Dado que en la mayor parte del mundo no se cuenta con suficiente leche y productos lácteos, es importante considerar todos los medios de aumentar los abastecimientos. Se puede obtener un aumento potencial importante mediante el uso de la leche descremada, un alimento de alto valor nutritivo que puede alcanzarse a un costo mucho más bajo que el de los elementos nutritivos que se encuentran en la leche sin descremar. Un aumento en el consumo de leche descremada mejoraría substancialmente el estado de nutrición de millones de personas, especialmente niños.
Actualmente, la mayor parte de la leche descremada que queda después de la fabricación de mantequilla, se usa para alimentar animales y parte de ella aún llega a tirarse. Los dos problemas que surgen desde luego, son: primero la manera de fomentar el aumento del consumo de leche descremada, deshidratada; y segundo, la forma de asegurar a los productores mercados estables. A menos que el agricultor obtenga otros alimentos con proteínas para sus animales, a un costo que no exceda al de la leche descremada, seguirá destinándola para sus animales. Deberían hacerse arreglos, donde fuere posible, para obtener de los agricultores leche sin descremar más bien que crema, y las plantas deberían estar equipadas para poder preparar leche descremada destinada al consumo humano. Sin embargo, estos arreglos no pueden realizarse con éxito hasta en tanto se crie una demanda estable para los productos de la leche descremada.
Existe la necesidad de convencer a los consumidores acerca del valor nutritivo de la leche descremada, su bajo costo y su buen sabor cuando se reconstituye adecuadamente. Los métodos de usar la leche descremada y sus productos deberían ser mas conocidos; los programas de alimentación escolar pueden contribuir a deseminar estos conocimientos. Con el fin de obtener una mayor producción, se deberían desarrollar programas de alimentación para asegurar el consumo de la parte correspondiente de la producción total destinada para ser usada en el país productor. Se necesita dar seguridades de una demanda de larga duración para poder estimular la producción destinada a la exportación.
El informe presentado al Consejo (CL 2/7) analizó estos problemas e hizo también hincapié sobre la importancia de organizar los abastecimientos de leche de tal manera que se suministre a los niños leche sin descremar, ya sea en estado natural o industrializada. El Fondo Internacional de Socorro a la Infancia, en colaboración con la FAO, ha realizado una encuesta sobre la situación de los abastecimientos de leche en varios países de Europa y ha solicitado mayor asistencia de la FAO en auxilio de los gobiernos en la formulación de sus planes para aumentar la producción de leche y asegurar el mejor aprovechamiento de dichos abastecimientos en beneficio de los niños, los adolescentes y las mujeres embarazadas o lactatnes.
El Consejo recomienda que la situación de los abastecimientos de leche en Europa, especialmente en lo que respecta a las necesidades de los niños, debería ser objeto de mayores investigaciones por parte de la FAO tanto en las oficinas centrales como a través de la oficina europea.
El Consejo sugiere también que la FAO, en colaboración con la Organización Mundial de la Salud, debería examinar las disposiciones existentes en los diferentes países respecto a la importación y venta de leche descremada con el fin de averiguar si estas disposiciones actúan para prevenir o restringir el consumo de leche descremada por niños de mayor edad.
