FAO Regional Office for Latin America and the Caribbean

Alimentación Escolar: nutriendo el futuro

?Esta comida es tan buena como la de mi mamá?, asegura la estudiante Jeimy Tavarez, mientras disfruta del almuerzo que le sirven diariamente en la escuela Café con Leche. Esta pequeña es una de las estudiantes que se beneficia del Programa de Alimentación Escolar que desarrolla el gobierno dominicano y abarca alrededor de 1.5 millones de niños y niñas de los niveles inicial, básica y tanda extendida, distribuidos en más de 5 mil escuelas públicas del país.

SANTO DOMINGO.- ?Esta comida es tan buena como la de mi mamá?, asegura la estudiante Jeimy Tavarez, mientras disfruta del almuerzo que le sirven diariamente en la escuela Café con Leche, del sector de Herrera, uno de los centros educativos que tiene la modalidad de tanda extendida.

 

Esta pequeña de ocho años que cursa el tercero de básica, es una de las estudiantes que se beneficia del Programa de Alimentación Escolar que desarrolla el gobierno dominicano y abarca alrededor de 1.5 millones de niños y niñas de los niveles inicial, básica y tanda extendida, distribuidos en más de 5 mil escuelas públicas del país.

 

Los programas de alimentación escolar han sido recomendados como uno de los componentes clave para garantizar el acceso a los alimentos de las poblaciones vulnerables, a la vez que aseguran la permanencia de los estudiantes en el aula.

 

Algunos países han tenido experiencias exitosas desarrollando estos programas, como es el caso de Brasil, que se ha convertido en un referente internacional y ha motivado a otras naciones a replicar este concepto. Y así se ha hecho.

 

Desde el año 2009, el Gobierno de Brasil está aportando recursos, en el ámbito del Programa de Cooperación Internacional Brasil-FAO, para promover la implementación de los programas de alimentación escolar (PAE), a través del proyecto ?Fortalecimiento de Programas de Alimentación Escolar en el marco de la Iniciativa América Latina y Caribe sin Hambre 2025?.

 

Once países de la región participan actualmente en esta proyecto: Bolivia, Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Paraguay, Perú, Costa Rica, República Dominicana y Antigua y Barbuda, siendo el nuestro uno de los últimos en incorporarse.

 

Los objetivos específicos del proyecto están relacionados con la articulación de políticas intersectoriales en los diversos países, desarrollo de las capacidades humanas locales, intercambio de experiencias exitosas de alimentación escolar, fortalecimiento de proyectos de huertos escolares como principal instrumento educativo, generación de conocimiento y diseminación de metodologías dirigidas al proceso de compras locales de la agricultura familiar y la implementación de escuelas sostenibles.

 

El proyecto de alimentación escolar involucra a los ministerios de Educación, Agricultura y Salud Pública, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil, la Vicepresidencia de la República y la Representación de la FAO en el país, quienes están formulando una estrategia conjunta que permita fortalecer los programas de alimentación escolar.

 

No obstante, para que estos proyectos sean sostenibles deben contar con un compromiso del Gobierno, un marco jurídico construido colectivamente, capacidad financiera estable y principios, directrices y objetivos establecidos de acuerdo con la realidad y necesidad del país, como asegura la doctora Najla Veloso, coordinadora general del proyecto.

 En el marco de este proyecto se realizó el curso semipresencial Alimentación Escolar: Desarrollo de Programas Sostenibles a partir del caso Brasileño?, dirigido por el Núcleo de Capacitación en Políticas Públicas de la Oficina Regional de la FAO, en coordinación con la Representación de FAO en República Dominicana., en el que participaron 43 técnicos.

 

Este curso incluyó giras técnicas a centros educativos dotados de huertos escolares, así como jornadas de sensibilización con las instituciones involucradas. Asimismo, se impartió un curso sobre el uso de los huertos escolares como espacio pedagógico y prácticas alimenticias más sanas.

 

Beneficios de la alimentación escolar

 

Muchos problemas de aprendizaje que presentan los niños en edad escolar pueden estar ligados a una malnutrición. Niños mal nutridos estarán en peores condiciones para afrontar las exigencias de la actividad escolar así como otras tareas físicas e intelectuales a las que se verán expuestos, ocasionando en ocasiones deserción escolar y retraso del desarrollo.

 

No resulta extraño que áreas caracterizadas como de extrema pobreza tengan altas tasas de abandono y repitencia de los escolares, como las que se registran en las zonas urbanas marginales y rurales fronterizas de la República Dominicana.

 

El aporte nutricional de la alimentación escolar se hace evidente en muchos niños cuando retornan de sus vacaciones escolares.?Cuando los niños regresan a clases es notoria la diferencia en el peso y apariencia que cuando están en clases y reciben la alimentación escolar?, asegura la profesora Marina Sarante, subdirectora de la escuela Café con Leche.

 

Un reciente estudio de la FAO comprobó la importancia de los programas de alimentación escolar para la protección social, la seguridad alimentaria y la nutrición de los niños en ocho países latinoamericanos.

 

El análisis de la FAO -que no incluye a República Dominicana- recogió los resultados de varios proyectos en Bolivia, Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Paraguay y Perú.

 

De acuerdo con la investigación, esos proyectos fomentan la permanencia en la escuela y un mayor aprendizaje, además, todos los países estudiados demuestran interés en obtener sus insumos de la agricultura familiar y del desarrollo local.

 

El estudio explica que la alimentación escolar asegura la calidad de los alimentos entregados a los estudiantes de instituciones públicas y fomenta el consumo de alimentos frescos y saludables.

 

También abre nuevos mercados y la posibilidad de mayores ingresos para los agricultores familiares y promueve el desarrollo de muchas comunidades.

 

A nivel local, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE) informó que la prevalencia de anemia en los estudiantes de 6 a 14 años se redujo de 44% en el año 1993 a 16% a la fecha, y que la desnutrición crónica disminuyó de 19.4% en el 2002 a 1% el año pasado, debido al incremento y la calidad del Programa de Alimentación Escolar (PAE) que ejecuta el Gobierno en los niveles inicial y básico de las escuelas públicas del país.

 

Este programa suple a los estudiantes con desayuno escolar en tres modalidades: Urbano Marginal, REAL (Raciones Escolares con Alimentos Locales) y Fronterizo.

 

En el caso de los centros de jornada extendida, a los estudiantes se les brinda desayuno, merienda y almuerzo, que son preparados en las cocinas de los centros escolares por un personal capacitado en temas de nutrición y manipulación de alimentos.

 

Según el INABIE, en los próximos años este programa llegará a dos millones de raciones diarias que cubrirán el 25% de la población de escolares dominicanos.