La peste de los pequeños rumiantes

La importancia de la erradicación

Controlar y finalmente erradicar la PPR significa luchar contra la pobreza rural, velar por la seguridad alimentaria y la nutrición, y fortalecer la resiliencia y las economías nacionales.

  • Luchar contra la pobreza rural:la erradicación de la PPR protegerá los ingresos y la base de activos de 300 millones de familias rurales. Las ovejas y las cabras constituyen una fuente de ingresos regulares, una manera de capitalizar ahorros y una red de protección para afrontar los momentos difíciles. La venta de animales o de productos derivados de ellos aporta los recursos necesarios para acceder a alimentos, así como a servicios educativos y sociales para sus familias.
    La erradicación de la PPR impulsará el empoderamiento económico de las mujeres en lugares donde esta fortaleza puede cambiar las reglas del juego. A menudo, las mujeres son responsables de estos pequeños animales domésticos, que constituyen alimento para sus familias, y de la venta local de los productos derivados de ellos.
      
  • Velar por la seguridad alimentaria y la nutrición: la erradicación de la PPR combate la inseguridad alimentaria y la malnutrición, con el consiguiente impacto positivo a largo plazo en la situación nutricional de algunas de las poblaciones más vulnerables.  

  • Fortalecer la resiliencia y las economías nacionaleslas ovejas y las cabras son activos muebles que se pueden reubicar en momentos de sobrecarga climática o seguridad inestable. Por consiguiente, la erradicación de la PPR mejorará de forma sostenible la resiliencia de los agricultores pobres en sus comunidades y les permitirá gestionar mejor otras perturbaciones y amenazas, en particular en entornos frágiles y propensos a las crisis, con lo que mitigará las tendencias migratorias posteriores. También incrementará el potencial económico de los agricultores y otros agentes que participan en las cadenas de valor de los productos ovinos y caprinos, a saber, carne, leche, lana, piel y fibra. Además, la desaparición de esta enfermedad puede ayudar a aumentar el PIB agrícola de muchos países de ingresos medios y bajos.

La erradicación de la PPR contribuirá significativamente a lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular el ODS 1 (fin de la pobreza) y el ODS 2 (hambre cero), pero también los ODS 5 (igualdad de género), ODS8 (trabajo decente y crecimiento económico) y ODS15 (vida de ecosistemas terrestres).  

La PPR puede erradicarse en todo el mundo de aquí a 2030. Puede diagnosticarse de forma fácil y económica y existe una vacuna fiable, barata y de calidad que, con una sola dosis, confiere inmunidad de por vida a los animales vacunados. Además, el virus tiene una fase infecciosa relativamente corta y no sobrevive durante mucho tiempo fuera de un huésped, lo que lo convierte en el candidato perfecto para un esfuerzo de erradicación concertado. Fortalecer las capacidades de los servicios veterinarios nacionales para controlar y erradicar esta enfermedad también generará amplios beneficios en la lucha contra otras enfermedades animales. 

El creciente consenso internacional y el apoyo político a la erradicación de la PPR, la viabilidad técnica, las altas tasas de rendimiento de la inversión que perduran durante generaciones, y la asociación entre la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) —que ha demostrado su capacidad para erradicar eficazmente enfermedades animales transfronterizas, como la peste bovina— son garantías sólidas del éxito del Programa mundial de erradicación de la peste de los pequeños rumiantes.

La erradicación de la PPR y
los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible comprende objetivos interrelacionados que tienen que ver con la agricultura y la alimentación. En ella se establece la erradicación de la pobreza como objetivo general, y entre sus premisas básicas se encuentra la integración de las dimensiones económica, social y ambiental del desarrollo sostenible. Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las 169 metas mundiales de la Agenda definen los ámbitos en los que se fomentará el desarrollo sostenible.

El examen de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible desde la perspectiva de la Estrategia mundial para el control y la erradicación de la PPR antes de 2030, preparada por la FAO y la OIE y presentada a la comunidad internacional en Abiyán en 2015, da mucho que pensar. Dada la importancia de las ovejas y las cabras para los medios de vida de los agricultores pobres y marginados de África, Oriente Medio y Asia, la PPR debe considerarse una amenaza contra la seguridad alimentaria, la nutrición y la mitigación de la pobreza en estas regiones. La erradicación mundial de la PPR puede contribuir al logro de dos ODS como mínimo:

ODS 1: Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo; y

ODS 2: Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible. Durante los últimos 15 años la PPR se ha propagado a un ritmo alarmante, ha alcanzado regiones que antes no estaban afectadas y ha puesto en riesgo a cientos de millones de otros pequeños rumiantes. Si no se controla esta situación, la enfermedad podría propagarse todavía más y causar pérdidas socioeconómicas aún más devastadoras y daños graves en los ingresos y la seguridad alimentaria de los millones de pequeños agricultores y pastores que dependen de las ovejas y las cabras para su sustento, lo que en última instancia podría sumir aún más en la pobreza a los grupos más pobres y vulnerables. Esta posibilidad plantea la necesidad urgente de coordinar las iniciativas mundiales de prevención y control de la PPR, y de fortalecer la resiliencia de las comunidades pobres para proteger sus medios de vida y sus bienes pecuarios frente a esta devastadora enfermedad.

El progreso rápido en la erradicación de la PPR también se considera un elemento clave que contribuye directa o indirectamente al logro de otros ODS, entre ellos:

ODS 3: Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades;

ODS 5: Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas;

ODS 8: Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos;

ODS 12: Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles; y

ODS 17Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible.

La Estrategia mundial para el control y la erradicación de la PPR, y el primer Programa mundial de erradicación quinquenal previsto para su aplicación, tendrán un efecto catalizador que contribuirá al logro de las metas y los objetivos definidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en especial en los países afectados y en riesgo. A menos que la PPR se gestione con eficacia en los planos nacional, regional y mundial, las mayores pérdidas socioeconómicas y los efectos de la enfermedad continuarán socavando los esfuerzos por reducir la inseguridad alimentaria y la malnutrición, mitigar la pobreza y alcanzar el desarrollo sostenible.