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Statement of the President of the World Food Council
Déclaration du Président du Conseil Mondial de l'alimentation
Declaración del Presidente del Consejo Mundial de la Alimentación

A.A. BRONDO (representante del Presidente del Consejo Mundial de la Alimentación): Señor Presidente del Consejo de la FAO, señor Director General, distinguidos delegados, señoras y señores: Me es profundamente grato enviar a través de esta honorable Asamblea mi reconocimiento a la incansable labor que los países miembros de la FAO han realizado con el ánimo de mejorar la situación alimentaria mundial. Estos nobles propósitos que los estimulan y las preocupaciones que nos aquejan ante el embate del hambre y la malnutrición, fenómenos que permiten dibujar un panorama crítico para la humanidad, estuvieron presentes durante el curso de las deliberaciones del 7 Consejo Mundial de la Alimentación celebrado en Novi Sad, Yugoslavia, el pasado mes de mayo.

En esta reunión privó el interés común de encontrar fórmulas adecuadas para romper con los círculosviciosos que nos han llevado a adoptar medidas de seguridad alimentaria que han resultado ser especialmente insuficientes, dando paso a la gestión de una crisis que, sin duda, es una de las más graves alas que se han enfrentado los países en desarrollo y las organizaciones multilaterales que se ocupande ese problema. De manera cada vez más clara frente a nosotros se desvanece el irrealizado proyecto de

terminar con el hambre en una década, meta que la Comunidad Internacional se propuso con el loable idealismo hace pocos años; ahora sabemos que alcanzar este obejtivo requerirá no sólo de mayor tiempo, sino de acciones concretas, inmediatas y enérgicas. Hemos consumido las mejores expectativas mientras los crecientes déficits de la producción mundial de alimentos básicos se agravan, tanto por el descuido o débil atención al sector rural como por el incremento demográfico que adquiere grandes magnitudes en algunos países, problema que no debe desvincularse de aquellos orientados a fomentar la prcdueción agrícola. Como ilustración de esta aseveración basta señalar que en el año 1980/81 la producción de alimentos en más de 60 países no pudo mantenerse al mismo ritmo de crecimiento que la población.

Actualmente hay quince países que producen menos alimentos que hace 10 años, y en amplias regiones de Africa se registra una escasez normal de alimentos que confirma que el problema alimentario ha alcanzado niveles críticos y dadas las perspectivas de la economía mundial, las predicciones . más optimistas nos permiten abrigar la esperanza de que solamente a través del abordiamento rápido, eficaz y solidario del fenómeno se puede evitar el sacrificio de millones de seres humanos.

No escapó a los miembros del Consejo Mundial de la Alimentación que a pesar de los esfuerzos que se llevan a cabo, el hambre y la malnutrición no han disminuido, sino que aumentan y se perfilan como los problemas más graves a enfrentar en lo que resta de siglo. No hay, por consiguiente, motivos para una complacencia. Estamos frente a un momento de decisión que implica tareas a diversos niveles; por lo que reafirmamos nuestra convicción en que la seguridad alimentaria descansa en la política que llevan a cabo los gobiernos de los países en desarrollo tendiente a estimular el aumento considerable de la producción alimentaria. Es decir, se requiere de un esfuerzo interno, insoslayable, mediante algunas formas de sistema, estrategia o plan alimentario. Esto es esencial para abordar con eficacia los problemas alimentarios y estimular el aumento del apoyo exterior a dichas actividades. Creemos que los enfoques de política nacional de mayor alcance son indispensables para lograr la autosuficiencia, así como una distribución más equitativa de los alimentos y una adecuación de los consumos. Usando términos más enfáticos del propio Consejo Mundial de la Alimentación, la reunión de Ministros latinoamericanos que se celebró en febrero pasado en México afirmó: "No cabe duda de que la solución del problema alimentario exige de cada país la elaboración de una estrategia alimentaria nacional, explícita y coherente que evite la fragmentación de esfuerzos y sea la expresión de la determinación política del gobierno". Resulta redundante concluir que la responsabilidad primordial de alimentar a sus poblaciones recae en los propios países en desarrollo, bien actuando en forma individual, o de manera combinada .

Asimismo, estimo conveniente transmitir la convicción del Consejo Mundial de la Alimentación referente a la necesidad de alentar la cooperación de países en desarrollo que constituye una fuente poco explorada de intercambio, pero que potencialmente puede rendir beneficios importantes a nivel nacional y regional. Apoyamos plenamente el alcance de esta forma de colaboración y haremos esfuerzos para ampliar sus logros.

En el mismo marco de la solidaridad internacional se inscribe nuestro entusiasmo por la iniciativa de varios países para convocar a una reunion sobre cooperación y desarrollo; este esfuerzo representa un avance importante en la reanudación del diálogo Norte-Sur, dado que en la agenda de esta reunion, que se celebrará el próximo mes de octubre en México, se contempla en forma prioritaria el tratamiento de la situación alimentaria mundial y la urgencia de adoptar decisiones políticas que hagan posible la solución de este apremiante problema de la humanidad. Hacemos nuestros mejores votos por que se concreten fórmulas expeditas que hagan factible la discusión sobre lo que podría ser un Nuevo Orden Económico Internacional.

Por otra parte, y aunado los esfuerzos que en el orden bilateral se pueden hacer, considero indispensable, en mi carácter de Presidente del Consejo Mundial de la Alimentación, hacer una exhortación a los países desarrollados para que recuperen su convicción y reiteren su apoyo a los programas de tipo multilateral. Desde 1945 la Comunidad Internacional ha resuelto tensiones y encontrado respuesta a problemas que parecían insolubles. Ha sido determinante la intervención de estas Organizaciones para crear condiciones que tiendan a lograr el bienestar colectivo.

El debilitamiento de estas instancias constituye un retroceso en el desarrollo, en sí ya desigual de la humanidad. El Presidente del Consejo Mundial de la Alimentación desplegará sus mejores esfuerzos para concertar las voluntades políticas que permitan no sólo una reiterada coordinación con la FAO, sino una mayor comprensión de los países más avanzados del orbe para aliviar los graves problemas del hambre y la malnutrición.

En este sentido me es grato comunicarles que recientemente la junta directiva del Fondo Monetario Internacional, en respuesta a la propuesta conjunta del CMA y la FAO, decidió ampliar sus servicios de financiamiento para prestar asistencia adicional a los Estados Miembros que enfrentan dificultades de pago como consecuencia de los costos adcionales originados por la importación de cereales, lo que representa un esfuerzo que destaca la importancia de la cooperación multilateral.

Espero que, en la medida de las posibilidades, en los países representados en el Consejo de la FAO surja la preocupación por resolver los problemas críticos en materia de seguridad alimentaria, tanto a nivel nacional y regional como a través de un apoyo decidido a los Organismos que se ocupan de la prestación de la ayuda multilateral y asistencia tecnica, los cuales se han visto recientemente amenazados pos las políticas económicas y financieras restrictivas de algunos países.

Esas políticas van dirigidas especialmente contra el volumen de recursos que han de facilitarse al desarrollo normal y creciente de los servicios prestados por los Organismos Internacionales.

Renuevo mi confianza en que la acción internacional solidaria habrá de alentar la movilización de quienes perciben con claridad la profunda brecha que existe entre el hombre satisfecho y el que carece hasta de lo esencial. En este contexto creemos que la tarea de la FAO y del Consejo Mundial de la Alimentación adquiere importancia vital y ratifica la voluntad de la Comunidad Internacional para resolver problemas que no tienen frontera ni nacionalidad. Debemos continuar en la búsqueda del apoyo a la acción congruente de organismos y países.

Expreso mis mejores votos y los del Consejo Mundial de la Alimentación para que los trabajos de la 79 reunión del Consejo de la FAO constituya un avance importante para la consolidación de la política y los altos principios de este Organismo.

CHAIRMAN: Thank you very much, Mr.Brondo, for this interesting talk; and we also thank the President of the World Food Council through you.

I. INTRODUCTION - PROCEDURE OF THE SESSION (continued)
I. INTRODUCTION - QUESTIONS DE PROCEDURE (suite)
I. INTRODUCCION - CUESTIONES DE PROCEDIMIENTO (continuación)

2. Election of Three Vice-Chairmen and Designation of Chairman and Members of Drafting Committee (continued)
2. Election des trois Vice-Présidents et nomination du Président et des membres du Comité de rédaction (suite)
2. Elección de tres Vicepresidentes y nombramiento del Presidente y los Miembros del Comité de Redacción (continuación)

P.S. McLEAN (United Kingdom): I am very pleased to propose Herr Grabisch of the Federal Ministry of Food and Agriculture and Forestry in Germany for the post of Third Vice-Chairman. Herr Grabisch needs no introductory remarks from me. He is well known to all members of this Council for the keen interest he shows in his work on behalf of his government and I therefore commend this nomination to the other members of the Council.

M.W. MOORE-WILTON (Australia): The Australian delegation is delighted to have the honour to second the nomination of the delegate of Germany for the position of Third Vice-Chairman.

CHAIRMAN: Now we have heard the United Kingdom proposing Dr. Grabisch, the delegate of the Federal Republic of Germnay as one of the three vice-chairmen and it has been seconded by Australia. As I see no objections I take it that Dr. Grabisch is elected.

Applause
Applaudissements
Aplausos

LE SECRETAIRE GENERAL: Monsieur le Président, je préfère attendre demain matin pour faire l'annonce. Le Président m'en a prié car les consultations sont encore en cours. Il manque quelques noms sur la liste.

CHAIRMAN: We will wait till tomorrow morning to compile the list of the members of the drafting committee. We will then -proceed on the discussions on Item 4.

II. WORLD FOOD AND AGRICULTURE SITUATION (continued)
II. SITUATION MONDIALE DE L'ALIMENTATION ET DE L'AGRICULTURE (suite)
II. SITUACION MUNDIAL DE LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACION (continuación)

4. Current World Food Situation (continued)
4. Situation actuelle de l'alimentation dans le monde (suite)
4. Situación actual de los alimentos en el mundo (continuación)


W.A.F. GRABISCH (Germany, Federal Republic of): On behalf of my delegation I thank Council members for the trust given to me. I will try, as I have in the past, to serve our governing body to the best of my knowledge and experience.

Turning now to the subject before us, I wish to say that the documents before us CL 79/2 and Supplement 1, as well as the comprehensive and straightforward statement of the Director-General, together with the introduction given by Dr. Islam give a comprehensive survey of the current world food situation. Allow me to make some additional remarks about this excellent analysis from the point of view of my country.

Firstly, according to our assessment the present prospects for the 1981 world harvest are favourable. Cereal production as a whole could exceed the long-term trend and also annual consumption. Thus world cereal stocks would not further decline in 1982 in terms of consumption. In particular wheat stocks should be replenished. The main production growth, however, is expected in North America, Argentina, Brazil and USSR. World import demand will also remain high in 1981/82 as the Soviet Union will continue to import large quantities, despite possibly higher crops, in order to refill its own stocks.

Secondly, likewise more favourably in 1980 is to assess at the moment the protein feed supply situation. Declining prices are partly checked by a comparatively firm dollar rate. Affected above all are countries with a large animal products industry and a heavy dependence on imports. Animal production will stagnate to a large extent with pig meat production declining and milk production increasing slightly.

Thirdly, decisive for the medium-term development of the world food situation continues to be the production in developing countries, in particular those with poor foreign exchange earnings. At the same time we are glad to note that progress has been achieved in several developing countries, as spelled out this morning by the delegate of the United States. We are glad to have also read from document CL 79/2-Sup.1 Table 2 that developing countries as a whole have achieved during the last decade an annual rate of change of indices in food production of 3.3 percent. The achievement of this figure merits being commended. It should, on the other hand, encourage developing countries to make further efforts in this crucial area and with the aim to achieve the envisaged 4 percent increase of food production in a year.

Because of the incomparably high cost of land reclamation and soil improvement measures increases in supply must be achieved primarily through higher yields and a reduction of harvest and storage losses. Higher yields require a higher input of fertilizer, irrigation, pesticides and machinery. The prices, of these factors of production have increased sharply and will also still further increase as a consequence of energy price rises. Apart from the use of mineral fertilizer organic manuring in particular should be increased, of which developing countries should still have substantial resources. Add to this the planning and realization of yield increasing crop rotations which seem to be hardly known in certain areas. The fact must make us thoughtful:, if on the average of a continent there were no increases in yield in the last 10 years and in some regions the very low yields per hectare even partly declined sharply. Apart from stimulating the domestic production for basic foodstuffs in developing countries, in particular those of local importance, it will be important that with increasing economic development of these countries a further income concentration should be avoided, while the increasing purchasing power will be distributed more evenly to all sections of the population. An important factor also continues to be, as pointed out repeatedly in this forum, the establishment and enlargement of an efficient early warning system, in particular in the regions threatened by extreme weather conditions and hunger. This can be done effectively only with the participation of the countries involved.

Fourthly, important progress was achieved in the implementation of the Plan of Action on World Food Security. Mention should be made of the recent decision of the IMF to grant an import facility for cereals to developing countries.

Fifthly, the Food Aid Convention has just been extended by two years, also with my country's participation. We support the target of 10 million tons which was practically almost reached in 1980 and should be ensured on a continuous basis by the accession of new donors. Apart from emergency aid food aid will be useful only if it also gives the incentive to expanding the developing countries' own production.

Sixthly, the Federal Republic of Germany makes its contribution to the International Emergency Reserve of 500,000 tons and is prepared to cooperate in improving its efficiency. The proposed codification of contributions would be rather a disadvantage as it would not additionally motivate traditional and potential donors.

Seventhly, also support the strengthening of the World Food Programme by a contribution of DM 42 million in 1981.

Eighthly, we regret, just as the Secretariat, the decline in development aid in the agricultural sector in 1979. In my country the official development assistance was increased considerably in the last two years: in 1979 by 30 percent to DM 6.1 billion and in 1980 by 5 percent to DM 6.4 billion. In this respect the share of the bilateral agricultural development aid rose from 13 percent, that is to say, DM 615 million in 1979, to about 20 percent, that means DM 948 million in 1980 and should this year reach more than one-third, namely DM 1.343 billion. The share of official development aid in the gross national product rose in 1979 compared with the preceeding year from 0.37 percent to 0.44 percent. The budget of the Federal Ministry of Economic Cooperation will increase in 1981 at least twice as much as the total Federal budget. Overproportional annual growth rates of about 10 percent are envisaged for the period 1981-1984 compared with the planned growth of the whole Federal budget. From our aid the poorest developing countries should benefit to a greater extent than so far. Add to the public aid also the private development aid of churches, trade unions, associations, etc. which amounted in 1979 to about DM 714 million. These activities effectively alleviated hunger and misery in many places of the world.

Ninthly, the promotion of rural development is a special priority area in the "'Policy Paper on German Cooperation with Developing Countries". The object of this cooperation is structural improvement in rural areas by means of productive and diversified agriculture, an efficient infrastructure and the establishment of decentralized handicraft and small manufacturing businesses. These measures also create jobs and purchasing power. The priority target groups of the policy of promotion are the small farmers and the landless poor.

J.E. MENDES FERRAO (Portugal) : C'est la première fois que je prends la parole, en tant que Président du Comité national de la FAO du Portugal, à une session de cette prestigieuse Organisation internationale.

C'est pourquoi vous me permettrez en premier lieu, en mon nom personnel et au nom de la délégation que j'ai l'honneur de présider, de présenter mes salutations au Président et aux Vice-Présidents, ainsi qu'au Directeur général de la FAO, M. Saouma, ainsi qu'à diverses délégations ici présentes.

L'analyse du document 79/2 Sup.1, sur la situation alimentaire actuelle dans le monde, mériterait de longues considérations que le temps dont nous disposons ne nous permet pas. Mais je tiens d'ores et déjà à féliciter la Commission qui l'a élaboré , pour la manière synthétique mais précise dont elle a traité de cette question si préoccupante.

La population agricole de mon pays atteint encore près de 30 pour cent. Nous avons conscience que ce pourcentage est excessivement élevé en comparaison avec des pays dotés des mêmes caractéristiques que le nôtre. Malgré cela, le Portugal importe environ la moitié des aliments qu'il consomme, directement ou pour l'alimentation animale. Les céréales et le pétrole pèsent lourdement sur nos importations. Nous importons 80 pour cent de maîs dont nous avons besoin pour la totalité du pays, 30 pour cent de blé, 97 pour cent de sucre et 95 pour cent d'oléagineux.

Cette année la situation en ce qui concerne cet ensemble de produits de base s'est encore aggravée: nous avons eu cette année la période automne/hiver la plus sèche qui ait jamais été enregistrée dans notre histoire. Il n'a pratiquement pas plu au Portugal de mai 1980 à avril 1981 ! La production d'électricité d'origine hydrique a été profondément affectée; les réserves d'eau dans les barrages ont baissé jusqu'aux limites de sécurité; les cultures d'automne/hiver ont profondément souffert, en particulier les céréales d'hiver et les pâturages, ce qui a entraîné une baisse de la production de viande et le retour à un plus grand volume de céréales importées.

Les réservoirs de barrage destinés à l'irrigation sont pratiquement à sec; c'est pourquoi il a fallu réduire drastiquement les superficies des cultures d'été, en particulier du riz, des tomates, du maïs et des cultures horticoles; et l'on se heurte même à de graves problèmes pour l'approvisionnement en eau des populations, en particulier dans le sud du pays.

La situation des agriculteurs a encore été rendue plus difficile par les gelées anormales, la gelée au sud du mois de décembre et d'autres gelées survenues au mois de mai, qui ont sévi tout particulièrement dans l'intérieur nord du pays, ont détruit les cultures de pommes de terre et définitivement compromis la production vinicole.

Notre pays subit actuellement une vague de chaleur intense. Le 13 juin dernier on a enregistré la température la plus élevée dont on ait connaissance: 43°, C à Lisbonne ! Les effets de cette vague de chaleur ont été catastrophiques provoquant la mort de personnes et d'animaux. La production porcine a été grandement affectée et la production de volaille se solde par un désastre, la chaleur ayant décimé plus de 40 pour cent des effectifs du pays et 30 pour cent de la production vinicole.

Malgré tout cela, nous ressentons profondément la situation de carence alimentaire, bien plus grave que la notre, où vivent d'autres peuples victimes également de perturbations du même genre et nous pensons que tout doit être mis en oeuvre pour que, en ce siècle marqué par tant de conquêtes technolo-giques, il ne soit plus possible que des gens continuent à mourir de faim !

Il est certain que les problèmes soulevés par le document 79/2 sont d'une extrême gravité et nous ne pouvons ni les oublier, ni les dissimuler. A côté de la faim quantitative, sévit, dans de plus vastes proportions, la faim qualitative, dont les conséquences dans la vie des populations sont bien connues: de la maladie à la réduction de la capacité de travail.

Comme il est évident, le premier aspect - la faim quantitative - peut être résolu par le recours aux céréales; mais le second suscite de plus larges considérations et exige l'utilisation de quantités déterminées de protéines - sans oublier la qualité des protéines - et de vitamines que les céréales, à elles seules, ne sont pas en mesure de fournir.

D'autre part, il ne faut pas oublier les difficultés que soulève la distribution de céréales, exotiques pour ces populations, qui ne savent pas toujours les utiliser comme il se doit. C'est pourquoi il convient de faire un effort, et dès que possible, pour que ces carences nutritionnelles soient corrigées, principalement ou tout au moins simultanément, par le recours aux produits agricoles tradi-tionnels augmentés par l'introduction de techniques nouvelles au niveau de la production, de la conservation et de la transformation, de la réduction des pertes après récolte.

Finalement, nous entendons que l'action méritoire des organisations internationales dans le sens d'éviter la mort des personnes par manque d'aliments, ne doit pas faire oublier, mais doit bien plutôt stimuler l'appui technique à apporter au développement, de manière à réduire progressivement les diffé-rences entre les pays auxquels rien ne manque et les pays qui, pratiquement, manquent de tout.

Il est certain en effet que nombre de situations de famine généralisée constatées dans quelques pays proviennent des conditions anormales du climat; mais il n'en est pas moins vrai que ces situations de pénurie se produisent également dans des régions dotées de ressources potentielles qui, si elles étaient techniquement bien exploitées suffiraient pour ces pays, et peut-être même donneraient lieu à des excédents.

C'est pourquoi mon pays continue à attacher une importance prioritaire à l'appui technique au développement comme procédé plus efficace à la promotion humaine.

S.S. PURI (Ìndia): May I first of all on behalf of the Indian delegation compliment the Director-General for a very forthright statement. I think it provides a very useful preamble to the discussion we are having. I should also compliment the Secretariat on a well prepared document which they have circulated.

Before I say anything else may I mention that I have some serious problems with this particular document. For instance, on page 12 there is a table, Table 2, World Cereal Stocks, 1976-1981. It mentions figures of world cereal stocks for various years, 1976-1981, and the heading is "Crop Year ending in". I find the figures for India also mentioned there. I must confess I am quite unable to understand the methodology that has been used in arriving at these figures. This table gives India's figures as: 1976 10.0; 1977 15.5; 1978 14.6; 1979 14.9; 1980 10.9; 1981 10.0 -all million metric tons. Incidentally, the crop year in India is July to June. That is how we work out our figures. The figures for the corresponding period, for instance 1976, the crop year ending June 1976, our figures are 15.78, when the figure mentioned here is 10.0; for 1977 our figures are 19.74,when the figure mentioned here is 15.5 and so on. I have tried to check the methodology which the Secretariat has used and I understand that the figures are not on a given point of time at all. For instance, the figures for India are taken as at the end of March of a given year, when a new wheat crop is about to come in, and for paddy the figures taken are as at 31 October. Therefore two different dates are taken and they are brought together and a figure for the stock position is worked out. May I very respectfully submit that whatever may be the puristic academic justification for this way of computing the numbers, operationally from an administrative point of view this is quite misleading. In fact, I will put it this way, if I might put a lighthearted simile: if I am a person being paid twice a month and my salary is drawn on the fifteenth of the month and the thirtieth of the month and if you take my bank balance on the fourteenth of the month and the twenty-ninth of the month and then

say that the average bank balance of Mr. Puri is so much, I am afraid this is declaring me insolvent when I am not necessarily so. In my view whatever may be the justification for these figures of FAO I do not think you can use them in a given year. If you are using a calendar year, then you can take the position as of 31 December or 1 January and since wheat and rice are in a sense interchanceable,, these figures are of world cereal stocks. In India we take these figures as one composite whole and we arrive at certain numbers. For various years our figures are higher than FAO figures by 4 to 5 million tons.

Possibly something similar has happened to the figures of other countries also. Therefore, the total figures that emerge from this table tend in my view to be unintentionally somewhat misleading in terms of the world cereal stock position at the beginning of a given crop year or at the end of a given crop year, whichever way you want to put it. Therefore, I suggest that this matter should be looked into.

I would also say - and I am more or less repeating a point that I made last year - that when we make an analysis of the food situation of the world and a large part of the world is increasingly producing two crops in two different seasons, and not seasons coinciding with a calendar year, then there is a whole range of anomalies emerging out of that kind of analysis.

Sir, I will take you on to page 6 of this document, which is a review entitled "Changes in World Production and Supplies of Main Food Commodities" and then there is a heading "Cereals". There are two paragraphs here in which India is mentioned, in one paragraph in a very complimentary manner and in another paragraph in a very non-complimentary manner. One paragraph says "The developing countries as a whole produced about 3 percent less, the decline being mainly located in China and India where the crops fell below the rather high levels of 1979". Then two paragraphs later it says: "World production of paddy, at 399 million tons, was 6 percent larger than in 1979, largely owing to a substantial recovery of over 30 percent in the Indian crop". There is therefore a very curious situation of a country's performance getting reflected in this manner, that it shows that we accounted for both decline in world production and increase in world production, which obviously cannot be quite true. Either we did something worthwhile or we did not do something worthwhile in that particular year.

If I might explain, Sir, I think this arises out of the fact that one of the drought-affected crops, namely wheat, figured in the calendar year of 1980 and one of the very good crops of paddy, 1980-81 also figured in the calendar year. The two crops therefore figure in a single calendar year which gives rise to this kind of distortion which is totally diverse from the seasonal conditions which prevailed in the country. If one year we are subjected to drought, and those drought year crops figured partly in 1979 and partly in 1980 you have this kind of phenomenon occurring as a result of this. Therefore, I would plead again, although I can quite see the Secretariat's difficulties, that some way of analysing this in terms of crop years that national govenments use. This would make things somewhat more easily explainable in relation to the situation as it emerges.

Having made these two points with regard to my problems of interpretation, I want to go back to a point that we discussed this morning. Mr. Chairman, you will recall that one of the earliest items you presented to the Council meeting was the acceptance of the agenda for this meeting, and as I was looking at the paper, the paper said that the agenda item under which we are now supposed to be discussing this matter, the bold title of that particular agenda item is "World Food and Agriculture Situation". Under that, we have this paper called "Review of Current World Food Situation". I would very humbly suggest that the world food and agricultural situation fortunately is not quite the same as the world food situation and that the world agricultural situation is certainly bigger in terms of dimensions than the world food situation. In addition- I don't know in what context this peculiarity occurred - the table of contents of this particular paper has a heading called "Inflation and Consumer Food Prices", and then there is "Fertilizer and Improved Seeds", and then it goes back to the international food situation.

I must confess that, as a person in charge of agriculture, I ought to comment on this because in terms of the world agricultural situation the paper does not seem to say very much. In fact, barring a small paragraph on seeds, it does not say very much with regard to agricultural research and education. There is a whole range of things omitted, and I would strongly feel that in some ways a world food and agricultural situation paper ought to give some more justice to problems of agricultural production as they are emerging in different countries. Unless we do something about replacement of wheat varieties, a whole set of situations can lead to problems of diseases. We have the problem of brown rust emerging in a big way, and I would have thought that some analysis with regard to these matters would come out in this kind of paper.

I have two observations with regard to the production picture in India in 1980-81, and I am talking about the crop year July 1980 to June 1981 and the prospects for 1981-82. In the statement the Director-General made this morning I find there is a very significant observation: "it is my duty to repeat the call that I have made on many occasions to developing countries and all those who head them to make all possible efforts to increase domestic food production".

As far as India is concerned, I have the figures now for the crop year ending in June 1981, and I am happy to report that our overall food grain production - not in terms of rice but in terms of paddy -is roughly estimated at 161 million tons as against 130 million tons in the previous year, which was a drought-affected year, and for 1981-82 we estimate it to be 167 million tons - this is again in terms of paddy.

The problems inhibiting increasing production are two very major ones. In regard to the short-duration dwarf varieties, we are getting quite worried that some homogeneous varieties are beginning to spread in the wheat belt from Pakistan to Punjab. We are now beginning to discover that some of these varieties must undergo changes. They are tending to exhaust their potential after three or four years, they are becoming liable to diseases. In Punjab, there is the brown rust disease. Therefore this is going to be an aspect on which some international work should be done.

The second problem, which of course is a continuing one, is the problem of usage of water management, seeds, pesticides, but most important of all, fertilizer. There was a remark which the Director-General made on page 4 of his statement that ten years ago when one ton of tea could buy 17 tons of imported fertilizer, it can buy now only 8 tons. This was a very graphic way of describing the problem. In India we were having until recently a consumption growth of approximately 15 or 16 percent per annum. In 1981 which has been a good agricultural year, the growth was 16 percent, and it is largely a reflection of fertilizer prices. The government had to increase fertilizer prices by nearly 39 percent, and this obviously has decelerated fertilizer use. This is going to be a persistent problem in reaching increased targets in food production.

CHAIRMAN: I think there are so many specific queries or faults raised that I would like to call upon Prof. Islam to reply before we go further.

N. ISLAM (Assistant Director-General, Economic and Social Policy Department) : India has asked indeed three sets of questions which need answering at this stage. One is the way we calculate the stock figures; the second is about production figures of wheat and rice, and third, why the document does not discuss all issues relating to the agricultural sector.

Coming to the first question, if I may draw the attention of the delegates to the same page to which he drew our attention, in the first sentence in which India is being mentioned as a country where the decline was mainly located, it refers to wheat production, and the second sentence where he refers to India's substantial recovery refers to rice production, so the Secretariat does not see any contradiction in these two statements, one praising India for a fall in wheat production and another in increase in rice production in India; they are perfectly consistent as far as we can see. Second, they were all two different crop years. This goes back to the same problem; if I may refer for the information of the Council we have been discussing this in the last three meetings, if I remember correctly. India has raised the issue as to why we take stock figures in the way he has just explained. One of the reasons is that we published rural stock figures as a whole and combine together so the differences in methodology have to be avoided so that the way we estimate stocks for India should be the same way as we estimate stocks for all the other countries of the world. Now also last time we answered this question by saying "yes". Maybe for countries like India in addition to the stock figures we should also establish stock figures end of July. This will be one of the ways of getting around the confusion which India seems to face. This is our answer to the question that we publish two sets of figures, one for keeping uniformity in the worldwide figures, another for special circumstances to which the delegate from India has referred.

The third question, of course, we find confusing because this paper does discuss primarily the world food situation, whereas the state of food and agriculture discusses all the sets of issues India referred to. Therefore, the concentration here is on those issues which relate to the food situation. It is quite true that we do not discuss all issues relating to the entire agricultural sector because that was not the purpose of this document, and we take up the other issues which you have mentioned in the document on the state of food and agriculture, and that report does give to the Conference the state Of food and agriculture. Therefore, if you keep the objective of this paper in mind, the subjects selected here for special treatment seem to us to be logical enough to be relevant in this context, so we have emphasized those issues which are very relevant to the world food situation as we see them. Then of course there will be other agenda items in this session which will discuss the specific issues to which India has referred.

I hope this will clarify some of the issues raised by India.

A. RENAUD (Canada) : Permettez-moi d'abord, au nom du Canada, de nous féliciter, nous, les membres du Conseil, de vous retrouver à la présidence de notre Conseil, plein d'aisance et de savoir-faire, comme toujours. Cette soixante-dix-neuvième réunion, nous le savons tous et vous l'avez souligné, est très importante, puisqu'elle est la première de la décennie des années quatre-vingt; elle est nécessairement consacrée à la lutte contre la faim et la sous-alimentation dans le monde; elle prépare également la première conférence biennale de la FAO pour cette même décennie.

Sous votre direction éclairée, assistés par les vice-présidents élus ce matin et le dernier cet après-midi - que je félicite par la même occasion - nous espérons que nos débats seront francs et notre dialogue aussi sincère que lors de la soixante-dix-huitième session du Conseil en novembre/décembre dernier et comme vous, Monsieur le Président, nous sommes heureux de souhaiter la bienvenue à l'Angola et à la Barbade qui se joignent à nous pour la première fois.

Le Canada désire présenter ici quelques commentaires sur le document 79/2 et sur son supplément qui nous a été remis ce matin. Ce document est sans doute le plus important de ceux sur lesquels notre Conseil doit se pencher. Il décrit la situation alimentaire mondiale actuelle telle que perçue par notre secrétariat et il est opportun, croyons-nous, de souligner cette distinction.

La situation alimentaire mondiale contemporaine est une réalité dont chacun des pays de la communauté internationale, qu'il soit membre de la FAO ou non, détient une partie et c'est celle qu'il connaît le mieux. La perception de cette réalité mouvante et émouvante par le secrétariat est une autre chose. Elle est composée de l'analyse des données fournies par les pays membres et la projection de ces données sur une plus longue perspective. Elle est exacte dans la mesure où ces données sont exactes et inévitablement elle ne l'est pas dans la mesure où les données sont incomplètes, ou si elles sont dépassées par l'évolution de la réalité.

Nous reconnaissons la valeur du travail accompli par le secrétariat; nous apprécions l'effort de synthèse entrepris. Nous ne pouvons cependant être entièrement d'accord avec son interprétation de temps en temps alarmiste ni non plus avec ses conclusions, lesquelles servent de tremplin à d'autres conclusions et recommandations que nous devrons étudier plus tard.

Le Dr Islam a mis à jour les données utilisées par le secrétariat et nous lui en savons gré. Nous ne voulons considérer que les données avec lesquelles nous sommes plus familiers, à savoir celles du Canada. Nos producteurs ont ensemencé 12 pour cent de plus de blé que l'an dernier, 10 pour cent de plus en orge et 9 pour cent en avoine. On dira peut-être que c'était pour faire face à une production pratiquement moindre et pour rentabiliser la production globale au cas où la période sèche de l'an dernier se répéterait. La réalité, c'est qu'il n'y a heureusement pas eu de sécheresse et la semaine dernière, la région la moins humide de nos prairies, celle du sud-ouest, de la Saskatchewan a bénéficié de 3 à 5 cm de pluie juste au moment où les producteurs de cette région désespéraient de pouvoir concurrencer leurs voisins des autres régions. Aussin'ont-ils pas manqué de répéter cette expression bien connue de tous les agriculteurs : "C'est véritablement de l'or qui tombe du ciel".

Le document de travail 79/2 fait à plusieurs reprises allusion aux prix des céréales : au quatrième paragraphe de la page 1, au sixième paragraphe de la page 2, au troisième paragraphe de la page 5, septième paragraphe de la page 6, etc. Si l'on tient compte du facteur généralisé de l'inflation, on se rend compte que le prix des céréales n'a pas dépassé celui des autres produits.

Une comparaison a été faite sur le montant d'engrais qu'on pouvait importer avec une tonne de thé il y a dix ans et ce qu'on peut en importer aujourd'hui. Je soupçonne que la comparaison est aussi forte, sinon plus, entre une tonne de blé, qu'il soit canadien ou autre, et le nombre de barils de pétrole il y a douze ans et aujourd'hui. Au Canada, le prix du blé de printemps de l'Ouest est tombé de 275 dollars canadiens la tonne au début de janvier à 242 dollars à la fin d'avril. Il est à prévoir qu'en raison du taux record de la demande mondiale, surtout des pays à économie centrale planifiée et des pays producteurs de pétrole, en raison également de l'appauvrissement des stocks mondiaux et de la hausse du prix mondial des céréales, le prix du blé augmentera de quelques points au cours des mois qui viendront par rapport à celui de l'année dernière; mais il n'augmentera pas plus que celui de l'inflation au Canada.

Le deuxième secteur de commentaires de la part du Gouvernement canadien est celui de l'aide alimentaire. Disons tout d'abord que le budget du Canada sur ce point passe de 182 millions pour l'année 1980-81 à 203 millions, soit une augmentation de 11 pour cent. Ceci inclut 16 millions à attribuer en secours d'urgence à l'Ethiopie, la Somalie, le Soudan et l'Ouganda au profit des populations dispersées par les luttes.

Une autre partie de cette augmentation est à la disposition d'autres pays d'Afrique auxquels le document 79/2 fait allusion et auxquels le Directeur général s'est référé.

Le Canada a donc décidé de rehausser son pourcentage d'aide extérieure de 0,43 pour cent du PNB qu'il était en 1980 à 0,5 pour cent en 1985 et à 0,7 pour cent à la fin de la décennie.

Le document 79/2 relève, avec inquiétude, on dirait, la diminution constante de la part de l'aide alimentaire dans les importations de céréales des pays à faible revenu telles qu'établies dans le tableau 7. Le document supplémentaire distribué ce matin donne la même impression. Faute de documentation et de statistiques appropriées sur la production et la consommation de denrées agricoles à l'intérieur de chaque pays, il est difficile d'accepter automatiquement cette interprétation un peu négative.

Si le but de l'aide alimentaire, telle qu'on le répète de plus en plus, est de se rendre utile, la décroissance pourrait être acceptable et même encouragée.

La section sur l'aide officielle au développement, étayée par le tableau 8, s'en tient à une définition stricte et étroite de l'aide à l'agriculture. La FAO, au regard global et aux perspectives universelles, devra pouvoir fournir des données moins restreintes. Depuis au moins deux ans en effet, tant pays donateurs qu'organismes des Nations Unies, y compris la FAO et le CMA, et surtout les pays en voie de développement eux-mêmes augmentent leurs efforts vers le développement agricole tant à partir des systèmes nationaux d'alimentation que pour la consommation et la distribution. Il ne semble pas que ces efforts soient pris en considération par le document 79/2, en particulier les sommes assignées par les pays en voie de développement eux-mêmes à leur production agricole, à la commercialisation de ces produits et à la consommation à l'intérieur de chaque pays. Sans ces données, la panoramique d'un document tel que le 79/2 et son supplément, est un peu déficiente, pour ne pas dire biaisée.

En général, Monsieur le Président, nous partageons l'opinion de l'honorable délégué des Etats-Unis et de celui de l'Inde sur l'opportunité d'avoir plus de précision dans la description de la situation de l'alimentation dans le monde. Si, comme l'a dit éloquemment le Directeur général, les pauvres ne se nourrissent pas de pourcentages, les contribuables non plus ne peuvent pas se satisfaire de statistiques générales, surtout lorsqu'elles sont susceptibles d'être modifiées subséquemment par les changements de température.

LE DIRECTEUR GENERAL: Je crois qu'il est utile, à ce stade, de faire les commentaires suivants.

Notre aperçu de la situation mondiale de l'alimentation et de l'agriculture, telle que l'a définie M. Renaud, ne peut être basé que sur les informations qui nous sont fournies par nos Etats Membres. La FAO n'entreprend pas chaque année, ou chaque six mois, d'enquêtes statistiques dans les différents pays pour obtenir des renseignements. Nous nous adressons aux gouvernements, nous envoyons des ques-tionnaires, et les gouvernements nous répondent. Nous n'avons pas d'autres informations, et j'ai le regret de dire, comme vous aussi le regrettez, que les pays du tiers monde ne sont pas en mesure de nous donner toutes les informations concernant leur agriculture. C'est une question qui a été très souvent posée. La définition de l'agriculture est très large, et nous ne pouvons pas obtenir ces in-formations. Cela fait des années que nous demandons aux gouvernements quelle est la part de leur bud-get consacrée au secteur rural et agricole. Nous n'avons pas ces renseignements ou nous les avons de façon très incomplète. Dans certains pays les statistiques n'existent pas. Et ils sont tellement pauvres qu'il n'y a pas de service statistique, ou il existe seulement dans la capitale. Prenez un pays comme le Zaîre, il faudrait des centaines de milliers de dollars pour établir un service statistique couvrant l'ensemble du pays. Certains de nos renseignements viennent de l'OCDE, nous n'avons pas d'autres sources.

Quant à dire que nous sommes alarmistes, je le regrette, mais je ne peux pas accepter cette qualification. Qu'il y ait de très bonnes récoltes aux Etats-Unis et au Canada, c'est très bien. Mais la situation de la production agricole dans les pays africains est très mauvaise, et c'est cela qui nous inquiète. Nous nous réjouissons que la production de blé soit bonne au Canada, en Australie, dans la Communauté européenne, mais avant de dire qu'il y a un record dans la production du blé, attendons que . le blé soit engrangé. Cependant la situation est très mauvaise dans les autres pays, essentiellement dans les pays africains. Quant aux pays asiatiques, la céréale la plus importante est le riz, et nous devons attendre la fin de là mousson en septembre/octobre pour savoir quelle est la situation du riz en Asie.

Vous avez cent fois raison de dire que le prix du blé n'a pas augmenté depuis plusieurs années. J'irai dans votre sens et je dirai qu'en 1973/74, au moment de la crise alimentaire, les prix étaient arrivés à 250 dollars USA la tonne, donc plus chers que maintenant. Il est donc vrai que le prix du blé n'a pas augmenté comme le prix d'autres denrées.

Mais ce qui a augmenté beaucoup, c'est le fret, le transport. Il coûte aujourd'hui trois fois plus cher qu'en 1973/74. Aujourd'hui une tonne de ble coûte fob aux Etats-Unis 180 dollars la tonne. Mais elle coûte 450 dollars quand elle arrive au Kenya. Voilà le prix que paye le Programme Alimentaire Mondial pour faire arriver une tonne de ble au Niger, en Haute Volta, au Tchad, et il le fait constam-ment.

Malheureusement, les pays du tiers monde n'arrivent pas à accroître leur production de céréales. Avant la première guerre mondiale ils étaient tous exportateurs, y compris le Sierra Leone qui était exportateur de riz. Avec l'explosion démographique, avec la situation économique dans laquelle ces pays se trouvent, ils ne sont plus exportateurs, ni même autosuffisants.

Quand nous disons que la situation est alarmante, nous pensons à ces pays, nous ne pensons pas aux pays normalement excédentaires.

Il y a quatre ans je disais que nous avions eu des récoltes exceptionnelles, que les stocks étaient arrivés à 18-19 pour cent, que c'était le moment de porter l'aide alimentaire à 10 millions de tonnes.

J'ai dit ce matin une chose que nous n'avez peut-être pas eu encore le temps de relever, c'est que dans les années où il y a un déficit dans la production alimentaire mondiale, l'aide alimentaire baisse le plus. En 1973-74, nous sommes tombés à 6 millions de tonnes. En 1965, nous étions à 14-16 millions de tonnes.

Je conclurai en disant que ces chiffres que vous me demandez sont utiles, sont importants. Il est important de savoir combien chaque pays investit dans le domaine agricole sur le plan national. Ces chiffres là, nous n'avons pas encore pu les obtenir. C'est notre objectif de vous donner un tableau le plus complet possible. Ce n'est pas de la mauvaise volonté si nous ne pouvons pas les fournir maintenant.

Quand nous disons que les stocks sont au niveau le plus bas, c'est qu'ils sont descendus à 14 pour cent. Si je dois être franc, et je crois que chacun de vous souhaite que je sois le plus franc possible, je suis encore plus alarmé après ce que nous avons entendu au Conseil Mondial de l'Alimentation à Novi Sad il y a quelques semaines. On a dit qu'on ne croit pas à un système international de sécurité alimentaire. On a dit que chaque pays devrait lui-même créer ses propres stocks de sécurité alimentaire. Ceci a été dit très clairement. On a dit aussi qu'il n'était pas nécessaire qu'il y ait encore des négociations et un accord international sur le blé ou sur les grains. Pour nous la situation est donc encore plus alarmante. Si certains pays, et des pays très importants sans lesquels rien ne peut se faire dans ce domaine, pensent aujourd'hui qu'il n'est pas nécessaire d'avoir un système de sécurité alimentaire international alors qu'il y a quelques années on proposait un système de sécurité alimentaire international basé sur des stocks de 32 millions de tonnes avec une aide aux pays en voie de développement et qu'on dit au contraire "chacun pour soi et Dieu pour tous", il y a de quoi être alarmé.

Je crois que le Comité de la sécurité alimentaire, l'année prochaine, étudiera ce problème. Mais au-jourd'hui certains pays importants nous disent: nous avons une doctrine, une philosophie tout à fait différente de ce que nous avons pensé il y a quelques années. Chaque pays doit avoir ses propres stocks dont il s'occupera lui-même mais il n'y aura pas un système international de sécurité alimentaire basé sur des stocks internationaux. Un mécanisme international pourrait faire des propositions pour la distribution de ces stocks aux pays qui seraient dans une situation difficile.

Je le dis très franchement, je n'ai pas voulu dans mon discours parler de cette situation nouvelle à laquelle nous sommes confrontés. Nous en avons discuté depuis la Conférence mondiale jusqu'à la réunion de ce printemps. Nous sommes devant une situation nouvelle vraiment alarmante.

CHAIRMAN: Thank you very much, Mr. Director-General. This particular subject is a nightmare, not only to delegates and to the Secretariat but also to the Chair, because I cannot call anybody to order, since the whole thing is so imprecise and general. Anybody can say what he likes and nobody can really challenge him. So I think we just have to do the best we can and get through it somehow.

J.A. GUEVARA MORAN (El Salvador): .Señor Presidente, señor Director General, señoras, señores delegados, señores: Yo, en primer lugar, quiero en nombre de la Delegación de mi país agradecer al Director General la invitación a esta reunión de suyo interesante, y ofrecer decididamente nuestra participación dinámica para ayudar a esclarecer la problemática de un tema que, a nuestro juicio, es uno de los temas centrales por los cuales se estableció la FAO, como Organización para resolver estos problemas.

Aunque quisiera felicitar al señor Director por la excelencia de su informe, en el cual se destacan de forma concreta los problemas mas significativos que confronta la Organización y los temas que confron-tará en los próximos años, escuchando el informe que el excelentísimo señor delegado de la hermana República de Méjico hacía sobre los diez años que han pasado para tratar de resolver esta proble-mática, y al leer que en la última Conferencia de nuestra Organización, que se celebro acá a finales de noviembre del año pasado, ya se han establecido conclusiones bien claras en torno a este problema, es preocupante, y de gran preocupación para nuestros países subdesarroliados, el hecho de que en diez años no encontramos la fórmula para cumplir los objetivos y metas que nos habíamos propuesto, y por esa razón nos preguntamos si la agricultura hacia el año 2000 y la estragegia que se ha establecido con los objetivos y metas correspondientes serán alcanzados o si, por el contrario, en el año 2000 tendremos también otra conferencia de la FÀ0 en que se esté lamentando el no haber cumplido en 20 años las metas que se había propuesto.

Nos preocupa, y aunque no es tema de este momento, lo del presupuesto de la Organización. Nos preocupa el hecho de que esa política de crecimiento cero del presupuesto de la institución nos está llevando posiblemente a un ahogamiento financiero, a pesar de que conocemos las políticas del Director General, las hemos avalado, las hemos respetado y las admiramos, esa política que explicó esta mañana, pero también nos preocupa el que solamente tengamos posibilidad de hacer ajustes monetarios de acuerdo a como vaya fluctuando la paridad de la moneda. Cuando toquemos este tema haremos enfoques concretos en este punto.

En este momento a nuestra delegación le preocupan algunas cosas fundamentales sobre la alimentación en el mundo, y le preocupan porque estamos probablemente en un círculo vicioso. ¿Cómo es posible que nuestros países subdesarrollados vendan sus productos de exportación con los cuales adquieren divisas para comprar alimentos y para otras cosas más, cómo es posible, digo, adquirir esas divisas si a nosotros no nos pagan ni lo que nos cuesta producir esos productos? Da tristeza para nosotros, que poco podemos venir al Viejo Mundo, encontrarnos que aquí una taza de café es muy cara y nos preguntamos por qué esos productos, entonces, no tienen una retribución adecuada para nosotros a objeto

de que logremos vender a un precio justo dichos productos y estamos tratando hacernos el harakiri entre nuestros mismos países haciendo plegarias para que haya fenómeóos naturales extraordinarios y poder resolver coyunturalmente nuestra problemática.

Eso nos llama a mucha preocupación, y por esa razón pensamos que una de las causas fundamentales que se deberían analizar es cómo vamos a resolver los países subdesarrollados esa dependencia de unos pocos productos de exportación, porque aunque haya bastantes países subdesarrollados, el grado de sub-desarrollo es distinto; hay algunos países que no dependen exclusivamente de la agricultura, tienen otros productos, como ejemplo, petróleo.

Pero los países en donde no existe petróleo la situación se presenta aún más dramática. En ese sentido creemos que se debe de revisar los términos de intercambio de nuestros productos y de los productos que nos venden, porque resulta contradictorio el hecho de que a los países industrializados algunas veces deseamos comprarles alimentos, no deseamos que nos los regalen, deseamos comprarlos, pero no podemos porque esos productos son excesivamente caros y recurrimos a otros productos y se nos va cerrando el círculo, caso por ejemplo de la leche: la leche en polvo es un artículo que cada día es más imposible de adquirir en los mercados de los países industrializados por dos razones: la pri-mera porque los precios son cada día más altos, sumamente elevados, y en segundo lugar porque los países donde los pudiéramos adquirir son países o regiones aftosas y existen limitaciones de tipo sanitario.

¿Qué hay que hacer ante esta situación? ¿Cómo resolver este problema a corto, mediano y largo plazo?

Se ha tocado también y en el Informe de los diez años del Comité se indicaba uno de los aspectos, que se ha tocado mucho en esta discusión, y es el precio de los insumos, fundamentalmente de los fertilizantes. Considera nuestra delegación que valdría la pena hacer esfuerzos para racionalizar el uso de los fertilizantes. Consideramos que es posible que lo que se esté dando sea una irracionalidad en el uso en algunas regiones, no en todas, pero sí en algunas regiones. Y eso agrava la situación, porque encarece la producción de los productos agrícolas, y también genera una serie de atros fenómenos y problemas.

Creemos que se debe de estudiar la posibilidad de que en nuestros países se produzca algún tipo de fertilizantes, por ejemplo, fertilizantes orgánicos. Creemos que tendríamos capacidad de hacerlo, y con eso paulatinamente pudiéramos quizá en un mediano-largo plazo llegar a sustituir en algo las importaciones de esos productos que cada día se suben con precios prohibitivos.

Se han tocado otros temas que me parecen también sumamente interesantes y dentro de estos temas, vale la pena preguntarnos ¿será optimista el informe de la Secretaría, será pesimista o será realista?

Quizá hace diez años lo mismo se estaba discutiendo de que si era un informe pesimista el de aquella época y los resultados indican que no cumplimos las metas. Por esa razón, también se ha hablado en esta mañana de que no haya más paternalistas, y creo que está bien; no se quiere paternalismos, pero sí un trato justo, recíproco, justo. Un trato que nos permita transar justamente, y en ese sentido, también yo quisiera invitar a los respetables señores delegados a esta reunión del Consejo, a que meditáramos pro- fundamente en qué campos y en qué aspectos pudiéramos valemos de nuestra mutua cooperación. Decía en el informe del Excelentísimo Señor delegado Presidente de la hermana República de México que no hemos explotado al máximo la posibilidad de cooperación entre nuestros países, cooperación en asistencia de todo tipo, investigación de todo tipo, comercialización para evitar todos estos problemas. Y quizá, por ahí puede estar uno de los filones de que pudiéramos valemos para mejorar la situación alimentaria de nuestros países, que cada día se vuelve más deprimente.

Por último, quisiera leer al numeral número 46 del documento la Agricultura hacia el año 2000 presentado a la Conferencia pasada, que dice: "La producción de una cantidad suficiente de alimentos no garantiza automáticamente que se satisfagan los requisitos nutricionales. Los análisis del pasado reciente realizados por la FAO, muestran que muchas personas siguen sufriendo de malnutrición aunque sus países cuentan con alimentos suficientes para satisfacer las necesidades nacionales medias. Por consiguiente, el segundo desafío consiste en garantizar que los pobres puedan obtener suficientes ingresos para comprar los alimentos que necesitan".

KONG CAN-DONG (China) (interpretation from Chinese): Mr. Chairman, the Chinese Delegation has listenedwith great interest to the Director-General, Dr. Saouma's speech on the current world food andagricultural situation. He lucidly elaborated on the political and social problems of the world as .well as agricultural production, trade of cereals, food security and food aid of various kinds. He also madean in-depth analysis of some of these problems we are faced with. We are in agreement with his analysis.In the meantime, we would like to express our thanks to Dr. Islam for his introduction to thedocument CL 79/2.

Since the last session of the Council, the world food production has turned for the better gradually, for which we feel gratified. However, we notice that no fundamental change has taken place in the long-term trend of the world food supply. Food shortage becomes very serious in some of the developing countries. The food import requirement by the developing countries is on the increase. But it is estima-ted that the world cereal stocks still cannot be maintained at the safety level. So food security will have its impact upon the economic, social or even political life of all countries in the world. We think that only with this kind of understanding, strong political will and determination can a final solution to world food security be achieved.

I would like to avail myself of this opportunity to give you a brief introduction about the food and agricultural situation in our country.

1. At present, China's national economy and agricultural production are in the process of readjustment. The Chinese Government is implementing the economic policies suited to the current features of the rural areas in China, further mobilizing the initiatives of the broad masses of peasants in production, steadily improving the economic situation in the countryside. In 1980, most part of our country saw a comparatively good harvest with the exception of areas such as Hubei and Hebei Provinces. These provinces were hit by natural disasters and there was a decline in food production. The total grain output in China was 318.22 million tons. So far as food requirements are concerned, it will be rather tight in supply. The production of oil seeds, sugar bearing crops, cotton and other cash crops went up in varying degrees as compared with that of 1979. The output of aquatic products was 4.497 million tons - 4.5% higher than that of 1979. Total production of all kinds of meat was 12.055 million tons - 13.5% more than that of 1979. The total agricultural output value, in the constant price of 1970 was 162 700 million Yuan - increased by 2.7% as against 1979. The income of the broad masses of peasants increased considerably over the previous year.

2. Concerning summer crops, rapeseed is one of the important summer crops in 14 provinces and autonomous regions of the southern part of China. Harvesting of rapeseed has just been completed. The total output of rapeseed shows an increase of 30% over that of last year. Now this is the right time for wheat harvest. It is expected that there will be quite good harvest of wheat in some provinces and autonomous regions, but wheat production in other provinces is affected by long dry spell. Up to the present moment, no accurate information is available on summer cereal production.

3. By taking into account the characteristics of different areas in China, our government has carried out step by step restructuring of the irrational agricultural layout in accordance with the principle of bringing the strong points into full play while overcoming weak points and of adaptation to local conditions. On the one hand, primary attention is paid to food production; on the other hand, all-round development of farming, forestry, animal husbandry, sideline occupations and fishery is promoted. In the meantime, work will be done in a planned way to develop animal husbandry and aquaculture in those hilly areas, grassland and water surface in the hinterland which have not yet been utilized. We want to increase our food supply through various channels. We did import foodgrains in the process of restructuring. However, we adhere to the policy of putting stress on self-reliance and seeking foreign aid as a complementary measure; strive to strengthen economic and technical co-operation in the international food and agricultural sphere, and quicken the pace of expanding food and agricultural production in China.

Thank you, Mr. Chairman.

M.W. MOORE-WILTON (Australia): The Australian delegation welcomes the opportunity to express its view of the current world food situation. The improvement in the immediate food outlook noted by Professor Islam in his useful introduction to this item is a development which I am sure all delegations will welcome. However, my delegation fully shares the concern expressed by the Director-General in his speech and in his intervention that the international community has not yet met the challenge of abolishing hunger and malnutrition in the world. As a major producer and exporter of grain, Australia hopes that its 1981 planting will help contribute in some small measure to increase food availability in 1981-82. As delegates may be aware, Australian food production in 1 980-81 was severely affected by widespread drought. Fortunately we have recently received good rains which provide a basis for our new plantings. Australian wheat planting will increase from 11.2 million hectares in 1980 to a record 12 million hectares this year. Whilst it is still too early to make an assessment of the size of our wheat crop we are hopeful that we will harvest a good crop later in the year.

Whilst Australia can help contribute to increased world food security through gradual expansion of our grain production we share the view expressed by other delegations that the major thrust in increasing food production must come from the food deficit countries themselves.

We support the increased emphasis being given by the FAO and the governments of developing nations for increased investment in agricultural research and infrastructure projects relating to water storage and transport. Importantly, however, we believe that farmers need to receive an adequate and remunerative price for their production in order to bring forth the necessary agricultural response which the world will need in the future. Too often as representatives of government perhaps we concentrate on the obligations which governments might consider while not giving enough emphasis perhaps for the fact that production can only come forward from the farmers that cultivate the land. In this regard my delegation shares the concern of many delegations at the trend towards increasing protectionism in some countries which can only retard international efforts to improve world food availability and world food security. The Australian delegation considers that the FAO and the other specialized agencies of the United Nations system with responsibility relating to food production and trade should give emphasis to developing appropriate measures for reducing protectionism in the agricultural sector.

My delegation will elaborate its views further on the major areas of concern relating to world food security in the discussion on Item 5.

M. DERNAIKA (Liban) (Interpretation de l'arabe): Je voudrais remercier le Président et exprimer mes félicitations au Directeur général pour son allocution très complète et détaillée au cours de laquelle il nous a rendu consciencieusement compte de la situation actuelle de l'alimentation et de l'agriculture dans le monde. Qu'il me soit également permis de féliciter le Professeur Islam pour son inter-vention au cours de laquelle il a résumé le document 79/2 qui traite de la situation actuelle de l'alimentation.

Son résumé n'a fait que compléter l'allocution du Directeur général. Ces deux discours nous les appuyons dans la mesure où ils rendent parfaitement compte de la situation actuelle de l'alimentation. Toutefois, nous voyons une lueur d'espoir en ce qui nous concerne et c'est avec un certain optimisme que nous envisageons l'avenir car nous pensons qu'il y a une détérioration dans un certain nombre de pays. Nous espérons que la bonne situation météorologique permettra de meilleures cultures. Cette production restera malgré tout inférieure aux besoins qui sont nécessaires. Cela tient également au fait qu'il est indispensable de renforcer la sécurité alimentaire mondiale dans la mesure où les stocks sont tombés à des niveaux alarmants.

Nous sommes également préoccupés par le fait qu'un certain nombre de facteurs sont devenus aggravants: je pense à l'augmentation du prix des engrais qui sont nécessaires à toute stratégie du développement agricole.

J'aimerais d'ailleurs à cette occasion remercier tous les pays qui très généreusement ont fait des dons en espèces et en nature aux pays en développement les moins avancés. Ces pays ont permis aux pays en développement de ralentir la détérioration de la situation. Nous tenons à remercier le Fonds monétaire international de la décision qu'il a prise d'accorder des facilités financières à des fins alimentaires qui ont pour objectif d'aider les pays en développement à faire face à la crise très grave de leurs importations. Cette situation est le fait de la FAO et notamment de son Directeur général qui a pris l'initiative de demander qu'une telle décision soit prise. Nous espérons très vivement que l'Organisation internationale sera en mesure de réaliser les progrès équivalents en matière d'aide alimentaire. En effet, nous sommes loin de l'objectif qui avait été fixé par la Conférence mondiale de l'alimentation. Cet objectif, vous vous en souviendrez, était de 10 millions de tonnes. Par ailleurs, la Réserve alimentaire internationale d'urgence n'a pas non plus atteint ses objectifs. Nous espérons que la communauté internationale et plus particulièrement les pays qui se trouvent dans une position plus favorable et qui peuvent aider les autres parviendront à ces objectifs.

J'espère également que nous pourrons réagir positivement à l'appel que nous a adressé le Directeur général qui a demandé que l'aide passe à 18 millions de tonnes de «céréales, à 300 000 tonnes de produits laitiers et 350 000 tonnes de graisses oléagineuses. La Réserve interna-tionale d'urgence devrait parvenir au niveau de 500 millions de tonnes actuel.

A ce stade, nous tenons d'ailleurs à réitérer l'appui que nous apportons au Directeur général pour les efforts qu'il a entrepris afin de mettre en oeuvre la stratégie internationale dans le cadre de la prochaine décennie pour le développement qu'a adoptée l'Assemblée générale des Nations Unies.

Il va sans dire qu'il s'agit d'une tâche d'une ampleur formidable entreprise par la FAO lorsqu'elle a entrepris son étude agricole "Horizon: 2000". L'effort qui doit être déployé par le monde entier est très important. Il est certain que la situation ne pourra pas s'améliorer comme le disait le Directeur général si nous ne faisons pas tous nos efforts et si nous n'accordons pas nos intentions et entre autres un minimum au programme mondial pour développer la production alimentaire et la sécurité alimentaire dans tous les pays du monde dans le cadre d'un nouvel accord alimentaire.

Il est indispensable d'accroître les montants de l'aide alimentaire. Le Fonds international de développement agricole devrait également recevoir notre appui et je pense que la Réserve alimentaire d'urgence devrait être établie sur des bases plus solides. Je pense donc que tous les pays qui sont en mesure de le faire devraient mieux répondre aux besoins des pays en développement en accroissant leur aide alimentaire afin d'atteindre l'objectif de 0,7 pour cent de leur PNB." Je pense que ces pays ne devraient en aucun cas hésiter à donner une aide à l'Organisation pour lui permettre d'exécuter ses programmes pour que l'Organisation réponde aux pays du monde qui en ont besoin.

Sra. Dra. M. IVANKOVICH DE AROSEMENA (Panamá); Señor Presidente, sean mis primeras palabras para darle la bienvenida en su calidad de Presidente del Consejo, de igual manera que deseamos felicitar por su conducto a los Vicepresidentes elegidos, quienes compartirán con usted la delicada responsabilidad de presidir este Período de Sesiones.

Hace poco más de seis meses este Consejo acogió con marcada preocupación y manifiesta alarma la evalua-ción que nos hiciera el Director General sobre la gravedad de la situación alimentaria en el mundo y las perspectivas que se visualizaban. En ese mismo período de sesiones, la delegación de Panamá fue muy clara en reconocer y aceptar la correcta orientación dada por el Director General para que la FAO pudiera hacer frente a los cada vez más graves problemas por los cuales atraviesa la humanidad en esta materia.

La dramaticidad de la situación, le da particular importancia a este período de sesiones, basta señalar que nos toca examinar el Resumen del Programa de Labores y Presupuesto para el bienio 1982-83 y otros aspectos vitales relacionados con la existencia y funcionamiento de la Organización.

Definitivamente para hacer frente a nuestra tarea sería indispensable que todos los Estados Miembros asumamos nuestra responsabilidad tanto a nivel individual como colectivo. No se trata de postergar la solución de problemas, ni dejarlos al Director General y a sus colaboradores. Es una situación que todos tenemos que afrontar en conjunto., No abundaremos más de lo necesario en los indicadores alarman-tes de la situación alimentaria mundial que va desde el aumento marginal de la producción mundial de alimentos en 1980, aún menor que el pequeño incremento logrado en 1979, al aumento en este año de las exportaciones agrícolas en los países en desarrollo, que si bien registraron en algunos casos alza en los precios, el poder de compra de los mismos bajó en la práctica, como bien se ilustra en el prólogo del documento "Situación y Perspectivas de los Productos Básicos 1980-1981"• Hace diez años, con una tonelada exportada de bananos se sufragaba el costo de una tonelada de acero importado. En 1979, había que vender más de dos toneladas de bananos para comprar una tonelada de acero. Nos permitimos señalar esto por la importancia que tiene el cultivo del banano en las exportaciones agropecuarias de Panamá.

Dentro de este orden de ideas puntualizamos en el debate del Tema 4, algunos aspectos específicos señalados en el documento 79/2, : situación actual de los alimentos en el mundo, por considerarlos de sumo interés.

Con relaciónal capítulo que nos habla de la "frecuencia de las plagas y enfermedades en 1980 y las luchas contra las mismas", recalcamos la introducción de la sigatoha negra del banano en áreas anteriormente no afectadas, lo hacemos por la patogenisidad del agente causante de esta enfermedad, que viene a poner en peligro la producción del banano en una de las áreas más importantes del mundo en este cultivo, es decir Centro América. Esta enfermedad, unida a las periódicas devastaciones producidas por huracanes, hará más grave la situación económica de la mayoría de los países de esta área. Este razonamiento es válido también para la peste porcina africana.

Por otro lado creemos firmemente que la prevención de pérdida de alimentos tiene un impacto más que significativo en la disponibilidad de los mismos. Como se expresa en el tercer párrafo de la página 14, un pequeño esfuerzo en aspectos tales como manejo, procesamiento y almacenamiento, unido a otros que tiendan a superar métodos incorrectos de recolección, secado, limpieza y transporte, contribuyen efecti-vamente a la disminución de las pérdidas post-cosecha.

Sentimos la necesidad, señor Presidente de referirnos a la ayuda alimentaria de urgencia y, en particular, a la conversión de la Reserva Alimentaria Internacional de Emergencia (RAIE) en un Convenio jurídicamente vinculante, como ha sido propuesto por el Director General. Como todos sabemos, en distintos Comités se ha venido discutiendo esta propuesta y deseamos señalar la paradoja que al respecto observamos. Por un lado los que se oponen a que la RAIE sea un convenio jurídicamente vinculante, lo hacen sosteniendo que ello desestimularía a los donantes; por otra parte no se ha alcanzado el objetivo de disponer de quinientas mil toneladas de cereales para la reserva.

En el anterior período de sesiones expresamos nuestra alarma por la disminución de la asistencia oficial externa a la agricultura, expresando en una creciente reducción de los compromisos oficiales por parte de las fuentes multilaterales mientras la asistencia bilateral aumenta notablemente, así lo expresa el último párrafo de la página 32 y las tres primeras de la 33 del documento 79/2.

Consideramos, señor Presidente que para el logro de una verdadera seguridad alimentaria, es necesario cambios estructurales, dentro de las particularidades propias de cada país, como bien lo plantea la Declaración de Principios y el Programa de Acción de la Conferencia Mundial sobre Reforma Agraria y Desarrollo Rural.

Estos cambios deben tener claramente definidos objetivos encaminados al mejoramiento de las condicionesde vida de la población, al incremento en la producción de alimentos, generación de empleo, aumento dela producción y productividad, aumento de los productos de exportación y mejoramiento real de los ingresos,fortalecimiento de las instituciones, manejo y conservación de recursos y un incremento del productointerno bruto con una adecuada y justa distribución,

Es por todo esto que acogemos con gran satisfacción los adelantos que se dictan, dentro de las conocidas dificultades, entre ellas la presupuestaria, en la implementacíón de las actividades complementarias de la Conferencia Mundial sobre Reforma Agraria y Desarrollo Rural.

Confiamos, finalmente, en el papel positivo que tendrán en el futuro próximo los Centros Regionales de Reforma Agraria y Desarrollo Rural, que ya comienzan a tener vida.

Por último, Sr. Presidente, deseamos felicitar al Director General por su discurso inaugural tan abarca-dor y claro, al que ya tendremos oportunidad de referirnos en los distintos temas de su contenido en forma más amplia.

J. TCHICAYA (Congo): La situation de crise alimentaire actuelle dépeinte dans le document CL 79/2 et son complément accroît la responsabilité de notre Conseil qui a pour mission non seulement d'analyser cette situation mais également et surtout de proposer des solutions efficaces pour diminuer les tensions nées de cette situation et permettre ainsi une progression rapide vers une solution définitive du problème.

D'ores et déjà, je perçois tout le poids au regard de l'importance de cet organe de direction de la FAO qui pèse sur chacun de nous et je mesure la confiance que vient de me témoigner le gouvernement en me désignant comme chef de la délégation congolaise à ce Conseil en lieu et place du Ministre de l'agriculture et de l'élevage qui avait tenu à prendre part personnellement à ces travaux mais qui n'a pu être des nôtres et ce à cause de l'intensité des activités internes au moment où se discute le prochain plan quinquennal de développement économique et social. Vous comprendrez encore plus aisément cette absence lorsque je vous aurai dit que l'agriculture et les problèmes alimentaires en constituent la première priorité.

Je viens cependant de recevoir de sa part un message à votre intention, Monsieur le Président, à l'intention de tous les chefs de délégation et du Directeur général me priant de vous transmettre, en même temps que ses excuses, tous les voeux de réussite et vous assurer de l'intérêt qu'il porte à nos travaux.

Cela fait, nous voudrions également rendre un hommage particulier au secrétariat qui a toujours su nous fournir des documents aussi complets que possible et celui présentement soumis à notre examen n'échappe pas à la règle. Parlant de la situation actuelle de l'alimentation dans le monde, on est souvent frappé par le manque de volonté unanime d'éradiquer la faim et la malnutrition sur notre planète qui regorge dans son ensemble de fabuleuses ressources dont la mise en exploitation rationnelle devrait permettre à tous les peuples de ce monde de se nourrir convenablement. Certes, la poussée démographique est un facteur négatif dans la résolution du problème de la faim, mais c'est là un facteur dont on avait tenu compte lorsque unanimement, lors de la Conférence mondiale de l'alimentation en 1974, on avait décidé de s'attaquer à vaincre ce fléau.

Ce n'est pas par hasard qu'un taux de croissance annuelle de production de 4 pour cent avait été arrêté pour atteindre ce noble objectif au terme de dix ans d'efforts communs de tous. Mais là, nous constatons qu'en Afrique, par exemple, où la situation n'était guère brillante en 1974, cette situation alimen-taire non seulement n'a pas évolué mais au contraire se dégrade, puisqu'il y a 10 pour cent de nourriture en moins par habitant qu'il y a dix ans.

Un tel phénomène était prévisible, puisque toutes les recommandations concernant une aide massive et désintéressée des pays développés aux pays économiquement faibles se sont heurtées aux incompréhensions des premiers, qui n'ont pas voulu payer le prix de la solidarité internationale. Cette timidité dans les élans de générosité des pays développés en direction des pays pauvres conjuguée à la crise mondiale qui a frappé de plein fouet les économies déjà chancelantes de ces derniers et, dans une moindre mesure, celle des pays développés, ont abouti à la présente situation. Même si l'on nous fait miroiter un accroissement de la production pour la campagne en cours, notamment dans les pays traditionnellement grands exportateurs de denrées alimentaires, il reste que, face à toutes les augmentations de prix de ces denrées, conjuguées aux coûts élevés de transport, les pays en développement seront incapables d'accroître leurs importations alimentaires malgré les besoins internes. A cet égard, nous devons saluer et encourager la récente décision du Fonds monétaire international d'accorder une assistance financière aux pays à faible revenu pour faire face à leurs importations alimentaires. A ce propos, nous tenons à remercier la FAO et son Directeur général pour la dynamique action qu'ils ont menée en direction du Fonds en vue d'aboutir à un tel résultat. Mais comment pourrait-on examiner qu'un problème de cette ampleur puisse être résolu par des expédients? En effet, nous sommes plus que jamais convaincus que seule une politique nationale scientifiquement conçue sous forme de stratégie ou plans peut apporter des solutions durables à cette crise alimentaire toujours endémique dans les pays à économie faible. Cette stratégie et ces plans exigent d'assez importants investissements qui dépassent les seules ressources nationales et appellent l'aide et l'assistance des pays développés par l'entremise de la coopération bilatérale, mais aussi et surtout de. la coopération multilatérale exempte de tout marchandage politique.

C'est ici que nous déplorons les hésitations et les réactions quelque peu négatives de certains grands donateurs quant à contribuer à la reconstitution des ressources des organismes comme le FIDA, la Banque mondiale, l'AID dont le rôle et l'apport dans la production agricole et alimentaire sont d'ores, et déjà appréciés et appréciables.

Je voudrais, avant de terminer, poser une question qui me tient à coeur; c'est celle devoir les autres produits de base consommés assez largement dans certains pays faire l'objet sinon d'attention, du moins d'un peu plus de préoccupation. C'est le cas du manioc, du plantain, etc. Mais nous aurons l'occasion d'y revenir dans nos prochaines interventions lorsqu'il s'agira notamment d'aborder le point relatif au Programme 82-83 pour susciter une action encore plus vigoureuse.

Bref, je voudrais rappeler que la situation alimentaire mondiale est alarmante et l'exposé du Directeur général est, à cet égard, plein d'enseignements; que la solution à cette situation passe par l'exécution des stratégies et plans nationaux intégrant 1'autosuffisance alimentaire; que la mise en oeuvre de cette stratégie et de ces plans nationaux exige d'importantes ressources de tout genre car aux grands maux de grands remèdes; que ces ressources doivent être trouvées avant tout par les pays concernés eux-mêmes avec l'apport indispensable et substantiel des pays développés, de préférence par l'entremise des organismes multilatéraux.

Nous ne terminerons pas cette intervention sans rendre un hommage tout particulier et bien mérité pour la courageuse déclaration du Directeur général de ce matin. En effet, nous y relevons sa ferme volonté d'agir pour aider à la résolution de la crise alimentaire mondiale. Cette déclaration a été enfin perçue par notre délégation comme un appel au Conseil pour qu'il appuie les dispositions que le Directeur général nous propose et, d'ores et déjà, nous exprimons l'espoir que cet appel a été entendu par tous.

M. ISHAQUE (Bangladesh): A dark cloud is casting its shadow over the people of this planet. This has been most correctly indicated by the Director-General in his speech this morning. His statement has given the picture of the situation we are in in respect of food, poverty and malnutrition of a large chunk of human beings occupying our earth. I am sure the committee of nations under the auspices of FAO and other world bodies will spare no pains to ameliorate the situation to bring smiles to millions of people. We therefore should fully support the programme of the Director-General.

The United States has emphatically stated -and so has Australia- that the responsability of producing more food lies on the individual countries and governments. Nothing could be more true than this. This I believe is the common awareness among all the nations. The Director-General has called for it over and over again, and the nations have responded. In Bangladesh we are fully aware of it and therefore have taken positive programmes to increase food production and have achieved some success. I on behalf of my delegation and on my own behalf wish to express our sincere thanks to the United States for mentioning in his statement this morning that Bangladesh along with other developing countries has made a substantial achievement in a programme for increasing food production.

I would like to present the Bangladesh situation in brief. Bangladesh plans to attain self-sufficiency in foodgrains by the terminal year of the Second Five Year Plan, that is 1984-85. A medium-term foodgrain production plan has been initiated to take a systematic approach to the food production problem towards achieving foodgrain self-sufficiency as opposed to the ad hoc efforts made in earlier periods. This would mean a total foodgrain production of 20 million tons by 1984-1985, when the actual output achieved was 13.1 million tons in 1977-1978 and 13.3 million tons in 1979-1980, implying a growth rate of nearly 6.2 percent per annum using the 1977-78 production as the benchmark. The 20 million ton target includes an adjustment of 10 percent due to severe weather hazards, as is most frequent in Bangladesh, and actual gross production of 18 million net (16.2 million)tons will ensure a projected population of 102 million with 15.5 ounces of foodgrains per capita per day, providing nearly 80 percent of the average daily caloric requirement. The production target of 20 million tons implies an increased production of 6.7 million tons in five years over 13.3 million tons in 1979-1980. The main strategies to achieve this incremental aim are mainly expansion of seed -fertilizer and pesticide- based technology and use and better management of water. In our programme, irrigation must make 3.7 million tons additional food possible, that is 56 percent of the additional foodgrains required to meet the target in the terminal year. Sustained increase in agricultural production is dependent on the efficiency of input supplies and services. Physical constraints, financial limitations and insufficient farm credit facilities among other factors do influence the input distribution programme and are therefore given due consideration while making programmes and projections. During the past years our input supplies have been increasing. For example, in 1977-78 we had only 7,450 deep tubewells supplied, and in 1980-81 up to May we have supplied 10,120; shallow tubewelIs supply was 6,450 in 1977-78, but in 1980-81 up to May we have been able to supply 30,890 shallow tubewells, which is an increase of about five times.

In the fertilizer field, in 1962-63 we had 73,000 tons of fertilizer distributed and in 1979-80 we uses 842,000 tons. Much more could be achieved, much more could have been possible if we could make timely arrangements for the input availability. Financial constraints are often found to be very frustrating. For example, in our irrigation development programme in 1981-82, we need 440 million taka for providing 3,500 deep tubewells. So far, 300 million taka has been lined up, and the remaining 140 million taka is still under negotiation.

I would like to draw attention to the point that while each developing country strives to develop its own production; to increase it, it needs support of various kinds, particularly research and technologywise. The U.S. has assured increased support to agricultural research and development and technological advancement of developing nations. I am sure other countries rich in resources and technology have the same assurance to the developing nations.

We note with satisfaction the successful conclusion of the UNCTAD negotiations on the Common Fund. The second account of the Fund is expected to finance research and development, productivity improvements and market development of individual commodities. This is of special significance to our country and we are therefore concerned that none of the 70 governments which have signed the agreement has yet ratified it. We therefore urge very seriously upon all concerned to make efforts so as to make the Fund operative by March 1982, as has been envisaged.

FAO's Food Security Assistance Programme has been a source of incentive to many developing nations. The statement in document CL 79/2, in the top paragraph on page 2 states: "The list of identified but unfunded projects greatly exceed the resources currently available." This statement is rather depressing, particularly depressing to the developing countries. Most respectfully I would like the members of the Council to take note of this situation and formulate appropriate action.

CHAIRMAN: We will adjourn now until tomorrow morning, and as the list of the Agenda is very long, I hope we will be prompt.

The meeting rose at 17.05 hours
La séance est levée à 17 h 05
Se levanta la sesión a las 17.05 horas

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