Los precios del grano de maíz siguen registrando nuevos máximos históricos, en un contexto de sequía generalizada que podría agudizar la presión inflacionista en lo que queda de 2024.

Los precios del grano de maíz siguen registrando nuevos máximos históricos, en un contexto de sequía generalizada que podría agudizar la presión inflacionista en lo que queda de 2024.

Los precios de los cereales siguieron subiendo en febrero de 2024 a pesar de la reciente finalización de la cosecha de 2023, ya que la producción cerealera se vio fuertemente reducida debido al conflicto en curso. Los altos precios de los insumos, que impulsaron los costos de producción y transporte, brindaron un apoyo adicional a los precios.

Los precios del maíz y el sorgo se dispararon en marzo de 2024 tras una fuerte depreciación de la moneda nacional debida a la reducción de las exportaciones de petróleo. Los precios se sitúan en niveles récord debido a la escasez de suministros, el efecto persistente del prolongado conflicto y los problemas macroeconómicos.

Las condiciones de sequía reducen las perspectivas de las cosechas de maíz blanco, y se pronostica una recolección por debajo de la media en 2024.

Los precios de los cereales siguieron subiendo en febrero de 2024 y se situaron muy por encima de sus niveles de un año antes, apuntalados por la producción de cereales inferior a la media en 2023, los elevados costos de transporte, la depreciación del naira, la fuerte demanda local y las perturbaciones del mercado relacionadas con el conflicto.

Los precios de venta al por mayor del arroz bajaron en marzo de 2024, pero siguen elevados, debido sobre todo a la escasa disponibilidad en los mercados y a los elevados costos de producción y transporte.

Los precios de venta al por menor de la harina de trigo siguieron subiendo con fuerza en febrero de 2024.