COFO/2005/INF/8


 

COMITÉ DE MONTES

17º PERÍODO DE SESIONES

Roma (Italia), 15-19 de marzo de 2005

HISTORIA DEL COMITÉ DE MONTES

 

Introducción

1. En la presente nota informativa se presenta de forma sucinta la historia del Comité de Montes de FAO (COFO), incluida una visión de conjunto de las tendencias de los temas que el Comité ha abordado.

2. La Conferencia de la FAO, que se reunió por primera vez en 1945, constituyó el principal foro mundial de debate sobre cuestiones forestales internacionales desde mediados de los años 40 hasta 1971, año en que se estableció el COFO como comité permanente del Consejo. El objetivo declarado del COFO era “efectuar exámenes periódicos de los problemas forestales de carácter internacional y asesorar al Director General sobre el programa de trabajo de la Organización a medio y a largo plazo en la esfera de los montes y sobre la ejecución de dicho programa”. Desde su primer período de sesiones celebrado en 1972, el COFO se ha reunido periódicamente cada dos años, con una interrupción excepcional de tres años entre 1990 y 1993, período durante el cual se ajustó el calendario para que el COFO y la Conferencia FAO pudieran reunirse en los mismos años.

3. El programa del COFO ha experimentado una cierta evolución a lo largo del tiempo, durante la cual se ha hecho un creciente hincapié en las cuestiones de política forestal. Actualmente el programa incluye temas recurrentes, tales como el examen de los programas de la FAO en el sector forestal, la labor/recomendaciones de las comisiones forestales regionales, la Situación de los bosques del mundo (SOFO) y el Congreso Forestal Mundial. La mayor parte del período de sesiones se destina al debate de cuestiones de importancia internacional relativas a la política forestal y de carácter técnico; por ejemplo, en 2005 el COFO examinará la función de los bosques en la consecución de los objetivos de desarrollo del Milenio, los incendios forestales así como los bosques y la bioenergía.

4. Los primeros períodos de sesiones del COFO (de 1972 hasta 1978) comenzaban con una ponencia inaugural pronunciada por una personalidad destacada del ámbito forestal. La idea de un discurso de apertura o principal se ha recuperado en 2005, con una locución especial a cargo del Primer Ministro de Finlandia.

5. El COFO está abierto a todos los miembros de la FAO. La asistencia a los períodos de sesiones del COFO ha aumentado a lo largo de los años paralelamente a la ampliación del número de miembros de la FAO. Dicha asistencia aumentó de 1972 a 1990, pasando de 55 a 97 Estados Miembros respectivamente, se mantuvo en 100 miembros aproximadamente hasta 2001 y aumentó en 2003 hasta alcanzar la cifra de 113 Estados Miembros, con más de 400 participantes inscritos en el 16º período de sesiones.

Principales tendencias

6. De 1945 hasta 1969, el sector forestal constituyó uno de los principales temas del programa de la Conferencia de la FAO. Los primeros períodos de sesiones de la Conferencia de la Organización se centraron en la necesidad de restaurar los bosques y reconstituir los recursos madereros después de la Segunda Guerra Mundial. Con los años, los debates evolucionaron, dejando paso a las principales cuestiones técnicas y de política del momento. Quizá la tendencia más importante a largo plazo haya sido la evolución hacia la consideración de la silvicultura en un amplio contexto socioeconómico interdisciplinario.

7. Desde el principio, la Conferencia examinó las cuestiones forestales relativas a las distintas regiones del mundo. Ello condujo al establecimiento de comisiones forestales regionales, que constituyeron un foro de debate para los países sobre sus preocupaciones en relación con los bosques a nivel regional. En 1947, la Conferencia estableció la Comisión Forestal Europea, y en un plazo de 15 años también se habían establecido comisiones forestales regionales en América Latina y el Caribe, Asia y el Pacífico, el Cercano Oriente, África y América del Norte. En 2004, las seis comisiones forestales regionales se habían reunido un total de 127 veces. En los últimos años, las comisiones forestales regionales han actuado cada vez más como mecanismo de acción regional, por ejemplo para promover activamente la ejecución de los programas forestales nacionales y las propuestas de acción del Grupo intergubernamental ad hoc sobre los bosques (IPF)/Foro internacional sobre los bosques (IFF).

8. Las industrias forestales y la restauración de los suministros de madera ocuparon un lugar destacado en los primeros períodos de sesiones de la Conferencia y, junto con la explotación forestal y la comercialización y utilización de productos forestales, han permanecido en el programa por medio del COFO. Con el tiempo, los debates del COFO han pasado de centrarse en la grande a la pequeña industria forestal, la explotación forestal, las empresas forestales de base comunitaria, el combustible de madera y los productos forestales no madereros.

9. En 1981, una de las principales cuestiones de política forestal fue la madera para energía, que fue objeto de un importante informe que la FAO había presentado a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre fuentes de energía nuevas y renovables. En particular, en 2005 se volverá a examinar la cuestión de los bosques y la bioenergía.

10. En 1995, el COFO tomó nota de los resultados de una reciente consulta de expertos a nivel internacional sobre productos forestales no madereros e instó a la FAO a que efectuara un seguimiento a las recomendaciones en este ámbito y a que se convirtiera en un “centro de excelencia” para el desarrollo de los productos forestales no madereros. En reciente períodos de sesiones, el COFO ha respaldado la necesidad de que se mantenga el liderazgo de la FAO en este ámbito.

11. El examen periódico de la información sobre bosques y su utilización en los estudios de perspectivas y tendencias han conservado su importancia a lo largo de los 60 años de existencia de la Organización. En los últimos años, se ha solicitado nueva información sobre parámetros ambientales y sociales, pero las limitaciones en materia de cantidad y calidad de datos y definiciones de términos forestales fundamentales plantean importantes problemas. Conforme las evaluaciones de los recursos forestales mundiales han ido cobrando mayor complejidad, se ha hecho necesario “afinar” más en los debates, por ejemplo en las recientes consultas de expertos sobre la armonización de definiciones en el ámbito forestal. Asimismo, el COFO ha pedido a la FAO que ayude a los países a reforzar su capacidad de vigilancia, evaluación e información sobre sus recursos e instituciones en el ámbito forestal.

12. La contribución de los bosques a los medios de vida siempre ha constituido un tema de interés para la Conferencia y el COFO, pero el hincapié y la terminología han cambiado con el tiempo. En 1976, los delegados recomendaron que se otorgara una gran prioridad a la contribución forestal al desarrollo de las comunidades en el programa de trabajo de la FAO. Posteriormente, el octavo Congreso Forestal Mundial (1978), bajo el lema Bosques y gente, reforzó el concepto de silvicultura social. En la década de los ochenta, la FAO se convirtió en un líder del movimiento “silvicultura comunitaria”; en los últimos años, este concepto se ha integrado en los programas sobre silvicultura de la FAO bajo el concepto de “actividad forestal participativa”, que mantiene su identidad como elemento del Programa de Labores y Presupuesto de la FAO. Dicho programa hace un gran hincapié en los “medios de vida sostenibles”.

13. Se puede observar una tendencia similar a la integración de la dimensión del género, cuestión que no se abordó en los primeros períodos de sesiones de la Conferencia o del COFO. En 1986, se recomendó que se diseñaran programas de capacitación y extensión en los países en desarrollo orientados específicamente al grupo de las mujeres, y en 1990 el COFO volvió a tratar la cuestión. En los últimos años no ha constituido un tema aparte del programa ya que se ha avanzado progresivamente en la “incorporación de las cuestiones de género”.

14. Desde los primeros períodos de sesiones de la Conferencia de la FAO se reconoció la importancia primordial de promover mejoras en la investigación y capacitación en el ámbito forestal. Desde el principio se reconoció el carácter prioritario para la FAO de la colaboración con la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO). Sin embargo, es interesante observar que la capacitación forestal no ha figurado en el programa en los 15 últimos años, a pesar de seguir constituyendo un programa apoyado por la FAO, tal como revela el número de Unasylva dedicado a “Reorientar la enseñanza forestal” en 2004.

15. Los debates sobre la ordenación forestal comenzaron en 1949, año en que se invitó a la FAO a definir la expresión “bosque manejado”. En los años noventa el debate había pasado a centrarse en un planteamiento mucho más amplio de la ordenación forestal, que condujo al establecimiento y aplicación de criterios a indicadores de ordenación forestal sostenible. En los últimos años, las cuestiones relativas a la política forestal han tendido a centrarse menos en temas específicos y más en planteamientos pluridisciplinarios, haciendo hincapié en el refuerzo de las instituciones que apoyan los procesos nacionales y regionales y promueven los enfoques intersectoriales.

16. La plantación de árboles figuró desde el principio en los debates sobre silvicultura en la Conferencia de la FAO, incluida la forestación de los desiertos y otras tierras desprovistas de vegetación. La importancia de las semillas de buena calidad, la genética forestal y la conservación de los recursos genéticos han figurado permanentemente en el programa del COFO.

17. La protección de los bosques siempre ha sido un tema recurrente del programa del COFO. Ya en 1950 los incendios forestales ocuparon un lugar destacado en el programa y volverán a ocuparlo en el 2005.

18. Antes de la creación de la FAO, se celebraron dos Congresos Forestales Mundiales, uno en Roma en 1926 y otro en Budapest en 1936, pero a partir del tercer Congreso la FAO, por medio del Consejo, eligió el país anfitrión y participó en la organización de los congresos. En 1974, el COFO aprobó los “Principios Aplicables a los Congresos Forestales Mundiales”. En el 12º Congreso se pidió a la FAO que efectuara un seguimiento de la Declaración del Congreso y que presentara informes sobre su aplicación en el 13º Congreso. En 2005, se pedirá al COFO que examine los ofrecimientos de los Estados Miembros de acoger el 13º Congreso.

19. La propia naturaleza del COFO ha evolucionado a lo largo del tiempo, y recientemente cabe destacar lo siguiente:

Del Programa de acción forestal tropical (PAFT) a los programas forestales nacionales

20. Desde el principio se reconoció la especificidad de la silvicultura en los trópicos y en 1965 la Conferencia de la FAO estableció el Comité de Desarrollo Forestal en los Trópicos (CFDT). Aunque actuó como un comité aparte, el CFDT se debería considerar parte de la historia del COFO. En 1983, el CFDT recomendó un plan de acción para la conservación y desarrollo de los bosques tropicales, que condujo a la creación, dos años más tarde, del Programa de acción forestal tropical (PAFT), incardinado en la FAO, en colaboración con varias otras importantes organizaciones internacionales.

21. En 1990, a pesar de tener sólo cinco años de existencia, el PAFT fue puesto en entredicho pues los países, las ONG y las organizaciones internacionales se esforzaban por resolver de forma eficaz cuestiones de política forestal mundial complejas y difíciles. Un panel de alto nivel, comisionado por la FAO, recomendó cambios radicales que condujeron a la supresión del “PAFT” (considerado de forma creciente como demasiado prescriptivo y autoritario) y a una evolución de los “programas forestales nacionales” (procesos globales, participativos “de abajo arriba” adaptados a las necesidades de cada país, incluidos los países no tropicales).

22. En los últimos años el COFO ha apoyado de forma constante la importancia de los programas forestales nacionales (definidos de forma amplia) como clave para llevar a cabo una ordenación forestal sostenible en los países de todo el mundo. Los programas forestales nacionales se han convertido en la clave de bóveda de las actividades de refuerzo de la capacidad nacional apoyadas por la FAO y varios asociados, tal como refleja el apoyo al Mecanismo independiente para los programas forestales nacionales incardinado en la FAO.

El COFO y el diálogo internacional sobre los bosques

23. No sería exagerado afirmar que el actual “diálogo internacional sobre las políticas forestales” se inició cuando se debatieron cuestiones de política forestal en la primera conferencia de la FAO, celebrada en 1945, y se prosiguió en el COFO a partir de 1972 y en el CFDT entre mediados de los años 60 y principios de los 90. Asimismo, desde finales de los años 40, las políticas forestales internacionales fueron debatidas regularmente en las comisiones forestales regionales.

24. Los principios de la década de los 90 fueron una época de gran actividad en el diálogo internacional sobre los bosques. En 1992, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (CNUMAD) constituyó un hito en el que se acordaron los “principios forestales”, jurídicamente no vinculantes, que condujeron posteriormente al establecimiento del Grupo intergubernamental ad hoc sobre los bosques (IPF), el Foro intergubernamental sobre los bosques (IFF), y, por último, al Foro de las Naciones Unidas sobre los Bosques (FNUB), como órgano auxiliar del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC).

25. El COFO ha apoyado de forma constante la CNUMAD y las iniciativas posteriores a ésta. La FAO ha elaborado una gran parte de los documentos de antecedentes y apoyo técnico examinados por el IPF, el IFF y el FNUB. Además, el COFO ha apoyado el establecimiento del Equipo interinstitucional de tareas sobre los bosques, que a invitación del ECOSOC en 2000 condujo al establecimiento de la Asociación de Colaboración en Materia de Bosques (ACB) compuesta por 14 miembros, ambos bajo la dirección de la FAO. Este creciente hincapié en las asociaciones también se refleja a nivel de la Organización, tal como ilustra el Marco estratégico para la FAO 2000 – 2015, aprobado por la Conferencia de la FAO.

26. En 2003, el COFO elogió la labor de la FAO en materia de silvicultura y cambio climático y recomendó que reforzara sus trabajos técnicos en colaboración con el Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). El COFO también ha apoyado a las asociaciones entre la FAO y la Convención de Lucha contra la Desertificación de las Naciones Unidas (CLD), el Convenio sobre la diversidad biológica (CDB) así como la aplicación de las propuestas de acción del IPF y el IFF.

27. Hace tiempo que se reconoció la necesidad de un compromiso de los dirigentes nacionales a favor de la conservación y ordenación de sus bosques. En 1984, el COFO recomendó que cada país adoptara todas las medidas posibles para acelerar el proceso encaminado hacia una mayor sensibilización política acerca de la importancia fundamental para el futuro de la humanidad de prestar una atención adecuada a los bosques del mundo en el horizonte del año 2000 y más adelante. Las reuniones de los ministros competentes en materia de bosques organizadas de modo que coincidieran con el COFO en 1995 y 1999 contribuyeron a una mayor sensibilización y compromiso político respecto del sector forestal a nivel nacional, regional y mundial. El 14 de marzo de 2005 tendrá lugar otra reunión ministerial. El FNUB también ha celebrado reuniones de ministros de bosques a nivel mundial así como en el plano regional, por ejemplo en Europa, África Central y América Central. Además, recientemente se ha celebrado una Cumbre sobre bosques en febrero de 2005 en África Central, a la que han asistido Jefes de Estado y de Gobierno.

28. El reto que se plantea a la FAO y sus Estados Miembros consiste en hallar una forma de traducir el compromiso político de alto nivel en medidas efectivas sobre el terreno. El COFO sigue desempeñando su función histórica de procurar vincular el compromiso político –mediante instituciones regionales y nacionales– con políticas y prácticas forestales eficaces sobre el terreno.

29. Los actuales desafíos para el COFO son similares a los que se plantearon a la Conferencia de la FAO en su primer debate sobre el sector forestal hace 60 años: cómo abordar eficazmente los aspectos económicos, sociales y ambientales de los bosques en el contexto más amplio de una sociedad en la que los bosques desempeñan un papel tan importante.