Informe de la Consulta de expertos de la FAO sobre la función de las actividades forestales en la lucha contra la desertificación (Saltillo, México, 16-28 de junio de 1985)
B. Ben Salem
· La desertificación de las tierras áridas, fenómeno en rápida expansión, es un problema de dimensiones internacionales. Parte de este problema es la degradación de muchos de los ecosistemas frágiles de las zonas áridas, debido en gran parte a un aprovechamiento inadecuado de sus recursos naturales. Esa mala utilización resulta evidente en los ejemplos cada vez más numerosos de avance de los desiertos que ocasiona la formación de dunas en tierras agrícolas, disminución del nivel de la capa freática, pérdida de importantes especies de flora y fauna silvestres, erosión acelerada y creciente escasez de leña y forraje. Es cada vez más evidente que en el futuro el fomento en gran escala de las zonas áridas del mundo depende de la utilización, conservación y desarrollo racional de los recursos naturales. En este proceso, las actividades forestales desempeñan una función primaria y constituyen también una excelente inversión a largo plazo para promover los importantes recursos naturales que requiere un desarrollo continuo.
Con este fin, la FAO organizó en Saltillo, México, una Consulta de expertos sobre la función de las actividades forestales en la lucha contra la desertificación. La reunión fue precedida por un breve viaje de estudio a Arizona (Estados Unidos) y dentro de México. Los objetivos de la consulta eran los siguientes:
· examinar y evaluar los conocimientos actuales sobre actividades forestales en zonas áridas desde el punto de vista del desarrollo rural y la lucha contra la desertificación;
· estudiar la investigación y la aplicación de los conocimientos actuales;
· intercambiar ideas y experiencias;
· delinear la acción necesaria y determinar un marco de referencia para orientar los futuros programas de desarrollo a nivel nacional, regíonal y mundial.
A la Consulta asistieron 30 expertos de 21 países, representantes del PNUMA, la Unesco, la Comisión Económica y Social para Asia y el Pacífico (CESPAP), el Consejo Internacional para la Investigación en Agrosilvicultura (ICRAF), la Agencia para el Desarrollo Internacional (AID), el Deutsche Gesellschaft für Technische Zusamenarbeit (GTZ), la Organización de la Liga Arabe para la Educación, la Cultura y la Ciencia (ALECSO), la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO) y 25 observadores de seis países.
Como preparación para la Consulta, la FAO encargó varias monografías que se utilizaron para preparar cinco documentos de estudios presentados y distribuidos al principio de la Consulta. Los documentos de estudio eran:
· Programas forestales en zonas áridas; estado de los conocimientos y experiencias, en el que se resumían los resultados contenidos en 10 informes preparados para la FAO por especialistas en las varias regiones, que cubrían América del Norte y el Caribe, la región sudanosaheliana, Africa oriental, Africa del Norte, el Cercano Oriente, la India, el Pakistán, la China, la parte asiática de la URSS y Australia.
· Sistemas de producción, en el que se presentaba un examen general de las actividades forestales, los sistemas silvopastorales, la agrosilvicultura y los sistemas de producción de fauna silvestre.
· Conservación y restauración, en el que se presentaba un examen general de métodos y técnicas para el control de la erosión eólica, la ordenación de cuencas hidrográficas, la recogida de aguas, la restauración y revegetación de tierras, la rehabilitación de medios salinos, la conservación de la fauna silvestre y de los recursos genéticos.
· Elaboración y utilización, en el que se presentaba un examen general de las varias utilizaciones económicas de los productos no madereros, como frutos, tanino, gomas, resinas, aceites, fibras, plantas medicamentosas, y carne, pieles, cueros y caza deportiva.
· Consideraciones sobre política, instituciones y aspectos socioeconómicos, en el que se examinaban en líneas generales las características de las orientaciones en materia política y jurídica, las consecuencias administrativas y financieras, y el estado de la investigación, la extensión, la difusión de información y la enseñanza en relación con las zonas áridas.
La Consulta formuló propuestas para la adopción de una estrategia y de acciones destinadas a promover la función de las actividades forestales en la lucha contra la desertificación; señaló otros objetivos principales de los programas forestales para las zonas áridas, y sugirió métodos para aumentar la contribución de la silvicultura al desarrollo rural en las tierras áridas. Las propuestas podían dividirse, según la materia, en tres sectores principales, tratados por los grupos de trabajo que se establecieron al efecto:
- conservación y restauración
- producción, utilización y elaboración
- política, instituciones y aspectos socioeconómicos.
Se prestó atención a los métodos para contener el avance de los desiertos y restaurar tierras ya afectadas.
Los aspectos considerados en cada uno de los tres apartados principales pueden resumirse de la manera siguiente:
· El componente de conservación y restauración tiene por objeto determinar, mediante encuestas, estudios e investigaciones aplicadas, las prácticas de conservación apropiadas para satisfacer las necesidades de las zonas áridas, y desarrollar técnicas y métodos para la conservación de los recursos de esas zonas. Las zonas y proyectos recomendados se han agrupado en cuatro sectores principales: control del viento, conservación de las aguas, restauración y revegetación de tierras, y conservación de zonas incultas, de fauna silvestre y de recursos genéticos.
· El componente de producción, utilización y elaboración tiene por objeto promover la integración de los varios sistemas de producción, utilización y elaboración en un programa coherente de aprovechamiento y ordenación de las tierras. Se identificaron acciones y proyectos prioritarios en relación con los sistemas forestales de producción, los sistemas combinados (agrosilvopastorales), los sistemas de producción de la fauna silvestre y los sistemas de elaboración/utilización.
· El componente de política, instituciones y aspectos socioeconómicos ofrece directrices para la formulación de políticas, para las propuestas destinadas a mejorar la administración, la enseñanza, la capacitación, la información y la extensión forestales, y para una estrategia de financiación.
El informe resumido de la Consulta se presentó en el Noveno Congreso Forestal Mundial, que apoyó las conclusiones y recomendaciones contenidas en él.
REPOBLACION FORESTAL EN CHIPRE restauración de un medio árido
FIJACION DE DUNAS EN MALI una prioridad en las zonas áridas
