PC 93/5-Sup.2


Comité del Programa

93º período de sesiones

Roma, 9-13 de mayo de 2005

Evaluación de la producción, las políticas y la información pecuarias (Programa 2.1.3)

Informe del Grupo de Examen por Especialistas Externos


1. El Grupo de Examen por Especialistas Externos de la producción, las políticas y la información pecuarias estaba compuesto por 10 expertos: Margaret Gill (Macaulay Institute, Aberdeen), Bonaventure Mtei (SADC, Gaborone), Jan Philipsson (SLU – Universidad Agronómica de Suecia, Uppsala), Nipon Poapongsakorn (Facultad de Económicas, Universidad Thammasat, Tailandia), Agnes Rola (Institute of Strategic Planning and Policy Studies, Universidad de las Filipinas), Andrea Rosati (Federación Europea de Zootecnia), Carlos Sere (ILRI), Philippe Vialatte (Comisión Europea), Gérard Viatte (anteriormente de la OCDE), Akke van der Zijpp (Universidad de Wageningen, Países Bajos), que se reunieron en Roma entre el 7 y el 10 de febrero de 2005. El Grupo mantuvo conversaciones detalladas con el Subdirector General del Departamento de Agricultura, la administración superior y el personal de la Dirección de Producción y Sanidad Animal (AGA), que incluyeron una presentación y debate de la evaluación sobre la sanidad animal de 2002, y se entrevistaron también con personal de otros departamentos de la FAO. El Grupo estudió el proyecto de informe final de síntesis preparado por el equipo de evaluación a la luz de las opiniones expresadas por el personal de la FAO. El Grupo desea manifestar su agradecimiento al personal de PBEE y AGA por su ayuda y su enfoque positivo de la evaluación en su conjunto.

Observaciones generales

Panorama general

2. El sector ganadero es el de crecimiento más rápido en la agricultura. El crecimiento de los años recientes ha sido alto, especialmente en los países en desarrollo, donde las tasas de crecimiento anual de los últimos diez años han sido del 3,77 por ciento, en comparación con el 2,71 por ciento en los cultivos y el 1,18 por ciento en los productos básicos no alimenticios. La consecuencia de este crecimiento es de gran calado, con un alcance, por ejemplo, sobre las necesidades mundiales en producción de trigo y da lugar a cambios sociales y económicos. El sector ganadero tiene el potencial de realizar una importante contribución a la realización de los objetivos de desarrollo del Milenio y la AGA tiene una responsabilidad de garantizar que su programa se centre en las cuestiones que poseen un potencial para facilitar la materialización de dicha contribución.

3. El Grupo apoya el planteamiento de bienes públicos adoptado por la AGA y alaba sin reservas la contribución realizada a través de las tres iniciativas de alto nivel dirigidas por la AGA: Conservación y ordenación de los recursos zoogenéticos, Iniciativa de políticas ganaderas en favor de los pobres e Iniciativa de ganadería, medio ambiente y desarrollo (LEAD). La AGA tiene el potencial, a través de unas iniciativas con visión de futuro, para determinar nuevas iniciativas que podrían realizar una contribución similar más adelante. El Grupo toma nota de que las actividades que se dirigen directamente al progreso de los propietarios de pequeña escala no son el único medio a través del cual el sector ganadero contribuye a la mitigación de la pobreza.

Recomendación 1: Declaración de cometido

4. El Grupo coincide con el equipo de evaluación en el sentido de que el personal de la AGA debería encargarse de reformular la declaración de cometido a la luz de la evaluación.

Recomendación 2: Notoriedad del sector ganadero en la FAO

5. El Grupo considera que la notoriedad de la AGA en la FAO (y fuera de la misma) ha crecido en años recientes, pero dicho incremento de notoriedad ha de ser aún mayor para ser reflejo de la tasa de crecimiento del sector ganadero.

6. Una manera de alcanzar mayor notoriedad dentro de la FAO consistiría en disponer de más personal con una formación en temas ganaderos o, sencillamente, con una mejor comprensión de los sistemas y los problemas de la ganadería, en direcciones como las que trabajan en cuestiones normativas, económicas y/o sociales. El personal de la AGA también debería tomar iniciativas planteando cuestiones relacionadas con la ganadería como, por ejemplo, participando en las EPAI y en otras actividades intersectoriales (p. ej. el cambio climático, el VIH/SIDA, el género, etc.). Una mayor notoriedad incrementaría la capacidad de la AGA para apoyar las actividades más integradas con otras direcciones de la FAO.

7. Se considera favorablemente la introducción de la ganadería como un tema del programa del COAG y el Grupo coincide en que debería tener un carácter permanente. El Grupo también sugiere que resultaría adecuado utilizar mecanismos ya existentes o planificados para aumentar más eficazmente la notoriedad de las actividades relacionadas con el sector ganadero.

8. Se debería elaborar una estrategia de comunicación de la AGA y esta contribuiría a una mayor notoriedad. A este respecto, el Grupo estima muy prioritarias las recomendaciones referentes a publicaciones e información.

Recomendación 3: Interdisciplinariedad

9. El Grupo reconoce que el personal de la AGA está sobrecargado de trabajo y que se espera que las dotaciones de personal y presupuesto se mantengan restringidas a lo largo de los próximos años. Las recomendaciones se formulan en dicho contexto.

10. El Grupo apoya las recomendaciones de reforzar aún más la interdisciplinariedad, a la vez que reconoce que la AGA ha destacado en la FAO a la hora de integrar aspectos normativos y técnicos.

11. El Grupo reconoce plenamente la importancia de que se considere que la ganadería realiza una aportación a los objetivos generales de desarrollo conjuntamente con otros subsectores importantes como la agricultura, la silvicultura, etc., con el fin de alcanzar los ODM. El Grupo apoya la recomendación de integrar más estrechamente la labor de la AGA en la del Departamento de Agricultura. Ello es coherente con la recomendación formulada en la evaluación de la AGP en el sentido de insistir en la integración entre cultivos y ganadería.

12. Con el fin de alcanzar más interdisciplinariedad y eficacia dentro de la actual estructura y carga de trabajo de la FAO, será necesario establecer prioridades entre las esferas de intervención principales dentro del PPM de la AGA elaborado para los próximos años. En esta tarea participarían el personal de la FAO, tanto en la Sede como en las oficinas regionales, y otras partes interesadas mediante, por ejemplo, consultas subregionales.

13. Una vez que se defina un plan de trabajo de la AGA que resulte más centrado y coherente, podrá existir una interacción más estratégica con algunas otras partes del Departamento AG y la FAO en general. Estas intervenciones permitirán que se aborde la función de la ganadería en los aspectos más amplios del desarrollo, como los ODM, el cambio climático, el medio ambiente y demás.

14. Entre los instrumentos de gestión que podrían utilizarse para llegar a esto se encuentran un establecimiento de prioridades y una planificación en común, el establecimiento de objetivos de rendimiento claros y de una evaluación, la insistencia en grupos y equipos de trabajo centrados en los temas, una menor insistencia en los actuales grupos por disciplinas, la contratación de personal con las capacidades técnicas y sociales requeridas para la futura modalidad de trabajo, la creación de mecanismos claros de respuesta, tales como los exámenes de la totalidad del personal de categorías superiores en la dirección. Con el tiempo, el objetivo tendría que consistir en la creación de menos unidades o grupos técnicos más grandes con competencias más amplias con el fin de incrementar la flexibilidad para ajustarse a las necesidades en evolución.

Recomendación 4 sobre los recursos genéticos de los animales domésticos

15. El Grupo coincide, en principio, con las recomendaciones del informe de síntesis, aunque se han formulado las siguientes observaciones, algunas de las cuales es posible que requieran mayor consideración.

16. El trabajo sobre recursos zoogenéticos (RZ) para elaborar un informe sobre la situación mundial de los mismos referente a 145 países ha supuesto una notoriedad de los temas de producción ganadera en general en medida mucho mayor que anteriormente a nivel gubernamental en muchos países. Ello contribuye a que exista un impulso para la acción sobre muchos temas de desarrollo ganadero. Aprovechando este impulso, la próxima fase del plan para la gestión de los recursos zoogenéticos tiene que hacer hincapié claramente en los aspectos de utilización. Se debe otorgar una dimensión dinámica a la utilización sostenible y esta ha de comprender la aplicación de los aspectos de corto y largo plazo del mejoramiento genético. La conservación de los RZ debería llevarse a cabo manteniendo a las poblaciones animales en situación constante de viabilidad comercial. El Grupo apoya el comienzo inmediato de la «fase de utilización». Ello debería reflejarse claramente en la planificación del futuro programa de la AGA y requiere una estrecha colaboración entre las esferas de competencia pertinentes.

17. Situar a un experto adecuado en ganadería que tenga familiaridad con los aspectos de utilización de los RZ en la Secretaría de la CRGAA es una necesidad, si es que la Secretaría va a hacer lo que se espera de ella en la esfera de la ganadería. No obstante, se propone que la selección para dicho puesto corra a cargo conjuntamente de la AGA y de la Secretaría.

18. El Grupo toma nota de que un aspecto importante de la fase de utilización es que este trabajo tendrá lugar principalmente en el sector privado o, por lo menos, dependerá mucho de sus acciones. En este contexto, la FAO tendrá que desempeñar una importante función al supervisar y evaluar los RZ mundiales y al comunicar los correspondientes resultados, tanto en términos genéticos como económicos, a los gobiernos y al sector privado participantes, incluyendo las cuestiones de DPI y del CDB.

Recomendación 5: Utilización de la visión estratégica para el establecimiento de prioridades en el Programa de Campo

19. Dada la escasez de recursos de personal, existe la necesidad de vincular las actividades de campo con las funciones normativas a efectos de impacto y notoriedad. El Grupo comparte la recomendación de que la nueva visión estratégica de la AGA tenga que utilizarse como una base para el establecimiento de prioridades en la respuesta a peticiones de los Estados Miembros, conjuntamente con las prioridades regionales y subregionales que resulten de las consultas.

20. Es necesario integrar más la producción, las políticas y la sanidad en el apoyo al Programa de Campo para que resulten más efectivas. Ello exige una intensa colaboración entre estos grupos. El apoyo de la AGA al Programa de Campo debería contribuir al programa normativo y desempeña una función esencial en las operaciones de emergencia, pero las peticiones de actividades de transferencia de tecnología procedentes del PCT podrían abordarse mejor con una mayor utilización de consultores.

21. El Grupo acoge favorablemente el examen en curso del Programa de Cooperación Técnica, que conlleva una visión estratégica para la labor del PCT. Ello podría reforzar la realización de la visión y del trabajo de campo de la AGA.

Recomendación 6: Constitución de equipos «básicos» en tres oficinas regionales

22. El Grupo apoya la recomendación de crear «equipos básicos» regionales con una masa crítica de conocimientos técnicos. Esto debería ser prioritario en Asia (allí donde exista), en África y América Latina. Esta estrategia, que, según el informe de síntesis puede aplicarse con un realineamiento del personal descentralizado existente, no debería realizarse a expensas del personal de la Sede. El Grupo observa que no se hace referencia alguna a Asia central ni a los países C0049S y considera que debería llamarse la atención sobre las necesidades crecientes de esta región.

Recomendación 7: De la tecnología al cambio de políticas

23. El Grupo apoya decididamente el cambio progresivo de prioridades desde la asistencia técnica a las cuestiones normativas. Con respecto al asesoramiento normativo, la ventaja comparativa de la AGA o de la FAO estriba en derivar tal asesoramiento de sus actividades técnicas. De esta manera, la AGA/FAO proporciona un asesoramiento normativo imparcial y basado en un análisis sólido.

24. Este planteamiento orientado a las políticas debería quedar fijado en todas las partes de la AGA, reconociendo la capacidad específica de la AGAL, que debería reforzar aún más su labor en los aspectos sociales o económicos.

25. La AGA debería tener una presencia y una contribución más importantes en otras labores normativas de la FAO que reflejen la importancia del sector ganadero. La Iniciativa de políticas ganaderas en favor de los pobres tendría que desempeñar una función importante a este respecto.

Recomendación 8: Sostenibilidad en el marco del PESA

26. El Grupo apoya en general la recomendación. Subraya la necesidad de que la AGA tome iniciativas y utilice la oportunidad de cooperación con el PESA para desarrollar unos planteamientos más innovadores.

Observaciones adicionales

27. Además de las anteriores recomendaciones, el Grupo desearía añadir los comentarios siguientes.

Posición de la AGA de la FAO ante otras instituciones, la sociedad civil y el sector privado (coordinación, complementariedad y coherencia)

28. El Grupo reconoce que las demandas de trabajo de la FAO han cambiado mucho con el tiempo, a medida que los Estados Miembros han reforzado sus propias capacidades de trabajo técnico y a medida que ha crecido y se ha diversificado la gama de instituciones activas sobre el terreno. La FAO ha iniciado la transición hacia una asistencia más orientada a las políticas; la AGA ha tenido, de hecho, un papel principal en esta transición. Ello supone una necesidad de más claridad en las funciones de la FAO y de otros actores, evitando la competencia y aumentando la coherencia, la coordinación y la complementariedad entre la AGA de la FAO y las instituciones como el GCIAI, otras instituciones intergubernamentales, los SNIA, los organismos donantes, iniciativas como ALIVE, las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado. Ello serviría para dar mayor peso a la función del sector ganadero en las prioridades estratégicas de las regiones y los países.

El planteamiento de la «cadena de valor»

29. Es necesario un planteamiento de «cadena de valor» para afrontar la moderna evolución tecnológica y económica. Esta cuestión no se trata directamente en el informe de evaluación. Por el momento, cada programa se centra principalmente en la producción. Existe una necesidad de que la AGA elabore un marco coherente para la cadena de valor en la ganadería con el objeto de orientar sus actividades futuras. La AGA también debería participar más activamente en las actividades de la FAO que adoptan un planteamiento de este tipo (p. ej. con el Departamento ES).