Una vez que se ha hecho el inventario de las reservas existentes y que se ha llevado a cabo la evaluación de riesgos medioambientales, el país puede preparar una propuesta de proyecto integral para la eliminación de sus plaguicidas obsoletos.
Desafortunadamente, a menudo puede pasar mucho tiempo hasta que llega la ayuda internacional. Sin embargo, mientras un país está buscando y esperando asistencia externa, puede ir avanzando en la preparación de la operación de limpieza y así reducir los costos.
Las autoridades deberían estabilizar los sitios para reducir los riesgos de contaminación de la población y del medioambiente. Generalmente, esto supone:
- Re-envasado de los productos que se encuentran en recipientes con fugas o que están deteriorados;
- Limpieza de los derrames; y
- Envasado de los materiales contaminados.
Todo este trabajo debería hacerse bajo la supervisión de expertos y con personal capacitado que ponga en práctica las medidas de protección y los procedimientos apropiados. Cabe recordar que los plaguicidas son químicos peligrosos y cuando se derraman o están guardados en recipientes viejos o deteriorados, el riesgo de un accidente aumenta considerablemente.
Idealmente, los plaguicidas obsoletos deberían ser retirados para su eliminación inmediatamente después de ser re-envasados. Sin embargo, si los fondos no están todavía disponibles, será necesario almacenar los plaguicidas re-envasados. Si las existencias re-envasadas se pueden transportar en condiciones de seguridad, a menudo es mejor reunir las cantidades en un sitio centralizado. Esto facilita la inspección de las existencias y las operaciones de eliminación.