J.A. Berdegué y R.D. Hart
Julio A. Berdegué pertenece a RIMISP, Casilla 228, Correo 22, Santiago, Chile. Fax +56-2-223 24 23. Correo electrónico: [email protected]
Robert D. Hart pertenece a INFORUM, 611 Siegfriedale Rd., Kutztown, PA 19539, Estados Unidos. Fax +1-610-683 63 83. Correo electrónico: [email protected]
Este artículo, basado en una comunicación que se presentó en la 18a Reunión del Comité Asesor de Enseñanza Forestal de la FAO, que tuvo lugar en Santiago de Chile, entre el 11 y 14 de noviembre de 1996, analiza cómo podrían aplicarse a la creación de redes de enseñanza forestal los servicios electrónicos que están surgiendo en conexión con Internet.
Los autores comienzan presentando cinco ejemplos de aplicaciones electrónicas que podrían utilizarse para mejorar la enseñanza forestal superior, en particular en los países en desarrollo. A continuación, explican brevemente cómo se podrían crear redes, aplicaciones y servicios electrónicos para promover la enseñanza forestal. Finalmente, ofrecen un ejemplo de una aplicación de esas características, un Centro virtual para el intercambio de información y conocimientos en apoyo del desarrollo rural en América Latina.
APLICACIONES ELECTRONICAS EN LA ENSEÑANZA SUPERIOR
En una búsqueda realizada en Internet en octubre de 1996 se localizaron unos 30 000 documentos en los que aparecía la expresión «enseñanza forestal»; alrededor de 80 000 que contenían el término «forestal»; cerca de 1 000 000 con el término «enseñanza»; y casi 3 000 000 en los que figuraba el término «universidad». Cabe pensar que en un conjunto tan voluminoso de información hay muchos tipos distintos de aplicaciones. Además, los programas informáticos, servidores y conexiones de Internet se están perfeccionando con tal rapidez que prácticamente todos los días aparecen opciones e instrumentos nuevos. En los párrafos que siguen se identifican brevemente cinco ejemplos de las aplicaciones electrónicas de Internet para la enseñanza superior y, en particular, en el campo de la enseñanza forestal. Esos cinco ejemplos ponen de relieve el potencial de Internet para buscar soluciones a problemas que anteriormente la mayor parte de las universidades de los países en desarrollo no podrían haber afrontado a un costo compatible con sus presupuestos.
Enseñanza a distancia en línea
Un gran número de universidades y empresas privadas están trabajando en la puesta en marcha de servicios y aplicaciones de enseñanza a distancia basados en Internet. Realizar un curso en Internet supone que a los rasgas propios de un curso de enseñanza por correspondencia se añaden otros como la posibilidad que se ofrece al alumno de poder comunicarse con su profesor y sus condiscípulos mediante conferencias y correo electrónicos, presentar ejercicios en tiempo real por correo electrónico y participar desde su casa en grupos de trabajo electrónicos dirigidos por profesores. Gracias a todo ello, estudiar a través de Internet es especialmente útil para todo aquel que vive lejos de los centros universitarios o que por su empleo o situación doméstica tiene dificultades para trasladarse hasta un centro de estudios. En general, en los cursos que se siguen actualmente por Internet, el material impreso, las cintas de audio o vídeo y el material para realizar experimentos en casa se envían por correo postal convencional o por mensajero antes de que empiece el curso, aunque una parte del material se puede obtener también en forma electrónica.
Figura 2. Primera página de las bases bibliográficas de la FAO en Internet
La enseñanza a distancia en línea podría llegar a ser un instrumento extraordinariamente útil para promover la colaboración y el intercambio entre enseñantes de disciplinas forestales de diferentes países y, en particular, para facilitar el intercambio de conocimientos y tecnología en el campo educativo. Las universidades que participan en redes o en otro tipo de convenios de cooperación podrían intercambiar a través de Internet programas de enseñanza, pruebas, ejercicios, exámenes, apuntes de clase y otro material, con un costo muy reducido.
El Media Resources Center de la Universidad del Estado de Iowa, Estados Unidos, mantiene una lista en la que figuran varias decenas de organizaciones de universidades de todo el mundo que se dedican a elaborar materiales de enseñanza a distancia (www.public.iastate.edu/~mrc/links/centers.html), incluso cursos en línea. También se puede encontrar información adicional en otras dos organizaciones, The Society por Applied Learning Technology (www.salt.org) y United States Distance Learning Association (www.usdla.org).
Conseguir información bibliográfica
Un problema común a muchas universidades de países en desarrollo es la dificultad de actualizar las bibliotecas y otros sistemas de bancos de datos e información. Sin acceder a esos recursos es muy difícil mejorar la calidad de la enseñanza superior. Internet está ejerciendo ya una influencia muy importante en este aspecto.
Actualmente, a través de Internet se puede acceder a los catálogos de la mayor parte de las bibliotecas de todo el mundo sin gasto alguno (salvo el costo de la conexión a Internet). Todas las principales bases bibliográficas como AGRIS y CARIS de la FAO (www.fao.org/library/default.htm) o los International's Abstracts de CAB (www.cabi.org) están accesibles en línea. Además, algunas de las bibliotecas más importantes poseen un servicio para hacer llegar a usuarios extranjeros ejemplares de los documentos a bajo precio (cabe citar el Document Supply Center de la British Library (portico.bl.uk/dsc) y el Document Delivery Services de la National Agricultural Library de los Estados Unidos (www.nalusa.gov/ddsb/about_ddsb.html). Estos dos servicios, en conjunto, aseguran prácticamente a los profesores y estudiantes la posibilidad de acceder a todos los libros y artículos de revista que hasta ahora sólo se podían conseguir en las universidades de países desarrollados.
Existen varios proyectos en marcha para mejorar aún más esta situación, creando verdaderas bibliotecas virtuales, en las que no sólo se podrán conseguir en línea los catálogos, sino también hacerse con los propios documentos en formato digital. Puede citarse el proyecto de biblioteca virtual de la FAO, que, con el tiempo, puede llegar a situar en línea toda la colección de la FAO, incluidos varios millones de documentos relativos al sector forestal.
Figura 3. Primera página sobre Investigación, educación y extensión forestales de la FAO en Internet
Acceso a información básica sobre universidades
Internet hace posible que las universidades ofrezcan información sobre sus departamentos, los títulos disponibles, los programas de enseñanza de cada licenciatura, las líneas actuales de investigación y las publicaciones recientes, los próximos eventos, las becas y otros recursos para los estudiantes, etc., a una audiencia ingente.
Como ejemplo de universidades que ya están utilizando esas posibilidades cabe citar la Escuela Forestal y de Conservación de los Recursos de la Universidad de Melbourne, Australia (www.agfor. unimelb.edu.au/agroforestry/agfor.html) y el Departamento de estudios forestales de la Universidad de Aberdeen, Escosia, (www.abdn.ac.uk/~for257/index.htm). Las universidades pueden compartir información acerca del programa de estudios de sus cursos, por ejemplo, la Universidad de Vermont, Estados Unidos (www.uvm.edu/~tlynch/b4sylbus.htm).
CollegeNET administra una base de da tos accesible con información sobre 2 500 universidades (www.collegenet.com). Se puede encontrar otra base de datos en la que figuran millares de universidades en www.mit.edu:8001/people/cdemello/univ-full.html.
El Directorio de Instituciones de Enseñanza y Capacitación Forestales de la FAO, que está disponible en línea (http://www.fao.org/WAICENT/faoinfo/forestry/free/foodu/foedu.htm) ofrece una concisa información sobre 810 instituciones de enseñanza y capacitación forestales, aproximadamente, en más de 110 países. Se incluye un formulario de declaración de datos sobre organizaciones de enseñanza forestal, para que las instituciones puedan introducir o actualizar sus datos en línea. Asimismo, la FAO mantiene en línea directorios de instituciones de investigación forestal (gopher://gopher.FAO.ORG/11gopher_root%3A%5Bfao.fo_res%5D), y se están preparando directorios de organizaciones de extensión forestal y/o de organizaciones de investigación sobre tierras áridas.
Acceso a información sobre publicaciones recientes y actividades de investigación en curso
Son muchas las bases de datos sobre publicaciones recientes y actividades de investigación en curso que se estén poniendo a disposición a través de Internet por un costo muy reducido o sin costo alguno. Pueden ser recursos de gran importancia para mejorar los programas de enseñanza superior.
Como ejemplo de base de datos de publicaciones recientes puede citarse el servicio CABACCESS de CAB International, que ofrece información detallada - actualizada semanalmente - de las publicaciones de casi 1 000 revistas internacionales en 15 sectores distintos, como el sector forestal, la ecología y los recursos de suelos y agua (www.cabi.org./catalog/curaware/cabacc.htm).
La Dirección de Productos Forestales de la FAO está elaborando un compendio de bases de datos sobre la comercialización de productos forestales que se ofrecerá en línea y tendrá una gran importancia para los programas de enseñanza forestal universitaria.
Conferencias electrónicas
Las conferencias electrónicas (conferencias-e) son «reuniones» que se celebran por medio de Internet, utilizando dos servicios electrónicos combinados: el correo electrónico y los «servidores de lista». Un servidor de lista es un programa informático que administra una lista de direcciones de correo electrónico (de los participantes en la conferencia-e) y que facilita el intercambio de mensajes entre ellos; por lo general, también mantiene un archivo de los mensajes que se han intercambiado. La conferencia-e puede utilizarse en la enseñanza superior por si misma o como parte de un programa de enseñanza a distancia en línea. Como ejemplo del proceso y de las posibilidades de las conferencias-e en el sector forestal, véase en este mismo número de Unasylva el artículo de A. Sherwood. Es de destacar el hecho de que un gran número de los participantes en la conferencia-e pertenecían a la facultad de estudios forestales de diversas universidades.
El Comité Asesor de Enseñanza Forestal de la FAO podría utilizar las conferencias-e para fomentar un intenso intercambio de conocimientos e información entre enseñantes y estudiantes forestales de todo el mundo.
ESTABLECIMIENTO DE REDES, SERVICIOS Y APLICACIONES ELECTRONICAS
En la sección anterior se ha indicado que un grupo como el Comité Asesor de Enseñanza Forestal podría cumplir un importante papel para promover la utilización de las nuevas aplicaciones electrónicas en beneficio de la enseñanza forestal. En aras de la eficacia sería necesario organizar y establecer una red electrónica.
A continuación se señalan brevemente los pasos fundamentales que se deben seguir para establecer una red electrónica paralelamente a una red institucional como el Comité Asesor de Enseñanza Forestal. El contenido de esta sección se basa en la experiencia adquirida con la creación de FIDAMERICA, una red de proyectos de desarrollo agrícola y rural basada en Internet y financiada por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).
1. Analizar las necesidades actuales de intercambio de información de la red institucional. Es importante, ante todo, conocer las características de la red o asociación de instituciones que está considerando la posibilidad de establecer una red electrónica. Las cuestiones esenciales son las siguientes: ¿Cómo se intercambia o se comparte en este momento la información? ¿Qué aplicaciones (no electrónicas) se han establecido?
Por norma general, entre ellas figuran las reuniones personales, boletines, informes técnicos que se intercambien por correo aéreo, teléfono y fax, con el fin de establecer una comunicación personal. ¿Son rentables esas aplicaciones no electrónicas? Si funcionan correctamente, ¿tiene sentido establecer redes, aplicaciones y servicios electrónicos?
2. Diseñar una red y unas aplicaciones y servicios electrónicos adecuados. El primer paso debe ser identificar las posibles aplicaciones de gran prioridad, en lugar de diseñar la red y los servicios e intentar determinar qué aplicaciones podrían utilizar dichos servicios. Por ejemplo, se puede comenzar estableciendo qué funciones necesitan las personas e instituciones para compartir la información y los conocimientos de manera más eficaz. Es necesario determinar los servicios que son necesarios y diseñar una red con uno o más servidores que puedan proporcionar esos servicios. Si es posible, se debe diseñar la red de tal forma que se haga uso de los servidores que ponen a disposición (normalmente con un costo determinado) organizaciones especializadas. Esta opción no sólo resultará menos costosa, sino que hará posible centrar la atención en el intercambio de información y conocimientos antes que en la solución de los problemas informáticos o en la mejora de los sistemas cada vez que quedan obsoletos (lo cual ocurre, como mínimo, una vez al año). Se han de analizar las capacidades actuales de las instituciones en las que se establecerán los ordenadores clientes y el tipo de redes de telecomunicaciones existentes en el conjunto de la región y en cada país. Se deben utilizar todos los servicios de telecomunicación disponibles; muy probablemente, mejorarán con el paso del tiempo.
3. Comparar la rentabilidad de las aplicaciones actuales y de las aplicaciones electrónicas. Es posible que este análisis entrañe dificultades. En muchos casos, es difícil estimar el costo de establecer una red y servicios electrónicos y el que comporta aprender a utilizar las aplicaciones electrónicas. Generalmente, no está claro cuántas aplicaciones no electrónicas han de ser sustituidas. Es muy importante estudiar minuciosamente los costos de personal, ya que ésta es una partida mucho más gravosa que el costo de los ordenadores, del programa informático o de las comunicaciones.
4. Conseguir un compromiso de las instituciones miembros. Aunque pueda parecer que establecer una red electrónica es una cuestión que tiene que ver con equipos y programas informáticos que se ha de dejar en manos de los ingenieros, de hecho es un problema de personal que afectará a todo el mundo. Es sumamente importante enseñar al personal superior cómo funcionarán las aplicaciones y cómo se ejecutará el plan.
5. Impartir capacitación al personal sobre la forma de ejecutar las aplicaciones electrónicas y utilizar los servicios. Es indispensable organizar cursillos de capacitación para el personal de las instituciones. Los cursillos tendrán una doble finalidad: ayudar al personal a utilizar los nuevos instrumentos y motivarlo para que invierta el dinero y el tiempo necesarios para establecer ordenadores clientes con programas informáticos clientes con acceso a redes de telecomunicaciones, a fin de que pueda comenzar a utilizar las aplicaciones. Por ejemplo, de las 35 instituciones a las que se impartió capacitación en cuatro cursillos organizados por FIDAMERICA, sólo tres no habían cumplido con los pasos fundamentales una vez transcurridos cuatro meses; posiblemente, un elemento clave que explica esos buenos resultados fue la incorporación en esos cursillos en talleres y otras aplicaciones electrónicas simuladas, que demostraban con toda claridad cómo podían contribuir los nuevos instrumentos a mejorar el trabajo de los participantes.
6. Establecer primero el servicio en un servidor y organizar aplicaciones experimentales. Cuáles deben ser los primeros servicios electrónicos que se deben establecer para facilitar el intercambio de información dependerá de la demanda de las instituciones. La mayor parte de las veces, el primer servicio electrónico que establecen las redes es un «servidor de lista» que permitirá poner en marcha varios servicios electrónicos, como tablones de anuncios, conferencias-e, archivos de documentos y boletines electrónicos, así como procedimientos simplificados de comunicación e intercambio de información entre los miembros de la red institucional.
7. Reforzar los vínculos entre las redes institucional y electrónica. Es muy importante establecer rápidamente otras aplicaciones para aprovechar el entusiasmo que generan los primeros intercambios. En ese momento es necesario fortalecer el vínculo entre las redes institucional y electrónica, pues de lo contrario existe el riesgo de que avancen por caminos separados. Por ejemplo, es posible que los administradores de la red institucional continúen utilizando los procedimientos tradicionales de comunicación no electrónicos, y que el personal destinado a gestionar los nuevos instrumentos desee utilizar aplicaciones que no han sido establecidas por la red institucional. El mejor procedimiento para reforzar ese vínculo es poner en marcha aplicaciones electrónicas relacionadas directamente con las necesidades de la red institucional. Muchas veces, las conferencias-e con moderador constituyen un punto de partida adecuado, como ha ocurrido en la red FIDAMERICA, cuya primera actividad una vez se hubo impartido la capacitación fue un taller electrónico que contó con 60 participantes de 28 países.
8. Ampliar los servicios y aplicaciones en función de la demanda. Una vez que las instituciones están utilizando activamente las aplicaciones electrónicas, el personal comenzará a apreciar la posibilidad de organizar otras aplicaciones que exigirán nuevos servicios electrónicos. Así, los investigadores pueden decidir que desean compartir datos, para lo cual se pueden establecer bases de datos distribuidas. En el caso de FIDAMERICA, se creó un mercado de agricultores electrónico en respuesta a la demanda de los miembros de la red institucional de que se utilizaran las nuevas herramientas para mejorar el acceso a la información sobre el mercado y las oportunidades de comercialización. Se deben crear mecanismos que aseguren que las instituciones miembros conocen las aplicaciones posibles y que el personal especializado elabora nuevas aplicaciones en respuesta a las necesidades y demandas de los miembros y no en función de sus propias preferencias técnicas. En FIDAMERICA, se exhortó a todos los miembros a que enviaran por escrito sugerencias para preparar el primer plan de trabajo anual y se recibieron más de 40 recomendaciones.
UN EJEMPLO DE APLICACIONES Y SERVICIOS ELECTRONICOS PARA LA CREACION DE REDES DE ENSEÑANZA FORESTAL
InterCambio es un centro virtual de intercambio de información y conocimientos en apoyo del desarrollo rural en América Latina. Fue establecido por la Red Internacional de Metodologías de Investigación en Sistemas de Producción (RIMISP), una red latinoamericana, y por INFORUM, una ONG internacional que apoya la creación de redes electrónicas.
InterCambio es un centro electrónico virtual que utiliza varios tipos de servicios electrónicos, tales como conferencias, bibliotecas y mercados electrónicos, bases de datos y servicios de asistencia técnica en línea, etc. Su cometido consiste en trabajar con instituciones nacionales y regionales de desarrollo, investigación y política, para facilitar su acceso a la información y conocimientos mediante herramientas modernas de comunicación electrónica, con objeto de conseguir que sus iniciativas sean más eficaces y tengan mayores efectos en el intento de impulsar cambios en la vida rural mediante la mejora de la agricultura y de la ordenación de los recursos naturales.
La primera institución que se convirtió en miembro fundador de InterCambio fue el FIDA. La RIMISP y la INFORUM están buscando otras instituciones que pudieran estar interesadas en unirse al FIDA como miembro fundador.
Los miembros que apoyan a InterCambio son instituciones que desean aprovechar la estructura electrónica que se ha creado para poner a disposición servicios electrónicos como bases de datos, conferencias-e, etc. Los miembros de apoyo se benefician de la sinergia que supone estar vinculado a otros miembros que prestan otros servicios, en forma análoga a como un almacén puede beneficiarse de estar situado en una galería comercial. Los miembros de apoyo tienen tres opciones:
i) pueden establecer un contrato con InterCambio para elaborar, establecer y gestionar un servicio electrónico;ii) pueden elaborar el servicio electrónico en sus propios ordenadores y a continuación celebrar un contrato con InterCambio para trasladar dicho servicio al Centro InterCambio; o
iii) pueden crear el servicio electrónico en sus propios ordenadores y pedir a InterCambio que establezca una conexión directa, de manera que los clientes que tienen acceso a InterCambio puedan conectarse directamente con su servicio electrónico.
El primer miembro de apoyo de InterCambio fue FIDAMERICA, una red que vincula a las instituciones financiadas por el FIDA en América Latina. FIDAMERICA ha anunciado su propósito de convocar al menos cinco conferencias-e con moderador durante los dos próximos años, y de preparar una biblioteca electrónica de publicaciones sobre desarrollo agrícola y rural en América Latina, una base de datos sobre recursos humanos para el desarrollo rural y, en colaboración con otras instituciones, iniciar un mercado electrónico de productos agrícolas y no agrícolas procedentes de las comunidades rurales de América Latina.
InterCambio proveerá varios tipos de servicios electrónicos pertinentes para los fines de una red o asociación de instituciones y personas dedicadas a la enseñanza forestal, tales como boletines, tablones de anuncio y conferencias-e; una biblioteca electrónica; bases de datos en línea y directrices para acceder a información en la WWW (World Wide Web o «Telaraña Mundial»).
CONCLUSIONES
Con el paso del tiempo, las aplicaciones y servicios electrónicos modificarán la naturaleza de la enseñanza forestal por las mismas razones que influirán en muchas otras actividades humanas relacionadas con los conocimientos y la información, esto es, reducirán los efectos negativos que han tenido hasta ahora la distancia y, por tanto, el tiempo y el costo sobre el flujo de información y conocimientos.
Los enseñantes forestales deben hacerse la siguiente pregunta: ¿qué se podría hacer en caso de que la distancia, el tiempo y los costos no influyeran de forma importante en el flujo de información?
La tecnología de Internet está evolucionando a una velocidad vertiginosa. Si hace cinco años la única utilidad práctica para la mayor parte de las personas consistía en enviar breves mensajes electrónicos, en la actualidad se desplazan, con gran rapidez y un costo reducido, a través de Internet todo tipo de datos digitales y es cada vez más numerosa la población del mundo que puede acceder a esos servicios.
Estas tecnologías no sustituirán al aula, al menos durante mucho tiempo, pero permitirán que se registre una revolución en la enseñanza, y, en particular, que los estudiantes y profesores de los países en desarrollo tengan acceso a un ingente volumen de información y conocimientos.
