Roma, 17 de junio de 2020 -¿Cómo puede contribuir la protección de la sanidad vegetal al cumplimiento del derecho a la alimentación? Con el objetivo de destacar los vínculos inevitables entre estos dos temas, la Secretaría de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) y el Equipo del Derecho a la Alimentación de la FAOse han embarcado por primera vez en proyectos de colaboración. Las delegaciones, encabezadas por el Secretario de la CIPF, Jingyuan Xia, y el líder del equipo del Derecho a la Alimentación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Juan Carlos García y Cebolla, se reunieron virtualmente debido a la pandemia de la COVID-19 actual, en presencia de Ralf Lopian, presidente del Comité Directivo Internacional del Año Internacional de la Sanidad Vegetal (AISV).

Las plantas constituyen el 80% de los alimentos que ingerimos, por este motivo son esenciales para salvaguardar la seguridad alimentaria, y el acceso continuo a alimentos nutritivos, seguros, asequibles y suficientes para que todos nosotros podamos disfrutar de vidas activas y saludables. Las plagas de vegetales son la causa de pérdidas de hasta el 40% de cultivos alimentarios a nivel mundial. El cambio climático amenaza con reducir tanto la cantidad de cultivos, al verse reducidas las cosechas, como el valor nutritivo. El aumento de temperatura también implica la aparición temprana de un mayor número de plagas de vegetales y en lugares donde no se habían visto antes.

Por otro lado, la comunidad de la CIPF está a punto de iniciar un nuevo capítulo mediante la adopción de Normas sobre productos, que permitirán la exportación más segura de alimentos. Este es un componente clave para lograr la seguridad alimentaria a nivel mundial y eventualmente establecer sistemas de alimentos sostenibles.

Todos estos elementos forman una fuerte correlación entre seguridad alimentaria y sanidad vegetal, tales como la disponibilidad y adecuación de los alimentos, el acceso a los mercados, la asequibilidad y sostenibilidad. Según el Sr. Jingyuan Xia, Secretario de la CIPF: «La sanidad vegetal es un componente esencial del Derecho a la Alimentación, y ambos conceptos están estrechamente interrelacionados». Jingyuan Xia agradeció la organización de la primera reunión conjunta y expresó su opinión de que la nueva colaboración acogerá resultados muy positivos.

«Considero que vamos a crear una relación muy positiva y duradera», señaló Juan Carlos García y Cebolla. «La adopción de los principios de derechos humanos puede mejorar significativamente la sostenibilidad y la inclusión de sistemas alimentarios, en particular el comercio internacional de alimentos y productos vegetales», añadió. Ralf Lopian expresó su satisfacción con relación al inicio de esta asociación durante el Año Internacional de la Sanidad Vegetal (AISV). Las acciones incluirán desde actividades de comunicación hasta la participación en debates coordinados de políticas. A corto plazo, el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA), el Día Mundial de la Alimentación en 2020 o el Día Internacional de los Derechos Humanos podrían ser una oportunidad para poner la sanidad vegetal y el derecho humano a la alimentación en el foco de atención.

Para cerrar la reunión virtual, los participantes acordaron una serie de acciones conjuntas y recordaron las palabras de Qu Dongyu, Director General de la FAO, en la ceremonia de apertura del AISV: «Las plantas proporcionan las bases esenciales de la vida en la Tierra y constituyen el pilar más importante de la nutrición humana».

Acerca de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria

Es un acuerdo internacional que entró en vigor en 1952, y cuya Secretaría se encuentra está albergada en la FAO. La proporciona normas internacionales para las medidas fitosanitarias, que los gobiernos aplican para proteger sus recursos vegetales de plagas nocivas, a la vez que se asegura que esas medidas se justifiquen y que no se utilicen como obstáculos injustificados al comercio internacional.