Programa de Cooperación Internacional Brasil-FAO

Encuentro Regional para la Consolidación de Programas de Alimentación Escolar

Ciudad de Panamá, Panamá.
14-05-18 - 16-05-18

ANTECEDENTES

Diversos organismos del Sistema de Naciones Unidas han publicado datos relevantes sobre las condiciones nutricionales de la población mundial. De acuerdo a éstos, aún existen 800 millones de personas subalimentadas y más de 2 000 millones de personas que sufren carencias de micronutrientes. Aún más sorprendente son los datos sobre la prevalencia de desnutrición crónica en niños y niñas menores de cinco años: ésta alcanza aproximadamente 159 millones a nivel mundial. Por otro lado, 1 900 millones de personas tienen sobrepeso y 600 millones son obesos, y la prevalencia de sobrepeso u obesidad sigue creciendo en casi todos los países del mundo.

Recientemente se proclamó el Decenio de Acción sobre la Nutrición 2016-2025, para que en los próximos diez años sean adoptadas políticas sociales eficaces y para que se intensifiquen los esfuerzos para erradicar el hambre y evitar la malnutrición en todo el mundo. Asimismo, este año se realizará el lanzamiento de la Década de la Agricultura Familiar, la cual impulsará las iniciativas y políticas para fortalecer esta actividad productiva. Estos hitos sitúan la nutrición y la agricultura local en el centro del desarrollo sostenible, favoreciendo el alcance de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS), especialmente del ODS 1 (Erradicar la pobreza en todas sus formas, en todos lugares) y del ODS 2 (Erradicar el hambre, lograr la mejora de nutrición y seguridad alimentaria y promover la agricultura sostenible).

De igual manera, la Trigésimo Quinta Conferencia Regional de la FAO de América Latina y el Caribe (35º LARC, Montego Bay, Jamaica) puso de manifiesto que los programas en alimentación escolar son parte de las políticas públicas para atender a las familias que viven en los territorios más rezagados y en mayor vulnerabilidad al hambre y a la malnutrición. A través de estos programas, reconoció la Conferencia, se pueden combatir los altos índices de sobrepeso y obesidad a través de la oferta de alimentos saludables, así como la entrega de paquetes de intervenciones innovadoras como las compras públicas de la agricultura familiar local para incrementar la diversidad dietética a la vez que potencia el desarrollo económico local.

Por su parte, y alineada con las Iniciativas Regionales de la FAO, la Cooperación Sur-Sur en el área de alimentación escolar propicia el apoyo a programas y proyectos que tienen por objetivo el perfeccionamiento de las estrategias a largo plazo para promoción del desarrollo equitativo y sostenible en los países participantes.

Es importante destacar que, por medio de mecanismos de coordinación intersectorial de un complejo conjunto de políticas, el Gobierno de Brasil ha desarrollado sistemas de gobernanza, tanto a nivel nacional como a nivel local, que permiten la participación de la sociedad civil en todas las etapas del ciclo de esas políticas. El l Programa Nacional de Alimentação Escolar (PNAE) del gobierno brasileño, ejecutado por el Fundo Nacional de Desenvolvimento da Educação (FNDE), vinculado al Ministério da Educação (MEC), ha sido considerado una política pública exitosa por ir más allá de atender necesidades básicas de la alimentación escolar y promover mejoras e impactos más amplios en las economías locales y con participación social.

En este contexto, a partir de la Cooperación Sur-Sur trilateral con la FAO se estableció el proyecto "Fortalecimiento de Programas de Alimentación Escolar en el Marco de la Iniciativa América Latina y el Caribe sin hambre 2025", que se ha implementado de manera diferenciada en 17 países (Antigua y Barbuda, Bolivia, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Paraguay, Perú, República Dominicana, Venezuela, Belice, Jamaica, Santa Lucia, San Vicente y las Granadinas  y Granada) y tiene como objetivo general apoyar el fortalecimiento de los PAE en la región por medio de actividades diversas.

De manera general, en la Región de América Latina y el Caribe ha experimentado importantes avances conceptuales y prácticos en el tema de la alimentación escolar y se puede afirmar que en 2018 casi el 100% de los países desarrollan tales programas. Asimismo, en 13 países de la región se ha implementado alguna experiencia de PAE sostenible, en el marco de las Escuelas Sostenibles.  Este modelo propone un enfoque integral de la alimentación escolar considerando seis componentes para su implementación: 1) La articulación intersectorial y participación social; 2) La educación alimentaria y nutricional, a través de los huertos escolares pedagógicos; 3) El mejoramiento de la infraestructura para la alimentación escolar; 4) El estudio del estado nutricional de los estudiantes (ENNE); 5) La adopción de menús adecuados, saludables y de acuerdo a la cultura local; y 6) El establecimiento de compras directas de la agricultura, familiar local, para la alimentación escolar.

De esta manera, con el propósito de dar seguimiento a las actividades desarrolladas y en proceso de desarrollo, se planea la realización del Encuentro Regional para la Consolidación de Programas de Alimentación Escolar, a realizarse en la Ciudad de Panamá, Panamá, entre los días 14 y 16 de mayo.

Participantes:

El evento contará con la participación cerca de 60 personas, entre gestores de programas de alimentación escolar de 13 países, gestores de FAO, FNDE e ABC, además de la participación de otros organismos internacionales como PMA, OPS, SICA y otros.

OBJETIVOS

Difundir evidencias sobre los avances de los países en los programas de alimentación escolar hasta la fecha con énfasis en las buenas prácticas y lecciones aprendidas;  

  1. Examinar el estado actual de la política de alimentación escolar en los países, especialmente los desafíos y oportunidades para escalamiento, con vistas a la planificación estratégica de las acciones de cooperación técnica que serán promovidas por la FAO junto a otras Agencias y partes interesadas;
  2. Promover el intercambio entre países a través de la difusión de buenas prácticas, favoreciendo que los gestores se sientan motivados y calificados a intervenir de manera asertiva en el escenario nacional;
  3. Identificar de manera conjunta y participativa, las estrategias de continuidad de la Cooperación Brasil-FAO, tanto en lo que se refiere a las demandas generales, a nivel regional, como a las demandas específicas de cada país.