Programa Especial para la Seguridad Alimentaria (PESA) Centroamérica

Mensajes principales. Tras Quince años de Cooperación

Atención directa a familias y organizaciones de base

14 Con datos provenientes de los programas en los cuatro países de intervención, recogidos a partir del apoyo a la agricultura familiar en las regiones de trópico seco, se demuestra que los procesos integrales de atención a la agricultura familiar por parte de los mencionados programas contribuyen significativamente en la construcción de la SAN.

15 Aunque varía el porcentaje en función del sistema productivo de partida y de las condiciones ambientales, los incrementos productivos en el caso del frijol se han situado en torno al 50%. En el caso del maíz, los sistemas productivos más vulnerables han conseguido estabilizarse en producciones entre los 20 y 30 quintales por manzana/año (1,3 y 1,9 toneladas por hectárea); en algunos casos ha significado un leve incremento de la producción, en otros hasta se ha triplicado la producción de partida y se ha conseguido diversificar la producción al incluir hierbas, frutas y/o hortalizas (ver HSSH nº 8).

16 Entre todas las buenas prácticas de los PESA, destaca por su importancia y nivel de sistematización, los sistemas agroforestales (SAF). Los sistemas agroforestales son un conjunto de tecnologías de manejo de suelo, agua, nutrientes y vegetación, que han demostrado su eficacia permitiendo a los pequeños campesinos de las laderas centroamericanas adaptarse mejor a fenómenos extremos de sequía y lluvias intensas, mantener estable su producción y reducir por lo tanto su vulnerabilidad, especialmente frente a fenómenos climáticos. Con una población creciente, cada vez más urbana, límites en la disponibilidad de tierra cultivable, dificultad para aumentar los rendimientos agrícolas, problemas de acceso a tierra y agua, y los efectos visibles en la región del cambio climático, es necesaria en Centroamérica una nueva agricultura que pueda reducir la dependencia de importaciones para cubrir las demandas de alimento, pienso, fibras y energía en el siglo XXI (ver HSSH nº 10).

17 Los datos sobre todo recogidos en Guatemala en la práctica de patio-hogar, evidencian una mejora de la diversidad de la dieta. El conocimiento más integral de su medio productivo y la experimentación con nuevas especies animales y vegetales favorece el paulatino incremento en la diversidad de la dieta.

18 Igualmente, los PESA han dado voz a los ciudadanos y las ciudadanas que no la tenían, al mejorar su autoestima y su participación en los ámbitos de gobierno local: comités de desarrollo locales y alcaldías municipales. Se estima que en los cuatro países de intervención, los PESA han facilitado la formulación de planes de desarrollo en 134 municipios, de los cuales 84 cuentan con planes específicos para la SAN. En Nicaragua, además, se aseguran recursos y la sostenibilidad a través de las ordenanzas municipales (ver HSSH nº 3).

19 Este público meta de los programas PESA forma parte de la denominada agricultura familiar, grupo de población que en Centroamérica lo componen alrededor de 2,5 millones de familias, y que ahora es más importante que nunca en un contexto de alza y volatibilidad de los precios de los alimentos, ya que: i) provee la mayoría de los alimentos básicos de la población; ii) convive y gestiona eficazmente recursos naturales en degradación, y iii) su estabilidad puede evitar migraciones internas desde las zonas rurales a las zonas urbanas marginales (ver HSSH nº 8).

20 El grupo más importante en la agricultura familiar lo compone los productores y productoras de pequeña escala de granos básicos (ver HSSH nº 7).