- la fase de realización en gran escala del programa.
No basta elaborar planes excelentes. El éxito de los programas depende
en definitiva de la ejecución.
Las operaciones deben programarse respetando los objetivos previstos, pero
adaptándolos, si resulta necesario; ésta es la función
del equipo de especialistas encargado de la realización, bajo la dirección
del responsable del programa.
Es preciso pues empezar por constituir este equipo y preparar la enumeración
de las obligaciones, la descripción de las tareas de cada uno de sus miembros.
Antes de empezar las operaciones propiamente dichas debe emprenderse toda una
serie de actividades, a saber:
- preparación de los edificios del proyecto (oficinas, viviendas, talleres, depósitos, garages, etc.);
- constitución del parque de máquinas, vehículos, herramientas, etc.;
- establecimiento de subcontratos, si procede;
- preparación de las obras para los trabajos contra la erosión, la repoblación forestal, las carreteras, etc.;
- cada especialista prepara su plan de trabajo y fichas técnicas para cada operación; los especialistas de la extensión y de las instituciones rurales, del desarrollo comunitario, preparan su material audiovisual (sencillo), adaptado al nivel de educación de la población local;
- se hacen los pedidos de insumos y materiales;- la motivación, la capacitación de los agricultures, de los ganaderos y de los demás miembros de la comunidad local comenzadas durante el periodo de preparación del plan (véase la página 38), deben intensificarse, en el marco de demostraciones de métodos y resultados, con la participación de los interesados; se consultará a los comités rurales de desarrollo con respecto a todos los temas que les afecten;
- el personal de campo será contratado y después capacitado o reciclado en función de las tareas especificas que se confían a cada uno;- etc.
Es evidente que cada operación del programa debe descomponerse y organizarse detalladamente.
Con este fin, se harán fichas técnicas precisas para cada actividad (repoblación forestal, instalación de viveros, puesta en cultivo de parcelas por agrupaciones, construcci�n de letrinas, captación de aguas o mejoramiento de fuentes, mejoramiento del habitat y de la vivienda, etc.). Se prepararán contratos tipo, redactados en la lengua local, en el que se precisarán claramente las obligaciones, las prestaciones y los beneficios de cada parte: el programa, por una parte, las agrupaciones o los individuos (agricultor, ganadero, etc.), por otra.1/El ideal es que los funcionarios y los interesados preparen conjuntamente estas
fichas técnicas y contratos tipo. La colaboración de todos los especialistas,
técnicos, sociólogos, extensionistas, etc., es indispensable, los
unos precisando los datos técnicos (normas, directrices, métodos,
necesidades de insumos, etc.), los otros ocupándose de los aspectos institucionales
(agrupaciones, crédito, cooperativas, motivación, etc.) y legales,
y asegurándose de que los interesados han comprendido bien las condiciones
del contrato y las fichas técnicas.
Actualmente, se tiende a renunciar a la distinción entre cuadros de concepción
y cuadros de ejecución, lo que parece lógico.
En general, el personal se reparte en los niveles siguientes:
- En la cumbre de la jerarquía, los directivos, especialistas de todas las disciplinas que participan en el programa (véase el cuadro de la página 62). El lugar de residencia de esos directivos dependerá de la envergadura del programa; será necesario preverlos en diversos grados administrativos, si se trata de un programa nacional. Además, es indispensable utilizar los servicios de especialistas en organización y métodos, por lo menos para los programas importantes y complejos. Esto no significa que los cuadros técnicos superiores encargados de la ejecución de los programas no tengan el sentido de la organización; pero sería lamentable no recurrir a la competencia de especialistas en la materia para evitar errores, pérdidas de tiempo, siempre costosas, y fracasos.
- En el nivel medio, los técnicos, agentes técnicos de las diversas disciplinas, intermediarios entre los cuadros especializados y los agentes de la base.-En el nivel de las poblaciones locales, los agentes de campo, los agentes de extensión,y en algunos países, los animadores.
En lo que concierne a la agricultura, la cría de ganado, los montes comunales, es preferible que éstos agentes sean polivalentes, es decir, que sean los únicos que trabajen con los campesinos.
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1/ Véase el proyecto PNUD/FAO. HAI/77/005, Projet de protection et d'aménagement
du bassin montagneux du Limbl. Informe de la misión del consultor de la
FAO en fomento de la comunidad y crédito agrícola. Agosto, 1979. Haití.
Este es también el punto de vista de los silvicultores, tal como se precisa
a continuación:
"Los diversos procedimientos de adaptar la silvicultura para hacerla más
sensible y eficaz con el contexto del desarrollo rural tienen en común
la utilización creciente del forestal como agente de extensión, En
muchas ocasiones, la tarea de los forestales consistirá en asesorar y ayudar
a otros en la plantación, cuidado y utilización de los árboles,
más que en encargarse de su administración directa. Ello no significa
necesariamente que deba crearse un servicio independiente de extensión
forestal, especialmente por cuanto ello podría agravar el peligro de que
los agricultores reciban orientaciones contradictorias de fuentes distintas.
El asesoramiento forestal puede proporcionarse más efectivamente por conducto
del mecanismo de extensión agrícola existente. Ello significa, no
obstante, que las administraciones forestales de muchos países se verán
ante la necesidad de agregar a sus servicios existentes para la ordenación
de los terrenos forestales otro servicio para proporcionar el apoyo necesario
a fin de que otros puedan plantar y cultivar los árboles, dentro y fuera
del bosque." 1/ (Véase también el Capítulo 10, en la tercera
parte).
Para los trabajos comunitarios, el mejoramiento del habitat, la constitución
de grandes cooperativas, la artesanía, las actividades femeninas, etc.,
serán generalmente indispensables otros agentes, en las aldeas; ello dependerá
de la intensidad de estas actividades. En tales sectores, los líderes principales
desempeñarán un gran papel, al lado de los agentes y los técnicos.
Algunos trabajos sencillos de conservación de suelos, de repoblación
de parcelas individuales, por ejemplo, podrán ser realizados por los propietarios
y los cultivadores de las tierras (véase la página 15), bajo la dirección
de los agentes de extensión y de contramaestres. Por el contrario, para
trabajos más importantes, que intersen al conjunto de la colectividad local,
deben organizarse equipos de trabajadores y contratar y capacitar a efes de
equipo.
| La motivación, la incitación a las poblaciones locales a "participar" es el tema de todas las disciplinas que intervienen en el desarrollo; cada una puede contribuir a ello, sea despertando el interés de las poblaciones, sea eliminando los obstáculos existentes. |
Esta evaluación debe prepararse al hacer la programación y hacerse a intervalos regulares. Facilitará mucho la tarea una planificación sistemática y detallada, y el empleo de indicadores económicos (variación de los rendimientos, de la productividad, etc.), sociales (nutrición, sanidad, empleo, instrucción, expectativas de vida, etc.), físicos (metros lineales de terrazas realizados, cabeceras de barranco rellenadas, kilómetros de carretera construidos, estanques de piscicultura hechos, etc.), y relativos al medio natural (grado de degradación por la erosión, grado de encenagamiento de lagos y embalses, modificaciones del clima, frecuencia y amplitud de las crecidas, eutrofización de las aguas, modificación de la flora y de la fauna, etc.).
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1/El estado mundial de la agricultura y la alimentación, 1979- PAO. Roma,
1980.
Página 2-34.
Los resultados de esta evaluación deben demostrar si se han alcanzado los
objetivos previstos, en los plazos deseados, y con los fondos con que se contaba.
Si no es así, debe hacerse un estudio detenido para buscar las causas
de los retrasos o fracasos. La retroinformación ("feed-back") es sumamente
importante para la evaluación del programa y muy útil para su reorientación
(véanse las páginas 34Y 35 )
El ideal es que los técnicos que han preparado el plan sean también
los encargados de su realización. De todos modos, el equipo de planificación
debe mantenerse disponibles durante toda la ejecución del programa.
Es raro que un programa se halle en condiciones de realizar todo lo que debe
hacerse. Su función es más bien la de un "motor" que ha de engendrar
el desarrollo en el sentido deseado. Después, cada individuo, cada comunidad
tiene que hacerse cargo de su propio desarrollo.
Es preciso reconocer que los casos en que se ha puesto en marcha este proceso,
después de algunas intervenciones, son bastante raros.
Cabe preguntarse el porqué. ¿Es por falta de motivación? Probablemente.
¿Han sido insuficientes los estímulos materiales (alimentos, equipo,
etc.)? Quizás. Aunque un exceso de donaciones, de subvenciones para las
primeras realizaciones puede entorpecer el camino hacia la autosuficiencia.
| Hasta que no llegue el momento en que los miembros de las comunidades se percaten de los beneficios reales que van a reportarles las intervenciones, no proseguirán por propia iniciativa los trabajos comenzados. |
Lo esencial es que las mejoras realizadas en el curso del programa se mantengan
en estado de prestar los servicios que se esperan de ellas. A
menudo, se trata de obras colectivas (atarjeas, cunetas de carretera, pequeñas
presas en colinas, redes de diversión de aguas, desagües, infraestructuras
sociales, etc.) y es indispensable que instituciones locales (consejos comunales,
agrupaciones, cooperativas) dinámicas, asuman esta responsabilidad. Las
cargas del mantenimiento de estas obras deben repartirse equitativamente, es
decir, en función de los beneficios que obtenga de ellas cada miembro (según
la superficie de las tierras poseídas o explotadas, el núm ero de
cabezas de ganado, la frecuencia de utilización (carreteras), por ejemplo),
con el fin de no perjudicar a los más pobres.
Los trabajos de mantenimiento pueden ser ocasión de empleo para los que no tienen tierras que explotar, mientras que los que las tienen y no disponen de tiempo para participar en esos trabajos podrán contribuir con pagos en dinero. Para evitar injusticias, todas estas prestaciones deben estudiarse cuidadosamente y calcularse de común acuerdo
entre los especialistas del programa y los campesinos. Deberán hacerse constar en contrato entre las diversas partes interesadas. Este será el mejor medio de evitar obstáculos para asegurar la permanencia de las mejoras.
La participación de la población requiere motivación,
extensión y capacitación. Se debe dar particular atención
al comienzo a la satisfacción de las necesidades prioritarias de la comunidad.
