Alimentación y agricultura sostenibles

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Potenciar la biodiversidad a favor de la alimentación y la nutrición en el Brasil, Kenya, Sri Lanka y Turquía

03 April 2020

Un potencial no explotado

El Brasil, Kenya, Sri Lanka y Turquía albergan una amplia variedad de especies y ecosistemas, y esa diversidad agrobiológica ha dado lugar a gran cantidad de conocimientos ecológicos locales tradicionales e indígenas. Dichas competencias únicas y el vínculo con los recursos y servicios ecosistémicos locales apuntalan las cadenas de suministro de alimentos en estos países y otros.

Pero a pesar de que los recursos naturales en estos países son variados y abundantes, las comunidades locales a menudo no gozan aún plenamente de todos los beneficios que podrían ofrecer estos recursos en términos de nutrición y medios de vida. Ello se debe en parte al potencial no explotado de los recursos genéticos indígenas, sobre todo los fitogenéticos, que todavía se estudian, aprecian o conservan en escasa medida.

El proyecto

El proyecto “Mainstreaming biodiversity conservation and sustainable use for improved human nutrition and well-being” (Integración de la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad para mejorar la nutrición y el bienestar de las personas) tuvo como objetivo abordar esta cuestión promoviendo los conocimientos sobre la importancia de la biodiversidad para garantizar la disponibilidad de alimentos nutritivos de alta calidad.

El proyecto fue cofinanciado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM) y puesto en práctica conjuntamente por Bioversity International con el apoyo de la FAO a través de su División de Nutrición y Sistemas Alimentarios, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y por asociados ministeriales, académicos, ONG, del sector privado y comunitarios. El objetivo del proyecto consistió en fomentar los conocimientos y mejorar la capacidad de varias partes interesadas a nivel nacional con miras a mejorar el bienestar, los medios de subsistencia y la seguridad alimentaria de las comunidades vulnerables y de pequeños productores.

Impulsar el progreso

Entre 2013 y 2019, el proyecto propició toda una serie de logros positivos, impulsando cambios positivos en los cuatro países.

Documentar el vínculo entre la agrobiodiversidad y la nutrición

El proyecto creó una red de 50 universidades y organismos, que recopiló datos en el Brasil, Kenya, Sri Lanka y Turquía. La red recabó información sobre biodiversidad local comestible y conocimientos tradicionales conexos, lo cual llevó a generar nuevos datos sobre composición de alimentos y permitió actualizar las tablas y bases de datos nacionales en la materia. Todos ellos son fundamentales para crear políticas y planes de acción nacionales bien documentados y eficaces.

Incorporar enfoques sostenibles en los planes de acción nacionales

El proyecto logró incorporar enfoques de agricultura sostenible a nivel nacional en los cuatro países, impulsando políticas y estrategias en pro de la conservación de la biodiversidad para la alimentación y nutrición.

En el Brasil, por ejemplo, se incluyó la “conservación de la biodiversidad para la alimentación y nutrición” en la Estrategia y Plan de Acción Nacionales en materia de Biodiversidad como indicador del estado de la biodiversidad, mientras que el Gobierno Federal del Brasil legisló a favor de medidas para la producción y venta de especies nativas “marginadas e infrautilizadas” de considerable valor nutritivo.

Las políticas y los planes de acción nacionales en Kenya, Sri Lanka y Turquía se fundamentaron, asimismo, en iniciativas ejecutadas en el marco del proyecto.

Intercambio de conocimientos

Se elaboró todo un elenco de productos del conocimiento, artículos revisados por pares y publicaciones, y se organizaron actos encaminados a promover la biodiversidad a favor de la alimentación y nutrición.

El proyecto ha llevado a la elaboración de una serie de mejores prácticas y metodologías que aún se están documentando en el plano nacional y mundial, al tiempo que los países están elaborando manuales y directrices para recolectar y usar de manera sostenible formas concretas de biodiversidad y documentando recetas e información basada en conocimientos tradicionales.

Estos materiales están disponibles en un sitio web específico (en inglés), que también se creó en el marco del proyecto para compartir y mostrar información y resultados: http://www.b4fn.org.

Empoderar a las comunidades

Uno de los objetivos principales del proyecto fue fomentar los conocimientos y la resiliencia a nivel local. Esto se logró mediante iniciativas en los distintos países en que se llevó a cabo el proyecto, en particular las siguientes:

  • Cuatro comunidades en Kenya, 121 aldeas en Turquía, comunidades Quilombola en la región Centro-Oeste del Brasil y en tres lugares piloto en Sri Lanka, que participaron en el proyecto para ayudar a documentar el conocimiento y las prácticas ecológicas tradicionales.
  • Ocho grupos de agricultores kenianos lograron adjudicarse 14 concursos con mercados institucionales para el suministro a escuelas de hortalizas africanas de hoja. Se estableció un programa de redes “de la granja a la escuela” para garantizar los medios de vida de los agricultores, al mismo tiempo que se proporcionaban a 5 500 estudiantes comidas saludables y nutritivas.
  • En Sri Lanka se llevaron a cabo actividades de sensibilización en escuelas y se promovieron alimentos tradicionales a través de distintas iniciativas en todo el país.
  • Tanto en el Brasil como en Kenya y Turquía se organizaron festivales gastronómicos y ferias de diversidad para celebrar la biodiversidad local a favor de la alimentación y la nutrición.

De cara al futuro

El proyecto se ha presentado en numerosos foros y actos internacionales, como por ejemplo durante la reunión ordinaria de la Comisión de Recursos Genéticos para la Alimentación y la Agricultura de 2019 y en publicaciones tales como El estado de la biodiversidad para la alimentación y la agricultura en el mundo, así como en libros y revistas especializadas. En este momento, se está utilizando como un estudio de caso para reformular secciones del nuevo marco posterior a 2020 del Convenio sobre la Diversidad Biológica.

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