C 2003/17


Conferencia

32º período de sesiones

Roma, 29 de noviembre -10 de diciembre de 2003

Año Internacional del Arroz -2004


1. En respuesta a la petición formulada durante el 31º período de sesiones de la Conferencia de la FAO, la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su quincuagésimo séptimo período de sesiones celebrado en diciembre de 2002, aprobó un proyecto de resolución por el que se declaraba el año 2004 como Año Internacional del Arroz (AIA). En la resolución, presentada por el Gobierno de Filipinas y patrocinada conjuntamente por 43 países, se invitaba a la FAO a facilitar la observancia del AIA, en colaboración con los gobiernos, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), los centros del Grupo Consultivo sobre Investigaciones Agrícolas Internacionales (GCIAI) y otras organizaciones competentes internacionales, no gubernamentales y del sector privado relacionadas con la promoción del arroz.

2. La declaración del AIA pone de relieve la importancia del arroz en el contexto de los problemas mundiales en materia de la seguridad alimentaria, la mitigación de la pobreza, la conservación del patrimonio cultural y el desarrollo sostenible. El arroz es el alimento básico de más de la mitad de la población mundial, y los productos y recetas a base de arroz, así como los festivales y tradiciones referentes a dicho alimento ocupan un lugar destacado en el patrimonio cultural mundial. El cultivo del arroz y las actividades posteriores a la recolección proporcionan empleo a varios cientos de millones de personas en las zonas rurales, especialmente en los países en desarrollo. Más de las cuatro quintas partes del arroz del mundo son producidas por pequeños agricultores y se consumen a nivel local. Debido al protagonismo de este cultivo en el ámbito de la nutrición y los medios de subsistencia, un estancamiento de la producción de arroz tendría consecuencias catastróficas para la seguridad alimentaria y la lucha contra la pobreza. Además, las repercusiones de la producción de arroz sobre los recursos naturales son gigantescas, lo que supone que conseguir unos sistemas sostenibles de producción de arroz debe convertirse en una meta prioritaria para la seguridad alimentaria y la nutrición humana a largo plazo.

3. El objetivo fundamental del AIA estriba en promover un aumento de la producción de arroz eficaz y sostenible y en ofrecer orientaciones en ese sentido. La estrategia se cifra en lograr que la comunidad mundial se comprometa a realizar actividades que redunden en beneficio mutuo, entre las que cabe citar la generación e intercambio de información, la transferencia de tecnología avanzada a través de los cauces de la educación y la divulgación, la aplicación de practicas eficaces de gestión y el fomento de un entorno normativo y regulador que favorezca la promoción del arroz. Al potenciar el conocimiento generalizado de cuáles son los obstáculos que deben abordarse para facilitar el desarrollo del arroz y cuáles las posibilidades que pueden aprovechar las diferentes partes interesadas, se espera que las medidas integradas, tanto inmediatas como a más largo plazo, favorezcan la seguridad alimentaria y la lucha contra la pobreza en todo el mundo. Los últimos acontecimientos en el ámbito de la ciencia y la tecnología, así como en el de la comunicación mundial, ofrecen nuevas opciones y enfoques para lograr los objetivos del Año Internacional del Arroz.

4. Están cobrando impulso las actividades de planificación y preparación para conmemorar el AIA. Durante una reunión oficiosa celebrada en la FAO los días 6 y 7 de marzo de 2003, los representantes de las principales partes interesadas crearon un Grupo de Trabajo Internacional oficioso para el AIA. Este grupo convino en adoptar una hoja de ruta para el AIA y un lema “el arroz es vida”. Ya se ha seleccionado un logotipo oficial para el AIA. En la Sede de la FAO, se ha creado una Secretaría para la aplicación del AIA; ha desarrollado un Plan de Comunicación y un sitio web para el AIA. En preparación para la campaña de sensibilización mundial, se están elaborando también un documento teórico, hojas informativas, un calendario internacional del arroz, un video informativo y un libro de recetas a base de arroz. Se han redactado directrices para fomentar la participación de los países, con miras a potenciar este último aspecto a nivel nacional. Ya ha habido varios países y organizaciones internacionales que se han mostrado dispuestos a ayudar a traducir los documentos del AIA a los cinco idiomas oficiales de las Naciones Unidas. Se están organizando los preparativos para poner en marcha oficialmente el 31 de octubre de 2003 el Año en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, así como los preparativos para que el AIA esté representado en varias conferencias internacionales y regionales y en los simposios organizados con tal fin a escala mundial. Por último, se ha formulado una propuesta de fondo fiduciario y organizado una reunión de donantes para el 23 de septiembre de 2003.

5. En el 17º período de sesiones del Comité de Agricultura (COAG), celebrado del 31 de marzo al 4 de abril de 2003, varios Estados Miembros reconocieron que en el Programa de Labores y Presupuesto inicial no se habían asignado fondos con cargo al Programa Ordinario para el AIA, e hicieron un llamamiento con miras a disponer de recursos extrapresupuestarios a fin de apoyar esta labor. Las actividades realizadas hasta la a fecha han suscitado grandes esperanzas de que la celebración del AIA constituya un éxito. Se han establecido comités para el Año Internacional del Arroz en una serie de países, así como en los centros del GCIAI, que son los asociados internacionales de la FAO, para la conmemoración del AIA. El Año se ha concebido como una plataforma que permitirá abordar los problemas de carácter político, económico, social, técnico y ambiental cada vez más complejos a los que ha de hacer frente el desarrollo sostenible del cultivo del arroz. Además, el AIA configurará un marco para las actividades nacionales, regionales e internacionales destinado a consolidar un desarrollo sostenible, basado en el arroz, más allá del año 2004.