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Aplicación de la estructura Presión-Estado-Respuesta para el programa de Indicadores de Calidad de la Tierra (ICT)

El programa ICT está siendo desarrollado para armonizar los objetivos combinados de la producción de alimentos y de la protección del ambiente y es una de las respuestas a los desafíos planteados por el UNCED en la Agenda 21. A causa de su complejidad, el programa ha comenzado a ser desarrollado en colaboración entre una serie de agencias internacionales - Banco Mundial, FAO, PNUD y PNUMA. Otros colaboradores están siendo activamente buscados para participar en el programa, el que inicialmente será dirigido a los ICT en los países en desarrollo.

Los ICT son necesarios para tratar de solucionar numerosos problemas relacionados con la tierra, de importancia nacional y global, tales como la presión sobre el uso de la tierra, la degradación y la conservación de suelos y aguas, así como también problemas relacionados con las políticas sobre manejo sostenible de tierras. Una vez que los ICT se hayan desarrollado y estandardizado aplicando protocolos científicos internacionales, serán usados para la formulación de políticas y programas para la evaluación distrital, nacional y global, para la supervisión del impacto ambiental y para promover tecnologías, políticas y programas que puedan asegurar el mejor uso de los recursos naturales y el manejo sostenible de la tierra.

La iniciativa de los ICT es similar en su concepto a programas anteriores patrocinados por agencias nacionales e internacionales, tales como los indicadores de desempeño social y económico y de los informes sobre el estado del ambiente. Estos programas fueron iniciados con la colaboración de grupos interesados, usando un proceso reiterativo de indicadores de desarrollo, de prueba, de refinación y de estandardización. Esto llevó a que los indicadores económicos, sociales y ambientales estandardizados sean ahora comúnmente usados para supervisar el desempeño de las economías nacionales y la calidad del aire y del agua. En este contexto, el término tierra no se refiere solo al suelo sino a la combinación de recursos del suelo, el agua, la vegetación y el terreno que proporcionan las bases para el uso de la tierra. La calidad de la tierra es la condición o salud de la misma relativa a su capacidad para un uso sostenible y el manejo del ambiente.

J. Dumanski, Agricultura y Agri-Alimentos, Ottawa, Canadá,
C. Pieri, Banco Mundial, Washington, D.C. EE.UU.A

Aunque el programa es aún nuevo -las actividades preliminares se iniciaron en 1994- se han obtenido numerosos logros:

  1. Se han llevado a cabo dos talleres de trabajo regionales (Cali y Nairobi) y un taller de trabajo de coordinación (Washington). Los talleres de trabajo regionales desarrollaron y probaron algunos de los conceptos pertinentes y de los indicadores preliminares, específicamente para ambientes agrícolas; el taller de trabajo de Washington (junio, 1995) fue la primera reunión formal entre el Banco Mundial, la FAO, el PNUD y el PNUMA para establecer las bases para una coalición necesaria para lanzar ese programa.
  2. La estructura Presión-Estado-Respuesta (PER) usada por la OECD, SCOPE y otras organizaciones nacionales e internacionales para supervisar las realizaciones ambientales, ha sido adoptada como un enfoque común para el programa.
  3. Ha sido preparado un estudio para discusión, el que incluye el concepto de ICT, algunos ejemplos posibles de ICT para ciertas regiones específicas y algunas recomendaciones para su desarrollo.
  4. Ha sido creada una estructura para el programa, que consiste de un pequeño secretariado para ejecutar las actividades del programa y coordinar las actividades de un Comité Asesor Central responsable por estándares científicos y metodológicos y de un Grupo de Apoyo de Donantes para mantener las relaciones y la coordinación con los demás participantes, identificar prioridades y asegurar la coordinación y la financiación.

Los objetivos del programa ICT son:

  1. Desarrollar un conjunto de ICT estandardizados para el manejo de ecosistemas -agrícolas y forestales- en las mayores zonas agroecológicas (ZAE) en ambientes tropicales, subtropicales y templados.
  2. Identificar fuentes de datos y desarrollar métodos estandarizados para análisis, agregación y aplicación de los resultados.
  3. Validar y diseminar los hallazgos entre las principales instituciones responsables de la recolección de datos sobre ICT e identificar la capacidad institucional necesaria para establecer y ejecutar las prioridades de tierras y recursos naturales, las políticas y las tecnologías a nivel distrital, regional, nacional y global.

Los resultados del programa serán:

  1. Un núcleo de información sobre ICT relacionado con problemas de políticas para el manejo de la tierra en regiones tropicales, subtropicales y templadas.
  2. Un grupo de objetivos y umbrales para el estado de los ICT para guiar hacia un mejor manejo sostenible de la tierra a las distintas ecoregiones.
  3. Una base de metadatos con información sobre la tierra establecido en Internet y en el World Wide Web con documentación sobre el tipo de datos y en que agencia están almacenados, la calidad y confiabilidad de los datos y como acceder a los mismos. Se pondrá énfasis en la adecuación de las tierras para el cultivo de árboles, su potencial biológico de producción, las tecnologías actuales para el manejo de la tierra y otra información necesaria para supervisar el cambio de la calidad de la tierra.
  4. Evaluación de las tendencias de la calidad de la tierra en distintas ZAE para ser usadas a nivel distrital, nacional y regional.
  5. Estudios de caso usando datos de países representativos, los cuales serán una parte integral del programa. Desarrollo de ICT a nivel regional y distrital por medio de estudios de caso en ZAE representativas. Los estudios de caso estarán dirigidos a países en desarrollo y sobre la base de agro-ambientes, intensidad del uso de la tierra y cantidad de datos disponibles (ZAE x intensidad de uso de la tierra x disponibilidad de datos). Los estudios de caso utilizarán los datos disponibles de las oficinas nacionales de censo pero también incluirán resultados de estudios en el campo llevados a cabo por las distintas agencias nacionales o internacionales incluyendo organizaciones no gubernamentales. Se planifica llevar a cabo, tentativamente, seis estudios de caso.
  6. Construcción de la capacidad nacional: esta actividad estará estrechamente integrada con las actividades de construcción de capacidad ejecutadas por agencias como PNUMA, FAO, los Centros Internacionales de Investigación Agrícola y otras. Las actividades principales serán la capacitación para la colección de datos georeferenciados, la capacitación en el manejo de datos en PC y la capacitación para el uso del conocimiento de los agricultores y el desarrollo de indicadores cuantitativos a partir de esos conocimientos.

El objetivo es complementar las iniciativas existentes y las nuevas iniciativas sobre manejo del recurso tierra. Esto requiere que esta actividad sea hecha en forma coordinada y cooperativa y dentro de un mismo marco de trabajo.

Los resultados de este programa serán usados para apoyar a los planificadores, a quienes toman decisiones en los gobiernos nacionales, a las instituciones internacionales y agencias donantes, a las organizaciones no gubernamentales que participan en trabajos de desarrollo comunitario y otras. Las actividades iniciales estarán dirigidas a quienes toman decisiones a nivel distrital y nacional.

El qué y el porqué de los indicadores

Los indicadores son datos estadísticos o medidas de una cierta condición, cambio de calidad o cambio en estado de algo que está siendo evaluado. Proporcionan información y describen el estado del fenómeno objeto de estudio, pero con un significado que va mas allá de aquel que está directamente asociado con un parámetro individual (OECD, 1993). Los indicadores deben ser desarrollados de acuerdo a las aplicaciones ideadas, lo que requiere datos básicos y estadísticas confiables. A causa de los requerimientos y prioridades regionales, será difícil o innecesario llegar a un único conjunto de indicadores para muchos de los puntos en consideración. Sin embargo, un agregado común de indicadores clave podrá ser usado como base para comparaciones internacionales (Dumanski, 1994; Bakkes et al., 1994).

Es necesario hacer una distinción entre indicadores y otro tipo de datos estadísticos (Bakkes et. al., 1994; Eswaran et. al., 1994). Las mediciones de algunos eventos o fenómenos producen materiales básicos los cuales después de ser procesados, a menudo son publicados como datos estadísticos. Estos datos estadísticos pueden proporcionar información fundamental o ser indicadores si tienen alguna significación agregada o están ligados a un problema específico. Si el número de indicadores se reduce a causa de su agregación en algún tipo de fórmula, son llamados índices. Algunos ejemplos de índices útiles son el Índice de Desarrollo Humano, el Índice de Contaminación del Aire, el Índice de Peligro de Radiación Ultravioleta y el Índice de Calidad del Agua. Los indicadores de calidad de la tierra (ICT) son datos estadísticos que informan sobre la condición y la calidad del recurso tierra y también sobre las relaciones causa-efecto que pueden dar lugar a cambios en su calidad y las respuestas de la sociedad a esos cambios.

Los ICT también son necesarios para el nuevo proyecto del Banco Mundial Portfolio Management (OPD, 1993), para el desarrollo de las Estrategias de Asistencia a los Países y para los Planes Nacionales de Acción Ambiental. Los ICT deben estar bien inseridos en los objetivos de un proyecto para asegurar que sirven como instrumentos de supervisión durante y después de la vida del proyecto. Los datos estadísticos muy generales pueden proporcionar algunos de los datos necesarios para desarrollar esos indicadores, pero muy a menudo será necesario recolectar otros datos, especialmente información sobre como los agricultores manejan sus tierras y sobre la tasa de adopción de las prácticas conservacionistas. Los criterios para la selección y desarrollo de indicadores han sido preparados por muchas agencias (OECD, 1993; EPA, 1994; Bakkes et al., 1994; WRI/UNEP/UNDP, 1994).

Las estructuras disponibles para la evaluación de los recursos

Los ICT son parte de la familia de indicadores preparados para informar sobre el estado del ambiente. Sin embargo, junto con otros tipos de indicadores, también son útiles para informar sobre el desempeño del sector agrícola ya que ofrecen datos sobre los sistemas de producción. Para guiar el desarrollo de los ICT es necesaria una estructura básica a fin de asegurar que son de valor para un país en lo que hace a su empleo para el manejo de la tierra.

Las estructuras sirven para organizar los datos usados -grandes cantidades- para desarrollar un indicador, para mejorar la accesibilidad del indicador y para incrementar su valor agregado (EPA, 1994). Las estructuras también sirven para unir programas individuales de supervisión, identificar la duplicación y los espacios vacíos, facilitar el desarrollo de nuevos indicadores e incrementar el uso de esta información para el desarrollo de políticas y programas.

Existen actualmente muchas estructuras disponibles para informar sobre temas ambientales. Pueden ser clasificadas como estructuras para justificación, estructuras para información y estructuras para sostenibilidad.

Las estructuras para justificación ambiental pueden ser:

  1. estructuras para justificación social (bienestar) - estas son verdaderas estructuras que reflejan el flujo de recursos a través del sistema pero que han sido ajustadas para incluir costos ambientales y la distribución de estos entre las actividades económicas. Las estructuras para justificación ambiental requieren un equilibrio de los insumos con los resultados de la producción por medio de la incorporación de costos económicos y ambientales y para dar indicaciones claras sobre las pérdidas y ganancias del sistema.
  2. estructuras ambientales (recursos naturales) o justificación "verde" - este es un nuevo enfoque de justificación que requiere que el PBI y el PNI sean ajustados para la depreciación (costo) de usar recursos naturales en actividades económicas (Costanza, 1991; Lutz, 1993). Esto puede involucrar costos ambientales defensivos tales como los que se usan para la prevención de la degradación así como los costos de los usuarios para los recursos naturales degradados. La justificación de los recursos naturales está relacionada con el Sistema Nacional de Justificaciones y se ha convertido en una herramienta importante para las políticas y estrategias ambientales.

Las estrategias para información ambiental pueden ser:

  1. modelos para procesos de toma de decisiones - son estructuras organizacionales que imitan la toma de decisiones sobre temas ambientales en el gobierno u otras agencias; son formas poco desarrolladas de estructuras de información ambiental, pero aún así, son todavía usadas para actividades tales como el Programa de Supervisión y Evaluación Ambiental (EMAP) y en actividades internacionales como la Comisión Conjunta Internacional (IIC) (EPA, 1994).
  2. estructura presión-estado-respuesta (PER) - esta estructura une la presión sobre el ambiente como resultado de las actividades humanas con cambios en el estado -condición- del ambiente -tierra, aire, agua. A continuación, la sociedad responde a esos cambios con nuevos programas y políticas ambientales dirigidos a reducir, mitigar o reparar las presiones sobre los recursos naturales (OECD, 1993).
  3. estructuras espaciales - este es un grupo general de estructuras que abarca aquellas que se usan aisladamente para evaluar el aire, el agua, la tierra, la flora y la fauna, junto con los varios sistemas de clasificación ecológica de tierras usados para evaluación, planificación y manejo ambiental. Aunque son de fácil comprensión no reflejan adecuadamente los modelos y los procesos de los ecosistemas y no señalan problemas ambientales de importancia para los gobiernos. De hecho, solamente se refieren a la dimensión "estado" del enfoque PER, sin relacionar esto a las presiones de la actividad humana o a las respuestas de la sociedad.

Las estructuras para evaluar la sostenibilidad y el desarrollo sostenible pueden ser :

  1. el enfoque de agroecosistemas - este enfoque se basa en la evaluación del desempeño de los agroecosistemas de acuerdo a dimensiones ecológicas, económicas y sociales, usando cuatro criterios para la sostenibilidad, a saber: productividad, resiliencia, estabilidad y equidad. Haciendo un control cruzado del flujo de recursos y materiales con las dimensiones y los criterios para sostenibilidad permite evaluar el desempeño y la sostenibilidad de los agroecosistemas.
  2. productividad total (factor) - es la relación entre el valor de toda la producción dividido entre el valor económico de todos los insumos normalizados para eliminar eventuales cambios en los precios (Lynam y Herdt, 1988; Harrington et. al., 1994; Whitaker, 1994). La productividad total es la inversa del costo unitario de producción cuando se incluyen los costos de degradación ambiental. Los sistemas agrícolas se consideran sostenibles cuando la productividad total muestra una tendencia no declinante. Esta estructura ha sido adaptada a los centros del CGIAR para propósitos de investigación.
  3. la Estructura Internacional para Evaluación del Manejo Sostenible de la Tierra - el manejo sostenible de la tierra (MST) describe los objetivos complementarios de mantener y fortalecer la calidad de la tierra y al mismo tiempo proporcionar oportunidades económicas, sociales y ambientales para el beneficio de la actual y de las futuras generaciones. El manejo sostenible de la tierra puede ser evaluado por medio del desempeño de los cinco pilares del MST, o sea el mantenimiento y el fortalecimiento de la productividad, la reducción de los riesgos, el fortalecimiento de la calidad ambiental (tierra), la viabilidad económica y la aceptabilidad social (Smyth y Dumanski, 1994). El marco de un análisis lógico se usa para ajustar los aspectos imprecisos de la sostenibilidad, por ejemplo, evaluación de la sostenibilidad inferida en grados de probabilidad. Este marco se relaciona estrechamente con la estructura del PER para información ambiental y está siendo evaluado en varios casos de estudio en todo el mundo.

Cada estructura tiene un diferente grupo de objetivos y cada una de ellas es usada para un propósito diferente. Aunque son necesarios grupos de indicadores para cada estructura, estas son en cada caso bastante diferentes. Las secciones que siguen describen algunos procedimientos recomendados para la aplicación del enfoque de las PER para el desarrollo de los ICT.

Aplicación de la estructura presión-estado-respuesta para el desarrollo de indicadores de la calidad de la tierra

Los informes sobre ICT indican las condiciones biofísicas de la tierra, la forma en que esta es manejada y las políticas y los ambientes sociales para introducir mejoramientos en su manejo o los que agravan su deterioro. Esto se obtiene usando la estructura PER.

La estrutura PER ha sido modificada ligeramente y adoptada por el Banco Mundial para desarrollar indicadores ambientales e ICT (O'Connor, 1994b). En el caso de los ICT, la estructura PER se usa para dar forma y clasificar la información y para ayudar a la identificación del grupo clave de indicadores que describen en la mejor forma posible como los agricultores manejan sus tierras y el impacto de tal manejo.

El PER (Figura 1) es una representación conveniente de las relaciones entre las presiones ejercitadas sobre la tierra por la actividad humana (columna presiones), el cambio en calidad del recurso (columna estado) y la respuesta a esos cambios a medida que la sociedad intenta aliviar la presión o rehabilitar la tierra que ha sido degradada (columna respuestas). Los intercambios que ocurren entre esos elementos forman un sistema continuo de retroalimentación que puede ser supervisado y usado para la evaluación de la calidad de la tierra.

Un índice único de calidad de la tierra en esta etapa no es ni posible ni deseable, pero pueden ser desarrollados grupos de indicadores que reflejen las dimensiones del PER en la calidad de la tierra.

Se han desarrollado tres grupos de ICT para reflejar la estructura del PER:

Figura 1

Estructura presión-estado-respuesta

Grupo 1. Presión sobre el recurso tierra

Los indicadores en este grupo incluyen aquellas actividades que se relacionan al grado de intensificación y diversificación de los usos agrícolas de la tierra y que, como consecuencia, resultan en un aumento de la presión sobre la calidad de la misma. Esto puede incluir el número de cultivos por año o por hectárea dentro de un sistema, el tipo y la intensidad de la labranza, el grado de remoción de la biomasa, la integración con los sistemas ganaderos, el número de productos -alimentos o fibra- producidos anualmente, etc.. Estos indicadores deben ser considerados dentro del contexto de los principales factores socio-demográficos como la presión de la población o la tenencia de la tierra, si bien el último elemento citado no se incluye en los ICT. Esto se debe a que estas fuerzas no tienen influencia directa sobre la calidad de la tierra sino sobre las prácticas que adoptan los agricultores a causa de ellas. Son estos sistemas de manejo y sus impactos los que se desean capturar como ICT aun cuando los cambios en las fuerzas concurrentes pueden anticipar algunos avisos.

Grupo 2. Estado de la calidad de la tierra

Los indicadores del estado de la calidad de la tierra reflejan las condiciones de la misma así como su resiliencia para soportar cambios a consecuencia de las presiones del sector. Esto puede incluir indicadores que expresen cambios en la productividad biológica -real y potencial- la extensión y los impactos de la degradación del suelo, incluyendo erosión, salinización y otros similares, equilibrio anual y a largo plazo de los nutrimentos -o sea exportados o importados por los sistemas de cultivo-, grado y tipo de contaminación -directa o por transporte atmosférico-, cambios en el contenido de materia orgánica, capacidad de retención de agua, etc.. Los cambios en el estado pueden ser negativos con un manejo pobre o positivos con un buen manejo.

Grupo 3. Respuesta(s) de la sociedad

Los mecanismos de respuesta son normalmente puestos en funciones por medio de acciones directas de los mismos agricultores al evolucionar o al adoptar sistemas mejorados de manejo de tierras o por medio de acciones complementarias para la adopción de tecnologías conservacionistas estimuladas por programas y políticas económicas generales, agrícolas o de conservación. En algunos casos pueden ser necesarias reglamentaciones o legislaciones ambientales a fin de poder controlar efectivamente la degradación de la tierra. Los indicadores de las respuestas pueden incluir el número y el tipo de organizaciones de los agricultores para la conservación de suelos, la extensión del cambio de las tecnologías usadas dentro de la finca, estrategias de manejo de riesgos, programas incentivados para la adopción de tecnologías conservacionistas, etc.. Los indicadores de respuesta deben ser distinguidos en aquellas categorías promovidas por el gobierno, aquellos que son iniciativa de los agricultores y aquellos apoyados por los comerciantes del sector agrícola.

Datos disponibles y procedimientos para el desarrollo de los ICT

Una base de datos sólida sobre suelo, clima y uso y manejo de la tierra es necesaria para desarrollar un ICT eficaz. Aunque esta información puede ser a menudo incompleta o estar ausente en muchos países, algunos datos están casi siempre disponibles. Además, muchas instituciones internacionales han compulsado y organizado algunos de esos datos en forma compatible con formatos de ordenadores. Estos bancos de datos disponibles proporcionan un útil punto de partida para el desarrollo de programas de ICT, aunque es necesario señalar que ninguna organización ha, hasta el momento, reunido una base de datos de esas características y directamente disponible para el desarrollo de los ICT.

Algunos de los datos mas útiles ya compulsados son descriptos brevemente mas adelante. Estos datos están ordenados de acuerdo a la estructura PER, a saber, la utilidad de los mismos para desarrollar indicadores de presión, indicadores de estado o indicadores de respuesta.

ICT de presión - bases de datos disponibles y procedimientos para su desarrollo

Los ICT de presión pueden ser desarrollados en muchos casos usando bases de datos estadísticos (censos). Para los proyectos financiados por el Banco Mundial, las bases de datos mas útiles son:

  1. la Base de Datos Económicos y Sociales del Banco Mundial (BESD)1: la base de datos BESD contiene cerca de dos millones de series en 40 archivos de datos del Banco Mundial, FMI, NNUU, UNIDO, UNESCO, FAO, OECD, y OMT (Banco Mundial, 1993). Es mantenido por la División de Economía Internacional en colaboración con los usuarios de los datos y los compiladores del Banco. Para los ICT, los archivos de datos mas útiles son FAOPROD, FAOFERT y algunos de los Indicadores para el Desarrollo Social (SOCIND) relacionados al trabajo agrícola. Estos son archivos de datos estadísticos típicos (datos de productos básicos obtenidos de censos agrícolas) obtenidos en forma regular de la Oficina de Estadística de la FAO; contienen principalmente datos de la producción nacional de productos agrícolas básicos (cultivos, animales, área, rendimiento), insumos (uso de fertilizantes y otros insumos) y cultivo (uso de la tierra, área cosechada, irrigación). La serie continua de datos se inicia en 1961. Estos datos pueden ser usados para desarrollar indicadores nacionales de base amplia, tales como las relaciones de:

    Tales indicadores identifican presiones potenciales sobre la tierra debido a actividades agrícolas (ICT de presión). Aunque los objetivos y los umbrales para esos indicadores no están aún disponibles, las líneas tendenciales de desempeño proporcionan información útil para estimar los cambios del impacto en el tiempo.

  2. World Resources Institute -Base de Datos 1994-95: esta es una base de datos compatible con PC y consiste de 503 variables para 198 países. Es la fuente de datos para la publicación del WRI sobre condiciones y tendencias globales (WRI/UNEP/UNDP, 1994). En algunos aspectos esta base de datos es similar a la BESD ya que contiene algunas de las mismas variables y de las mismas fuentes, por ejemplo, FAOPROD, pero los datos son mas elaborados y frecuentemente resumidos y presentados como proporciones, lo cual hace que sean mas útiles como indicadores. La base de datos proporciona datos estadísticos económicos, de población, recursos naturales y ambiente en una sola unidad y en series de 5, 20, 30 y 40 años para muchas de las variables. Los archivos de datos mas útiles para los ICT son Cobertura del Suelo y Colonización, Alimentos y Agricultura, Bosques y Tierras de Pastoreo, Biodiversidad, Agua y Atmósfera y Clima.
  3. Base de Datos UNEP/GEMS/GRID: el Sistema Global de Supervisión del Ambiente (GEMS) es operado por UNEP en colaboración con otras organizaciones del sistema de Naciones Unidas, gobiernos, grupos ambientales y organizaciones científicas. El GEMS no genera nuevos datos sino que acepta datos de otras organizaciones nacionales e internacionales tales como la FAO y armoniza y pre-procesa los datos para compatibilizarlos y hacerlos accesibles y útiles a los usuarios. A través del Banco de Datos sobre Información de Recursos Globales (GRID), el GEMS mantiene una variedad de bases de datos ambientales a nivel regional y global que abarca datos sobre suelos, vegetación, clima y cultivos útiles para los ICT. El GEMS recibe y almacena indicadores ambientales basados en datos de sensores remotos tales como índices de vegetación semanales y estacionales de la NOAA y de la NASA y los índices de intensidad de cultivo del Instituto para Estudios Espaciales Goddard. Estos índices aportan información útil sobre la extensión de la cobertura del suelo y los peligros de la erosión.

Conclusiones sobre los ICT de presión:

ICT de Estado - Bases de datos disponibles y procedimientos para su desarrollo

Mientras que los ICT de Presión pueden ser desarrollados usando las bases de datos disponibles, la situación no es tan clara con respecto a los ICT de Estado. Están en preparación algunos programas para ordenadores para bases de datos nacionales y globales, los mas útiles de los cuales se describen mas adelante. En muchos casos, sin embargo, los datos permanecen dispersos a nivel individual en bancos de datos especializados. Estos datos también deben ser suplementados con datos de otras fuentes tales como experimentos a largo plazo o por estimaciones obtenidas de modelos de procesos físicos, de sensores remotos y de otras técnicas relacionadas. Los datos mas útiles para los ICT de estado se describen a continuación.

Bancos de Datos Regionales y Globales para ICT de Estado

  1. Base de Datos de la FAO: además de los datos estadísticos citados anteriormente, la FAO también mantiene una colección de bases de datos sobre suelos y agroecología, algunos de los cuales se originan solamente dentro de la FAO y otros en forma conjunta con otras instituciones internacionales, tales como IIASA, UNEP e ISRIC. Las bases de datos mas útiles para los ICT incluyen lo siguiente:

    Banco de Datos de Zonas Agroecológicas: esta es una base de datos que incluye información sobre suelos, clima, topografía y parcialmente sobre uso de la tierra. Contiene 500 000 registros para el período 1969-1990. La base de datos está también unida a un modelo generalizado de crecimiento de los cultivos usado para estimar los rendimientos ideales -rendimiento de los cultivos basado en coeficientes genéticos, radiación fotosintéticamente activa, temperatura, duración del período de crecimiento- y los rendimientos anticipados-rendimientos ideales ajustados por limitaciones del suelo tales como agua, salinidad, acidificación, erosión- para cultivos económicamente importantes. En la práctica los rendimientos ideales no son un indicador útil excepto como un máximo teórico para fines experimentales. Los rendimientos anticipados, sin embargo, ofrecen estimaciones útiles de rendimientos agronómica y económicamente posibles, -siempre y cuando estas estimaciones sean debidamente consideradas como tales- y puedan ser comparadas con los rendimientos a nivel de finca para desarrollar ICT reales.

    Rendimiento (potencial) anticipado: cuando este ICT se acerca a o excede de 1,0 indica una intensidad creciente en el manejo de la tierra, señalando así la necesidad de controlar los posibles problemas de la calidad del agua y una excesiva fertilización. Por otro lado, valores < 0,2 indican un desempeño marginal o submarginal del cultivo en esa área. Esto podría ser debido a un bajo nivel de fertilización (posible extracción continuada de nutrimentos), a problemas potenciales e importantes de degradación o a una inadecuación del cultivo en esa región.

    CDROM-Mapa de Suelos del Mundo: es una base de datos de suelos que consiste de la versión digital del Mapa de Suelos del Mundo (1:5M) y varias interpretaciones de los suelos. Los perfiles de suelos georeferenciados -descripciones y datos analíticos- son almacenados en la Base de Datos de Suelos FAO/ISRIC. Se estima que la FAO mantiene registros para cerca de 175 perfiles de suelos.

  2. Base de Datos ISRIC:

    SOTER: esta base de datos consiste en archivos de mapas de suelo y topografía para países seleccionados, principalmente de América Latina, Cercano Oriente y África oriental producidos en colaboración por ISRIC, FAO y UNEP. La información está disponible en escalas de 1:1M o menores y en escalas mayores para algunos países. La base de datos SOTER está siendo expandida a medida que la tecnología se usa en otras regiones.

    GLASOD: esta base de datos global consiste en un mapa digital (1:10M) de la degradación inducida por el hombre; es producida por ISRIC con el apoyo de UNEP y proporciona estimaciones de la clase, grado y extensión de la degradación en todos los países del mundo. El mapa y los datos están basados en evaluaciones estimadas de la degradación -en vez de valores medidos- proporcionados por técnicos locales en cada país y por esta razón ha sido criticada por la comunidad de científicos del suelo. Aún así provee la única estimación global de degradación de tierras disponible y continuará a ser usada hasta que surja otra mas confiable.

    WISE: esta base de datos combinada consiste de datos de suelos disponibles en la FAO, NRCS e ISRIC. Los datos almacenados contienen 4 353 perfiles de suelos (África- 1 799; Sur, Oeste y Norte de Asia- 522; China, India y Filipinas- 553; Australia e islas del Pacífico- 122; Europa- 492; América del Norte- 226; América del Sur y el Caribe- 599). Estos perfiles de datos son complementados con una base de datos de celdas matriciales simplificadas (medio grado) del Mapa de Suelos del Mundo.

  3. Base de Datos - World Soil Resources: esta base de datos es mantenida por el Servicio de Conservación de Recursos Naturales-USDA (ex-Servicio de Conservación de Suelos) y consiste en una serie de mapas de suelos digitales (ARC/Info y GRASS), globales, nacionales y regionales, a distintas escalas, así como pedones de suelos (perfiles), carbono del suelo y clima del suelo. La base de datos de pedones del suelo contiene cerca de 17 000 registros completos de los cuales 2 437 son geo-referenciados (345 de América del Sur y Central, 179 de Asia y el Pacífico Sur, 422 de Europa, 43 de América del Norte -exluyendo los Estados Unidos- y 1 386 de otras regiones). La base de datos sobre carbono del suelo está constituida sobre pedones seleccionados del archivo de pedones del suelo y consiste en 2 120 pedones de los cuales 743 están fuera de los Estados Unidos de América. Este archivo es útil para los estudios sobre el secuestro del carbono y el manejo de la materia orgánica en relación al cambio climático. El archivo del clima del suelo se ha desarrollado por medio de un procedimiento que tiene acceso a bases de datos de mas de 27 000 estaciones, la base de suelos del mundo de la FAO y el archivo de pedones del suelo. A través de esta interacción se puede generar la siguiente información:

    Actualmente, los archivos de datos espaciales -mapas digitales- son mínimos, consistiendo solo de 26 mapas, todos ellos fuera de los Estados Unidos; hay un mapa continental de África (1:5M) y un mapa digital de suelos del mundo (1:30M), ambos derivados de una versión anterior del Mapa de Suelos del Mundo. El número de mapas digitales almacenados continúa sin embargo aumentando.

  4. Bases de Datos mantenidas por los Centros del CGIAR: son bases de datos orientadas a la investigación, mantenidas por varios de estos Centros en apoyo de sus mandatos de investigación regional y global. Los datos mantenidos en algunos de los Centros, en especial en el CIAT y el ICRAF, son abundantes si bien pueden no tener cobertura continental o global de varios temas; es de reconocer, sin embargo, que este es un hecho normal en organizaciones orientadas a la investigación ya que muchos de sus archivos de datos se originan en las actividades de los proyectos. Los datos contenidos se pueden resumir en la forma siguiente:

    CIAT: la cobertura mas completa se refiere a la información climática para todos los trópicos (19 000 estaciones) y elevaciones topográficas. Los datos sobre suelos son mínimos incluyendo solamente las secciones para América Latina y África del Mapa Mundial de Suelos de la FAO. La información adicional incluye caminos y áreas protegidas legalmente (América Latina), vegetación (América del Sur), sistemas de tierras (trópicos bajos, América Latina), límites administrativos (América Latina y África) y algunas coberturas adicionales como densidad de población (África), límites tribales (África), etc., los que se originan del estudio de la mandioca en África. Mucha de esta cobertura está almacenada en el formato de 10 arcos-minutos y sus resultados están producidos como modelos de elevación digital (DEM). El CIAT ha sido una institución pionera en el uso de los sistemas GIS dentro del CGIAR y tiene instalaciones eficientes operando con programas de ordenadores ARC/Info e IDRISI.

    ICRAF: tiene una instalación nueva y mas producida pero similar a la del CIAT en cuanto a capacidad técnica y volumen. La mayor parte de los datos se refieren a África continental. La mayor cobertura está dirigida a datos climáticos consistiendo de medias mensuales reales y estimadas y de datos diarios (8 000 estaciones, con una serie de 17 años). Los coeficientes climáticos fueron obtenidos del CIAT, del Centro para Recursos y Estudios Ambientales (CRES) (Australia) y de varias agencias climatológicas nacionales. Los datos sobre suelos son esbozados y hay mapas digitales de suelos para siete países (1:1M). Otros datos tales como la vegetación y la cobertura del suelo son incompletos. Los DEM obtenidos del Centro de Datos del Sistema de Observación de los Recursos Terrestres (CROS) están disponibles para toda África. El sistema del ICRAF se está desarrollando en forma acelarada y es de esperar que su contenido de datos aumente considerablemente en los próximos años.

    ICRISAT: los datos mantenidos por ICRISAT incluyen datos climáticos para largos períodos de siete países de África, dos de Asia y uno de América del Sur. Hay algunos datos detallados de pedones de suelos de seis países de África y uno de Asia y hay datos con estudios detallados a nivel de comunidades de tres países de África y de la India; los datos para la productividad de los cultivos disponibles corresponden a la India y a seis países de África. No está claro si esos datos son mantenidos en el formato GIS.

Experimentos agronómicos a largo plazo

La Fundación Rockefeller ha recientemente completado un inventario global de experimentos agronómicos continuos a largo plazo como fuente de información para los investigadores en temas relacionados con el desarrollo sostenible (Steiner y Herdt, 1993). Los registros incluyen diez experimentos en África -desde 1912-, 24 experimentos en Asia -desde 1909- y nueve experimentos en América del Sur y Central -desde 1941. El tipo de datos, y a menudo su calidad son variables, como es de esperar, y en general incluyen datos agronómicos, características del suelo, fisiología, tiempo y datos económicos. Estos datos pueden ser una valiosa fuente de información para el desarrollo de los ICT.

Uso de modelos de procesos físicos

La escasez general de información para el desarrollo de los ICT para Estado requiere el uso de medidas indirectas, las mejores de las cuales son modelos de procesos físicos. Existen muchos modelos disponibles en el ambiente de las ciencias del suelo, pero la mayoría han sido desarrollados primeramente para la investigación y no pueden ser aplicados fácilmente para programas operativos como los ICT. Sin embargo, hay un considerable aumento de una familia de modelos que han sido verificados en numerosos ambientes, incluyendo en alguna medida los trópicos, y que han demostrado ser adecuados. Los programas mas importantes de este tipo para los ICT se describen a continuación:

  1. Calculador del Impacto de la Erosión sobre la Productividad (EPIC): el programa EPIC fue desarrollado por el Departamento de Agricultura (USDA) y por el Servicio de Investigación Agrícola (ARS) de los Estados Unidos de América (USDA), en un principio como una herramienta para analizar los impactos del manejo de suelos y de la erosión sobre el rendimiento de los cultivos y posteriormente ha sido ampliado para incluir la evaluación de la calidad del agua, de los pesticidas y de otros elementos. El EPIC consiste de diez subrutinas mayores, a saber, tiempo, hidrología, erosión hídrica y eólica, transformación del nitrógeno y del fósforo, temperatura del suelo, crecimiento de los cultivos, macollaje, control del ambiente de las plantas (irrigación, encalado, etc.), uso de pesticidas y rendimiento económico de los cultivos. Los resultados interinos y finales de cada subrutina se encuentran disponibles en incrementos diarios, mensuales o anuales. Aunque los insumos del modelo son flexibles por medio de muchas opciones por defecto, el modelo requiere datos confiables sobre las propiedades del suelo, insumos de los cultivos y manejo de las labores (el tiempo -climático- es generado a través de un generador de tiempo). EPIC genera varios resultados potencialmente útiles para los ICT, a saber:

    Las tasas de cambio son calculadas por medio del EPIC usando varios escenarios de manejo de tierras a lo largo del tiempo -normalmente 30 años. El programa EPIC está siendo adaptado para muchas regiones templadas y tropicales como una herramienta para evaluar las formas de manejo de la tierra, especialmente su laboreo y el manejo de los residuos. También ha sido integrado con grandes modelos de optimización económica para proveer sistemas analíticos para la evaluación del impacto ambiental antes de implementar programas y políticas agrícolas.

  2. CENTURY: el modelo CENTURY simula los efectos de la erosión sobre el almacenaje a largo plazo del carbono orgánico del suelo en condiciones de campo. La materia orgánica del suelo es dividida en grupos de tasas de cambio: activa (1,5y), lenta (25y) y pasiva (1000y). Una subrutina de producción de los cultivos simula la distribución del carbono a las raíces y los tallos dividiendo el residuo de la planta en un grupo metabólico (0,1-1y) y un grupo estructural (1-5y) basado en la proporción lignina:nitrógeno; en este momento el modelo transfiere el carbono al suelo y simula la estabilidad del carbono por medio de interacciones con las moléculas de arcillas y de compuestos orgánicos. Las estimaciones del cambio del carbono del suelo se obtienen usando CENTURY bajo las condiciones iniciales (en general, las condiciones corrientes) y otra vez para futuros escenarios bajo nuevas tecnologías de manejo. Los resultados útiles para los ITC incluyen:
  3. NUTMON: es un modelo desarrollado recientemente para estimar las pérdidas o ganancias regionales de nutrimentos como consecuencia del ingreso de nutrimentos -fertilizantes minerales, abonos orgánicos, deposición seca y húmeda, fijación de nitrógeno, sedimentación- comparados con las pérdidas de nutrimentos -producto cosechado, remoción de los residuos de cultivos, lixiviación, erosión, denitrificación (Smaling, 1993). Los datos para el ingreso de nutrimentos y para los nutrimentos quitados por la cosecha se reúnen en varios sistemas de uso de la tierra y las estimaciones para las otras variables se calculan usando los modelos disponibles. En ese momento usando NUTBAL se calcula si los sistemas están ganando o perdiendo alguno de los macronutrimentos. Los resultados se pueden extrapolar a áreas mayores usando las técnicas del GIS. El programa NUTBAL está aún en la fase experimental, pero ha sido usado con éxito en algunos estudios en Kenya.

Desarrollo de Indicadores Substitutivos

Cuando no haya información disponible de fuentes confiables será necesario desarrollar indicadores substitutivos de ICT de estado. Algunos substitutos, tales como el Índice Normalizado de Diferencia de Vegetación pueden ser obtenidos por medio de sensores remotos o por análisis de fotografías aéreas. También se pueden obtener indicadores substitutivos a partir de relaciones causa:efecto conocidas, tales como:

Conclusiones sobre los ICT de estado:

Datos disponibles y procedimientos para el desarrollo de los ICT de respuesta

La respuesta a la información proporcionada por los ICT está referida en primer lugar a la adopción de medidas de conservación de suelos. Esto involucra al mismo tiempo la conciencia colectiva del problema de la conservación y el conocimiento necesario para saber como proceder, así como también la adopción de tecnologías conservacionistas específicas por parte de los agricultores. Las respuestas a los ICT se distinguen entre aquellas promovidas por los gobiernos, aquellas apoyadas por el sector comercial agropecuario y aquellas tomadas por los agricultores a nivel individual. Las respuestas a los ICT de parte de los gobiernos son, por lo general, de alcance nacional -algunas veces regional- mientras que la adopción de tecnologías conservacionistas por parte de los agricultores es por lo general local o regional.

Fuentes de información para respuestas nacionales a los ICT

Las respuestas a los ICT pueden ser desarrolladas reuniendo y evaluando las actividades llevadas a cabo por los gobiernos, el sector privado, las organizaciones no gubernamentales y los agricultores respecto a los problemas de degradación del suelo. Los gobiernos normalmente responden con programas de concienciación de la opinión pública, con programas para incentivar la adopción de prácticas conservacionistas, el mejoramiento de los servicios técnicos de asesoramiento y, en algunos casos, con legislación. Muchas de estas actividades pueden ser ejecutadas en forma colaborativa entre los gobiernos, el sector privado y las organizaciones no gubernamentales.

La información sobre estas iniciativas está por lo general disponible en las agencias gubernamentales pertinentes y en los registros de las organizaciones no gubernamentales, compañías de productos químicos y maquinaria y otras. También hay información útil en numerosos proyectos de evaluación participativa rural completados por medio de estudios financiados por el Banco Mundial, organizaciones no gubernamentales y otras instituciones. Esta información puede ser usada para desarrollar ICT de respuesta tales como:

La presencia e impacto de los grupos de agricultores autogestidos para la conservación del suelo tales como los grupos conservacionistas y el Club da Terra pueden ser poderosos ICT de respuesta. Si estos grupos son fuertes y activos, esto indica que los agricultores tienen conciencia de los problemas de degradación y están preparados para hacer inversiones y encontrar soluciones a los mismos, si bien normalmente para su comienzo puede ser necesario un programa de incentivos y colaborar con el costo inicial de las inversiones. Los grupos y asociaciones de agricultores conservacionistas no deben sin embargo ser confundidos con cooperativas agrícolas de producción y comercialización. En algunos casos estas cooperativas pueden también promover la conservación de suelos, pero su objetivo principal es la parte comercial, lo cual puede a veces ser contraproducente.

Información sobre la adopción de tecnologías de conservación de suelos

La adopción de tecnologías mejoradas para la conservación de suelos por parte de los agricultores es una información estadística importante para los ICT, aunque por lo general raramente está disponible y debe, por lo tanto, ser recolectada. Puede ser obtenida a través de programas tales como el censo agropecuario -ya sea un censo total o estudios especiales- o puede ser obtenida como parte de actividades de proyectos específicos. Cualquiera de los procedimientos que sea seleccionado requiere un cuestionario especial sobre manejo de la tierra para obtener los datos adecuados. El cuestionario debe tener un diseño estratégico y debe ser breve y eficiente respecto a su costo de ejecución (ejemplo en Apéndice 1). Con tales datos, pueden ser elaborados los ICT de respuesta, tales como:

Las arriba citadas pueden ser resumidas como las respuestas nacionales a los ICT o pueden también ser presentadas por regiones específicas cubiertas por un proyecto. Las respuestas a los ICT basadas en la media de tasas de adopción son útiles pero tienen que ser correlacionadas con las restricciones productivas o biofísicas prevalentes en el área, por ejemplo, la falta de técnicas para el control de la erosión eólica en un área a riesgo de vientos fuertes puede indicar una falta de conciencia colectiva respecto al problema. Se debe tener sumo cuidado para evitar que las condiciones medias nacionales no enmascaren una variabilidad local; por ejemplo, una finca particular puede ser sostenible en razón de un mejor manejo en un área donde hay serios problemas o viceversa.

Los grandes cambios en el uso de la tierra, llamados a veces indicadores de insostenibilidad (Jodha, 1990) son también útiles como ICT de respuesta. Estos cambios ocurren cuando el rendimiento de un área se ha deteriorado mas allá de un umbral aceptable y la sobrevivencia depende en la adopción de ciertas alternativas, a menudo en sistemas menos intensivos. Tales respuestas de ICT pueden ser:

En el otro extremo de la escala, también pueden ocurrir cambios importantes en el uso de la tierra debidos a nuevas oportunidades de los mercados o a cambios en la disponibilidad de los recursos. En todos los casos, los ICT de respuestas deben ser interpretados en base al conocimiento de la(s) motivación(es) para la respuesta.

Guías para aplicar la estructura PER

Se han desarrollado algunas guías para usar la estructura del PER con los ICT. Los indicadores de presión y de respuesta son generalmente considerados como correspondientes al sector agrícola -incluyendo como agrícola también los usos forestales y otros usos biológicos de la tierra- mientras que los indicadores de estado se relacionan directamente a los cambios en la condición y en algunos casos a la cantidad del recurso tierra. Los cambios en estado, aún aquellos de magnitud limitada como la oxidación de la materia orgánica o el balance de nutrimentos, pueden tener un impacto considerable si ocurren en áreas grandes.

La información de los sectores presión y respuesta son útiles para expresar los impactos del sector sobre la condición de la tierra y, por lo tanto, se relacionan directamente al ambiente de las políticas. Los indicadores que pueden mostrar relaciones entre la presión y el cambio en estado generalmente tienen mayor significado para quienes toman decisiones sobre el ambiente.

La aplicación del enfoque PER para los ICT requiere que ciertos temas claves sobre la tierra sean identificados para cada conjunto de indicadores; por ejemplo, ¿cuáles son las preguntas relacionadas con los temas claves sobre la tierra que deben ser respondidas? Estas preguntas deberían ser planteadas cuidadosamente desde el momento que son fundamentales para identificar los principales indicadores y sub-indicadores estratégicos que deben estar asociados con cada tema y con cada conjunto. Normalmente esos temas están asociados con regiones geográficas específicas y reflejan las prioridades de esas regiones.

En ese momento, si es posible, deben ser desarrollados los indicadores para cada meta u objetivo (Adriaanse, 1993), así como también los umbrales donde los sistemas pueden comenzar a ser insostenibles (Smyth y Dumanski, 1994). El desempeño de un sector puede entonces ser supervisado en relación a esas metas, objetivos y umbrales y, por ejemplo, puede ser evaluada la contribución del sector al mantenimiento o a la degradación de los recursos. Si no se pudieran establecer claramente objetivos en bases confiables y científicas y no se pudieran definir los umbrales, la tendencia del desempeño puede de cualquier manera proporcionar información útil.

La estructura presión-estado-respuesta ha sido usada para informar sobre el estado del ambiente y para revisiones de desempeño ambiental a nivel nacional. Para los ICT, se ha usado para conformar y clasificar la información y para asistir en la identificación de los indicadores clave que describan mas adecuadamente la forma en que los agricultores manejan sus tierras y los impactos de los distintos tipos de manejo.

La estructura del PER permanece en un estado continuo de evolución. La Agencia de Protección Ambiental, (EPA, EE.UU. de América, 1994) está proponiendo extender la estructura para incluir los efectos del cambio en estado del ambiente -presión-estado-respuesta/efectos. La UNEP (1994) está discutiendo el desarrollo de la estructura presión-estado-impacto-respuesta (PEIR). O'Connor (1994a) ha extendido la estructura PER al desarrollo de una matriz de sostenibilidad. Recientemente, la EPA (1994) ha propuesto reorientar la información ambiental acercándose a un enfoque de generación en el lugar, usando estratificación de ecosistemas, datos referenciados espacialmente y sistemas geográficos de información.

Programa de las principales actividades y metodología para el programa de los ICT

El programa para los ICT está dirigido a objetivos, resultados y beneficiarios específicos. El programa intenta llegar a un desarrollo eficiente respecto a su costo y a la validación de indicadores armonizados que puedan reflejar un amplio consenso. Las actividades y los programas que ya están en ejecución serán incluidos a fin de evitar duplicación de esfuerzos y recursos. Las actividades relacionadas a los ICT, tales como aquellas que están en ejecución en FAO, UNEP, UNDP, OECD, instituciones del CGIAR, y varias sociedades científicas tales como SCOPE y el Consejo Internacional de Sindicatos Científicas (ICSU) también serán usadas.

Referencias

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Harrington, L., Jones P. and Winograd, M. 1994. Operationalizing Sustainability: A Total Factor Productivity Approach. Unpub. paper given at Cali LQI workshop, June, 1994. World Bank, Washington, D.C.

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Apéndice 1
Desarrollo de un módulo de conservación de suelos
para la adopción de tecnologías adecuadas

La adopción de tecnologías de conservación de suelos es una importante fuente de información para desarrollar los ICT, pero lamentablemente, esos datos casi nunca están disponibles. Se deben, por lo tanto, desarrollar procedimientos para reunir ese tipo de datos ya sea por medio de censos nacionales, de estudios a través de proyectos específicos o la investigación. La adopción de tecnologías de conservación de suelos proporciona información sobre como los agricultores están manejando sus tierras, lo que es necesario para desarrollar buenos ICT de respuesta y permitir una adecuada interacción con los ICT de presión.

Las tecnologías de conservación de suelos son la base para llegar a un manejo sostenible de la tierra, por lo que el mantenimiento de la calidad del suelo debe ser asegurada antes de que se hagan otras intervenciones o inversiones. Muchas de esas tecnologías han sido probadas en muchas partes del mundo y hay considerables conocimientos sobre los cambios en la calidad de la tierra debidos a la adopción de medidas de conservación.

La adopción de tecnologías de conservación de suelos por parte de un agricultor nunca se hace en una parcela aislada sino como parte de un estrategia mayor de manejo de la finca. Por lo tanto, se requieren una cantidad de datos además de la información específica sobre adopción. La información requerida comprende:

Estos datos son esenciales para el desarrollo de los ICT de respuesta pero también como insumo para modelos y otros procedimientos para los ICT de estado.

Parte de esos datos es normalmente recogida en muchos censos corrientes y cuestionarios, pero algunos de ellos son en adición al censo principal. La sección siguiente señala como parte de las necesidades de información pueden ser integradas con los módulos para datos de los censos; además se propone un nuevo módulo que se puede agregar para temas específicos de conservación de suelos.

El ejemplo mostrado es genérico y es mas completo de lo que pudiera ser necesario para muchos países. También debería ser hecho a la medida de los sistemas de uso de la tierra prevalentes en el país de aplicación. Aunque el cuestionario parece ser largo, muchas de las respuestas son de tipo múltiple, por lo que el cuestionario es mas fácil de ejecutar en el campo y mas efectivo para el análisis de los datos en el ordenador.

Tabla 1

Ejemplo de un cuestionario para adopción de prácticas de conservación

El primer conjunto de preguntas (o algo similar) es usado en forma estándar en muchos cuestionarios de los censos

1.

Medida, distribución y tenencia de la finca
¿Cuál es el área total de la finca?
¿Cuál es el área en propiedad?
¿Cuál es el área en préstamo, arrendada o compartida?:
del gobierno o autoridades tribales
bajo la ley islámica
otras formas
¿Ha el área de su finca cambiado en los últimos años?
Aumentado _____ Decrecido ______


______.1
______
______
______

______

2.

Cultivos sembrados, área y rendimientos (?)
En su establecimiento usualmente cultiva:
¿Un cultivo por estación?
¿Mas de un cultivo por estación?
Ambos, dependiendo del campo
Si cultiva mas de un cultivo por estación, ¿que sistema usa?:
Cultivos consecutivos
Cultivos intercalados
Cultivos en fajas
Otro tipo (especificar)
Informe sobre el área total de cultivos (ya sembrados o a sembrar en la finca):
Maíz: para grano, área ______ ha rendimiento ______ ha
para silo, área ______ha rendimiento: ______ ha
Trigo: de primavera, área ______ ha rendimiento: ______ ha
de invierno, área ______ ha rendimiento: ______ ha


_______
_______
_______


_______
_______
_______
_______

3.

¿Qué fuerza usa para trabajar sus predios?:
Mano de obra
Fuerza animal en propiedad
arrendada
¿Usa un tractor para trabajar sus predios?
no _____ si _____
tractor pequeño (< 30hp) propiedad
alquilado
tractor grande (> 30hp) propiedad
alquilado

_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______

4.

¿Alguna parte de la finca es irrigada?
no _____ si _____ área _____
Por gravedad o inundación
Con pivot central
Móvil
Linear
Por chorreo
Por goteo
Por microchorreo

_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______

El segundo juego de preguntas será agregado al cuestionario del censo

 

1.

Integración con ganadería o agrisilvicultura
¿Tiene animales en su finca?:
no ______ si: ______
Vacunos, ovinos, caprinos
Gallinas, pavos, etc.
Caballos, mulas, etc.
Camélidos
Otros (especificar)

_______
_______
_______
_______
_______

 

¿Son los árboles importantes en su establecimiento?:
no ______ si: ______
Frutales, nueces
Leña
Materiales de construcción
Postes, estacas
Cortinas rompeviento
Sombra
Otros (especificar)

_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______

2.

Insumos y manejo de los cultivos y el ganado
¿Cuál ha sido el área en que se ha usado algunos de los siguientes?:
Fertilizantes comerciales
Estiércol
Cobertura o composte
Herbicidas
Insecticidas o fungicidas
Drenaje
En su finca se usan:
Fertilizantes locales como fosfato de roca, etc.
no ______ si ______
Cal
no ______ si ______
Variedades de cultivos tolerantes a suelos ácidos
no ______ si ______
Procedimientos especiales para controlar la salinidad del suelo (alcalino)
no ______ si ______

_______1
_______
_______
_______
_______
_______

3.

Prácticas de labranza y conservación de suelos
¿Es la erosión del suelo un problema en su finca?
no ______ si ______
Si la respuesta es Si, ¿Qué prácticas usa para su control?:
Ninguna
Rotación de cultivos con pasturas de gramíneas o leguminosas Cultivadas
Cultivos de cobertura
Cultivos de contorno
Cultivos en fajas a lo largo del contorno
Terrazas mecanizadas
Terrazas biológicas (con cultivos de barrera)
Salidas de agua empastadas
Rompevientos o refugios
Barreras de piedra
Otros (especificar)

_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______

 

¿Qué implemento usa para preparar la tierra para la siembra?:
Arado tradicional
Azada de mano y rastrillo
Nivelador de tierra
Arado de reja
Arado de discos
Rastra de dientes
Arado/rastra cultivador
Carpidor rotatorio
Otros (especificar)

_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______
_______

 

¿Qué área de su finca se prepara para la siembra usando:
Labranza convencional (la mayor parte de los residuos son enterrados)
Labranza conservacionista (la mayor parte de los residuos permanece sobre la superficie del suelo)
Labranza cero (semillas sembradas directamente con una sembradora especial)

_______1
_______
_______

4.

Programas/asociaciones para conservación de suelos
¿Conoce alguna asociación para el manejo y la conservación del suelo en su área?:
no ______ si ______
¿Es usted miembro de alguna de esas asociaciones?:
no ______ si ______
¿Hay programas de incentivos para la conservación de suelos en su área?:
no ______ si ______
Del gobierno
De organizaciones no gubernamentales
De compañías privadas
¿Participa usted en alguno de esos programas?:
no ______ si ______

_______
_______
_______

1 Área (especificar unidades, ej., ha).


1 El Servicio de Investigación Económica (ERS)-USDA ha preparado una base de datos global llamada "World Trade: Trends and Indicators, 1970-91" que es ajustada periódicamente. Contiene datos de USDA, FAO, Banco Mundial, FMI, NNUU y publicaciones nacionales, las que han sido procesadas como tendencias en el tiempo. Sin embargo, muchos de los datos se refieren a indicadores económicos y comerciales y los únicos indicadores relacionados a la tierra son el área cultivada, el área cosechada y los rendimientos. No existe una ventaja comparativa en el uso de esta base de datos, comparada con el BESD.

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