COAG/2005/INF/7

Proceso y rasgos destacados

1. La agricultura y los ecosistemas naturales son sectores interrelacionados, pero también se encuentran en competición creciente por unos recursos hídricos a menudo escasos. Reconciliar las necesidades de agua de los dos sectores es fundamental para asegurar la producción de alimentos y proteger los recursos naturales. Varios compromisos acordados internacionalmente, como los asumidos, por ejemplo, por la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, la Cumbre Mundial sobre la Alimentación, la Cumbre Mundial sobre la Alimentación: cinco años después, y los Foros Mundiales del Agua, reconocen la importancia de la utilización sostenible de los recursos hídricos. Lo que ahora se necesita es la realización de estos compromisos y la determinación de buenas prácticas de gestión y experiencias prácticas para un enfoque integrado del tema del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas. Esta fue la cuestión central de la Conferencia Internacional sobre el Agua en relación con los Alimentos y los Ecosistemas, que la FAO y el Gobierno de los Países Bajos organizaron conjuntamente y celebraron en La Haya del 31 de enero al 5 de febrero de 2005. Los puntos destacados de la Conferencia y su resultado se exponen al Comité de Agricultura en el presente documento. En el 13º período de sesiones de la Comisión de Desarrollo Sostenible, en abril de 2005, y en el Cuarto Foro Mundial del Agua, que tendrá lugar en México en marzo de 2006, se presentará una información similar.

2. Veintiséis ministros y más de 600 delegados de 140 países, así como unas 40 organizaciones internacionales, organizaciones no gubernamentales y organizaciones del sector privado asistieron a la Conferencia sobre el Agua en relación con los Alimentos y los Ecosistemas. Esta reunió a autoridades de alto nivel de diferentes sectores y estimuló a este gran grupo de participantes a aplicar una amplia lista de propuestas en los niveles local y nacional, así como la constitución de asociaciones nacionales e internacionales sobre el tema del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas. De esta forma, la Conferencia contribuyó directamente a la realización de políticas y programas internacionales relacionados con el agua aprobados por la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, la FAO, el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Convenio de Ramsar sobre los Humedales.

3. La Conferencia de La Haya fue precedida por una Conferencia Preparatoria en Addis Abeba (4-6 de noviembre de 2004), organizada con el Gobierno de Etiopía y la Unión Africana, y un foro electrónico de discusión, en diciembre de 2004. El principal objetivo de la Conferencia Preparatoria fue el de transmitir un fuerte mensaje africano a la Conferencia Internacional de La Haya. Ambas conferencias, así como el foro electrónico de discusión, se centraron en los tres temas siguientes:

• Impulso de la aplicación: conocimientos para la acción.
• Una nueva economía del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas.
• Un entorno favorable para la aplicación.

4. La Conferencia de La Haya fue organizada de forma participativa, con un grupo de trabajo para cada uno de los tres temas. Este proceso se vio alimentado por los resultados de la conferencia preparatoria africana y del foro electrónico. Hacia el final de la Conferencia, se celebró una mesa redonda ministerial, en la que los ministros se comprometieron a acelerar el ritmo de la aplicación de los compromisos internacionales, destacando la importancia de integrar, cooperar e invertir en el agua en relación con los alimentos y los ecosistemas. La Conferencia tuvo como resultado la formulación de retos específicos, de buenas prácticas para abordar tales retos y de iniciativas concretas para aplicar las buenas prácticas¹.

Principales resultados

5. La Conferencia estuvo de acuerdo en la importancia de la sensibilización, a varios niveles, acerca de los vínculos entre el agua, los alimentos y los ecosistemas. También destacó la necesidad de elaborar un conocimiento más profundo sobre las relaciones de causa a efecto entre estos tres elementos. También se subrayó la importancia de la difusión del conocimiento disponible a un grupo más amplio de actores, y de introducirlo en los procesos de toma de decisiones y de elaboración de políticas, de forma que se llegue a decisiones mejor informadas. A este respecto, se planteó la posibilidad de crear un mecanismo de intercambio de información sobre el tema.

6. Hubo acuerdo sobre la necesidad de progresar hacia una verdadera valoración del agua mediante un mecanismo que supere su valor económico para tener en cuenta los valores sociales, de equidad y ambientales. Se indicó un proceso general para evolucionar hacia una ordenación de los recursos hídricos de formas que reflejen sus múltiples valores. Dicho proceso consiste en tres etapas generales: sensibilización, valoración de los recursos hídricos y utilización de mecanismos económicos, que los países pueden adoptar según lo consideren conveniente, dependiendo de la situación del momento y de las necesidades. Aunque la última etapa pueda resultar más difícil de aplicar en su totalidad, hubo un acuerdo general sobre la necesidad de fijar un precio para el agua, por ejemplo a través del pago por servicios ambientales, tasas de agua y similares. Sin embargo, al hacer esto, se deben considerar cuidadosamente las cuestiones de equidad y de acceso por parte de los pobres y de los pequeños agricultores, y la clave para ello la constituirán los planteamientos de valoración participativa que involucren a los interesados en todo el proceso.

7. Otro resultado importante de la Conferencia fue el acuerdo sobre la necesidad de armonización de las políticas e instituciones nacionales, de medidas descentralizadoras adecuadas y de legislación apropiada a distintos niveles. Se debería conseguir una utilización equitativa del agua entre la agricultura y los ecosistemas con el fin de garantizar un acceso adecuado al agua, en particular para los pobres. La creación de capacidad y la construcción de alianzas entre el sector público y el privado fueron consideradas elementos importantes en la mejora de la ordenación coordinada del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas en las cuencas y comunidades.

8. En el informe de la Conferencia se señalaron iniciativas específicas destinadas a permitir una ordenación integrada del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas. La adopción de estas iniciativas por los países y las organizaciones presentes en la Conferencia contribuiría a la realización de los objetivos de desarrollo del Milenio (ODM), en particular los ODM 1, 7 y 8. Al mismo tiempo, debe observarse que los ODM no abordan directamente la producción de alimentos y no se ocupan de las necesidades específicas de la ordenación del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas de una manera integrada. Se hace referencia al agua en el contexto del agua potable y del saneamiento, y no se abordan las complejas interrelaciones entre el agua, los alimentos y los ecosistemas.

Seguimiento

9. La aplicación de los acuerdos alcanzados durante la Conferencia exige iniciativas de todos los países y organizaciones participantes. La FAO, en su calidad de co-organizadora de la Conferencia, se esforzará por asistir a los países en este proceso. La FAO desempeñará una función esencial a través de su labor normativa de apoyo a la formulación de políticas y el desarrollo metodológico a nivel nacional; para abordar las cuestiones de valoración de los recursos hídricos y la necesidad de fomentar la capacidad nacional; para fortalecer su trabajo sobre la ordenación transfronteriza del agua y el trabajo de campo en el plano de las cuencas; para sensibilizar sobre la escasez del agua, con respecto tanto a la cantidad como a la calidad de los recursos hídricos; para trabajar por un método participativo de valoración del agua, y para mejorar su ya amplio sistema de bases de datos incluyendo las mejores prácticas. No obstante, la aplicación con éxito del resultado de la Conferencia también requerirá el apoyo activo de los Miembros de la FAO.

10. Aunque el informe de la Conferencia no es vinculante, su adopción por los participantes en la misma hace de la aplicación de las iniciativas que contiene una responsabilidad conjunta de todos los interesados: la FAO, los países participantes, las ONG y las organizaciones internacionales. Una tarea importante para los países participantes consiste en sensibilizar sobre la importancia del agua en relación con los alimentos y los ecosistemas y sus interrelaciones. Ello significa la elevación de esta cuestión al punto más alto de la atención nacional, informando al público en general y planteando este tema en los foros internacionales. Además, los Miembros de la FAO tienen el reto de formular planes nacionales sobre el agua en relación con los alimentos y los ecosistemas; de crear entornos institucionales favorables para la aplicación de los compromisos de la Conferencia, y de incorporar los compromisos en las políticas y estrategias nacionales para el sector del agua, así como para otros sectores pertinentes.

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¹ Véase el sitio web de la Conferencia http://www.fao.org/ag/wfe2005 para mayor información.