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CAPÍTULO 5. ENSEÑANZAS DE LOS PROYECTOS ORGÁNICOS CERTIFICADOS Y NO CERTIFICADOS EN LOS PAÍSES EN VÍAS DE DESARROLLO


¿Por qué agricultura orgánica para la seguridad alimentaria?

Los métodos agrícolas modernos trajeron aparejados aumentos significativos en la productividad: mayor cantidad de cereales y de animales por hectárea, más carne y leche por animal, más producción de alimentos por persona empleada. Se pueden producir grandes cantidades de alimentos si se poseen insumos, conocimientos y habilidad. Sin embargo, la mayoría de los agricultores de los países en vías de desarrollo son pobres y están marginados de los mercados de insumos y productos, y aproximadamente 790 millones de personas aún siguen padeciendo hambre. Como consecuencia, surge un cuestionamiento importante acerca de hasta qué punto los agricultores pueden mejorar la producción doméstica de alimentos por medio de tecnologías e insumos baratos, de bajo costo y que estén disponibles localmente[240]. Otro tema adicional es hasta qué punto lo pueden llevar a cabo con métodos que no empeoren el daño ambiental ya causado por la agricultura.[241].

En oposición a los sistemas modernos, la agricultura orgánica representa un intento conciente de obtener el mejor uso de los recursos naturales locales. El objetivo de la agricultura orgánica, también conocida como agricultura ecológica o biológica, es crear sistemas agrícolas viables tanto ambiental como económicamente, que dependan de recursos renovables locales o derivados de las granjas, e incluyan el manejo de los procesos ecológicos y biológicos. La utilización de insumos externos, sean inorgánicos u orgánicos, se reduce tanto como sea posible. En los últimos años se ha observado un drástico aumento en cuanto a la adopción de la agricultura orgánica por parte de los países industrializados, según se ilustra en el Capítulo 3.

Para la mayoría de los agricultores, lo más importante es que representa un sistema agrícola más que un simple conjunto de tecnologías. El objetivo fundamental es encontrar diversos métodos para lograr que los alimentos crezcan en armonía con la naturaleza. El término orgánico «se comprende mejor si se lo piensa no en relación a los insumos usados, sino como el concepto de la granja como un organismo en el que sus partes componentes - los minerales de la tierra, la materia orgánica, los microorganismos, los insectos, las plantas, los animales y los humanos - interactúan para crear un todo coherente y estable»[242].

Estas interconexiones son importantes. Lady Eve Balfour, fundadora de la Asociación de la Tierra (Soil Association) y autora de The Living Soil[243], consideró la agricultura como un servicio vital para la nación: «Si la salud de la nación depende de la manera en la que crecen los alimentos, entonces, la agricultura deberá considerarse como uno de los servicios para la salud, más aún, el servicio primordial para la salud». Ella, al igual que otros fundadores del movimiento orgánico tales como Albert Howard y Friend Sykes, consideraron que la agricultura está íntimamente ligada con la salud del hombre y del ambiente. Esto debería cambiar nuestra visión acerca de la producción de alimentos: «una vez que la agricultura pasa a ser considerada como un servicio de salud, lo único a tener en cuenta respecto de todo asunto relacionado con la producción de alimentos debería ser: ¿Es necesario para la salud de las personas? Lo que esté relacionado con la economía corriente ocupará un segundo lugar»[244].

La mayoría de los agricultores en los países en desarrollo son pobres y están marginados de los mercados de insumos y productos.

Pruebas recientes de los sistemas orgánicos certificados y no certificados en los países en vías de desarrollo

La Universidad de Essex, en el Reino Unido, concluyó recientemente una auditoría sobre los avances en la sostenibilidad agrícola en 208 proyectos que se llevaron a cabo en 52 países en vías de desarrollo[245]. Estos proyectos incluían tanto los sistemas integrados como los sistemas casi orgánicos (179 casos), al igual que los sistemas orgánicos certificados y no certificados (29 casos). Estos casos orgánicos comprendían una combinación de sistemas de agricultura basados en alimentos, en fibras y en bebidas, en 154 742 granjas familiares de 106 197 ha (Cuadro 1). El área promedio por hogar es pequeña (0,7 ha), dado que muchos proyectos incluyen una producción de vegetales orgánicos en pequeña escala.

Esta auditoría reflejó que se presentan prometedoras mejoras por medio de uno o más de cuatro mecanismos:

Intensificación de un solo componente del sistema agrícola - tal como la intensificación de las huertas hogareñas con vegetales y árboles.

Adición al sistema agrícola de un elemento productivo nuevo - tal como la piscicultura en los arrozales - que hagan crecer la producción de alimentos y de ingresos totales de la granja, pero que no necesariamente afecten la productividad de cereales.

Mejor utilización del capital natural para incrementar la producción agrícola total, en especial del agua (mediante un cronograma de utilización de agua para la cosecha y para el riego) y de la tierra (por medio del rescate de la tierra degradada), que permite el crecimiento de nuevos cultivos adicionales de tierras secas y/o el aumento de la provisión de agua para los cultivos de regadío.

Mejoras en los rendimientos por hectárea de los alimentos básicos mediante la introducción de elementos regenerativos nuevos en los sistemas agrícolas (por ejemplo, el manejo integrado de las plagas) o de variedades de cultivos y razas de animales adecuadas para el medio.

En todos los casos en los que existen datos confiables, se ha demostrado un aumento en la productividad por hectárea de los cultivos de alimentos y el mantenimiento de los rendimientos de fibras. Esto es contrario a la creencia popular respecto de que la agricultura orgánica no puede aumentar la productividad agrícola[246], pese a que aún se desconoce si un cultivo orgánico en transición que brinda mayores beneficios en la escala en la que se presenta en estos proyectos, producirá los alimentos necesarios para cumplir con los requerimientos alimentarios actuales de los países en vías de desarrollo; y sin considerar los requerimientos futuros que vendrán a consecuencia del crecimiento continuo de la población y la adopción de dietas más urbanas y más ricas en carne. Lo que se observa es muy prometedor. Existen también posibilidades adicionales, dado que hay pruebas que indican que la productividad puede aumentar a través del tiempo si se acumulan recursos naturales, sociales y humanos. Estos descubrimientos son similares a los de McNeely y Scherr (2001b) y de Parrot y Marsden (2002) cuyas revisiones recientes sobre ecoagricultura tanto en los países en vías de desarrollo como en los industrializados también indicaron que existen nuevas maneras de alimentar al mundo y salvar la biodiversidad.

El tema de reunir recursos a través del tiempo es importante. Si los sistemas agrícolas poseen bajos recursos naturales, sociales y humanos, ya sea intrínsecamente o como consecuencia de la degradación, entonces, un cambio abrupto hacia prácticas «más sostenibles» que se apoyen en dichos recursos no será exitoso de inmediato - o, al menos, no será tan exitoso como debería ser. En Cuba, por ejemplo, en el año 1994, las huertas orgánicas urbanas produjeron 4 000 toneladas de alimentos. En cinco años, la producción había aumentado a más de 700 000 toneladas, en parte, debido a un aumento en la cantidad de huertas pero también como consecuencia de que la productividad por área creció a un ritmo constante a través del tiempo[247].

El aumento de la productividad a través del tiempo se observó también en los estanques piscícolas de Malawi, cuyo tamaño es de 200-500 m2 y están integrados a la granja de manera tal de reciclar los desechos provenientes de otras empresas agrícolas y hogareñas. En 1990, los rendimientos ascendían a 800 kg/ha, pero aumentaron de manera constante a casi 1 500 kg/ha a lo largo de seis años. Brummet (2000) indica que «a medida de que los agricultores adquieren mayor conocimiento acerca de cómo funciona este nuevo sistema y toman conciencia de su potencial, tienen también mayores posibilidades de evolucionar hacia una mayor productividad y rentabilidad». Es revelador que los rendimientos disminuyeron en aquellos casos en los que no se utilizaron enfoques participativos para trabajar con los agricultores, imponiéndoseles sistemas ya estructurados.

Cada tipo de mejora agroecológica, por sí misma, puede contribuir de manera positiva al aumento en la producción. Sin embargo, otra contribución resulta de las combinaciones. Los métodos reduccionistas de análisis que miden los efectos de una variable por vez mientras las otras se mantienen sin cambiar, conocido como el enfoque ceteris paribus, tienden a no captar ni apreciar los efectos sinérgicos. Esto impide apreciar la sinergia, en donde el todo es mayor que la suma de las partes. De esta manera, la conservación de la tierra y del agua que pone énfasis en la construcción de terrazas y otras medidas físicas para evitar la pérdida de tierra, es mucho menos efectiva que cuando se la combina con métodos biológicos que buscan aumentar la productividad del sistema, tal como los abonos verdes y los cultivos de cobertura.

Cuadro 1: Resumen de la escala y los impactos de los proyectos e iniciativas orgánicas, certificadas y no certificadas

País

Proyecto

Cantidad de granjas familiares

Área bajo agricultura orgánica (ha)

Cambios en la productividad

1. Bolivia

Programa integrado PRODINPO

2 000

1 000

El rendimiento en patatas aumentó de 4 a 10-15 t/ha

2. Brasil

AS-PTA

15 000

60 000

El rendimiento en frijoles aumentó en un 50-100%

3. Brasil

Agroecología en Zona da Mata

215

50

Café - nd

4. Camerún

Café Macefcoop

600

300

Café - nd

5. Chile

Huertas orgánicas de vegetales del CET

10

5

Vegetales 20-30 kg por mes

6. Cuba

Huertas orgánicas urbanas

26 000

8 000

El total de la producción aumentó de 4 000 a 700 000 t/año

7. República Dominicana

Proyecto Plan Sierra

2 000

1 000

Maíz - nd

8. Egipto

SEKEM Algodón biodinámico

150

2 000

El algodón de 2,25 a 3,0 t/ha

9. Etiopía

FAO Libre del hambre/ Freedom from Hunger

2 300

2 150

Los rendimientos de batatas aumentaron de 6 hasta 30 t/ha

10. Etiopía

Programa de desarrollo rural

12 500

5 000

Los rendimientos de cereales se


integrado Cheha



incrementaron en un 60%

11. Guatemala

San José Poacil ADECCA

1 450

1 260

Cultivos mixtos - nd

12. India

SPEECH, Tamil Nadu

500

409

Nuevos cultivos de arroz en la estación seca

13. Kenia

Centro de Agricultura de Manor House

70 000

7 000

Los rendimientos del maíz de 2,25 hasta 9 t/ha; cultivos nuevos de vegetales

14. Kenia

Programa C-MAD

500

1 000

El maíz de 2 t/ha hasta 4 t/ha

15. Kenia

Educación Mumias para el Proyecto de Empoderamiento

2 069

217

Los rendimientos de frijoles/maníes desde 300 a 600 kg/ha

16. Kenia

Manejo Push-pull de la plaga

300

150

Rendimientos de maíz 60%

17. Lesotho

Sistemas agrícolas Machobane

2 000

1 000

La totalidad de la productividad del sistema mejorada

18. Malawi

Acuicultura en pequeña escala

200

10

Nuevos cultivos de peces

19. México

Café orgánico ISMAM

1 200

1 200

Café - nd

20. México

Comercio justo y café orgánico de UCIRI

4 800

5 000

Los rendimientos de café de 300-600 kg/ha hasta 600-1 200 kg/ha

21. Nepal

Bienestar y desarrollo de la comunidad aumentaron (nd), vegetales nuevos

600

250

Los rendimientos de maíz y de arroz

22. Nepal

Programa de permacultura Jajarkot

580

350

Los rendimientos de arroz, desde 1,8 a 2,4 t/ha; el maíz desde 1,2 a 1,6 t/ha

23. Pakistán

Grupo de mejoramiento de las mujeres rurales de Sindh

5 000

2 500

Los rendimientos de mango de 7,5 a 22,5 t/ha; los cítricos de un 12 hasta 30 t/ha

24. Senegal

Centro de Investigación de Agricultura Regenerativa de Rodale

2 000

2 000

Los rendimientos de mijo/sorgo de 0,34 a 0,6-1,0 t/ha

25. Senegal

Algodón orgánico ENDA

523

233

Rendimiento de algodón - sin cambios a 300 kg/ha

26. Tanzania

Algodón orgánico GTZ

134

778

Rendimiento de algodón - sin cambios a 660 kg/ha

27. Zimbabwe

Proyecto de Seguridad Alimentaria Chivi

500

600

Rendimientos de sorgo/mijo se duplicaron; cultivos vegetales nuevos

28. Zimbabwe

Silveira House

1 211

735

Cultivos vegetales nuevos

29. Zimbabwe

Algodón del valle Zambezi

400

2 000

Algodón - nd


TOTAL

154 742

106 197


(nd = no existen datos confirmados sobre rendimientos).

Los sistemas de agricultura son más productivos cuando se incrementa el capital humano, especialmente cuando aumenta la capacidad de los agricultores para innovar y adaptar los sistemas de sus granjas para obtener resultados sostenibles[248]. La agricultura sostenible no consiste en un conjunto de tecnologías definido concretamente ni tampoco constituye un simple modelo o paquete para ser aplicado en forma amplia o en un tiempo determinado, sino que requiere que se lo considere como un proceso de aprendizaje social[249]. La falta de información sobre agroecología y la ausencia de las habilidades necesarias para manejar granjas complejas constituyen las barreras más importantes en relación con la adopción de la agricultura sostenible.

Los sistemas de agricultura son más productivos cuando se incrementa el capital humano, especialmente cuando aumenta la capacidad de los agricultores para innovar y adaptar los sistemas de sus granjas para obtener resultados sostenibles.

Se tiene menos conocimientos acerca de las tecnologías orgánicas y de conservación de los recursos que respecto de la utilización de insumos externos en los sistemas modernizados. Como consecuencia, se puede observar de manera clara que el proceso mediante el cual los agricultores aprenden sobre las alternativas tecnológicas es crucial. Si se les impone por la fuerza, sólo lo adoptarán durante un lapso determinado. Si, por el contrario, el proceso es participativo y tiende a mejorar la capacidad de los agricultores para aprender sobre la granja y sus recursos, entonces se habrán sentado las bases para el rediseño y la innovación continua. Tal como lo mencionaron Bunch y López (1996) en relación con la agricultura Centroamericana, «lo que se necesita hacer sostenible es el proceso social de innovación en sí mismo».

Los resultados en alimentos no constituyen las únicas medidas del éxito. Una selección de los efectos secundarios positivos de estos proyectos y de estas iniciativas incluyen:

Aumento del capital natural, que incluye un incremento en la retención del agua en las tierras; mejoras en la capa freática (con más cantidad de agua potable en la estación seca); una erosión reducida de la tierra combinada con un aumento de la presencia de materia orgánica en las tierras, que a su vez origina un mejor secuestro de carbono y un aumento en la agrobiodiversidad.

Mejoras en el capital social, - que incluye no sólo una mayor cantidad de organizaciones sociales sino también que éstas son más fuertes en el ámbito local - nuevas normas y disposiciones que rijan el manejo colectivo de los recursos naturales y una mejor conexión con las instituciones externas que fijan las políticas agrícolas.

Aumentos en el capital humano, que incluye una mayor capacidad local para llevar a cabo experimentos y para resolver problemas; una incidencia reducida de la malaria en las zonas en las que se practica la piscicultura en los arrozales; un aumento de la autoestima en grupos anteriormente marginados, una mejora en la condición de las mujeres; una mejora en la salud y en la nutrición de los niños - en especial, debido a la mayor cantidad de alimentos en las estaciones secas - una migración inversa y mayores oportunidades locales de trabajo.

Veintinueve relatos de estudios de casos

Existe una amplia gama de métodos y tecnologías que se utilizan en estos proyectos de transición a la agricultura orgánica. Tal como se indicó más arriba, el tema clave es la integración de dichos métodos y tecnologías para producir sistemas de agricultura efectivos, más que sólo la modificación de simples componentes. A continuación, se presenta el relato de estos casos de agricultura orgánica, seguidos de una sección con las enseñanzas que dejaron.

Bolivia: Programa de Desarrollo Integrado, Vecinos Mundiales, Norte de Potosí[250]

Desde la década del 80, el Programa Integrado de Desarrollo del Norte de Potosí, (PRODINPO) de los Vecinos Mundiales, ha llevado a cabo en las altas montañas de Bolivia (2 800-4 000 metros sobre el nivel del mar), una investigación sobre la manera de mejorar la productividad de la patatas. Los suelos arenosos francos sufren una profunda erosión, y la alta densidad de población ha forzado el cultivo de laderas de hasta 50 grados. Los altos índices de analfabetismo, la falta de investigación agrícola y de extensión junto con una profunda desconfianza local, representan un gran desafío para este proyecto. Además, la tasa de mortalidad infantil de la zona fue de 200/1 000; la de mortalidad materna de 100/1 000, y el promedio de vida de 36 años.

Al inicio, el proyecto buscó mejorar la producción del ganado y del maíz. Después de los fracasos, los agricultores solicitaron que se enfocara en las patatas.. Su interés estaba centrado en probar variedades nuevas que pudieran colaborar para mejorar la seguridad alimentaria mediante la utilización de prácticas agrícolas tradicionales. El rendimiento de los cultivos varía drásticamente de una ladera a otra y de una quebrada a otra, de tal manera que la posibilidad de aprender acerca de esta variabilidad era la parte central de este proyecto, que se enfocó en que los agricultores experimentaran con tecnologías nuevas y las adaptaran a sus circunstancias particulares, basándose en su propia capacidad. Las comunidades eligieron a sus propios promotores agrícolas para que las enseñanzas se difundieran así como también para que fueran el medio para un mejor entrenamiento.

Los agricultores evaluaron muchas variedades de patatas en los ensayos en granja, adoptaron espacios uniformes y cultivos profundos, experimentaron abonos verdes (en especial, lupinos) y abonos animales, y experimentaron con variaciones en el tamaño de la semilla. Unos 2 000 agricultores mejoraron la producción de patatas de 4 000 k/ha a 10-15 000 kg/ha. Un ejemplo de cómo el proyecto se alejó de las disposiciones que rigen las prácticas agrícolas se centra en la adopción de lupinos entre los cultivos de rotación. La propagación de mucuna en América Central al igual que su efecto extraordinario en el rendimiento del maíz, hizo que Vecinos Mundiales enviara 13 promotores agrícolas de Bolivia y Perú a Honduras. La Mucuna no crece por encima de los 2 800 metros sobre el nivel del mar, y el cultivo hubiera sido destruido como consecuencia del proceso de la formación de los montículos de tierra alrededor de las papas hacia la época de cosecha. Sin embargo, los lupinos se identificaron como una alternativa - pueden fijar 200 kg N/ha/año, y benefician las tierras cuando se los incorpora como abono verde. Los agricultores al principio eran incrédulos pero su asociación de larga data con los beneficios de la experimentación los persuadió y probaron. Los rendimientos de patata se incrementaron en forma inmediata de 1 780 kg/ha a 8 500 kg/ha con los lupinos, y aumentaron a 13 000 kg/ha cuando también se incorporó el abono de ovejas. El desembolso por los lupinos asciende a $EE.UU. 18/ha en comparación con $EE.UU. 170/ha para una cantidad equivalente de fertilizante inorgánico.

El proyecto produjo muchos beneficios sociales y mejoró la seguridad alimenticia y la salud de los hogares. Una vez que se aumentaron los rendimientos, muchos agricultores, en realidad, redujeron el tamaño del campo, algunas veces hasta casi un 90 por ciento, con el fin de focalizar sus esfuerzos. La reducción en el tamaño de los campos trajo aparejados grandes beneficios para las mujeres, dado que se les facilita continuar cultivando mientras los hombres migran a las ciudades en búsqueda de trabajo.

Una vez que se aumentaron los rendimientos, muchos agricultores, en realidad, redujeron el tamaño del campo, algunas veces hasta casi un 90 por ciento, con el fin de focalizar sus esfuerzos.

Brasil: consultores de proyectos de agricultura alternativa[251]

La Assesoria e Serivicios a Projectos de Agricultura Alternativa (AS-PTA) es una ONG sin fines de lucro que apunta a promover el desarrollo sostenible para la agricultura brasilera mediante la ayuda para construir un modelo de desarrollo de agricultura alternativa basado en la agroecología y con el apoyo de una comunidad agrícola, constituida por pequeños y medianos productores. AS-PTA fue fundada en 1989 y trabaja directamente con agricultores en una modalidad participativa investigando y desarrollando tecnologías y métodos adecuados de agricultura sostenible. El modelo de desarrollo agrícola de AS-PTA se basa en tres aspectos fundamentales:

el fortalecimiento de la organización de los pequeños agricultores;
el desarrollo de un conocimiento práctico y científico de agroecología, y
la participación de base.

Los proyectos de demostración alientan a los agricultores a utilizar técnicas tales como abonos verdes, diversificación de los cultivos de vegetales, acolchado y preparación de compost, mínima labranza del suelo, cultivo en curvas de nivel y varios métodos de conservación de la tierra y del agua. AS-PTA desarrolló una red nacional de ONG, provee publicaciones y brinda servicios de consultoría, realiza proyectos de demostración y apoya programas para colaborar con la transición hacia una agricultura más sostenible en Brasil.

Brasil: sistemas de cultivo agroecológicos en Zona da Mata[252]

Este proyecto se lleva a cabo con alrededor de 200 agricultores que se encuentren en las proximidades de un área de conservación determinada. Una zona de aislamiento que incorporó cinco municipalidades alrededor de un parque impulsó a los agricultores a tomar conciencia del valor local y nacional de los recursos. Los agricultores rediseñaron diversos sistemas agrícolas mediante la utilización de una serie de métodos participativos con el fin de obtener el mayor beneficio de las relaciones agroecológicas para el cultivo de café, poniendo énfasis, en particular, en los abonos verdes, en la conservación de la tierra y en las prácticas agroforestales. Se han incorporado cinco sindicatos de agricultores a la asociación regional y centran su atención en el hecho de agregar valor a través del procesamiento de los granos de café y de las ventas directas al mercado. Estos grupos también ayudaron a mejorar la provisión de forraje para los agricultores particulares.

Camerún: café orgánico Macefcoop[253]

Macefcoop es una organización cooperativa de agricultores de Mamfe, situada cerca de la frontera nigeriana en Camerún, que centra la atención en el procesamiento y en la comercialización del café orgánico. Hasta el año 1992, el gobierno reglamentó toda la comercialización del café y el cacao y el Consejo de Comercialización lo monopolizó. Después del año 1992, las cooperativas y las empresas privadas estaban en condiciones de comercializar sus propios productos pero los agricultores notaron que muchas organizaciones carecían de experiencia y conocimientos sobre temas de producción y, como consecuencia, muchos agricultores comenzaron a organizarse por sí solos. Macefcoop comenzó de esta manera en el año 1994 y para el año 1999 ya contaba con más de 600 miembros. La tarea no fue sencilla; la falta de capital de trabajo, de camiones que recogieran los granos de café en la entrada de la granja, de plantas procesadoras y las comunicaciones inadecuadas respecto del comercio equitativo y otros exportadores demostraban que Macefcoop necesitaba apoyo. Sin embargo, los agricultores querían lograr exportar su propio café y estaban entusiasmados en producir orgánicamente, dado que no utilizaban plaguicidas ni fertilizantes químicos. Macefcoop estuvo en condiciones de superar estos problemas y los obstáculos frente a la certificación orgánica de UE con el apoyo de los compradores y de una ONG europea. En junio del año 1999, se reconoció formalmente el café de Macefcoop como orgánico y salieron del Puerto de Douala las primeras 600 bolsitas de café robusta orgánico, el primero de África en ser etiquetado como orgánico y de comercio justo.

Chile: huertas orgánicas de vegetales del CET[254]

En Chile, CET constituyó una de las primeras ONG que combinó las mejoras tecnológicas con la organización de la comunidad y, desde el año 1980, trabajó en un programa de desarrollo rural enfocado a ayudar a los campesinos a lograr, durante todo el año, la autosuficiencia en la provisión de alimentos al mismo tiempo que reconstruyen la capacidad productiva de sus pequeñas fincas. El enfoque fue el de establecer varias granjas modelo de media hectárea, que tuvieran una secuencia rotacional temporal y especial de forrajes y de cultivos en hileras, vegetales, bosques y árboles frutales, y de animales. La mayoría de los vegetales crecen en canteros elevados con mucho compost situados en la sección del huerto. Cada una de ellas puede producir hasta 83 kg de vegetales por mes, hecho que se considera una mejora significativa en relación con los 20-30 kg que se producían en los anteriores jardines con menos manejo mantenidos alrededor de los hogares. Los 200 metros cuadrados restantes que se encuentran alrededor de la casa se utilizan como bosque frutal y cría de animales (vacas, gallinas, conejos y colmenas mejoradas). A través de los años, se observó una mejora en la fertilidad de la tierra de la granja demostrativa original, no registrándose la aparición de plagas serias ni de problemas de enfermedades. Los árboles frutales de la huerta y de las hileras de cercos, al igual que de los cultivos de forrajeras, son altamente productivos. La producción de leche y de huevos excedió ampliamente aquélla correspondiente a las granjas convencionales. En el caso de que todo lo producido en la granja se vendiera a precios mayoristas, la familia podría generar un ingreso neto mensual una vez y media mayor que el salario mínimo legal en Chile, dedicándole a la granja sólo unas pocas horas por semana.

La mayoría de los vegetales crecen en canteros elevados con mucho compost situados en la sección del huerto. Cada una de ellas puede producir hasta 83 kg de vegetales por mes.

Cuba: huertas urbanas orgánicas[255]

Dos corrientes importantes de agricultura orgánica emergieron en Cuba. En primer lugar, las huertas orgánicas intensivas se desarrollaron en las áreas urbanas: las huertas para autoprovisión en colegios y lugares de trabajo (autoconsumos), las huertas de camas elevadas (organopónicos) y las huertas intensivas comunitarias (huertos intensivos). En la actualidad, existen más de 7 000 huertas urbanas y la productividad aumentó de 1,5 kg/m2 a casi 20 kg/m2. En segundo lugar, la agricultura sostenible se promueve en las zonas rurales, donde el impacto de la nueva política ha sido notable. Se establecieron más de 200 Centros para la Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos (CRE) destinados a la fabricación artesanal de bioplaguicidas. Éstos producen, por año, 1 300 toneladas de Bacillus Thuringensis (Bt) para el control de lepidóptera, casi 800 toneladas de Beaveria para el control de los escarabajos, 200 toneladas de Verticillium para el control de la mosca blanca y 2 800 toneladas de Tricoderma, un enemigo natural. Muchos métodos de control biológicos demuestran ser más eficaces que los plaguicidas. Existen 170 centros de vermicompost, cuya producción anual aumentó de 3 a 93 000 toneladas La rotación de los cultivos, el abono verde, los cultivos intercalados y la conservación de la tierra se incorporaron todos a la agricultura de policultivos.

Las huertas orgánicas intensivas se desarrollaron en las áreas urbanas: las huertas para autoprovisión en colegios y lugares de trabajo (autoconsumos), las huertas de camas elevadas (organopónicos) y las huertas intensivas comunitarias (huertos intensivos).

El Grupo de Agricultura Orgánica (GAO), surgido de la Asociación Cubana de Agricultura Orgánica (ACAO) constituida en el año 1993, estuvo a la vanguardia de la transición hacia la agricultura sostenible. GAO agrupa a los agricultores, a los administradores de campo, a los especialistas, a los investigadores y a los funcionarios gubernamentales con el fin de colaborar en la divulgación del concepto de que las alternativas que se basan en los sistemas orgánicos pueden producir alimento suficiente para todos los cubanos. A pesar de que se observó un gran progreso, aún existen muchas dificultades entre las que se encuentra la necesidad de demostrar el éxito del sistema alternativo a muchos escépticos: agricultores, científicos y los responsables de la formulación de políticas, y también desarrollar nuevas tecnologías lo como para enfrentar los problemas emergentes, coordinar que todos trabajen juntos, descentralizar la toma de decisiones a nivel del agricultor, y lograr una reforma agraria adecuada con el fin de impulsar y estimular la inversión en la formación de recursos naturales.

República Dominicana: Plan Sierra de conservación de la tierra[256]

El proyecto de ecodesarrollo denominado Plan Sierra se propuso desafiar la relación que existe entre la pobreza rural y la degradación ambiental en la zona de la cordillera central de la República Dominicana. La estrategia consistió en desarrollar sistemas de producción alternativos frente a los métodos erosivos que utilizaban los agricultores locales. El control de la erosión en la Sierra no sólo es importante para lograr una mejor calidad de vida para estos agricultores sino que también representa tanto un potencial hidroeléctrico como un área adicional de 50 000 hectáreas de tierra de regadío en el curso inferior del valle del Cibao. El primer objetivo del Plan Sierra fue el de desarrollar y difundir los sistemas de producción que proporcionaban rendimientos sostenibles sin degradar la tierra y, de esta manera, se aseguraba la productividad de los agricultores y el autoconsumo. Más específicamente, el objetivo era permitir a los agricultores que utilizaran de manera más eficiente recursos locales tales como la humedad de la tierra y los nutrientes, los residuos de las cosechas y de los animales, la vegetación natural, la diversidad genética y el trabajo familiar. De esta manera, sería factible satisfacer las necesidades básicas de la familia, de alimentos, de ingresos, de leña, de materiales para la construcción y de plantas medicinales. Una amplia gama de métodos agrícolas se integran de diversas maneras:

prácticas de conservación de la tierra, tales como la construcción de terrazas, la labranza mínima de la tierra, los cultivos en corredores, los cercos vivos, y los acolchados;

la utilización de árboles y arbustos de leguminosas plantados en corredores, para la fijación de nitrógeno, la producción de biomasa, el abono verde, la producción de forraje y la captura de sedimento;

el uso de fertilizantes orgánicos basados en la óptima utilización de los residuos de plantas y de animales;

las combinaciones adecuadas de policultivos y/o de rotaciones plantadas en curvas de nivel y también la búsqueda de los calendarios de plantación; y densidad de cultivos óptimos; y

la conservación y almacenamiento de agua mediante técnicas de acolchado y cosecha de agua.

Los animales, los cultivos, los árboles y/o los arbustos están integrados con el fin de obtener múltiples beneficios tales como la protección de la tierra, la producción diversificada de alimentos, la leña y la mejora en la fertilidad de la tierra.

Los animales, los cultivos, los árboles y/o los arbustos están integrados con el fin de obtener múltiples beneficios tales como la protección de la tierra, la producción diversificada de alimentos, la leña y la mejora en la fertilidad de la tierra.

Egipto: algodón biodinámico SEKEM[257]

En el año 1977, la granja SEKEM comenzó el movimiento biodinámico en Egipto con el propósito de integrar el desarrollo rural con la agricultura biodinámica y contrató a la Asociación Biodinámica Egipcia (Egyptian BioDynamic Association, EBDA) para que cultivara vegetales, hierbas y otros productos para SEKEM. Después de haber tenido éxito con otros cultivos, SEKEM comenzó a aplicar métodos biodinámicos en el algodón en colaboración con científicos, agricultores, consultores y consumidores. Además, en el año 1980, el gobierno egipcio lanzó un programa de Manejo Integrado de Plagas (MIP) para el algodón con el fin de reducir la cantidad de plaguicidas que se utilizaban. En Egipto, la mayor parte del algodón lo cultivan pequeños agricultores, en rotación con otros cultivos. El principal incentivo para que los agricultores produzcan orgánicamente lo constituyen los precios más altos. El éxito obtenido en Egipto en la producción de algodón biodinámico ha sido el resultado de la colaboración entre SEKEM, EBDA, Cotton People Organic, la Unión de Agricultores y Exportadores de Agricultura Biodinámica y Orgánica y el grupo alemán Natura.

Hay un mayor contacto directo entre los agricultores y los compradores, lo que trae aparejado un mayor entendimiento y una mejor eficiencia.

La transferencia del conocimiento y de la experiencia «know-how» orgánicos se lleva a cabo principalmente en el campo durante visitas de grupo y de inspección, y EBDA brinda entrenamiento, consejos y algunos insumos específicos a los agricultores. Los agricultores orgánicos tienden a diversificar el sistema de sus granjas y utilizar técnicas tales como la preparación de compost, los abonos verdes y el manejo biológico de las plagas. Los rendimientos en algodón aumentaron en un 30 por ciento en comparación con los obtenidos en el algodón cultivado de manera convencional (existe una disminución en los rendimientos inmediatamente después de la conversión, pero posteriormente aumentan a 3 000 kg/ha) y hay un mayor contacto directo entre los agricultores y los compradores, lo que trae aparejado un mayor entendimiento y una mejor eficiencia. Los trabajadores de campo y los aldeanos no no se exponen más a plaguicidas tóxicos y los riesgos asociados con la salud; hay menor contaminación de agua y existe una menor lixiviación de nutrientes de la tierra que dió como resultado una menor eutroficación de los cursos de agua.

Hay un mayor contacto directo entre los agricultores y los compradores, lo que trae aparejado un mayor entendimiento y una mejor eficiencia.

Etiopía: FAO Libre del hambre[258]

El proyecto «Libre del hambre (Freedom from Hunger)» de la FAO lanzado al sur de Etiopía involucra a los agricultores con el fin de aumentar la seguridad alimentaria del área. Antes de que comenzara el proyecto, la mayoría de las familias de agricultores padecían hambre por lo menos durante tres meses al año, pero la introducción de la batata con su característica de maduración temprana, permitió tres cosechas anuales con una producción que ascendió a los 30 000-40 000 kg/ha, de manera tal que hoy se satisfacen los requerimientos calóricos. En la actualidad, mediante la utilización de métodos de conservación de la tierra y la aplicación de compost, se logró que tierras anteriormente degradadas se repusieran abasteciéndose de nutrientes. De la misma manera, se están llevando a cabo cultivos combinados y se está utilizando el Neem para el control de plagas reemplazando a los plaguicidas químicos. Durante la sequía que tuvo lugar en el año 1984-5, los agricultores migraron del área pero la difusión de la extensión y experimentación utilizando el método de campesino a campesino dió como resultado que haya agricultores más capacitados para enfrentar la sequía y otras desventajas. Muchos de los que habían migrado comenzaron a asentarse nuevamente en las áreas involucradas en el proyecto. Los ingresos familiares del agricultor se duplicaron desde que se puso en marcha el proyecto.

El método de campesino a campesino dió como resultado que haya agricultores más capacitados para enfrentar la sequía y otras desventajas.

Etiopía: Proyecto de desarrollo rural integrado Cheha[259]

Éste es un ejemplo de un proyecto integrado y de relativa pequeña escala que produce un significativo impacto en la seguridad alimentaria regional. Ha estado trabajando en el sudoeste de Etiopía desde la sequía del año 1984 e introdujo nuevas variedades de cultivos (vegetales) y de árboles (frutales y forestales), promovió los fertilizantes orgánicos y los productos botánicos para el control de plagas, e introdujo también servicios veterinarios. Unas 12 500 granjas familiares que cubren aproximadamente 5 000 ha adoptaron la agricultura sostenible, originando una mejora del 70 por ciento en los niveles de nutrición totales, y un 60 por ciento de aumento en el rendimiento de los cultivos dentro del área destinada al proyecto. Algunos agricultores comenzaron a vender los superávit de su producción en los mercados locales, obteniendo de esta manera un mayor ingreso, tan necesario para sus familias. Como consecuencia, un área que dependía totalmente de una ayuda alimentaria de emergencia, pasó a ser autosuficiente en cuanto a la producción de alimentos para el autoconsumo y, además, obtuvo superávit. Sin embargo, la promesa concreta del programa radica en el hecho de que los agricultores reproducen actividades por iniciativa propia (incluyendo algunas fuera del alcance del proyecto), donde con anterioridad se los ha tenido que estimular para que participaran mediante pagos de alimento a cambio de trabajo.

Como consecuencia, un área que dependía totalmente de una ayuda alimentaria de emergencia, pasó a ser autosuficiente en cuanto a la producción de alimentos para el autoconsumo y, además, obtuvo superávit.

Guatemala: San José Poacil ADECCA[260]

ADECCA constituye una organización comunitaria de base cuyos orígenes se remontan a la villa de Hacienda Vieja, situada a más de cien kilómetros de la Ciudad de Guatemala. ADECCA surgió de asociaciones de comunidades que contaban con una cantidad de ONG que brindaban asistencia humanitaria y auxilio para emergencias (después de disturbios sociales que tuvieron lugar durante varios años) y se constituyó en el año 1987 con el objetivo de lograr el desarrollo planificado del área. El director de ADECCA, Santiago Chutá Chan dijo: «quisimos demostrar al mundo que, cuando se les permite, los campesinos pobres tienen la capacidad de identificar sus propios problemas y sus propias necesidades, y resolverlos». Los programas de ADECCA abarcan cuatro áreas: salud, agricultura, ganadería y artesanías y cultura. ADECCA también proporciona técnicas participativas de entrenamiento agrícola tales como métodos de conservación de la tierra y el agua, plantación de árboles, preparación de compost. A partir de 1994, comenzó a promover la agricultura orgánica debido a sus costos más bajos y a los beneficios para el ambiente y la salud. ADECCA lanzó planes de créditos renovables manejados por la comunidad, que otorga préstamos destinados al ganado y a las semillas, que se pueden devolver al año siguiente. En la actualidad, ADECCA trabaja con 22 comunidades y, como consecuencia de sus actividades, aumentó la producción agrícola, se cría más ganado y tanto la migración estacional como el nivel de endeudamiento de los agricultores locales frente a las empresas privadas y a las plantaciones costeras disminuyeron. Además, las comunidades se dieron cuenta del valor del éxito que obtuvieron al trabajar conjuntamente para resolver los problemas.

«Quisimos demostrar al mundo que, cuando se les permite, los campesinos pobres tienen la capacidad de identificar sus propios problemas y sus propias necesidades, y resolverlos».

India: la Sociedad para la educación del pueblo y para el cambio económico, Tamil Nadu[261]

Desde el año 1986, la Sociedad para la educación del pueblo y para el cambio económico (SPEECH) trabajó en el distrito de Kamarajar de Tamil Nadu y colaboró en la formación y fortalecimiento de grupos y de instituciones locales en 45 villas. La región se conoce por las graves sequías, los monzones erráticos, la falta de servicios y la marcada división socioeconómica y cultural. Los grupos de la villa, o sanghas, adoptaron una variedad de enfoques de agricultura sostenible con el fin de utilizar mejor los recursos existentes. La captación de agua fue particularmente efectiva dado que no sólo restituye a la producción tierras que se habían abandonado, sino que también implica que una cantidad suficiente de agua se puede guardar para un cultivo adicional de arroz en la pequeña cantidad de tierra de regadío. Se introdujeron las vacas lecheras, lo que benefició a mujeres y a niños. Los rendimientos de sorgo y de mijo se duplicaron y se están plantando cultivos extra y árboles frutales y de madera para la construcción. A medida de que los sanghas adquirieron más confianza y seguridad, comenzaron a desarrollar nuevas actividades tales como brindar asistencia sanitaria, construir caminos y manejar planes de ahorro y de créditos. Se eligen representantes para un Consejo de Gobierno Grupal, una sociedad independiente que provee una plataforma para los grupos locales con el fin de discutir y enfrentar los problemas que surgen.

Kenia: el Centro agrícola de Manor House, Kitale[262]

El Centro agrícola de Manor House se fundó en el año 1984 como consecuencia de una sequía que duró tres años. El complejo del Centro de entrenamiento y de investigación incluye la demostración de jardines y de instalaciones para ganado que brindan un modelo de trabajo en sistemas agrícolas biointensivos para los pasantes, visitantes y miembros de las comunidades locales. El Centro proporciona entrenamiento práctico a gente joven, agricultores y funcionarios de las agencias gubernamentales y de las ONG, al mismo tiempo que conduce investigaciones adaptativas. En el Centro se entrenaron unos 6 000 agricultores en 185 grupos comunales, de los cuales 3 000 ya adoptaron la agricultura biointensiva. El principal impacto se produjo en la producción de vegetales. Muchos duplicaron sus rendimientos mediante los sistemas de doble cavado y de preparación de compost, utilizando métodos locales de control de plagas y de enfermedades (tales como la plantación de girasoles para atraer a los predadores, extractos de plantas locales para controlar al barrenador del maíz y los cultivos intercalados para reducir las plagas del tomate). Se registró un gran ahorro en plaguicidas dado que los agricultores disminuyeron su utilización. Los agricultores descubrieron que el fósforo se limita después de períodos de seis años de preparación de compost, de manera tal que se agregó polvo de hueso al abono. El Centro impulsa y estimula a estos grupos de agricultores para que entrenen a otros agricultores vecinos.

Muchos duplicaron sus rendimientos mediante los sistemas de doble cavado y de preparación de compost, utilizando métodos locales de control de plagas y de enfermedades.

Kenia: Programa de movilización de la comunidad contra la desertización[263]

El Programa de movilización de la comunidad contra la desertización (C-MAD) se lleva a cabo en una zona «de bajo potencial» del sur de Nyanza, Kenia occidental. El área afectada por el programa tiene sólo una estación lluviosa, y la tierra se degrada seriamente debido a la gran cantidad de cultivos para pastoreo y a la deforestación. El proyecto comenzó como un esfuerzo para plantar árboles, que se expandió para incorporar la conservación de la tierra, la fertilidad del suelo y los métodos de agricultura orgánica. En la actualidad, focaliza su atención en todo lo que se relacione con las mejoras agrícolas. Los procesos sociales incorporan métodos participativos de aprendizaje, forman grupos de investigación basados en los agricultores, fortaleciendo los grupos de la comunidad y de la villa y colaborando con la investigación gubernamental y no gubernamental y las agencias de extensión. Trabaja con aproximadamente 500 agricultores en unas 1 000 hectáreas, y los rendimientos de maíz se incrementaron de 2 a 4 t/ha. Los ingresos también aumentaron para muchos agricultores después de cultivar frutas (cítricos, naranjas, mangos, ananás). El proyecto originó un aumento en el empleo local como consecuencia de la creciente demanda de mano de obra en las granjas. El cultivo de vegetales en los jardines domésticos también mejoró la seguridad alimentaria. El proyecto también redujo la mortalidad infantil y mejoró las condiciones sanitarias y nutricionales.

El proyecto originó un aumento en el empleo local como consecuencia de la creciente demanda de mano de obra en las granjas.

Kenia: Proyecto Mumias de educación para el empoderamiento[264]

El Proyecto Mumias de educación para el empoderamiento (MEFE) se lleva a cabo en unos 2 070 hogares de Kakamega, y en un área de Kenia occidental que se caracteriza por los altos índices de desnutrición rural, mortalidad infantil y analfabetismo. Antes del proyecto, 1 de cada 4 personas padecía una grave inseguridad alimentaria, existiendo hogares que sólo tenían asegurados los alimentos entre 1-3 meses por año. El proyecto utiliza un proceso de aprendizaje estructurado (REFLECT) para estimular a los grupos a que analicen de manera crítica su propio entorno y busquen soluciones nuevas que se basen en los recursos localmente disponibles. El proyecto utiliza una serie de métodos de manejo biológico de plagas junto con legumbres, cultivos de cobertura y abonos verdes para mejorar la fertilidad de la tierra. Se incorporaron a las granjas canteros elevados para aumentar la producción de los vegetales.

Como resultado, los rendimientos de los frijoles y de los maníes se duplicaron de 300 a 600 kg/ha. El proyecto demostró que se observó una mejora en la seguridad alimentaria de 3-6 meses para un hogar típico. El aumento en el consumo de proteínas benefició particularmente la salud de los niños.

Kenia: «Vutu-sukumu» Manejo de plagas en los sistemas de pequeños agricultores[265]

La tarea de ICIPE está focalizada en el diseño de una tecnología de bajo costo para el control de plagas. Trabaja en estrecha colaboración con agricultores con el propósito de probar y adaptar tecnologías. También está produciendo efectos sinérgicos inesperados por medio de la manipulación de los sistemas agrícolas y de los paradigmas que los definen. Una de las actividades es la de investigar nuevos enfoques de manejo del hábitat a efectos de eliminar el barrenador del cereal y las poblaciones de Striga en el maíz y en el sorgo. Esta proyecto está desarrollando nuevas estrategias «de empuja y tira» para repeler los barrenadores de los cultivos de cereales y atraerlos a los cultivos intercalados o a las barreras de forrajeras. Se observó una extraordinaria multifuncionalidad en una variedad de forrajeras y legumbres en los sistemas de cereales. La estrategia consiste en atrapar las plagas en plantas cazadoras muy sensibles (efecto «tira») y hacerlas alejarse de los cultivos mediante el uso de intercultivos repelentes (efecto «empuja»):

Las forrajeras, Pennisetum purpureum (pasto Napier) y Sorghum vulgare sudanense (sorgo del Sudán) atraen mayor cantidad de oviposiciones por los barrenadores que el maíz cultivado.

Las plantas forrajeras que no son huésped, Melinis minutiflora (pasto gordura) y Desmodium uncinatum (hoja plateada) repelen los barrenadores hembra (Chilo spp).

Los cultivos intercalados con pastos gordura (Melinis minutiflora) aumentan el parasitismo, en particular, como consecuencia del parasitoide larval, Cotesia sesamiae, y del parasitoide de la pupa Dentichasmis busseolae. Melinis contiene diversos componentes fisiológicamente activos. Dos de ellos inhiben la oviposición (puesta de huevos) en Chilo, aún en concentraciones bajas.

Los pastos gordura también emiten una sustancia química (E-4,8-dimetil-1,3,7-nonatriene), que reúne los enemigos naturales de los barrenadores.

El pasto Napier también posee su propio mecanismo de defensa contra los barrenadores de los cultivos: cuando las larvas ingresan en el tallo, en el pecíolo o en el pedúnculo, la planta produce una sustancia de textura gomosa que mata la plaga.

El Sudán grass también incrementa la eficiencia de los enemigos naturales: el índice de parasitismo de las larvas de los barrenadores manchados, Chilo partellus se triplicó, de 4,8 por ciento a 18,9 por ciento, cuando se plantó el pasto alrededor del maíz en un campo y, del 0,5 por ciento al 6,2 por ciento en Busseola fusca, otra plaga importante.

ICIPE descubrió que intercalando el cultivo del maíz con forraje de legumbres Desmodium uncinatum (hoja plateada) y D. intortum (hoja verde) redujo la infestación de la maleza parásita, Striga hermonthica por un factor de 40 en comparación con el monocultivo de maíz. La reducción de la infestación de Striga como consecuencia de los cultivos intercalados con el maíz de dos variedades de Desmodium fue mucho más significativa que la intercalación con soja, crotalaria y lentejaro de vaca/caraota/cowpea.

Los investigadores de ICIPE y de IACR-Rothamsted observaron que dicha estrategia «empuja y tira», utilizando plantas atractivas como cultivos trampa y plantas repelentes como cultivos intercalados, reduce el ataque de los barrenadores e incrementa los niveles de parasitismo de los barrenadores en el maíz protegido, lo que resulta en un aumento significativo del rendimiento. Las pruebas que se llevaron a cabo con participación de los agricultores en los años 1997 y 1998 demostraron aumentos importantes en el rendimiento del maíz. En la actualidad, el objetivo consiste en desarrollar un sistema de cultivos basado en el maíz que reduzca las pérdidas en el rendimiento como consecuencia tanto del barrenador como del Striga y que, al mismo tiempo, mejore la fertilidad de la tierra debido a la fijación del nitrógeno por la acción del Desmodium. Tal sistema de rediseño y diversidad posee muchas de las características de las granjas «tradicionales» de Kenia.

La estrategia «empuja y tira», utilizando plantas atractivas como cultivos trampa y plantas repelentes como cultivos intercalados, reduce el ataque de los barrenadores e incrementa los niveles de parasitismo de los barrenadores en el maíz protegido, lo que resulta en un aumento significativo del rendimiento.

Lesotho: Sistema agrícola Machobane, Lesotho[266]

El Sistema agrícola Machobane constituye un ejemplo de un sistema rediseñado fundamentalmente para obtener beneficios multifuncionales. Lesotho está afectada seriamente por la erosión y la degradación de la tierra. Durante los últimos veinte años, la tierra arable disminuyó del 14 al 9 por ciento de la superficie total del país y el rendimiento de los cultivos, en la actualidad, llega sólo a la mitad del nivel que se registró en los años 70. El Dr. J.J. Machobane, un agrónomo de Mosotho, concibió su sistema hace 40 años, mediante la experimentación durante 13 años en su propia tierra antes de intentar lanzarlo entre sus pares agricultores. A diferencia de la mayoría de los métodos de extensión, el enfoque de Machobane comienza con los requisitos de comportamiento básicos para adoptar el mensaje técnico:

autosuficiencia: los agricultores deben estar convencidos de que pueden lograr la seguridad alimentaria sin colaboración externa;

apreciación de la base de recursos: los agricultores deben estar preparados para trabajar duro y convencidos de que pueden mejorar la producción del cultivo por medio de la explotación completa de su base de recursos;

aprender y enseñar al hacer: los agricultores deben estar entrenados en sus propios campos y los entrenadores deberán estar preparados para trabajar a la par de ellos;

divulgación espontánea de la tecnología: los agricultores aprenden de otros agricultores, y los agricultores de Machobane tienen la obligación de ayudar a sus vecinos.

En las áreas de las montañas de Lesotho, la mayoría de los cultivos crecen en suelos aterrazados, pero la estructura pobre de la tierra, el manejo inadecuado de la fertilidad del suelo y las precipitaciones irregulares hacen que la productividad de la tierra sea baja y muy variable. De acuerdo con Machobane, estas limitaciones se pueden superar mediante la explotación racional de la base de recursos y la minimización de la necesidad de la compra de insumos. Los elementos técnicos incluyen la intercalación de cultivos, la colocación localizada de ceniza (proveniente de desechos del hogar) y abono, la eliminación de malezas, la introducción de la patata como cultivo comercializable, la preservación de los enemigos naturales, las rotaciones de hileras, y las legumbres con los cereales.

Los agricultores que adoptan el sistema Machobane subrayan tres ventajas del sistema:

mayor productividad de la tierra (0,4 ha por familia suficientes para la seguridad alimentaria en relación con la más normal de 1,2 ha);

mayor ingreso en efectivo obtenido por la plantación de patatas; y

mejor resistencia a las sequías: sus campos están verdes en comparación con los campos que no se sometieron al sistema Machobane durante la sequía.

Además, el sistema reducirá notablemente las fluctuaciones en los ingresos de la granja al combinar la disminución de las fluctuaciones de los rendimientos de los cultivos individuales, repartiendo el riesgo de las cambios en los rendimientos y en los precios mediante la plantación de una gama más amplia de cultivos y dependiendo menos de los insumos importados (fertilizantes y plaguicidas). En la actualidad, unos 2 000 agricultores se encuentran operando con este sistema.

Malawi: acuicultura en pequeña escala[267]

El Centro internacional para el manejo de los recursos acuáticos vivientes (ICLARM) trabaja para integrar la cultura de los estanques piscícolas a los sistemas agrícolas de bajos insumos de Malawi. El programa utiliza un proceso participativo de agricultores junto con científicos para realizar un mapeo del flujo de recursos en las granjas y luego identificar el potencial de ajustes necesarios para producir efectos sinérgicos. Se ha trabajado con unos 2 000 agricultores individuales tanto en mejoras de los vegetales de los huertas hogareñas como en la acuicultura de los estanques piscícolas. Este componente integrado de agricultura-acuicultura con frecuencia comprende sólo 500 m2 de una granja cuyo tamaño promedio oscilaría en las 1,5 hectáreas. Hasta el momento, la intensificación de este componente central originó mejoras importantes en la seguridad alimentaria - los rendimientos de los vegetales aumentaron de 2 700 a 4 000 kg/ha, y los estanques piscícolas producen el equivalente a 1 500 kg/ha de peces - una nueva fuente de alimento para los hogares. Estas granjas integradas también producen seis veces más que las granjas convencionales - contribuyendo el elemento vegetal-pez en hasta un 70 por ciento de los ingresos anuales. ICLARM documentó la mejora continua de la productividad en estos sistemas entre los agricultores que colaboraron con un aumento constante de la productividad del estanque de 800 a 1 500 kg/ha. Por el contrario, entre aquellos agricultores que fueron entrenados sólo con el sistema de Entrenamiento y Visita convencional en el sur de Malawi, se notó una caída constante en los rendimientos, dado que los sistemas sobrediseñados se desmembraron ya que los agricultores perdieron el control. Un enfoque centrado en la formación de recursos, del capital natural de la granja y del propio capital humano de los agricultores (habilidades y conocimiento) permite un reajuste continuo a través del tiempo.

Un enfoque centrado en la formación de recursos, del capital natural de la granja y del propio capital humano de los agricultores (habilidades y conocimiento) permite un reajuste continuo a través del tiempo.

México: café orgánico ISMAM[268]

Durante la última década, miles de pequeños propietarios mejicanos cambiaron a la agricultura orgánica. ISMAM, una cooperativa agrícola, se constituyó hace más de diez años con pequeños plantadores de café con el fin de enfrentar los problemas de la baja productividad, las condiciones de comercialización pobres y la extrema pobreza de los hogares agrícolas. Mediante la adopción de las técnicas orgánicas y de la mejora de la calidad, ISMAM pudo enfrentar la degradación de la tierra y los bajos rendimientos, tornándose un mercado especializado que compensó los esfuerzos adicionales hacia la producción agrícola sostenible. Las técnicas incluyen la intercalación y la rotación de cultivos para el control de plagas y el manejo de la fertilidad. Los agricultores en la actualidad reconocen que las tierras vírgenes circundantes juegan un papel clave para mantener las condiciones ecológicas favorables, refugios para el control de plagas y el aislamiento de los extremos climáticos. ISMAM trabaja con una administración sólida, responsable y participativa, y muy trabajadora que, recientemente se transformó en una gran agroindustria con instalaciones procesadoras propias y mercados de exportación directos en Europa, en Japón y en los Estados Unidos de América. ISMAM comenzó a producir mezclas y café soluble para el mercado local y a diversificar su producción agrícola para una mayor seguridad alimenticia. Un porcentaje de las ganancias se entrega a las comisiones regionales de la cooperativa para ser inviertido en trabajos sociales. En el año 1995, ISMAM recibió el premio a la Agroexportación nacional y en la actualidad goza de una posición privilegiada con relación al crédito y al apoyo gubernamental, habiendo diversificado sus negocios en una amplia variedad de áreas que incluyen el ecoturismo.

Los agricultores en la actualidad reconocen que las tierras vírgenes circundantes juegan un papel clave para mantener condiciones ecológicas favorables, refugios para el control de plagas y el aislamiento de los extremos climáticos.

México: el comercio equitativo de UCIRI y el café orgánico[269]

La Unión de Comunidades Indias de la Región del Istmo (UCIRI), fue constituida por agricultores de Oaxaca para el cultivo y la comercialización del café orgánico. La idea era, en parte, reducir la dependencia crediticia pero también para mejorar los rendimientos. El cultivo de café orgánico demanda una administración más activa y un mayor aporte de trabajo por parte de los agricultores. El café se planta en curvas de nivel para detener la erosión de la tierra. Allí también se colocan residuos de maleza y ramas recortadas. Se construyen terrazas en forma de media luna por cada cafeto. Originariamente, los granos de café se despulpaban en los canales, hecho que contaminaba muchísimo el agua, en la actualidad, los agricultores utilizan la pulpa en los campos después de la preparación de compost, junto con abono animal, cal y el material proveniente de plantas verdes. Este sistema mejorado produce entre 600-1 200 kg/ha de granos de café, lo que constituye una mejora del 30-50 por ciento en comparación con las prácticas anteriores. La Unión está compuesta por 4 800 miembros y ha formado su propia infraestructura para el transporte, el almacenamiento, el procesamiento y la exportación de café. La prima recibida por parte de las organizaciones de comercio justo de café se utiliza para llevar a cabo una variedad de fines sociales, especialmente, mejorar las escuelas. La Unión también está a cargo de los sistemas de transporte público y de seguro médico, y posee varios negocios.

La prima recibida por parte de las organizaciones de comercio justo de café se utiliza para llevar a cabo una variedad de fines sociales, especialmente mejorar las escuelas.

Nepal: Bienestar Comunitario y Sociedad de Desarrollo[270]

En el año 1990, Bienestar Comunitario y Sociedad de Desarrollo (CWDS) se estableció en Nepal como una ONG cuyo principal objetivo era elevar la comunidad rural mediante la mejora de los ingresos hogareños y las condiciones de vida, con la introducción de la agricultura sostenible y de actividades relacionadas con el desarrollo rural. CWDS se dedica a la promoción de la agricultura orgánica en distintas partes del país, tanto por sí sola como con la colaboración de otras ONG y agencias gubernamentales y, desde el año 1992, es miembro de la Federación Internacional de Movimientos de la Agricultura Orgánica (IFOAM). La participación activa de los miembros de la comunidad y el uso de los recursos disponibles localmente constituyen la base de todas las actividades del desarrollo, que aseguran la apropiación de los programas por parte de la comunidad. CWDS promueve diversas granjas con cultivos integrados y producción ganadera, e impulsa a los agricultores a que adopten técnicas tales como los cultivos mixtos/múltiples, los abonos verdes y la agroforestería, al igual que introducir nuevas especies vegetales. Esta agricultura sostenible brindó varios beneficios en la granja, incluyendo una disponibilidad mayor de forraje para los animales, de leña y madera para la construcción, un mayor contenido de materia orgánica en la tierra y una disminución de la erosión del suelo. Las granjas son más resistentes a las condiciones climáticas adversas y están «más verdes» durante todo el año. Además, aumentó la salud y la calidad nutricional de los hogares agrícolas (en especial, de los niños). Muchos grupos de agricultores y de mujeres emergieron al centrar su atención en planes de créditos y de ahorro y en el manejo comunitario de los recursos naturales. CWDS también proporcionó capacitación a los adultos y clases de alfabetización, al igual que capacitación sobre agricultura participativa, lo que dió origen a la experimentación y a iniciativas propias del agricultor.

La participación activa de los miembros de la comunidad y el uso de los recursos disponibles localmente constituyen la base de todas las actividades del desarrollo, que aseguran la apropiación de los programas por parte de la comunidad.

Nepal: Programa de permacultura Jarjarkot[271]

El Programa de permacultura Jarjakot (JPP) consiste en una organización que está situada en las montañas centrales del Himalaya, en Nepal. El proyecto se lanzó en el año 1988 y aumentó de un acre de tierra a más de cincuenta villas en el área. JPP promueve la permacultura como un sistema agrícola participativo basado en la comunidad. Estableció muchos sitios experimentales para mostrar cómo se puede practicar la agricultura sostenible por medio de la implementación de un buen diseño de la granja y de técnicas, entre las que se pueden mencionar la preparación de compost, el abono verde, los cultivos de rotación/mixtos, la reducción del trabajo de labranza del suelo, el acolchado, el pastoreo controlado, la agroforestación y el manejo biológico de plagas. JPP también brinda programas de entrenamiento sobre producción de frutas y vegetales, apicultura y sistemas de tejido y de agua potable. Fueron muchos los beneficios producidos como resultado de las actividades del proyecto Jarjarkot y de la divulgación de tecnologías de agricultor a agricultor hacia las comunidades que no se encuentran comprendidas en el área afectada por el programa. Los rendimientos de los cultivos mejoraron, disminuyó la utilización de insumos externos y se registró una mayor cubierta forestal y de biodiversidad alrededor de las tierras de cultivo como consecuencia de la agroforestación (840 ha de bajo bosque) Esto significa que, en la actualidad, las fincas ofrecen una mayor resistencia a la sequía dado que los cursos de agua están más altos y los riachuelos se secan por períodos más cortos. Además, se formaron 44 comunidades autoadministradas locales o grupos de agricultores que otorgan fondos y préstamos bancarios para granos. Algunos agricultores también dejaron de migrar estacionalmente para la obtención de ingresos de dinero ya que los obtuvieron por medio de la cría de abejas.

Pakistan: Grupo de mejoramiento de las mujeres rurales de Sindh, producción de frutas orgánicas[272]

El Grupo de mejoramiento de las mujeres rurales de Sindh apunta a capacitar a las mujeres en el Pakistán rural, mejorando sus oportunidades. En el año 1989, se lanzó el proyecto de producción de frutas orgánicas. Los rendimientos del mango y de frutas cítricas aumentaron en un 150-200 por ciento después de adoptar las técnicas de la agricultura orgánica, tales como el acolchado, la producción sin labranza, la preparación de compost y la plantación de árboles frutales en camas de doble cavado. En la actualidad, la calidad del producto es mucho mejor y los precios de mercado para la fruta se incrementaron en un 50-60 por ciento. Como consecuencia, los ingresos de la granja son más altos e incluso se duplicó y triplicó la seguridad alimentaria en la zona. Las fuentes de empleo aumentaron debido al proyecto y, en particular, se registró un incremento en la cantidad de mujeres empleadas en la producción de frutas orgánicas. En la granja de Panwhar, el Grupo de mejoramiento de las mujeres rurales de Sindh también brinda capacitación para los adultos y entrenamiento sobre producción de árboles frutales para muchos agricultores. Esto resultó en la experimentación y el liderazgo de las iniciativas por parte de los agricultores. Al trabajar con esta modalidad, los agricultores y las comunidades generaron un mejor manejo de los recursos locales, tanto naturales como humanos del área.

Senegal: Centro de investigación de agricultura regenerativa Rodale[273]

En los países sahelianos, las mayores preocupaciones sobre la producción de alimentos se relacionan con las tierras, muchas de las cuales son arenosas y con bajo contenido de material orgánico. En los lugares en los que son más pesadas y de mejor calidad, están sujetas a un uso intensivo y, como consecuencia, más expuestas a la erosión del agua y del viento. En Senegal, la erosión de la tierra y la degradación amenazan extensas superficies de terrenos agrícolas. Desde el año 1987, el Centro de investigación de agricultura regenerativa Rodale (RARC) trabajó estrechamente con las asociaciones de agricultores y con los investigadores gubernamentales para mejorar la calidad de las tierras en Senegal, mediante la utilización de métodos de agricultura orgánica. La agricultura regenerativa en la cuenca del maní trajo aparejados beneficios económicos, sociales, ambientales y biofísicos positivos. El sistema de cultivos primarios de la región consiste en una rotación de mijo-maní. Se queman los campos para limpiarlos y luego, se los cultiva llevando a cabo una labranza superficial con animales. Sin embargo, decayeron notablemente los períodos de barbecho y la utilización de fertilizantes y plaguicidas inorgánicos resulta rara entre los pequeños propietarios debido a los altos precios. También se comprobó que no se obtienen los rendimientos esperados con los fertilizantes inorgánicos salvo que se registren mejoras concurrentes de la material orgánica - los nutrientes se lavan con las primeras lluvias, o son tomados por los microbios de la tierra o por malezas. Aquellas tierras con un bajo contenido de materia orgánica tampoco retienen bien la humedad.

«En última instancia, los rendimientos de los cultivos no están ligados a las cantidades de precipitaciones anuales. Las sequías, si bien poseen un efecto negativo en los rendimientos, no constituyen la causa de que la totalidad del cultivo fracase».

RARC trabaja con alrededor de 2 000 agricultores en 59 grupos para mejorar la calidad de la tierra, integrar al ganado que se alimenta en el establo a los sistemas de cultivos, agregar legumbres y abonos verdes, mejorar el uso de abonos y de fosforita, incorporar sistemas de recolección de agua y desarrollar sistemas de preparación de compost efectivos. Como resultado, se registró una mejora en los rendimientos del mijo de un 75-195 por ciento: de 330 a 600-1 000 kg/ha y, en los rendimientos del maní, entre 340 a 600-900 kg/ha. Los rendimientos también sufrieron menos variaciones cada año, con las consecuentes mejoras en la seguridad de alimentos de los hogares. Como dijo Amadou Diop: «en última instancia, los rendimientos de los cultivos no están ligados a las cantidades de precipitaciones anuales. Las sequías, si bien poseen un efecto negativo en los rendimientos, no constituyen la causa de que la totalidad del cultivo fracase».

Senegal: producción de algodón orgánico[274]

En el año 1993, una asociación entre ENDA-Pronat, una ONG de África occidental, Pesticides Trust y un grupo de agricultores de Koussanar (ansiosos de que se conviertan más a la producción agrícola sostenible) estableció el algodón orgánico experimental en Koussanar, Senegal. Los objetivos de este proyecto consistían en:

reducir la utilización de químicos sintéticos en la producción del algodón;
reducir los impactos de estos químicos en la salud humana, en el ganado y en el ambiente;
mejorar los ingresos de los agricultores y reducir su endeudamiento; y
si la prueba piloto resultaba exitosa, utilizarla para la demostración y reproducción.

Para el año 1996, un agrónomo y dos extensionistas fueron a Koussanar para proporcionar apoyo rápido y efectivo a los agricultores voluntarios y a la recientemente desarrollada organización. Las recomendaciones técnicas incluían sembrar lo más tempranamente posible, arar antes de sembrar, el uso de la margosa para el control de la plaga, la utilización de la orina de vaca como fertilizante y agente para el control de la plaga y la recolección manual del algodón. En el año 1998, se produjeron 23 toneladas de semilla de algodón como consecuencia del proyecto y se establecieron mercados para el algodón orgánico localmente en Senegal y también en Europa. El proyecto también repercutió con éxito en los temas relacionados con el sexo de la población involucrada: «Grouppement de neem», constituido por mujeres, se dedicaron a la preparación y a la venta de preparaciones de margosa para el control de plagas. La cantidad de mujeres agricultoras que se dedicó al cultivo del algodón orgánico se incrementó de manera constante (dado que no necesitan comprar insumos químicos costosos ni participar en la actividad predominantemente masculina como lo es la fumigación de los cultivos) y las mujeres están representadas en las estructuras de la organización de los nuevos agricultores. El proyecto, si bien en su etapa preliminar, demostró que es posible cultivar algodón orgánico en Senegal.

La cantidad de mujeres agricultoras que se dedicó al cultivo del algodón orgánico se incrementó de manera constante (dado que no necesitan comprar insumos químicos costosos ni participar en la actividad predominantemente masculina como lo es la fumigación de los cultivos).

Tanzania: algodón orgánico[275]

El algodón constituye la segunda exportación más importante para Tanzania y, por lo general, lo producen los pequeños propietarios en dos áreas principales, «el área occidental para cultivo del algodón» (WCGA) y «el área oriental para cultivo del algodón» (ECGA), mediante la utilización de muy pocos insumos agrícolas. En el año 1994, el gobierno de Tanzania liberó el mercado de algodón para permitir que las empresas privadas compraran la semilla de algodón a los agricultores para dedicarse a la limpieza del algodón. Una de tales empresas (CIC Limited), una empresa textil de Tanzania, se abordó el programa GTZ-Protrade con el fin de llevar a cabo un estudio de factibilidad sobre el algodón orgánico. Se eligió como área del proyecto a una villa situada en el distrito de Meatu District, en la región de Shinyanga Region, al noroeste del país dentro del WCGA y 45 agricultores contratados produjeron algodón orgánico durante la temporada 1994/5. Por diversas razones, esta área era particularmente adecuada para el proyecto dado que aquí el algodón se produce a niveles bajos de rendimiento de manera que los riesgos de que los rendimientos disminuyan durante la conversión son menores y, por lo tanto, los agricultores están más entusiasmados en participar. La mayoría de las granjas poseen áreas de tierras con barbecho que actúan como refugios para los enemigos naturales de las plagas de insectos y los agricultores crían gran cantidad de ganado de manera tal que pueden proporcionar fertilizantes de abono natural para sus cultivos de algodón. El proyecto de manejo integrado de las plagas GTZ ofreció colaboración para la capacitación del personal de extensión e investigación y en el área se encontraban en construcción dos empresas privadas que se dedicaban a la limpieza del algodón. Los agricultores afectados al proyecto estuvieron de acuerdo en cultivar orgánicamente y en implementar los cultivos de rotación, al igual que los de trampas para el control de plagas de insectos a cambio de insumos y de mercados garantizados para colocar su algodón. Para el año 1997, el proyecto ya contaba con 134 agricultores que producían un promedio de 663 kg/ha de algodón ya certificado como orgánico.

Zimbabwe: Proyecto de seguridad alimentaria Chivi[276]

El Proyecto de seguridad alimentaria Chivi apunta a desarrollar economías rurales resplandecientes que se basan en la agricultura sostenible y en otros recursos naturales disponibles localmente. El proyecto impactó en forma positiva sobre la disponibilidad local de los alimentos al incrementar la producción de especies de cultivos locales que toleraran la sequía (por ejemplo, pequeños granos tales como el sorgo y el mijo). Los agricultores del proyecto que se desempeñaban en este distrito tan proclive a las sequías informaron que los rendimientos registraron más que una duplicación desde el momento en que el proyecto se inició en el mes de febrero del año 1991. En la actualidad, algunos agricultores se encuentran en condiciones de consumir algunos cultivos de alimentos «fuera de temporada», por ejemplo green mealies y algunas especies de cultivos vegetales. Las técnicas de riego para la cosecha también mejoraron la producción vegetal, en especial para el consumo local pero en parte también para la venta. Entre otros cambios se pueden mencionar la utilización de abonos provenientes del ganado, el uso de plaguicidas autóctonos y la intercalación de cultivos múltiples. Se brindó entrenamiento y apoyo en cuanto a las prácticas para el manejo sostenible de la tierra a más de 500 agricultores quienes, a su vez, demostraron estas prácticas agrícolas buenas a otros agricultores que las están adoptando cada vez más. Al menos surgieron unos 20 grupos de manejo de recursos locales y los participantes aprendieron y descubrieron su capacidad inmensurable de autoayudarse a través de la participación activa en sus propias actividades con un mínimo de asistencia externa.

Los participantes aprendieron y descubrieron su capacidad inmensurable de autoayudarse a través de la participación activa en sus propias actividades con un mínimo de asistencia externa.

Zimbabwe: Programa de agricultura sostenible Silveira House[277]

Silveira House promueve la agricultura sostenible en el distrito de Mutoko en Zimbabwe mediante demostraciones y talleres llevados a cabo en las villas y por medio de impulsar a los agricultores a que introduzcan técnicas tales como los cultivos intercalados, la utilización de abono animal, la preparación de compost, las medidas de conservación de la tierra y del agua y la agroforestación con el fin de crear sistemas de cultivos y de cría de ganado integrados. El entrenamiento está organizado de tal manera que hace que los agricultores primero utilicen sus conocimientos técnicos autóctonos, estimulándolos a que experimenten, que sean observadores y que estén en armonía con la naturaleza. Se brinda colaboración a aquellos agricultores que se entrenaron para que organicen y entrenen a otros. Sus granjas también actúan como modelos con el fin de que otros puedan aprender. El programa realizó un esfuerzo por dirigirse a los agricultores más pobres, aquellos que no tengan una participación activa en otros proyectos gubernamentales o no. Los agricultores que participan en el programa tienen que unirse para formar grupos con comisiones fuertes. La seguridad alimentaria en las villas aumentó y hay más cantidad de alimentos disponibles dado que los agricultores aprendieron que hay que diversificar. Se registró un incremento en los rendimientos de los cultivos de los huertos domésticos y en las parcelas de ensayo. Los agricultores también dejaron de aplicar plaguicidas y fertilizantes químicos, eligiendo utilizar compost y abonos verdes o líquidos.

El entrenamiento está organizado de tal manera que hace que los agricultores primero utilicen sus conocimientos técnicos autóctonos, estimulándolos a que experimenten, que sean observadores y que estén en armonía con la naturaleza.

Zimbabwe: Proyecto de algodón orgánico del valle Zambezi[278]

El Proyecto de algodón orgánico del valle Zambezi en Zimbabwe lo inició un grupo de agricultores de escasos recursos, en su mayoría mujeres, que estaban entusiasmadas para producir algodón sin utilizar plaguicidas como consecuencia de razones económicas, de salud y ambientales. Estos agricultores trabajaron en colaboración con una ONG local (ZIP Research), Novib, la Red de Acción contra los plaguicidas, Cargill y el consultor local de Agro Eco. Zip Research brinda a los agricultores entrenamiento y asistencia para la investigación en relación con el manejo de las plagas y la agricultura orgánica. Los agricultores asisten a escuelas de campo para agricultores especializadas en el manejo de plagas naturales y en la agricultura orgánica. Dichas escuelas las facilitan los agricultores locales entrenados (trabajadores agrícolas de campo). Estos trabajadores colaboran en la investigación participativa de los agricultores y también son los responsables en operar el «sistema de control interno» orgánico. Se encontró un mercado local para el maní con el fin de estimular a que más mujeres incursionaran en el proyecto orgánico. Además, los inspectores orgánicos aceptaron la cláusula «excepción especial para las esposas», por medio del cual se puede permitir que las esposas certifiquen el algodón que no está fumigado, aún cuando su marido sea un agricultor convencional. La comercialización de los productos orgánicos constituye un aspecto crucial para este proyecto. La cosecha del año 2000 (1 tonelada de fibras) se procesó localmente como remeras impresas con calidad de exportación. Se esperó que la cosecha siguiente fuera de 50-70 toneladas de semilla de algodón orgánico dependiendo de las lluvias. Debido a este proyecto, los agricultores del valle de Zambezi pudieron comercializar el primer algodón orgánico de Zimbabwe y Zip Research desarrolló un proceso de conversión orgánica para cultivos de productos básicos que pudieran utilizarse para colaborar con la conversión de otros pequeños propietarios de África.

Enseñanzas clave que se aprendieron en los procesos para lograr mejoras

Con frecuencia, las transiciones en la agricultura se conciben como que requieren cambios repentinos tanto en las prácticas como en las actitudes. Sin embargo, no todos los agricultores pueden o quieren aventurarse a tal salto. No obstante, todos pueden seguir pequeños pasos que, uno tras otro, pueden originar grandes transformaciones. A través de la evidencia empírica del campo, se desarrolló una tipología de las mejoras para demostrar dónde se podrían realizar ajustes hacia la sostenibilidad[279]. Las primeras mejoras incluyen aquellas que afectan el capital natural en forma positiva de distintas maneras (Mecanismos 1-4). La segunda mejora el capital social y humano (Mecanismos 5-6) y, la tercera, se refiere a mejorar el retorno financiero de los agricultores y/o su acceso a la financiación y al crédito (Mecanismos 7-9).

Mecanismo 1: mejor utilización de los recursos naturales disponibles localmente

Hay disponibles una gran variedad de tecnologías y de prácticas que los agricultores y las comunidades pueden utilizar para lograr una mejor y más productiva utilización de los recursos naturales disponibles; el concepto básico sería que, por varias razones, el agua, las tierras y la biodiversidad no se utilizaron de manera más efectiva en el pasado. Las opciones incluyen agua para la cosecha, la conservación de la tierra y del agua tales como: el cultivo en curvas de nivel, las terrazas, la labranza mínima de la tierra, franjas de pasto; la preparación de compost, los abonos animales, el manejo y el programa de riego, el restablecimiento de la tierra degradada o abandonada; el pastoreo rotativo; el manejo del hábitat para los predadores de plagas; los sistemas de drenaje y subsuelo; los canteros elevados o chinampas; los bioplaguicidas y los biofungicidas.

Mecanismo 2: intensificar microambientes en el sistema agrícola (jardines, huertas, estanques)

Otra mejora para los sistemas de agricultura o de los medios de vida incluye el hecho de intensificar un solo subcomponente de su granja, dejando al resto sin modificar. Estas tecnologías pueden aumentar de manera significativa la producción total de alimentos para quienes vivan de la actividad rural, en especial de proteínas y de vegetales. Los beneficiarios con frecuencia son los niños durante las temporadas de «hambre». Las opciones incluyen: vegetales sobre los diques de los arrozales; huertos domésticos; estanques piscícolas; cultivos en los barrancos; y dispositivos de decantación de limo.

Mecanismo 3: diversificación por medio de la adición de nuevos componentes regenerativos

La tercera clase de mejora del capital natural incluye la diversificación de la totalidad del agroecosistema a través de la adición de componentes regenerativos nuevos tales como las legumbres en las rotaciones de los cereales, los peces en el caso del arroz, la agroforestación y el ganado.

Estas tecnologías pueden resultar en interacciones sinergísticas, en donde un componente del sistema contribuye positivamente al éxito de los otros componentes. Entre las opciones, se pueden mencionar: legumbres en los sistemas de cultivos (cultivos de cobertura, abonos verdes) y pasturas; ganado integrado (por ejemplo, aves de corral, rumiantes alimentados en establos); piscicultura en los arrozales; Azolla en el arroz; árboles en los sistemas de cultivos, incluyendo parcelas forestales; liberación de enemigos naturales para el control de plagas; y manejo del hábitat para el control de plagas y aumento de los elementos beneficiosos (por ejemplo, setos verdes o vivos, beetle banks, floración y franjas de pasto).

Mecanismo 4: mejor utilización de los insumos no renovables y de las tecnologías externas

En el caso de que se utilicen insumos no renovables y externos, el sistema se puede convertir en más sostenible, garantizando la aplicación precisa de aquellos insumos que no tengan o que tengan pocos residuos o que no dañen el capital natural o humano. Tales enfoques se combinan de manera similar con la introducción de alternativas regenerativas. Las opciones a tener en cuenta son: semillas nuevas, fumigación de parcelas de botánicos, pequeñas dosis de esprays o esprays no tóxicos; servicios veterinarios; feromonas, machos estériles; especies de cultivos y razas de animales resistentes y maquinaria (por ejemplo, herramientas de mano, arados).

Mecanismo 5: procesos sociales y participativos que tienden a lograr la acción grupal

Estas mejoras centran la atención en los procesos sociales y participativos que traen aparejados aumentos en el capital social y que, como consecuencia, aumenta la capacidad de los individuos para trabajar conjuntamente en la resolución de los problemas habituales de manejo de recursos, constituyendo grupos abocados al manejo de las plagas, del riego, de la cuenca colectora, de los bosques conjuntos o de los créditos. Entre las opciones se pueden mencionar: grupos de investigación y de experimentación de los agricultores, grupos de manejo de recursos y de usuarios (por ejemplo, la protección forestal, la piscicultura, el riego y las cuencas colectoras); los grupos de crédito y las asociaciones horizontales entre las agencias externas sectoriales (por ejemplo, privadas y estatales).

Mecanismo 6: formación de capital humano a través de los programas de aprendizaje continuo

Estas mejoras se orientan a la formación del conocimiento y de las habilidades de los agricultores para incrementar las habilidades y las capacidades analíticas, con el fin de innovar y controlar sus sistemas agrícolas. Una preocupación principal en las transiciones hacia un sistema más sostenible lo constituyen los niveles de conocimiento humano y las habilidades que se requieren para el manejo de sistemas más complejos (es mucho más sencillo, por ejemplo, fumigar con un pesticida que cultivar para los insectos beneficiosos). Las opciones abarcan: escuelas agrícolas de campo para aumentar el conocimiento agroecológico, entrenamiento y capacitación sobre liderazgo, clases de alfabetización para adultos, desarrollo de conocimientos basándose en la computación, extensión de agricultor en agricultor y programas de experimentación de los agricultores.

Cuadro 2: Resumen de la utilización de mecanismos para la mejora de la sostenibilidad agrícola: comparación de los proyectos orgánicos con una base de datos de agricultura sostenible en su totalidad

Mecanismos de Mejora

Proporción de los proyectos de agricultura orgánica que utiliza cada una de las mejoras

Proporción de todos los 208 proyectos de la base de datos SAFE que utiliza cada mejora

1: Mejor utilización de los recursos naturales disponibles localmente

93%

92%

2: Intensificar microambientes en el sistema agrícola (jardines, huertas, estanques)

37%

21%

3: Diversificación por medio de la adición de nuevos componentes regenerativos

93%

60%

4: Mejor utilización de los insumos no renovables y de las tecnologías externas

7%

18%

5: Procesos sociales y participativos que tienden a lograr la acción grupal

50%

55%

6: Formación de capital humano a través de los programas de aprendizaje continuo

97%

88%

7: Acceso a financiamiento asequible (crédito, subvenciones, subsidios)

13%

17%

8: Valor agregado a través del procesamiento para reducir pérdidas y para aumentar los retornos

7%

12%

9: Adición de valor a través de la comercialización directa u organizada para consumidores

40%

15%

Mecanismo 7: acceso a financiamiento asequible (crédito, subvenciones, subsidios)

El hecho de mejorar el acceso al financiamiento es vital para ayudar a las familias de los agricultores para que desarrollen un sistema de manejo más sostenible. Esto se puede lograr mediante créditos accesibles (por ejemplo, a través de instituciones de microfinanciamiento y de organizaciones sociales, en particular de mujeres), o a través de familias que tengan acceso a nuevos recursos de financiamiento externo (subvenciones y subsidios, o de turistas y visitantes). Los componentes incluyen: el acceso a créditos asequibles, la posibilidad de obtener subvenciones y subsidios del gobierno, el incremento en los retornos sobre las ventas de los productos, la atracción de nuevos recursos de dinero para el capital natural (por ejemplo, el ecoturismo, la caza de fauna salvaje, los créditos para el secuestro del carbono).

Mecanismo 8: valor agregado a través del procesamiento para reducir pérdidas y para aumentar los rendimientos

Existe disponible una gran variedad de opciones para incrementar los rendimientos de las familias, ya sea mediante la reducción de las pérdidas con motivo de las plagas (mejor almacenamiento y tratamiento) y de los procesos ineficientes (por ejemplo, cocinas que ahorran combustible); o por la adición de valor antes de la venta o del uso (conversión de los productos primarios a través del procesamiento). Las opciones incluyen: las tecnologías postcosecha, el procesamiento de los productos primarios antes de la venta (por ejemplo, frutas secas, chutney, prensa de aceite, aserraderos); el etiquetado de los productos para poder localizarlos (ubicación o ecoetiquetas); cocinas de combustible eficientes.

Mecanismo 9: adición de valor a través de la comercialización directa u organizada para consumidores

Las familias de los agricultores también pueden agregar valor a su producción mediante una mejor comercialización. Esto se puede lograr a través de mejoras de la infraestructura física (por ejemplo, caminos, transporte) o por medio de la comercialización directa y venta a los consumidores (de esta manera, se elimina a los mayoristas y a los «intermediarios»). Las opciones abarcan: los caminos y la infraestructura rural, los mercados de agricultores, los negocios con productos de la granja, los envíos directos y la agricultura apoyada por la comunidad, los grupos de productores para la comercialización colectiva, los programas de comercialización ética para asegurar que el valor llegue a las comunidades rurales y a quienes de ello subsistan y programas de turismo ecológico (de promoción de la fauna y flora silvestres de las granjas).

El Cuadro 2 contiene un resumen de las clases de mejoras que se utilizaron en estos 29 proyectos orgánicos, certificados y no certificados, en relación con aquéllos que se utilizaron en 208 proyectos de la base de datos. El resultado indica que:

los proyectos orgánicos se integran más que el promedio que figura en la extensa base de datos dado que, en promedio, utilizan una mayor cantidad de mecanismos de mejora;

los proyectos orgánicos son más proclives a focalizar su atención en la intensificación de los microambientes de las granjas (37 por ciento en comparación con el 21 por ciento), y casi todos los proyectos orgánicos (93 por ciento) diversificaron mediante la adición al sistema de componentes regenerativos (en comparación con sólo el 60 por ciento de todo el conjunto de datos);

la mitad tanto de los sistemas orgánicos como casiorgánicos se centran en la formación de un capital social a través de grupos;

casi todos los proyectos orgánicos (97 por ciento) poseen un elemento de desarrollo del capital humano, en relación con el 8 por ciento de todo el conjunto de datos;

tanto los sistemas orgánicos como los casi orgánicos utilizan muy poco los mecanismos de crédito y de adición de valor para producir, siendo los proyectos orgánicos los que peor resultan en ambos puntajes;

el 40 por ciento de los proyectos orgánicos le están adicionando valor a través de conexiones directas con los mercados y con los consumidores, porcentaje que resulta mucho más elevado que el 15 por ciento que se registra en la base principal de datos.

Estos resultados hacen notar que se están aplicando ampliamente las mejoras técnicas que tienden a la acumulación de capital natural. Sin embargo, aún existe la necesidad de centrar la atención aún más en el capital social y en el desarrollo institucional con el fin de aumentar la capacidad de recuperación y de innovación dentro de las comunidades, colaborando con la divulgación de las buenas prácticas. El puntaje bajo para acceder al crédito es preocupante, así como también lo es el hecho de la falta de atención que se le presta a la adición de valor para producir antes de la comercialización. Un 40 por ciento de los proyectos orgánicos consiste en un nexo directo con los consumidores y con los mercados. Pese a que son mucho mejor que los de la base de datos principal, siguen siendo sorprendentemente bajos.

Se están aplicando ampliamente las mejoras técnicas que tienden a la acumulación de capital natural. Sin embargo, aún existe la necesidad de centrar la atención aún más en el capital social y en el desarrollo institucional.

Conclusiones de experiencias de aumento de la agricultura orgánica

Por medio de estos casos se puede llegar a varias conclusiones acerca de la agricultura orgánica certificada y no certificada:

Las tecnologías y los procesos sociales para las mejoras en el ámbito local se están probando y estableciendo cada vez mejor y se observan beneficios en términos de aumento en la productividad.

Las condiciones sociales e institucionales para la divulgación son menos conocidas, si bien se están estableciendo en varios contextos (en particular, entre los grupos sociales en el ámbito local y en las nuevas asociaciones entre las agencias externas).

Las condiciones políticas para que aparezcan políticas de apoyo son las que menos se establecen y sólo existen pocos ejemplos de progreso real.

La mayor parte de las mejoras que tuvieron lugar en la agricultura orgánica y que se registraron en la década pasada surgieron pese a la existencia de políticas nacionales. Se necesita reformar dichas políticas. Aquellas políticas que tienden a originar una producción de alimentos mayor tendrán que cambiar si también quieren que haya beneficios ambientales y sociales. Las políticas de alimentos encuadradas en originar alimentos baratos y abundantes sin tener en cuenta la calidad, también deberán cambiar. Por otra parte, las políticas de desarrollo y las instituciones rurales que se centren en soluciones exógenas para los problemas económicos y sociales de las comunidades rurales no se adecuan a las necesidades del desarrollo participativo basado en la comunidad. Sin embargo, existió un reconocimiento global creciente de la necesidad de políticas que apoyen la agricultura sostenible en general y, en algunos casos, específicamente la agricultura orgánica. Si bien casi todos los países apoyan hoy la agricultura orgánica, la evidencia demuestra que sólo se hicieron reformas incompletas.

En algunos contextos en donde se adopta la agricultura orgánica, también existirán compensaciones recíprocas críticas que puedan limitar la difusión. El problema secundario principal que puede surgir en estos proyectos se relaciona con los cambios en la asignación de recursos entre los arrendadores y los arrendatarios y entre los hombres y las mujeres:

La agricultura orgánica que incrementa la base de recursos puede simplemente aumentar los incentivos para que se hagan cargo intereses más poderosos, tales como los arrendadores tomando tierras ya degradadas de los arrendatarios, quienes adoptaron métodos para mejorar la tierra.

Los ingresos adicionales que deriven de las ventas de productos orgánicos, en particular del café y del algodón (pero no de vegetales), se destinarán directamente a los hombres del hogar, quienes con menos frecuencia tienden a invertir en los niños y en el hogar como un todo.

La experiencia de los ejemplos que se mencionaron con anterioridad indica que el desarrollo de la agricultura orgánica en los países en vías de desarrollo requerirá las siguientes acciones:

La agricultura orgánica no certificada está contribuyendo de manera importante a la reducción de la pobreza y a la mejora de los medios de vida rurales y podría aportar más aún si existieran más políticas y colaboración por parte de las instituciones.

La agricultura orgánica tiende más a un manejo y a un conocimiento intensivo, de manera tal que requiere la formación de la capacidad de aprendizaje y cooperativa de los individuos y de los grupos. Este hecho necesita de una inversión en el desarrollo de capital social en el ámbito local.

La agricultura orgánica certificada y no certificada tiende a tener éxito cuando las organizaciones operan en asociación con otras y, como consecuencia, existe la necesidad de trabajar en el ámbito local, nacional e internacional, y de promover nexos entre los gobiernos, las ONG y el sector privado.

Existe la necesidad de invertir más en programas de microcréditos para los hogares rurales.

Existe la necesidad de desarrollar marcos políticos permisivos que fomenten la propagación de más sistemas de agricultura orgánica, que tengan coherencia tanto entre los países industrializados como en los que se encuentran en vías de desarrollo.

Existe la necesidad de redireccionar una gran proporción de los presupuestos destinados a la investigación y a la ciencia hacia las tecnologías agroecológicas y a establecer mejores nexos entre los científicos y los agricultores, siendo la tierra, el agua y el manejo de la biodiversidad y de sus interacciones las principales prioridades.

Los casos que se comentaron en este Capítulo muestran que el aumento en la sostenibilidad agrícola a través de la adopción de métodos orgánicos puede complementarse con las mejoras de los medios de vida de la población rural, dado que se produce un aumento en la producción de alimentos a un costo relativamente bajo. Si se adoptaran ampliamente estos enfoques, tendrían un impacto significativo en los medios de vida de la población rural al igual que en la seguridad alimentaria local y regional. Sin embargo, existen mayores restricciones para superar. Habrá perdedores junto con ganadores y algunos de los perdedores son, en la actualidad, jugadores poderosos (por ejemplo, las compañías de agroquímicos). No obstante, existen organizaciones sociales y movilizaciones en una cantidad de contextos que ya están propiciando alianzas formales e informales nuevas que protegen lo que ya se ha logrado al respecto y desarrollan las condiciones para una mayor difusión[280]. El hecho de mejorar la sostenibilidad agrícola a través de la adopción de la agricultura orgánica no traerá aparejadas todas las soluciones, si bien en los últimos años el progreso que se registró fue promisorio. Estos beneficios de la seguridad alimentaria y de las mejoras al capital natural, social y humano, se podrán difundir a mayor cantidad de agricultores y de población rural en las próximas décadas con más apoyo explícito, en particular, a través de reformas de las políticas internacionales, nacionales y locales.

La agricultura orgánica certificada y no certificada tiende a tener éxito cuando las organizaciones operan en asociación con otras.


[240] Pretty, 1995; Hinchcliffe et al., 1999; Bunch, 2000; FiBL, 2000; Uphoff, 2002.
[241] Carson, 1963; Conway y Pretty, 1991; Steiner et al., 1995; Pimentel et al., 1995; Pingali y Roger, 1995; Waibel y Fleischer, 1998; Norse et al., 2000; Pretty et al., 2000, 2001.
[242] Lampkin y Padel, 1994.
[243] Balfour, 1943.
[244] Conford, 1988.
[245] Para mayores detalles acerca de metodología, ver Pretty et al., 2002.
[246] Borlaug, 1994a, b; Avery, 1995.
[247] Murphy, 1999; Funes, 2001; Kovaleski, 1999; Socorro Castro, 2001.
[248] Pretty y Ward, 2001.
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[250] Ed Ruddell (comunicación personal) 1999; Ruddell, 1995; SAFE, 2001.
[251] Jean-Marc von der Weid (comunicación personal), 2001.
[252] SAFE, 2001.
[253] Jos Harmsen y Hans Bolscher (comunicación personal), 2001.
[254] Miguel Altieri (comunicación personal), 2001.
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[256] Miguel Altieri (comunicación personal), 2001; SAFE, 2001.
[257] M. Saber (comunicación personal), 2001; SAFE, 2001.
[258] Adiss Belake (pers.comm.), 2001; SAFE, 2001.
[259] Food for the Hungry International (pers.comm.); SAFE, 2001.
[260] ActionAid (comunicación personal); SAFE, 2001.
[261] John Devavaram (comunicación personal); Devavaram et al., 1999; SAFE, 2001.
[262] Informe Anual de Manor House; SAFE, 2001.
[263] Peter Omondi (comunicación personal); SAFE, 2001.
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[265] Herren y Pickett. Informe Anual de ICIPE; Pickett, 1999; Khan et al., 2000.
[266] Alberta Mascaretti (comunicación personal); SAFE, 2001.
[267] Randall Brummet, Daniel Jama (comunicación personal); Brummet, 2000; SAFE, 2001.
[268] Ronald Nigh (comunicación personal); SAFE, 2001.
[269] SAFE, 2001.
[270] CWDS, 1999; SAFE, 2001.
[271] Chris Evans, (comunicación personal); SAFE, 2001.
[272] SAFE, 2001.
[273] Amadou Diop (comunicación personal); Diop, 2000; SAFE, 2001.
[274] Abou Thiam y Ngone War Toure. En Myers y Stolton, 1999; SAFE, 2001.
[275] G Ratter. En Myers y Stolton, 1999; SAFE, 2001.
[276] Grupo de desarrollo de tecnología intermedia (comunicación personal); SAFE, 2001.
[277] SAFE, 2001.
[278] Sam Page (comunicación personal); SAFE, 2001.
[279] Pretty e Hine, 2000.
[280] Pretty y Ward, 2001.

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