorro agrícola deben realizarse desde la Sede. Suponiendo que las representaciones de la FAO tengan capacidad suficiente, las compras para las actividades de socorro agrícola deberían en principio hacerlas ellas.

Adquisiciones

142. Recomendación 5: a) La FAO debería realizar un programa de capacitación para el personal de las representaciones que deberá encargarse de las adquisiciones locales. Debería concederse prioridad a los países en los que hay, o es probable que haya, un volumen mayor de asistencia de socorro agrícola. Asimismo, para las operaciones de mayor envergadura debería crearse un cuerpo de oficiales administrativos y de adquisiciones con experiencia (incluyendo, especialmente, jubilados contratados con cargo a programas de asociación) que podrían movilizarse rápidamente para realizar las actividades de compra en los países afectados. b) Deberían aumentarse, caso por caso, los límites de adquisición de las representaciones de la FAO para insumos de socorro agrícola.

Coordinadores de servicios de emergencia

143. Los coordinadores de servicios de emergencia de la FAO han resultado muy eficaces y realizado un correcto seguimiento de todos los aspectos de las actividades de suministro de socorro agrícola. No pueden nombrarse coordinadores de servicios de emergencia en cada situación urgente en la que intervenga la FAO, especialmente si las actividades a su cargo consisten en un único proyecto o dos proyectos de breve duración. Por otra parte, algunas intervenciones de socorro agrícola sufrieron retrasos a causa de un seguimiento inadecuado y de la ausencia de una responsabilidad clara respecto de la realización de determinadas tareas.

144. Recomendación 6: a) La FAO debería nombrar un coordinador de servicios de emergencia siempre que el volumen y la duración de la operación de emergencia lo justifiquen. Debería crearse un cuerpo de candidatos capacitados para realizar estas funciones. b) Los documentos de proyectos relativos a intervenciones de emergencia deberían incluir un plan de trabajo, vinculado con el calendario agrícola, en el que se especifiquen las responsabilidades en relación con la ejecución de determinadas actividades y los plazos para ello. Los documentos del proyecto deberían incluir en particular la descripción de las funciones del director nacional del proyecto.

Identificación y selección de los beneficiarios

145. Este aspecto ha resultado por lo general deficiente. Los beneficiarios previstos se describían en términos generales y, en la práctica, la selección de los beneficiarios se dejaba normalmente a discreción local. Aunque se reconoce que la identificación de los beneficiarios lleva tiempo, se han observado suficientes casos de distribución dudosa de los insumos como para justificar que se preste una mayor atención a este aspecto en actividades futuras.

146. Recomendación 7: El proceso de identificación y selección de los beneficiarios debería ser parte integral del diseño de los proyectos y la planificación de los trabajos, especialmente en el caso de intervenciones que abarquen varias campañas de producción. La identificación de los beneficiarios resulta más fácil cuando se han establecido, y explicado a las partes interesadas, los criterios de selección; el proceso de selección ha sido descentralizado al nivel más bajo posible; y diferentes instituciones e interesados directos participan en el proceso, incluidos los propios beneficiarios.

Distribución de insumos

147. En la mayoría de los proyectos se adoptó un enfoque estándar de la distribución de los insumos agrícolas. Es preciso experimentar otros enfoques que podrían ser más acertados, en particular en relación con la distribución de semillas, en cuyo caso la utilización de variedades conocidas a nivel local presenta numerosas ventajas importantes.

148. Recomendación 8: Cuando sea práctico, en los proyectos de socorro agrícola deberían utilizarse otros enfoques de la distribución de semillas, como las ferias de semillas o los vales para semillas. Para el diseño de dichos proyectos debería solicitarse asistencia a la dirección técnica (el Servicio de Semillas y Recursos Fitogenéticos, o AGPS).

Apoyo técnico

149. La calidad de las intervenciones de socorro agrícola de la FAO mejoró con la inclusión de componentes de asistencia técnica, que permite aprovechar una de las ventajas comparativas de la FAO. La asistencia técnica puede ser más eficaz en función de los costos cuando se proporciona a través de las actividades de cooperación técnica de la FAO en curso en el país. En todos los casos, no obstante, los insumos distribuidos deberían ser apropiados para los beneficiarios previstos.

150. Recomendación 9: a) Debería garantizarse la provisión de apoyo técnico en todas las intervenciones de socorro agrícola de la FAO, bien en el marco del propio proyecto o a través de otras fuentes disponibles, como proyectos de la FAO en curso en el mismo país. b) En el diseño de los proyectos, debería procurarse garantizar que las necesidades de gestión de los insumos distribuidos no superen la capacidad de los agricultores beneficiarios. Esto es particularmente importante en el caso de que se distribuyan insumos nuevos.

Socorro frente a rehabilitación

151. El suministro de insumos de socorro agrícola a los agricultores necesitados es diferente en esencia de las actividades de rehabilitación o desarrollo, que tienden a ser más complejas. Aunque estos dos elementos han sido manejados con éxito en el caso de programas de intervención en los que se disponía de suficiente tiempo para sincronizar ambos elementos, los intentos de hacerlo en un único proyecto no tuvieron éxito debido a que el plazo de ejecución relativamente corto de un único proyecto no favorecía la planificación y ejecución de ambos componentes de manera adecuada.

152. Recomendación 10: Los proyectos relativamente reducidos y orientados al socorro no deberían diseñarse o ejecutarse tratando de alcanzar objetivos de socorro y de rehabilitación al mismo tiempo.

Seguimiento y evaluación

153. El seguimiento y la evaluación son esenciales para la valoración sistemática de los resultados de la intervención. Sin embargo, raramente han sido incluidos en los proyectos de socorro agrícola, aunque esta situación ha mejorado recientemente. Algunas evaluaciones realizadas por consultores nacionales u ONG han proporcionado conclusiones y recomendaciones útiles, pero no está claro que la información haya sido utilizada siempre para la programación futura.

154. Recomendación 11: En general, debería hacerse un mayor uso de la evaluación con objeto de determinar los enfoques de las intervenciones que dan buenos resultados y de los que pueden extraerse enseñanzas. La TCE, con la ayuda del PBEE, debería elaborar un modelo sencillo y apropiado de informe de evaluación. Todos los informes de evaluación relativos a los proyectos de socorro agrícola deberían ser examinados y comentados por la TCE y cualquier otra dirección técnica interesada. Los comentarios deberían referirse a la idoneidad del informe, recomendar medidas que deberían adoptarse y resumir las enseñanzas extraídas para su aplicación en el futuro. Las enseñanzas extraídas de las evaluaciones deberían comunicarse a todas las dependencias pertinentes de la FAO y a los asociados, deberían recibir una amplia difusión y utilizarse con vistas a determinar las prácticas idóneas para orientar las operaciones futuras. A fin de producir evaluaciones más independientes, la TCE y el PBEE deberían acordar planes anuales de evaluación de las actividades de emergencia.

Evaluación del Programa Petróleo por Alimentos

155. En la presente evaluación no se examinó específicamente el Programa Petróleo por Alimentos en el Iraq septentrional, debido a que es muy diferente de las demás operaciones de emergencia de la FAO. Sin embargo, su tamaño e importancia, y el hecho de que en la actualidad está pasando a una fase de rehabilitación, indican que en algún momento deberá evaluarse el componente ejecutado por la FAO, al menos en aras de la rendición de cuentas. Se ha creado una dependencia de evaluación en el marco de la estructura de administración local del componente de este programa ejecutado por la FAO que debería contribuir a tal fin.

156. Recomendación 12: El componente ejecutado por la FAO del Programa Petróleo por Alimentos en el Iraq septentrional debería someterse a una evaluación en profundidad durante 2003-2004, centrada en la efectividad y eficacia de la operación a lo largo de todo su desarrollo.

E. ASISTENCIA PARA LA TRANSICIÓN DEL SOCORRO A LA REHABILITACIÓN Y EL DESARROLLO

157. A lo largo del “ciclo de los desastres”, la FAO ha resultado eficaz a la hora de vincular las actividades de alerta con el socorro agrícola, debido a que en relación con estas tareas las responsabilidades institucionales están claras. En las situaciones posteriores a las catástrofes naturales, cuando la FAO ha contado con una presencia importante ésta ha sido eficaz generalmente porque las estructuras gubernamentales normales seguían en pie y en funcionamiento. La organización de asistencia durante el período de transición posterior a emergencias complejas (relacionadas con conflictos) se ha demostrado mucho más problemática. Si bien se han llevado a cabo algunas actividades en situaciones así, esas actividades han solido ser proyectos individuales y no parte de un programa general. Hasta la fecha, la FAO no ha conseguido que en los llamamientos unificados de las Naciones Unidas se incluyeran las actividades de rehabilitación. En parte, esto es debido a la reducción gradual de la financiación de los donantes cuando pasa la situación de emergencia. En parte se debe a que la FAO no ha desarrollado un enfoque eficaz y ha hecho relativamente poco para resaltar la importancia de la asistencia de transición, dejando estas actividades en manos de otros agentes, especialmente instituciones financieras internacionales.

158. En la FAO, como en la mayoría de las organizaciones, una dependencia asume la responsabilidad primaria por una tarea y controla los recursos asignados para la realización de esa tarea. La responsabilidad de la planificación de la estrategia de asistencia de transición ha sido asignada recientemente a la TCER. Sin embargo, esta dependencia no dispone de personal suficiente para ocuparse de todos los países que atraviesan una etapa de transición y, al tratarse de un nuevo sistema, no está claro cuán efectivo será en la práctica. Tampoco está claro cuál sería el sistema institucional permanente más apropiado para la elaboración de programas o proyectos una vez que se haya preparado la estrategia. En el cuadro 4 se resumen las alternativas que parecen existir en este sentido.

Cuadro 4: Opciones para la elaboración de proyectos; ventajas e inconvenientes

Dependencia principal

Ventajas

Inconvenientes

TCER

Cuando se creó la TCE, recibió el mandato de preparar la estrategia de transición; tiene acceso fácil a fondos de emergencia que podrían utilizarse para la programación de la transición.

Falta de personal para realizar o prestar apoyo a las tareas; ubicado en la sede; la TCE se considera aislada del resto de la FAO.

Subdirecciones de asistencia para las políticas de las oficinas regionales

Son responsables en general de la elaboración de programas; la presencia y el número de personal en todas las regiones significa que puede llevar a cabo una rápida movilización; tiene ya vínculos con el TC.

Experiencia limitada en la gestión de emergencias; no todo el personal está capacitado para ocuparse de problemas relacionados con la transición; falta de acceso a fondos de emergencia.

Representaciones de la FAO

Presencia local y familiaridad con las condiciones.

Carecen de capacidad para realizar o prestar apoyo a las tareas.

159. En la actualidad, debido a la falta de capacidad y a sus responsabilidades ya demasiado amplias, las representaciones de la FAO no son una opción viable para ocuparse de este trabajo. Las limitaciones que afectan a las otras dos alternativas hacen que ninguna de ellas sea óptima por el momento.

160. Dada la situación de cambio institucional, sería prudente abordar con flexibilidad la elaboración de una modalidad satisfactoria para este proceso. Dado que el Subdirector General responsable del TC es el encargado de supervisar todas las dependencias (incluida la TCI) que pueden participar en la programación de la transición, resultaría apropiado que asignara la responsabilidad general, dependiendo de las circunstancias de los países concretos interesados y de las capacidades relativas de las dependencias orgánicas.

161. Recomendación 13: El Subdirector General responsable del TC debería asignar las responsabilidades en relación con la programación de las actividades de transición una vez que la TCER haya preparado la estrategia para dicha fase. La responsabilidad puede recaer en las oficinas regionales o subregionales, la TCI, la TCA y las representaciones de la FAO, según convenga en las circunstancias concretas de cada país. La participación de la TCE debería terminar en este punto. No obstante, a más largo plazo, es preciso adoptar disposiciones institucionales apropiadas más permanentes.

162. Al margen de la dependencia que dirija el proceso, una presencia efectiva de la FAO sobre el terreno será un requisito esencial para que la Organización desempeñe una función primordial durante el período de transición. Este aspecto ha demostrado ser un factor importante en las principales operaciones de emergencia y debería aplicarse igualmente a las situaciones de transición. Sin embargo, el tipo de experiencia necesaria será diferente.

163. Recomendación 14: En los países en los que la FAO proporcione asistencia en relación con las políticas y la programación de la transición posterior a la emergencia, debería nombrarse un director del programa a tiempo completo, preferiblemente poco después del inicio de la operación de emergencia. Esta persona debería poder desempeñar una función consultiva ante el gobierno en relación con las cuestiones relacionadas con el período posterior a la emergencia, ayudar a elaborar una estrategia de desarrollo agrícola y establecer la función de la FAO en la ejecución de dicha estrategia.

F. COLABORACIÓN CON LOS ASOCIADOS

164. La evaluación indicó que la colaboración con otros asociados, tanto del sistema de las Naciones Unidas como de la comunidad de ONG, podría mejorarse. Por ejemplo, en relación con las estrategias nacionales de preparación para hacer frente a las catástrofes la FAO debería colaborar con el PNUD, que tiene la responsabilidad general en el sistema de las Naciones Unidas por el fortalecimiento de las capacidades nacionales relacionadas con la mitigación de las catástrofes, la prevención de las mismas y la preparación para hacerles frente. También podría colaborarse con el PMA en relación con los aspectos logísticos de las emergencias y con ONG internacionales respecto de la cooperación apropiada para proporcionar socorro agrícola.

165. Recomendación 15: La FAO debería revisar sus actividades relacionadas con las emergencias con vistas a elaborar programas conjuntos sobre el terreno con otros organismos de las Naciones Unidas y ONG. A este respecto, deberían llevarse a una conclusión satisfactoria las negociaciones iniciadas con diversos asociados en relación con memorandos de entendimiento oficiales.

G. DISPOSICIONES RELATIVAS A LA FINANCIACIÓN ADICIONAL

166. Algunas de las recomendaciones entrañan el incremento de la financiación para las tareas de emergencia. En la situación actualmente imperante de crecimiento nominal cero del presupuesto del PO, la evaluación no puede recomendar un incremento de las asignaciones previstas en el mismo. Sin embargo, podrían considerarse los siguientes mecanismos de financiación, según convenga. Todos ellos entrañan el recurso a donantes.

Fondo de Respuesta Rápida

167. La TCE ha propuesto la creación de un Fondo de Respuesta Rápida para financiar las fases iniciales de una operación de socorro, antes de que se disponga de fondos aportados por donantes. El Fondo de Respuesta Rápida se repondría con contribuciones de los donantes para la emergencia de que se tratase. Por lo tanto, mientras haya donantes para una emergencia, lo cual es sumamente probable, el fondo se mantendría al mismo nivel o incluso podría incrementarse con el correr del tiempo. La creación del fondo ayudaría a eliminar uno de los obstáculos que dificultan la distribución oportuna de insumos de socorro agrícola de emergencia, esto es, la lentitud de la respuesta de los donantes. Se ha propuesto que el fondo se dote inicialmente con 1,5 millones de dólares EE.UU.

168. Recomendación 16: El Fondo de Respuesta Rápida debería crearse con financiación procedente del saldo acumulado de la cuenta de gastos directos de funcionamiento para los proyectos de la TCE o (con la aprobación de los donantes) con fondos para proyectos no comprometidos.

Fondo de Transición

169. Podría crearse también un fondo, similar al Fondo de Respuesta Rápida, para enviar asesores sobre rehabilitación durante la fase de transición posterior a un conflicto y financiar la programación de las actividades de transición. En teoría, el Fondo de Transición podría reponerse también mediante contribuciones de los donantes, pero puede que éstas sean inferiores a las destinadas a las actividades de socorro agrícola, a menos que las actividades de promoción (mencionadas en el párrafo 171) tengan éxito. Dado que son varias las dependencias que podrían realizar actividades de transición y rehabilitación, el control de los fondos debería ser competencia del Subdirector General responsable del TC. Habida cuenta de que el Fondo de Transición tiene un alcance más limitado que el Fondo de Respuesta Rápida, su nivel sería considerablemente inferior, de unos 500 000 dólares EE.UU.

170. Recomendación 17: El Fondo de Transición debería crearse bajo la autoridad del Subdirector General responsable del TC y financiarse de la misma manera que el Fondo de Respuesta Rápida.

Actividades de promoción y recaudación de fondos

171. La FAO ha logrado resultados sumamente satisfactorios por lo que se refiere a atraer financiación para las actividades de socorro agrícola emprendidas por la TCE. En cambio, ha tenido mucho menos éxito a la hora de recaudar fondos para otros tipos de actividades relacionadas con las emergencias. La FAO se ajusta en este sentido a la tendencia general, ya que los donantes parecen estar mucho más dispuestos a proporcionar financiación para las operaciones de emergencia que para el desarrollo. No obstante, las decisiones de los donantes en relación con la financiación son delegadas cada vez en mayor medida al personal de campo, mientras que en la FAO la responsabilidad en relación con la recaudación de fondos sigue estando centralizada.

172. Recomendación 18: La FAO debería atraer donantes con objeto de recaudar fondos adicionales para actividades relacionadas con las emergencias distintas a las actividades de socorro, haciendo hincapié en las esferas en las que goza de una ventaja comparativa y en los beneficios de mitigar los efectos de las catástrofes.

 

Anexo 1: Resultados de la encuesta realizada por la FAO entre sus estados miembros y asociados en actividades de emergencia

Para la evaluación se prepararon dos cuestionarios: uno se envió a la mayoría de los países en desarrollo Miembros de la FAO y el otro a los organismos del Sistema Naciones Unidas, a los donantes bilaterales y a las ONG que cooperan con la FAO en situaciones de emergencia.

Se envió el primer cuestionario a 113 países Miembros en desarrollo para determinar cuáles eran las principales amenazas que podían conducir a situaciones de emergencia y si existían o no planes para imprevistos y planes de respuesta ante cada amenaza, si el país había recibido asistencia de la FAO en situaciones de emergencia durante el periodo 1996-2001 y qué calidad había tenido la asistencia de la FAO en comparación con la brindada por otros donantes.

El índice de respuesta al cuestionario desglosado por regiones fue el siguiente:

Región

Respuestas recibidas

Porcentaje

Total de cuestionarios enviados

Porcentaje de cuestionarios devueltos

África

14

34,1

47

29,8

Asia/Pacífico

6

14,6

26

23,1

América Latina /Caribe

11

26,8

27

40,7

Cercano Oriente, África del Norte, Europa

10

24,4

13

76,9

Total

41

100,0

113

36,3

Se pidió a los Estados Miembros que clasificasen los principales tipos de emergencia a que se enfrentaban. Las más importantes eran las sequías, las inundaciones, las plagas y las enfermedades. También se preguntó a los países si existían planes para contingencias o planes de respuesta para cada tipo de emergencia. En número sorprendentemente alto, los países informaron que esos planes existían. Sin embargo, no hubo una estimación cualitativa de esos planes. La experiencia de las misiones de evaluación en el campo parece apoyar la idea de que muchos planes pueden ser parciales o difíciles de aplicar.

Número de respuestas

Grado de amenaza

Inundación

Sequía

Conflictos

Civiles

Incendios

Tormentas

Plagas/
enfermedades

Accidentes industriales

Terremotos y volcanes

Menor

5

3

14

9

17

5

21

13

Ocasional

15

15

6

19

11

18

7

8

Grave

14

15

6

4

5

11

1

5

Total

34

33

26

32

33

34

29

26

     Planes para contingencias/planes de respuesta

No

5

8

9

8

12

7

12

12

22

20

10

17

11

22

8

7

Total

27

28

19

25

23

29

20

19

Se pidió a los países que evaluaran la calidad de la asistencia de la FAO en cinco esferas relativas a la emergencia (preparación, alerta, evaluación de las necesidades, socorro y planificación de la rehabilitación y recuperación). A pesar de que entre los países que respondieron al cuestionario relativamente pocos indicaron que habían recibido asistencia en relación con la alerta, este tipo de asistencia recibió la mayor puntuación en cuanto a su calidad. La esfera relativa a la asistencia de socorro fue la única respecto de la cual se recibieron más respuestas de evaluación "insatisfactoria" que "excelente". La asistencia para el socorro fue fundamentalmente criticada por la escasez de la asistencia suministrada (que abarcaba solamente una pequeña proporción de las necesidades), lo mismo que por la demora en los procedimientos de aprobación y por la lentitud en la entrega de los insumos. Cuando el equipo de evaluación visitó los distintos países confirmó que los procedimientos de aprobación y los plazos de entrega eran a menudo demasiado largos. Con relación al nivel de asistencia, es posible que algunos países no comprendieran que la asistencia brindada por la FAO con sus propios recursos a través del PCT tiene un límite máximo de 400 000 dólares EE.UU.

Evaluación de la asistencia recibida de la FAO

Preparación

Alerta

Evaluación de las necesidades

Socorro

Planificación de la rehabilitación y recuperación

Excelente

2

4

6

6

6

Satisfactoria

6

1

9

5

11

Insatisfactoria

1

4

8

2

Total

8

6

19

19

19

También se pidió a los Estados Miembros que comparasen la asistencia de la FAO en cada esfera de las actividades de emergencia con la asistencia de otros donantes, evaluando tanto los aspectos cuantitativos como los cualitativos. Con la excepción de la evaluación de las necesidades y el socorro, los países recibieron más asistencia de otros donantes que de la FAO. Lo más inquietante es que la asistencia de la FAO fue considerada inferior a la de los otros donantes en todas las esferas, excepto la evaluación de las necesidades. Los países que indicaron las razones de su evaluación mencionaron los mismos parámetros que en la evaluación del conjunto de la asistencia de la FAO, indicando que la FAO era más burocrática y lenta que los otros donantes y que la asistencia era escasa.

Comparación de la FAO con los otros donantes

Preparación

Alerta

Evaluación de las necesidades

Socorro

Planificación de la rehabilitación y recuperación

Volumen de la asistencia proporcionada por otros
donantes comparado con la de la FAO

- Más de la FAO

1

2

5

8

4

- Más de los otros donantes

4

4

5

9

7

Total

5

6

10

17

11

Evaluación de la calidad de la asistencia de la FAO en
comparación con la de otros donantes

-Asistencia de la FAO: superior

1

4

3

3

-La FAO y otros donantes: casi igual

3

3

7

6

2

-Asistencia de la FAO: inferior

5

5

1

7

8

Total

8

9

12

16

13

Se enviaron cuestionarios (y recordatorios de seguimiento) a 34 organizaciones internacionales asociadas a la FAO en situaciones de emergencia. El índice de respuesta, tal como se indica a continuación, fue inferior en el caso de los organismos asociados que en el caso de los Estados Miembros en desarrollo, y los más bajos de todos fueron los de los organismos del sistema de las Naciones Unidas y los donantes bilaterales. Debido al escaso número de respuestas recibido no es posible realizar un análisis significativo desglosando las respuestas por tipo de organismo.

Tipo de organismo

Respuestas recibidas

Porcentaje

Total de cuestionarios enviados

Porcentaje de cuestionarios devueltos

Naciones Unidas

2

20

10

20,0

Donantes bilaterales

3

30

11

27,3

ONG

5

50

13

38,5

Total

10

100

34

29,4

Se pidió a los encuestados que indicaran qué esferas de la labor de la FAO conocían bien y que evaluaran sus relaciones de trabajo con la FAO en los últimos seis años. La esfera predominante fue la del socorro agrícola, lo que no es sorprendente dado que es la principal actividad de la FAO en las emergencias, en particular sobre el terreno.

Tipo de actividad

Conoce bien la labor de la FAO (respuestas)

Colaboró con la FAO (respuestas)

Preparación

2

0

Alerta

5

1

Evaluación de las repercusiones y de las necesidades inmediatas

5

1

Socorro agrícola

7

8

Rehabilitación, reconstrucción y recuperación sostenible

5

5

Se preguntó a los asociados si estaban satisfechos de su asociación con la FAO. De diez, nueve respondieron "sí" y uno no respondió. Para obtener una información más pormenorizada se pidió a los encuestados que clasificaran los resultados y la utilidad de la FAO para el asociado en las distintas esferas de actividad relativas a las situaciones de emergencia. La evaluación de los asociados confirmó la de los Estados Miembros, ya que la esfera de la alerta fue considerada la mejor. Sin embargo, en contraste con la evaluación de los países, el socorro agrícola también recibió una puntuación elevada.

Puntuación

Preparación

Alerta.

Evaluación de las repercusiones y necesidades

Socorro agrícola

Plan de rehabilitación y recuperación

Res.

Util.

Res.

Util.

Res.

Util.

Res.

Util.

Res.

Util.

1= muy buena

-

-

1

3

2

2

2

4

2

2

2

3

2

4

2

1

-

2

1

2

-

3

1

1

2

1

3

2

3

1

4

2

4

1

-

-

1

1

1

1

-

-

1

5= deficiente

-

-

-

--

-

-

-

1

-

1

Total

5

3

7

7

7

5

8

7

8

6

También se pidió a los asociados que comentaran los puntos fuertes y los puntos débiles de la FAO como asociado. Las observaciones se vieron ampliamente reflejadas en la puntuación: como aspectos positivos de la FAO se mencionó que la Organización era un "intermediario honesto" y un buen coordinador de la asistencia. Sin embargo, se mencionó varias veces la limitada capacidad de financiación de la FAO y la dependencia de los donantes, lo mismo que sus procedimientos burocráticos y la consecuente demora en la ejecución. No obstante, se debe tomar nota con interés de que una ONG declaró que la FAO, a pesar de ser burocrática, lo era menos que otros organismos del sistema de las Naciones Unidas.

Los resultados de los cuestionarios dirigidos a los países Miembros y a los organismos asociados confirmaron las conclusiones de las misiones de campo: no existían diferencias fundamentales entre los puntos fuertes y los puntos débiles señalados o en las esferas de ventaja comparativa para la FAO.

 

Anexo 2: Mandato

Evaluación temática del objetivo estratégico A3

“Preparación para emergencias alimentarias y
agrícolas y respuesta eficaz y sostenible a éstas ”

(i) Antecedentes

Tal como solicitaron los órganos rectores, el programa de evaluación de la FAO está cada vez más estructurado en el contexto del Marco Estratégico para 2000-2015 y el Plan a Plazo Medio. Estas evaluaciones tienen como propósito ser formativas, examinando si la FAO responde a los objetivos estratégicos de manera adecuada para alcanzar los resultados deseados y formular recomendaciones con objeto de mejorar el diseño, la ejecución, los resultados y el seguimiento de las actividades afines. Estas evaluaciones abarcan tanto las actividades del Programa Ordinario como del Programa de Campo. Las evaluaciones tienen la finalidad de examinar las cuestiones desde la óptica de los países Miembros. Algunos estudios de evaluación, tal como el presente, incluyen un componente para revisar las actividades del PCT, dado que éste representa una parte significativa del Programa Ordinario de la FAO y que los órganos rectores han manifestado un interés continuo en la evaluación del uso eficaz del PCT.

Durante su periodo de sesiones celebrado en septiembre de 2001, el Comité del Programa seleccionó el objetivo estratégico A3 como tema para una evaluación más pormenorizada. El propósito de este objetivo estratégico es "aumentar la resistencia y capacidad de los países y de sus poblaciones para superar las consecuencias de las catástrofes que afectan a la seguridad alimentaria nacional y familiar y, cuando se producen las catástrofes, contribuir a las operaciones de emergencia que favorecen la transición del socorro a la recuperación de los sectores alimentario y agrícola".

Entre los componentes de la estrategia se incluyen los siguientes:

  1. fortalecimiento de la preparación para catástrofes y de la capacidad para atenuar los efectos de las emergencias que afectan a la seguridad alimentaria y a la capacidad productiva de la población rural;
  2. pronóstico y alerta de condiciones desfavorables en los sectores alimentario y agrícola y de emergencias alimentarias inminentes, incluida la vigilancia de plagas y enfermedades de los animales y las plantas;
  3. evaluación de las necesidades y formulación y aplicación de programas de socorro y rehabilitación agrícolas, así como formulación de políticas y marcos de inversión que favorezcan la transición del socorro de emergencia a la reconstrucción y el desarrollo en los sectores alimentario y agrícola; y
  4. fortalecimiento de la capacidad y de los mecanismos locales para hacer frente a la situación orientando la elección de prácticas y tecnologías agrícolas y de servicios de apoyo a la agricultura, de manera que se reduzca la vulnerabilidad y se aumente la capacidad de recuperación.

En el marco de este estudio, las emergencias alimentarias y agrícolas se definen como el resultado de acontecimientos vinculados con las inundaciones, las sequías, los conflictos civiles, los incendios, las tormentas, las plagas y las enfermedades, los accidentes industriales, y los terremotos y los volcanes.

El propósito de esta evaluación es ser formativa, sacando conclusiones de las experiencias pasadas a fin de evaluar la validez y adecuación de las actividades para satisfacer las necesidades de los países Miembros en el marco de la estrategia, lo mismo que evaluar la estrategia por sí misma y sugerir, si se justifica, cambios en la orientación del programa.

(ii) Alcance del estudio

La FAO ha establecido el orden de las operaciones de emergencia en seis fases diferentes.24, a saber:

A los efectos de esta evaluación el presente estudio examina la función de la FAO en todas las fases del orden establecido, excepto la prevención, a pesar de que la función y las repercusiones del trabajo de prevención serán examinadas en relación con otras fases de las operaciones de emergencia. Generalmente se excluye la prevención para centrar claramente la evaluación, dado que la gran mayoría de las actividades de la FAO pueden incluirse en la rúbrica "prevención de las emergencias" pero pueden también estar dirigidas a otros fines.

La evaluación abarcará la labor de la FAO relativa a las emergencias en los tres últimos bienios, es decir, de 1996 hasta 2001.

(iii) Metodología y productos

La evaluación ha comenzado ya con un proceso de reunión de información con la participación de las direcciones técnicas para establecer el alcance de la labor emprendida en el marco del objetivo estratégico A3.

La evaluación incluirá cuatro etapas principales:

1. Evaluación de la labor normativa de la FAO en relación con el objetivo estratégico A3.

Esta parte consiste en la recolección y revisión de directrices, manuales y materiales metodológicos relativos a la elaboración de las normas, los estándares y las mejores prácticas y que apoyan las actividades de asistencia en el campo en las esferas de las actividades de preparación, evaluación de las necesidades y en la realización de actividades de socorro y rehabilitación. Esto implicará un examen de los materiales producidos por la FAO y otros materiales pertinentes, incluyendo un examen de las publicaciones sobre el tema. Se completará la revisión de los materiales bibliográficos mediante entrevistas con técnicos de las principales dependencias.

2. Encuesta de los países Miembros, los asociados en la ejecución y los donantes

Para las actividades de emergencia se presentará un cuestionario a los países Miembros, a los asociados y a los donantes, con el fin de evaluar desde ópticas diferentes las necesidades de los países en desarrollo y la calidad de la respuesta de la FAO.

3. Evaluación de las necesidades del país y resultado de la asistencia de campo

La labor principal de la evaluación estará compuesta por visitas de campo a 15 países para poder realizar una valoración pormenorizada, incluido el examen de las intervenciones individuales, la mayoría de las cuales serán proyectos del PCT. En este anexo se presentan las actividades específicas de campo que deben examinarse. La cobertura regional será:

Además, la evaluación incluirá un estudio de la asistencia de la FAO durante la transición en el periodo posterior a la fase de socorro en Kosovo, en donde se realizó un amplio programa de asistencia de emergencia.

Además del material bibliográfico, las misiones de evaluación, que estarán integradas por un consultor externo y un funcionario del Servicio de Evaluación (PBEE), entrevistarán a interlocutores clave en cada país interesado en la preparación y la respuesta para las catástrofes, con el fin de obtener informaciones sobre las necesidades y las capacidades del país. Las misiones también entrevistarán a las personas que participan en el diseño, la ejecución y el seguimiento de las intervenciones de los proyectos en los países seleccionados, incluidos beneficiarios elegidos a título de ejemplo. Las misiones también se reunirán con los asociados en la ejecución para obtener sus valoraciones sobre las necesidades del país y las labores efectuadas en éste. Cada misión preparará un informe regional, incluyendo informes separados sobre cada país y cada intervención particulares examinados.

Además de los proyectos enumerados al fin de este anexo, las misiones evaluarán todas las actividades pertinentes relacionadas con las emergencias en los países seleccionados, incluyendo las misiones de evaluación y la utilización de los productos normativos.

4. Evaluación y coordinación de las actividades en el marco del objetivo estratégico A3 y vínculos entre éstas

Esta parte examinara cómo la FAO reconoce y tramita una emergencia, al mismo tiempo que los mecanismos de coordinación para determinar en qué medida las sinergias son reforzadas entre las actividades efectuadas durante la emergencia, incluyendo la transición entre la emergencia, la rehabilitación y el desarrollo posterior. En particular, esta parte evaluará la eficacia de los mecanismos institucionales existentes para la coordinación, tales como el Grupo de Coordinación para Situaciones de Urgencia (GCSU), lo mismo que los mecanismos estratégicos y técnicos, tales como las esferas prioritarias para la acción interdisciplinaria (EPAI). Esto se hará mediante entrevistas con las dependencias fundamentales que contribuyen a esos mecanismos, así como a través del examen de casos seleccionados en los cuales la coordinación fue considerada eficaz.

(iv) Producto final

Al fin de estas cuatro etapas, se preparará un informe general de la evaluación que será examinado a fondo por un grupo colegiado de expertos independientes. Durante el periodo de sesiones del Comité del Programa que se celebrará en septiembre de 2002, se presentará el informe junto con las observaciones del grupo de examen y la respuesta de la administración. El informe constituirá un capítulo del Informe sobre la Evaluación del Programa que se presentará a la Conferencia de la FAO en el año 2003.

Se preparará un informe separado sobre las cuestiones técnicas y de funcionamiento que emanen de los proyectos del PCT.

(v) Cuestiones que deben ser examinadas

En el marco de los criterios de evaluación establecidos aceptados por el Comité del Programa y el Consejo (PC 82/4), la evaluación cubrirá particularmente, a escala nacional y/o en el ámbito mundial, según convenga:

1) La medida en que la labor de la Organización relativa a las emergencias ha correspondido a los fines del objetivo estratégico A3.

2) La pertinencia de la labor relativa a las emergencias, incluyendo:

  1. el grado en el cual la asistencia relativa a las emergencias, incluyendo la asistencia en relación con el Programa Ordinario, se centra en temas y problemas a los cuales los países han asignado prioridad;
  2. la pertinencia de la asistencia de emergencia suministrada en respuesta a las solicitudes y necesidades de distintos países, tal como haya determinado la amplitud del problema de emergencia, incluida la complementariedad de la asistencia y del apoyo brindado por otros;
  3. los límites dentro de los cuales la asistencia de emergencia representa la respuesta más adecuada por parte de la FAO y se beneficia de las ventajas comparativas de la FAO;
  4. en qué medida se pueden prever repercusiones reales en los medios de vida de las poblaciones afectadas.

3) El grado de reacción y eficacia de la capacidad institucional de la FAO para brindar asistencia de emergencia, incluyendo:

  1. una respuesta flexible y rápida;
  2. en qué medida la FAO es capaz de recurrir a sus esferas de competencia técnica específica;
  3. en qué proporción la Organización utiliza sus capacidades interdisciplinarias;
  4. la habilidad para trabajar y coordinar con otras organizaciones internacionales y nacionales;
  5. en qué medida la naturaleza descentralizada de la Organización es conveniente para todo lo anterior.

4) La calidad de la labor relativa a las situaciones de emergencia, incluyendo:

  1. productos, relativos a factores tales como la adecuación técnica, la pertinencia a la situación de emergencia y la capacidad de ejecución;
  2. la amplitud, en particular en qué medida preocupaciones fundamentales, incluidas las cuestiones relacionadas con las diferencias en función del sexo, las cuestiones ambientales y las ituaciones de pobreza han sido adecuadamente incluidas;
  3. el equilibrio de la asistencia de la FAO entre la respuesta a situaciones de emergencia especiales y otros aspectos de preparación para las situaciones de emergencia;
  4. los aspectos complementarios en relación con otras iniciativas de desarrollo pertinentes en el país y/o las zonas afectadas, incluyendo otros proyectos asistidos por la FAO.

5) Eficacia y repercusiones, incluyendo:

  1. la rapidez y la amplitud con que la asistencia de emergencia ha mejorado la situación que la motivó;
  2. el grado en el cual la asistencia de emergencia ha mejorado la capacidad de los países para responder a emergencias futuras;
  3. el grado en el cual la asistencia de emergencia permitió el restablecimiento de la capacidad productiva y de medios de vida sostenibles en las zonas afectadas;
  4. el grado de continuidad en las actividades de socorro de emergencia y de asistencia para la recuperación de la FAO durante la fase de transición que conduce a un desarrollo sostenible.

6) Identificación de los puntos fuertes y débiles en la labor de la FAO relativa a las situaciones de emergencia.

(vi) Calendario

  1. Preparación del mandato para la evaluación utilizando informaciones provenientes del estudio interno: noviembre de 2001.
     
  2. Selección de los países en los que se efectuarán visitas de campo y selección de los consultores externos, incluyendo los que integrarán el grupo de examen colegiado: noviembre de 2001.
     
  3. Envío de cuestionarios sobre los requisitos y los resultados de los proyectos a los países, a los asociados en la ejecución y a los donantes: 10 de diciembre de 2001.
     
  4. Organización de las visitas de campo de las misiones: noviembre de 2001 a enero de 2002.
     
  5. Reuniones de seguimiento sobre el uso de los recursos con las direcciones y para seguir informando sobre las actividades identificadas: diciembre de 2001 a febrero de 2002.
     
  6. Realización de visitas de campo, preparación de informes nacionales y regionales e informes de evaluación individuales sobre el PCT: enero a abril de 2002.
     
  7. Análisis de los cuestionarios por país, por asociados y por donantes (consultor): febrero y marzo de 2002.
     
  8. Preparación del informe general de evaluación para el grupo de examen colegiado: mayo de 2002.
     
  9. Reunión del grupo de examen colegiado, preparación de la respuesta de la administración al informe del grupo y presentación de toda la documentación a la Oficina del Director General: fines de junio de 2002.
     
  10. Preparación del informe sobre los proyectos del PCT: julio de 2002.

Intervenciones de proyectos que abarcarán las misiones

Asia (16)

OSRO/CMB/002/SWI – “Emergency Supply of Rice Seeds to Flood-Affected Households in Cambodia”

TCP/CMB/0167 – “Emergency Supply of Rice Seeds to Flood-Affected Households”

OSRO/VIE/002/NOR – “Emergency Supply of Agricultural Inputs to Flood-Affected Farmers in the Mekong Delta, Vietnam

OSRO/VIE/102/NOR – “Emergency Assistance to Poor and Vulnerable Fish Farmers in the Flood-Affected Province of Dong Thap”

OSRO/VIE/101/SWI – “Emergency Assistance to Poor and Vulnerable Fish Farmers in the Flood-Affected Province of Can Tho”

TCP/VIE/8925 – “Emergency Supply of Agricultural Inputs to the Flood-Affected Districts of Quang Tri Province”

TCP/VIE/8926 - “Emergency Supply of Agricultural Inputs to the Flood-Affected Districts of Binh Thuan Province”

TCP/VIE/0067 – “Emergency Supply of Rice Seeds to Flood-Affected Farm Households in Dong Thap Province”

TCP/VIE/0168 – “Emergency Assistance to Rehabilitate the Aquaculture Sector in the Flood-Affected Province of An Giang”

OSRO/VIE/001/DHA – “Emergency Supply of Rice Seeds to Flood-Affected Households in An Giang Province”

UTF/BGD/029/BGD – “Crop Yield Forecasting and Agrometeorology”

TCP/BGD/6611 – “Emergency Assistance to Tornado-Affected Families”

TCP/BGD/7825 – “Emergency Supply of Vegetable Seeds to Flood-Affected Farmers”

TCP/BGD/7827 – “Assessment of Flood Damages in Fisheries and Livestock Sectors”

TCP/BGD/0066 – “Emergency Supply of Agricultural Inputs to Flood-Affected Farmers In Bangladesh”

TCP/THA/0166 – “Emergency Supply of Agricultural Inputs to Flood-Affected Farmers in Southern Thailand”

Africa (25)

TCP/BDI/0065 – “Evaluation des Récoltes et des Besoins Alimentaires”

TCP/BDI/5612 – “Fourniture d’Urgence de Semences aux Réfugiés de Retour et aux Populations Vulnérables”

TCP/BDI/6611 - Assistance Technique aux Programmes Humanitaires pour la Réhabilitation du Secteur Agricole”

TCP/BDI/6713 – “Evaluation des Récoltes et des Approvisionnements Alimentaires (Phase II RAF/6715)”

TCP/BDI/6714 – “Fourniture d’Urgence d’Outillages Agricoles aux Réfugiés de Retour et aux Populations Vulnérables”

TCP/BDI/8927 – “Fourniture Urgente d’Intrants pour la Relance de la Production Agricole”

TCP/BDI/9067 – “Fourniture d’Intrants Agricoles aux Populations Affectées par la Sécheresse”

OSRO/BDI/904/NET – “Emergency Integrated nutrition- agriculture intervention in western Burundi”.

TCP/ERI/4557 – “Emergency Assistance to Desert Locust Control”

TCP/ERI/8924 – “Urgent Provision of Cereal Seeds to Drought-Affected Farmers in the Lowlands, North-East Red Sea Region”

OSRO/ERI/003/SWE, OSRO/ERI/001/USA – “Emergency Distribution of Vegetable Seeds and Farming Hand Tools to Assist Internally Displaced Families”

TCP/RWA/6616 – “Assistance d’Urgence pour la Fourniture d’Intrants Agricoles aux Réfugiés de Retour”

TCP/RWA/6617 – “Appui Technique d’Urgence pour la Campagne 1997-B”

TCP/RWA/6618 – “Appui à la Relance et à la Réhabilitation des Productions Agricoles”

TCP/RWA/6719 – “Evaluation et Suivi des Récoltes et des Besoins Alimentaires”

TCP/RWA/8922 – “Assistance d’Urgence pour la Lutte contre les Chenilles Légionnaires et Mise en Place d’un Système d’Alerte Rapide”

TCP/RWA/8926 – “Assistance d’Urgence pour la Relance des Activités Agricoles dans la Préfecture de Gisenyi”

TCP/RWA/9066 – “Assistance d’Urgence pour la Mise en Culture de Zones de Marais”

TCP/SIL/0065 – “Emergency Assistance to Artisanal Fisheries”

TCP/SIL/0166 – “Emergency Agricultural Rehabilitation Assistance to ex-Combattants and Host Communities”

TCP/SIL/6713 – “Emergency Assistance to Artisanal Fisheries”

TCP/SIL/8821 – “Emergency Supply of Agricultural Inputs to Severely War Affected Farm Families”

TCP/SIL8923 – “Emergency Rehabilitation of Agricultural Food Production”

TCP/SIL/8924 – “Urgent Provision of Seeds and Strengthening the Coordination of Agricultural Relief and Rehabilitation Programmes”

Near East and Europe (15)

TCP/MAU/6612 - ‘Appui à la lutte terrestre et aérienne contre le criquet pèlerin’

TCP/MAU/7821 - “Fourniture d'urgence d'intrants agricoles aux populations autochtones de Bassiknou”

TCP/MAU/8924 – “Assistance d’Urgence aux Agriculteurs Victimes des Inondations”

TCP/MAU/8925 – “Assistance d’Urgence à la Lutte contre le Criquet Pèlerin”

OSRO/MAU/701/FRA – “Appui a la Lutte contre le Criquet Pèlerin”

TCP/KAZ/0065 – “Emergency Programme for the Control of Locust Outbreak”

TCP/KAZ/6711 – “Emergency Assistance to Locust Control”

TCP/KAZ/8921 – “Medium to Long-Term Assistance to Locust Outbreak Identification Mission”

TCP/GEO/9066 – “Assessment of Drought Impact and Emergency Supply of Wheat Seeds to Drought-Affected Farmers”

OSRO/GEO/001/SWI, OSRO/GEO/002/USA, OSRO/GEO/004/NET – “Emergency Supply of Wheat Seeds to Drought-Affected Farmers”

OSRO/GEO/003/UK – “Emergency Supply of Seed Potatoes, Maize and Sunflower to Drought-Affected Farmers”

OSRO/GEO/005/GRE – “Emergency Supply of Seed Potatoes to Drought-Affected Farmers in the Tsalka Region”

OSRO/GEO/101/BEL – “Emergency Supply of Fertilizer to Farmers in Drought-Affected Areas of Georgia”

Latin America and Caribbean (14)

TCP/COS/0065 – “Rehabilitación de los Sistemas de Producción Afectados por el Huracán”

TCP/COS/6714 – “Rehabilitación de las Áreas de Producción de Pequeños y Medianos Productores en la Región Brunca”

TCP/COS/5611 – “Rehabilitación Agropecuaria de la Región Huetar Atlántica Costa Rica”

TCP/ELS/0165 – “Asistencia de Emergencia para Pequeños Agricultores Afectados por el Terremoto”

TCP/ELS/0166 – “Asistencia de Emergencia para Pequeños Agricultores Afectados por la Sequía”

TCP/NIC/0167 – “Asistencia de Emergencia a Pequeños Productores Afectados por la Sequía en los Departamentos de León y Chinandega”

TCP/NIC/7821 – “Apoyo a la Rehabilitación de las Actividades Productivas Agropecuaria en las Zonas Afectadas por el Huracán Mitch”

TCP/NIC/8822 – “Asistencia al Gobierno de Nicaragua para la Coordinación de las Actividades de Emergencia del Huracán Mitch”

TCP/NIC/6611 – “Apoyo a la Rehabilitación de las Actividades del Sector Agropecuario en las Zonas Afectadas por El Huracán Cesar”

TCP/NIC/6713 – “Apoyo a la Rehabilitación de las Actividades Productivas del Agropecuario en las Zonas Afectadas por el "Niño"

OSRO, Addendum to GCP/HON/018/NET “Emergency Assistance for victims of Hurricane Mitch in the area of influence of project number GCP/ HON/018/NET”

OSRO, Addendum to GCP/HON/019/NET “Emergency Assistance for victims of Hurricane Mitch in the area of influence of project number GCP/ HON/019/NET”

OSRO/HON/901/NOR - “Urgent rehabilitation of agricultural production systems”

TCP/HON/8822 – “Assistance to the Government of Honduras in the coordination of emergency activities resulting from Hurricane Mitch”

 

Anexo 3: Evaluación temática del objetivo estratégico A3. Informe del Grupo de examen colegiado externo25

1. El Grupo se reunió en Roma del 19 al 21 de junio de 2002. Durante la reunión se efectuaron consultas con el personal de evaluación, con el Subdirector General responsable del Departamento de Cooperación Técnica y con el personal de distintos departamentos de la FAO.

2. El Grupo examinó el proyecto del informe de evaluación en el contexto del actual Marco Estratégico para 2000-2015 de la FAO y del objetivo estratégico A3, tomando en cuenta las prioridades resumidas por el personal directivo superior responsable de las actividades de la FAO al respecto.

3. El Grupo colegiado de examen reconoce las crecientes demandas de servicios de la FAO en relación con las catástrofes y considera que la evaluación del objetivo estratégico A3 es muy oportuna y útil para definir los ajustes institucionales precisos para satisfacer la necesidad de ampliar sus actividades y servicios en este campo de trabajo.

4. El Grupo considera que el proceso de evaluación adoptado por la FAO es ejemplar, porque permite la participación, es diáfano y prevé el examen de las conclusiones extraídas por un grupo de expertos independientes.

5. El Grupo reconoce que la evaluación debió realizarse en un plazo limitado abarcando una extensa zona geográfica, lo que exigió la revisión de un gran número de proyectos muy diversos. Por lo tanto, se analizaron las conclusiones generales tomando en cuenta estas circunstancias.

6. En general, el Grupo refrenda las conclusiones y recomendaciones de la evaluación, considerándolas útiles y prácticas para la Organización, en particular las que se centran en las ventajas comparativas de la FAO en un entorno que va desde las informaciones relativas a la previsión y a la alerta hasta el diseño técnico de los insumos de emergencia:

1. Es evidente que la comunidad internacional aprecia sobremanera la larga experiencia de la FAO en el campo de la información y de la alerta y, habida cuenta de esto, el Grupo refrenda las recomendaciones relativas a la consolidación de las capacidades de la FAO en este sector.

2. El Grupo considera oportuno y apoya plenamente el propósito de la FAO de desarrollar su capacidad como fuente de información, mediante la creación de sistemas de información, cuando éstos no existen, y la consolidación los existentes en el ámbito nacional, integrándolos en el seno de una base de datos mundial, que será una herramienta útil para la evaluación de las catástrofes y la elaboración de programas.

3. La cada vez mayor participación de la FAO en situaciones de emergencia requiere que estén disponibles las mejores herramientas y los mejores sistemas. El Grupo refrenda las recomendaciones relativas a la preparación de directrices para realizar evaluaciones rápidas, elaborar programas y fortalecer el Sistema de información y cartografía sobre la inseguridad alimentaria y la vulnerabilidad (SICIAV).

4. El Grupo tomó nota de la importancia que la FAO atribuye al socorro y a la rehabilitación y refrenda las recomendaciones tendientes a mejorar la eficacia y la efectividad de estas operaciones, como las relativas a la mejora de los procedimientos de adquisición y de financiación.

5. La estructura actual de la FAO debe adaptar su orientación estratégica, en consonancia con el objetivo estratégico A3. El Grupo es consciente de la importancia atribuida a los necesarios cambios institucionales recomendados en el informe de evaluación y de la decisión del personal directivo de introducir cambios con la mencionada finalidad.

7. El Grupo presenta los siguientes puntos como aporte positivo, dado que el informe de evaluación en su conjunto y en particular su orientación práctica general fueron evaluados muy positivamente por el Grupo.

Puesta en práctica de la estrategia A3

Comentarios sobre las recomendaciones

8. La evaluación analiza de manera acertada la ventaja comparativa de la FAO, pero las recomendaciones deberían hacer más hincapié en que la Organización se centre en los aspectos en que es más idónea, que no pueden ser todos.

9. Las recomendaciones son bastante numerosas y sería útil que se estableciese un orden de prioridades relativo a su importancia y/o su plazo de aplicación.

Cuestiones que atañen a las operaciones de campo

Gestión interna

Relación de la FAO con la comunidad amplia de asistencia humanitaria

 

Anexo 4. Respuesta de la administración a la evaluación temática del objetivo estratégico A3

“Preparación para emergencias alimentarias y agrícolas y respuesta eficaz y sostenible a éstas”

1. El personal directivo superior elogió la labor del Servicio de Evaluación de la FAO al preparar un análisis sucinto y constructivo del objetivo estratégico A3. Este análisis aborda las cuestiones esenciales en relación con la función de la FAO y su enfoque de las emergencias desde la preparación a la rehabilitación. El análisis resalta las ventajas comparativas basándose en las cuales la Organización debería incrementar sus actividades de emergencia, haciendo hincapié en las interacciones entre las actividades normativas y operativas. La administración superior acoge con beneplácito este informe, y lo considera una contribución importante al desarrollo en curso de un enfoque interdisciplinario y a la expansión de las asociaciones con miras a la consecución del objetivo estratégico A3.

2. Las recomendaciones efectuadas permitirán que el Comité del Programa organice un debate bien documentado sobre los logros preliminares del objetivo estratégico y las esferas en las cuales se han propuesto mejoras. Como ya había indicado al Grupo colegiado de examen externo, el personal directivo superior concuerda en principio con las recomendaciones formuladas y está resuelto a garantizar que se tomarán las medidas adecuadas para su aplicación. A continuación se enuncian algunas de las medidas que ya han sido adoptadas:

3. Además, y basándose en la recomendación del informe, quisiéramos compartir nuestras opiniones con el Comité del Programa sobre las tres cuestiones específicas siguientes.

A. Preparación

4. La administración superior aprueba las conclusiones incluidas en el informe de evaluación, que indican que la Organización debe seguir refinando sus ventajas comparativas en aspectos clave relacionados con la preparación. Tal como se refleja en el informe, ya se han creado dos mecanismos para consolidar la coordinación institucional:

B. Socorro y rehabilitación agrícola

5. Durante el último decenio, la labor de socorro agrícola ha sido indudablemente la esfera de las actividades de campo de la FAO que ha crecido más. Esto es debido, parcialmente, a un aumento del número de emergencias, así como a un cambio de orientación de las fuentes de financiación, en favor de la financiación de proyectos en situaciones de emergencia en detrimento de los proyecto de desarrollo. Sin embargo, este crecimiento es debido fundamentalmente al aumento de la credibilidad de la FAO para responder a situaciones de emergencia. La FAO ha demostrado que no sólo proporciona insumos a los agricultores, sino que también es capaz de brindarles asistencia técnica esencial para reanudar la producción. Esta función ha sido reconocida de modo oficial y en la práctica por los donantes tradicionales y no tradicionales de la FAO.

6. Tal como indica el informe del Grupo colegiado de examen externo, se deben tomar medidas adecuadas para mejorar la eficacia y la idoneidad de estos programas de emergencia en expansión. Tras la reclasificación del Servicio de Operaciones Especiales de Socorro a la categoría de dirección (TCE) y la consolidación de la gestión del programa "Petróleo por Alimentos", ahora se deben abordar dos cuestiones:

C. Gestión de la fase de transición

7. Aunque la FAO tiene una ventaja comparativa a la hora de ejecutar la fase de transición en los países afectados por catástrofes, la administración superior reconoce que, hasta la fecha, la Organización no ha logrado grandes resultados en esta esfera. Sin embargo, adoptando un enfoque pragmático, tal como sucedió en Kosovo y en Afganistán, la FAO ha comenzado recientemente a mejorar sus capacidades para abordar la gestión de la fase de transición. El proceso ha sido impulsado, con la creación en el seno de la TCE de una nueva Dependencia de Políticas Humanitarias y de Rehabilitación (TCER). Esta dependencia tiene que estimular el inicio rápido de los programas y planes de rehabilitación, sobre la base de las respuestas de socorro de la FAO en el país. En estrecha colaboración con las direcciones técnicas interesadas, debería iniciar la fase de rehabilitación, que requiere una experiencia y capacidad técnicas sólidas y diversificadas. La dependencia facilitará la formulación de políticas y de un marco de inversiones con objeto de establecer el vínculo entre el socorro, la reconstrucción y el desarrollo. Cumplirá además una función catalizadora, que permitirá aumentar el apoyo a la FAO por parte de otros interesados directos y asociados en el proceso de transición. La TCER no tiene ninguna responsabilidad operativa respecto de la rehabilitación, que será asumida por otras direcciones o dependencias responsables.

8. Es necesario probar este nuevo modo de operación y se propone que se examine dentro de dos años. Basándose en la experiencia adquirida, la administración superior estará en condiciones de proponer una estructura definitiva tendiente a garantizar la función de la FAO en la rehabilitación.

__________________________

24 FAO Emergency Activities: Technical Handbook Series (folleto, sólo en inglés).

25 Los miembros del Grupo de expertos son: Arenas, Antonio (El Salvador), Director del Sistema Nacional de Estudios Territoriales; Aysan, Yasemin (Turquía), Jefe Interino del Programa para la Reducción de Catástrofes y Recuperación, PNUMA, Ginebra; Grunewald, François (Francia), Director de la ONG francesa “Urgence Réhabilitation Développement”; Holt, Julius (Reino Unido), Asociado Fundador del Food Economy Group Consultant SCF-UK; Jackson, Robin (EE.UU), Consejero Político, Programa Mundial de Alimentos, Roma; y Maalim, Mahboub (Kenia), Coordinador de las respuestas de emergencia para luchar contra las sequías en Kenia, Oficina del Presidente, Nairobi.

 


Índice