Aspectos sobresalientes de la síntesis global – producción global acuícola 2010

La producción mundial de pescado de la acuicultura ha crecido substancialmente en la última década, alcanzando 52.5 millones de toneladas en 2008, comparado con 32.4 millones de toneladas en 2000. La acuicultura continúa siendo el sector alimentario de más rápido crecimiento  y aporta actualmente casi la mitad (45.6 por ciento) del pescado para consumo en el mundo, comparado con 33.8 por ciento en 2000. Con el estancamiento de la pesca de captura global y una población humana en  aumento, la acuicultura se percibe como teniendo el mayo potencial para producir más pescados en el futuro  y así atender a  la demanda creciente de alimentos acuáticos sanos y de la calidad.

Según FAO, se estima que para el 2012 más del 50 por ciento del consumo global de alimentos acuáticos se originará de la acuicultura. Aunque  que se carece de datos exactos, se reconoce que, con el crecimiento en volumen y valor de la producción acuícola en la última década, el sector  ha hecho una contribución positiva a las economías, a la reducción de la pobreza y a la seguridad alimentaria nacional, regional y global. No obstante, se reconoce que un reconocimiento apropiado de la contribución del sector acuícola, basada en datos exactos, es importante para formular las políticas, estrategias y  planes de acción bien informados que los gobiernos y las entidades colaboradoras con el desarrollo consideren favorables para la ayuda y financiamiento crecientes.

Europa. En el 2008,  los productores de peces y crustáceos  europeos  produjeron  2.5 millones de toneladas por un valor de US$9.4 mil millones. La acuicultura europea se considera  líder mundial en la producción de especies de alto valor (salmónidos, bacalao europeo, lubinas, doradas, rodaballo) y contribuye perceptiblemente al desarrollo global de la acuicultura con transferencia del conocimiento y de tecnología. La estrategia recientemente renovada de la Comunidad Europea para el desarrollo sustentable de la acuicultura que le permita enfrentar los desafíos del crecimiento y competitividad  fortalece al sector y  asegura su crecimiento sostenible mejorando la imagen y la gobernabilidad del sector.

Norteamérica. La acuicultura Norteamericana produjo 644 000 toneladas de productos en 2008 con un valor estimado de US$1.6 mil millones. La industria de producción de peces está a la vanguardia del sector de la acuicultura, liderada por la producción de salmones atlánticos en Canadá y del bagre de canal en los Estados Unidos de América. El crecimiento significativo futuro en la industria acuícola norteamericana requerirá de políticas y  regulaciones que protejan el ambiente mientras que aseguran la viabilidad económica del sector en una arena internacional cada vez más competitiva.

América latina y El Caribe. La acuicultura de América latina y el Caribe produjo 1.76 millones de toneladas en 2008, valorado en US$7.2 mil millones y ha crecido al doble (18.5 por ciento) de la tasa media de crecimiento mundial del sector en los últimos 30 años. Tres países - Chile, Brasil y Ecuador - aportan 74.5 por ciento del volumen y 77.9 por ciento del valor cultivado en el último trienio. La producción se concentra en pocas especies y principalmente en granjas industriales. Se requiere un mejoramiento de la gobernanza para mejorar el acceso a los mercados y desempeño de los productores de pequeña escala. Las condiciones naturales locales, una gobernanza adecuada, la voluntad política, una investigación y desarrollo tecnológico apropiados deben potenciar un progreso substancial de la acuicultura en la región y una mayor contribución a la seguridad alimentaria.

África Sub-Sahariana. En el 2008 la producción acuícola en África Sub-Sahariana era de 239 000 toneladas, un aumento de cinco veces con respecto a 1998 y con un valor de US$665 millón. El grueso de la producción es de tilapia y bagres africanos. El catalizador más relevante para la creciente producción ha sido la aparición y la intensificación del sector privado liderado por empresas pequeñas y medianas en algunos casos estimulados por el creciente apoyo del sector público y con la afluencia de capital y experiencia técnica extranjeras. Existen oportunidades para integrar la acuicultura con otras actividades, para realzar las exportaciones de especies de alto valor, y para fortalecer las instituciones que generan capacidades. Se requiere investigación, desarrollo de tecnologías e inversión para mejorar la sustentabilidad de los sistemas de cultivo existentes y hay un gran necesidad de desarrollar recursos humanos adecuados.

Cercano Oriente y África del Norte. En el Cercano Oriente y África del norte la acuicultura comenzó en los años 20 pero solamente en la década pasada aumentó seis veces la producción alcanzando unas 910 000 toneladas con un valor de US$2.1 mil millones al 2008. Las fuerzas impulsoras principales para tal extensión incluyeron un buen manejo de aspectos de salud pública, un interés creciente en productos pesqueros y la promulgación de políticas adecuadas y apoyadas por investigación, transferencia de tecnología e incentivos para el desarrollo del sector. Cinco países en la región contribuyeron casi a la totalidad de la producción regional, la cual estuvo dominada por tilapias y lisas. La promoción de una industria acuícola económicamente sustentable en la región ha sido un desafío, particularmente con respecto a la piscicultura de agua dulce. Todavía, la región tiene un gran potencial de ampliar su industria con el empleo de tecnologías convenientes y ambientalmente amistosas. Además, el desarrollo de la maricultura está todavía en una etapa inicial, pero podría ampliarse rápidamente.

Asia. La revisión cubre Oceanía, el sur de Asia, el sureste, el este y Asia central. En 2008, la región produjo 46.6 millones de toneladas (excepto las plantas acuáticas) con un valor estimado de US$77 mil millones, más de 70 por ciento producidos en China. Asia contribuye a 92.5 por ciento de la producción total de la acuicultura del mundo por volumen pero la región también consumió 70 por ciento de la producción global. Las características excepcionales de la región son (excepto en Asia central) la predominancia de granjas comerciales de pequeña escala y la dominancia de especies de agua dulce. La región tiene un alto índice del consumo de pescado (29 kilogramos por persona por año) y de mantener este nivel, se deben producir 30-40 millones de toneladas adicionales para el 2050 para atender a la demanda de una población en crecimiento. Considerando el desempeño productivo de la región en el pasado se prevé que puede lograrlo pero tendrá que resolver un una gama de desafíos incluyendo aspectos de productividad, ambientales, sociales y de acceso a los mercados.