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5. PROCEDIMIENTOS DE AUTOPSIA

El biólogo, médico veterinario u otro profesional encargao de las tareas propias de inspección y certificación ictiosanitaria ha de tener conocimientos básicos de la anatomía pisciaria, sobre todo cuando es necesario llevar a cabo las operaciones correspondientes de autopsia, obtención de material para su despacho al laboratorio, etc.

Típicamente, el pez teleósteo cuenta con 10 sistemas de órganos, los cuales a la vez están compuestos de varias combinaciones de 6 tipos principales de tejidos, a saber: epitelial, contráctil, tejido de apoyo, reproductivo, circulatorio y nervioso. Las unidades estructurales y funcionales de dichos tejidos las componen células las cuales, como en el caso de los demás grupos animales, se caracterizan por la posesión de un núcleo, citoplasma y membrana celular.

En principio los sistemas anatómicos del pez teleósteo (del cual la trucha es un ejemplo) así como las funciones de los mismos, son los siguientes:

  1. Esqueletal: facilita estructura y apoyo al cuerpo, así como los correspondientes mecanismos de ligaduras y palancas para los músculos y de esa manera ayuda en operaciones tales como natación, ingestión de alimento, etc.; los principales componentes del sistema equeletal lo constituyen los huesos, cartílagos y tejidos conectivos.

  2. Integumentario: el integumento cubre el cuerpo dando un cierto grado de protección mediante la posesión de la piel, escamas, células pigmentarias y mucosas, etc..

  3. Respiratorio: el sistema respiratorio funciona en relación a la respiración externa en el sentido de absorber oxígeno disuelto en el ambiente acuático del pez, así como la excreción de CO2 hacia ese ambiente; a la vez, juega un importante papel en la regulación del equilibrio químico-osmótico entre el pez y el ambiente acuático a raíz de los cambios que tienen lugar a nivel de la superficie branquial.

  4. Circulatorio: las funciones principales del sistema circulatorio son las de transportar nutrientes, células sanguíneas, fluidos, gases disueltos y productos metabólicos a todas las partes del cuerpo.

  5. Muscular: este sistema cuenta con tres principales tipos de células, a saber: células estriadas, células no estriadas y células cardíacas, las cuales a la vez permiten los movimientos de natación, de los ojos y otros (musculatura estriada), movimientos involuntarios tales como el de alimento en el tracto gastro-intestinal (musculatura no estriada) y a la circulación sanguínea (musculatura cardíaca) respectivamente; también, y en su conjunto, los músculos ayudan a dar una forma determinada al cuerpo del pez.

  6. Digestivo: el sistema digestivo hace soluble a las substancias alimenticias en el sentido de permitir su absorción y utilización como fuente de energía, reparación y desarrollo de los distintos tejidos, etc.

  7. Excretorio: a través de las funciones renales, el sistema excretorio facilita la eliminación de algunos materiales metabólicos del cuerpo; también es de singular importancia este sistema en cuanto al mantenimiento del equilibrio osmótico se refiere;

  8. Reproductivo: permite la continuidad de la especie gracias a la producción contínua de ovas y espermas.

  9. Endocrino: el sistema endocrino complementa la integración funcional de todos los demás sistemas mediante la producción de diferentes hormonas en los correspondientes tejidos glandulares; este sistema, por lo tanto, constituye un factor de primordial importancia en el control del desarrollo (por ejemplo: el tiroides) y de la reproducción (por ejemplo: la hipófisis).

  10. Nervioso: el tejido nervioso facilita la operación de todos los demás sistemas, y también permite la orientación del pez hacia los diversos ambientes a raíz de los órganos de sentido especiales, del cerebro y de los nervios craneales y espinales.

Con el fin de proporcionar información básica a título de orientación, se hará una descripción de la anatomía de la trucha arco iris como representante de los salmónidos.

5.1 Caracteres morfológicos externos del salmónido

El cuerpo es elongado, compacto, más grueso hacia el centro y más fino hacia la cabeza y la cola respectivamente. La boca queda localizada terminalmente, y el labio inferior queda apoyado entre dos huesos de libre movimiento: el premaxilar hacia la parte anterior, y el maxilar hacia la parte posterior; tanto el premaxilar como el maxilar están dotados de dientes, los cuales se hallan típicamente en una sola fila. En cuanto la boca esté cerrada, se observa una fila de dientes palatinos al interior, la cual se encuentra paralela con la de los dientes maxilares; en la parte meridional de la boca se encuentran los así llamados dientes vomerinos. El labio inferior, o mandíbula, está compuesto de un hueso dentario que lleva dientes, y dos huesos posteriores en ambos lados; los dentarios se reúnen en una sínfisis anterior a la línea meridional, y dicha sínfisis se pone hinchada y encorvada hacia arriba (con forma de gancho) en los salmónidos machos sexualmente maduros en la época del desove.

Los ojos son grandes y carecen de párpados; la córnea es transparente. La nariz doble queda localizada un poco anterior a los ojos. No hay evidencia externa alguna de un sistema auditorio.

En ambos lados de la región posterior de la cabeza se encuentran los opérculos, cada uno de los cuales consta de tres huesos: opercular, sub-opercular, e inter-opercular respectivamente. El último de estos huesos está ligado con el ángulo de la mandíbula y el pre-opercular es uno de los huesos de la mejilla que sigue la forma general de hiomandibular. La parte ventral de la región ocular da lugar a una extensión delgada y membranosa la cual se denomina la membrana branquiestegal, apoyada por huesos delgados y aplanados llamados los radios branquiestegales. El área estrecha cubre la parte ventral de la garganta, y lo que separa las dos aperturas branquiales entre sí, se denomina el istmo.

La cabeza se extiende desde la trompa al límite posterior de la membrana opercular; por tronco se entiende esa parte del cuerpo que comprende el límite posterior del opérculo hacia el ano, llamándose la parte caudal la región postanal. El ano está localizado sobre la superficie ventral del cuerpo a una posición situada en la base de la aleta anal.

En los salmónidos se encuentran dos aletas dorsales. La anterior de ellas se compone de radios óseos blandos, mientras que la parte posterior está compuesta de tejido grasoso, motivo por el cual se llama aleta adiposa. Las otras aletas de los salmónidos incluyen la caudal, la anal, y las pectorales y pélvicas (o ventrales) en pares, todas las cuales se componen de radios blandos. En los salmónidos se presenta un proceso cartilaginoso axilar en el ángulo entre las aletas pélvicas de la pared corporal.

La superficie externa del cuerpo se encuentra cubierta por pequeñas escamas, menos la cabeza y las aletas. Se observa una línea lateral bien marcada, la cual posee funciones principalmente sensoriales. La epidermis está dotada de células pigmentarias y glándulas mucosas. Las escamas están situadas en bolsas dentro de la dermis. Cada escama consta de una placa ósea delgada con marcas sobre la superficie, siendo del tipo cicloide en vista que cada una posee un margen delgado liso.

5.2 Caracteres morfológicos internos del salmónido

La columna vertebral (o espina dorsal) apoya en forma auxiliar al cuerpo, siendo compuesta de dos tipos de vértebras: las del tronco y las de la cola. Se identifica la primera vértebra caudal por la posesión de una espina anal. Las partes de la vértebra típica del tronco constan de espina neural, arco neural, centro, zigapófisis y parapófisis; el parapófisis lleva costillas pequeñas en las vértebras del tronco, pero en las cuales es de suponerse que esas costillas estén extendidas en forma ventral para así formar el arco hemal y la espina hemal.

La parte posterior de la región caudal está modificada para dar apoyo a la aleta caudal. Las espinas neurales y hemales de las vértebras posteriores se encuentran dirigidas caudalmente, siendo aplanadas y anchas, hallándose en yuxtaposición entre sí con el objeto de brindar el apoyo necesario a los radios de la aleta caudal.

La parte ósea de la cabeza es muy compleja, y se compone de huesos y cartílagos aislados y, a la vez, mezclados entre sí. La cabeza consta del cráneo, aparato hioides, suspensorio, aparato opercular, arcos branquiales, y labios respectivamente. Tanto las aletas dorsal como anal cuentan con el apoyo de huesos, siendo éstos los interneurales y los interhemales respectivamente. Las aletas pectorales se encuentran apoyadas por el cleitro, supra-cleitro, post-emporo, escápula y coracoide, mientras que las aletas pélvicas tienen como base los basiterigios formando la cintura pélvica.

La musculatura consta de una serie de miomeros; músculos especiales, de origen segmental, sirven para hacer funcionar a las aletas, labios, y demás partes dotadas de movimiento.

La cavidad corporal se divide entre la cavidad abdominal y la cavidad pericardial respectivamente. La vejiga natatoria queda localizada por encima de las vísceras, y abre hacia el esófago mediante el ducto neumático (es decir: fisotoma). La boca conlleva directamente a la faringe, a partir de la cual las aberturas branquiales abren hacia el exterior. El esófago termina en un estómago tubular, el cual queda separado del intestino delgado mediante un esfínter pilórico. El intestino delgado continúa posteriormente, dando lugar al intestino grueso. La parte anterior del intestino delgado en los salmónidos posee varios tubos truncados, llamados los ciegos pilóricos. Se observa un hígado completo con vesícula biliar, así como un bazo.

Los salmónidos tienen cuatro pares de branquias, cada una de las cuales está dotada de una doble fila de filamentos branquiales. El quinto arco branquial no lleva filamentos. En ambos lados anteriores por debajo del opérculo se halla un pseudobranquio hioide.

La extensión de la superficie respiratoria de cada filamento branquial queda aumentada por los numerosos lamelos branquiales de los cuales está compuesto. La operación de inspiración se efectúa al abrirse los opérculos hacia afuera, proceso durante el cual la boca abre a raíz del movimiento de los opérculos hacia adentro, o sea: hacia el cuerpo. La boca cierra y válvulas orales sellan los espacios por detrás de los dientes de tal manera que el agua debe moverse por encima de la superficie de las branquias y salir por el espacio formado entre el opérculo y el cuerpo.

El corazón consta de un sinus venosus, un atrio, y un ventrículo; el ventrículo se continúa con un bulbus arteriosus. La sangre queda oxigenada en las baranquias y pasa hacia la parte anterior y la parte posterior del cuerpo. En el primer caso pasa a través de las arterias carótidas, y en el segundo caso a través de la aorta. Después de proveer oxígeno, etc., a los diferentes sistemas, la sangre vuelve al sinus venosus.

El cerebro del salmónido consta de diez pares de nervios craneanos y queda localizado dentro del cráneo. El saco olfatorio es una cavidad ciega a la cual abren las narinas.

Los riñones (del tipo mesonéfrico) tienen un tamaño considerable, y quedan situados a lo largo del tronco dorsal en una situación dorsal en relación a la vejiga natatoria. En la parte posterior, o caudal, los riñones drenan en una pequeña vejiga urinaria la cual descarga al sinus urinogenital.

En los machos, los testículos son órganos largos, lisos y de color blanquecino, los cuales se extienden casi a lo largo de la cavidad abdominal. Cada uno continúa posteriormente hacia un ducto que abre en el sinus urinogenital. Los testículos están situados inmediatamente por debajo de la vejiga natatoria. Los ovarios de las hembras también se extienden a lo largo de la cavidad abdominal, y contienen numerosas ovas; carecen de oviductos. Los ovarios, en contraste a los testículos, tienen un aspecto granular. Las ovas maduras llegan al exterior a través del sinus urinogenital.

5.3 Técnica de autopsia

Aunque de acuerdo con la etiología de la enfermedad puede resultar necesaria una investigación detallada de un determinado órgano (por ejemplo: el riñón en el caso de la enfermedad bacteriana del riñón), es siempre conveniente efectuar una autopsia de una manera completa y uniforme. Cualquier autopsia debe llevarse a cabo tan pronto como sea posible, constando dicho procedimiento de dos partes principales, a saber: el examen externo y el examen interno respectivamente.

5.3.1 Examen externo

En primer lugar, se efectúa un cuidadoso examen de la superficie externa del pez con el fin de observar y anotar la presencia de cualquier anormalidad aparente y visible macroscópicamente. En este sentido se destaca la importancia que tiene la coloración del cuerpo, la posible presencia de exoftalmia, erizamiento o pérdida de las escamas, congestión y ulceración, hinchamiento y necrosis de las aletas, erosión de los bordes de los opérculos, presencia de parásitos adultos o larvales, etc. Seguidamente se procede a efectuar exámenes microscópicos de preparados frescos y de frotis de la parte afectada, como así también la siembra de los correspondientes medios de cultivo para el aislamiento de bacterias, hongos, etc.

5.3.2 Examen interno

Después de haberse efectuado las siembras correspondientes a partir de toda lesión u otra anormalidad, se desinfecta el pez mediante la limpieza externa del mismo con un algodón o trozo de tela impregnado con una solución acuosa recién preparada de un producto aprobado en base a yodo orgánico que contenga quinientas partes por millón (500 ppm) de yodo disponible (como I2 libre); seguidamente se coloca el pez sobre una bandeja de disección debidamente desinfectada, con el lado izquierdo del pez por arriba. Con instrumental debidamente desinfectado, se corta la aleta pectoral, y se efectúa un corte transversal en un punto inmediatamente anterior al ano en una posición entre éste y las aletas pélvicas, evitando cualquier daño al intestino. Se introduce la punta de un par de tijeras en ese corte transversal, y se procede a efectuar una segunda incisión en la pared abdominal en línea recta hacia el istmo a la altura de las branquias; el segundo corte se efectúa partiendo desde el punto donde se hizo la incisión inicial hacia arriba, en forma semi-circular, para cortar la pared dorsal de la musculatura que cubre la cavidad abdominal; este corte se continúa hasta la altura del opérculo. Al levantar la pared cortada, debe ejercerse mucho cuidado así como desprender cuidadosamente cualquier unión de tejido conectivo que pudiera haber entre ésta y las vísceras, mediante el uso de una aguja de disección. Posterior a esto se hace otro corte, o corte final, desde el opérculo hasta el istmo donde termina el primer corte, para poder retirar la parte anteriormente cortada y dejar expuestas in situ las vísceras. A continuación se corta el opérculo, dejando así descubiertas las branquias.

Seguidamente se procede a efectuar un examen macroscópico de los órganos internos para detectar cualquier coloración anormal u otra anormalidad que sea patente en los mismos. También es de importancia observar y anotar la presencia de cualquier líquido o fluido anormal en la cavidad abdominal misma. Han de efectuarse CUANTO ANTES siembras sobre los medios de cultivo correspondientes a partir de cualquier órgano que presente señales anormales, para así evitar en lo posible una contaminación posterior.

Al haberse efectuado los correspondientes exámenes macroscópicos de los órganos in situ, se procede a sacar el hígado, bazo, tracto gastro-intestinal y páncreas in toto, cortando el tracto gastro-intestinal a nivel del ano y del esófago respectivamente. Una vez sacados dichos órganos, quedan expuestos para su examen el riñón, vejiga natatoria y gónadas. El riñón se saca al levantarlo cuidadosamente de la parte dorsal de la cavidad abdominal del pez, operación que también puede incluir el retiro de la vejiga urinaria y uretras (si se lleva a cabo con sumo cuidado).

La operación final de la autopsia incluye una exposición del cerebro y el retiro de los ojos. El cerebro puede retirarse al efectuar una serie de incisiones en los músculos epaxiales a nivel del cráneo, eliminando la parte superior ósea del mismo.

Una vez terminados los procedimientos de autopsia, los restos del pez y de los órganos, etc., deben ser desinfectados mediante su colocación en una solución acuosa recién preparada de un producto aprobado en base a yodo orgánico que contenga quinientas partes por un millón de yodo disponible (como I2 libre). Posteriormente este material será destruido por incineración. El instrumental usado en la disección, vidriería, etc., también será desinfectado mediante la exposición en una solución acuosa recién preparada de un producto aprobado en base a yodo orgánico que contenga quinientas partes de millón (500 ppm) de yodo disponible (como I2 libre).


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