Con los niveles cuestionables de stock del Lago Victoria, las importaciones de filetes de perca del Nilo en la UE disminuyeron de 38% entre 2007 y 2012.

De acuerdo a los datos de Eurostat, la UE importó 26 100 toneladas de filetes de perca del Nilo en el año 2013, principalmente de la República Unida de Tanzania, Kenia y Uganda. La República Unida de Tanzania fue el principal exportador de filetes de perca del Nilo a la UE, con 12 400 toneladas (una participación de 47,5% en el mercado), seguida por Uganda con 10 800 toneladas (41%) y Kenia con 2 900 toneladas (11%). Las importaciones totales de filetes por parte de la UE en 2013 disminuyeron levemente en un 12% en relación al año anterior, pero esto es parte de una tendencia de largo plazo, ya que las importaciones de 2013 fueron 38% menores que los volúmenes de 2008 (42 300 toneladas). En enero de 2013, el precio del filete de perca del Nilo era más elevado que los precios de los demás pescados de agua dulce. En una cadena alemana de supermercados, el precio del filete de perca del Nilo podía variaban de EUR 0,99 a EUR 1,59 por 100 gramos, mientras que el mismo volumen de filete congelado de pangasius costaba EUR 0,49.

Producción
En términos de producción, el volumen total de perca del Nilo producido en 2012 fue de 300 000 toneladas, representando una disminución de 11% comparado al volumen total producido en 2007. La producción decreciente de Uganda, principal proveedor, afectó la producción total, ya que el país proveyó un 36% menos en 2012 en volumen que en 2007. Otros países tuvieron aumentos en los volúmenes producidos en 2012 en comparación con 2007, como Kenia (+11.5%), Nigeria (+101%), Níger (+32.4%) y Senegal (+25,4%). El volumen de producción de la Republica Unida de Tanzania permaneció estable.
Actualmente hay 27 plantas de procesamiento autorizadas para la exportación de perca del Nilo: 14 en Uganda, 9 en la Republica Unida de Tanzania y 4 en Kenia. Se estima que 70 000 barcos de pequeña escala participan de estas capturas, lo que representa un aumento notable de 40% desde el año 2004.
La sobrepesca es una de las principales causas del declive de la producción a lo largo de los años. Expertos del Programa SmartFish de la Comisión del Océano Indico, con sede en Mauricio indican que la cantidad de pescadores no registrados que utilizan artes de pesca ilegales en el lago Victoria también contribuye para este declive. La Comisión alerta que, de no implementarse medidas urgentes, la perca del Nilo se podría extinguir en los próximos tres a cinco años (fuente: Daily News).
La Organización de Pesca en el Lago Victoria (LVFO – por su sigla en inglés) determinó el tamaño legal de captura de la perca del Nilo en 50-85 cm de largo, lo que fue aprobado y legislado por los 3 países (Kenia, República Unida de Tanzania y Uganda) en el año 2000. Mientras tanto, no hubo una implementación o cumplimiento efectivos en estos países hasta que la industria resolvió liderar este proceso.
En términos del actual manejo, la LVFO continúa involucrando una variedad de interesados para avanzar hacia un enfoque de co-manejo sostenible. La Organización estableció diversos sistemas de manejo, como las unidades de manejo de playas y los equipos auto-monitoreados de la Asociación de Procesadores de Pescado, que verifican el cumplimiento en el ámbito de las plantas. Además, hay equipos de monitoreo, control y vigilancia a nivel nacional. Finalmente, hay un Plan de Manejo de la Pesca de la Perca del Nilo documentado en vigor, que se encuentra actualmente en fase de revisión.
Naturalmente hay muchos desafíos por superar, particularmente para disminuir las capturas y el comercio de juveniles. Lamentablemente, continúa existiendo una demanda regional para pescados de pequeño tamaño. Además, la demanda continua de perca del Nilo por la República Democrática de Congo, Ruanda, Sudan del Sur y Uganda hace que un número creciente de pescadores utilicen redes de pesca ilegales para capturar mayores volúmenes, lo que frecuentemente también incluye a los juveniles. Muchos de estos equipos ilegales son importados de India y de China. Muchas personas están solicitando a los gobiernos de África del Este para que cesen la importación de redes ilegales y que mejoren el monitoreo y la vigilancia de las operaciones de pesca.
De acuerdo con la LVFO, 2 millones de pescadores artesanales, de obreros de plantas y de comerciantes dependen de la pesca de perca del Nilo. Una manera de apoyar al sector es el desarrollo de Proyectos Nacionales de Mejora de la Pesca, que tienen el potencial de llevar a un mejor acceso a los mercados y a una sostenibilidad de largo plazo. Estos esfuerzos son particularmente importantes en el desarrollo de nuevos mercados en Asia, donde la demanda por filetes de pescado de agua dulce está aumentando.
Los esquemas de ecoetiquetado también presentan posibilidades de apoyar la actividad pesquera. El proyecto GIZ/Naturland que desarrolló una ecoetiqueta para promover la importancia económica y social de la pesca en el distrito de Buroka en el lago Victoria es un ejemplo de este esquema. Este etiquetado es utilizado por Anova Seafood en mercados europeos desde 2009 y, además de promover la importancia económica y social de esta pesca, también promueve el pescado como silvestre. El lado social del ecoetiquetado se reveló muy atractivo para los pescadores artesanales y los incentiva a participar de una pesca sostenible.

Perspectivas
Para asegurar el suministro de perca del Nilo en el futuro, será necesario que los países productores hagan una completa revisión del Plan de Manejo Pesquero, que desarrollen Proyectos Nacionales de Mejora de la Pesca y verifiquen la posibilidad de utilizar estrategias de ecoetiquetado. A largo plazo, la acuicultura de perca del Nilo podría cerrar la brecha en la oferta de captura. Uganda y una decena de otros países de África ya empezaron a desarrollar políticas para la promoción de la acuicultura, especialmente las especies de agua dulce, y trabajan junto con el sector privado para alcanzar estas metas. Además de su importancia creciente en las exportaciones, la perca del Nilo también podría reforzar la seguridad alimentaria y en la nutrición en los mercados internos.