Previous Page Table of Contents Next Page

II. WORLD FOOD AND AGRICULTURE SITUATION (continued)
II. SITUATION MONDIALE DE L'ALIMENTATION ET DE L'AGRICULTURE (suite)
II. SITUACION MUNDIAL DE LA AGRICULTURA Y LA ALIMENTACION (continuación)

5 Report of the Twelfth Session of the Committee on World Food Security (Rome, 8-15 April 1987)
5. Rapport de la douzième session du Comité de la sécurité alimentaire mondiale (Rome, 8-15 avril 1987)
5. Informe del 12° período de sesiones del Comité de Seguridad (Rome, 8-15 de april de 1987)

LE PRESIDENT: Nous passons comme prévu au point 5 de notre ordre du jour intitulé: Rapport de la 12ème session du Comité de la sécurité alimentaire mondiale, qui s'est tenue à Rome du 8 au 15 avril 1987. Le document est le CL 91/10.

M. Gonzalez, Président du Comité de la sécurité alimentaire mondiale,a l'amabilité d'introduire le sujet.

Guillermo Enrique GONZALEZ (Presidente del Comité de la Seguridad Alimentaria Mundial). Señor Presidente, Señoras, Distinguidos Delegados y amigos todos: es para mí un placer presentar en el tema 5 de nuestra agenda el informe sobre el 12º período de sesiones del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial que tuve el honor y la satisfacción de presidir.

El Comité de Seguridad Alimentaria trató en dicho período de sesiones, que celebró en Roma del 8 al 15 de abril, diversas cuestiones de gran importancia. La agenda incluía los siguientes temas: 1º evaluación de la situación actual de la seguridad alimentaria mundial y novedades recientes en materia de políticas.

El punto 2; consecuencias para la seguridad alimentaria mundial de las políticas agrícolas de los países industrializados.

3º diversas medidas tomadas en relación con el informe del Director General sobre la seguridad alimentaria"mundial, e incluía la función de las raíces, tubérculos y plátanos en América Latina, el Caribe y el Pacífico; los procedimientos administrativos acerca de la tempestividad de la respuesta de los donantes en situaciones de urgencia, las empresas transnacionales en los sectores alimentarios, agrícolas, forestales y pesqueros en los países en desarrollo; y el último se refería al examen de las mejoras introducidas en el sistema mundial de información y alerta en el presente bienio.

Además, el Comité escuchó el informe oral presentado por el Doctor Rao, Jefe del equipo de evaluación externa del PASA, o Plan de Asistencia para la Seguridad Alimentaria sobre los principales resultados y conclusiones a que, en forma provisional, el Doctor Rao había llegado.

El Comité expresó su profunda preocupación por el hecho de que, a pesar de los suministros abundantes en el plano mundial y de un incremento más o menos importante en la producción de alimentos en algunos países en desarrollo, millones de personas seguían todavía en estado de desnutrición.

El Comité lamentó que en 1986/1987 el consumo de alimentos per capita fuera disminuido probablemente en un gran número de países en desarrollo con déficit de alimentos. Esta situación empeoraría aún más la grave situación de hambre y de desnutrición existente en dichos numerosos países en desarrollo.


El Comits estuvo de acuerdo en que el problema fundamental de la seguridad alimentaria no era tanto el de la disponibilidad global de alimentos, sino en realidad la falta de acceso a ellos por parte de sectores importantes de la poblacisn.

El Comité tomó nota con preocupación de que en muchos países en desarrollo la disminución del consumo de alimentos era la resultante, la consecuencia, la continuación de la tendencia a largo plazo debido al estancamiento econòmico de esos países, la disminución de la producción per capita de alimentos básicos y la falta de poder adquisitivo de vastos sectores de la población, tanto rural como urbana.

También subrayó que la situación de la seguridad alimentaria en muchos países en desarrollo con déficit de alimentos resultaba también perjudicada por una situación exterior desfavorable; la disminución de los ingresos de exportación, las restricciones en el acceso a los mercados, el empeoramiento de los términos del intercambio y la pesada carga de la deuda externa habían dificultado la obtención del capital y los insumos indispensables para incrementar su producción alimentaria y agrícola.

En cuanto al problema del proteccionismo, el Comité convino en que la Ronda Uruguay de nuevas negociaciones comerciales multilaterales brindaba una oportunidad única para tratar en forma constructiva los problemas con que tropezaba el comercio internacional de productos agrícolas.

Instó a todos los países a que hicieran lo posible para concluir fructíferamente dichas negociaciones, y de esta manera coadyuvar a crear un ambiente idóneo internacional que permitiera un comercio próspero y creciente.

El Comité convino en que el problema de lograr la seguridad alimentaria a largo plazo no consistía sólo en asegurar una producción agregada suficiente de alimentos, sino también en mitigar la pobreza. Subrayó la necesidad urgente de adoptar medidas nacionales encaminadas a la creación de empleo y el aumento de los ingresos, especialmente para la población más pobre.

A corto plazo el Comité hizo hincapié en la función que desempeñaban las medidas de orientación concretas para proporcionar un acceso inmediato a los alimentos por parte de la población más pobre.

En cuanto a la existencia de excedentes exportados en algunos países en desarrollo, el Comité expresó su preocupación por las graves dificultades creadas por esos excedentes debido a la falta de instalaciones, de almacenamiento y servicio de transporte y manipulación para mantener dichas existencias y distribuir los alimentos en las zonas deficitarias.

El Comité subrayó la necesidad de prestar asistencia a estos países para construir almacenes y crear infraestructura de transportes para facilitar el movimiento de alimentos desde las regiones excedentarias a las deficitarias.

Instó también en la necesidad de fomentar transacciones triangulares y los llamados acuerdos de trueque, a fin de ayudar a los países en desarrollo a colocar sus excedentes.

En relación con el impacto de la política agrícola de los países industrializados en la seguridad alimentaria mundial el Comité reconoció que las políticas agrícolas de los países desarrollados afectaban la evolución del comercio mundial, por lo que las mismas revestían importancia capital para que los esfuerzos de los países en desarrollo tuvieran éxito en la consecución de su propio desarrollo, para mejorar la situación alimentaria mediante una mayor producción de alimentos y un mejor acceso a los mismos, mejor y mayor acceso a los mismos.

El Comité expresó su profunda preocupación por los graves obstáculos con que tropezaban dichos esfuerzos debido a la carga de la deuda externa, a la entrada insuficiente de capital, al proteccionismo aplicado en algunos países y al deterioro de las relaciones de intercambio.

Se convino en la necesidad de ir eliminando progresivamente las políticas proteccionistas. A este respecto expresó su satisfación por el hecho de que las partes contratantes del GATT hubieran incluido en forma destacada el sector de la agricultura, la declaración ministerial de la Ronda Uruguay que tuvo lugar en Punta del Este en septiembre de 1986. Estas negociaciones están


obviamente encaminadas a lograr una mayor liberalización del comercio de productos agrícolas y a lograr que las medidas que afectan al acceso a las importaciones y a la competencia en el mercado de exportaciones estuvieran sometidas a normas y criterios más rigurosos y eficaces del GATT.

El Comité expresó su satisfacción por el hecho de que estas negociaciones estuvieran orientadas en obtener la máxima liberalización del comercio de productos tropicales con inclusión de sus formas elaboradas y semielaboradas.

Asimismo, se acogió con satisfacción las medidas adoptadas por el Director General para ofrecer el apoyo posible sobre las discusiones en el GATT y a tal efecto proporcionar los estudios pertinentes de la FAO.

El Comité instó a que siguiera procediendo de ese modo.

El Comité solicitó al Director General que transmitiera las conclusiones sobre este tema al GATT y a la UNCTAD.

En cuanto a las medidas tomadas en relación con el informe del Director General sobre la seguridad alimentaria mundial, el Comité examinó en primer lugar la función de las raíces, los tubérculos y los plátanos en la seguridad alimentaria de América Latina y el Caribe y del Pacífico.

En lo que se refiere a América Latina y el Caribe el Comité consideró que las raíces, tubérculos y plátanos eran elementos importantes del sistema alimentario tradicional de la región, particularicen te en las zonas rurales. Se observó con preocupación las tendencias descendentes, con exclusión de la papa, de la producción por persona de estos cultivos. La producción había sido limitada por varios factores, entre otros se mencionó las enfermedades y plagas, el mal aprovechamiento de los suelos, la falta de crédito, la insuficiencia de infraestructura y la escasa difusión de técnicas de mejoramiento en la producción.

En cuanto al Pacífico, el Comité tomó nota de que el consumo por persona de raíces en la subregión era uno de los más altos del mundo, pero que así y todo su importancia iba disminuyendo.

Estuvo de acuerdo con que se debía a las dificultades con que tropezaba para aumentar la producción local por una parte porque el sistema tradicional de producción de alimentos no estaba orientado hacia su producción comercial, y por la otra porque la producción comercial de los pequeños propietarios se ve limitada por el elevado costo, la escasez de tierras en algunos países, y en general la inseguridad del mercado.

El Comité estuvo de acuerdo en que las raíces, tubérculos y plátanos podían aportar una contribución importante a la seguridad alimentaria, tanto de América Latina y el Caribe como del Pacífico, particularmente para las denominadas economías de subsistencia.

Se convino en que estos cultivos podían contribuir considerablemente a aumentar el empleo y a mejorar la seguridad alimentaria de los pequeños agricultores.

El Comité estuvo de acuerdo en que se debía efectuar una evaluación cuidadosa de los costos y benefi cios de la producción de otros cultivos antes de tomar decisiones que entrañaran la transferencia de recursos a las raíces y tubérculos.

Se sugirió que la FAO estudiara la posibilidad de ayudar a los países interesados en la realización de estos estudios y prestar el asesoramiento para la adopción de políticas mejoradas, particularmente en lo referente a la fijación de precios para estos cultivos, en general a toda la política de precios para los cultivos tanto de los cereales de producción nacional como los importados.

Otra cuestión que el Comité examinó en relación con el informe del Director General sobre la seguridad alimentaria mundial fue la de los procedimientos administrativos y la tempestividad de la respuesta de los donantes a la situación alimentaria de urgencia.

El Comité estuvo de acuerdo en general en el análisis efectuado en el documento y con la necesidad de acelerar aún más a la solicitud de ayuda alimentaria de urgencia. Se reconoció que para ello


se requería acción concertada por parte de los gobiernos donantes, los países beneficiarios y las organizaciones internacionales, tanto a nivel individual como mediante la cooperación y coordinación también conjuntas.

Se reconoció que el CPA había examinado la cuestión de mejorar la tempestividad de la ayuda alimenta ría de urgencia y se recomendó que el Consejo pidiera al CPA que examinara este asunto tomando en consideración las conclusiones a que había llegado en relación a este tema.

El Comité examinó, asimismo, la función de las empresas transnacionales en los sectores alimentarios, agrícolas, forestales y pesqueros de los países en desarrollo, tomando como base un documento en el que se pasaba revista a las publicaciones existentes al respecto.

El Comité expresó su acuerdo general sobre los enfoques de políticas y subrayó que era indispensable que los países en desarrollo adoptaran políticas claras a largo plazo y en lo tocante a la función de las inversiones extranjeras y la tecnología en sus propias economías y a la contribución precisa que se pretendía de dichas empresas transnacionales y los parámetros para sus actividades.

El Comité reconoció que la política que rige las inversiones extranjeras y las tecnologías tenían que estar debidamente integradas con los objetivos generales de desarrollo económico y social del país.

Reconoció también que sus relaciones con las empresas transnacionales en algunos países hospedantes podían aumentar con su participación en los beneficios mediante negociaciones mejor llevadas, sacando el mejor provecho posible, y en este sentido se sugirió la posibilidad de que algunos países que así lo desearan solicitaran el apoyo, la asistencia de los organismos multilaterales, particularmente de aquellos institutos especializados como es el caso de Centro de las Naciones Unidas para las Empresas Transnacionales.

El Comité pidió también que se pusiera a disposición de dicho Centro de Empresas Transnacionales de las Naciones Unidas el documento CFS 87/6 sobre las empresas transnacionales en los sectores alimentarios, agrícolas, forestales y pesqueros en los países en desarrollo junto con los resúmenes del Informe sobre los debates del Comité, de tal modo que dicho Centro pueda tenerlos debidamente en cuenta en sus actividades.

El Comité examinó, asimismo, las mejoras registradas en el sistema mundial de información y alerta durante el presente bienio y las medidas adoptadas para fortalecer los sistemas nacionales de alerta.

Se estimó que sin haber hecho grandes progresos durante el bienio 1986/1987 en lo referente al forta lecimiento del sistema, de acuerdo con las orientaciones que se identificaron en el décimo período de sesiones ello, había permitido que el sistema atendiera al creciente número de solicitudes recibidas. Expresó su firme apoyo a la labor del sistema, y opinó que se debía seguir concediendo alta prioridad.

El Comité estuvo de acuerdo en que durante este período el sistema había desempeñado con eficiencia su función de vigilar continuamente la situación y las perspectivas de las cosechas y abastecimiento alimentario, tanto en el plano mundial como en el nacional.

El Comité reconoció que a pesar de las medidas ya adoptadas para reformar el sistema aún quedaban va rias esferas importantes en las que se podrían introducir mejoras.

Observó que era necesario perfeccionar la base de datos y la calidad y tempestividad de la información que recibían; instó a todos los gobiernos a que cooperaran con el sistema y facilitaran los datos disponibles a fin de asegurar un mejor funcionamiento.

También se subrayó que aunque se habían logrado progresos considerables en el establecimiento y fortalecimiento de sistemas nacionales de alerta, existían países que an eran vulnerables porque no contaban con sistemas eficaces de alerta. Se recomendó que la FAO prestara asistencia también a esos países cuando lo solicitaran.


El Comité recordó, por ultimo, y ya con esto termino, Señor Presidente, que de conformidad con su mandato podían participar en el Comité de Seguridad Alimentaria todos los Estados Miembros de la Organización y todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas; por consiguiente, se solicitó al Director General que se pusiera en contacto con los Estados Miembros de las Naciones Unidas que no son miembros de la Organización y los alentara a participar en las futuras reuniones del Comité.

Señor Presidente, soy plenamente consciente del tiempo que he utilizado, pero creo que era necesario pasar revista a los importantes temas que se trataron durante este 12° período de sesiones.

Ronald F. R. DEARE (United Kingdom): Thank you Mr Chairman. I do not on this occasion wish to address the substance of the Report of the Committee but I would like to make a few brief comments on procedure.

First let me thank the distinguished Chairman of our Committee for his introduction. I agree with him that at this session of the Committee there were some interesting discussions helped, I think, to a great degree by the firm leadership we had from the chair. But my delegation, Mr Chairman, is concerned on reviewing our experience of that meeting. We are concerned about the duplication of discussion within this Organization. As I said this morning when I intervened towards the end of the debate of item 4 on our agenda, that debate yesterday and today was, to a very large extent, a virtual re-run of the general debate in the Committee on World Food Security, and we believe that perhaps the time has come-given the difficulty there seems to be in finding subjects for the Committee on World Food Security, which could not, in our view, be more appropriately discussed elsewhere-perhaps against that background the time has come to consider moving the Committee on World Food Security to a biennial basis as is done for so many other committees of this Council; were the Committee to meet in the non-Conference year, at least that one particular general duplication might be avoided.

Mr Chairman, if you look at the agenda of the 12th Session of the Committee on World Food Security, one notices that virtually all of the items discusse'd there could quite appropriately have been taken in other fora of this Organization. For example, roots and tubers had already been discussed in the Committee on Agriculture, and it is our view that discussions should have been retained in that Committee rather than being remitted to the Committee on World Food Security. Similarly, the Committee on Food Aid Policies and Programmes is a more appropriate forum in our view for discussion on donor responses to food emergencies and matters relating to the Global Information and Early Warning System. Discussion on trans-national corporations is taking place in the UN Centre for Trans-national Corporations, and as we said at the time, we believe it would be more appropriate for FAO Members to contribute to those discussions rather than to pursue the matter in the Committee on World Food Security.

So against that background, Mr Chairman, the conclusion of my delegation at least is that there is only a limited role available for the CFS, and that given this, we believe that it would be worth considering moving to a biennial meeting, thus saving scarce FAO resources and reducing demands on delegations. It is therefore our view that this matter should be amongst those to be reviewed by the independent high-level group which it has been proposed should be established by Conference in November to consider the future role and workings of FAO.

Guy FRADIN (France): Si vous le permettez, je reviendrai brièvement sur la situation alimentaire mondiale, ou plus exactement, sur son évolution.

Lors de la Conférence mondiale de l'alimentation de 1974, l'opinion prévalait généralement d'un risque élevé de déficit alimentaire à l'échelle de la planète. Aujourd'hui, l'ampleur des excédents agricoles, même s'ils sont mal répartis, nous paraît écarter définitivement ce risque.


Pourtant, ma délégation estime que si le niveau de production agricole potentielle de notre terre semble effectivement rassurant, il ne faut pas oublier que les disponibilités réelles sont fonction de mécanismes économiques susceptibles d'évolution. Le problème de la gestion des excédents actuels conduit les pays producteurs à réfléchir sur la modification de ces mécanismes. On ne peut donc écarter a priori un renversement de tendance qui modifierait radicalement la situation alimentaire mondiale. Nous pensons que la FAO serait bien inspirée d'inclure ce type de réflexion dans ses études prospectives.

Pour en rester à la situation actuelle, je voudrais revenir sur le paradoxe souligné clairement par le rapport de notre comité:

- au niveau international, l'accroissement des disponibilités alimentaires n'a pas amélioré sensiblement le niveau d'approvisionnement des pays déficitaires et au contraire la FAO constate même que les importations de certains pays sont en diminution, et ce,en raison de leur manque de moyens financiers.

- au niveau national, les accroissements de production qui ont engendré des excédents dans certains pays n'ont pas non plus éliminé les problèmes de malnutrition.

Les paragraphes 8 et 9 du document que nous examinons notent bien, et M. González l'a rappelé aussi, qu'au-delà des problèmes de production se pose la question de l'accès des consommateurs, qu'ils soient ruraux ou urbains, aux produits alimentaires.

A cet égard, je souhaite rappeler ce que notre délégation a déjà exprimé plusieurs fois lors de notre examen,il y a deux ans,de la politique des prix agricoles, ou lors du dernier Conseil:

- d'une part au niveau national, il est fondamental que soient mis en place des mécanismes économiques renforçant le lien entre l'agriculture et la demande des consommateurs, en particulier du consommateur urbain. La mise en oeuvre d'une politique agricole orientée non seulement vers la production, mais aussi vers la commercialisation, est indispensable. Il s'agit donc d'organiser et de gérer les marchés afin d'assurer un débouché aux productions rurales et de reconquérir les marchés locaux au détriment des importations.

Il est nécessaire pour cela de lier cette mise en oeuvre à une politique d'emploi et de revenus des populations urbaines. A cet égard, j'aimerais appuyer les propos qu'a tenus le délégué de l'Algérie au point précédent de l'ordre du jour sur les capacités des pays en développement à augmenter leur production pour peu que les efforts nécessaires soient mis en oeuvre pour développer leur marché intérieur.

- d'autre part, dans un contexte économique international difficile, mais qui cherche à se libéraliser au travers des nouvelles négociations multilatérales, les pays en développement doivent pouvoir protéger leurs économies, et en particulier leurs agricultures, des aléas des marchés internationaux.

A ce sujet, ma délégation appuie fermement l'analyse des paragraphes 31 et 32 sur les conséquences néfastes pour les pays les plus pauvres d'une libéralisation non contrôlée et indifférenciée des échanges internationaux.

Sur ces problèmes du commerce international, nous rappelons qu'ils font l'objet de négociations dans l'enceinte du GATT et qu'il n'appartient pas au Conseil de la FAO de reprendre à son compte les arguments développés par telle ou telle des parties, qu'il s'agisse du groupe de Cairns ou d'un autre.

Pour terminer, nous souhaitons rappeler l'importance d'une coordination réelle entre pays donateurs et bénéficiaires dans la mise en oeuvre d'actions de rééquilibrage de marchés intérieurs.

Depuis deux ans, la France a essayé de réaliser, comme elle s'y était engagée, des opérations dont le but était d'aider certains pays à résorber leurs excédents céréaliers. Nous nous sommes efforcés en particulier de faire face aux problèmes que connaissent les pays sahéliens qui, comme vous le savez, se trouvent confrontés à des périodes successives de déficit et d'excédents. Il s'agissait donc de tenter de mettre en place des mécanismes susceptibles de fonctionner alternativement pour combler le déficit ou résorber les excédents, notamment par le biais des opérations dites triangulaires.


Or, ces opérations qui sont par nature assez délicates à mettre en oeuvre, se sont révélées d'autant plus difficiles à exécuter qu'il y avait des opérations d'importations commerciales ou d'aide alimentaire qui étaient menées simultanément sans concertation préalable.

Gonzalo BULA HOYOS (Colombia): Los delegados de Colombia nos complacemos en reconocer la forma inteligente, capaz y dinámica como nuestro colega y amigo Guillermo González, de Argentina, presidió el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial y la excelente presentación que acaba de hacer.

A juicio de la delegación de Colombia, es evidente e inevitable la interrelación que, en muchos aspectos, existe entre éste y el tema anterior sobre la situación alimentaria.

Sin duda, el CSA, al evaluar la situación,pudo constatar que si bien sobre el papel de las estadísticas y en términos aritméticos generales, hoy existe la seguridad alimentaria; pero esa seguridad no existe, está muy lejos de alcanzar por los países en desarrollo. Las existencias siguen concentradas en un 68 por ciento en los grandes países productores, mientras aumenta el hambre y la malnutrición en los países en desarrollo, según dice el párrafo 8, que plantea muy bien la desesperada situación de millones de seres humanos que carecen de acceso a los alimentos.

Para seguir muy de cerca esa situación con el conocimiento de hechos concretos y realistas, apoyamos el final del párrafo 7, acerca de la necesidad de que las evaluaciones futuras se realicen sobre bases que no se limiten a hechos ocurridos, sino que incluyan las posibles tendencias.

El párrafo 9 recoge una vez más la difícil situación económica, social y humana por la que atraviesan la mayoría de los estados del Tercer Mundo, todo lo cual deberá reflejarse en nuestro informe.

En el párrafo 10 se abunda en esos aspectos, de manera que limitaremos nuestra declaración a la parte final del párrafo 10, en relación con la acción desestabilizadora que causa la odiosa y condenable política racista del apartheid practicada por el Gobierno de Sudáfrica,

En apoyo a lo que dijo aquí esta mañana el Embajador Tchicaya, del Congo, pensamos que una vez más este Consejo debe recomendar que la FAO y toda la Comunidad Internacional intensifiquen su asistencia a los estados de la línea del frente, víctimas privilegiadas del fascismo de Sudáfrica para complementar los esfuerzos internos que esos países vienen haciendo en busca de su seguridad alimentaria.

En los párrafos 11 y 36 se habla de las políticas proteccionistas y de la intención de revisión de las políticas comerciales de la OCDE.

Esos hechos hoy están superados. Porque después tuvo lugar la reunión Ministerial de la OCDE a mediados de mayo en París y esta mañana oímos la emocionada y elocuente declaración del representante de la OCDE quien nos dibujó un cielo sereno y nos presentó entre sus manos las llaves mágicas del paraíso del bienestar para los países en desarrollo, con la esperanza de que todo ello pueda convertirse en realidad.

Por ello, convendrá entonces que por el momento en nuestro informe digamos que este Consejo reconoce el alcance bastante positivo del Comunicado de la OCDE y también que seguimos con atención la anunciada revisión de la política agrícola común de la Comunidad Económica Europea, respecto a lo cual en la reciente reunión del CMA, en Pekín, China, el representante de la Comisión de la CEE en una declaración honesta y franca que reconocemos, manifestó que existen imperfecciones que deberán corregirse y reconoció la necesidad de reformar las políticas agrícolas para permitir a las fuerzas del mercado influir más directamente en la producción y, en general, anunció una serie de modificaciones profundas de lo que antes llamábamos funesta PAC.

Deberemos decir en nuestro informe entonces, que el Consejo espera que la progresiva liberalización del comercio, mediante la supresión de los subsidios y de todas las barreras proteccionistas, se podrá contribuir a mejorar la seguridad alimentaria.


En los párrafos 11 y 36 se hace referencia a la necesidad de establecer un Nuevo Orden Económico Internacional. La delegación de Colombia opina que en este Consejo debe coincidir en el hecho de que sólo un Nuevo Orden Económico Internacional-con mayúscula o minúscula-, pero un nuevo orden, más justo y más equitativo, podrá determinar una verdadera seguridad alimentaria para los países en desarrollo.

El párrafo 21 se refiere a la importancia de la cooperación regional y subregional entre países en desarrollo para fortalecer su propia seguridad alimentaria.

Este Consejo debe pedir a la FAO que intensifique, de manera concreta y permanente, su asistencia a todas las organizaciones regionales y subregionales citadas en el párrafo 21, pero que lo haga de manera directa y eficaz, utilizando las Oficinas Regionales y los representantes en los países, en el entendido de que los representantes regionales, los oficiales destacados en esas oficinas y los representantes en los países, cumplirán esas funciones de asistencia con objetividad y seriedad, sin que desvíen sus funciones por cauces de interferencia en los asuntos políticos internos de los países, respecto a lo cual hablaremos en el tema 15, por propia y personal experiencia.

En relación con la asistencia de la FAO a esas actividades regionales y subregionales, quisiéramos hacer dos preguntas: ¿por qué la FAO no estuvo representada en la reunión que celebró el CASAR a fines del año pasado en Argentina?, y segunda: ¿estará la FAO representada en la reunión del CASAR que tendrá lugar el próximo mes de julio en Lima, Perú, y que originalmente estaba planeada a celebrarse en Bogotá, Colombia?

La delegación de Colombia desea, en cambio, reconocer y agradecer la valiosa cooperación que el Programa Mundial de Alimentos viene ofreciendo a las actividades del CASAR en la región de América Latina y el Caribe. Y al hablar del PMA, organismo que trabaja de manera excepcionalmente eficaz, nos lleva a los párrafos 47, 48 y 54, en los cuales se solicita la cooperación del PMA en cuanto a procedimientos administrativos y tempestividad de la respuesta de los donantes a las situaciones alimentarias de urgencia y la posibilidad de establecer depósitos preventivos de existencias.

La delegación de Colombia considera que sigue siempre vigente la recomendación de la Conferencia Mundial de la Alimentación, de 1974, sobre la necesidad y conveniencia de que parte de los grandes excedentes se sitúen en lugares estratégicos de las regiones de países en desarrollo, particularmente en las zonas más vulnerables de crisis, a fin de que esos alimentos estén de manera tempestiva y racional a disposición de las poblaciones que las necesiten.

Este Consejo debe pedir al Comité de Políticas y Programas de Ayuda Alimentaria (CPA), del PMA, según el párrafo 56, que se vuelva a ocupar de este asunto, a fin de estimular la actitud positiva de algunos donantes bilaterales que ya han establecido esos depósitos preventivos y de generalizar al máximo esa práctica tan útil y conveniente para los países en desarrollo.

El párrafo 55 habla de algunas dificultades y limitaciones para llevar a cabo el establecimiento de esos depósitos preventivos, pero confiamos en que el nuevo clima internacional, que parece que comienza a crearse,podrá superar esos inconvenientes y así aliviar igualmente el alto costo del almacenamiento de las reservas, que frecuentemente invocan algunos países productores.

La delegación de Colombia opina que será necesario hacer todo esfuerzo para que los países en desarrollo sufran lo menos posible de las situaciones de urgencia que afectan su seguridad alimentaria. A ese respecto, apoyamos el párrafo 50, que señala la insuficiencia de instalaciones de almacenamiento y la situación deficiente de los sistemas internos de transporte y distribución de los países beneficiarios, como los obstáculos mas importantes que hoy impiden a nuestros países responder rapida y eficazmente a esas situaciones de urgencia.

Afortunadamente, el PMA está tratando de contribuir a solucionar, al menos en buena parte, esas deficiencias, sobre todo del transporte interno y fue así como en la última reunión del CPA, celebrada hace poco bajo la excelente presidencia del colega y amigo Embajador Saintraint, de Bélgica. En esa reunión se acogió favorablemente la propuesta constructiva del Director Ejecutivo del PMA, en el sentido de interpretar flexiblemente las Normas Básicas del Programa Mundial de Alimentación para permitir que se cubran los gastos de transporte interno, sobre todo a los países menos adelantados y más gravemente afectados.


Proponemos que en nuestro informe se destaque muy favorablemente esa propuesta del Director Ejecutivo del PMA y se señale igualmente la conveniencia de que todos los organismos y los donantes bilaterales asistan a los países menos adelantados y más gravemente afectados en sus dificultades de transporte y distribución internos.

Confiamos en que este Consejo ratificará una vez más el principio ya consagrado en todos los organismos internacionales, en el sentido de que, como dice el párrafo 30, "Los alimentos no deben utilizarse como arma política".

Las referencias al Pacto de la Seguridad Alimentaria que aparecen en el párrafo 22 fueron cosecha espontánea de algunas delegaciones, pues, en ninguno de los documentos de la Secretaría, en ninguna de las presentaciones apareció por parte alguna, ni siquiera la palabra Pacto.

Este es un caso que nos hace pensar acerca de la forma posiblemente ligera, tal vez demagógica y políticamente oportunista, de cómo suele actuarse.

Después de los grandes debates que concluyeron con la adopción del Pacto de Seguridad Alimentaria, por la Conferencia, con algunas reservas, después de todo ese largo y sufrido proceso, una vez obtenido el aparente triunfo político, el Pacto pasó serena, humilde y sobriamente a los anaqueles de la FAO, El Pacto pasó a dormir en el sueño de los justos.

Como nuestra delegación estuvo entre aquellas que señalaron la ausencia del Pacto y reiteraron la validez de su contenido, apoyamos el párrafo 22 sobre la necesidad de adoptar medidas para seguir aplicando los principios del Pacto y pedimos a la FAO que despierte, que resucite el Pacto, que lo saque de sus archivos y haga propuestas concretas de mayor acción al respecto, como concluye el párrafo 22.

Amin ABDEL-MALEK (Liban) (langue originale arabe): Je remercie M. Gonzalez, Président du Comité de la sécurité alimentaire, pour la façon claire dont il a présenté le point 5 de notre ordre du jour.

Le Comité de la sécurité alimentaire mondiale, au cours de sa 12ème session, a examiné des questions fort importantes concernant la sécurité alimentaire mondiale. Vu la situation de la sécurité alimentaire mondiale, nous partageons les préoccupations du Comité, car nous savons que des millions d'êtres humains souffrent de la malnutrition, même si, au niveau global, les aliments disponibles sont en abondance.

Le Comité a donc examiné ce problème de l'alimentation dans le monde en soulignant le fait que beaucoup de gens ont faim parce qu'ils ne peuvent avoir accès aux aliments et non parce que les aliments manquent. Ceci nous paraît une remarque adéquate. La situation est grave, nous sommes d'accord avec l'avis exprimé par le Comité visant à améliorer la sécurité alimentaire dans les pays en voie de développement. La délégation de mon pays approuve les mesures proposées aux pays producteurs de céréales. Je crois que nous pouvons continuer à utiliser les transactions triangu-laires et les opérations de troc en les portant à un niveau plus élevé. La collaboration régionale est également très importante dans ce cadre comme dans le cadre d'autres activités. Notre délégation estime que les activités régionales et nationales des pays en voie de développement devraient obtenir des résultats plus positifs et fructueux si le flux de l'aide financière et de l'assistance technique devait continuer.

Nous signalons aussi l'importance des politiques agricoles dans les pays en voie de développement s'agissant de la sécurité alimentaire.

Nous sommes d'accord avec les conclusions du Comité sur ce point et nous soulignons l'importance de la suppression graduelle des mesures protectionnistes. Dans ce contexte nous appuyons le rôle joué par la FAO qui accorde l'aide appropriée au succès des négociations commerciales multilatérales dans le cadre de l'Uruguay Round du GATT. La délégation libanaise partage l'avis du Comité et son analyse de la sécurité alimentaire. Elle est également d'accord sur l'importance des racines, des tubercules et des plantains en Amérique latine, aux Caraïbes et dans le Pacifique. Les gouvernements de ces régions doivent inclure ces produits dans leurs programmes agricoles, vu leur importance pour de nombreux pays.


En ce qui concerne l'accès rapide aux aliments dans les régions qui en ont le plus besoin, nous sommes tout à fait d'accord pour que le CPA examine le sujet, tenant compte des conclusions du CSA.

En ce qui concerne le rôle des sociétés transnationales dans le secteur de l'alimentation, de l'agriculture, des forêts et des peches des pays en voie de développement, nous appuyons l'opinion exprimée par le Comité sur la nécessité d'arriver à une coordination des politiques régissant les investissements étrangers et le transfert de technologie, en tenant compte des objectifs de développement économique et social nationaux. Nous pensons qu'il y a un réel besoin d'une coopération entre les organisations multilatérales et les agences spécialisées pour évaluer les coûts et les bénéfices, donner des solutions alternatives réglementant leurs activités, négocier des conditions acceptables mutuellement et pour contrôler les activités des multinationales.

Nous appuyons également les activités du système mondial d'information et d'alerte rapide et nous devons donner à ce système une grande priorité.

En terminant, nous voudrions demander au Conseil de reprendre à son compte l'appel adressé au Directeur général de prendre contact avec les pays membres des Nations Unies qui, jusqu'à présent, ne sont pas membres de la FAO pour les encourager à participer aux réunions du Comité de la sécurité alimentaire compte tenu de l'importance des travaux de ce Comité.

Atif Y. BOUKHARI (Saudi Arabia, Kingdom of) (original language Arabic): Mr. Chairman, we would like to. extend our appreciation and thanks to our colleague and friend, Mr. González, the Chairman of the Committee on World Food Security, and to the members of the Committee in general for their commendable efforts in presenting this comprehensive and lucid report.

On many occasions we have spoken of food security and the need to realize food security in the interest of the peoples of the world. Also, we have referred on many occasions to the paramount importance of the objectives of the food security compact and the recommendations and provisions of that compact, which should be implemented in order to guarantee a better level of food security.

Today we reiterate the utmost need for adopting speedy and appropriate measures by all nations and countries in order to reach a situation of better food security than that prevailing today. We do not deny that the realization of better results for world food security is of great importance and is a sensitive issue that requires the genuine and sincere collaboration of all countries of the world. It also calls for a realistic outlook for the future of coming generations. We would also like to highlight the fact that the danger in ignoring this is a risk that threatens the interest of all peoples whether they are in the poor developing countries or in the rich developed ones.

Mr Chairman, no doubt the industrialized developed countries that have the working and fixed capital, which is represented by material and technological resources, have to shoulder a great responsibility, and they are fully capable of realizing a better level for food security for the least developed countries.

They have, if they wish to preserve their political, social and economic security, to work sincerely in order to provide the necessary inputs materially and technologically to these countries in order to realize their food security.

They have also to provide know-how and necessary skills by virtue of their diversified infrastructure and they are well capable of training people from developing countries. Industrialized developed countries have also to be aware, with a great degree of responsibility, of the very difficult economic environment faced by developing countries and the adverse impact of world economic recession on the exports of developing countries, the accumulation of external indebtedness and increasing protectionist measures imposed upon them. In addition there is the fact that the prices of the exports of developing countries, which constitute their main resource for repayment of their debts, are always declining.

We would like also to highlight the fact that sacrifices by the developed, able countries should be accompanied by sacrifices in the beneficiary developing countries. This is first and foremost their security and the future of their peoples. They have to work for its realization regardless of the


sacrifices they have to make. They have to exert more effort in order to increase the ratio of food production and to reach the goal of food security. By food production we mean first and foremost what is consumed and preferred by their peoples as a basic diet; and secondly the basic foodstuffs which can be exported and which can provide them with the foreign exchange they need.

This means that the agricultural sector in these countries should be given top priority. This would include the provision of the necessary infrastructure for agricultural development. We have also to remind developing countries of the need to develop the capabilities of man in developing countries to make him more aware, to provide him with more skills, capabilities and experience because he is the bulwark and the mainstay of development in any society. They have also to support and encourage the private sector and national institutions working in the agricultural sector. They have a lot to do and they have huge responsibilities at the national level. They are well aware of these responsibilities. These would provide, if applied, higher productivity and in turn food security for their peoples.

The provision of a reserve for food security in South. Asia by the seven countries-Bangladesh, Bhutan, India, Maldives, Nepal, Pakistan and Sri Lanka-is the real embodiment of regional and sub-regional collaboration. The resolution by these seven countries is a source of encouragement and pride, and we hope that international institutions and agencies and developed countries will collaborate in order to encourage such a step. This should be an example to be emulated by other regions.

We would like also to say that some of the countries in this region and in other regions have in recent years transformed the food assistance given to them to food security that protects their people. We urge developing countries in various regions of the world to work for the creation of the appropriate environment for technical collaboration on the level of the region or the sub-region, because this is considered an important step towards a better level for a full pledged food security situation.

Every great leader has something that we all remember, and it is my duty here to refer to what has been said by a great leader, the leader of the agricultural march in Saudi Arabia, King Fahd Bin Abdulaziz, who was also a champion of education in the Kingdom. He said, and I quote,"The freedom of peoples is not only their independence from the colonialism under which they lurk but this freedom would be complete by depending on the arms of its people in building its future, in getting its food out of its own soil, and the real power of peoples is their spiritual link with Allah and their deep conviction of the right to live in dignity and in security".

In his reign the Kingdom has made strides to realize this motto. Thanks to his determination based upon his responsibility towards his people, and through his unlimited encouragement of the officials working in this important sector-we have reached this degree of self-sufficiency in food and we have even transcended this stage with the help of Allah. However, despite all these efforts deployed inside the Kingdom of Saudi Arabia, we did not neglect our holy duty towards the peoples of developing countries to whom the Kingdom gave all support. We find that there is marked Saudi presence in the Sahel countries affected by drought. We helped the peoples there in drilling wells, the cutting of roads and the building of dams. There is Saudi presence also in Asia, in the Near East and everywhere either on a bilateral or multilateral level.

All of this was out of our deep conviction in the principle of international collaboration. Developed countries are well aware, and they know full well, that the poor developing countries in Africa, Asia and in other regions, which lurked under colonialism and imperialism, were used to giving out of their riches and out of their resources to the colonialists. Now we would like to stress and to say that it is neither just nor fair to leave the peoples of these countries alone. They suffer hunger and malnutrition. They ask for assistance at a time when this assistance is their right. We have said that this is over and above the burden of external indebtedness which would lead them to very bleak futures and would lead them to neo-colonialism.

We urge all countries to take positive, necessary and speedy steps in order to achieve food security over all parts of the world.


Sra Grafila SOTO CARRERO (Cuba): La delegación de Cuba participó activamente en el 12° período de sesiones del Comité de Seguridad Alimentaria y, por consiguiente, aprobó este informe que hoy nos ha sido presentado de manera muy elocuente por el Señor Guillermo González, de Argentina, competente Presidente de dicho Comité.

A la delegación de Cuba le complace sumamente que los aspectos fundamentales aprobados por nuestras per delegaciones en el 12º periodo de sesiones del CPA hayan sido recogidos en el informe que analizamos; por tal motivo haremos una brevísima intervención.

La delegación de Cuba considera que con mucha justicia el informe del Comité recoge que los problemas de la deuda externa, balanza de pagos, disminución de los ingresos de exportación, restricción en el acceso a los mercados, el empeoramiento de las relaciones de intercambio, el proteccionismo y otras prácticas análogas, que son causas palpables que perjudican el crecimiento económico y la seguridad alimentaria, perjudican, por consiguiente, a nuestros países.

Quisiera recordar que el Comité de Seguridad Alimentaria en este 12º período de sesiones se refirió de manera muy precisa, y así aparece en el párrafo 10 del informe que analizamos, a la necesidad de apoyar a los países de la línea de enfrente en sus esfuerzos para alcanzar la seguridad alimentaria; sabemos que esta seguridad alimentaria se ha deteriorado gravemente por la desestabilización causada por Sudáfrica en los países del cono sur africano. En tal sentido apoyamos la intervención del embajador Bula Hoyos, de Colombia, que se refirió ampliamente a ese aspecto.

Asimismo, quisiéramos recalcar una vez más que el Comité reafirmó que los alimentos no deben utilizarse como arma de presión política, así como la necesidad de reducir los gastos de armamento y desviar esos recursos para financiar programas orientados a resolver asuntos económicos y sociales en los países subdesarrollados. Todo esto aparece en el párrafo 30 del informe que analizamos; quien lo niegue, Señor Presidente, se alinea con el chantaje y el grerismo.

Finalmente, quisiéramos apoyar los planteamientos del Comité de Seguridad Alimentaria sobre el establecimiento de un nuevo orden económico internacional más justo y equitativo.

Este Consejo debe apoyar en su totalidad esos planteamientos. Asimismo mi delegación considera que la preocupación de la FAO por el análisis técnico y especializado para el sector agrícola y alimentario en el papel de las empresas transnacionales y debe continuar con su cooperación a los estudios más generales que lleva a cabo el Centro de Empresas Transnacionales de las Naciones Unidas.

Para terminar, la delegación de Cuba apoya en todas sus partes el informe que nos ha sido presentado y exhorta a este Consejo a que así se pronuncie.

Thomas YANGA (Cameroun): Avant de faire part des commentaires de la délégation camerounaise concernant le rapport de la douzième session du Comité de la sécurité alimentaire mondiale, je voudrais revenir sur la déclaration du représentant du Royaume-Uni pour appuyer le principe qu'elle contient car il se situe dans la droite ligne des propositions qui avaient été faites par le Président de la vingt-troisième Conférence générale de la FAO, en 1985, son Excellence Jean-Baptiste Yonke, Ministre de l'agriculture du Cameroun, dans son discours de clôture. En effet, dans cette déclaration, il suggérait notamment qu'un comité de haut niveau soit constitué pour examiner le fonctionnement des différents organes de la FAO. Cette proposition est d'autant plus d'actualité que l'Organisation traverse une crise financière de plus en plus inquiétante. Et compte tenu des besoins toujours plus grands des pays en développement, l'Organisation se doit d'améliorer son efficacité avec des ressources réduites.

Cela dit, qu'il me soit permis de féliciter le Comité de la sécurité alimentaire mondiale qui, lors de sa douzième session, a examiné cette question et a fait des recommandations pertinentes sur plusieurs aspects touchant la sécurité alimentaire mondiale. Le Président de ce Comité vient d'ailleurs de nous faire une excellente présentation de ses travaux et de leurs principaux résultats.

L'évolution actuelle de.la sécurité alimentaire mondiale et l'évolution récente des nouvelles politiques nous donnent une vision claire et objective de la situation qui est, malheureusement, alarmante et très préoccupante. En effet, comment admettre l'existence, d'une part, d'abondants stocks de céréales qui s'accroissent et, d'autre part, de millions de personnes qui non seulement restent sous-alimentées mais voient leur situation nutritionnelle se dégrader davantage d'année en année.


C'est pourquoi ma délégation partage toutes les inquiétudes exprimées à ce sujet par le Comité et souscrit aux recommandations formulées par celui-ci pour entreprendre l'action nécessaire aux niveaux national, régional et international.

Cependant, je voudrais réitérer le point de vue de ma délégation, qui croit fermement que le problème de la faim et de la sous-alimentation ne doit pas être dissocié des autres problèmes économiques dont souffre le Tiers Monde. Et au-delà des actions ponctuelles pour faire face aux situations d'urgence et soulager les cas les plus graves, on doit réfléchir et imaginer des solutions globales et à long terme.

Dans cet esprit, nous appuyons fermement ce qui est dit au paragraphe 10 et nous tenons à souligner, en particulier, que la sécurité alimentaire ne peut exister dans un pays sans la sécurité et la paix. Aussi nous associons-nous à la recommandation spécifique du Comité pour appuyer les Etats de la ligne de front en Afrique australe dans leurs efforts pour atteindre la sécurité alimentaire car parmi eux se trouvent la plupart des pays africains en proie à des pénuries alimentaires anormales et qui, outre les calamités naturelles, doivent faire face à une situation de destabilisation permanente.

S'agissant de l'incidence sur la sécurité alimentaire mondiale des politiques agricoles des pays industrialisés, la délégation du Cameroun est entièrement d'accord avec l'évaluation faite par le Comité, au paragraphe 24 de son rapport, sur le rôle et l'importance que les politiques agricoles des pays développés ont sur la sécurité alimentaire mondiale et plus généralement sur l'économie des pays en développement. C'est dire que, sans nier les responsabilités qui sont les nôtres dans la situation actuelle et sans renoncer aux efforts que nous devons nous-mêmes accomplir, nous pensons que les pays développés doivent prendre en considération les intérêts des pays en développement dans l'adoption et l'application de leurs politiques agricoles car l'interdépendance entre nations, tant développées qu'en développement, apparaît dans la situation actuelle non seulement comme une réalité irréfutable mais aussi comme le balisage de l'issue que notre monde doit emprunter pour sortir de la crise actuelle.

Nous appuyons aussi fermement le point de vue des délégués des pays en développement tels qu'exprimés au paragraphe 24 du rapport, notamment l'impérieuse nécessité d'une modification fondamentale des relations économiques et d'un nouvel ordre économique international plus juste et plus équitable.

Concernant les procédures administratives et le temps de réaction des donateurs face aux crises alimentaires, la délégation camerounaise se félicite des efforts accomplis jusqu'ici par les donateurs pour simplifier les procédures administratives et réduire les temps de réponse face aux crises alimentaires. Elle les encourage vivement à poursuivre ces efforts, mais, en même temps, souhaite qu'ils apportent une aide appropriée, dans plusieurs domaines, aux pays des régions menacées afin que ceux-ci soient en mesure de fournir dans les plus brefs délais des renseignements suffisamment détaillés et fiables d'une part, et d'autre part qu'ils puissent faire face à l'arrivée massive des denrées alimentaires ainsi qu'à leur transport vers les zones sinistrées.

C'est pour nous, ici, l'occasion de réaffirmer une fois de plus l'utilité et la rationalité des opérations triangulaires et des achats locaux qui non seulement contribuent à réduire les délais d'achat et de livraison de l'aide alimentaire mais constituent également une aide précieuse aux pays qui, disposant de stocks alimentaires, rencontrent des problèmes pour les écouler sur les marchés tant intérieurs qu'internationaux.

Enfin, sur ce point, nous pensons qu'il serait approprié que le Comité des politiques et programmes de l'aide alimentaire soit saisi de cette question.

Pour terminer, j'aimerais faire quelques brefs commentaires au sujet du rôle des sociétés transnationales dans les secteurs de l'alimentation, de l'agriculture, des pêches et des forêts dans les pays en développement. Ma délégation pense que ces sociétés peuvent jouer un rôle important et positif dans le plan économique des pays en développement. De même, certaines de ces sociétés, avides de biens et de profits immédiats et inconsidérés, peuvent par leurs actions causer du tort à l'amélioration du niveau de vie de nos populations. C'est pourquoi nous estimons,


d'une part, que les échanges d'informations entre pays en développement, au sein des instances appropriées, sur les activités néfastes de certaines de ces sociétés doivent s'instaurer et s'intensifier et, d'autre part, que les organisations internationales doivent aider les pays en développement à renforcer leurs capacités de négociation,de suivi et de contrôle des activités de ces sociétés, notamment par la formation de cadres et la mise en place et l'équipement des institutions appropriées.

Igor KIPMAN (Brazil): After having attentively followed its work for many years, Brazil decided to become a member of the Committee on World Food Security on the occasion of its 12th Session. We actively participated in the discussions and deliberations, and therefore give our support to the report under review.

In relation to the rich debate of Chapter II of the report, my delegation wishes to reiterate some aspects to which we attach particular importance. To begin with, Mr. Chairman, we consider it urgent to modify the unfair international economic order, which penalizes the developing countries which face the task of dealing with an ever increasing external debt, at present, the major obstacle to economic recovery and to the food security of developing nations. In the same line, my delegation also wants to make reference to the distorted current situation of the world market of commodities, whose prices have been virtually disrupted in a substantial measure due to developed countries adopting protectionist measures and also subsidies, in strong contrast with the developing countries’ interests.

With reference to part III of the report, Mr. Chairman, my delegation wishes to reiterate and underline that any positive effects of low subsidized prices of food can be misleading, since the immediate improved access to food leads to disincentives for food self-sufficiency and for a fair share of developing countries in international trade.

In relation to the discussion of the role of roots, tubers and plantains in food security, my delegation has expressed its view that there is a broad avenue for FAO to participate in the dissemination and promotion of ways and means to improve the utilization of these staple foods by enhancing an intense and profitable interchange of the experiences acquired by those countries where those products are autochthonous. Reference to that was made in connection to the large amount of resources being spent by the international community in the world research systems, such as the one coordinated by the Consultative Group on International Agricultural Research, whereas not enough efforts are under way by the extension services of the various countries to take the new technologies and methods into the field, the only way to attain the repayment of the research effort, in the form of increased production and productivity. My delegation reiterates as well the importance of amplifying future studies in this area so as to include bananas along with plantains.

With reference to administrative procedures and timing of the response of donors to food emergencies, we wish to support all efforts towards faster and simplified administrative procedures while dealing with this delicate issue, so as to assure the needy groups a prompt response to their necessities. In the same line, my delegation stresses the importance of measures aiming at increasing local purchases in nonconvertible currencies, along with triangular transactions as well as the payment of internal transport and related costs in recipient countries.

Finally, Mr. Chairman, in relation to the activities of transnational corporations in food and agriculture, forestry and fishery sectors in developing countries, we wish to repeat what our delegation stated during the CFS Session: "Transnational corporations, properly monitored by adequate policies, can be useful as long as their operations contribute to national development goals of recipient countries.

Hans POPP (Suisse): Permettez-moi tout d'abord de saluer votre Présidence du Conseil. Nos félicitations vont également aux trois Vice-Présidents nouvellement élus.

Notre intervention se réfère aux points A et 5 de notre Ordre du Jour. La sécurité alimentaire a toujours été et restera une des principales aspirations de l'humanité. La sécurité alimentaire est aussi la principale raison d'être de notre Organisation. Pour qu'elle devienne une réalité dans tous les pays, pour tous les individus, on nous dit qu'il faut résoudre deux problèmes majeurs: primo, celui de la production, secondo, celui de l'accès à la nourriture.


Le deuxième aspect est peut-être le plus difficile à réaliser et plus difficile que le premier. A ce sujet, déjà une résolution de la Conférence de Hotsprings de 1943 nous disait: "La pauvreté est la principale cause de la faim et de la malnutrition". La pauvreté, nous le savons, a maintes causes: le chômage, les injustices sociales, etc.

Je voudrais m'arrêter sur le premier point, c'est-à-dire la production. On ne peut maintenir une agriculture en état de produire que si on assure à la population agricole des conditions de production favorables et des revenus comparables à ceux existant dans les villes. Cela signifie qu'il faut garantir aux agriculteurs des prix stables et rémunérateurs ainsi que des débouchés pour leurs productions. Une telle politique ne peut être réalisée que si les agriculteurs peuvent avoir une certaine assurance d'être à l'abri de l'afflux des importations bon marché. Une telle politique n'est pas seulement nécessaire dans les pays industrialisés, elle l'est également et encore davantage dans les pays en voie de développement, comme l'expérience nous le montre.

L'agriculture a donc besoin d'une certaine protection et il nous est donc difficile de soutenir la proposition contenue dans le paragraphe 37 du document qui nous est soumis: "le Comité est convenu de la nécessité d'une élimination progressive des politiques protectionnistes". Qu'entend-on par politique protectionniste? Sous cette formule, on distingue deux éléments de politique agricole: d'une part, les subventions à l'exportation pour l'élimination des surplus qui créent des distorsions sur les marchés internationaux. Ceci certes est une politique condamnable. D'autre part, par politique protectionniste, on entend aussi et c'est une bonne chose, la protection des agriculteurs, par exemple par une garantie des prix et de débouchés. Nous savons que cette politique est nécessaire pour maintenir une sécurité alimentaire dans les pays en développement comme dans les pays industrialisés. Elle est nécessaire pour atteindre les autres objectifs tels que les aspects sociaux et humains, le maintien des conditions favorables pour les familles paysannes, pour l'écologie, pour l'environnement et l'emploi dans les régions rurales. Il faut savoir reconnaître que l'agriculture de type familial, avec des exploitations de 10 à 50 hectares, telles qu'elles existent dans la plupart des pays européens-dans notre pays, la moyenne est de 16 hectares-il faut savoir reconnaître, dis-je, que de telles exploitations familiales ne pourraient pas continuer à exister avec des prix aussi bas que ceux du marché mondial, en particulier aux Etats-Unis, au Canada, en Australie.

L'agriculture européenne comme d'ailleurs l'agriculture dans la plupart des pays en voie de développement, a besoin d'une certaine protection. Rappelons que cette agriculture européenne a déjà subi un énorme ajustement de ses structures. Dans mon pays, par exemple, la part de la population employée dans l'agriculture est tombée de 20 pour cent en 1940 à 5,5 pour cent aujourd'hui. Réduire encore les prix comme certains nous le proposent, conduirait à un exode rural insupportable. Nous refusons simplement d'accepter une telle politique asociale. Démanteler notre protection à la frontière nous priverait d'une base de production indigène et mettrait en danger notre sécurité alimentaire. D'où notre plaidoyer pour une vue plus différenciée à l'égard du phénomène du protectionnisme, notamment en relation avec la sécurité alimentaire. Mais il est juste de dire que cette politique pratiquée par les pays européens ne devrait pas conduire à des excédents et qu'elle devrait laisser de la place pour l'importation de produits agricoles. La Suisse produit seulement 60 pour cent des besoins de sa population. Nous pratiquons un régime d'importations libérales pour de nombreux produits provenant des pays en voie de développement.

Le principal défi, le problème essentiel, sont de trouver une politique agricole qui maîtrise la tendance à la surproduction tout en assurant un revenu adéquat à l'agriculture. Certains nous proposent comme panacée la réduction des prix à la production et la réduction de la protection. Dans notre pays nous avons choisi une autre stratégie, une stratégie plus différenciée, plus subtile, plus adaptée comme nous l'avons rappelé la réduction des prix à elle seule ne garantit pas une réduction du surplus et peut avoir des répercussions très négatives sur les revenus agricoles du monde rural.

Notre stratégie en vue de limiter la production contient les mesures suivantes:

1. limitation de la garantie des prix, disons contingentement de la production que nous pratiquons pour la majorité des produits.

2. limitation de la quantité de bétail par exploitation qui est pratiquée dans mon pays depuis 7 ans.


3. limitation des importations des fourrages concentrés surtout des céréales, par une taxe à l'importation car nous avons appris qu'une libre importation de ces produits intermédiaires augmenterait encore la surproduction de viande, de lait, etc.

4. paiements compensatoires.

5. taxe écologique pour des terres en friche et autres.

6. stimulation des productions alternatives.

Une telle politique a pour résultat des prix à la production relativement élevés, mais ce sont des prix supportables pour le consommateur. Je vous rappelle que les consommateurs suisses ne consacrent que 15 pour cent de leur revenu brut à la nourriture. Cette politique nous assure une sécurité alimentaire, nous a permis d'éviter une production excédentaire et de maintenir un marché ouvert aux produits des pays en voie de développement avec une importation de 40 pour cent de nos besoins.

Je conclus par trois points:

1. l'agriculteur, dans la plupart des pays industrialisés et plus encore dans les pays en voie de développement, a besoin de protection pour atteindre les objectifs de la politique agricole et assurer la sécurité alimentaire. Nous ne pouvons donc pas accepter une condamnation générale d'une politique soi-disant protectionniste.

2. la protection de l'agriculture doit être raisonnable et ne devrait pas conduire à une vaste surproduction qui a, nous le savons, un effet négatif pour les marchés internationaux.

3. il y a toute une gamme de mesures, une stratégie, pour mener une politique avec l'objectif de limiter la surproduction, il y a de meilleures mesures que la proposition trop simpliste de réduire la protection et les prix à la production.

Nous sommes d'avis que la FAO a un rôle positif à jouer dans le domaine de la sécurité alimentaire, en premier lieu en tant que conseiller des gouvernements en matière de politique agricole. La FAO doit développer des stratégies dans ce domaine et elle doit aider les pays à les mettre en oeuvre.

Finalement, nous soutenons la proposition du délégué du Royaume-Uni reprise par le Cameroun, de tenir les réunions du Comité de la sécurité alimentaire mondiale seulement tous les deux ans. Nous proposons également que cette question soit étudiée par un groupe d'experts de haut niveau à établir par la prochaine conférence.

Mrs Marasee SURAKUL (Thailand): May I take this opportunity to thank FAO for the lucid document CL 91/10.

With regard to the food security situation in Thailand we would like to encourage the programme of watershed management. However, the rice breeding programmes for drought tolerance have been strengthened in all rainfed areas, and the drought usually comes from irregular distribution of rains.

My delegation also strongly supports FAO on the review of improvement in the Global Information and Early Warning System in the current biennium and the measures taken to strengthen national early warning systems.

F.T. SUMAYE (Tanzania): Thank you Mr. Chairman. On behalf of the Tanzania delegation I would like to congratulate you for chairing this important session of the Council. I would like also to congratulate the three Vice-Chairmen elected to their seats, the Drafting Committee, the new Members joining the Council and the Secretariat for well-prepared quality papers which make our work easier. I would also like to thank Mr Gonzalez for his excellent Committee Report on World Food Security which has given a good summary on this important subject.


Mr. Chairman, my delegation would like to give its views and comments on some areas of this subject. Some of the comments have been mentioned in the paper and some have been said by other speakers. It is however by no means our intention to repeat what has been said, but where we feel there is a need to stress, we shall do so.

1 would like to comment on paragraph 10 of the Report CL 91/10 where it talks about South African destabilization of the front line states. We very strongly want to emphasize that a safe and calm atmosphere is a necessary prerequisite for food security anywhere. There can be no food security if there is no security in the country. The front line states are poor countries in the Third World. They have very scarce resources which have to be used very efficiently in very selected priority areas of economic development. Because of peace destabilization caused by the racist South Africa, these countries have to direct most of their scarce resources and priorities for defence activities.

Usually these countries are either fighting some kind of war or are on full-scale alertness. As we all know, this is very expensive. For instance, these countries are forced by circumstances to make active defence priority area no. 1 while at the same time their people are starving. Therefore, my delegation stresses the fact that if food security is to be realized in this area, personal and country security has first to be established. To attain this, apartheid policies must be uprooted from South Africa. We call on all the progressive peoples of the world without exception, and on all peace-loving peoples of the world, to spare no effort in helping to ensure that this ruthless rule not acceptable to mankind anywhere in the world is uprooted. Our stand on this issue has always been clear-apartheid has to go, and there is no alternative compromise.

Attainment of food security is attainment of a positive stage of development. But this always costs money. Food deficit countries require money for their development programmes toward food sufficiency. These developing countries lack resources for development purposes. Therefore, we request the developed countries to commit more resources to this cause. We do not say they have surplus resources, but we think they can afford a little more for this purpose. We know that developed countries have other commitments, but some of these may not be as noble as helping the poor and starving.

For example, as reported in paragraph 30 of document CL 91/10, the arms race is consuming a lot of much-needed resources. The more these countries spend on arms, the more they develop dangerous weapons; the more dangerous the weapons, the more scared they become; the more scared they are, the more dangerous weapons they develop in a desperate attempt to counteract those weapons already developed. This vicious circle goes on and on. As history tells us, man has never failed to use a weapon he has developed. In any case, being a race someone will have to touch the finishing rope one day!

My delegation would like to suggest to the developed world that they turn the arms race to a food production race for all. This will eliminate the horrors of nuclear war which haunt their own people than those in the developing countries. We have our own horrors that occupy us so much that we have no time to think of nuclear horrors. We want to remind everybody that the world will remain a miserable place to live in as long as part of the world population is living in the misery of poverty and starvation. Therefore, we request those countries which can spare a little more from their resources to do so for the sake of the poor, and to do so in addition to what they are already giving. Resources used in the arms race can be diverted to this cause without jeopardizing development for their own people.

My delegation would like to draw the attention of Council to what Tanzania has been trying to do for food security. We have put a lot of emphasis on small-scale irrigation farming, which is fairly expensive, but we feel this has to go hand in hand with the development of rain-fed agriculture. Rain-fed agriculture will remain a major source of food, but we feel dependence on it has to be reduced with time, as this type of agriculture always fails us during dry years. Motivation of farmers is being achieved by better prices, the timely supply of inputs, good agricultural policy, and that of an effective extension service. The agriculture and livestock sector receives the highest priority and is given the highest portion-about 30 percent-of the national budget. We produced a little surplus of maize this year. However, it was difficult to move this from the villages due to poor infrastructure and transport facilities. Lack of storage facilities was another big setback in this endeavour, resulting in the destruction of grain by rains, rodents and pests. We were also faced with the problems of plant pests, such as the red locust and army worms.


At this juncture, we would like to thank the United Nations bodies, including FAO, and other institutions and countries which came to our help during these difficult times. We appeal for more resources to be made available to the poor countries so they are able to fight and overcome such disasters. We believe that food sufficiency and therefore food security is second to none in importance. We are in our three-year economic recovery programme, during which period we want to achieve at least a food production growth rate equal to the population growth rate. We are optimistic that if we are given the necessary assistance we will be able to achieve this goal.

Sra. Mercedes FERMIN GOMEZ (Venezuela): Nosotros comenzaremos por expresar nuestro total apoyo al documento leído por el Presidente de Seguridad Alimentaria, nuestro amigo Guillermo González, no sólo por lo excelente del documento, sino porque estamos plenamente de acuerdo con su contenido. Consideramos que recoge de manera precisa los puntos esenciales de la discusión en torno al problema. Nos referiremos luego al planteamiento hecho por el delegado del Reino Unido sobre el particular.

En primer lugar, considera que estos temas son repetitivos, que lo dicho en este informe es una repetición de lo discutido en la Comisión de Seguridad Alimentaria. Comentamos: es lógico, éste es un informe sobre la reunión de la seguridad alimentaria y de lo discutido en la Comisión de Agricultura, es correcto; las dos comisiones están relacionadas una inmediatamente con la otra. Y se atreve a sugerir que estas discusiones o reuniones sería conveniente mejor tenerlas cada dos años y no anualmente para ahorrar tiempo. Y yo debo preguntar a mi vez: ¿quién está tan interesado en ahorrar tiempo? 0 mejor, quizá, ¿a quién aburre la discusión de estos problemas? Porque cuando uno está tal vez fastidiado con un tema quisiera que se termine pronto, pero resulta que estos son los temas que nosotros tenemos que discutir, y no serán ciertamente, quienes nos sentimos identificados con los pueblos que sufren las dificultades de la seguridad alimentaria, de la inseguridad que significa la incertidumbre en sus cosechas que cada año deben enfrentar porque sus siembras dependen de que llueva o no llueva como consecuencia de que su agricultura no está tecnificada debidamente para aplicar el riego, que es lo que permite a los países desarrollados poder tener una agricultura que produzca a voluntad del hombre y no a las circunstancias de la naturaleza.

No ciertamente aburrirá tampoco a quienes sabemos que estos países no pueden producir los alimentos por falta de semillas, por falta de capital, por falta de conocimiento de la realidad que ellos tienen entre manos. Porque, increíblemente, estos países todavía no conocen cuáles son los suelos que deben manejar, a consecuencia de quienes usaron esos suelos durante siglos que jamás les dijeron a ellos cómo debían utilizarlo. Ellos eran simples instrumentos ciegos en manos de los explotadores que utilizaban estas poblaciones para producir los productos agrícolas que necesitaban. Por eso, muchos de los delegados que aquí venimos, venimos a aprender muchas cosas de los demás. Por eso, no nos aburrimos. Cuando oímos una intervención de cualquiera de los delegados de un país africano, asiático, latinoamericano, europeo, hay una cantidad de información que ellos tienen en sus manos porque ellos conocen la realidad y nosotros no la conocemos. Por eso, para nosotros no puede una reunión de esta índole ser aburrida y no tenemos mucho empeño en que se acabe pronto para irnos.

Por esa razón, pues, aquí hay un interés inmediato en aprender, en llevar a nuestros países conocimientos nuevos, útiles y, al mismo tiempo, en persuadir a nuestros gobiernos de que deben solicitar asistencia técnica o recursos de otra índole para que nuestra agricultura en nuestros países atrasados pueda mejorar, estos países que saben que sus hombres y mujeres, hasta hace poco, ni siquiera podían utilizar una técnica en la agricultura porque no la tenían. Y la mayoría de esos países ha visto por primera vez una agricultura tecnificada gracias a un proyecto que dirige la FAO, que es quien ha puesto en sus manos los conocimientos para poder realizar aquello.

Es por esto por lo que estas reuniones, aun a riesgo de ser repetitivas, debemos continuar reniéndolas para discutir y considerar estos temas cuya comprensión llega a aburrir solamente a los satisfechos, a los sabios, a los que conocen mucho de estos temas.

Cuando uno habla o discute de algún problema, el cual conlleva una posible solución a una necesidad sentida, no hay tiempo para el aburrimiento porque hay el ansia de encontrar en lo que cada uno dice una forma para la solución del problema que tenemos, una manera de aprender cómo vamos a resolver el problema nuestro. Y la FAO ha hecho mucho camino en este rumbo de enseñar a los pueblos, atrasados cómo resolver sus problemas, especialmente en este campo de la agricultura y de la alimentación. Estos problemas, pues, significan lo que significa la FAO. Es una Organización destinada a la alimentación, a la agricultura. ¿De qué vamos a discutir entonces?


Discutimos de la alimentación, de la agricultura en relación con el hombre, con la mujer, con los campesinos, con los obreros y con las dificultades que ellos enfrentan para poder resolver estos problemas que afectan a sus pueblos, y que la única manera de salir adelante será cuando ellos sean capaces de realizar una agricultura productiva en favor de sus propios países para poder eliminar la dependencia de la importación de alimentos...

Hace 40 años que las Naciones Unidas existen y la FAO también y seguían estos países dependientes, seguían comprando sus alimentos o recibiéndolos como donativo. En fechas recientes comenzó a abrirse camino el concepto de seguridad alimentaria, que ya dije esta mañana que el Dr. Swamnàthan quiere transformar en seguridad nutritiva o nutricional. Pero este concepto de seguridad alimentaria nuevo que costó tanto poder aprobarlo en la Conferencia de hace dos años, que felizmente pudimos tener 99 votos, una mayoría apabullante contra una negativa y 12 abstenciones, es un concepto nuevo, no se hablaba de seguridad alimentaria. Eso es un concepto creado, pudiéramos decir así, por la FAO y que implica la responsabilidad de nosotros, todos los países, no sólo de producir alimentos para nuestros propios pueblos, sino de ayudar a los otros pueblos que no están en condiciones de hacerlo a que abran caminos para ellos también producirlos y para emanciparse de la dependencia que significa tener que recibir lo que uno come de una mano que la da. Eso se dice facilmente, pero yo creo que debe ser muy duro para un pueblo tener que depender de que alguien le dé el alimento para poder sobrevivir y esos pueblos quieren liberarse de eso. Y este concepto de seguridad alimentaria es lo que va a permitir que los gobiernos sean responsables pensando en que deben tener la disponibilidad de un alimento seguro para que sus pueblos no sufran hambre y necesidades y que se puedan poner de acuerdo con otros países para que ellos puedan lograr la posibilidad de una reserva regional en materia de alimentos para atender más a aquélla que la propia población.

Por esa razón, pues, yo creo que todo esto está ligado a ese problema de la supervivencia del hombre en la tierra, porque, como afortunadamente parece, el fantasma de la guerra periódica recurrente va poco a poco alejándose para no producir las hecatombes; que ya conocemos a través de la historia, que produjeron todas las guerras. El hombre podrá ir encontrando su supervivencia poco a poco, en la medida en que sea capaz de producir para poder mantener una población sana y una población libre de esas presiones. Y, en este sentido, creo que la seguridad alimentaria puede ampliarse con la otra posibilidad que tendríamos de que se pudieran crear mecanismos entre los países en vías de desarrollo, a fin de que estos mecanismos, llámense operaciones triangulares o podemos llamarlos de cualquier otra manera, puedan subvenir a las necesidades de estos propios pueblos que estamos en condiciones medianas, digamos así, de supervivencia para no tener que depender de los grandes que tengan que mandarnos la comida. Por esta razón, pues, creo que esa sí sería una proposición que debemos pensar seriamente: la necesidad de crear estos mecanismos que podamos realizar entre los países en desarrollo, a fin de que se pueda llegar, como lo dice el documento en su párrafo 34, en que podamos realizar ese cambio fundamental que aspiramos a que se realice en las relaciones económicas de un orden económico internacional.

Con esto termino porque no quiero insistir mucho porque mi punto esencial está en estos puntos en referencia a que me ha referido y no propiamente al proyecto mismo.

Louis GOMIS (Sénégal): M. le Président, prenant la parole pour la première fois au cours de cette session, je voudrais, au nom de la délégation sénégalaise et à l'instar de celles qui m'ont précédé, dire ma joie de vous voir présider ce Conseil, persuadé que vous saurez, comme à l'accoutumée, vous acquitter de cette tache, secondé efficacement, nous n'en doutons pas, par les trois vice-présidents qui ont été élus à l'ouverture de la session. Permettez-moi de profiter de l'occasion pour rendre hommage au Directeur général pour sa lucide et courageuse déclaration liminaire dont nous partageons la vision d'ensemble, ainsi que son analyse de la situation actuelle de l'alimentation mondiale.

M. le Président, ma délégation a examiné attentivement et avec beaucoup d'intérêt le rapport de la douzième session du Comité de la sécurité alimentaire mondiale. Permettez-moi tout d'abord d'exprimer l'inquiétude et la préoccupation de ma délégation face aux contrastes de la situation mondiale en général et singulièrement de l'Afrique, la baisse des prix de produits agricoles résultant de la désorganisation des échanges internationaux, la menace des ravageurs acridiens sur les récoltes de 1987 dans la région sahélienne de l'Afrique et la baisse des engagements multilatéraux à des conditions de faveur.


Ceci dit, M. le Président, je voudrais exprimer l'appréciation de ma délégation au Comité de la sécurité alimentaire mondiale pour ce rapport riche et réaliste qui nous est soumis. Nous nous associons à l'analyse de la situation de la sécurité alimentaire mondiale actuelle faite par le Comité. Cette situation apparaît à l'évidence influencée justement par la conjoncture économique mondiale, en plus et malheureusement pour l'Afrique par les aléas climatiques, les attaques de criquets et sauteriaux et par l'environnement politique et militaire défavorable pour certains pays de l'Afrique australe. Dans cette situation contrastée et alarmante pour certains, les politiques des pays industrialisés influent largement sur la sécurité alimentaire mondiale et singulièrement sur celle des pays en développement. A cet égard, M. le Président, nous nous associons aux délégués des pays en développement qui, au paragraphe 34. affirment qu'ils ne peuvent pas combattre à armes égales sur les marchés internationaux avec les pays développés qui, en plus des fortes subventions accordées à leur agriculture, mènent parallèlement des campagnes publicitaires préjudiciables aux produits provenant des pays tropicaux.

C'est ici le lieu pour nous de réaffirmer, M. le Président, l'appel répété de mon pays pour un nouvel ordre économique mondial, plus juste et plus équitable et qui assure à nos pays des revenus constants et rémunérateurs, afin non seulement d'inciter davantage nos petits agriculteurs mais aussi de permettre à nos pays de pouvoir mieux planifier leur plan de développement économique et social.

Je voudrais enfin, M. le Président, m'attarder sur le rôle des sociétés transnationales dans les pays en développement, en rapport avec la sécurité alimentaire. Ces sociétés de par leurs caractéristiques spécifiques peuvent contribuer efficacement au développement du secteur rural de nos pays si nos pays sont mieux armés pour négocier, suivre et évaluer leurs actions, notamment pour la formation tant par ces sociétés. que par les partenaires bilatéraux et multilatéraux.

Monsieur le Président, avant de conclure, je voudrais profiter de l'occasion pour exprimer, au nom de ma délégation, toute notre gratitude et nos félicitations à la communauté internationale et à la FAO pour l'aide précieuse fournie à l'Afrique en 1986, et notamment aux pays du Sahel, dans la campagne d'urgence contre les sauteriaux et les criquets. Grâce à cette aide, de nombreuses populations n'ont pas connu la faim cette année. Mais le danger persiste toujours. Dans tout le Sahel, on fait état actuellement d'une très large infestation d'oeufs de sauteriaux. Ces oeufs sont présents dans le sol sur une large bande de quelque 50 millions d'hectares, au Sénégal, en Mauritanie, au Tchad, au Mali, au Niger et au Nigéria. Des menaces pèsent donc déjà sur nos futures récoltes de 1987 et, si la communauté internationale et la FAO ne se hâtent pas d'intervenir, la situation risque de devenir catastrophique.

A cet égard, un plan d'action de lutte anti-acridienne a été mis en oeuvre dans mon pays. Il concerne tout le territoire national et intéresse une superficie de 1 535 000 hectares dont 800 000 hectares en interventions aériennes. Le coût de ces interventions est évalué à 3,37 milliards de Francs CFA dont 2,73 milliards sont présentés au financement de la communauté internationale.

C'est un appel que nous lançons une deuxième fois à la communauté internationale pour venir en aide aux pays particulièrement menacés par ces sauteriaux.

Réal T. LALANDE (Canada): La délégation canadienne, qui participa aux discussions de la douzième session du Comité sur la sécurité alimentaire, est intervenue sur la plupart des sujets qui étaient alors inscrits à l'ordre du jour; je ne reviendrai donc pas aujourd'hui sur l'ensemble de ces points, mais je limiterai les commentaires de ma délégation à trois points spécifiques, qui furent abordés lors de cette rencontre, et qui sont pour nous d'une importance primordiale.

Deux de ces points furent discutés au titre de la section IV du document CL 91/10, qui traite du suivi accordé au rapport du Directeur général sur la sécurité alimentaire mondiale: le premier point traitait du rôle des plantes nocives et des tubercules dans la sécurité alimentaire; le second point discutait des procédures administratives des donateurs face aux crises alimentaires.

Dans le cas du rôle des plantes-racines et des tubercules, la délégation canadienne exprima alors l'opinion que la culture de ces produits vivriers avait été négligée par la FAO et que des efforts devaient être mis en oeuvre pour corriger cette situation. Ma délégation encouragea donc la FAO a attacher une plus grande priorité au développement de ces cultures en réaffectant, à l'intérieur de


ses programmes, les ressources requises, tant financières qu'humaines, vers les activités reliées à ces produits jugés prioritaires, et ceci à partir d'activités jugées moins prioritaires.

Ma délégation souligna également la nécessité d'éviter une duplication coûteuse au niveau des débats de différents comités régionaux et recommanda que ce sujet des plantes-tubercules ne soit discuté qu'au niveau du Comité de l'agriculture, tel qu'il le fut au mois de mars dernier, et non au coeur du Comité de la sécurité alimentaire. Le problème que je soulève présentement est mentionné brièvement au paragraphe 46 du document dont nous sommes sais is mais il mérite certainement qu'une plus grande importance lui soit accordée.

Dans le cadre de la discussion des procédures administratives des donateurs face aux crises alimentaires, la délégation canadienne présenta une déclaration similaire visant à éviter le dédoublement des discussions dans des comités différents, bien sûr, mais tenus dans la même capitale et, bien souvent, avec des délégations identiques. Notre délégation, tout en reconnaissant le rôle crucial d'une action concertée entre les gouvernements donateurs, les pays récipiendaires et les organisations internationales spécialisées, dans le but de parvenir à l'élaboration d'une réponse adéquate aux situations d'urgence alimentaire, recommanda cependant que les activités de consultation et de coordination en matière de livraison d'aide alimentaire d'urgence s'effectuent dans le cadre du Comité des politiques et programmes d'aide alimentaire du Programme alimentaire mondial. Notre délégation est en effet d'avis que ce Comité représente le groupe intergouvernemental le plus approprié aux discussions portant sur les questions d'acquisition et de livraison d'aide alimentaire dans des situations d'urgence ou dans le cadre de projets de dévéloppement.

Les déclarations effectuées par la délégation canadienne dans le cadre du point 4 du Comité de la sécurité alimentaire mondiale visaient à souligner le principe central, selon nous, de la division des tâches requises entre différents comités des organisations du système des Nations Unies, c'est-à-dire ceux de la FAO et du Programme alimentaire mondial, et cela dans le but de réaliser certaines économiesde ressources humaines et financières lorsque c'est possible. Ma délégation a fait et elle refait aujourd'hui de telles déclarations, convaincue que de telles économies sont possibles et qu'elles pourront alors être affectées à des activités jugées prioritaires par les pays membres de la FAO. Ma délégation croit, en effet, qu'il est possible que la FAO parvienne à une gestion plus efficace et plus performante en comparaison du coût de ses différents services. Nous croyons, enfin, qu'une étude des économies possibles à l'intérieur des activités de la FAO devrait être effectuée par un comité indépendant de haut niveau tel que proposé à plusieurs reprises lors de réunions précédentes et mentionné, aujourd'hui encore, par les délégués de la Grande-Bretagne et du Cameroun. Nous croyons que des questions telles que la fréquence des réunions du Comité de la sécurité alimentaire mondiale, question abordée aujourd'hui par nos collègues de la Grande-Bretagne et du Venézuela devraient également être abordées de façon ouverte par ce comité indépendant de haut niveau.

J'aimerais maintenant traiter du point qui, de l’avis de ma délégation, est le plus important de ce document et qui est traité de façon trop sommaire au paragraphe 20 du document CL 91/10. Ce point sera le dernier de mon intervention.

Le paragraphe 20 du document traite en effet du rôle joué par la femme dans le domaine de la sécurité alimentaire et des efforts requis de la part de la FAO et de l'ensemble des agences des Nations Unies afin d'accroître l'insertion de la femme dans les activités de production alimentaire, d'une part, et afin de lui assurer, d'autre part, les moyens économiques et financiers d'accéder à la production alimentaire disponible.

Les délégués des différents pays présents à ce 91ème Conseil sont certainement au courant des diffé-rentes déclarations effectuées par le Canada auprès de divers organismes et comités des Nations Unies, dont le Programme des Nations Unies pour le développement, le Fonds des Nations Unies pour l'enfance et le Conseil économique et social. Une telle déclaration, portant cette fois sur les stratégies d'intégration de la femme dans le cadre des projets d'aide alimentaire, fut effectuée ici à Rome, il y a deux semaines à peine, dans le cadre d'une discussion très fructueuse tenue au Comité des programmes et projets du Programme alimentaire mondial.

Les différentes déclarations effectuées jusqu'ici par le Canada ont toujours visé à refléter auprès des organisations du système des Nations Unies les efforts que les autorités canadiennes déploient,


dans le cadre de notre propre programme de coopération pour le développement, afin de rendre effectivement opérationnels les énoncés de politiques concernant l'intégration de la femme dans le processus du développement et dans le partage des bénéfices de ce développement. Pour le Canada, les efforts effectués pour impliquer la femme dans les diverses activités de développement relèvent tout autant de la recherche de l'efficacité et du juste rendement économique des projets que de la notion de justice sociale.

Notre déclaration, effectuée auprès du CPA il y a deux semaines, et celle que nous désirons faire aujourd'hui au sein de ce Conseil de la FAO, tout en reconnaissant que les principes de l'intégration de la femme dans les activités de développement sont maintenant largement reconnus et acceptés, doivent nous amener à nous concentrer maintenant sur une nouvelle étape du processus, étape plus difficile, qui consiste à établir de façon spécifique, concrète et détaillée ce que nous pouvons faire et comment le faire.

C'est pourquoi ma délégation considère que la FAO, comme l'ensemble des autres organisations des Nations Unies, a besoin d'une stratégie propre, claire et précise pour le mise en oeuvre de son programme d'intégration de la femme à ses activités de développement; elle a besoin d'un plan d'opération réaliste mais courageux et ambitieux.

A ce sujet, la délégation canadienne est disposée à travailler avec toutes les autres délégations intéressées par la mise en oeuvre de telles mesures afin qu'une résolution en ce sens puisse être discutée et acceptée avant la fin du présent Conseil.

Milan KARIC (Yougoslavie): Ma délégation souhaite exprimer sa gratitude à M. Gonzalez pour son introduction claire et complète de cette importante question qui nous préoccupe actuellement et qui fait l'objet du document CL 91/10, consacré à l'examen du problème de la sécurité alimentaire mondiale.

Ma délégation réaffirme l'importance de la sécurité alimentaire et, dans ce cadre, nous soutenons les constatations principales et les recommandations faites par le Comité de la sécurité alimentaire mondiale, au cours de sa 12ème session.

Nous sommes très conscients du fait que la consommation alimentaire par habitant en 1986/87 diminuera probablement dans un grand nombre de pays en développement à déficit alimentaire, ce qui aggravera davantage le problème de la faim et de la malnutrition, et que le problème fondamental de la sécurité alimentaire actuelle réside moins dans l'existence des disponibilités alimentaires que dans l'impossibilité pour les affamés et les sous-alimentés d'acceder à ces ressources. Pour illustrer cette constatation, il me suffit de rappeler que les stocks céréaliers mondiaux, au cours de l'année courante, augmenteront et représenteront 27 pour cent de la consommation mondiale, qu'ils sont concentrés dans un petit nombre de pays développés et qu'ils restent insuffisants dans la plupart des pays à faible revenu.

Dans ce cadre, ma délégation souligne l'importance des recommandations du Comité relatives aux actions aux niveaux national, régional et international pour atteindre la sécurité alimentaire. Au niveau national, pour assurer la sécurité alimentaire à long terme, nous estimons qu'il faut non seulement assurer une production alimentaire globalement suffisante mais aussi soulager la misère par des mesures concrètes pour créer des emplois et accroître les revenus, en particulier en faveur des catégories sociales les plus pauvres, et pour améliorer la productivité des petits paysans.

Dans le cas de certains pays en développement qui ont des excédents céréaliers qui représentent une source de sérieuses difficultés à cause de l'insuffisance des moyens d'entreposage, de transport et de transformation, nous soutenons les efforts déployés en vue d'encourager les transactions triangulaires et les accords de troc comme les actions les plus efficaces pour aider les pays en développement à écouler leurs excédents. Etant donné que les transactions triangulaires ne représentent encore qu'une proportion relativement modeste de l'aide alimentaire totale en céréales, nous estimons qu'il y a des possibilités suffisantes d'expansion ultérieure.


En ce qui concerne la livraison de l'aide d'urgence, ma délégation appuie pleinement les efforts pour la mise en place anticipée des stocks afin d'accélérer ces livraisons et nous pensons qu'il serait utile, pour des actions futures, de tenir compte de l'expérience acquise par le PAM et par les donateurs bilatéraux qui ont déjà procédé à la mise en place anticipée des stocks.

A notre avis, les politiques agricoles des pays développés ont une importance capitale pour le succès des efforts déployés par les pays en développement en vue de promouvoir leur essor économique et de renforcer la sécurité alimentaire en accroissant la production vivrière et en facilitant l'accès à la nourriture. Malheureusement, ces efforts sont entravés par la lourde charge de la dette extérieure, les apports insuffisants de capitaux, le protectionnisme largement pratiqué par des pays développés et la détérioration des termes de l'échange. Il est évident que ces politiques protectionnistes ont fortement compromis les possibilités des pays en développement de développer leur commerce extérieur, de renforcer leur autosuffisance et d'assurer leur sécurité alimentaire nationale.

A cet égard, ma délégation s'attache à l'objectif d'un environnement commercial agricole plus ouvert et libéral car, à notre avis, une élimination progressive des politiques protectionnistes et une libéralisation des échanges pourraient améliorer les revenus des producteurs, accroître les recettes en devises, réduire l'instabilité des prix sur les marchés mondiaux et assurer une utilisation plus rationnelle des ressources, ayant des effets positifs en vue d'un redressement économique global.

A ce propos, ma délégation exprime sa satisfaction de voir que les parties contractantes du GATT ont inclus l’agriculture dans la série de négociations commerciales multilatérales entamée à Punta del Este, en septembre 1986, visant à libéraliser au maximum le commerce des produits agricoles.

Encore une fois, nous considérons que la situation actuelle nous confirme la nécessité d'une modification fondamentale des relations économiques et de l'instauration d'un nouvel ordre économique international.

Ma délégation appuie les estimations que les racines, tubercules et plantains sont un élément important du système alimentaire traditionnel des régions en développement, en particulier dans le milieu rural. Ces cultures permettent la création des emplois supplémentaires et l'amélioration de la sécurité alimentaire des petits agriculteurs, d'un côté, et une réduction des importations de céréales, de l'autre côté. En vue d'améliorer la production, la transformation, le stockage et la commercialisation de ces cultures, nous estimons qu'il est nécessaire d'entreprendre des mesures basées sur une approche multidisciplinaire, parmi lesquelles une évaluation attentive coûts/bénéfices des possibilités de production d'autres cultures devrait être effectuée avant de décider d'affecter des ressources à la production de ces cultures.

Ayant en vue qu'il s'agit d'une question spécifique, nous considérons comme nécessaire que toutes les actions en faveur de ces cultures doivent être entreprises sur un plan national et régional et surtout dans le contexte de la CEPD.

En ce qui concerne le rôle des sociétés transnationales dans les secteurs de l'alimentation, de l'agriculture, des forêts et des pêches dans les pays en développement, ma délégation se félicite, dans une situation relativement satisfaisante de la production alimentaire globale effectuée en 1986, que parmi tous les facteurs qui ont une influence sur l'établissement d'une sécurité alimentaire stable, la question des STN ait été examinée.

Ma délégation soutient les recommandations du Comité sur les politiques suggérées à l'égard des STN pour que les pays en développement puissent adopter, à long terme, des politiques claires sur le rôle des investissements et des technologies étrangères dans leurs économies, ainsi que sur la contribution précise des STN et les paramètres de leurs opérations. Aussi, ces politiques doivent être convenablement intégrées aux objectifs nationaux en matière de développement économique et social. Une telle approche par rapport aux STN permettra aux pays hôtes de profiter de la situation existante en sachant bien négocier, et de pouvoir mieux évaluer coûts et avantages, de choisir la meilleure entre diverses formules d'opérations, de négocier des conditions mutuellement acceptables et de suivre les opérations et les résultats des STN.

Dans ce contexte, ma délégation considère qu'il serait utile que la FAO aide les pays en développement à examiner et à élaborer leurs politiques relatives aux activités des STN.


E.S.S. NEBWE (Zambia): I wish to begin by joining other distinguished delegates who have already spoken on this item in commending Mr González for his excellent presentation of this important subject of our agenda.

Mr Chairman, allow me in the first instance to thank you for affording my delegation an opportunity to speak on the important subject of world food security. The document before us for discussion-CL 91/10-contains a number of important issues on which my delegation would like to make comments.

My delegation is perturbed to learn, as cited in paragraph 8, that in spite of the abundance of food supplies at the global level, and a more or less substantial increase in food production in some developing countries, millions of people are haunted by threats of hunger and starvation.

Nevertheless, the Zambian delegation is pleased to note that the report of the 12th Session of the Committee on World Food Security calls for urgent measures to be taken in the low-income food-deficit countries to give priority to increasing food and agricultural production with particular emphasis on improving the productivity of the small-scale farmer.

My delegation would like to endorse this approach and call on FAO to continue with its untiring efforts of providing the necessary support to member countries which have yet to achieve permanent levels of food security. In this regard, Zambia would like to see an increased emphasis on the production of local food crops which are still the basic staple for a significant proportion of the population in food-deficit developing countries.

My delegation has noted with regret the fact that South Africa's acts of aggression against neighbouring frontline states have to a greater extent seriously undermined efforts to achieve food security by these countries. We are, however, encouraged to note that the report of the 12th Session of the Committee on Food Security (para. 10) calls for support to frontline states in their efforts to achieve food security. As one of the frontline states, Zambia has repeatedly experienced these wanton acts of aggression, aimed at causing despondency and instability. There is no doubt that efforts directed at increased agricultural production in our country have been hampered, especially in areas close to the borders with Namibia and Angola.

I wish to comment on para 50 of the document under discussion i.e. CL 91/10. It is true that in many developing countries, lack of or inadequate storage facilities, coupled with poor road networks militate against efficient distribution of food-aid in times of crises. We, therefore, welcome and endorse the recommendation of the 12th Session of the Committee on Food Security that the Committee on Food Aid (CFA) be requested to consider the need to upgrade internal transport and storage infrastructure in developing countries. Mr Chairman, my delegation would be pleased if this recommendation was unanimously adopted and passed on to the CFA.

My delegation has noted with interest the review of improvements in the global information and early warning systems in the current biennium and measures so far taken to strengthen national early warning systems.

My delegation appreciates the important role which the global information and early warning systems must continue to play in order to facilitate and accelerate the achievement of food security at regional and country levels. Mr Chairman, Zambia would like to request the inclusion of livestock sector and animal health problems in the global information and early warning systems. As distinguished delegates may be aware, very often animal disease outbreaks have caught us off-guard due to lack of a proper and effective monitoring system within the country. In our opinion, therefore, the inclusion of the livestock sector and animal health problems in the global information and early warning systems will go a long way in providing a vital tool for monitoring and control of animal diseases.

Because of the important role of early warning systems, especially at a national level, my delegation would like to concur with the recommendation in para 78 of the Committee on World Food Security that FAO should seek additional external financial resources in order to support the establishment of effective national early warning systems, especially in developing countries.


I would like to comment on transnational corporations in food and agriculture, forestry and fisheries sectors in developing countries. While we do appreciate that at times transnational corporations do assist in developing agricultural products which can be of benefit to developing countries, in the majority of cases transnational corporations have not operated to the developing countries' expectations.

In most cases they produce, process or manufacture products of inferior quality which can neither be exported to developed countries nor to developing countries. Their main thrust has been in making quick profits at the expense of consumers in developing countries and ensuring that their products are of such quality that they cannot be exported to international markets, thereby guaranteeing markets for associate foreign companies in which their shareholders have interest. Transnational corporations operating in developing countries do not stick to the same rigid quality controls as those employed in developed countries. At times development has been slowed down because of monopolies enjoyed by multinational corporations.

Developing countries would, therefore, like to see more equity and business ethics in the dealings of multinational business organizations so that citizens of the countries in which they operate can also derive benefit.

Zambia welcomes the participation of multinational corporations in its economic recovery programme so long as they observe strict business ethics and practices. In fact, we already have quite a number of these operating reasonably well. Many more have shown interest in investing in Zambia either in their own right or in partnership with individual Zambians or Zambian parastatal or private companies.

Mrs Z. Gaye GURPINAR (Turkey): Mr Chairman, first of all I would like to express my thanks to you for giving me the floor to speak on behalf of my delegation. I also wish to express our thanks to Mr González for his clear presentation of the report.

Food security has been the main concern of mankind from the very beginning of history. It is really unfortunate to see that even in the present era, the problem of food and hunger still comes into focus as a result of various factors, such as the depletion of natural resources, inappropriate national policies, difficulties of the economical and trading environment and so on.

My delegation believes that world food security is largely linked to the income of the individuals; therefore, increasing the incomes of the low-income food-deficit countries seems to be the most effective way to assure their access to food. That is why we consider the current world situation, including the trade environment, as one of the most negative factors causing malnutrition.

In our civilized world, the existence of nations suffering from hunger is the most disturbing situation bringing about undesirable consequences. Indeed, the absence of food security should also be considered a serious obstacle to world peace.

The development plan in my country has foreseen that food demand should be met through the domestic production of food. This demand for food is planned to be satisfied in quality and quantity terms, taking into consideration the increases due to the growth in population and the need for ensuring a more balanced diet for the population.

In food security plans, another important point to consider is the storage of food under appropriate conditions to avoid food losses. In my country the climatic and soil conditions are suitable for storing various crops at low cost. We therefore are willing to assume the regional responsibility in holding food reserves with the support of international organizations. Development of the food industry is also an important factor to improve food security. Investment in the food industry increases the utilization capacity of food. Therefore, the government policies for development should include an effective food industry policy, aiming to establish processing plants both in rural and urban areas.


Another important way to improve food security is the development of livestock in our countries. Greater supply of animal products can increase our trade revenues and enable us to secure a balanced diet. Food security policies should cover promotion of animal protein consumption, especially that of fish.

My delegation is of the opinion that the establishment of early warning systems both for animal and crop diseases and insects will also contribute to food security by means of helping us to control these within the appropriate time.

To prevent unfortunate catastrophes in the near future, besides the individual efforts of the developing countries to improve their food security situation and meet their demand for food, all countries, and particularly those who have great influence in building up the structure of the world trade and economy, have to go over their social, economic and trade policies once again, not only in the focus of their today's profits, but in the promising light of a happy and peaceful world of tomorrow.

Having stressed the above aspects of the world food security, I would like to conclude by saying that my delegation endorses the report of the Twelfth Session of the Committee on World Food Security. Thank you.

I. INTRODUCTION-PROCEDURE OF THE SESSION (continued)
I. INTRODUCTION-QUESTIONS DE PROCEDURE (suite)
I. INTRODUCCION-CUESTIONES DE PROCEDIMIENTO (continuación)

2. Election of three Vice-Chairmen, and designation of the Chairman and Members of the Drafting Committee (continued)
2. Election de trois Vice-Présidents et nomination du Président et des membres du Comité de rédaction (suite)
2. Elección de tres Vicepresidentes, y nombramiento del Presidente y de los miembros del Comité de Redacción (continuación)

Leopoldo ARIZA HIDALGO (Cuba): Queremos informarle y proponerle, Sr. Presidente, para que lo someta a este Consejo en nombre del Grupo de los 77, que presido, que después de las consultas de rigor, los presidentes regionales, de acuerdo con el coordinador de la OCDE, hemos llegado al consenso de proponer al representante de la India, Sr. Sibal, para presidente del Comité de Redacción.

Queríamos proponerle esto, Sr. Presidente, para que usted lo sometiera, pues estaba pendiente de estas consultas.

LE PRESIDENT: Je remercie l'honorable délégué de Cuba qui nous a proposé, avec le consensus de tous les chefs de groupe, de désigner comme rapporteur général du Comité de rédaction, l'honorable Ministre Sibal, Représentant permanent adjoint de l'Inde auprès de la FAO.


Je pense que nous ne pouvons que nous féliciter de ce consensus et prier le Comité de rédaction de bien vouloir se mettre au travail parce que nous avons un Conseil assez chargé et nous avons besoin d'un Comité de rédaction qui soit constitué dans les délais les plus rapprochés possibles.

The meeting rose at 17.30 hours
La séance est levée à 17 h 30
Se levanta la sesión a las 17.30 horas

Previous Page Top of Page Next Page